África/Sudán del Sur/14 de febrero de 2017/Fuente: ACNUR
ACNUR hace un llamamiento a todas las partes implicadas en el conflicto para que adopten una solución pacífica a la crisis que, desde hace ya cuatro años, empuja diariamente a miles de personas a huir del país.
ACNUR está muy preocupado por el ritmo actual de desplazamiento en Sudán del Sur donde, desde que estalló el conflicto en diciembre de 2013, más de 1,5 millones de personas se han visto obligadas a abandonar el país en busca de seguridad. Además, hay 2,1 millones de desplazados internos en el país.
ACNUR hace un llamamiento a todas las partes implicadas en el conflicto para que adopten una solución pacífica a la crisis que, desde hace ya cuatro años, empuja diariamente a miles de personas a huir a Uganda, Etiopía, Sudán, Kenia, República Democrática del Congo y la República Centroafricana.
Este desplazamiento a gran escala convierte hoy a Sudán del Sur en la mayor crisis de refugiados de África y la tercera a nivel mundia, después de Siria y Afganistán, a pesar de que recibe poca atención y sus niveles de financiación son crónicamente bajos.
Tras fallar el acuerdo de paz entre el gobierno y las fuerzas de la oposición, estallaron unos intensos combates en Sudán del Sur en julio del año pasado. Más de 760.000 refugiados huyeron del país en 2016 mientras se intensificaba el conflicto en la segunda mitad del año, con un promedio de 63.000 personas al mes obligadas a abandonar el país. Cerca de medio millón tuvieron que huir entre septiembre y diciembre de 2016. Más del 60% de los refugiados son niños, muchos de los cuales llegan con niveles alarmantes de desnutrición, marcados por el impacto devastador y duradero de las brutalidades del conflicto en curso.
Los recién llegados informan del drama que se vive en Sudán del Sur, de los intensos combates, los secuestros, las violaciones, el temor a los grupos armados, las amenazas de muerte y la extrema escasez de alimentos.
Como reflejan las tendencias mundiales de desplazamiento, las personas que huyen de Sudán del Sur son acogidas por las comunidades más pobres de los países vecinos, bajo una inmensa presión debido a la falta de recursos.
La mayoría de los refugiados son acogidos por Uganda, donde han llegado unos 698.000. Etiopía alberga a unos 342.000, mientras que más de 305.000 se encuentran en Sudán, unos 89.000 en Kenia, 68.000 en la República Democrática del Congo y 4.900 en la República Centroafricana.
A pesar de la acogida de refugiados sursudaneses por parte de los países vecinos, ACNUR sigue sumamente preocupado por la falta de recursos para hacer frente a una de las mayores crisis de refugiados del mundo.
Estamos trabajando con las autoridades de los países vecinos de Sudán del Sur para ayudar a salvar vidas y a hacer frente a las necesidades básicas de aquellos que llegan en condiciones desesperadas, pero nuestros esfuerzos se ven obstaculizados por la grave falta de financiación.
Estamos reactivando nuestro llamamiento a los países donantes para que intensifiquen su apoyo a los esfuerzos humanitarios dirigidos a la crisis en Sudán del Sur. La capacidad de respuesta de los países de acogida está al límite. Además, la constante falta de fondos está afectando el suministro de agua potable, de alimentos, los servicios de salud y de saneamiento. En 2016 solo se financió un 33% de los 649 millones de dólares que pedía ACNUR.
En 2017 hace un llamamiento para alcanzar 782 millones de dólares dirigidos a operaciones regionales dentro de Sudán del Sur y los países vecinos de acogida.