América del Sur/ Chile/ 11.11.2019/ Fuente: Eduardo González corresponsal OVE
Se cumplen ya 24 días de la revuelta popular en Chile; revuelta que ha generado la mayor crisis política social del país y que ha cuestionado las raíces mismas del proyecto societal neoliberal instaurado por la dictadura y administrado por los gobiernos de la socialdemocracia (Concertación y Nueva Mayoría). Las demandas del pueblo movilizado son exigir la renuncia de Piñera, verdad y justicia para los mutilados y asesinados y Asamblea Constituyente como vía para la creación de una nueva constitución (la actual fue impuesta por la dictadura en los años 80’).
La táctica anunciada el día de ayer, 10 de noviembre, por el gobierno de Sebastián Piñera apunta a buscar una salida gatopardista intra sistema, cuestión que operaría por su disposición (arrancada por la movilización) de abrirse a la posibilidad de crear una nueva constitución, pero descartando totalmente que ella sea bajo el mecanismo de una Asamblea Constituyente, proponiendo como alternativa un “Congreso Constituyente” que, en lo sustantivo implica que la misma clase política parlamentaria, responsable también de la crisis, defina la nueva carta magna.
Por su parte, el pueblo movilizado rechazando esta propuesta, se alista para desarrollar el día martes 12 una HUELGA GENERAL PRODUCTIVA a la cual se han plegado todos los sindicatos y gremios del aparato público del Estado, sectores de trabajadores de la minería, portuarios, de la construcción, transporte etc. Del éxito de esta huelga dependerá en gran medida cómo se ordena el escenario durante esta semana en una coyuntura que aun sigue abierta.
En lo inmediato, la tarea es una: mantener la movilización y seguir empujando por una Asamblea Constituyente.
Eduardo González
Dirigente Nacional Colegio de Profesores y Profesoras