America del Sur/Brasil/10 Septiembre 2016/Fuente: Prensa Latina
La tendencia en las últimas décadas fue a la reducción de ese flagelo, indicó el reporte y señaló que la proyección es que la cifra de niños sometidos al trabajo infantil en Brasil debe reducirse hasta un millón 900 mil para el año 2020.
En la reunión, la jueza Andrea Nocchi subrayó que este problema se ve agravado por la falta de políticas públicas, la diseminación de la violencia y la educación precaria que reciben los menores.
Brasil no cumplió la meta de erradicar el trabajo infantil hasta el 2015, recordó Nocchi e insistió en que ese objetivo sólo podrá alcanzarse con inversiones en el sector educacional.
El ministro del Tribunal Superior de Trabajo Lelio Bentes Correa coincidió en destacar el rol de la educación de calidad, pero advirtió que en épocas de crisis los factores económicos ganan mayor fuerza e influyen más que los culturales.
Es necesario asegurar a las familias condiciones de empleo e ingresos que le permitan ser verdaderos agentes de rescate de su propia ciudadanía, valoró.