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Una de cada cinco mujeres en Chile fue víctima de violencia en el último año

Por: https://www.eleconomistaamerica.cl

El 21,7% de las chilenas mayores de 15 años dijo haber sufrido algún tipo de violencia en el último año, según los resultados divulgados este martes por la IV Encuesta de Violencia contra la Mujer en el Ámbito de Violencia Intrafamiliar y en Otros Espacios.

El estudio, realizado por la Subsecretaría de Prevención del Delito del Ministerio del Interior de Chile, también arroja que el 41,1% de las mujeres mayores de 15 años dijo haber sufrido algún tipo de violencia a lo largo de su vida.

Este indicador de violencia general a lo largo de una vida presentó un aumento «estadísticamente significativo», según los autores del sondeo, ya que pasó del 32,6% en 2012 al 38,2% en 2017 y de ahí al 41,4% en 2020.

Hipótesis

A modo de hipótesis, los responsables de la encuesta indicaron que esto puede deberse a que «hoy se visualizan vivencias del pasado como hechos de violencia».

«Es decir, habría un reconocimiento de haber sido víctima del cual antes no existía conciencia, y al mismo tiempo se han dejado de naturalizar actos violentos, como parte de las interacciones cotidianas», indicaron en el informe presentado.

Por contra, el indicador de los últimos 12 meses se presenta «estable» en relación al anterior levantamiento de datos, pasando de 21% en 2017 a 21,7% ahora.

«Es lamentable ver que no hemos sido capaces de mitigar o erradicar esta conducta tan dolorosa y tan terrible en nuestro país», dijo la ministra de la Mujer, Mónica Zalaquett, tras la presentación de estos resultados.

Amendrentamientos

Dentro de quienes sufrieron violencia intrafamiliar, el 20,2% denunció haber sido violentada de forma psicológica en el último año; igual porcentaje que en el sondeo de 2017, mientras que el porcentaje de mujeres que dijo haber sufrido violencia física en los últimos 12 meses disminuyó a un 3,7% desde un 4,4%.

En contraposición, aumentó el número de mujeres que dijo ser víctima de violencia sexual intrafamiliar, pasando del 2,1% de 2017 al 2,8% este año.

De acuerdo a las encuestadas que sufrieron violencia psicológica o física e los últimos 12 meses, un 79,2% señalaron que ésta le fue proferida por una pareja o ex pareja, mientras que el 20,8% restante remite este tipo de violencia a la familia.

Inicio de la violencia

Otro punto que toma relevancia es el hecho de que el 38,2% de las encuestadas sostiene que fue víctima de al menos un episodio de violencia antes de los 14 años de edad.

En cuanto a la violencia de tipo económica, es decir, cuando se intenta controlar a la mujer a través de la entrega del dinero necesario para su manutención personal y/o de otros integrantes de la familia, así como también cuando se apropian de dinero ganado por la mujer, el 9,5% de las entrevistadas afirmó haber sido víctima de este tipo de violencia en el último año.

Asimismo, la violencia contra la mujer en espacios públicos ha sido constatada por el 17,9% de las encuestadas en el transcurso de los últimos 12 meses, significativamente mayor que el 8,1% declarado en 2017.

Este resultado «estaría evidenciando la toma de conciencia por parte de las mujeres respecto a los actos de violencia de los que han sido víctimas fuera del espectro intrafamiliar», según los autores de la encuesta.

También presentaron un aumento respecto a su anterior medición la violencia en el ámbito laboral, que pasó de y 2,2% en 2017 a 4,8% este año y en el espacio educacional: de 1% a 1,2% en esta última encuesta.

Denuncias

Los responsables del estudio mostraron su preocupación por la disminución observada en las denuncias interpuestas por violencia psicológica, física y/o sexual.

En los tres casos, la cantidad de entrevistadas que señaló haber denunciado algún acto de violencia se redujo hasta en 7,5 puntos porcentuales en comparación al año 2017.

«Uno de los datos preocupantes que nos entregó esta encuesta es una baja en las denuncias y esa baja está dada por una falta de confianza», señaló la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell.

Así, el documento reveló que las denuncias por violencia psicológica pasó de 22,8% en 2017 a 19% este año, las denuncia por violencia física de 36,5% a 29% y las denuncia por violencia sexual de 23% a 16,3%.

De acuerdo a datos de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, en lo que va de 2020 se han producido 32 feminicidios, tres suicidios feminicidas (suicidios como resultado de maltrato o intento de feminicidio) y cuatro homicidios relacionados a un feminicidio (en su totalidad eran hijos de mujeres víctimas de feminicidio).

Fuente: https://www.eleconomistaamerica.cl/sociedad-eAm-chile/noticias/10760001/09/20/Una-de-cada-cinco-mujeres-en-Chile-fue-victima-de-violencia-en-el-ultimo-ano.html

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Amor y educación sexual integral

Por: Carolina Sánchez Agostini.

Muchas veces, en conversaciones con adolescentes, siento que vivo un déjà vu. Las historias se repiten: sensaciones a las que cuesta poner nombre, un vacío afectivo en expansión, búsquedas de amor frustradas que ahogan en la decepción. Por ejemplo, dialogando con una joven de 19 años que sale con un chico desde hace unos meses, me comentó: “El me cambia de planes todo el tiempo. Quedamos en vernos, y si le sale otro plan es capaz de dejarme plantada media hora antes e irse a la otra juntada.

Y eso ha sucedido muchas veces. Siento que no me quiere. No sé si es que no le gusto lo suficiente, o si no se termina de convencer de estar conmigo. Sus idas y vueltas me están haciendo mal. No sé qué hacer y tampoco qué es lo que tengo que cambiar, porque no termino de entender cuál es el problema”.  La inconsistencia en las relaciones afectivas lleva a confusiones y grietas interiores que resultan difíciles de transitar.

Aparecen preguntas de fondo, que hacen eco y que lastiman por dentro. ¿Habrá algo en mi forma de ser que no funciona adecuadamente? ¿Será que no soy tan atractiva/o? Cuando el planteo se lleva a lo personal, podemos terminar convenciéndonos de que hay algo en nosotros que no está bien. Aquí surge un interrogante central: ¿cómo afecta esto la autoestima, la autonomía, la posibilidad de construir vínculos saludables y positivos? Como parte de sus resultados, el artículo Age-related changes in dating aggression in spanish high school students (“Cambios relacionados con la edad en la agresión de pareja en estudiantes de secundaria españoles”) indica que entre los adolescentes es más frecuente la violencia psicológica que la física o sexual (aunque a los 16-17 años se observa un pico en la violencia física, que disminuye en edades posteriores).

Estos datos se corresponden con los obtenidos en los testeos preliminares de una investigación con adolescentes argentinos que estamos desarrollando: notamos una realidad a veces silenciada o poco atendida, que vuelve a poner la necesidad de abordar la educación sexual integral desde los mejores conocimientos disponibles y los desafíos concretos de nuestra comunidad. Indiferencia, agresión, infidelidad, son palabras que aparecen con mucha frecuencia y que marcan de modo profundo la percepción que chicos y chicas pueden tener sobre las relaciones afectivas interpersonales. La desconfianza sobre la calidad posible de las relaciones condiciona las expectativas y configura los propósitos.

Explicando a estudiantes de 20 años cuáles eran las distintas crisis universales por las que pasa una familia, una alumna consideraba que la infidelidad era una crisis esperable y necesaria. Su comentario abrió el debate y contrasta con otras experiencias, como la del actor Pablo Echarri en una entrevista reciente sobre la relación con la actriz Nancy Dupláa: “Sabe perfectamente que cuenta con mi total confianza y viceversa. Tenemos la certeza de que el otro jamás sería infiel”.

Este cuestionamiento no es un detalle menor porque tensiona el proyecto de vida y la necesidad de construir relaciones de confianza. Robert Waldinger, director del Harvard Study of Adult Development –y líder de la investigación más importante del mundo sobre felicidad, salud y satisfacción personal que analiza durante décadas la trayectoria de cientos de personas–, ha explicado una verdad contundente: las relaciones significativas son la clave de la felicidad.

Cabe entonces una reflexión: ¿Cómo estamos preparando a chicos y chicas para un proyecto relacional capaz de hacerlos felices, sacar lo mejor de sí mismos, vivir un amor profundo y sincero, comprometerlos con valores y realzar su autoestima?  El amor es más fuerte que la muerte, dice un libro de antigua sabiduría. Hoy pareciera que esto es verdad solo en la poesía o las películas románticas optimistas. Sin embargo, las preguntas están en la boca y en el corazón de los y las jóvenes en nuestras aulas y en nuestra vida.

Poder conversar de forma abierta sobre estos asuntos es lo que hace a la educación sexual algo “integral”. Investigar y prepararnos para estar a la altura del desafío, a la vez que nos ilusiona, nos invita a la responsabilidad.

Fuente del artículo: https://www.perfil.com/noticias/columnistas/amor-y-educacion-sexual-integral.phtml

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UNESCO: Un tercio de los niños sufren acoso escolar

UNESCO / 27 de enero de 2019 / Autor: Redacción / Fuente: Noticias ONU

Un nuevo informe de la UNESCO confirma que la violencia y el acoso escolares son problemas importantes en todo el mundo. El Caribe es la segunda región del mundo con mayores tasas de violencia física y los estudiantes LGTBI son quienes corren más riesgos, junto a los que no cumplen los estereotipos de género. Algunos países, no obstante, han hecho progresos significativos para reducir estas prácticas.

Casi uno de cada tres estudiantes, un  32%, ha sido intimidado por sus compañeros en la escuela al menos una vez en el último mes y una proporción similar ha sufrido violencia física, según un nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

El texto, titulado Detrás de los números: Poner fin a la violencia y el acoso escolares, hecho público este martes  en el Foro Mundial de Educación 2019 de Londres reúne datos de 144 países.

La región del mundo con más niños que sufren intimidación es África subsahariana (48,2% de los menores), seguida por el norte de África (42,7%) y Oriente Medio (41,1%). La intimidación es menos frecuente en Europa (25%), el Caribe (25%) y América Central (22,8%).

El Caribe es la segunda región del mundo con mayores tasas de violencia física. Un 38% de los estudiantes caribeños han estado envueltos en alguna pelea y casi un 34% ha sufrido un ataque.

La forma de intimidación más frecuente es la física en la mayoría de las regiones, con la excepción de Norteamérica y Europa, donde es más común la psicológica. El acoso sexual es la segunda forma más común en muchas regiones.

Según los estudiantes entrevistados, la apariencia física es la causa más común de intimidación, seguida por la raza, la nacionalidad y el color de la piel.

Los estudiantes LGTBI son quienes corren más riesgo de ser víctimas de violencia e intimidación, junto a los que no cumplen los estereotipos de género, como los chicos “afeminados” o las chicas “masculinas”.   Por ejemplo, en Nueva Zelanda, los estudiantes gais, lesbianas y bisexuales tienen tres veces más posibilidades de ser intimidados y los transexuales cinco veces más que sus compañeros heterosexuales.

La forma de intimidación también depende del género. Los niños sufren más violencia física, mientras que las niñas son víctimas de violencia psicológica. Además, están aumentando también el acoso en línea y por teléfono móvil, dice el informe.

Por qué es importante

La intimidación tiene un efecto negativo significativo en la salud mental, la calidad de vida y el rendimiento académico de los niños.

Los que sufren estas vejaciones con frecuencia son casi tres veces más propensos a sentirse como extraños en la escuela y faltan a clase más del doble que aquellos que no sufren acoso. Además, obtienen peores resultados educativos y también más probabilidades de abandonar la educación formal después de terminar la escuela secundaria.

Soluciones

En casi la mitad de los 71 países y territorios estudiados la intimidación ha disminuido y en una proporción similar de países también se han reducido las peleas o ataques físicos.

Estos países tienen en común una serie de factores que ha contribuido al éxito en la reducción del acoso:

  • Compromiso de promover un clima escolar y un entorno de aula seguros y positivos
  • Sistemas eficaces de denuncia y seguimiento de la violencia y el acoso escolares.
  • Programas e intervenciones basados en datos empíricos
  • Formación y apoyo a los docentes
  • Respaldo y orientación de los alumnos afectados
  • Empoderamiento y participación de los estudiantes

“Nos alienta enormemente que casi la mitad de los países sobre los que se dispone de datos hayan reducido las tasas de violencia escolar y de intimidación”, dijo Stefania Giannini, Subdirectora General de Educación de la UNESCO. “Todos los niños, niñas y jóvenes tienen derecho a un entorno de aprendizaje seguro, inclusivo y eficaz”.

Fuente de la Noticia:
https://news.un.org/es/story/2019/01/1449802
ove/mahv
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Programación del Portal Otras Voces en Educación del Domingo 27 de enero de 2019: hora tras hora (24×24)

27 de enero de 2019 / Autor: Editores OVE

Recomendamos la lectura del portal Otras Voces en Educación en su edición del día domingo 27 de enero de 2019. Esta selección y programación la realizan investigador@s del GT CLACSO «Reformas y Contrarreformas Educativas», la Red Global/Glocal por la Calidad Educativa, organización miembro de la CLADE y el Observatorio Internacional de Reformas Educativas y Políticas Docentes (OIREPOD) registrado en el IESALC UNESCO.

 

00:00:00 – España: Complubot, el conservatorio de la robótica educativa

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299288

01:00:00 – Conoce las 100 mejores herramientas de aprendizaje utilizadas en el año 2018

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299184

02:00:00 – Bolivia es uno de los tres países de América del Sur con los niveles más altos de asistencia escolar

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299292

03:00:00 – La educación, la cultura y la palabra (Artículo de Manuel Pérez Rocha)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299295

04:00:00 – El informe de la UNESCO pone de relieve la necesidad de eliminar los obstáculos con los que se enfrentan los migrantes y las personas desplazadas para acceder a la educación (+PDF)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299391

05:00:00 – Francesco Tonucci: “Sólo los buenos maestros podrán salvar la escuela”

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299197

06:00:00 – Libro: Las formas de la educación (PDF)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299402

07:00:00 – 5 libros de Paulo Freire que no te puedes perder (Artículo de Miguel Ángel Ruíz Domínguez)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299388

08:00:00 – Libro: La enseñanza contra el capitalismo global y el nuevo imperialismo. Una pedagogía crítica (PDF)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299410

09:00:00 – 11 películas que reflejan la importancia de la labor docente (Artículo de Camila Londoño)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299406

10:00:00 – Libro: Pedagogía y política de la esperanza. Teoría, cultura y enseñanza. Una antología crítica (PDF)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299419

11:00:00 – La Ruptura Paradigmática de “lo Educativo” (Artículo de Juan Carlos Miranda Arroyo)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299385

12:00:00 – España falta a clase el I Día Internacional de la Educación: solo lo celebra en redes

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299398

13:00:00 – UNESCO: Un tercio de los niños sufren acoso escolar

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299414

14:00:00 – Pedagogos del mundo asistirán a congreso internacional en Cuba

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299395

15:00:00 – Enseñanza multinivel (Artículo de José Blas García)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299190

16:00:00 – Transforman un autobús en una escuela móvil para los niños que se han quedado sin colegio en Irak (Video)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299285

17:00:00 – Conversatorio «Cine y Educación» (Video)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299282

18:00:00 – El Salvador con inversión histórica en educación

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299200

19:00:00 – Los retos de la neuropedagogía en la modernización de las facultades de Educación (Artículode Andrea Paola Romero Ramos)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299181

20:00:00 – Puerto Rico: Vetado el proyecto de educación especial

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299187

21:00:00 – Leontxo García: “El ajedrez tiene bastante para aportar a la educación” (Video)

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299203

22:00:00 – República Dominicana: La educación con inclusión: el otro gran desafío del sistema educativo

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299178

23:00:00 – Mareas educativas: movilizaciones globales en defensa de la educación pública. Encuentro con Agustín Moreno y Diego Andrés Salinas Flores

http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/299194

 

En nuestro portal Otras Voces en Educación (OVE) encontrará noticias, artículos, libros, videos, entrevistas y más sobre el acontecer educativo mundial cada hora.

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¿Cuántos niños y adolescentes sufren maltrato en México?

Redacción: Uno TV

El dato lo reveló un estudio realizado a más de 53 mil niños y adolescentes.

El 81.6% de niños y adolescentes consideranincorrecto que una persona adulta los golpee o se dirija a ellos con malas palabras; asimismo, el 38.2% señalan haber sufrido una situación de violencia verbal, física o psicológica.

Lo anterior fue revelado por el sondeo OpiNNA: ¿Dime cómo te tratan?, que se aplicó a 53 mil 971 niños y adolescentes de México e Iberoamérica como parte del ejercicio de sus derechos de participación, de libertad de expresión, de acceso a la información y a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).

55% de este sector considera que el diálogo, la escucha activa y el trato igualitario y afectivo son características que valoran de los adultos. A su vez, uno de cada dos informó que después de la familia, los profesores los tratan con respeto.

Percepción por género

  • El estudio reveló que niños y adolescentesson quienes más reportan algún tipo de violencia.

La encuesta que se aplicó a 17 mil 517 niños de entre 6 y 11 años, y 36 mil 454 a adolescentes de entre 12 y 17 años, apuntó que el género masculino consideran más importante que los profesores les enseñen sin gritos y les ayuden a resolver sus problemas, mientras que en ese mismo concepto, para ellas la igualdad y la escucha activa son primordiales.

El sondeo estuvo en redes sociales del 7 de marzo al 30 de mayo del 2018. Además, contó con el apoyo de una red afín a la SEP que llevó este sondeo a aulas de nivel básico en todo el país.

Más cultura de participación en el extranjero

El estudio reveló que JaliscoCampecheVeracruz Chihuahua, en México, registraron una participación del 68%, mientras que en Guatemala, Chile, Estados Unidos y Nicaragua, se registró la participación del 80%.

Fuente: https://www.unotv.com/noticias/portal/nacional/detalle/cuantos-ninios-ninas-adolescentes-sufren-maltrato-mexico-298771/

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El grito de la Pachamama: ser mujer y defensora del medio ambiente

Por: Azul Crudo

En América Latina, la lucha de los pueblos en defensa de las tierras, bosques y agua contra las pretensiones extractivas de trasnacionales de transformarlos en industria, tiene también una reacción machista. Las defensoras de la vida y la naturaleza, por ser mujeres sufren una persecución particular, cuyas principales características son la estigmatización, la violencia sexual y psicológica y hasta la muerte.

 

Estigmatización, acoso permanente, manoseo durante detenciones ilegales, violaciones y hasta asesinatos son algunos de los vejámenes que sufren las mujeres que militan en defensa del medioambiente en América Latina. En la lucha por defender la tierra y la naturaleza, muchas veces las que resisten, acampan, hacen plantones, enfrentan en la primera línea a ejércitos, policías o retroexcavadoras, son mujeres. En algunos casos esta resistencia las ha transformado incluso en víctimas de asesinatos.
El caso más emblemático es el de la líder indígena hondureña Berta Cáceres (véase nota en página 17). Pero entre las ambientalistas que siguen vivas se destaca la peruana Máxima Acuña, agricultora que sigue siendo blanco de persecución por vivir en un terreno cerca de donde la minera Yanacocha quiere llevar adelante su emprendimiento extractivista. Hasta el día de hoy, funcionarios de la empresa continúan ingresando a su vivienda y rompiendo sus cultivos.
En sus cuerpos las defensoras del medioambiente encarnan a la Pachamama. Defender los territorios que habitan desde tiempos ancestrales, por pertenecer a comunidades indígenas y campesinas, es defender la vida. A quienes tienen el poder hegemónico, androcéntrico y masculinizante, por supuesto que les molesta que sus adversarias sean unas mujeres que se corren del rol tradicional de servidumbre y entrega para encabezar las luchas por la defensa del agua, del alimento, de lo comunal. Y por eso los métodos para intimidarlas son diferentes a los que se aplican contra los hombres.
La socióloga Jessenia Cassani, de la organización feminista peruana Estudio para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Demus), señaló recientemente –a fines de octubre, en una de las sesiones públicas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Montevideo– que las militantes mujeres en conflictos socioambientales son acosadas y atacadas de manera diferente por ser mujeres, y que esta persecución se manifiesta en violencia física, psicológica y sexual, de la que son víctimas “de manera permanente y cotidiana”.
“La violencia sexual es un mecanismo que han utilizado los agresores para neutralizar la labor de defensa de estas mujeres”, agregó la activista. Los agresores suelen ser empleados de las trasnacionales, el propio Estado a través de sus fuerzas de seguridad, e integrantes del sistema judicial, haciendo un uso arbitrario del sistema penal.
 
Manoseo
La violencia sexual contra las mujeres es común en los contextos de protesta, explicó Cassani: “Los ataques represivos van dirigidos (con golpes) a sus senos y nalgas para neutralizarlas en ese momento de lucha y en el ejercicio de su derecho a la protesta. En las detenciones se producen amenazas de violación, inspecciones de genitales y pechos y exhibición de ropa interior”, agregó. Emperatriz Bolaños –de Defensores de Lagunas de Conga, en Perú– lo vivió en carne propia cuando el personal de la minera Yanacocha amenazó con violarla. También le mataron a sus dos perros, y las autoridades no le tomaron la denuncia. Bolaños denunció en la misma audiencia de la Cidh otras prácticas intimidatorias comunes: “Nos quieren reubicar, y en nuestra comunidad hay ancianos, hay discapacitados, gente que no está acostumbrada a la ciudad.
El gobierno no hace nada por nosotros, al contrario: manda a la policía a que nos reprima, manda a la policía a que mate, a que nos saquen, y eso no es justo”. Según Cassani, “el despojo, desalojo y desarraigo de sus tierras es otro impacto de género”, las mujeres son desplazadas “muchas veces a zonas urbanas donde están en mayor indefensión por las desigualdades económicas, el racismo y el machismo existentes en nuestras sociedades, sumado a la cultura de violación imperante en nuestro país”. Mientras no existan estadísticas oficiales sobre los múltiples ataques que sufren las mujeres, estas violencias seguirán invisibilizadas y no será posible generar “un diagnóstico claro y normativas y políticas públicas eficientes que puedan garantizar el derecho a una vida libre de violencia”, insistió.
Para la abogada peruana Mirtha Vásquez, que defiende a Máxima Acuña y participó en la misma audiencia, es un problema cuando estas agresiones no son juzgadas como actos de violencia basada en género. Aunque en Perú exista la ley 30.364 “para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres e integrantes del grupo familiar”, el Ministerio Público suele definir la violencia contra las mujeres sólo como “aquella que se comete en el marco de las relaciones familiares, y que sólo se produce en el cuerpo de las mujeres, desconociendo los contextos y las características de las violencias”, afirmó la abogada. En las salas de audiencias de los tribunales, por ejemplo, a las mujeres que están brindando su testimonio no las dejan amamantar a sus bebés.
 
“Femicidio político”
La lucha que dio Berta Cáceres era a la vez anticapitalista, antirracista y antipatriarcal, señala Laura Zúñiga Cáceres, una de sus hijas, en diálogo con Brecha. Al asesinato de su madre lo califica como un “femicidio político”. “El asesinato de mi mami fue con saña, dirigida a ella porque lo que más generaba ruido era que fuera una mujer la que los desafiaba. En un contexto tan machista como el de Honduras, el papel de la mujer siempre está relegado a lo privado y a la servidumbre. Cuando alguien se rebela ante ese papel eso genera más odio”, señala Laura Zúñiga. A su madre “la describían como ‘bruja, puta, loca’”, recuerda. Y luego de muerta su condición de mujer también incidió en la caracterización del crimen que hicieron tanto las autoridades como la empresa: “A pesar de que su trabajo era peligroso, de que había tenido 33 amenazas de muerte entre 2013 y 2016, la primera hipótesis que presentó el Ministerio de Seguridad fue que había ocurrido un ‘crimen pasional’”.
Además, subraya, la empresa Desa –que estaba detrás del proyecto hidroeléctrico contra el que luchó Berta Cáceres– intentó deslindarse del asesinato argumentando públicamente que se trataba de un crimen “de faldas”. “Siendo ella defensora, lo primero que hay que buscar en estos hechos son las causas relacionadas con su trabajo, con la persecución que ha sufrido. A través de una lucha muy fuerte de organismos internacionales se logró desmontar esa intencionalidad de vincular (el asesinato) a su intimidad, de investigar a su ex pareja y deslegitimar su lucha por ser mujer. Por eso decimos que es un femicidio político: porque el crimen ha tenido motivaciones de odio por ser mujer”, asevera.
Zúñiga dice que su madre “fomentaba y demostraba que las mujeres podemos liderar y que los hombres pueden ser liderados por una mujer. Hizo que las comunidades comenzaran a pensar en la posibilidad de tener un liderazgo femenino”. Es precisamente el caso de Elvia Dagua, referente ecuatoriana en lucha contra la instalación del proyecto Mirador, de minería a cielo abierto, que se desarrolla en la zona sur de la Cordillera del Cóndor, en Ecuador. En 2015 el gobierno ecuatoriano le dio a la minera china Ecuacorriente SA (Ecsa) una concesión por 30 años.
Y en diciembre de 2016 la empresa logró desplazar a la comunidad shuar Nakints para imponer su proyecto de extracción de cobre, contando con el aval del gobierno. Con la mano represiva del Ejército destruyó casas, expulsó a más de 500 indígenas a la selva, los dejó sin alimentación ni escuelas y alambró el terreno para montar el campamento minero. Tras semanas en la selva y luego de la muerte de una bebé de tres meses por enfermedad, las mujeres y niños shuar se refugiaron en un pueblo vecino que, el 22 de octubre pasado, fue militarizado como forma de presionar y detener a quienes resistían. Los hombres permanecen clandestinos y pasan hambre.
La representante de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonia Ecuatoriana (Confeniae) no duda en responsabilizar al gobierno de Rafael Correa: “Hacia el exterior él habla del buen vivir, pero a las comunidades indígenas nos dividió y sólo produjo el mal vivir. Para hacer negociados con empresas mineras y petroleras él trataba de comprar la conciencia de los líderes más débiles de las comunidades indígenas, y nosotros, desde las bases, somos la mayoría, y nos opusimos al Estado ecuatoriano porque los territorios son nuestros”, dijo a Brecha.
Hostigamiento
Las amenazas y campañas de difamación en las redes sociales, medios de comunicación y en las comunidades son otra forma de violencia machista que sufren militantes como Máxima Acuña, a quien suelen calificar como “Máxima Farsa” o “Máxima Estafa”. Acuña es objeto de insultos y difamación, de incitaciones al odio y de amenazas de atentados contra su vida, por ejemplo con mensajes como “Minera Yanacocha. La bala cuesta un sol. Muerto el perro se acabó la rabia”.
La activista, quien lucha desde 2011, ha sido declarada inocente de los delitos por los que la minera la había acusado, como la usurpación del terreno en el que ella vivió toda su vida. Hace 15 días la justicia civil peruana declaró improcedente la medida cautelar que la empresa había solicitado para impedir que trabajara en su tierra. Sin embargo, relató su abogada, “está agotada en su esfuerzo” contra el proyecto minero. Según Vásquez, Acuña le expresó: “La vida se me está yendo en defender esto y ya ni la justicia nos defiende”, porque no actúa ante las denuncias que ha presentado por hostigamiento constante en su finca.
“Además de haber sido atacada físicamente años atrás, Máxima no puede volver a vender sus productos porque la propia gente de la comunidad la ataca, como consecuencia de las campañas de desprestigio de las que es objeto”, comentó a Brecha su abogada. Y sin embargo, relató recientemente Vásquez en una carta pública en NoticiasSer.pe, cuando le ha preguntado si quiere dejarlo todo y bajar los brazos después de haber sufrido tanto y logrado mucho, la activista le respondió: “No importa ya el terreno ni el daño que me siguen haciendo; a ellos se les sigue yendo el alma por quitarme Tragadero, tal vez lo logren alguna vez. Recibir dinero a cambio de dejarlo, a cambio de mis derechos, para olvidar mi sufrimiento, eso jamás.
Tal vez decida irme cuando mi cuerpo ya no aguante. Yo he ganado, yo demostré que las lagunas, que la tierra, que la dignidad del pobre no tienen precio, su oro no ha podido comprarme”. Para Laura Zúñiga “el sistema capitalista sigue necesitando energía y avanza sobre (…) los territorios indígenas preservados. La batalla de estos pueblos es por la vida, y vemos formas repetidas de criminalización en su contra, campañas de desprestigio, asesinatos”. En este contexto, dice, el desafío es “definir en conjunto cómo vamos a enfrentar estos ataques”.
Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=234876
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La patología del odio

Por: Adela Cortina

Hacia 1944 vio la luz el libro autobiográfico de Stefan Zweig El mundo de ayer. Memorias de un europeo.En él recordaba el comienzo del siglo XX desde el peculiar observatorio en el que había vivido como austríaco, judío, escritor, humanista y pacifista. Y consideraba un deber moral contar ese relato para aviso de navegantes, porque nada podía llevar a pensar en los umbrales del nuevo siglo que ya en su primera mitad se iban a producir dos guerras salvajes en suelo europeo. Los jóvenes educados en la Austria imperial, en un ambiente seguro y estable, creían periclitado cualquier episodio de barbarie y no veían en el futuro sino signos de progreso. No podían sospechar que ya se estaba incubando el huevo de la serpiente.

Ese relato resulta familiar a quienes hemos vivido la experiencia de la transición española a la democracia. En los años setenta del siglo pasado creíamos haber ingresado en la senda del progreso social y político, quedaban atrás los conflictos bélicos, propiciados por ideologías enfrentadas, por la desigualdad en oportunidades y riqueza, y se abría un camino de cambios a mejor. Hoy, sin embargo, es urgente aprender de europeos como Zweig para tomar conciencia de que las semillas del retroceso pueden estar puestas y es necesario frenar su crecimiento destructivo. Como bien dice Federico Mayor Zaragoza, la Unión Europea debería ser el catalizador de la unión mundial. Una de esas semillas destructivas, como en el tiempo de Hitler y Stalin, es el triunfo de los discursos del odio.

Se entiende por discurso del odio cualquier forma de expresión cuya finalidad consiste en propagar, incitar, promover o justificar el odio, el desprecio o la aversión hacia determinados grupos sociales, desde una posición de intolerancia. Quien recurre a ese tipo de discursos pretende estigmatizar a determinados grupos y abrir la veda para que puedan ser tratados con hostilidad, disuelve a las personas en el colectivo al que se agrede y lanza contra el conjunto su mensaje destructivo.

Tal vez el rótulo “odio” no sea el más adecuado para referirse a las emociones que se expresan en esos discursos, como la aversión, el desprecio y el rechazo, pero se trata en cualquier caso de ese amplio mundo de las fobias sociales, que son en buena medida patologías sociales que se deben superar. Se incluyen entre ellas el racismo, la xenofobia, el antisemitismo, la misoginia, la homofobia, la aversión a los miembros de determinadas confesiones religiosas, o la forma más común de todas, la aporofobia, el rechazo al pobre. Y es que las emociones, a las que tan poca atención se ha prestado en la vida pública, sin embargo la impregnan y son especialmente manipulables por los secuaces del flautista de Hamelín. Así fue en la primera mitad del pasado siglo y está siéndolo ahora cuando los discursos fóbicos proliferan en la vida compartida.

Desde un punto de vista jurídico, el principal problema estriba en el conflicto entre la libertad de expresión, que es un bien preciado en cualquier sociedad abierta, y la defensa de los derechos de los colectivos, objeto del odio, tanto a su supervivencia como al respeto de su identidad, a su autoestima. El problema es sumamente grave, porque ninguno de los dos lados puede quedar eliminado.

En principio, por decirlo con Amartya Sen, la libertad es el único camino hacia la libertad y extirparla es el sueño de todos los totalitarismos, lleven el ropaje del populismo o cualquier otro. La experiencia de países como China, Corea del Norte o Venezuela no puede ser más negativa.

Pero igualmente el derecho al reconocimiento de la propia dignidad es un bien innegociable en cualquier sociedad que sea lo bastante inteligente como para percatarse de que el núcleo de la vida social no lo forman individuos aislados, sino personas en relación, en vínculo de reconocimiento mutuo. Personas que cobran su autoestima desde el respeto que los demás les demuestran. Y, desde esta perspectiva, los discursos intolerantes que proliferan en países de Europa y en Estados Unidos están causando un daño irreparable. Por sus consecuencias, porque incitan al maltrato de los colectivos despreciados, y por sí mismos, porque abren un abismo entre el “nosotros” de los que están convencidos equivocadamente de su estúpida superioridad, y el “ellos” de aquellos a los que, con la misma estupidez, consideran inferiores.

Naturalmente, el derecho está abordando desde hace tiempo estas cuestiones, preguntándose por los criterios para distinguir entre el discurso procaz y molesto, pero protegido por la libertad de expresión, y los discursos que atentan contra bienes constitucionales. Como se pregunta también por las políticas de reconocimiento desde el marco de las instituciones.

Sin embargo, el derecho, con ser imprescindible, no basta. Porque el conflicto entre libertad de expresión y discurso del odio no se supera solo intentando averiguar hasta dónde es posible dañar a otros sin incurrir en delito, hasta dónde es posible humillar su imagen sin llegar a merecer sanciones penales o administrativas. En realidad, las libertades personales, también la libertad de expresión, se construyen dialógicamente, el reconocimiento recíproco de la igual dignidad es el auténtico cemento de una sociedad democrática. Tomando de Ortega la distinción entre ideas y creencias, que consiste en reconocer que las ideas las tenemos, y en las creencias somos y estamos, podríamos decir que convertir en creencia la idea de la igual dignidad es el modo ético de superar los conflictos entre los discursos del odio y la libertad de expresión, porque quien respeta activamente la dignidad de la otra persona difícilmente se permitirá dañarla.

En su libro El discurso del odio se preguntaba Glucksmann si el odio merece odio y respondía que para combatirlo basta con sonreír ante su ridículo. Sin embargo, y regresando al comienzo de este artículo, no creo que haya que sonreír ante el odio, ni siquiera con desprecio. Porque es destructor y corrosivo, quiebra el vínculo humano y provoca un retroceso de siglos.

Cultivar un êthos democrático es el modo de superar los conflictos entre la libertad de expresión y los derechos de los más vulnerables. Porque de eso se trata en cada caso: de defender los derechos de quienes son socialmente más vulnerables y por eso se encuentran a merced de los socialmente más poderosos.

Fuente: http://elpais.com/elpais/2017/03/16/opinion/1489679112_916493.html

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