20 de septiembre de 2017 / Fuente: http://blog.tiching.com
José Ramón Gamo
¿Qué es la neurodidáctica?
La neurodidáctica es la incorporación a la educación de los conocimientos que aporta la neurociencia. Esto nos indica cómo se producen los procesos naturales de aprendizaje y cómo podemos tomar decisiones con respecto a la didáctica, para diseñar los procesos que llevamos a cabo en la enseñanza y que van a incluir cuáles son los objetivos. Sobre todo desde el punto de vista de las competencias que tenemos, qué hay que estimular y qué hay que generar en los chavales para que puedan tener un buen desenvolvimiento en su vida adulta.
¿Cuáles han sido los principales descubrimientos de la neurodidáctica?
Aún son pocos, ya que estamos todavía en pañales. Los principales descubrimientos son los dispositivos básicos de aprendizaje. Hay 3 grandes dispositivos básicos de aprendizaje: la motivación, toda la red atencional donde están contempladas la atención involuntaria o inconsciente (que es cuando las cosas llaman tu atención y tú no tienes que esforzarte para aprender), y luego la atención consciente, que es lo que la gente conoce como concentración. Luego están las memorias, en las que hay 3 grandes marcos.
¿Cuáles son estas 3 grandes divisiones de la memoria?
Pues son la memoria implícita, que es la que vas a tardar mucho en que se afiance la información en ella, y una vez almacenada la información nunca te vas a olvidar ni tienes que recordarlo; la memoria explícita, que es otra memoria a largo plazo, pero más compleja, como un desván en el que vas almacenando cajas a lo largo de tu vida; y la memoria a corto plazo, y dentro de ella, la memoria operativa o la memoria de trabajo. Esta última es la única en la que tomas conciencia de lo que sientes, de lo que piensas, de lo que vas a hacer y la consecuencia que esto tiene, y por tanto te permite dialogar internamente. Esto hace que puedas hablar contigo mismo, regularte y corregir la conducta.
¿Y cómo se activan estos dispositivos básicos de aprendizaje?
Para activarse es necesario que las amígdalas indiquen que hay que liberar neurotransmisores que pongan en marcha estas funciones. Y sabemos que eso ocurre en 4 situaciones: cuando está en riesgo nuestra vida, cuando el cerebro sufre un factor de curiosidad, cuando hay factores de motivación y cuando estamos en actividad aeróbica.
¿Qué puede aportar a la educación saber estos hechos?
Tomar decisiones, ya que para que un aprendizaje sea significativo tengo que tener los dispositivos de aprendizaje básicos con un nivel muy potente de activación. Es decir, hay que aumentar la actividad aeróbica, y tenemos que generar situaciones de curiosidad y de motivación.
¿Podría concretar un poco más?
Cuando haces el diseño metodológico, habría una primera fase que siempre va a ser la motivación. En esa fase tienes que generar acciones motivadoras con el niño o niña para provocarle curiosidad o interés por lo que va a aprender. Dentro de esa misma fase de motivación habría un segundo paso, que es el testeo. Testear significa identificar qué niveles de conocimiento previo hay sobre la información o competencia novedosa que vamos a trabajar.
¿Y por qué es importante saber el conocimiento previo que tiene el alumnado?
Si no tienes ningún nivel de conocimiento previo y estás leyendo un texto, cuando metes la información novedosa y llega a tu memoria consciente pero no llegan datos con los que puedas razonar o asociar la información, no vas a entender nada. Sin embargo, si lo vives en lugar de leerlo, al entrar la información por diferentes canales además del lingüístico, vas a poder entenderlo. Aprenderlo no, pero sí entender. Entonces el nivel de conocimiento previo es determinante, ya que, si es muy bajo, la transmisión de información en la siguiente fase tiene que ser a través de otras herramientas como audiovisuales, visual thinking o experiencias concretas.
¿Qué papel puede jugar la tecnología digital en el enfoque que aporta la neurodidáctica?
La tecnología digital no es relevante en absoluto para la transformación en la educación ni para la neurodidáctica. No tiene un papel relevante. No es determinante para el proceso de transformación de la educación. Pero, eso sí, es una herramienta potenciadora y de generación de oportunidades muy interesante.
¿Qué puede hacer un docente o un grupo de ellos que quieran optimizar el aprendizaje de sus estudiantes teniendo en cuenta la neurodidáctica?
Bajo mi punto de vista, lo primero y más importante es estar motivado. Es la clave porque forma parte del proceso. Lo segundo es no querer abarcar mucho. Es mejor hacer pocas cosas, manejarlas bien y tener destrezas para hacerlas. Es preferible especializarse en algún aspecto que intentar adquirir un alto grado de conocimiento en un amplio espectro de cuestiones.
Y quien esté interesado en el conocimiento del cerebro para tomar decisiones estratégicas sobre el proceso de enseñanza tiene cosas inspiradoras ahora mismo, como el blog Escuela con cerebro, donde comparten conocimientos de neurociencias y lo traducen en formatos gráficos, sobre cómo se puede hacer una transferencia de este tipo en el aula.
Respecto al Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), ¿podría explicar brevemente lo que es?
Es un trastorno del neurodesarrollo, una disfunción cerebral donde lo que está afectado es la función ejecutiva y que afecta a las memorias operativas. A la capacidad de inhibición rápida de los impulsos, la capacidad de organización, la capacidad de convertir los objetivos en metas y dirigirse hacia ellos perseverantemente, la capacidad para concentración y la capacidad para la regulación emocional. Todas estas funciones sufren disfunciones siempre que el individuo tenga unos niveles bajos en la activación cerebral. Cuando los chavales que padecen esta disfunción neurológica están en situaciones de alta activación cerebral se dispara la liberación de dopamina y regulan bien estas funciones.
El TDAH es un problema de carácter adaptativo. El hecho de tener esta peculiaridad neurológica, si no te provoca un problema de adaptación al aprendizaje ni a las normas sociales en las que estás metido, no te produce ningún trastorno.
¿Hasta qué punto implican alumnos con TDAH un esfuerzo extra para los docentes?
Hasta todo punto. El TDAH es posiblemente uno de los grandes retos dentro de una escuela ordinaria con una metodología ordinaria. Porque este método genera una gran dificultad adaptativa a un niño con problemas en la función ejecutiva. Es un reto para un profesor que está en ese marco. Y va a ser una sobrecarga, porque requieren de una atención más individualizada.
Entonces, ¿cómo deben los maestros hacer frente a estos casos?
Dentro del marco de una metodología tradicional, deben tener claro cuáles son las adaptaciones metodológicas por un lado. Y luego ayuda mucho el vínculo emocional. Dedicarles a estos niños muchas horas de tutorías donde se establezca un buen vínculo. Porque si un estudiante con TDAH tiene una buena relación con el adulto, su respuesta va a mejorar infinitamente.
¿Qué papel juegan las familias en el desarrollo de estos jóvenes?
Es determinante. Tienen un papel vital en la supervisión de los estudios, en su realización y planificación, en la supervisión de la rutina y en saber manejar el comportamiento. También deben cuidarse mucho personalmente, suelen sufrir altos niveles de estrés por las situaciones que se provocan, y tienen que saber manejarlo para no ser detonantes. El rol de las familias de los alumnos con TDAH es determinante. Es uno de los predictores de riesgo o de prevención.
Fuente entrevista: http://blog.tiching.com/jose-ramon-gamo-la-neurodidactica-nos-ayuda-tomar-decisiones/