Entrevista a Saif Abukeshek, activista palestino «La flotilla a Gaza es un acto de denuncia contra la complicidad con Israel y contra la ocupación de Palestina»

En Palestina formó parte de los movimientos estudiantiles y, más tarde, se integró en el movimiento de solidaridad internacional. Una vez llegó al Estado español, continuó su lucha para ayudar a la comunidad palestina en su «diáspora» y se afilió a la Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC).

La Global Sumud Flotilla nació en junio, después de que varias entidades que organizaban acciones para romper el bloqueo israelí se pusieran en contacto. Dos meses más tarde, y gracias al trabajo de delegaciones en 44 países, una flotilla de decenas de barcos zarpará desde el puerto de Barcelona en una travesía hacia Gaza este domingo.

¿Por qué la Global Sumud Flotilla es la «mayor misión internacional» contra el genocidio en Gaza?

En el proceso de organización de esta misión están participando 44 países, algo que nunca había pasado. Además, se ha inscrito gente de todo el mundo para participar y es la primera vez que zarparán tantos barcos al mismo tiempo.

El objetivo principal es abrir un corredor humanitario. ¿Por qué no llegan alimentos, agua y medicamentos a Gaza?.

Porque estamos frente a un gobierno genocida. Israel está haciendo todo lo que quiere para cumplir su objetivo de matar o desplazar a la población palestina, con un silencio y complicidad total de muchos gobiernos a nivel internacional. Los Estados permiten que todo esto pase porque no rompen relaciones con el ejecutivo israelí, abren las puertas al comercio y permiten el tránsito de armas en sus puertos.

Israel hace todo lo que quiere para matar o desplazar a la población palestina, con la complicidad total de muchos gobiernos internacionales

Netanyahu está cometiendo crímenes de guerra: no solo está bombardeando a la población civil, la está encerrando para que muera de hambre. Y, a pesar de eso, todavía no se ha podido votar en la Unión Europea la suspensión del acuerdo de asociación con Israel. Han dicho que posponen la votación hasta septiembre para seguir observando.

¿Cuántos niños muertos tienen que ver para valorar que Israel está violando los acuerdos? La ayuda humanitaria está en la frontera y también hemos visto cómo muchos palestinos han sido asesinados mientras iban a buscar comida. Es una humillación. Hemos visto vídeos de soldados israelíes diciendo que matarlos es como un juego. Violar los derechos humanos es lo más normal para ellos.

Más allá de abrir el corredor humanitario, ¿qué otros objetivos persigue la flotilla?

Es un acto de denuncia contra la complicidad y contra la ocupación y colonización de Palestina. La solución siempre ha sido, es y será política. Palestina no ha sufrido una emergencia humanitaria: no es un terremoto, no es un volcán. No es una situación natural y no se trata de rescatar a la población. Este desastre lo han generado personas, un gobierno que comete crímenes. Por eso la ayuda humanitaria tiene que entrar, pero lo más importante es que se detenga la línea de actuación de Israel a través del boicot.

La ayuda humanitaria debe entrar en Gaza, pero la solución al genocidio es y será política

¿Cree que, desde que la ONU declaró Gaza en estado de hambruna, la comunidad internacional ha empezado a reaccionar? ¿O sigue con la venda en los ojos?

¿Quizás hay alguna noticia que no he visto esta mañana? ¿Se han detenido los bombardeos?

No…

Pues ya está. Lo que no se puede entender es cómo los gobiernos del mundo actual no son capaces de detener un genocidio e imponer sanciones de verdad. ¿Qué le da derecho a Israel a actuar así, a devaluar la vida de las personas que viven en Palestina? No hay consecuencias.

¿Cómo percibe el pueblo de Gaza este tipo de misiones?

Una de las principales motivaciones para seguir organizando todo esto son los mensajes que nos llegan desde Gaza. Nos llaman y nos envían constantemente mensajes de apoyo, vídeos… La única esperanza que tiene la población gazatí es el aumento de la presión pública para que haya un cambio político.

La única esperanza de la población de Gaza es el aumento de presión pública para que haya un cambio político

¿Cómo se desarrollará el viaje? ¿Los barcos viajarán todos juntos? ¿Cómo se comunicarán con el exterior?

Hemos instalado en todos nuestros barcos sistemas de seguridad y conexión a Internet para mantener la comunicación entre nosotros. Saldremos juntos de cada puerto, ninguno viajará solo. Las embarcaciones saldrán, en primer lugar, de Barcelona y se dirigirán hacia aguas internacionales cerca de Túnez. Allí nos encontraremos con otros compañeros que también habrán zarpado el 4 de septiembre. Después también nos reuniremos con otros barcos que habrán salido de Italia y otros puertos europeos.

¿Será posible llegar a Gaza?

Si no lo intentamos, seguro que será imposible. Tenemos que seguir y no parar. Si no es esta vez, será la siguiente.

¿Qué respuesta esperan por parte de Israel, en cuanto se acerquen a la Franja?

Un gobierno que es capaz de matar a más de 60.000 personas, causar cientos de miles de heridos y dejar que la población muera de hambre, es capaz de todo. Funciona a base de sangre. Intentan promocionar al gobierno israelí como el más democrático de Oriente Medio, pero en nuestra historia moderna nunca se había visto algo así. Crímenes en directo contra población civil, periodistas, médicos, profesores, voluntarios… Teniendo en cuenta esta realidad, solo podemos esperar que Israel siga actuando de la misma manera.

¿Qué pasó con otras flotillas como Conscience o Madleen?

El gobierno israelí interceptó ilegalmente los barcos en aguas internacionales cuando se acercaban a la costa palestina. Secuestraron a los participantes y confiscaron las embarcaciones. Actúan como piratas.

¿Qué riesgos implica ser un activista propalestino?

Todo. Lamentablemente, hacer este trabajo de defensa de los derechos humanos y la justicia no solo tiene un coste en Israel. Una de las cosas más significativas es que no puedes entrar en Palestina porque seguramente te deportarán. Pero últimamente también están creciendo en Europa movimientos que criminalizan la solidaridad con el pueblo palestino. Hemos visto cómo en Inglaterra, Alemania o Francia se han criminalizado organizaciones propalestinas. Es un indicio muy peligroso porque significa que los movimientos sociales, a la hora de organizarse y actuar frente al fracaso de las administraciones, también pueden ser atacados.

Últimamente están creciendo en Europa movimientos que criminalizan la solidaridad con el pueblo palestino

Todo. Lamentablemente, hacer este trabajo de defensa de los derechos humanos y la justicia no solo tiene un coste en Israel. Una de las cosas más significativas es que no puedes entrar en Palestina porque seguramente te deportarán. Pero últimamente también están creciendo en Europa movimientos que criminalizan la solidaridad con el pueblo palestino. Hemos visto cómo en Inglaterra, Alemania o Francia se han criminalizado organizaciones propalestinas. Es un indicio muy peligroso porque significa que los movimientos sociales, a la hora de organizarse y actuar frente al fracaso de las administraciones, también pueden ser atacados.

En Gaza han muerto más de 60.000 personas. ¿Cree que algún día se juzgarán estos hechos?

Los tienen que juzgar. No quiero un mundo para mis hijos en el que se haga esto y no haya consecuencias. Nosotros no solo estamos haciendo una misión para ayudar a Palestina, estamos trabajando para construir un movimiento de solidaridad global, que tiende puentes con todas las luchas y lucha conjuntamente contra la represión. La flotilla es el primer paso, pero seguiremos adelante. Hemos conseguido que 44 países se impliquen en la organización. Eso significa que es un espacio colectivo de unidad que abre las puertas a todas las entidades de todo el mundo. Hoy Palestina es el eje central de la lucha contra el colonialismo que quiere hacer uso de los recursos de los pueblos oprimidos.