Por: Rosa María Torres
Honrada por la invitación del Ministerio de Educación de Colombia al evento del Día Internacional de la Alfabetización de este año 2016, en un momento histórico para Colombia y para toda América Latina, a pocos días de haberse acordado un cese al fuego con las FARC, después de 52 años años de guerra.
Me han pedido hablar sobre Alfabetización y Paz. La pregunta que se me instaló inmediatamente en la cabeza fue: si Colombia fue capaz de hacer todo lo que viene haciendo, en guerra, ¿qué será capaz de hacer, en paz?.
Decidí hablar de la Colombia que conozco y admiro por su creatividad en en el campo de la cultura escrita, la lectura y la escritura, la narrativa, la expresión oral. Y decidí aportar a este momento de diseño de futuro con un repaso de algunos conceptos y visiones en el campo de la alfabetización y la cultura escrita que a menudo son atrasados, sesgados o llanamente equivocados.
Uno de ellos es el propio concepto de alfabetización, que suele entenderse como enseñar a leer y escribir a personas mayores de 15 años. En realidad, alfabetizar es enseñar a leer y escribir a personas de cualquier edad, niños, jóvenes y adultos, dentro y fuera del sistema escolar. No solo la nula escuela, sino también la mala escuela, producen analfabetismo, y por eso solo una acción a dos puntas, con niños y con adultos, puede resolver estructuralmente la problemática del analfabetismo. Sabemos, asimismo, que el buen o el mal lector se forja en la infancia, y que lo que define al buen lector no es leer mucho sino leer por placer, y no leer solo libros sino todo lo que está al alcance. Es de la alfabetización como proceso y como aprendizaje sin edad, a lo largo de toda la vida, de la que voy a hablar aquí.
Colombia se propone ser «la más educada de América Latina para el año 2025». ¿Qué es una sociedad educada? Una sociedad educada no es solo una sociedad escolarizada y una sociedad que ha universalizado el aprendizaje de la lectura y la escritura; es una sociedad que lee. La lectura abre las puertas al aprender a aprender, al aprendizaje autónomo y al aprendizaje permanente. El desafío es no solo incrementar estadísticas de cobertura, matrícula y terminación de niveles, mejorar la calidad y la pertinencia de los aprendizajes escolares, y obtener mejores puntajes en pruebas nacionales e internacionales. El desafío mayor es construir una sociedad que lee y escribe, que incorpora la cultura escrita a la cotidianeidad, que valora no solo los aprendizajes formales sino también los aprendizajes informales. Una sociedad que aprecia y estimula la lectura es una sociedad que percibe y organiza de otra manera el tiempo, el juego, el ocio.
Colombia se ha propuesto asimismo reducir la actual tasa de analfabetismo de 5.8% a 3.8% para el año 2018 (676 mil jóvenes y adultos alfabetizados). (En el 2018 Colombia estaría libre de analfabetismo: MinEducación, RCN Radio, 19/04/2016). El acuerdo de paz implicará un compromiso especial con las zonas más afectadas por el conflicto armado, con los combatientes que dejan las armas y con los miles de víctimas de todos estos años de violencia. Es la familia como unidad, y no solo las personas mayores de 15 años analfabetaso con baja escolaridad, la que requiere atención desde el punto de vista educativo, psicológico y emocional.
Debo empezar por decir que he estado en este país muchas veces y que estuve aquí en 2007, cuando Bogotá fue declaradaCapital Mundial del Libro. Lo que ví y experimenté en esa visita me inspiró y me dejó marca. Desde entonces sigo de cerca, con curiosidad y con envidia, las novedades de Colombia en este campo.
Vine en 2007 en el marco de un estudio que hice sobre experiencias de alfabetización y promoción de la lectura en 9 países de América Latina: Argentina, Bolivia, Colombia, Ecuador, México, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela. Estuve solo en Bogotá. Quise ir a zonas rurales pero los amigos me desaconsejaron; era arriesgado.
Alfabetización y promoción de la lectura van de la mano y se necesitan mutuamente. La misión de alfabetizar va más allá de dar a las personas por alfabetizadas; lo importante no es que aprendan a leer y escribir; lo importante es que lean y escriban.
Las ventajas de la lectura son muchas y la investigación sigue mostrando más. Leer no es solo predictor de éxito en el medio escolar y académico; contribuye al éxito en el trabajo y en la vida, es fuente de realización y de felicidad, desarrolla el cerebro, mejora la salud y el espíritu, facilita y enriquece las relaciones sociales, acompaña a lo largo de la vida.
Fueron días apretados para todo lo que había que ver. Conocí la Red Nacional de Bibliotecas Públicas, ya renombrada entonces y hoy integrada por 1424 bibliotecas a nivel nacional; visité la Virgilio Barco y la Luis Angel Arango. Recorrí bibliotecas al aire libre, regadas en parques y en todo tipo de espacios públicos. Ví el programa Libro Al Viento funcionando en una estación de libros en el Transmilenio y otra en la Plaza de Mercado de Quirigua. Visité también una biblioteca comunitaria, la Biblioteca Comunitaria Simón El Bolívar en el barrio San Vicente Sur de la localidad de San Cristóbal Sur.
Estuve en la céntrica Plaza de Bolívar, llena de gente, y leí las decenas de mensajes colgados en el “Arbol de la Memoria” organizado por el Movimiento por los Desplazados. Agregué, por supuesto, mi propio mensaje. Me enteré del famoso Biblioburro, que busqué esa misma noche en internet. Ví, fascinada, a cuenteros al aire libre en plazas y parques contando historias, manteniendo en vilo a familias enteras, sentadas en el césped, en un magnífico fin de semana soleado en Bogotá.
Una panorámica al vuelo sobre la lectura y la escritura en Colombia
Como en todo lado, hay buenas y malas noticias. Están, por una parte, las cifras del analfabetismo, las percepciones y las realidades que confirman que en Colombia se lee poco y mal pese a todos los esfuerzos, los recurrentes pobres resultados de evaluaciones nacionales e internacionales, la interpretación y el uso a menudo errado de terminologías y estadísticas. Y están, por otra, las iniciativas y las realidades que muestran a esa Colombia resiliente, incansable y creativa, capaz de sobreponerse a cualquier cosa.
Escolaridad
Todo empieza en la familia – sobre la que me falta información en el caso de Colombia – y sigue luego en la educación escolar. Los datos sobre educación incluidos en el Informe de Desarrollo Humano 2015 del PNUD, basados en datos de la UNESCO (2014), muestran que, a pesar de una guerra de medio siglo, Colombia tiene indicadores educativos que la sitúan en los promedios regionales y en varios casos sobre los promedios regionales.
Años esperados de escolaridad (años) 13.5
Informes nacionales e internacionales recientes sobre la situación de la educación en el país reiteran mucha de esa información. Todos se centran en la educación formal y ponen a un costado aspectos fundamentales relacionados con la educación y los aprendizajes en la familia, las relaciones inter-generacionales, el desarrollo de la primera infancia, la educación de los adultos, el papel de los medios, y el uso de internet y las tecnologías.
– Colombia, Ministerio de Educación, Sistema Nacional de Indicadores Educativos para los niveles de pre-escolar, básica y media, 2014
– OCDE, Panorama de la educación 2014, Nota País: Colombia
– REDUCA, Situación educacional Colombia, 2016. (Datos 2014).
Analfabetismo y alfabetización
Algunos datos y hechos:
» Colombia tiene hoy 5.8% de analfabetismo (9% en América Latina) y una distribución muy desigual entre regiones del país.
» 82 % de los excombatientes reinsertados han sido alfabetizados, según una encuesta de la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR). Más de 21.000 terminaron la primaria, 8.000 la básica secundaria, 14.000 son bachilleres y 2.700 han ingresado a la educación superior. El modelo de educación para la reintegración ha sido adoptado en diferentes regiones.
» La Alcaldía de Medellín construyó el Centro de Formación para la Paz y la Reconciliación (CEPA), donde estudian excombatientes de las autodefensas, las FARC, el ELN y víctimas del conflicto. (De las balas a los lápices, El Espectador, 27/08/2016)
» Medellín ha sido declarada ciudad libre de analfabetismo en Colombia, con menos del 3% de analfabetismo.
Lectura, libros y bibliotecas
» Los colombianos leen en promedio 1.9 libros por año (los ecuatorianos 0.5, los argentinos 4.6, los chilenos 5.3, los españoles 10).
» Según la Encuesta de Consumo Cultural, realizada por el DANE (Departamento Administrativo Nacional de Estadística) en 2012: 48% de los colombianos mayores de 12 años leyó algún libro en 2011. 50% leyó revistas y 63% periódicos. El grupo de jóvenes entre 12 y 25 años es el que más leyó libros (61%). En el grupo de 5 a 11 años, 55%. (¿Cómo va la lectura en Colombia?, El Espectador, 14/05/2013)
» Colombia produce 23 millones de libros al año, vende 37 millones y organiza más de 10 ferias anuales. La oferta literaria supera a la demanda. (Muchas ferias y libros, poca lectura, Semana, 21/08/2016).
» Colombia es el tercer país en Sudamérica con más espacios destinados a la lectura.
» Colombia tiene una sólida normativa en torno al estímulo y protección al derecho de autor (Ley 23 de 1982 y Decisión Andina 351 de 1993). Ha firmado la mayoría de acuerdos internacionales sobre el tema. (Colombia, un país que lee muy poco, El Espectador, 14/05/2013).
Evaluaciones escolares nacionales
» Colombia desarrolló el llamado Índice Sintético de Calidad Educativa, una medición integral del desempeño de cada escuela pública y privada producido por el Ministerio de Educación y el Instituto Colombiano para la Evaluación de la Educación (ICFES). El Indice da cuenta de cuatro aspectos:
– Progreso: mejoría del colegio en relación con el año anterior.
– Eficiencia: promoción estudiantil. Mide que los estudiantes alcancen los logros propuestos en el grado escolar.
– Desempeño: aprendizaje medido por pruebas estandarizadas (pruebas Saber).
– Ambiente escolar: en qué contexto se está desarrollando la enseñanza y el aprendizaje.(Calidad de la educación en Colombia mejoró significativamente, El Espectador, 1/04/2016)
– Niños colombianos pasan raspando en habilidad lectora, El Tiempo, 22/02/2015.
Evaluaciones internacionales
Prueba PIRLS – Estudio Internacional de Progreso en Comprensión Lectora (2001-2011)
» Colombia ha participado dos veces en esta prueba internacional, en 2001 y en 2011. En 2011 participaron 4.000 alumnos de cuarto grado de 150 colegios públicos y privados. 6 de cada 10 alumnos tuvieron dificultad para entender e interpretar textos complejos. La mayoría comprendió mejor un texto literario que uno informativo. Colombia se ubicó entre los 10 países con los menores puntajes (de un total de 49 países participantes en la prueba). No obstante, los resultados mejoraron entre 2001 y 2011.
Tercer Estudio Regional Evaluativo y Comparativo (TERCE), UNESCO
» Estas pruebas son parte del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE), coordinado por la oficina regional de la UNESCO. Se han realizado tres hasta la fecha: PERCE (1997), SERCE (2006) y TERCE (2013). Colombia ha participado en las tres.
» El TERCE se aplicó a estudiantes de 3º y 6º grado de primaria, para evaluar lectura, escritura, matemáticas y ciencias. Participaron 14 países latinoamericanos (Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica,Chile, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay) y el estado mexicano de Nuevo León.
» Colombia no avanzó respecto del Tercer Estudio (SERCE); tampoco retrocedió, como lo hicieron otros países. Volvió a ubicarse en la media regional, por encima de la media en lectura 6º grado, y por debajo de la media en escritura 6º grado. (Ver tabla con ubicación de países latinoamericanos en el TERCE).
– 61% de los estudiantes de 3º grado y 70% de 6º grado tiene bajo desempeño en lectura.
– 71% de los estudiantes de 3º grado y 83% de 6º grado tiene bajo desempeño en matemática.
» La cobertura de los medios colombianos al TERCE fue mucho menor a la dada a la prueba PISA. El Tiempo destacó los buenos resultados en lectura (Estudiantes colombianos, con buen nivel de lectura en la región); Semana optó por una visión negativa y escolar (Colombia pasa raspando evaluación de la Unesco).
Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), OCDE
Vladdo – Colombia |
» PISA fue pensada para los países de la OCDE y ha venido incorporando a países no-OCDE, a ‘países en desarrollo’. Viene aplicándose desde el año 2000. Mediante pruebas estandarizadas, evalúa competencias en 3 áreas (lectura, matemáticas y ciencia) entre jóvenes de 15 años.
» En PISA 2012 Colombia se ubicó en el puesto 61 entre 65 países participantes; Perú se ubicó un escalón más abajo. 8 países latinoamericanos participaron en esta prueba: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Perú y Uruguay. Todos los países latinoamericanos participantes en las sucesivas pruebas PISA vienen ubicándose a la cola, con Chile a la cabeza.
» Colombia, junto con Argentina, Brasil y Perú, son los 4 países de América Latina con menor cantidad de estudiantes por encima del promedio de los países de la OCDE.
» Shanghai (en China), Singapur, Hong Kong, Corea del Sur y Estonia obtuvieron los mejores resultados en las tres áreas.
» Un resumen de Colombia en PISA 2012 elaborado por el BID concluía que en lectura «Colombia está mejorando alrededor de 3 puntos por año. A este ritmo, le llevarían alrededor de 31 años para alcanzar el puntaje promedio de la OCDE en esta materia». (El BID ha concluido asimismo que Chile necesita 18 años para alcanzar el puntaje promedio de la OCDE en lectura, Brasil 27 años en matemática, y Argentina 39 años en ciencia).
» Para saber más:
– Colombia tras quince años de pruebas PISA, El Espectador, 25/07/2015
– OCDE, Informe «Alumnos de bajo rendimiento: por qué se quedan atrás y cómo se les puede ayudar», 2016.
– BID, Resultados PISA en América Latina 2012
Acciones en marcha
Registro unas pocas acciones en marcha tanto a nivel gubernamental como no-gubernamental:
» Plan Nacional de Lectura y Escritura ‘Leer es mi cuento’, del Ministerio de Cultura y el Ministerio de Educación «para que la lectura se convierta en un ejercicio cotidiano que abra espacios de disfrute para los colombianos, así como una herramienta efectiva para lograr mejores oportunidades laborales, económicas y sociales, con el fin de propiciar la paz, la equidad y apoyar para que Colombia sea el país más educado de Latinoamérica en 2025». El Ministerio de Educación atiende a las bibliotecas escolares y el Ministerio de Cultura se enfoca en la primera infancia y en las bibliotecas públicas. Se busca aumentar los índices de lectura en el país, de 1.9 libros en 2016 a 3.2 en 2018.
» Para 2018 el Ministerio de Cultura construirá 100 nuevas bibliotecas en las regiones más afectadas por la violencia y la pobreza. La meta es que la Red Nacional de Bibliotecas Públicas tenga 1484 bibliotecas adscritas.
» Maratones de la Lectura. Mediante esta estrategia se busca que los colegios desarrollen durante 30 días actividades relacionadas con la lectura, a fin de mejorar el comportamiento lector de los estudiantes. En las Primeras Maratones, 120.000 estudiantes leyeron 5,1 libros en un mes. En las primeras Maratones de Lectura del 2016 se leyeron 224.169 libros. El autor más leído es Gabriel García Márquez.
» Niños mostrarán cómo se imaginan una Colombia en paz. Los estudiantes hasta los 16 años de edad de colegios públicos y privados de todo el país con convocados a expresar, a través del dibujo, cómo imaginan el futuro de Colombia sin conflicto armado. Los 15 dibujos ganadores serán la imagen del calendario 2017 del gobierno y aparecerán en una serie especial de estampillas.
» Digitalización de libros para acceso público. Está en marcha un ambicioso programa de digitalización de los libros en bibliotecas y universidades.los acervos en las bibliotecas públicas de Colombia. El proyecto más grande es la Biblioteca Básica de la Cultura Colombiana (BBCC), liderado por la Biblioteca Nacional, la Red Nacional de Bibliotecas Públicas y el Plan Nacional de Lectura y Escritura «Leer es mi Cuento». Para 2018 se espera tener 200 títulos digitalizados, sobre diversos temas. Estos pueden ser descargados gratiitamente desde computadores, celulares u otros dispositivos electrónicos (Colombia lee en la nube, Semana, 14/05/2016).
» Bibiotecas familiares y bibliocasas. A las familias que reciben una vivienda gratuita se les entrega una biblioteca familiar con nueve títulos; también participan en programas de promoción de la lectura. Son libros de interés para todos los miembros de la familia: bebés, niños, jóvenes, padres y abuelos. (Viaje el país de las bibliocasas, El Espectador. 27/08/2016).
» Lectura en Movimiento. Este colectivo se propone incentivar la lectura en TransMilenio:
1. De camino al trabajo: Los voluntarios que promueven Lectura en Movimiento se montan a los articulados de TransMilenio, libros en mano, buscando contagiar a los pasajeros con el interés por la lectura. Les invitan a llevar un libro para leer.
2. Caminar la ciudad: Está prevista una caminata desde la plaza de Bolívar hasta la plaza de toros, personas leyendo con mochilas llenas de libros que se irán ofreciendo a quienes se unan.
3. Mecerse en una hamaca: También se propondrá a las personas a llevar hamacas, ponchos, o cobijas para que lean en el césped del parque de Los Novios.
» Las Escuelas Digitales Campesinas de Colombia es un programa de la Fundación Acción Cultural Popular (ACPO), entidad católica que funciona desde 1947. A fines de 2012 se inició el piloto en cuatro departamentos: Chocó, Boyacá, Cauca y Valle del Cauca. El programa arrancó con cuatro cursos: alfabetización digital, liderazgo, conocimiento del medio y asociación de empresas; hoy se han incluido tres más: adaptación al cambio climático, paz y convivencia, disponibles en una plataforma de educación a distancia (aula virtual). Hoy el programa está en más de 40 municipios de 8 departamentos del país y ha servido a alrededor de 7.000 campesinos.
Algunas alertas en torno a analfabetismo, lectura y escritura, y pruebas internacionales
» Muchas de las problemáticas que suelen destacarse en este campo son de orden regional y mundial, no necesariamente específicas de un país. Por ejemplo: la poca lectura, la reducción de la lectura por placer, el poder distractor de la televisión y los videojuegos, los malos resultados de los ‘países en desarrollo’ y de América Latina concretamente en pruebas internacionales.
» En América Latina y en otras regiones del mundo los datos de analfabetismo continúan siendo autodeclarados (las personas responden a la pregunta: ¿sabe ud. leer y escribir?; se toma la respuesta como válida, sin verificación o evaluación). Esto hace que los datos de analfabetismo no sean confiables; probablemente están muy subestimados. La magnitud que viene mostrando tener en nuestros países el llamado ‘analfabetismo funcional’ (leer sin comprender cabalmente lo que se lee, escribir sin expresar con claridad las ideas) está relacionada con esta definición laxa de «persona alfabetizada», cuando a menudo no lo está realmente. Más que «retorno al analfabetismo», se trata por lo general de procesos muy básicos e incompletos de alfabetización.
» Al analizar los resultados de pruebas internacionales cabe tener en cuenta qué países de la región participaron. Por ejemplo: en el TERCE participaron 14 países; en PISA viene participando un conjunto reducido de países de América Latina; en PISA 2012 participaron 8 países. Afirmar que Colombia o Perú o cualquier otro país se ubica en último o penúltimo lugar pasa por alto el hecho de que muchos países están fuera de esta evaluación.
» Cabe considerar que las pruebas internacionales, pensadas y elaboradas en los países del Norte (‘desarrollados’), no necesariamente se ajustan a realidades de los países del Sur (‘en desarrollo’). Esta es una preocupación creciente en torno a PISA en todo el mundo y cada vez más en América Latina. Las pruebas del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE), son un caso diferente pues están pensadas en y desde América Latina y toman como referente los currículos de los países. Hasta qué punto los puntajes en PISA y otras pruebas internacionales son y deben considerarse por sí mismos indicativos de la calidad de un sistema educativo, en cualquier parte del mundo e independientemente de las diversidades culturales, es asimismo motivo creciente de reflexión y de debate.
» La estimación de cantidad de lectura se basa generalmente en libros. A su vez, la definición de lector y de buen lector se basa en número de libros leídos. No obstante, no toda lectura pasa por los libros ni el número de libros leídos es, por sí mismo, indicativo de calidad lectora. Hoy en día, la lectura es ubicua; lo que una persona lee a diario incluye diversos soportes y formatos, tanto en papel como en pantalla.
» Al revisar redes sociales y en especial Twitter se encuentra muchos ejemplos de desinformación, falsas interpretaciones de los datos, incomprensiones y mal uso de términos (por ejemplo: analfabetismo, analfabetismo absoluto, analfabetismo funcional) así como las usuales extensiones del término analfabetismo (analfabetismo político, analfabetismo ético, etc.), todo lo cual contribuye a desinformar y a confundir. Es indispensable una estrategia de información y educación ciudadana en torno al uso de las terminologías y a la interpretación de las estadísticas vinculadas al campo educativo y al de la cultura escrita de manera específica.
Fuente: http://otra-educacion.blogspot.com/