Pandemia en escuelas: ¿quién piensa en los auxiliares de educación?
Analía Banegas
Auxiliar de educación |Docente de Educación primaria ATE- Marrón Clasista
La crisis social y sanitaria desatada por el Covid- 19 puso al desnudo de manera brutal la situación de precariedad en que trabajan y viven los y las auxiliares de educación.
La pandemia desnuda las precarias condiciones históricas en la que trabajamos diariamente las y los auxiliares de educación. Los edificios que limpiamos a diario, es de público conocimiento, no tienen tareas de mantenimiento por falta de presupuesto; por lo que las conexiones de gas y de electricidad son verdaderos peligros cotidianos.
Muchas escuelas que tienen comedor escolar utilizan sus cocinas con garrafas y somos las y los auxiliares quienes nos encargamos de cambiarlas, tal como lo hacían en Moreno Rubén y Sandra, ambos fallecidos por la desidia estatal.
Desde hace décadas luchamos contra estas injusticias; ahora en el marco de la pandemia el hambre de la comunidad educativa es más visible pero para nosotros, las y los trabajadores de la educación, son los de siempre los: los conocemos a todos y a cada uno con la situación que los aqueja.
Por eso, continuamos poniéndole garra, haciendo malabares para entregar la mercadería, que de por sí, es insuficiente. «Para el 8 de abril entregamos 450 bolsones que contenían harina, dos paquetes de fideos, polenta, aceite, arvejas, puré de tomates, lentejas y té. Hoy siendo 24 de abril no llego aún la nueva mercadería», relataba una compañera auxiliar de la Primaria 123 de La Plata.
En la Secundaria 14 debemos ir a realizar nuestro trabajo pero sin elementos de limpieza ni de higiene ya que el Consejo Escolar no los provee en la mayoría de las escuelas platanses.
» Y mientras tanto el Gobierno….»
Las y los auxiliares de la educación sufrimos el cierre por decreto de la paritaria estatal por parte del gobierno de Axel Kicillof a fines de febrero, otorgando un aumento de unos $ 3.300 de bolsillo en dos tramos cuando los sueldos alcanzan los $ 24.000 en aquellos casos con mayor antigüedad; cuando durante el último año del gobierno de Vidal el salario estatal ya había perdido un 27% contra la inflación.
Quienes somos mensualizados (categoría previa a la titularización) no cobramos lo correspondiente a nuestra antigüedad en el sistema y quienes son suplentes entran y salen constantemente del sistema sin tener la posibilidad de acceder a un salario estable o la cobertura de la obra social.
Es sabido que el acceso a cargos es mediante los actos públicos, hoy suspendidos en cuarentena, por lo que muchos se quedaron sin poder tomarlos. El gobierno ofrece «un Programa de Incorporación especial para Docentes y Auxiliares» con un salario de $ 10.000 por 15 horas trabajadas. Se debía ingresar a una página web y llenar los requisitos, pero centenares de trabajadores quedaron fuera de esta denigrante oferta, ya que varios de los auxiliares no cuentan con acceso a internet, se encuentran con licencia por hijos a cargo o pertenecen al grupo de riesgo.
«¿Los representantes gremiales están en cuarentena?»
La conducción provincial de ATE, la lista verde de Oscar de Isasi, se opone a encarar un plan de lucha que enfrente estas políticas, e incluso ha avanzado en su integración al gobierno provincial..
¿Qué hace ATE en realidad, siendo una organización sindical de trabajadorxs? Debemos decir, que solamente se saca fotos para figurar en la entrega de bolsones.
No hay respuestas cuando exigimos medidas sobre la situación de la infraestructura de los edificios escolares, con respecto a la falta de elementos de higiene y protección de la salud como barbijos y guantes, o por las tantas consultas que surgen de las y los compañeros por falta de pago o por aquellos que al no estar bancarizados no pudieron cobrar su sueldo, como así también por el reclamo de salarios por debajo de la canasta básica.
Siendo parte de la Agrupación Marrón Clasista en ATE, oposición a la conducción, exigimos una salida a esta crisis, partiendo del pase a planta de todos los trabajadores auxiliares, salario igual a la canasta básica y un salario de emergencia de $ 30.000 para aquellos que no hayan podido tomar cargos. Como parte del sistema educativo y de la comunidad, entendemos que nada de esto es posible si la plata que se destina a la deuda externa no va para educación y salud. Que la educación sea realmente pública y de calidad.
Somos las y los auxiliares en el sistema educativo quienes estamos en la primera línea para enfrentar el Covid -19, junto a docentes que se han solidarizado con el reparto de alimentos. También somos parte de los y las trabajadoras precarizadas del Estado y somos, en su mayoría, mujeres sostén de hogar que sufrimos la doble opresión de llevar a cabo la tarea de la reproducción social.
Apostamos a la coordinación entre los trabajadores que están en la primera línea y los precarizados, tanto públicos como privados, para poder dar una salida de conjunto y que la crisis no la paguemos siempre los mismos.
“La educación como práctica de la libertad” Paulo Freire.
Fuente de la Información: http://www.laizquierdadiario.com/Pandemia-en-escuelas-quien-piensa-en-los-auxiliares-de-educacion