«Queremos volver a la presencialidad pero con niveles bajos o nulos de circulación del virus»
Para Roberto Baradel, el Gobierno porteño “hace declaraciones en clave de marketing político”. El secretario general del SUTEBA cree que en lo inmediato la presencialidad va a “convivir con la virtualidad” y asegura que “la CTA tiene la voluntad política de propiciar la unidad del movimiento obrero”.
Roberto Baradel es secretario general del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) y suele estar en el centro de las críticas mediáticas por sus fuertes posicionamientos en defensa de la educación pública. En un año signado por la pandemia de COVID-19, les docentes lograron mantener sus fuentes de trabajo, garantizar clases de manera remota y sostener sus ingresos tras garantizar un 32,8% de recomposición salarial en la Provincia de Buenos Aires. Al mismo tiempo, desde su rol en la CTA Buenos Aires, Baradel se muestra claro de cara al futuro de las centrales sindicales: “le hemos manifestado a la CGT la necesidad de unificar al movimiento obrero”.
El debate sobre la vuelta a clases presenciales sigue siendo álgido, a pesar de que el ciclo lectivo ya está llegando a su fin. Hace exactamente un mes, el plenario nacional de CTERA rechazó el regreso a dicha modalidad y planteó que la vuelta a la presencialidad “dependerá de las condiciones sanitarias y epidemiológicas adecuadas”, lo que implica “nula o baja circulación del virus” y que se “garanticen las condiciones de infraestructura, distanciamiento, provisión de materiales de bioseguridad y todo lo previsto en el protocolo elaborado por el Consejo Asesor del Ministerio de Educación de Nación”.
¿Qué evaluación hacés del proceso paritario de este año?
En promedio, los docentes firmamos en la anual una paritaria de casi 33%, con algunos cargos que llegan hasta un 36%. Nosotros tenemos primero una paritaria semestral y esta última etapa es la que contempló un 15%, pero la evaluación que hacemos es que en la anual se llegó a un 32,8% como porcentaje general.
La postura del plenario nacional de CTERA sobre la vuelta a clases presenciales fue muy clara, pero aun así en varios lugares del país y sobre todo en CABA se armaron procedimientos para la vuelta presencial ¿Cuándo creen que van a estar dadas las condiciones sanitarias para la presencialidad?
Hay una gran irresponsabilidad por parte de algunos sectores. El Gobierno de la Ciudad, por ejemplo, hace declaraciones en clave de marketing político. Porque si uno después se fija, ahora están diciendo que no son clases presenciales, sino encuentros socio-educativos. Es lamentable la postura que ha tomado la Ciudad y algunas otras jurisdicciones. Lo de nosotros es claro: queremos volver a la presencialidad pero con niveles bajos o nulos de circulación del virus. De hecho, en la Provincia de Buenos Aires se viene haciendo en algunos distritos y en el resto del país también en algunas provincias. Yo creo que el panorama va a cambiar ahora cuando baje el pico de contagios y la perspectiva de una vacuna va a mejorar la situación. No solamente con respecto al tema de las clases sino en general, en la actividad económica y en todos los estamentos: educativo, social y sanitario.
¿La modalidad a distancia es algo que vino para quedarse o se irá tras la pandemia? En ese caso, ¿están pensando en cómo garantizar los derechos de docentes y alumnos?
Primero, hay que rescatar que no se puede reemplazar la presencialidad, es decir el vínculo del docente con el estudiante es fundamental. Ese vínculo no lo puede reemplazar la virtualidad. Ahora creo que la virtualidad sirvió -y mucho- en un marco extraordinario como es la pandemia. Yo creo que la virtualidad va a convivir con la presencialidad, que por supuesto va a volver cuando se puedan normalizar las cosas, en términos de bajar los contagios, con la vacuna y demás. Nosotros ya firmamos un acuerdo paritario nacional y uno en la Provincia de Buenos Aires, donde se establece la regulación del trabajo docente en la casa. Y estamos reclamando que el Estado se haga cargo de volver a implementar el plan Conectar Igualdad y que les lleguen computadoras a todos los chicos y también a los docentes.
Con respecto a lo sucedido en Guernica hace algunas semanas, ¿creés que el problema de la tierra y de la vivienda debe incluirse en esa agenda a discutir entre los sectores sociales?
Es clave. El problema de la tierra, de la vivienda y del hábitat es fundamental que se pueda abordar. La distribución de la tierra a aquellos que hoy no tienen la posibilidad, la urbanización de los barrios, la producción de pequeños y medianos productores, de agricultores familiares, es un tema que se tiene que debatir como prioritario. Y deben incluirse en esa mesa también las paritarias, los aumentos de salarios, para que eso vuelva al mercado interno en adquisición de bienes y servicios, mejorando la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras, pero además aumentando la demanda. Entonces, en ese caso el comerciante vende más y requiere más al productor, el productor genera trabajo y tiene que producir más, tiene que contratar a nuevas trabajadoras y trabajadores, y esto va conformando un círculo virtuoso. El tema de la obra pública también es importante y, por supuesto, priorizar la salud y la educación.
¿Cómo ves las elecciones de la CGT el año que viene? ¿Avanza la intención de unir a las diferentes centrales de trabajadores?
Nosotros planteamos el tema de la unidad y de hecho estamos articulando con las diferentes centrales en determinados ámbitos, intentando ponernos de acuerdo. Las elecciones de la CGT es un tema de la CGT, nosotros estamos en la CTA. Sí le hemos manifestado la necesidad y la intención de unificar al movimiento obrero. Hasta ahora no se han dado las condiciones, pero sí hemos articulado en diferentes iniciativas. La CTA no solamente está dispuesta, sino que tiene el compromiso y la voluntad política de propiciar la unidad de todo el movimiento obrero.
Moderaste una actividad en conmemoración a los 15 años del NO AL ALCA con referentes políticos y ex presidentes de América Latina. ¿Cómo estás viendo este nuevo proceso regional? ¿Creés que se abre una etapa más esperanzadora para nuestro continente?
Sin ninguna duda. Le dimos en llamar “A 15 años del NO al ALCA, la patria grande resurge” y estamos convencidos que es lo que está sucediendo. Lo que pasó en Bolivia fue impresionante, fueron unas elecciones contundentes del Movimiento al Socialismo. Las movilizaciones en Chile, haber ganado por casi el 80% la necesidad de reforma constitucional a través de una asamblea nacional constituyente. La perspectiva de que gane nuevamente el movimiento popular en Ecuador. Las elecciones ahora de diciembre en Brasil. Que Trump haya perdido en EE.UU. y antes la victoria de AMLO en México y la de Alberto Fernández y Cristina en Argentina, son todos elementos objetivos que permiten pensar que la Patria Grande vuelva a tomar cuerpo y protagonismo.
Fuente e imagen: https://elgritodelsur.com.ar/