Page 10 of 13
1 8 9 10 11 12 13

Entrevista a Juan de Vicente Abad: «Promover la ética del cuidado es la mejor inversión para generar relaciones sanas y positivas en la comunidad educativa»

Por: El Diario de la Educación

La convivencia positiva en los centros es una de las piezas clave para su buen funcionamiento. Es una oportunidad de aprendizaje continua y de participación del alumnado en la toma de decisiones y la búsqueda de soluciones. Hablamos con Juan de Vicente Abad sobre algunas de sus claves.

Juan de Vicente Abad es una de esas personas referente, desde la orientación educativa, del trabajo bien hecho en un centro de secundaria. Lleva años demostrándolo desde el IES Miguel Catalán, un centro de Coslada (Madrid) que lleva también años siendo un referente en el aprendizaje-servicio, con proyectos que comenzaron ya a despuntar consiguiendo, por ejemplo, el récord de donaciones de sangre de la localidad.

La participación del alumnado, tanto en la conivencia de la comunidad escolar como en la vida del territorio en el que se inscribe el instituto, es una de las claves, si no la más importante, del éxito tanto ed Juan Vicente como del propio centro educativo.

Hace años que usted es referente en la gestión de conflictos, como lo es el IES Miguel Catalán. ¿Cuál es la clave?

El IES Miguel Catalán (Coslada) es un centro educativo que lleva muchos años implicado en un proceso de reflexión-acción. No dejamos de formularnos preguntas que nos ayudan a mejorar la calidad de la convivencia y los procesos de aprendizaje de todo el alumnado. Nos guía la idea de un centro que pueda promover la excelencia (la posibilidad de que todo el alumnado aprenda y pueda hacerlo desarrollando al máximo todas sus capacidades) y la equidad (que el punto de partida diferente de cada alumno o alumna no le condicione en su proceso de aprendizaje).

En convivencia comenzamos preguntándonos cómo podíamos organizar el centro para mejorar la calidad de las relaciones entre la comunidad educativa, de forma que todo el mundo pudiera sentirse seguro y establecer relaciones sanas con los iguales. Y esta pregunta nos hizo apostar por la participación de la comunidad educativa en todas las fases de la gestión de la convivencia: el establecimiento de normas, la gestión de los conflictos, la observación de la convivencia y la implementación de medidas preventivas. Descubrimos cómo la participación genera sentimiento de pertenencia y vincula al alumnado con el centro, cómo crear una estructura de alumnado que observa la calidad de la convivencia en cada clase es imprescindible para detectar cualquier caso de trato malo y es el mejor camino para que no se produzcan situaciones de acoso escolar, y cómo promover la ética del cuidado es la mejor inversión para generar relaciones sanas y positivas en la comunidad educativa.

Con el tiempo, nos hemos formulado más preguntas que hacen referencia a la convivencia como objeto de aprendizaje ¿Qué competencias queremos que adquieran nuestro alumnado en relación a la convivencia y los conflictos? ¿Cómo, cuándo y quiénes podemos llevar a cabo el aprendizaje de dichas competencias? Y estas preguntas nos han ayudado a concretar y definir objetivos de aprendizaje para todo el alumnado relacionado con la autoconciencia, la autogestión, la conciencia de las demás personas, las habilidades personales o la capacidad para tomar de decisiones de forma ética.

Así mismo, hemos ido implementando prácticas como las conversaciones restaurativas o los círculos de diálogo que nos han dado una dimensión muy preventiva de la convivencia, y nos han ayudado a mejorar el sentido y el procedimiento de las técnicas de resolución de conflictos.

Quizá la clave que hace que el IES Miguel Catalán sea un referente en convivencia, tiene mucho que ver con una actitud muy compartida de reflexionar de forma permanente sobre la realidad, y de mejorar nuestra práctica docente a partir de estas reflexiones. Mientras nos sigamos haciendo preguntas para mejorar la convivencia y los procesos de aprendizaje de todo el alumnado, seguiremos creciendo y mejorando.

Con respecto a mí, tengo la suerte de vivir desde primera fila este proceso de reflexión y de acción, y además comparto reflexiones y acciones con muchos otros docentes, fundamentalmente en torno a la asociación Convives.

En el centro habéis trabajado incansablemente por el aprendizaje-servicio. ¿Qué ha pasado desde que empezasteis a aplicar esta práctica?

La exitosa apuesta por la participación en convivencia nos llevó a preguntarnos cómo podíamos transferir esta fórmula al resto de aprendizajes de las materias. Si en convivencia hemos situado al alumnado en el centro porque realmente tiene un papel activo, nos preguntamos: ¿por qué no situamos también al alumnado en el centro del resto de los procesos de aprendizaje?

Y esta pregunta nos ha inspirado diferentes respuestas, una de las cuales es el aprendizaje servicio. Nuestra estrecha vinculación con la localidad de Coslada, nuestro interés por abrir el centro al entorno, nuestra idea de formar al alumnado como personas capaces de comprometerse y transformar su comunidad y la idea de que los aprendizajes se producen en muchos más sitios que en la escuela y que esta puede tener un papel clave en dar sentido y vincular todos esos aprendizajes que realiza el alumnado, nos han llevado a realizar proyectos de aprendizaje servicio. Desarrollamos proyectos que vinculan lo que aprendemos en las aulas con otros contextos de aprendizaje y acción que transforman y mejoran la calidad de vida de las personas. Con estos proyectos hemos descubierto que tener la mejora del entorno como referente de los aprendizajes es un verdadero éxito, ya que aumenta las posibilidades de aprendizaje desarrollando todas las competencias que queremos para nuestro alumnado, genera motivación en chicas y chicos, potencia las redes sociales que construyen una comunidad, y transforma nuestra centro educativo y nuestra localidad.

Con el paso de los años, vamos desarrollando proyectos con los que el alumnado aprende más, que responden mejor a la diversidad de ritmos y necesidades de aprendizaje, y que inciden de manera más eficaz en nuestro entorno. Cada vez comprendemos mejor el sentido que tiene que el alumnado esté en el centro y tome decisiones sobre sus propios procesos de aprendizaje.

¿La convivencia del alumnado es una de las claves a la hora de resolver conflictos?

La convivencia es la vida que compartimos con las demás personas. La familia tiene un papel clave en el aprendizaje de la socialización, y la escuela cumple igualmente una función socializadora. Aprender a convivir es, por tanto, una de las tareas centrales que debe estar en la agenda de cualquier centro educativo.

Aprender a convivir debe ser un objetivo explícito e intencional que debe ser definido y concretado en cada escuela. ¿Qué vamos a hacer para mejorar la convivencia en nuestro centro o qué vamos a hacer para que nuestro alumnado aprenda a relacionarse de una manera sana o para que aprenda a resolver conflictos? Hablar de convivencia es hablar de un objetivo educativo ineludible.

Uno de los primeros aprendizajes que debe hacer el alumnado cuando trabaja en convivencia es tener en cuenta que los conflictos son inherentes a las relaciones humanas. Una buena relación no es aquella que no tiene conflictos, sino la que sabe qué hacer con ellos cuando surgen, la que tiene recursos para afrontarlos de una forma eficaz. Debemos, por tanto, aprovechar cada conflicto que surge en la escuela para enseñar cómo gestionarlos de manera adecuada. Cada uno es una oportunidad de aprendizaje y para mejorar la calidad de nuestras relaciones. Aprender a expresarse en primera persona, a escuchar y empatizar con la otra persona, comprender qué impacto tiene en los demás mi comportamiento, o aprender a buscar alternativas respetuosas con los demás a mis emociones o necesidades, son algunos de los aspectos que podemos entrenar cuando gestionamos conflictos. No hacerlo es perder la oportunidad de aprender y eso es algo que no debería pasar en ninguna escuela.

¿Las familias son clave en todo esto? ¿Cómo habría que implicarlas?

Las familias son un elemento clave en el aprendizaje de los niños y niñas. Nuestra mente no está organizada según el sitio en el que aprendimos las cosas. Tenemos constantemente experiencias que nos ayudan aprender y unas se producen en la escuela, otras en la familia, otras en el tiempo de ocio con los iguales o jugando a la Play. Los humanos tenemos una gran capacidad de aprendizaje.

La gran oportunidad que aporta la escuela en ese proceso de aprendizaje es la posibilidad de explicitar y concretar qué podemos aprender. Cómo definir el contexto de aprendizaje para que genere verdaderas oportunidades para aprender a convivir de una manera eficaz. Y este proceso de toma de decisiones debe ser compartido con las familias para que tenga todo su sentido y valor.

En los últimos años, o tal vez siempre ha sido así, parece que los problemas de acoso escolar, más con la mediación de la tecnología, se han recrudecido. ¿Es así?

Con respecto al acoso escolar, tenemos que tener en cuenta que se trata de un concepto que hace referencia a las relaciones que se producen entre los iguales, definidas por la intencionalidad de hacer daño a otras personas en relaciones asimétricas, donde las hay que se vinculan desde el dominio, y otras que están sometidas y en las que hay una reiteración de este tipo de conductas de abuso.

Las redes sociales son un medio más a través del que se realizan conductas de acoso, pero tienen algunas características que hacen que sea un medio especialmente peligroso. Por un lado, permiten acosar de forma anónima, con lo que se puede crear una sensación de impunidad. En segundo lugar, puede difundirse la conducta de acoso entre muchísima gente teniendo un impacto mucho mayor sobre la víctima. Además, facilita que los espectadores difundan la información que genera el acoso y, con que esa conducta abusadora se haga una sola vez, puede tener un efecto continuado en el tiempo.

Las escuelas debemos abordar el acoso como aspecto clave del aprendizaje y debemos educar en una ciudadanía digital responsable. Tomar la decisión de no contribuir a difundir una información que pueda herir la dignidad de una persona es algo que podemos y debemos enseñar y hacer aprender en las escuelas. No hacerlo es renunciar a educar en el respeto y a utilizar de forma responsable las redes sociales, además de educar en la vulnerabilidad a nuestras niñas y niños.

Pedro Uruñuela, otro de los grandes expertos en convivencia, insiste siempre mucho en intervenir con todas aquellas personas que ven situaciones de acoso o violencia y que no se atreven a actuar o a decírselo a los adultos. ¿Cómo crees que habría que acometer esta intervención?

Para comprender el fenómeno del acoso escolar debemos mirar a tres actores clave: las personas que generan situaciones de acoso, las que lo sufren y las que observan y son espectadoras de dichas conductas. La manera más rápida, eficaz y directa de intervenir es formar al alumnado para que sea observador activo que pueda detectar las situaciones de acoso desde el minuto uno, y que pueda intervenir para que no se siga produciendo. Las chicas y los chicos comprenden muy fácilmente que observar pasivamente es formar parte del problema, es sostener una injusticia, mientras que detectar y parar es evitar la injusticia y ser parte de la solución.

Pedro Uruñuela es una de las personas que más sabe sobre convivencia escolar en nuestro país y ha contribuido a formar a muchos como alumnado ayudante capaz de entrenar su mirada para interpretar situaciones de trato malo, capaz de parar esas situaciones y de tejer redes de apoyo social en torno a personas vulnerables. Y este es el camino más eficaz para comprometer al alumnado con la calidad de la convivencia en sus centros educativos y para parar el acoso escolar.

Las escuelas deben buscar fórmulas para prevenir el acoso basadas en la participación del alumnado, en el aprendizaje de este fenómeno y sobre las formas de abordarlo, y en la creación de estructuras sostenidas por adultos destinadas a observar de forma activa la calidad de la convivencia en cada aula y en el centro escolar.

¿Los problemas de convivencia se han intensificado en los últimos años? ¿las intervenciones que hay que realizar deben ser diferentes?

No creo que los problemas de convivencia se hayan intensificado en los últimos años. La escuela siempre se ha enfrentado a retos a los que ha tenido que dar respuesta. Por ejemplo, el reto de la incorporación de alumnado con necesidades especiales en la modalidad educativa ordinaria que se desarrolló en la LOGSE nos hizo preguntarnos: ¿Cómo podemos lograr centros con una buena convivencia en los que existe un alumnado con necesidades educativas tan diversas y en el que se incorpora alumnado con una mayor vulnerabilidad social? O el reto de la inmigración que nos hizo preguntarnos: ¿Cómo podemos generar una convivencia de calidad entre el alumnado culturalmente tan diverso? No todas las respuestas nos han ayudado a mejorar la calidad de nuestras escuelas pero algunas sí que han dado en el clavo, y hoy tenemos escuelas más interesantes para aprender en diversidad.

Las preguntas que hoy nos plantea el feminismo o la ecología o las redes sociales también nos deben ayudar a pensar cómo la escuela debe ser un lugar donde todos tengan el máximo de oportunidades de aprendizaje, se aprenda a respetar el medio ambiente, o se enseñe una ciudadanía digital responsable.

Las intervenciones en convivencia deben seguir buscando la inclusión de todo el alumnado, partir de la idea de que la convivencia se aprende y debe ser objeto de trabajo y, por tanto, de planificación en los colegios. Debe partir de los principios restaurativos que plantean que debemos ser duros con las conductas que no queremos en las escuelas, y respetuosos con las personas que las ejercen, con la finalidad de que aprendan a relacionarse de una manera sana e igualitaria. Deben tener en cuenta a las personas que se sienten solas o maltratadas, deben dedicar una parte muy importante de su tiempo a la prevención de los conflictos dando oportunidad para que el alumnado hable y reflexione sobre las convivencia, deben promover la reflexión moral entre el alumnado y entrenar en las competencias socioemocionales, entre las que se incluye la capacidad para gestionar conflictos.

¿Has aplicado las técnicas utilizadas en tu centro para crear el reto ‘Resolución de Conflictos’ del programa ‘Aprendemos Juntos’ de BBVA?

El curso online de resolución de conflictos que he desarrollado en el proyecto ‘Aprendemos juntos’ es una iniciativa que he asumido de forma personal, en este sentido es algo independiente de mi actividad profesional en el IES Miguel Catalán.

En el desarrollo de este proyecto planteo aspectos clave de la resolución de conflictos que he ido aprendiendo a lo largo de los últimos 25 años. Mi experiencia dentro del colectivo de educación intercultural Amani, mi trayectoria como formador experto en convivencia escolar, mi pertenencia a la asociación Convives y, desde luego, mi actividad como orientador de Secundaria, son los campos en los que he reflexionado, experimentado y aprendido prácticamente todo lo que sé sobre convivencia escolar.

El curso de resolución de conflictos sintetiza gran parte de este aprendizaje y es una propuesta educativa magnífica, que cubre un hueco realmente necesario en educación. Desde mi punto de vista, el gran atractivo de esta propuesta es que no solo se trabajan las claves para abordar los conflictos en las escuelas, desde su dimensión más preventiva y de creación de grupo hasta diferentes técnicas de resolución, pasando por la comprensión de la naturaleza de los conflictos o las habilidades de comunicación, sino que muestra cómo se puede implementar con alumnado en las aulas. Aporta por tanto, un qué necesario, pero también un cómo sencillo y asumible por cualquier docente. En cada uno de los catorce videos que conforman la propuesta, puede comprenderse el sentido que tiene el contenido propuesto y, al tiempo, cómo puede ser aplicado dicho contenido.

La gran virtud de este material es su veracidad. Hemos trabajado con 40 chicos y chicas diversos, les hemos planteado situaciones y hemos recogido sus reflexiones tal cual se han producido. No hay nada guionizado y todo responde a la frescura de un pensamiento espontáneo y compartido. Después de escuchar y ver todo el material, es fácil tener una visión optimista de nuestra juventud.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/extraeducacion/2019/12/12/juan-de-vicente-abad-promover-la-etica-del-cuidado-es-la-mejor-inversion-para-generar-relaciones-sanas-y-positivas-en-la-comunidad-educativa/

Comparte este contenido:

Escuela y ruralidad: docentes en la encrucijada social de construcción de paz

Por: El Diario la Educación

Las y los docentes del medio rural colombiano han vivido décadas en la compleja situación de dar respuesta al derecho a la educación de miles de niñas y niños inmersos en un larguísimo conflicto armado. Un informe ha estudiado este proceso tan complejo.

En Colombia no existe una manera única de ejercer la docencia, los rostros múltiples de maestros y maestras se extienden por la geografía, cada sujeto va construyendo una manera, unas prácticas y unos saberes que se convierten en parte constitutiva de la escuela y que se instalan en la vida cotidiana de quienes interactúan en ella. Decir esto es válido para cualquier contexto del mundo, sin embargo, en Colombia, este proceso humano se ve constantemente puesto al límite por diferentes agentes ordenadores del espacio -no siempre legales o legítimos- que ponen a la escuela, y a los sujetos que en ella habitan, en el medio de la disputa por el control del territorio. Esto es precisamente lo que estudia el informe que recién publica la Fundación Compartir sobre Docencia Rural en Colombia: Educar para la Paz en medio del Conflicto Armado.

El informe se pregunta cuál es el papel que han desempeñado las escuelas en la producción y reproducción de órdenes sociales en los territorios que han estado en medio del conflicto armado. Y, en ese mismo sentido, indaga sobre el impacto del conflicto armado en la configuración de las aulas, en los discursos y las prácticas pedagógicas.

Para descifrar estas relaciones se construyeron diálogos con maestros y maestras de quince instituciones educativas provenientes de las regiones y municipios priorizados para la puesta en marcha de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial contemplados en los Acuerdos de Paz de 2016. Se consideró que fueran territorios en los que maestros y maestras presentaron más afectaciones por el conflicto armado, según los datos del Observatorio de Memoria y Conflicto del Centro Nacional de Memoria Histórica. El estudio reflexiona sobre la manera en que maestras y maestros habitaron la escuela en medio de la confrontación, construyeron negociaciones para garantizar el derecho a la educación de niños y niñas y mediaron para la vida.

Buena parte de los hallazgos del estudio se centran en comprender algunas características de la situación docente en territorios rurales. Por una parte, se evidencian los elementos normativos que regulan el oficio y sus impactos de desigualdad:

  • Tres decretos diferentes vinculan y regulan la profesión docente, con desiguales condiciones laborales, de remuneración y de oportunidades para la formación en servicio (Decretos 2277 de 1979, 1278 de 2012 con estatuto profesional y 804 de 1995 sin la definición de un estatuto docente).
  • La formación inicial de maestros y maestras es muy diversa. La mayoría de los nombramientos del Decreto 804, que vincula a docentes para territorios interétnicos, afecta a profesionales licenciados (51,09%), mientras que la del 1278, vía concurso docente, es para bachilleres (36,85%) nombrados en las plazas que son declaradas desiertas. Por tanto, es posible suponer que se encuentran en la ruralidad dispersa y profunda.
  • Según los hallazgos del informe, la mayoría del ejercicio docente en la ruralidad es de la escuela primaria: el 60,52% de maestros y maestras están vinculados al área de enseñanza primaria.
  • La remuneración está regulada por el decreto de vinculación, no por la formación o desempeño de los docentes.
  • Mientras que el promedio de los docentes del Decreto 804 ganan $1.560,000, aquellos que están vinculados con el 1278 reciben en promedio $3.276,382. Es decir, unos tienen una remuneración casi del doble que los otros.

Por otra parte, se presentan las necesidades de formación que maestras y maestros identifican y señalan como prioritarias:

  • Formación en habilidades socioemocionales para dar respuestas pertinentes a las necesidades de sus estudiantes.
  • Formación en habilidades para el desarrollo de una propuesta educativa flexible.
  • Formación en habilidades para el manejo de tecnologías.
Preparación de la huerta escolar – Institución Educativa El Rosario – Vereda El Rosario – Caldono, Cauca

Por último, el estudio incluye recomendaciones de política para el desarrollo de directivos y de docentes en la ruralidad:

  • Incorporar procesos de formación (inicial y en servicio) específica y pertinente para la ruralidad.
  • Garantizar la protección y atención psicosocial para docentes, así como, la formación en habilidades socioemocionales.
  • Construcción de un plan de reconocimiento para quienes se desempeñan en escuelas rurales, orientado a fomentar el arraigo de maestras y maestros por el territorio a partir de estímulos académicos, económicos y simbólicos.

Lo que está de fondo en el informe son dos aspectos fundamentales. El primero referente a la encrucijada social y humana en la que se encuentran los sujetos y los saberes que constituyen la escuela en territorios rurales afectados por el conflicto armado. El segundo alude a la tensión entre estar enfrentados a realidades adversas y, aún así, hacer de la escuela un espacio de construcción de paz, de acogida y encuentro para la vivencia plena de los derechos y el florecimiento del espíritu humano. Una escuela donde el ser y el saber hacer de maestras y maestros dan respuesta a lo que Meirieu denomina el proyecto indisociable de la transmisión de los conocimientos, el reconocimiento de la alteridad, la formación de ciudadanía, la construcción del bien común y la capacidad de pensar por uno mismo.

Institución Educativa Almirante Padilla. Padilla, Cauca

Referencias

Bautista, M., González, G. (2019). Docencia Rural en Colombia: Educar para la Paz en medio del Conflicto Armado. Fundación Compartir. Bogotá. Recuperado de https://www.compartirpalabramaestra.org/documentos/invescompartir/estudio_docencia-rual-en-colombia-educar-para-la-paz-en-medio-del-conflicto-armado.pdf

Meirieu, P. (2005). Carta a un joven profesor: Por qué enseñar hoy. Editorial GRAÓ. Barcelona

Fuente: https://eldiariodelaeducacion.com/educacionesenmovimiento/2019/11/13/escuela-y-ruralidad-docentes-en-la-encrucijada-social-de-construccion-de-paz/

Comparte este contenido:

Cuestionamiento, dificultad para alcanzar ciertos puestos y falta de corresponsabilidad, problemas para las mujeres en la universidad

Por: Diario de la Educación

Las mujeres son mayoría en la universidad pero están infrarrepresentadas en cargos de responsabilidad. Seis rectoras discuten en una mesa redonda cuáles son las causas.

Las mujeres son mayoría en la univeridad pública española. Son más alumnas y más profesoras, tienen cierta paridad en puestos de responsabilidad intermedios pero, cuando uno se asoma a los rectorados descubre lo pocas que son.

Hace unos días, la Fundación CyD y Mujeres&CIA reunieron a seis de las rectoras españolas en una mesa redonda para hablar del liderazgo de las mujeres en la universidad. Seis mujeres de dilatada carrera profesional, tanto como investigadoras como docentes, que un día decidieron dar el salto a la lucha por el rectorado.

Primer enemigo, la cátedra

La dificultad principal para que las mujeres hagan carrera en la universidad es la falta de corresponsabilidad de muchos hombres con respecto a los cuidados y la crianza. Las dobles y triples jornadas pesan mucho en los claustros universitarios.

Para poder plantearse una ser rectora de la universidad, lo primero es conseguir una cátedra. Y para ir ganando los puntos suficientes, hay que investigar. Y para investigar hay que dejar de lado la vida personal y familiar, al menos, en parte. Requiere de mucho tiempo de dedicación.

Eva Aleón es rectora de la Universidad Jaume I de Castellón. «No quiero hablar de conciliación, sino de corresponsabilidad», aseguró durante su intervención en la mesa redonda. Si hay tan pocas rectoras en España «no es porque no sepamos, sino porque el camino es largo y costoso». Más para ellas que para ellos.

«Es una carrera que se nutre de los espacios personales», aseguraba Mª Antonia Peña, rectora de la Universidad de Huelva. «Son los hombres los que han de empezar a criar a los hijos».

Mª Vicenta Mestre, rectora de la Universidad de Valencia lo ve de forma similar, pero «cuando la mujer está sola, o cría o cuida a otras personas, lo tiene más difícil. Primero hay que ser catedrática; la brecha está ahí».

«Para ser rectora, explicaba María José Figueras, rectora de Universidad Rovira i Virgili, hay que ser catedrática y en mi universidad hay un 27% de ellas. Es más probable que llegue al rectorado un hombre. A lo que se suman los años de carencia durante la crisis en los que no ha habido promoción a cátedras».

Tenemos que creer que podemos

«Para ser rectora hay que presentarse y no lo hacemos». Pilar Aranda es la rectora de la Universidad de Granada. Para ella, una de las dificultades de esto para por la falta de visibilidad de las mujeres en la universidad, a lo que se suma también las dudas y las desconfianzas o inseguridades personales, que no son pocas.

Lo resumía Figueras, rectora de la Rovira i Virgili al contar que cuando unos antiguos colaboradores le plantearon que debía presentarse al rectorado, tardó dos meses en tomar la decisión. Primero confianza y, después, no dejarse cnvencer por sentimietos de culpa relacionados con el más que probable abandono (o semi abandono) de la vida personal que a partir de ese momento hay que asumir.

«Yo no he tenido sentimiento de culpa, comentaba Vicenta Mestre. Ha hecho carrera de investigación y docencia, pero también de gestión. He sido decana, vicerrectora de estudios, de profesorado… no tenemos esa culpa porque he contado con mi marido. Existe esa marca social. Necesitamos hombres feministas, cómplices».

Aunque no solo eso. Para Rosa Aguilar, rectora de la Universidad La Laguna, «el problema son los estereotipos. El universitario es un entorno de hombres y para hombres. Te cuestionan prácticamente todo».

A esto habría que sumar, según explicaron varias de ellas, que en muchos momentos el trabajo de las investigadoras queda invisibilizado, o que los contratos relacionados con la transferencia de conocimiento quedan copados también por los hombres. Comentó la rectora de la Universidad de Valencia, que «solo el 6% de los contratos de transferencia» son con equipos liderados por mujeres.

En definitiva, la universidad no es ajena a las dinámicas habituales en otros entornos sociales. Las mujeres quedan relegadas a ciertas áreas del conocimiento que, además, tienden a ser menospreciadas, minusvaloradas. Además, tienen que asumir dobles y triples jornadas laborales, o renunciar a parte de su vida personal y esforzarse el doble para llegar al mismo lugar.
Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/blog/2019/11/22/cuestionamiento-dificultad-para-alcanzar-ciertos-puestos-y-falta-de-corresponsabilidad-problemas-para-las-mujeres-en-la-universidad/
Comparte este contenido:

Michael Fullan: «La colaboración mejora todos los resultados, de los docentes y el alumnado»

Por: Diario de la Educación

La colaboración entre docentes, con las familias, entre centros educativos y entre las propias regiones es la mejor manera de mejorar el sistema educativo. Este, según el canadiense, debe proveer a sus integrantes, la condiciones necesarias para poder realizar este cambio.

Michael Fullan es un hombre de 79 años lleno de energía. Ha estado en España un par de días en los que ha impartido sendas conferencias sobre la reforma educativa en la que trabajó, a partir de 2003, en Ontario (Canadá). Una reforma que mejoró sustancialmente los resultados en comprensión lectora y matemáticas y en la tasa de graduación en secundaria.

Una cosa está clara, tras escuchar a este investigador dedicado hoy a la puesta en práctica de sus métodos en ocho países diferentes. La colaboración entre docentes es un factor decisivo en la mejora de los resultados, tanto de estos (así como su satisfacción profesional) como del alumnado y de todo el sistema. Una colaboración basada en la comunicación entre las diferentes partes; también en la comunicación, pues ambas consiguen dar coherencia a las actuaciones que se llevan a cabo.

Para incidir en el sistema educativo, según Fullan, hay una serie de impulsores, de palancas, que resultan inadecuados y que suelen ser habituales en muchos países. Entre ellos se encuentran los exámenes, o ligar los salarios docentes a los resultados del alumnado, o el trabajo individual de cada profesor.

En cuanto al salario docente, Fullan explicó que «hay que pagar bien, pero hay que ir más allá, al desarrollo de sus capacidades, puesto que el salario no es una motivación suficiente».

Frente a esto, Fullan defiende la necesidad de que el profesorado trabaje de manera conjunta, colaborando unos con otros para que así el conjunto aprenda. Según explicó, es importante la formación inicial docente, pero lo es más la continua, trabajar con grupos pequeños de profesores que colaboran entre sí para mejorar su acción.

El objetivo es que el profesorado trabaje junto, en red, dentro de los centros y que estos, a su vez, puedan trabajar con otros colegios e institutos para crear redes de centros.

Fullan explicó los ocho pasos que realizaron en Canadá de 2003 a 2013 para conseguir que el país saliera de su estancamiento en comprensión lectora, matemática y en la tasa de graduación. Lo primero fue elegir un número pequeño de objetivos ambiciosos; poner el foco en el liderazgo y el desarrollo de las capacidades docentes; se estableció una Oficina de Lecto-escritura y Matemáticas; se movilizó la evidencia entre los docentes de maneras no punitivas; realizaron acciones estratégicas para involucrar a todos los niveles del sistema educativo; fueron aprendiendo del propio sistema (de sus protagonistas) según se implementaban las políticas; en buena medida, durante el proceso fue surgiendo un liderazgo intermedio (entre docentes y direcciones escolares), y, finalmente, hubo inversión de recursos. Tras este tiempo, la mejora de los resultados fue evidente, por ejemplo, en la tasa de graduación,que pasó de un 68% del alumnado a un 88%.

La clave, o parte de ella, se encuentra en la autonomía docente. Pero no una autonomía entendida como trabajo aislado del docente, sino una «autonomía conectada» que tiene en cuenta al grupo de profesores, que habla entre sí, que se comunica y tiene coherencia en sus acciones. «La colaboración mejora todos los resultados», asegura Fullan. «La autonomía no es aislamiento; si estás aislado como docente, te deterioras. Los neurocientíficos lo saben: las personas solas no viven tanto como el resto. Los mismo ocurre con los docentes. Los que trabajan solos se marchitan».

Fullan insistió en que es necesario establecer alianzas entre docentes y familias; pero que también las escuelas deben colaborar entre sí y, por encima, la colaboración debe extenderse a las diferentes regiones del país (los 72 distritos de Canadá o las 17 comunidades autónomas en España). «Y finalmente todo el sistema; un sistema que debe proveer las condiciones necesarias para que la colaboración tenga lugar».

Además de un trabajo conjunto y colaborativo entre el profesorado, parte del esfuerzo pedagógico del proyecto puesto en marcha en Ontario en su momento y, ahora, en otros ocho países por parte del grupo de Michael Fullan, pasa porque buena parte del trabajo que realiza el alumnado en su proceso de aprendizaje, sea con metodologías más activas, investigativas, con más trabajo por proyectos, en definitiva. Proyectos, además, que tienen un impacto directo en la comunidad escolar. Muy similar, en cierta forma, a lo que se desarrolla en los proyectos de aprendizaje-servicio.

Es lo que Fullan y su grupo ha llamado deep learning, aprendizaje profundo. «Que sea atractivo, que utilice la tecnología y que esté centrado en la resolución de un problema», explica.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/blog/2019/11/27/michael-fullan-la-colaboracion-mejora-todos-los-resultados-de-los-docentes-y-el-alumnado/

Comparte este contenido:

Una universidad de preguntas, juegos, experimentos y conversaciones

América del Sur/Colombia/03-11-2019/ Autor y Fuente: eldiariodelaeducacion.com

Por: El Diario de la Educación

¿Cómo son los sueños de las personas ciegas? ¿Por qué brillan las luciérnagas? ¿Por qué hay ricos y pobres? Son preguntas de niñas y niños, como las que han encendido en los científicos la pasión para transformar el mundo investigando. A través de preguntas nos hemos acercado al conocimiento de la realidad, de los demás y de nosotros mismos, y con preguntas se han creado las universidades de los niños en diversos países. Estos programas invitan a fortalecer las ganas de aprender y a entrar en diálogo con diversos actores sociales y científicos.

¿Universidad de los niños? Sí, existen cerca de 400 programas en todo el mundo donde niñas, niños y jóvenes habitan los campus universitarios acompañados de docentes e investigadores para conocer cómo se construye el conocimiento. La inmersión en un ambiente universitario no solo les da herramientas para acercarse a la ciencia, también les demuestra que su manera de concebir el mundo es transformadora y que los adultos también pueden aprender de ellos.

Una de las universidades de los niños se encuentra en Medellín, Colombia. En esta ciudad latinoamericana se creó, en el año 2005, la Universidad de los niños EAFIT, un programa que transforma el conocimiento científico en experiencias de aprendizaje activo que fortalecen la curiosidad, despiertan el gozo intelectual y favorecen el pensamiento crítico en niñas, niños, jóvenes y mediadores. Su trabajo, basado en el juego, la experimentación, la conversación y las preguntas, ha sido reconocido con el Premio RedPop, otorgado por la Red de Popularización de la Ciencia y la Tecnología en América Latina y el Caribe.

El programa inició con varias series de talleres anuales, las cuales vinculaban a estudiantes de instituciones educativas públicas y privadas de Medellín con investigadores de la Universidad EAFIT en el marco de experiencias de juego, exploración y conversación en torno a preguntas formuladas por los mismos jóvenes. Con el tiempo, los talleres se han ampliado, no solo a niños y niñas, sino también a adolescentes, mediadores científicos y docentes de todos los niveles educativos. Además, se concibió la ciudad y la región como escenario amplio para el descubrimiento científico, de manera que la Universidad de los niños EAFIT también ha desarrollado proyectos de apropiación social del conocimiento en diversos municipios de Antioquia y Colombia.

En números, más de 21.000 personas han estado vinculadas al programa de manera esporádica y, de modo constante, 6.000 niños y jóvenes, 2.000 formadores, 371 instituciones de educación básica colombianas y 201 investigadores universitarios se han atrevido a salir de sus laboratorios, bibliotecas y oficinas para convertirse en comunicadores de ciencia para niños.

Sara Toro, después de participar por más de 5 años en el programa, cuenta que «la Universidad de los niños siempre ha sido una oportunidad de descubrir, de pensar, de imaginar, de crear y de soñar. A lo largo de los años aprendí a amar los días de encuentros, a descubrir un lugar donde puedo ser feliz. Aquí aprendí que hay más de una manera de descubrir las cosas, y que la primera palabra no es siempre la correcta. Aprendí que imaginar es abrir nuevos caminos para descubrir y que no preguntamos para encontrar una respuesta, sino para encontrar mil preguntas más».

Ahora bien, ¿qué aprenden los adultos involucrados en el programa? En principio, a escuchar a los niños y jóvenes, pero en el caso de los maestros escolares y estudiantes de pregrado, también a diseñar experiencias científicas para llevar a sus clases y, por qué no, a sus profesiones. En otras palabras, la Universidad de los niños EAFIT también forma comunicadores científicos, profesionales capaces de generar conversaciones, reconocer otras formas de saber y explorar herramientas pedagógicas para comunicar el propio.

Claudia Rodríguez Saldarriaga, docente del Colegio Santa Leoní Aviat de Medellín, afirma que participar en la Universidad de los niños «ha significado la posibilidad de cuestionar mis prácticas pedagógicas», un ejercicio que debe ser obligado para cualquier educador.

También hay desafíos. Uno de ellos es contribuir a la generación de una cultura científica fuerte, para lo cual existen obstáculos sobretodo en el contexto latinoamericano. Frente a esto, las universidades de los niños proponen un esfuerzo de largo aliento y presentan alternativas como la generación de contenidos para la popularización de la ciencia. En el caso de la Universidad de los niños EAFIT, se producen contenidos digitales para la Red de las Preguntas, la serie de radio ‘1, 2, 3 por la ciencia‘, la revista Catalejo, así como videos y contenidos digitales que buscan ampliar la incidencia del programa a través de su presencia en Internet.

En especial, la Red de las preguntas es un espacio digital donde se han recopilado más de 600 preguntas de niños y que se responden con la ayuda de expertos en temas que pueden ir desde el medio ambiente, los asteroides y el mundo microscópico hasta, el amor, las redes sociales y las relaciones humanas.

Curiosidad, preguntas, ganas de aprender y apertura mental son componentes comunes en las universidades de los niños. Ellas avivan el espíritu de explorador incansable y contribuyen a que la sociedad conozca cómo se produce el conocimiento con el cual se toman decisiones que la afectan de modo directo, como la destinación de los dineros públicos, la concepción de políticas para el desarrollo o la implementación de nuevas tecnologías. En últimas, las universidades de los niños ayudan, ¿por qué no?, a vivir. Como decía el poeta Antonin Artaud: «Vivir no es otra cosa que arder en preguntas».

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/educacionesenmovimiento/2019/10/24/una-universidad-de-preguntas-juegos-experimentos-y-conversaciones/

 

Comparte este contenido:

Aprendemos juntos: más de 100 entrevistas para involucrar a la sociedad en la educación

Por: El diario la Educación

El proyecto ‘Aprendemos Juntos’, creado por el BBVA, quiere impulsar la conversación sobre la educación con personas transformadoras y así dar nuevas herramientas al profesorado y a las familias.

La resolución de conflictos de forma pacífica es uno de los asuntos que más preocupa en el sistema educativo. Las aulas y los centros educativos son ambientes cada vez más complejos en los que se cruzan muchos intereses, vivencias y situaciones personales que, muchas veces, se convierten en pequeños polvorines que hay que atajar. La prevención de situaciones de acoso o violencia es el mejor arma de docentes y familias. Más allá de los castigos que puedan plantearse una vez ha ocurrida alguna situación complicada.

Pero en ocasiones, falta formación, tanto entre las familias como entre el profesorado, para hacer frente a estas dificultades, en muchos casos sobrevenidas.

Para ayudar a la comunidad educativa se puso en marcha el programa Aprendemos juntos, de la mano del BBVA. Hasta la fecha lo han desarrollado en tres vertientes diferentes. La resolución de conflictos, la inteligencia emocional y otro dedicado a aprender a hablar en público.

Las tres, además de desarrollarse con niñas, niños y jóvenes por cuatro expertos en diferentes ámbitos, desde la psicología, la comunicación y la educación, cuenta con materiales descargables para que docentes y familias cuenten con información y formación complementaria que desarrollar en casa y en el aula.

En palabras de José Luis Arbeo, responsable del programa Aprendemos juntos, «este proyecto educativo tiene dos objetivos muy claros: por un lado, estimular la conversación sobre cómo debería ser la educación en el siglo XXI. Por otro, ayudar a docentes y familias a preparar a los jóvenes en las competencias necesarias hoy en día».

Ya se han sumado 30.000 personas. La mitad, madres y padres. También más de 12.000 docentes han decidido apuntarse a este programa.

Juan Vicente Abad, docentes y orientador con tres décadas de experiencia ha sido quien ha desarrollado el curso sobre resolución de conflictos. Siempre bajo la premisa de la prevención. “En la vida siempre van a existir conflictos, es inevitable. Por eso, el único camino es aprender a gestionarlos”, asegura este profesor. Su curso, pensado para alumnado de ESO, pretende ofrecer herramientas para la prevención, el desarrollo de competencias socioemocionales y el conocimiento de técnicas de resolución como la escucha o el diálogo.

Junto a Juan Vicente Abad, también han participado en los cursos anteriores las psicólogas Silvia Álava Sordo y Ruth Castillo Gualda, para tratar sobre inteligencia emocional, y la comunicadora Aurora Michavila para enseñar a niñas y niños a hablar en público. «Temas que no se entrenan como asignaturas pero que son clave para la vida actual», asegura José Luis Arbeo, quien explica que, además de los tres tratados, habrá otros nuevos enfocados en el pensamiento creativo, la concentración o el aprendizaje colaborativo.

Cada uno de los curso se divide en una serie de vídeos en los que los diferentes protagonistas trabajan con el alumnado las distintas facetas de cada área. Además de esto, hay material descargable pensado para que las y los docentes puedan trasladar estas actividades al aula y otros materiales descargables para que las familias hagan lo propio en casa.

El programa Aprendemos juntos, además de estos cursos para familias y docentes, también desarrolla una vía pública, es decir, un acercamiento al resto de la sociedad con el que se pretende acercar al gran público la importancia de la educación.

Más de 100 entrevistas en vídeo

Desde astronautas a científicos, desde atletas a fotógrafas. Desde todos los rincones de la sociedad se puede reflexionar sobre la educación. Y eso es lo que impulsa el proyecto ‘Aprendemos Juntos’ con más de 100 entrevistas a expertos de todos los ámbitos para que compartan sus visiones diversas y llenas de nuevos aprendizajes.

Unos vídeos que se distribuyen en diferentes plataformas como YouTube, Facebook, Twitter o Instagram y que ya han alcanzado, en poco más de año y medio, las 500 visualizaciones.

A continuación, compartimos 20 de las entrevistas de este proyecto de educación de BBVA para dar nuevas herramientas, experiencias y conocimientos los profesionales de la educación y a las familias.

1. Jane Goodall, primatóloga: «Tenemos intelecto ¿Pero somos tan inteligentes?»

Está considerada como una de las mujeres científicas de mayor impacto en el siglo XX. Los ojos de Jane Goodall brillan al compartir sus historias de ayer, convertidas hoy en grandes lecciones de vida sobre la ciencia y la educación: «Sé curiosa y comete errores, sé paciente y no te rindas», repite esta mujer extraordinaria. Goodall es doctora en Etología por la Universidad de Cambridge y doctora ‘honoris causa’ por más de 45 universidades del mundo.

2. Valentí Fuster, cardiólogo y director del CNIC: Las ocho claves para vivir mejor

Valentín Fuster es internacionalmente reconocido como uno de los médicos, investigadores y promotores de la educación de la salud más prestigiosos del mundo: es el único cardiólogo que ha recibido los máximos galardones de investigación de las cuatro principales organizaciones internacionales de esta especialidad. «El corazón sirve para dar cantidad de vida; el cerebro, calidad de vida». Con esta frase, el doctor Fuster resume su esperanza en la educación de la salud, y especialmente, en el cuidado de los factores de riesgo cardiovascular, como las grandes palancas para el cambio y la mejora integral de la vida de las personas.

3. Chris Hadfield, astronauta: «La llegada del ser humano a la Luna cambió mi futuro»

Hadfield es uno de los astronautas más experimentados del mundo, ha pasado casi 4.000 horas en el espacio y ha sido comandante de la Estación Espacial Internacional, donde dirigió un número récord de experimentos científicos. Con tan sólo nueve años su vida cambió cuando el hombre pisó la Luna, y decidió que él también sería astronauta algún día. “La educación te permite alejar la ignorancia y ver más allá de los límites”, apunta.

4. Margarita Salas y María Blasco, bioquímicas y biólogas moleculares: “Una sociedad científica será una sociedad más libre”

¿Un científico nace o se hace? Cuentan las bioquímicas Margarita Salas y María Blasco que su vocación surgió a partir de maestros inspiradores que cambiaron sus vidas. Años después de compartir laboratorio, las dos grandes referentes españolas en biología molecular, Margarita Salas y María Blasco, se reencuentran en esta conversación para debatir sobre ciencia, humanismo, igualdad y educación.

5. Álvaro Neil ‘Biciclown’, viajero: Aprender a vivir en el presente

Álvaro Neil, conocido como ‘Biciclown’, fue abogado tiempo atrás. Un día, decidió cambiar el sillón de una notaría por el sillín de una bicicleta. Y se fue a recorrer el mundo sobre ruedas. Ha producido cinco documentales y es autor de seis libros. “Viajar es el mejor antídoto contra el racismo”, afirma. Cuando emprendió su viaje, muchos pensaron que estaba loco. Él responde con seguridad: “No creo que sea una locura perseguir tus sueños. La locura es que se te pase la vida sin vivirlos”.

6. Angélica Dass, fotógrafa: ¿De qué color es un lápiz de color carne?

Tenía siete años cuando su profesora le mostró, por primera vez, un lápiz de color carne. “Yo estaba hecha de carne, pero mi piel era marrón. Sin embargo la gente decía que yo era negra. Yo tenía un lío enorme de colores en mi cabeza”, explica Angélica Dass. Creó ‘Humanae’, un proyecto fotográfico que utiliza el retrato para acercar a personas de todo el planeta. Un alegato en favor de la belleza de la diversidad humana: “Debemos entender nuestra diversidad como algo que nos hace crecer. No como algo que temer o despreciar”. ‘Humanae’ se ha convertido en un referente para miles de escuelas en todo el mundo. Pero también para instituciones internacionales como la ONU o el Foro Económico Mundial.

7. David Matsumoto, psicólogo: ¿Cuánto enseña un profesor sin hablar?

David Matsumoto es un reconocido experto en el campo de la comunicación no verbal, el lenguaje gestual y las emociones. Para Matsumoto comprender qué es la comunicación no verbal y cómo usarla es esencial, ya que nos permitirá crear entornos educativos que favorezcan el aprendizaje tanto en el entorno familiar como en el aula: “Mi objetivo es tomar conciencia del tipo de cosas que hacemos, cómo nos desenvolvemos, y nuestro tono de voz. Si observamos las cosas y a las personas podemos obtener una gran cantidad de información e intenciones diferentes”.

8. Jimmy Wales, creador de Wikipedia: “Aprender cómo aprender es más importante que nunca”

Es reconocido por ser el creador del proyecto colaborativo más importante del mundo: Wikipedia. Una enciclopedia en línea que está editada en doscientos ochenta y ocho idiomas y que cuenta con más de cuarenta y seis millones de artículos. Jimmy Wales es un apasionado de la educación, especialmente de las posibilidades que el aprendizaje informal ofrece actualmente para la educación de las personas. Nombrado como la sexta persona más influyente del mundo, Wales sostiene que en parte gracias a la tecnología, el aprendizaje va más allá del colegio o la universidad, y señala la necesidad de continuar aprendiendo durante toda la vida.

9. Rosan Bosch, diseñadora de espacios educativos: Escuelas que desatan la creatividad

Diseñadora de interiores y directora creativa del estudio de arquitectura que lleva su nombre, Rosan Bosch es reconocida internacionalmente por impulsar espacios innovadores en colegios de todo el mundo, apuesta por cambiar el entorno físico para mejorar el aprendizaje de los alumnos. “El diseño tiene que relacionarse con el desarrollo personal, de la mente y el cuerpo. No es sólo un instrumento de decoración, sino una herramienta para el cambio”, concluye.

10. Sara Andrés, atleta paralímpica y maestra: “No hay nada más divertido que reírte de ti misma”

“Aprendí a aceptarme y a reírme de mí misma, porque no hay nada más divertido que reírse de los gazapos y de los errores que cometes”. Para Sara Andrés, atleta paralímpica y maestra de educación primaria, el humor es fundamental. Un accidente de coche a los 25 años, un cáncer de tiroides, y posteriormente, un cáncer de piel no le hicieron perder la sonrisa y, lejos de hundirla, la impulsaron para lograr metas que jamás había pensado que podía conseguir. Esta maestra defiende que la educación tiene que ser inclusiva y enseña a sus niños y niñas desde la diferencia y a través de su ejemplo: “Lo que hice fue introducirles la idea de ser empático con el otro y con mi discapacidad, porque todos tenemos discapacidades o supercapacidades”.

11. Duncan Wardle, exdirector de creatividad de Disney: «Eres creativo, lo sepas o no»

Durante 30 años, Duncan Wardle trabajó para una de las compañías más creativas del mundo: Walt Disney.
Para él, todas las personas nacemos siendo creativas. El problema es que, en algún momento, alguien nos dijo que no lo éramos. Y nos los creímos. Para Duncan Wardle, “Todos fuimos niños. Todos llegamos al sistema educativo con una maravillosa imaginación. Creíamos en unicornios y naves espaciales”. Y explica que, al llegar al mundo adulto, eso lamentablemente desaparece. “Ese es uno de los retos actuales del mundo educativo: mantener vivo a ese unicornio”, concluye.

12. Frances Jensen, neuróloga: «Cuida de tu cerebro ahora y él te cuidará después»

Neuróloga y madre, así se define Frances Jensen, una de las voces más respetadas a nivel internacional por sus estudios sobre el cerebro adolescente. “Los adolescentes son máquinas de aprendizaje” sostiene la neuróloga, aunque matiza que “aprenden mejor tanto lo bueno como lo malo”. Desde su posición privilegiada como científica, profesora y madre, Jensen explora, disipa mitos sobre la adolescencia y brinda consejos prácticos para superar esta compleja etapa vital.

13. Benjamin Zander, director de orquesta: ¿Qué puede enseñarnos un director de orquesta?

Realizó su primera composición con tan solo nueve años. Hoy, el octogenario Benjamin Zander, está considerado uno de los directores de orquesta más prestigiosos del mundo. Antes de elevar su batuta, antes de cada concierto, da una charla a la audiencia en la que comparte las historias que se esconden detrás de las composiciones y en las que, además, transmite su amor por la música. “La música clásica eleva al ser humano para ser la mejor versión de sí mismo”, asegura. Actualmente dirige la Orquesta Filarmónica de Boston y su filial juvenil. Músicos a los que inculca su pedagogía: “La técnica no es el objetivo final, el objetivo final es el amor, es la expresión, la comunicación, el contacto, la comunidad”.

14. Adela Cortina, filósofa: Aporofobia: “No se rechaza al extranjero, sino al pobre”

“¿Realmente molestan los extranjeros, o lo que molestan son los pobres, sean extranjeros o de la propia casa?” Con este punto de partida, la filósofa Adela Cortina, catedrática emérita de Ética y Filosofía Política en la Universidad de Valencia, acuñó una nueva palabra: “aporofobia”, para definir el rechazo al pobre. Lo que no se nombra no existe y era necesario inventar este neologismo que señalase la discriminación universal a las personas sin recursos. “La aporofobia va en contra de la dignidad humana y es excluyente. La democracia tiene que ser inclusiva necesariamente. Por eso no puede existir una sociedad aporófoba y democrática. Y todas las sociedades que conozco son aporófobas”, explica.

15. Ranga Yogeshwar, físico y divulgador científico: “Los prejuicios se combaten con hechos y verdades”

Ranga Yogeshwar es el divulgador científico más prestigioso de Alemania. Entiende la educación como el vehículo principal para convertirnos en la persona que queremos ser. “La educación es mucho más que aprender algo para tener un trabajo, nos proporciona una visión del mundo. Tenemos que aprender a vivir en un mundo cambiante, y eso significa que hemos de tener una educación más sutil, diferente a la educación que conocemos y hemos conocido en nuestras escuelas”, sostiene.

16. Joan Roca, chef: “Aprender es el oficio más bonito del mundo”

Considerado uno de los mejores chefs del mundo, Premio Nacional de Gastronomía y referente internacional de la cocina de vanguardia, Joan Roca dirige junto a sus hermanos el restaurante El Celler de Can Roca, en Girona. Su pasión por la cocina nació en los fogones del restaurante familiar, donde los hermanos acudían cada tarde al salir del colegio. También es profesor de su propia escuela. “No se trataba solo de enseñar, sino de mantener a los alumnos motivados y comprometidos; de mantener sus ganas de seguir aprendiendo cuando se van. Porque de aprender no se acaba nunca: ese es el oficio más bonito del mundo», concluye el cocinero.

17. Mara Dierssen, neurobióloga: “Los grupos diversos son más creativos y capaces de innovar”

“Si ahora sacásemos un cerebro aquí veríamos una masa gelatinosa. De ahí salen las ideas, las emociones, sale lo que pensamos. Comprender cómo sucede esa especia de la magia es lo que investigamos en mi laboratorio”. Científica, investigadora, profesora universitaria y doctora especializada en Neurobiología, Mara Dierssen ha dedicado su carrera a la investigación científica gracias a la motivación de su padre neurocirujano y la inspiración de Santiago Ramón y Cajal.

18. Francisco Mora, doctor en Neurociencia y Medicina: “El maestro es la joya de la corona de un país”

Doctor en Neurociencias y en Medicina, Francisco Mora es catedrático de Fisiología en la Universidad Complutense de Madrid. Referente internacional en Neuroeducación, el profesor Mora destaca la importancia que tienen las emociones en el aprendizaje. Todo lo que somos, pensamos, sentimos y aprendemos es fruto de nuestro cerebro en interacción constante con nuestro cuerpo y con el entorno, explica. Mora nos aporta las herramientas y claves básicas que ofrece la Neurociencia para la mejora de la aprendizaje y la memoria, siempre desde el lado humano afirmando que «intentar enseñar sin conocer cómo funciona el cerebro pronto será como diseñar un guante sin nunca antes haber visto una mano”.

19. Kiran Bir Sethi, fundadora de Design for Change: Educar a los niños en el ‘Yo puedo’

Kiran Bir Sethi lo tiene claro: en la escuela hay que aprender a cambiar el mundo. ¿Cómo? La propuesta de esta educadora india es Design for Change, un movimiento que fomenta la creatividad y la iniciativa de los niños para resolver problemas de su entorno y que, en la actualidad, está presente en más de 60 países. Sethi es también la fundadora de la escuela Riverside, allí hace crecer a sus pequeños exclamando ¡Yo puedo! Por supuesto, al ritmo de Bollywood.

20. Carol Dweck, psicóloga e investigadora: No temas equivocarte, nunca es tarde para aprender

Profesora de psicología en la Universidad de Stanford, Carol Dweck es una de las principales investigadoras y referentes internacionales en educación por sus ideas pioneras sobre mentalidad, motivación y desarrollo. Es de “vital importancia que nuestros hijos aprendan con una mentalidad de crecimiento en el mundo de hoy donde necesitamos niños que amen los desafíos y la incertidumbre, y que no se sientan superados”, destaca. Si como padres o educadores, nos centramos en elogiar el proceso más que el resultado, los niños se enfrentarán mejor ante los desafíos en lugar de darse por vencidos cuando las cosas se complican.

Fuente e imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/blog/2019/09/30/aprendemos-juntos-mas-de-100-entrevistas-para-involucrar-a-la-sociedad-en-la-educacion/

Comparte este contenido:

Visibilizar el ‘burnout’, primer paso para reconocer su impacto

Por: El diario la Educación

La posibilidad de conocer la prevalencia del síndrome podría ayudar a mejorar las condiciones de trabajo, así como a cambiar las condiciones en las que se dan las bajas.

Hace unos días la Organización Mundial de la Salud reconocía el síndrome del trabajador quemado o burnout como una enfermedad relacionada con el trabajo. La medida tendrá un gran impacto en profesiones como la de docente. Entre otras cuestiones porque afecta en buena medida a personas que trabajan atendiendo a otras personas.

Hasta ahora los sindicatos de la enseñanza han pasado muchos años reclamando al Estado este reconocimiento dadas las condiciones de trabajo del personal docente. Antes de los grandes recortes de 2012 las centrales habían venido realizando, también otras entidades, diferentes estudios sobre la prevalencia de este síndrome en la profesión. Pero desde 2013, más o menos, no se han vuelto a publicar cifras o estimaciones de personas afectadas por un síndrome que podría estar impactando hasta en un 65% de los profesionales, eso sí, en diferentes estadios.

Tanto la OMS como otras instituciones nacionales y supranacionales dan algunos consejos para superar el síndrome o prevenirlo. Todas ellas relacionadas fundamentalmente con la gestión de las emociones, un intento porque el estrés propio de una profesión de gran responsabilidad que se desarrolla en relación directa con otras personas pueda estar lo suficientemente controlado.

Las medidas relacionadas, eso sí, con las condiciones materiales en las que se desarrolla el trabajo siempre quedan más invisibilizadas. A pesar de esto, la Agencia Europea de Seguridad y Salud en el Trabajo (EU-OSHA en sus siglas en inglés), asegura que el estrés laboral continuado (base del síndrome) «es un síntoma de un problema de organización, no una debilidad individual».

Los recortes de 2012, sobre todo, con el aumento de las horas lectivas, de las ratios en todo el país, de la interinidad y la inestabilidad laboral, el recorte de presupuesto, la desaparición de figuras de apoyo, los desdobles para conseguir una intervención más personalizada no han ayudado a que, en los últimos años, las condiciones de trabajo de maestras y maestros, ni de docentes de secundaria, estén cerca de mejorar las perspectivas. A esto se suma la bajada del abandono escolar temprano, que ha supuesto que muchos miles de alumnos permanezcan en las aulas cuando antes se iban.

Visibilización

¿Por qué es importante la decisión de la OMS en relación al burnout? La primera razón es porque el reconocimiento de este síndrome y de cómo afecta a las y los trabajadores supondrá la visibilización de un problema oculto por la falta total de datos sobre su incidencia.

Desde el Ministerio de Educación y FP, por ejemplo, no se tiene constancia de ninguna cifra sobre cuánta gente se ve afectada por él de entre los más de 500.000 docentes del colectivo. Tampoco, claro, de cuánto personal de administración y servicio puede verse afectado. En el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social tampoco existen datos sobre quienes trabajan en educación, aunque sí aparecen algunas referencias al personal de enfermería en su web.

Desde la Federación de Enseñanza de CCOO, Encarnación Pizarro, responsable de Salud Laboral, asegura que están comenzando a elaborar un estudio sobre el síndrome, pero todavía tardará meses en ofrecer cifras. Admite que en los últimos años ha sido imposible para los sindicatos poder estudiar la cuestión. Los recortes, desde hace ya una década, también les afectan. Tienen menos personal liberado con el que acudir a los centros o con el que llevar a cabo estudios sobre las condiciones de trabajo o salud del colectivo.

Argumenta Pizarro que, además de las posibles bajas directas de este síndrome, también hay otras que están quedando fuera de la vista. Habla, por ejemplo, de los accidentes in intinere, que podrían haber aumentado por causa de este estrés crónico, además de otros riesgos psicosociales.

Otro de los cambios que presumiblemente se sucederían, además de no tener que acudir a la vía judicial para conseguir el reconocimiento de una baja en relación con las condiciones de trabajo, pasaría porque desde el primer momento la Seguridad Social y las mutuas laborales se hicieran cargo del pago de las bajas con una cuantía superior a la de ahora, puesto que las bajas relacionadas directamente con el trabajo tienen mayor cobertura. Por no hablar del pago de los posibles tratamientos, de los que tendrían que hacerse cargo también.

No se trata, simplemente, de que el personal docente aprenda a gestionar mejor sus emociones para así poder tener a ralla el estrés. Instrumentos como el coaching pueden ayudar, pero sin una mejora de las condiciones de trabajo del colectivo no se atajaría el problema. Para Pizarro se trata de herramientas que pueden servir, pero primero hay que hacer la detección y luego la intervención. Entre ambas, pueden ser de utilidad. Sin olvidarse de las herramientas de la negociación colectiva, paralizada durante los últimos años.

Para esta responsable sindical, la situación laboral generada en el colectivo con los recortes supone que toda esa atención más directa del alumno queda en un segundo plano, burocratizada. Esto «provoca mucha frustración» entre las y los docentes, además de una mayor cantidad de estrés laboral. «Sabemos que los grupos reducidos (grupos de apoyo, desdobles) funcionan mejor, dan mejores resultados » en las evaluaciones tipo PISA, asegura Pizarro.

Con ratios menores o a la posibilidad de hacer desdobles, además de mejoras en los rendimientos académicos, se consiguen mejoras en la convivencia tanto para el personal docente como para el alumnado. «Genera muchas frustración ver que algo funciona y se desmonta», asegura Pizarro.

En el sector educativo, y aquí coinciden Pizarro y Francisco Javier Gómez, también responsable de Salud Laboral de los STEs, la etapa de secundaria así como la de educación infantil, son en las que mayor prevalencia del síndrome hay. Las condiciones de trabajo con más complejas, ratios muy altas y, por razones diferentes, la atención del alumnado es complicada. En infantil, por una mayor dependencia de niños y niñas. En la secundaria, además de por la adolescencia propiamente dicha, por una mayor presión el currículo y por haber, en la pública sobre todo, perfiles más complicados con alumnado con necesidades educativas especiales, por ejemplo.

Fuente: https://eldiariodelaeducacion.com/blog/2019/06/04/visibilizar-el-burnout-primer-paso-para-reconocer-su-impacto/

Comparte este contenido:
Page 10 of 13
1 8 9 10 11 12 13