Centro América/Panamá/13 de septiembre de 2016/Fuente: telesur
10 años después del inicio de su construcción, siguen las protestas de indígenas contra la hidroeléctrica Barro Blanco.
Indígenas de la comarca Ngäbe Buglé, en Panamá, continúan en resistencia ante el proyecto hidroeléctrico Barro Blanco, pues lo señalan como agente de contaminación ambiental.
Miembros de la comarca, entrevistados por el corresponsal de teleSUR Hugo Vera, aseguraron que la cacique Silvia Carrera está en complicidad con el Gobierno, tras firmar un acuerdo que establece la continuidad del proyecto y la exclusión de la Generadora del Istmo S.A. (Genisa), en su lugar, la obra sería operada por un tercero independiente.
Paralizado y reanudado, una y otra vez, el proyecto de 130 millones de dólares ha estado enmarcado por la polémica desde su inicio en 2006, durante la gestión del expresidente Martín Torrijos.
Los detractores de Barro Blanco indican que diariamente unos 5 mil mineros padecen los estragos de las obras. Por otra parte, las protestas contra el proyecto han generado varios episodios de violencia policial.
Otro de los escándalos, a inicios de este año, fue la muerte de un bebé de 10 meses por el presunto consumo de agua contaminada del río Tabasará, donde se levanta la hidroeléctrica. Asesores del ministerio de Gobierno aseguraron que no hay contaminación en el río y que el niño murió a causa de una «neuroinfección por tuberculosis».
En 2007, la empresa Genisa obtuvo la concesión y en 2011 comenzó la construcción de Barro Blanco, que generaría 28,56 megavatios, cerca de 2 por ciento de la capacidad total del país.
Fuente: http://www.telesurtv.net/news/Barro-Blanco-La-historica-polemica-por-contaminacion-en-Panama-20160912-0046.html
Imagen: images.telemetro.com/nacionales/Gobierno-proyecto-hidroelectrico-Barro-Blanco_MEDVID20150209_0037_6.jpg