Asia/China/12 Diciembre 2019/Prensa Latina
Sin embargo, no precisó la cantidad de docentes que permanecen arrestados.
El último fue detenido el lunes, junto a seis estudiantes, durante una redada que además permitió a la policía confiscar barricadas, líquidos inflamables y otros productos usados con frecuencia durante los ataques en las protestas.
Precisamente una de las aristas que más llama la atención en la crisis de Hong Kong es la alta implicación de las nuevas generaciones en las manisfestaciones y lo que conciben como concepto de democracia.
Cifras divulgadas esta semana precisan que dos mil 393 jóvenes ?el menor de ellos de 11 años de edad- fueron detenidos desde junio pasado por sumarse a concentraciones ilegales, ataques con bombas caseras, uso de artículos peligrosos y altercados con las fuerzas del orden.
La situación genera creciente inquietud porque pone bajo la lupa su instrucción docente y en casa.
Múltiples análisis critican la manipulación a la juventud en una situación donde las autoridades denuncian la existencia de una agenda separatista, pues se pasó de marchas en rechazo a una ley de extradición ?ya sepultada- a un movimiento hostil sin final a la vista.
También señalan el desconocimiento, confusión y malinterpretación de ese sector sobre la historia de Hong Kong y esfuerzos para convertirse en un referente de la economía mundial.
De igual manera, varias voces culpan al currículo escolar impartido en Hong Kong desde la secundaria, por incluir a partir de 2009 asignaturas de corte liberal.
Un editorial del canal CGTN recordó que la publicación de libros de texto sobre dichas temáticas no necesita aprobación del Departamento de Educación y muchos pueden presentar contenidos con enfoques parcializados.
Argumentó esos planteamientos con lo que denomina una crisis de identidad nacional, pues los jóvenes destruyeron la bandera y emblema de China, mientras pedían apoyo de Reino Unido, la antigua colonia del lugar.
A finales de octubre pasado, el 19 Comité Central del Partido Comunista de China decidió en su cuarta plenaria adoptar mecanismos para reforzar y proteger el principio de ‘Un País, dos sistemas’ en Hong Kong y Macao, y avanzar en la reunificación pacífica del territorio.
Entre varias cuestiones, destaca el punto referido a la educación de las nuevas generaciones y los funcionarios públicos, pues se pondrá foco en su instrucción sobre las leyes, normas constitucionales, historia y cultura del país a fin de mejorar el patriotismo y el sentido de identidad nacional.