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Africa: El rostro infantil de la pobreza

TeleSur.TV/01 de julio de 2016/

África es la región que ofrece el «panorama más sombrío», según la Unicef.

Se estima que 69 millones de niños morirán por causas inevitables y unos 167 millones de vivirán en pobreza para el año 2030.

De acuerdo al documento Estado Mundial de la Infancia publicado por la Unicef este martes, para el año 2030 podrían morir 69 millones de niños por causas inevitables y otros 167 millones vivirán en la pobreza.

El informe revela que en 2030, fecha en que se vence el plazo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, aquellos niños en situación de vulnerabilidad les espera «pobreza, analfabetismo y muerte prematura».

Futuro devastador

Los niños se ven afectados «desproporcionadamente» por los conflictos violentos, emergencias humanitarias y desastres naturales, así como por crisis sanitarias, destaca el estudio.

Además, estima que para ese año 750 millones de mujeres se habrán casado siendo aún niñas.

“Las vidas de millones de niños se ven arruinadas por la simple razón del país, la comunidad, el género o las circunstancias en las que nacen», lamentó el director ejecutivo de Unicef, Anthony Lake, quien además agregó que «antes de que respiren por primera vez, las opciones de vida de los niños pobres y excluidos a menudo se ven modeladas por las desigualdades».

El informe destaca, asimismo, que se ha avanzado considerablemente en la labor de salvar las vidas de los niños, reducir la pobreza y lograr que asistan a la escuela.

De esta forma se ha conseguido reducir la tasa de mortalidad de menores de cinco años desde 1990, que los niños y niñas asistan a la escuela primaria en igualdad en 129 países y que el número de personas que viven en la extrema pobreza se haya reducido a casi la mitad en comparación a la década de 1990.

Sin embargo, el progreso no ha sido “uniforme y justo”, según Unicef, debido a que los niños en mayor situación de pobreza tienen el doble de probabilidades de morir antes de los cinco años que los más ricos, así como de sufrir desnutrición crónica. En cuanto a las niñas provenientes de hogares más pobres tienen un 2 por ciento de probabilidades de casarse durante la infancia que otras niñas de estratos sociales más altos.

«A pesar de los avances en las últimas décadas, un gran número de niños se ha quedado atrás, por lo que tenemos que mantener este progreso, pero centrándonos en los más desfavorecidos», explicó el director de programas de Unicef, Ted Chaiban.

África con un “panorama más sombrío”

La región de África Subsahariana mantiene un panorama más desolador. Al menos 247 millones de niños, el equivalente a dos de cada tres, viven en pobreza multidimensional y sin los elementos necesarios para sobrevivir.

Los niños tienen hasta 10 veces más probabilidades de morir antes de los cinco años, y un total de nueve de cada 10 niños que viven en la pobreza en el mundo se encuentran en esta región.

Además, casi el 60 por ciento de los jóvenes de entre 20 y 24 años ha tenido menos de cuatro años de escolaridad.

La educación contra la desigualdad

La educación desempeña «un papel único para poner fin a los ciclos intergeneracionales de desigualdad». Sin embargo, desde 2011 Unicef ha denunciado que el número de niños que no asisten a la escuela ha aumentado, mientras que existe una proporción significativa de aquellos que sí van pero no logran aprender.

Otros datos reflejan que 124 millones de niños no acceden a la enseñanza primaria o secundaria, y casi 2 de cada 5 alumnos que terminan la escuela primaria no han aprendido a leer, escribir o hacer cálculos aritméticos simples.

Para el 2030, según las estimaciones de Unicef habrá más de 60 millones de niños fuera de la escuela.

Invertir en el futuro de las sociedades

El informe expone que si se invierte en aquellos niños que viven en las situaciones más vulnerables, se podrían producir beneficios inmediatos y a largo plazo.

En promedio cada año adicional de educación que recibe un niño aumenta sus ganancias cuando sea adulto en un 10 por ciento. Por cada año de estudio aprobado, la tasa de pobreza de un país caerá en un 9 por ciento.

Tomado de: http://www.telesurtv.net/telesuragenda/El-rostro-infantil-de-la-pobreza-20160628-0032.html

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Albinos en África: Persecusiones y Asesinatos

DiocesisdeCanarias.es/27 de junio de 2016

Albinos en África

En Tanzania los albinos son víctimas de la superstición y la brujería del pueblo. Se cree que poseer una parte del cuerpo de un albino, reporta dinero y riqueza. Los niños son el principal objetivo de los asesinos. Muchos se han refugiado en la escuela primaria de Mitindo para huir de sus perseguidores. Los asesinatos empezaron en 2007 y la mayoría de los hechiceros de los pueblos están instigándolos.
Víctimas de la superstición, a menudo son secuestrados porque se cree que sus huesos tienen propiedades mágicas

ROMA
Piden al Papa que intervenga para que se acabe la discriminación de los albinos en el Congo. La iniciativa es de la Asociación para el desarrollo de las personas albinas en África, que pretende sensibilizar a las autoridades de la República Democrática del Congo sobre la situación de los albinos que son víctimas de la superstición y, sobre todo, porque en la región de Kivu son secuestrados y asesinados porque se cree que sus huesos tienen propiedades mágicas y taumatúrgicas. Además, como afirma la Radio Vaticana al comentar la iniciativa, «también las condiciones sanitarias de los albinos son críticas», porque son más sensibles y pueden desarrollar melanomas malignos y necesitan cremas solares y vestidos específicos para sobrevivir.

Benedicto XVI había intervenido al respecto durante su viaje a Benín, en noviembre del año 2011, como recordó el misionero comboniano Giulio Albanese ante los micrófonos de la Radio Vaticana: «el Papa tocó el problema incluso porque lo indicó el episcopado africano. Desde este punto de vista, se trata verdaderamente de cambiar página, pero no hay duda de que el único modo, de una forma u otra, para poner en marcha el rescate es el de insistir en la educación. No hay que olvidar que fenómenos de este tipo, aunque con connotaciones diferentes, también se verifican en nuestra casa, en Europa, en el sentido de que la magia es considerada por muchos como una práctica aceptable».

Tomado de: http://www.diocesisdecanarias.es/solidaridad/albinos-en-africa-persecuciones-y-asesinatos.html

Imagen: https://www.google.com/search?q=situacion+de+los+albinos+en+africa&espv=2&biw=1366&bih=667&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwiD4MrKm8bNAhVMKh4KHXc4AKkQ_AUIBigB&dpr=1#imgrc=cv82QF83lSqPoM%3A

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‘Africa Code Week’ llevará alfabetización digital a miles de niños africano

África/ 12 de Junio de 2016/EFE

Con unas previsiones para 2100 que sitúan a la población africana menor de 18 años en torno a la mitad en el mundo con esa franja de edad, dotar de habilidades digitales a los más jóvenes en esa región es el objetivo del proyecto internacional “Africa Code Week”, que celebrará su segunda edición tras el verano.

La iniciativa es “una de las mayores de alfabetización digital en el continente africano hasta la fecha”, ha afirmado en una entrevista a Efefuturo Gillisen-Duval, directora de responsabilidad social corporativa para SAP, empresa impulsora de esta iniciativa junto con una red de más de un centenar de actores además de compañías como Google y varias organizaciones públicas.

Durante esta segunda edición del proyecto “Africa Code Week” (ACW), que se celebrará del 15 al 23 de octubre de 2016, están previstos miles de eventos de programación, que se realizarán en escuelas, universidades, clubes de programación, centros comunitarios, etc.

Se pretende formar en temas de programación a 150.000 jóvenes y niños de treinta países africanos, mientras que en el horizonte de una década el reto es haber alcanzado a más de 200.000 profesores, y a más de 5 millones de niños y jóvenes.

En la convocatoria del año pasado, la cifra de beneficiarios fue de 89.000 jóvenes de 17 países, que lograron escribir sus primeras líneas de código o simplemente, en algunos casos, tocar por primera vez un ordenador.

La actual explosión demográfica en África es “excepcional en la historia de la humanidad”, y de ahí la importancia de apoyar e impulsar habilidades digitales de la población más joven desde ya, según la responsable de SAP.

Para su implementación, la iniciativa involucra a escuelas, profesores, organismos gubernamentales, ONG, centros comunitarios, clubes de programación, empresas y organizaciones no lucrativas, que trabajan juntas en el objetivo de capacitar a los jóvenes africanos en competencias digitales.

Formación “in situ” y “online”

Se incluyen talleres presenciales de programación de código y también cursos gratuitos “online” desde la plataforma openSAP, además de un autobús para llevar la formación digital a los pequeños en zonas rurales.

Los estudiantes de 8 a 17 años recibirán formación para desarrollos informáticos con Scratch, una interfaz de aprendizaje de código abierto diseñada por el MIT Media Lab que simplifica la programación a las generaciones más jóvenes.

Los de más edad, hasta los 24 años, serán introducidos en las tecnologías “web” más relevantes para trabajar y concretamente en WordPress y Joomla, permitiéndoles crear un sitio completamente operativo y “amigable” para el móvil.

Según la responsable de SAP, la digitalización está fomentando un crecimiento económico “enorme” en todo el mundo, pero en 2020, la economía mundial se enfrentará todavía más a una escasez de talento cualificado que es necesario resolver con formación, ha dicho, para impulsar la prosperidad y la seguridad social.

En torno a esa fecha se calcula que habrá 45 millones de puestos de trabajo “perdidos”, es decir, empleos que requieren habilidades intermedias que las empresas tratan de cubrir pero para los cuales no hay mano de obra cualificada en las economías en desarrollo, especialmente en África, ha explicado.

“Los conocimientos en tecnologías de la información (TI) son la moneda de trabajo del futuro y en gran medida de nuestro presente”. De hecho, prosigue, ya tienen el poder para poner a millones de personas en la senda de la autosuficiencia y de una carrera exitosa, ha añadido.

Fuente: http://www.efefuturo.com/noticia/africa-code-week-llevara-alfabetizacion-digital-miles-ninos-africano/

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Escuelas inaccesibles para millones

Londres/09 de Junio de 2016/hrw.org

Por: Human Rights Watch

La adopción de leyes y políticas discriminatorias, y la falta de voluntad política para dar cumplimiento a obligaciones básicas en materia de derechos humanos por países de todas las regiones del mundo, impiden que millones de niños y adolescentes puedan asistir a la escuela, señaló Human Rights Watch en un informe difundido hoy. Altos funcionarios gubernamentales del área de educación, responsables de políticas globales y agencias de financiamiento se reunirán en Noruega del 13 al 16 de junio para adoptar medidas que mejoren el acceso a la educación de calidad a nivel mundial.

El informe de 89 páginas, denominado “The Educaction Deficit: Failures to Protect and Fulfill the Right to Education in Global Development Agendas» [Déficits en materia educativa: ausencia de medidas de protección y cumplimiento del derecho a la educación en las agendas globales de desarrollo], sostiene que, dos décadas atrás, los gobiernos de países de distintas regiones del mundo expresaron el compromiso de eliminar los obstáculos a la educación para las generaciones venideras. Sin embargo, Human Rights Watch evidenció que, en muchos países, las leyes y prácticas discriminatorias, los aranceles elevados, la violencia y otros factores excluyen a niños y adolescentes de las escuelas. El informe se elaboró a partir de investigaciones   llevadas a cabo por Human Rights Watch en más de 40 países, a lo largo de casi dos décadas. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO,  ha informado que 124 millones de niños y adolescentes no asisten a la escuela.

“Es inconcebible que, en 2016, se niegue el derecho a la educación a millones de niños y adolescentes de todo el mundo”, manifestó Elin Martínez, investigadora de derechos del niño de Human Rights Watch. “La escasa supervisión gubernamental y la carencia de políticas que prohíban de manera absoluta la discriminación a menudo permiten que los funcionarios del área educativa tengan atribuciones ilimitadas para decidir quiénes pueden entrar a una escuela y quiénes quedan afuera”.

La totalidad de los 196 países miembros de la ONU han asumido obligaciones jurídicas frente a todos los niños en su territorio. La Convención sobre los Derechos del Niño, que ha sido ampliamente ratificada, así como varios otros tratados internacionales y regionales, estipulan requisitos detallados para proteger el derecho a la educación. En septiembre de 2015, los gobiernos acordaron trabajar conjuntamente con el fin de “garantizar una educación inclusiva y de calidad para todos» para el año 2030, como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por la ONU, y establecieron así como meta global el acceso a la educación secundaria por primera vez. Los objetivos de desarrollo anteriores, los Objetivos de Desarrollo del Milenio, procuraron asegurar en forma plena el acceso a la educación primaria y su finalización, aunque todavía no han sido alcanzados no han sido alcanzados.

A pesar de la obligación de eliminar los aranceles en la escuela primaria y otros costos asociados, que se encuentra en numerosos tratados internacionales, muchos países —como la República Democrática del Congo y Sudáfrica— aplican aranceles que las familias no pueden solventar. Los aranceles y costos asociados de la educación secundaria impiden que millones de adolescentes en Bangladesh, Indonesia y Nepal, por ejemplo, puedan completar al menos nueve años de educación.

“Mi último año de escuela fue el primer semestre del primer año de la escuela media. Deseaba realmente continuar estudiando, pero la verdad es que no tenía el dinero necesario”, contó Endah, que abandonó la escuela en Indonesia para emplearse en el servicio doméstico cuando tenía 15 años. “El arancel de la escuela era de 15.000 rupias (USD 1,10) por mes. Pero lo que realmente no podía pagar era el ‘arancel edilicio’ y el uniforme. Tenía un valor de 500.000 rupias (USD 37)… Luego, cada semestre teníamos que comprar libros”.

La violencia en contextos escolares afecta a más de 246 millones de niños, según indica el organismo de la ONU para la infancia, UNICEF. Los castigos físicos en las escuelas —una práctica que equivale a tortura y trato degradante, y afecta negativamente la capacidad de aprendizaje de los niños— es lícita o sigue siendo generalizada en países como Tanzania, Sudáfrica y muchos estados de EE. UU.

Entre los factores que propician que las jovencitas a

bandonen la escuela, se incluyen el carácter extendido de los abusos sexuales y la violencia por parte de docentes y pares, pruebas físicas de virginidad abusivas e irrelevantes, pruebas de embarazo obligatorias, y políticas que excluyen a jovencitas embarazadas de las escuelas. Las condiciones insalubres e inadecuadas en escuelas, incluida la falta de instalaciones donde atender los cuidados relativos al ciclo menstrual con privacidad y en forma digna, provocan que muchas adolescentes, incluidas jóvenes con discapacidad, tengan una asistencia irregular o abandonen los estudios. El matrimonio infantil es, a la vez, una causa y una consecuencia de la falta de acceso a educación de calidad en países como Bangladesh, Nepal, Tanzania y Zimbabwe.

Millones de niños con discapacidad en China y Sudáfrica, así como niños de diversos grupos étnicos, idiomáticos o religiosos en la India, sufren habitualmente discriminación por parte de funcionarios gubernamentales cuando intentan inscribirse en escuelas. Una vez que ingresan a las escuelas, muchos de estos niños son asignados a aulas segregadas, donde reciben educación de calidad inferior. Muchos niños con discapacidad abandonan la escuela debido a la ausencia de docentes especialmente preparados, falta de apoyo o porque no son admitidos para pasar a niveles más avanzados de educación. En Rusia y Serbia, por ejemplo, existe una cantidad desproporcionada de niños con discapacidad confinados en instituciones, que con frecuencia solo reciben educación de baja calidad, o directamente ninguna educación.

Una cantidad cada vez mayor de niños que viven en contextos de crisis humanitarias y conflicto a largo plazo no pueden hacer valer su derecho a la educación, dado que las escuelas son inaccesibles o inseguras. Los ataques a escuelas y la ocupación de estas instituciones con fines militares han impedido que millones de niños en Afganistán, Nigeria, Palestina, Ucrania y Yemen pudieran ir a la escuela.

También en países de ingresos medios y altos se crean obstáculos a la educación, a través de prácticas discriminatorias contra minorías, refugiados, migrantes y niños LGBT.

Todos los gobiernos deberían garantizar que la educación primaria sea verdaderamente gratuita y obligatoria, y que la escuela secundaria sea gratuita. Los gobiernos deberían eliminar las políticas o reglamentaciones discriminatorias que permiten que las escuelas excluyan a niños y adolescentes, y asegurar que las escuelas atiendan las necesidades de las jovencitas, los niños con discapacidad, los niños que pertenecen a minorías y los niños LGBT.

Los gobiernos deberían abolir por ley los castigos físicos y adoptar medidas más rigurosas para garantizar que los niños estén seguros frente a violencia, abusos y hostigamiento en las escuelas.

Los donantes —incluidas las instituciones financieras multilaterales como el Banco Mundial y la Alianza Mundial para la Educación— y los organismos internacionales que ayudan a los gobiernos a implementar sus planes educativos, deberían observar los estándares de derechos humanos y no hacer ningún tipo de concesiones ante abusos que excluyan de las escuelas a niños y adolescentes.

El Secretario General de la ONU y la UNESCO deberían garantizar que los “países líderes” —que encabezan iniciativas globales en materia de educación— cumplan sus propias obligaciones de derechos humanos y pongan fin a los abusos en sus propios sistemas educativos.

“No debería haber ningún grado de tolerancia ante el incumplimiento de estas obligaciones, cuando de lo que se trata es de garantizar el acceso a la educación a todos los niños y adolescentes del mundo”, apuntó Martínez. “Los niños no pueden esperar otros 15 años, ni tampoco otro año lectivo, para que sus gobiernos garanticen plenamente su derecho a prepararse para el futuro”.

Citas extraídas del informe

“La mayoría [de los alumnos en] las principales escuelas no tienen que pagar. Pero nosotros sí tenemos que pagar los aranceles. Muchos padres que tienen hijos con discapacidad no podemos trabajar, y debemos ocuparnos de ellos las 24 horas. Las escuelas nos escriben para preguntarnos por qué no hemos pagado, pero no entienden nuestra situación”.
–Padre de un joven de 8 años con autismo, Johannesburgo, Sudáfrica

“Mi prima y yo somos las únicas niñas sirias de la clase. Los demás alumnos se confabularon en contra nuestra y andan diciendo que hablamos mucho y que nos portamos mal. El maestro nos envió al fondo del aula. Todos los maestros me tratan mal porque soy siria. Cuando uno de los maestros le pregunta algo a una niña jordana y ella responde correctamente, le dice ‘¡Bravo!’. En cambio, cuando soy yo quien contesta bien, no me dice nada”.
–Hadeel (seudónimo), 11, Al-Zarqa, Jordania

“Me golpeaban cuando el maestro no los veía, y como mi maestro no veía lo que pasaba no hacía nada para impedirlo. Mi padre se presentó ante el director de la escuela para quejarse, y este le dijo: ‘Si le preocupa, entonces no debería seguir mandándola a la escuela…’. En Siria me encantaba ir a la escuela. Tenía amigos. Me gustaba muchísimo aprender”.
–Fatima, 12, Turgutlu, Turquía

“Un [maestro] intentó persuadirme para que tuviera relaciones sexuales, y entonces yo no quería avanzar a Nivel 2 para evitar tener que pasar por eso. Dejé de ir [a educación física]. Lo hice porque temía que si me encontraba con él, me llevara a algún sitio para hacerme cosas. Me sentía mal y [los maestros] me llamaron para decirme que no me estaba concentrando o estudiando y que entonces mi desempeño no era bueno… Decidí dejar la escuela y no seguir malgastando el dinero de mis padres”.
–Ana, 16, Mwanza, Tanzania

“El sistema educativo japonés es realmente muy estricto con el tema del género. Les inculca claramente a los alumnos adónde pertenecen y adónde no; en los años más avanzados, cuando la división de géneros es más marcada, los niños transgénero comienzan realmente a sufrir. Tienen que ocultar su realidad y mentir, o actuar como ellos mismos y exponerse así al hostigamiento y la exclusión”.
–Docente transgénero de escuela secundaria, Japón

“Mis tíos me obligaron a contraer matrimonio con un hombre que tenía edad suficiente para ser mi abuelo. Yo iba a la escuela y estaba en sexto grado. Me gustaba la escuela. Si hubiera tenido la posibilidad de terminar los estudios, no habría tenido estos problemas; no estaría trabajando de mesera y separada de mi esposo”.
–Akur L., casada a los 13 años, Sudán del Sur

“Quedé embarazada el año pasado, cuando tenía 14. Tuve que dejar de ir a la escuela ese mismo año porque mi madre, que trabaja como empleada doméstica y cobra un salario de USD 50 por mes, no podía cubrir el costo de que yo fuera a la escuela. Tuve una relación sentimental con un hombre mayor que estaba casado. Fui al hospital y di a luz un niño que murió pocos minutos después… Quisiera volver a la escuela porque todavía soy una niña”.
–Abigail C., 15, Zimbabwe

“[El ejército] disparó contra mi escuela con un tanque… Cuando huí corriendo, un shabiha [miembro de milicia apoyada por el Estado] me tomó por el hombro, pero tras forcejar conseguí escaparme. El shabiha entró a la escuela y disparó contra las ventanas y rompió las computadoras. Luego de eso, solamente volví para rendir mis exámenes”.
–Rami, 12 años, refugiado procedente de la gobernación de Daraa en Siria, entrevistado en Ramtha, Jordania.

Fuente: https://www.hrw.org/es/news/2016/06/09/escuelas-inaccesibles-para-millones

 

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Educación para la paz en la República Democrática del Congo

República Democrática del Congo/ 7 de junio de 2016/ Fuente: UNICEF

Hace un año, el violento conflicto entre grupos étnicos de la comunidad de Jeannette la obligó a escapar de su aldea. En la actualidad, la pequeña participa activamente en el comité de paz de su escuela. Jeannette, que actúa en obras y organiza otras actividades de concienciación, está utilizando la escuela para ayudar a construir puentes entre los grupos en discordia de su comunidad.

 – Bajo un árbol de mango que está creciendo a unos metros del patio de su escuela, Jeannette, de 14 años, termina su actuación teatral, a la que siguen los aplausos de los miembros de la comunidad de la aldea Ngombe Nwana. La obra trata sobre la resolución pacífica del conflicto entre dos jóvenes de la aldea que se habían enfrentado violentamente a causa de un robo. Hace unos meses, Jeannette y algunos de sus compañeros de clase se unieron al comité de paz de la escuela. Juntos, organizan actividades para concienciar a la gente sobre la consolidación de la paz.

Jeannette pertenece a los batwa, un grupo étnico pigmeo. En esta región rural de la República Democrática del Congo, los batwa viven junto a los baluba (los bantúes), una convivencia que, en ocasiones, se convierte en un conflicto comunitario. A principios de 2015, Jeannette tuvo que salir de su pueblo de la región de Manono cuando los pigmeos y los bantúes se enzarzaron en una confrontación.

“Atacaron y quemaron mi aldea, así que me vi obligada a escapar con toda mi familia”, cuenta Jeannette. “Tras varios días caminando, nos refugiamos en un campamento de desplazados que también atacaron y quemaron poco después. Al final, terminamos escondidos en un viejo almacén en la ciudad de Nyunzu”.

Más de 15.000 personas, la mayoría de ellas mujeres y niños, pasaron varias semanas atrapados en ese almacén sin atreverse a salir por miedo a las represalias. Finalmente, las autoridades locales mediaron en el conflicto y lograron poner fin a las hostilidades.

Un conflicto con causas arraigadas

Después de esos sucesos, muchos desplazados no pudieron regresar a sus hogares. “Las autoridades decidieron reubicarlos en aldeas para que pudieran volver a trabajar en el campo y vivir una vida normal”, afirma Delphin Mwengue Bin Mpungu, encargado de la subdivisión provincial del Ministerio de Educación en Nyunzu 2.
Jeannette contempla a dos niños que hacen las paces. Gracias a la ayuda del programa de UNICEF Learning for Peace (Educación para la paz), su comunidad se está incorporando a las actividades dedicadas a consolidar la paz en las escuelas.Imagen del UNICEF

“Esas poblaciones siempre han vivido juntas y mantienen una estrecha interdependencia, ya que los batúes trabajan a menudo para los baluba. Sin embargo, los batúes suelen estar marginados y tienen menos acceso a la tierra o a servicios sociales básicos como la escuela”, explica. “Esa discriminación es un motivo permanente de tensiones, y una pequeña chispa podría prender fuego a esta situación”.

La escuela: una prioridad para recuperar la paz

Con la ayuda de UNICEF, el gobierno estableció la prioridad de reabrir las escuelas de las aldeas. “Algunas fueron saqueadas o quemadas durante los conflictos, y muchos profesores huyeron”, explica Gaston Mugunga Muhiya, director de la escuela de Ngombe Nwana. “Hemos llevado a cabo una campaña de concienciación de puerta a puerta para convencer a los padres de que manden a sus hijos de nuevo a la escuela”.

Afortunadamente, la campaña tuvo éxito. “Ahora contamos con 339 alumnos: más de una tercera parte de ellos son batúas”, sostiene.

“En las situaciones posteriores a un conflicto, el papel de la escuela es muy importante”, afirma Chantal Kapinga Nzemba, una especialista en educación de UNICEF. “Cuando una escuela reintegra a los niños en una aldea, es síntoma de que la paz ha vuelto. Además de eso, la escuela les ofrece la oportunidad de aprender a vivir juntos de nuevo”.

Jeannette posa con otros niños de su comunidad. El programa de Educación para la paz tiene por objetivo reforzar la educación para consolidar la paz en las zonas en peligro o afectadas por el conflicto.Imagen del UNICEF

Aprender a vivir juntos en paz

Es precisamente esa capacidad para llevar una convivencia armoniosa lo que UNICEF trata de fomentar mediante el programa de Educación para la paz.

El programa es una alianza entre UNICEF, el Gobierno de los Países Bajos, los gobiernos nacionales de los países participantes y otros aliados fundamentales. El objetivo primordial de la iniciativa consiste en fortalecer la resiliencia, la cohesión social y la seguridad humana en contextos de conflicto, incluyendo países que estén en peligro de sufrir uno o se estén recuperando. En concreto, la finalidad del programa Educación para la paz es reforzar las políticas y las prácticas de educación para la consolidación de la paz.

“Aparte de aprender, queremos que los niños desarrollen su potencial y vivan juntos y en paz”, sostiene Nzemba. Además, elegir las escuelas como el lugar donde lograr estos objetivos permite que el programa se dirija a distintos niveles de la comunidad. En primer lugar, se ha preparado a los profesores para realizar actividades que promuevan la cohesión social dentro de la escuela. Gracias a esa preparación, los niños se han convertido en las partes interesadas en la paz, han entrado a formar parte de comités de paz y han comenzado a organizar eventos deportivos, charlas y obras teatrales para concienciar a su comunidad. Por su parte, los adolescentes también han tenido la oportunidad de expresarse y organizar actividades en los clubes para adolescentes (denominados clubes “AdoDev”).

Las escuelas, asimismo, sirven como punto de encuentro entre distintas comunidades. “Para algunos padres que antes solían ignorarse, es muy llamativo que sus hijos ahora jueguen juntos, especialmente cuando son las asociaciones de padres y madres o las actividades de la comunidad los responsables del encuentro”, explica Muhiya, el director de la escuela.

En total, más de 165 escuelas han recibido la ayuda de UNICEF para consolidar la paz en las subdivisiones de Manono, Kalemie y Nyunzu 1 y 2 de la provincia de Tanganyika.

Desde 2012, el programa de Educación para la Paz ha surtido efecto en la vida de más de dos millones de niños y miembros de las comunidades de África Central y Occidental.

Fuente: http://www.unicef.org/spanish/infobycountry/drcongo_91244.html

Imagen: http://www.unicef.org/spanish/infobycountry/images/13274ibc1.jpg

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Colonial Legacies and Social Welfare Regimes in Africa: An Empirical Exercise


Colonial Legacies and Social Welfare Regimes in Africa: An Empirical ExerciseThis paper identifies three types of welfare regimes in Africa, based on the insight that tax and expenditure regimes are closely associated. Using cluster analysis, the author highlights historical legacies in current welfare policies, demonstrating that welfare regimes in Africa have been strongly determined by the ways in which different countries were incorporated into the colonial economy. The author finds that many of the new social welfare reforms are taking place in what he refers to as labour reserve economies, and are generally internally rather than aid-driven. He stresses the importance of thinking of social expenditure in relationship to domestic resource mobilization, and finds that the focus on aid and social expenditure has tended to obscure this important aspect of welfare regimes in Africa.

Thandika Mkandawire is Chair and Professor in African Development at the London School of Economics, a Senior Fellow of The Graduate School of Development and Practice and Visiting Professor at the University of Cape Town.

  • Publication and ordering details
  • Pub. Date: 27 May 2016
    Pub. Place: Geneva
    From: UNRISD

Informe disponible desde Mkandawire-PDRM

Imagen tomada de: http://www.irishtimes.com/polopoly_fs/1.1736427.1395680271!/image/image.jpg_gen/derivatives/box_620_330/image.jpg

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The Paradox of Congo: How the World’s Wealthiest Country Became Home to the World’s Poorest People

Africa/Congo/May 2016/Autor:  Esther Yu-Hsi Lee/ Fuente: ThinkProgress

Resumen:  En la República Democrática del Congo (RDC), la gran mayoría de las personas viven en la pobreza extrema, ganando solamente 400 $ al año. El país se está recuperando de la inestabilidad, el hambre y las enfermedades. Uno de cada siete niños muere antes de cumplir los 5 años de edad. Y más de 5,4 millones de personas han muerto desde 1993 a causa de los conflictos armados. Pero los problemas que afectan a los ciudadanos congoleños están en agudo contraste con la riqueza del país. La República Democrática del Congo, se asienta sobre los minerales en bruto sin explotar $ US 24 trillón – dinero que no se benefician directamente a las personas que viven allí.

In the Democratic Republic of Congo (DRC), the vast majority of people live in extreme poverty, earning only around $400 a year. The country is reeling from instability, hunger, and disease. One in seven children dies before they turn 5 years old. And more than 5.4 million people have died since 1993 because of armed conflict. But the issues plaguing Congolese citizens are in sharp contrast to the country’s wealth. The DRC sits on untapped, raw mineral ores worth $24 trillion — money that isn’t directly benefiting the people who live there.

“Why are we living through hell in paradise?” Vital Kamerhe, a Congolese politician and leader of the Union for the Congolese Nation, asks in the film When Elephants Fight, which details how foreign interests have ravaged the Congo region. “That is the paradox of Congo.”

Foreign companies have made large investments in eastern Congo’s mines, buying from suppliers funding armed groups within the country. This type of foreign investment in the Congo’s extraction industry has led to a loss of at least $1 billion in resource revenue that could otherwise be used to reform the country’s security, health, and education sectors.

Now, two well-known activists have begun a campaign to pressure mining companies, the DRC government, and Western governments to disclose exactly what they’re doing in the region. Alongside House of Cards television star Robin Wright, JD Stier, the president of the social activism organization Stier Forward, created the #StandWithCongo campaign to get mining entities to disclose the beneficial owners of offshore companies that are profiting from these mining deals.

“The #StandWithCongo campaign is addressing shady billion-dollar mining contracts — mostly relating to mining concessions in the south of the country,” Stier told ThinkProgress. “Transparency from technology companies to mining multinationals can ensure that the human rights of Congolese are respected and that more revenue can support development for Congolese people.”

The affected mines, mainly in Congo’s Katanga and Kivu provinces, contain some of the world’s largest reserves of cobalt, gold, copper, and diamonds, as well as tin, tungsten, and tantalum.

These raw minerals have fueled one of the world’s bloodiest conflicts globally since World War II to an obscene degree: 48 women are raped every hour in the Congo while 10,000 civilians are estimated to die every month. Militia groups made an estimated $185 million from conflict minerals in 2008, while gold remains a steady source of funding for them and for Congo’s army.

And, because the minerals mined in the Congo are used to make everyday objects like smartphones, lightbulbs, computers, and jewelry, nearly everyone reading this article is complicit in the ongoing conflict.

At least some of the mines purportedly belong to Israeli billionaire Dan Gertler, named more than 200 times in the Panama Papers. An ally to Congo President Joseph Kabila, Gertler allegedly had a hand in the mining deals in 2011 “that robbed the Congolese people of more than $1bn,” The Guardian reported.

The Africa Progress Panel, a panel that promotes the equitable and sustainable development for Africa, estimated that the sale of mining contracts to five anonymous British Virgin Island companies deprived Congolese citizens of $1.35 billion, or about twice their health and education budgets combined. And while assets were sold at one-sixth their commercial value, these offshore companies bankrolled 500 percent in profits.

“The DRC government should commit to immediate full disclosure of state-owned companies’ revenues and spending, to the publication of all mining contracts, and to ensuring company compliance with Organization for Economic Co-operation and Development (OECD) standards on conflict minerals,” Stier said. The OECD, an international economic organization, has helped to issue due-dilligence guidance for companies to move away from the use of such minerals.

Conflict in the Congolese region may only accelerate as the country’s term-limited president, Joseph Kabila, appears poised to extend his incumbency into a third term. Though he is bound by the DRC’s constitution to step down after two consecutive terms, Kaliba — under whom many abuses in the region, particularly those against women, have gone unpunished — has not categorically said that he will not seek a third term. In order to stay in power, Kabila could delay the November 2016 elections or change the constitution.

Kabila’s cling to power has so far resulted in the arrest and detention of opposition supporters. As many as 40 people were killed last year during protests opposing a draft law that would have extended his term. And on Thursday, peaceful protesters who took to the streets in Goma, an eastern city in the DRC, were met by armed security personnel who used tear gas to disperse the protests. As many as six people were shot, including a target=»_blank»12-year-old boy and 6-year-old child, according to a Human Rights Watch researcher.

Although the use of conflict minerals is unlikely to completely halt, Stier is hopeful that the DRC and Western governments may be able to follow other countries’ example to implement sustainable, peaceful trade “that fosters human rights.”

“In recent years, activist efforts have led to significant reforms in the technology sector,” Stier said. “Tech giants Apple and Intel acknowledged their products contain minerals linked to the financing of rape and war in eastern Congo, and have since invested significant resources in tracking their supply chains — moving in the direction of a closed loop, traceable minerals supply chain.”

Apple Inc. announced in March that it would now audit 100 percent of its suppliers sourcing minerals from the DRC. Intel Corp., the world’s largest chip maker, said in 2014 that the company was “committed to using only conflict-free mineral resources” and would track raw materials, though it appears to be a work in progress as evidence of fraud, smuggling, and a lack of oversight has plagued the current audit system.

There’s also been some legislative movement here in the United States. Under the Dodd-Frank Wall Street Reform and Consumer Protection Act, companies using gold, tin, tungsten, and tantalum are required to make efforts to determine whether those minerals came from the DRC and whether those mineral purchases are funding armed groups in eastern DRC.

According to the policy organization Enough Project, “216 out of approximately 324 smelters and refiners worldwide (67 percent) have passed conflict-free audits and an additional 50 smelters/refiners are in the process of being audited, for a total of 266 participating companies (82 percent).” A 2014 International Peace Information Service study also found that “70 percent of tin, tungsten, and tantalum mines surveyed in eastern Congo were no longer controlled by armed groups, and 204 mines in Congo are now officially certified as conflict-free.”

“We may not have serious strategic interests in this region, but that doesn’t mean we don’t care,” U.S. Special Envoy to the Great Lakes Region of Africa Thomas Perriello told ThinkProgress. “One of the biggest myths about the DRC is that it is hopeless. While that’s a convenient excuse for inaction, we have seen major progress from constitutionalism to conflict-free mineral programs.”

And Stier believes the momentum will only continue.

“Many people in the West feel detached from Congo and the conflicts there,” he said. “However, Millennials get it. They are Skyping with people around the world… and have the pragmatic idealism to act when they see some of the greatest unaddressed injustices on the planet. Further, they recognize that Congolese will ultimately create peace in their country but that we can help support these efforts.”

Fuente de la noticia: http://readersupportednews.org/news-section2/318-66/37127-the-paradox-of-congo-how-the-worlds-wealthiest-country-became-home-to-the-worlds-poorest-people

Fuente de la imagen: http://readersupportednews.org/images/stories/article_imgs21/021222-congolese-miners-052816.jpg

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