Page 122 of 657
1 120 121 122 123 124 657

Coronavirus en la Argentina: Evalúan que las clases no se retomen hasta después de las vacaciones de invierno

América del Sur/ Argentina/ 13.04.2020/ Fuente: www.lanacion.com.ar.

Con abril descartado, aún ningún funcionario se anima a aventurarse sobre una fecha estimada para la apertura de las escuelas en este contexto de epidemia del nuevo coronavirus . Sin embargo, la posibilidad concreta de que las clases presenciales se retomen después de las vacaciones de invierno comienza a naturalizarse cada vez con más fuerza entre quienes toman las decisiones de políticas educativas.

De acuerdo al ciclo lectivo vigente, con una duración de dos semanas, el receso invernal está pautado en tres fechas distintas: en algunas provincias comenzaría el 6 de julio, en otras el 13 de julio y, en la mayoría, entre ellas la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires , el 20 de ese mes.

Ya es público que el mismo Alberto Ferández afirma que las clases presenciales serán «lo último» que se retome , lo que da a entender que otras actividades se irán habilitando progresivamente antes que el regreso a las aulas.

Nadie lo dice, pero por lo bajo lo reconocen: «Si la cuarentena se extiende en mayo, se podrían adelantar las vacaciones de invierno y retomar en julio, con la tranquilidad de que lo peor del coronavirus ya pasó», dice un ministro de Educación provincial, que quiere llevar su propuesta al Consejo Federal de Educación .

Los funcionarios son muy cuidadosos y prefieren no afirmarlo en público. Están de acuerdo en que un anuncio así sería contraproducente y alteraría la tensa calma con que las familias atraviesan la cuarentena. Pero saben que esa posibilidad está cada vez más cerca.

Incluso, cayó muy mal en varios ámbitos educativos que la Universidad de Buenos Aires (UBA) anunciara tempranamente, y de modo inconsulto con el resto de la comunidad universitaria, la suspensión de las clases y que el nuevo ciclo lectivo comenzaría en junio y culminaría en marzo, con un receso entre mediados de diciembre y enero. En definitiva, nadie se quiere adelantar.

«La UBA estableció un cronograma académico que hay que ver si puede cumplir», dijo el ministro de Educación, Nicolás Trotta LA NACION .

«Esto es día a día», aclara Trotta. Y agrega: «No sabemos cuándo podremos volver a clases. Se pueden recuperar los días, lo que no podemos permitir es tener el costo de vida como han tenido otros países».

Trotta muestra ejemplos del extranjero que van en ese sentido: «Hago videoconferencias con ministros de otros países y tampoco lo saben. Hablé con la ministra de Educación de España y no tienen ni siquiera una fecha aproximada», sentenció.

El panorama en Nueva York

Lo señalado por el ministro es así y se ve reflejado en algunas decisiones que se están tomando en el Hemisferio Norte. El puntapié inicial lo acaba de dar la ciudad de Nueva York: «Cerrar nuestras escuelas públicas por el resto del año no es fácil, pero es necesario para salvar vidas. Volveremos a abrirlas en septiembre con el inicio del nuevo ciclo», anunció ayer el alcalde Bill de Blasio La ciudad ya cuenta con 93.500 contagiados y 6400 muertes .

La decisión adoptada por De Blasio empezó a tener apoyo, sobre todo si se tiene en cuenta que el calendario escolar en los países del norte termina en junio y retoma en septiembre. En Estados Unidos afirman que esa iniciativa será imitada por varios estados.

En Europa sucede algo parecido: es probable que adelanten el fin de ciclo lectivo de modo presencial y sigan con la educación a distancia (que funciona bastante bien), para retomar en septiembre, ya con las escuelas abiertas.

En algunas escuelas privadas, se analiza que al menos los alumnos de los últimos años de la escuela secundaria puedan seguir estudiando a distancia todo el año
En algunas escuelas privadas, se analiza que al menos los alumnos de los últimos años de la escuela secundaria puedan seguir estudiando a distancia todo el año Crédito: Shutterstock

¿La Argentina puede seguir ese camino? Nadie lo sabe, pero es una posibilidad que muchos distritos barajan. «No hay un dato concreto. Afirmar una fecha u otra es arriesgar algo que nadie sabe concretamente», señala un funcionario que participa del comité de crisis en la Ciudad de Buenos Aires. Y agrega: «Hay que seguir apostando a la educación a distancia y fortalecer esa modalidad».

» En las escuelas rurales, sobre todo en zonas donde el virus no ha llegado, se podrían abrir nuevamente las escuelas como parte de esta nueva modalidad de aislamiento comunitario como anunció el Presidente «, señala un ministro de Educación de una provincia del noroeste (NEA). Y agrega: «No hay que olvidar que en esos lugares no cuentan con tanta tecnología y la costumbre para que los alumnos se adapten fácilmente a la educación a distancia», agrega.

Incluso, en algunas escuelas privadas, ya circulan ideas para que al menos los alumnos de los últimos años de la escuela secundaria puedan seguir estudiando a distancia todo el año y así poder despejar aulas y ganar espacio físico para distribuir de mejor manera a los demás cuando vuelvan a abrir.

Fuente de la noticia: https://www.lanacion.com.ar/sociedad/coronavirus-argentina-evaluan-clases-no-se-retomen-nid2353427

Comparte este contenido:

Pastor Sastre: La educación en tiempos de coronavirus

Por: Juan Carlos de Pablo.

Preguntas al economista Pastor Sastre (1914-¿?): Argentino, profesor de Economía Política en la Escuela Nacional de Comercio Juan Bautista de la Salle. Doctor en Derecho por la UBA

La educación a distancia no fue inventada a comienzos de 2020, pero se generalizó como consecuencia del coronavirus. ¿Qué diferencia tiene con lo que hasta ahora ocurría en las aulas, donde se desarrollaba una interacción presencial entre maestros y profesores, con alumnos? Superado el evento que nos tiene a todos en vilo, ¿volveremos a las aulas, o las casas de estudio las transformarán en boliches, depósitos de calzado o canchas de pelota a paleta?

Al respecto conversé con el argentino Pastor Sastre, nacido en 1914. Sé que falleció, pero no puedo precisar en qué año. Fue mi profesor de economía política en la Escuela Nacional de Comercio Juan Bautista de la Salle, conocida como «el Comercial de Ramos Mejía». Doctor en Derecho por la Universidad de Buenos Aires, además de profesor fue funcionario en la municipalidad de Córdoba, fiscal de Estado y tierras públicas en dicha provincia, abogado del Banco Hipotecario Nacional y asesor legal y subgerente del Banco Central.

-Tengo en mi biblioteca un ejemplar de Economía política , cuya primera edición usted publicó en 1951. La obra me genera sensaciones encontradas, por el contraste que existe entre el prólogo y el texto.

-Explíquese, por favor.

-¿Qué puedo pensar de un manual de economía política que no contiene un solo gráfico, ni siquiera el de oferta y demanda? Menos mal que el libro también tiene un prólogo, que por favor quiero que lo lea.

-Con gusto. «La esencia pedagógica consiste en evitar sufrimientos a la juventud que acude a las aulas para aprender. Bondad en el profesor, suprema comprensión, ver lo profundamente humano de cada joven, auscultar sus problemas e inquietudes, guiarlos con mano firme, maestra, convincente y persuasiva, despertarlo a la vida, estimularlo, dirigirlo, enderezarlo, proceder sin renunciamientos, con franqueza y sin reacciones mezquinas, sembrando y actuando en forma ejemplar y generosa, allí donde el espíritu ignaro reacciona con encono. El clamor es aprender sin sufrir, sin tortura, y de allí la responsabilidad del profesor que hace agradable la enseñanza, atrayente y seductora, conduciendo y contribuyendo a formar espíritus firmes, leales a sanos principios, en un ambiente feliz, adonde nadie acude con temor. Por eso, en los dinteles de las aulas debería existir esta inscripción: aquí se aprende a vivir».

-¿Sabe por qué me acuerdo tanto, y tan bien, de usted? Porque no armó el curso sobre el texto del libro, sino sobre su prólogo. Usted se ubicaba al fondo del salón y organizaba debates. En 1959 temas no faltaban: la presidencia de Arturo Frondizi, la Revolución Cubana, etcétera. Nos enseñó algo mucho más importante que economía, nos enseñó a pensar.

-Me hizo acordar lo que Paul Marlor Sweezy dijo de uno de sus profesores: «A Joseph Alois Schumpeter no le importaba lo que pensáramos, mientras pensáramos».

-En varias partes del mundo el coronavirus está forzando a dictar las clases sin la interacción directa, que se da en las aulas. ¿Qué piensa?

-La educación a distancia tiene sentido más allá del coronavirus. Porque, por razones geográficas, de horario, etc., no todo el mundo puede acceder a clases presenciales. Por otra parte, tal como era de esperar, la tecnología de la interacción fue mejorando.

-Cierto, pero existiendo la posibilidad, la interacción personal es mejor.

-De acuerdo, pero una clase a distancia es mucho mejor que nada. Por varias razones…

-Explíquese.

-Primero, por el propio dictado de las materias. Al alumno que piensa que el tema que se iba a desarrollar en la clase que no se dictó no se puede tomar en el examen, hay que enseñarle que no ponga el carro delante del caballo. Porque la clave está en saber, el examen es accidental. ¿Se dejaría usted operar por un cirujano que en el quirófano le dijera que no está seguro de lo que tiene que hacer, porque la clase correspondiente a su operación no fue dictada, debido al coronavirus?

-Usted mencionó varias razones.

-Todo sirve para enseñar y aprender. Como consecuencia del aislamiento todos estamos viviendo una experiencia muy particular. Excelente material para reflexionar con los alumnos. Por ejemplo, la cuestión de la disciplina y la exigencia. Quienes estamos en casa exigimos que nuestros compatriotas, los que preparan los alimentos y las bebidas, no bajen los brazos, para que la calidad de lo que consumimos no disminuya. Pues bien, a los alumnos hay que ayudarlos a que desarrollen la misma conducta.

-¿Cómo?

-Pidiéndoles que continúen con las tareas que les habíamos encargado, enviándoles nuevos deberes, etc. ¿Qué pretextos existen para conseguir material, teniendo acceso a internet? Además, perdón por la obviedad, pero el aislamiento supone que tienen «24 horas diarias» para seguir estudiando.

-Los psicólogos hablan del desánimo, los temores, etcétera.

-Soy abogado, y usted economista, así que ni usted ni yo podemos hablar en términos profesionales. Pero sí en términos humanos, sin pretender vender buzones. El modelo Diluvio Universal, que usted explicó en la primera clase de su curso de economía I, es hoy relevante, no solamente para adoptar decisiones sino para darnos fuerza para seguir adelante.

-Dígalo usted, por favor.

-Más del 99% de la humanidad, cuando «deje de llover», saldremos del Arca de Noé para volver a hacer la vida normal. Entre paréntesis, en esta crisis el Arca es nuestra casa. Se trata, entonces, de sobrellevar esta contingencia de la mejor manera posible, pero sin olvidar que la vida tiene sentido, y que la vamos a seguir viviendo luego de que el coronavirus desaparezca, o se lo circunscriba mejor que ahora.

-¿Cómo será el mundo futuro?

-Imposible saberlo a ciencia cierta, pero la historia brinda algunas pistas. Primero: la unión que genera el espanto difícilmente se pueda mantener cuando el desafío haya desaparecido. Hoy, los hinchas de River y de Boca se saludan como hermanos, pero ya veremos…

-¿Habrá un antes y un después?

-Quienes piensan que el mundo será totalmente diferente no se apoyan en ningún antecedente histórico. Algunas cosas serán diferentes, pero me atrevo a pronosticar que la mayoría no; pero estas consideraciones hoy distraen, y lo que tenemos que hacer es focalizar nuestra mente.

-Volvamos al plano educativo.

-Como le dije, lo que genera el coronavirus tiene que servir como material para la interacción con los alumnos. Ejemplos: podemos explicar el impacto de hechos esperados e inesperados; cómo se procede sobre la marcha; la frecuencia con la cual se cometen errores y la velocidad con la cual se los corrige; a separar la verdadera información de la mera conjetura; a no darnos manija con inverificables teorías conspirativas, a las cuales los argentinos somos tan afectos, etcétera.

-Inolvidable profesor, muchas gracias.

Comparte este contenido:

Argentina: La Justicia entrerriana habilitó el uso de celulares a personas privadas de su libertad

Redacción: Análisis Digital

La medida fue adoptada esta mañana, luego analizar una presentación realizada por abogados ante los Juzgados de Ejecución de la provincia, solicitando tengan a bien disponer de manera coordinada con las autoridades del Servicio Penitenciario, la autorización temporaria del uso de telefonía celular por parte de los internes de las Unidades Penales de la provincia de Entre Ríos durante la vigencia de la situación de excepción provocada por la pandemia del virus Covid-19.

El Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos autorizó hoy el uso de telefonía celular en todas las unidades penitenciarias de la provincia durante el período en el que subsista la situación de pandemia y la vigencia del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el gobierno nacional y sus prórrogas.

En la resolución se dispuso también la creación de un protocolo normativo de implementación de la actual autorización la que será concretada en la órbita del Ministerio de Gobierno y Justicia de la provincia y en cuya confección participarán ademáss de las autoridades que el Poder Ejecutivo disponga, representantes de los Ministerios Públicos de la Defensa y Fiscal y jueces de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de la provincia, todo ello a los fines de asegurar la efectiva comunicación de los internos con sus familiares y que no sea utilizada con fines ilícitos.

La resolución, firmada por el presidente del STJ, Martín Carbonell; Susana medina y Miguel Giorgio fue luego de analizar lo peticionado y las posiciones del Defensor General Maximiliano Benítez y el Procurador General Jorge Amilcar Luciano García quienes consideraron razonable la petición de los delegados de flexibilizar la tenencia y uso de telefonía celular durante la vigencia del aislamiento toda vez que disminuye los efectos deletereos de las restriccciones a la comunicación fisica con sus familias.

Reunión con autoridades del gobierno

Carbonell, Medina y Giorgio se reunieron esta mañana luego de firmada la resolución, con la ministra de Gobierno y Justicia Rosario Romero, el Defensor Benítez, el Procurador García y el Director del Servicio Penitenciario de la provincia Inspector General Dr. Marcelo Rubén Sánchez para avanzar en la elaboración del protocolo correspondiente.

La medida había sido solicitada por los organismos de derechos humanos de la provincia, entre otras peticiones que habían realizado a través de un documento al gobierno de la provincia. Si bien la respuesta del Poder Judicial no responde, necesariamente, a la interpelación de los organismos de derechos humanos, es una medida en el mismo sentido del petitorio realizado.

Fuente: https://www.analisisdigital.com.ar/judiciales/2020/04/03/la-justicia-entrerriana-habilito-el-uso-de-celulares-personas-privadas-de-su

Comparte este contenido:

Pesadillas futuristas: ¿fin de la «forma-sindicato»?

Por: Néstor Kohan

(Una simple experiencia personal en la Asociación Gremial Docente de la Universidad de Buenos Aires)

“El futuro ya llegó. Llegó como vos no lo esperabas”. Así de simple. Los Redondos se adelantaron.

En medio de la pandemia del coronavirus (COVID-19), estamos inmersos en una película futurista. Pero no en un sillón acolchonado frente a una pantalla 3D sino como protagonistas involuntarios de la vida real y cotidiana. La calle vacía. No le puedo dar la mano a mis amigos. ¡Cuidado con compartir un mate! Si me acerco para abrazar o besar a un ser querido, pega un saltito hacia atrás con rostro temeroso. “El 70 u 80 % de la población mundial se contagiará indefectiblemente”. ¿Me estarán vendiendo, una vez más, un viejo televisor blanco y negro? No, unas médicas amigas (especialistas) me aseguran que el contagio es… INEXORABLE.

Esta distopía, argentina pero también mundial (¿generada artificialmente como guerra biológica para dirimir conflictos comerciales y someter a enemigos díscolos como China e Irán?), se escapó de las manos. Frankenstein nunca fue obediente ante sus creadores. El panorama actual superó ampliamente la colección de relatos imaginarios sobre un futuro sombrío y apocalíptico que recopiló y comentó F. Jameson en su enciclopédico y abrumador libro (Fredric Jameson [2005] (2009): Arqueologías del futuro. El deseo llamado utopía y otras aproximaciones de ciencia ficción. Madrid, Akal).

En ese contexto tan inesperado, ¿tendrán por fin razón los preconizadores del «fin del trabajo» (Jeremy Rifkin), el «agotamiento de la política» (Daniel Bell), el ocaso de los «grandes relatos» (Jean-François Lyotard), el «fin de la historia» (Francis Fukuyama), la opacidad de la «forma-sindicato» (Toni Negri)? ¿Habremos llegado acaso al fin del capitalismo senil?

Estas breves líneas no tienen una finalidad teórica. No aspiran a refutar tesis ni a postular nuevas hipótesis. Son muchísimo más modestas. Pero sencillamente descreo de todos esos apocalipsis cuasi bíblicos. Las armas biológicas ya se habían utilizado anteriormente en los conflictos sociales. Ahora se subió la apuesta, sin duda. Estamos en otra escala. Pero ni desapareció el Mercado como regulador social ni falleció la lógica de la acumulación ni se esfumaron los intereses privados. Puede ser muy simplón, pero basta ir al supermercado o a la farmacia y la «inexistencia» del alcohol en gel o los sobreprecios de los remedios (como el jabón quirúrgico) nos traen abruptamente a la realidad.

Sin pretensiones teóricas entonces. Sin aparato crítico. Sin bibliografía exhaustiva. Estas breves líneas pretenden tan sólo agradecer. Y lo hacen desde un humilde lugar personal. Esos mismos que no gozan de buena prensa en las ciencias sociales. No pretendo aquí reflotar el oxidado, vetusto e inoperante «individualismo metodológico» (la versión «cool» de las «robinsonadas» de las que solía reírse el viejo Karl Marx).

Pido únicamente permiso para contar una simple experiencia y en consonancia, agradecer. Tan sólo eso. La palabra diabólica es: cáncer. Y por si no alcanzara, una cirujana me agregó una segunda: metástasis. Demoledor. Pero calma. Respirar hondo y preguntarse, como un muchacho llamado Lenin: ¿qué hacer? El endocrinólogo («es el mejor», «confiá en él», «es el que más sabe en Argentina», todo el mundo me repetía mientras hacía fila en el hospital) trató de apaciguar. «No te morís de forma inmediata. Tranquilo. Pero tampoco podés esperar más de cuatro meses», me recalcó, rodeado de su equipo.

Bueno. Y ahí comenzó una interminable seguidilla de análisis, filas, turnos, colas, números y horas y horas de espera. Por suerte podía llevarme conmigo una biblioteca en la mochila para no desesperarme. Pero el tiempo pasaba. Y las autorizaciones de los principales pedidos médicos para la intervención eran rechazadas. De nuevo la disyuntiva: ¿qué hacer? Varias médicas me decían: «lo importante es no estresarse». Pero el reloj corría y las agujas no se detienen. El calendario avanzaba. ¡Y eso que todavía no había comenzado el coronavirus!

Como la mayoría de la gente común, apelé a lo que mejor conozco. «El que no llora, no mama». Quien no reclama y no lucha, no consigue nada. A lo largo de toda mi vida aprendí que quien no da la pelea, está perdido desde el inicio. Por eso paré la pelota, di un paso al costado en la fila hospitalaria y me comuniqué con mi sindicato, la AGD-UBA (Asociación Gremial Docente de la Universidad de Buenos Aires), asociación a la que pertenezco –por decisión propia, no compulsivamente– hace unas décadas (tengo el Nro. 569 de afiliado). Le escribí a la compañera Fabiola Ferro, delegada de mi lugar de trabajo. Le explico brevemente la situación apremiante en la que me encuentro. Me contestó al instante. ¡Y eso que eran vacaciones! Cerrada la Facultad, cerrada la UBA, nadie en el sindicato, pero me contestó. Todo lo contrario de cómo se comportaría un sindicato burocrático (de esos que te afilian compulsivamente, con la complicidad gerencial de las máximas autoridades, y sólo les interesa tu aporte mensual).

La delegada inmediatamente me comunicó con la compañera Ileana Celotto, que tiene una responsabilidad mayor en el sindicato. Sin conocernos, ella también me devolvió los mensajes, incluso sin estar en Buenos Aires. Se ocupó, «se movió», no lo cajoneó como suele pasar en una institución burocrática. Todo esto parece que ocurrió hace tres siglos… antes del coronavirus. Pero fue hace apenas poquitos meses.

La representante de la AGD me consiguió entonces una reunión para destrabar las autorizaciones para operarme. No estaba en juego, lo sé perfectamente, el programa bolchevique de la revolución mundial. No se jugaba al todo o nada el socialismo a escala internacional. Nada de eso. No me confundo. Pero un cáncer no se hace esperar. Esta enfermedad tiene una crueldad que genera, como mínimo, respeto.  Porque es inflexible y taxativa.

Sólo se trataba de algo sin mayores implicancias políticas. La vida de un trabajador docente de la UBA, que para el sistema no vale nada. No nos engañemos. Aún habiendo intentado ayudar a leer, estudiar e investigar a varios miles de estudiantes, aún habiendo aportado varias décadas de mi salario, sin autorización…, no había operación. Y sin operación para extirpar el cáncer a tiempo… buena suerte y hasta luego. Que pase el que sigue. Pero no fue así. El sindicato AGD intervino. Me apoyó.

Creo humildemente que yo no estaba solicitando nada exótico. Sólo lo que me corresponde. Y la AGD me apoyó. (En el balance personal –pues en las situaciones límites suelen emerger meditaciones de este tipo– no me arrepiento de haber sido fiel y leal a todas las luchas sindicales durante décadas, apostando la mayoría de las veces por paros activos para no vaciar la UBA, desde carpas en la calle hasta clases públicas y cortes de avenida. En su momento en nuestra cátedra de teoría crítica latinoamericana compramos un megáfono propio para esas clases en el rectorado, en las avenidas o donde sea; megáfono que finalmente se dio por vencido y dejó de funcionar).

Lo concreto, terrenal y simple: pude operarme, en medio de la pandemia del coronavirus, gracias a la intervención de la AGD ( con la enorme ayuda de toda la clase trabajadora del Hospital de Clínicas, hospital universitario público que brinda salud pública… ¡gente sin igual!… a quienes agradezco en otra carta).

El futuro sigue abierto. Pero la pelea siempre hay que darla.

Por eso cuando escucho o leo análisis tan banales, superficiales, improvisados, que siguiendo la moda del momento dan por finiquitada «la forma-sindical» como si fuera un objeto vetusto de museo, sin pararse a pensar o reflexionar dos minutos, siento un poco de bronca y otro poco de pena.

Pero no todo está perdido. Por eso quiero terminar esta carta AGRADECIENDO LA SOLIDARIDAD DE LA AGD, sindicato de la clase trabajadora docente de la Universidad de Buenos Aires. Universidad pública, gratuita, laica, masiva y con pretensiones de calidad.

Fuente: https://www.lahaine.org/mundo.php/pesadillas-futuristas-ifin-de-la

Comparte este contenido:

Libro (PDF) Deslegitimar el capitalismo. Reconstruir la esperanza

Reseña: CLACSO

Los actuales responsables de la economía mundial legitiman al capitalismo como sistema económico, como fundamento de la organización política y como cultural del progreso. Sostienen que globalizar los intercambios en el marco del libre mercado permitirá trascender la pobreza y entrar en un equilibrio y emancipación humana. Sin embargo, luego de tres siglos, amén de una enorme producción de riqueza, y de espectaculares progresos científicos y técnicos, la cantidad de pobres y las distancias sociales alcanzan su cumbre. Puede hablarse de una progresiva destrucción de la naturaleza, de los pueblos y naciones, y del individuo.

El presente libro ilustra estos fenómenos y la riqueza de la convergencia de los movimientos alternativos contemporáneos, quienes movilizan fuerzas sociales ante la necesidad de una visión estratégica a largo plazo, deslegitiman el capitalismo y abren la perspectiva poscapitalista.

 

Autor/a:          Houtart, François

Editorial/Editor:  CLACSO

Año de publicación: 2009

País (es): Argentina

Idioma: Español.

ISBN :    978-9962-645-23-8

 

Descarga:   Deslegitimar el capitalismo. Reconstruir la esperanza

 

Fuente  e Imagen:   http://biblioteca.clacso.edu.ar/colecciones/saladelectura/index.php?a=q&r=1&hs=1&t=1&q=Sistema+educativo&j=dl&c=general&fqf=TX&Submit=buscar+en+CLACSO

Comparte este contenido:

Coronavirus en Brasil: la embajada china repudió un tuit racista del ministro de Educación

América del Sur/ Brasil/ 07.04.2020/ Fuente: www.clarin.com.

La embajada de China en Brasil repudió este domingo un mensaje difundido por Abraham Weintraub, el ministro de Educación brasileño, en su cuenta de Twitter, en el que vinculaba a aquel país con el origen del coronavirus. «Instamos a que corrijan los errores que cometieron y dejen de acusar sin fundamentos a China», escribió la representación diplomática de Beijing.

La polémica es con el ministro Weintraub, que el sábado publicó un tuit en el que vinculaba a China con el origen del coronavirus.

«Geopolíticamente, quién podLá saliL foLtalecido, en téLminos Lelativos, de esta cLisis mundial? Podrá ser Cebolinha? Quiénes son los aliados en BLasil del plan infalible de Cebolinha para dominaL el mundo? SeLán Cascarón o hay más amiguitos?», fue el tuit publicado en la cuenta de Weintraub.

En ese mensaje, cambió las R por la L, como forma de estigmatizar a los ciudadanos chinos. El escrito fue acompañado por una imagen de Cebolinha -personaje de historieta muy famoso en Brasil- portando una bandera de China.

Horas más tarde, el funcionario borró el mensaje. Pero la embajada china en Brasil hizo su descargo un día después.

«El 5 de abril, el ministro de Educación, ignorando la posición china en diversas gestiones, hizo declaraciones difamatorias contra China en las redes sociales, estigmatizándola al vincularla con el origen de la COVID-19″, comienza el comunicado diplomático.

El tuit estigmatizante de Weintraub, ministro de Educación de Brasil, contra China por el coronavirus.

El tuit estigmatizante de Weintraub, ministro de Educación de Brasil, contra China por el coronavirus.

«Deliberadamente realizadas, estas declaraciones son completamente absurdas y despreciables, con un cuño fuertemente racista y objetivos indescriptibles, con consecuencias negativas en el desarrollo saludable de las relaciones bilaterales entre los países. La parte china manifiesta una fuerte indignación y su repudio a este tipo de actitudes», sigue la misiva.

Después de destacar que la pandemia solo será vencida con la cooperación global, recuerda que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la comunidad internacional se «oponen explícitamente a asociar al virus con cierto país o cierta región, combatiendo a la estigmatización por sobre todas las cosas».

Y culmina con un llamado a la retractación: «Instamos a que algunos individuos brasileños corrijan los errores que cometieron y detengan sus acusaciones infundadas contra China».

El comunicado de la Embajada de China en Brasil, después de las declaraciones estigmatizantes del ministro de Educación.

El comunicado de la Embajada de China en Brasil, después de las declaraciones estigmatizantes del ministro de Educación.

No es la primera vez que una autoridad brasileña tuvo problemas por un mensaje sobre el coronavirus publicado en Twitter.

A Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, la red social le eliminó tres mensajes por desautorizar el aislamiento social y, de esta manera, ir contra las recomendaciones del Ministerio de Salud.

Coronavirus en Brasil: se acerca a los 500 muertos y ya supera los 11.000 casos

Y tampoco es la primera desventura de Weintraub en la red social. Algunos errores ortográficos lo expusieron ante la siempre atenta, y solo a veces impiadosa, audiencia de Twitter.

Fuente de la noticia: https://www.clarin.com/mundo/coronavirus-brasil-embajada-china-repudio-tuit-racista-ministro-educacion_0_aGEUJ2Fju.html

Comparte este contenido:
Page 122 of 657
1 120 121 122 123 124 657