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Venezuela: El Derecho educativo en el contexto social

El Derecho educativo en el contexto social

Autor: Prof. Dioni Valladares

Miembro de FOVEDE

Con el transcurrir de la historia la humanidad ha venido evolucionando en diferentes aspectos y uno de ellos es el desarrollo en las relacionessocialesde allí que para poder convivir y mantener relaciones armoniosas,los seres humanos hayan tenido quevivir conflictos inevitables que han obligado a la organizaciónde la sociedad y esto a su vez  ha conllevado al diseñode instrumentos jurídicos y a la implementacion de normas normas cuyo cumplimiento deben ser obligatorios. Muchas ellas se realizan acorde a la culturay valores de los países en laque selegislan los diversos preceptos jurídicos; sin embargo existen leyes que establecen los derechos que son comunes a toda sociedad y las mismas están regidas por convenios internacionales por lo que deben ser cumplidas, a esto sele conoce como derechos humanos que de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas  se definen como:

          Los derechos humanos son derechos inherentes a todos los seres humanos, sin distinción alguna de raza, sexo, nacionalidad, origen étnico, lengua, religión o cualquier otra condición. Entre los derechos humanos se incluyen el derecho a la vida y a la libertad; a no estar sometido ni a esclavitud ni a torturas; a la libertad de opinión y de expresión; a la educación y al trabajo, entre otros muchos. Estos derechos corresponden a todas las personas, sin discriminación alguna. (ONU 2018)

La Organización de la Naciones Unidades debe velar  para que las más de doscientas naciones que conforman el mencionado organismo hagan valer el cumplimiento de estos derechos, por lo tanto creó un instrumento jurídico surgido al finalizar la segunda guerra mundial el mismo es conocido como Declaración Universal de los Derechos Humanos, en ella se estatuyen los derechos a lo que todo ser humano debería tener acceso, uno de esos derechos humanos es la educación que además es un derecho humano fundamental, lo que quiere decir que los países deberían legislar sobre materia educativa para así garantizar este derecho a sus ciudadanos.

La educación es  fundamental para el desarrollo de toda sociedad, de allí que debe tratársele con la seriedad que el tema amerita; entonces basado en ello se hace necesario que el hecho educativo posea carácter científico y que por tal necesite apoyarse en otras ciencias; sin duda uno de los saberes de apoyo fundamental en la educación es las ciencias jurídicas divididas en varias especializaciones,entre ellas está derecho educativo que, aunque no sea autónoma, sino que es parte del derecho administrativo y que de acuerdo a lo señalado por Canelas es de suma importancia:

Es el conjunto de normas, principios y conductas que regulan el fenómeno educativo, su organización, su entorno, sus actores y su inserción en la comunidad. Estudia esencialmente la norma educacional su integración en el sistema y su incumbencia desde el punto de vista propio del derecho. En definitiva, conoce de la regulación educativa en todos sus aspectos.

Es de primordial importancia el derecho educativo, pues éste nos dará las herramientas necesarias para crear toda la normativa con que se rija el sistema educativo; es tan importante que sería prácticamente imposible asegurar un derecho fundamental como la educación sin el derecho educativo, pues es con esta especialidad que se garantizará los análisis, estudios y compresion que nos conlleve a garantizar el cumplimiento del sagrado Derecho a la Educación tal como está estipulado en la Declaración de los Derechos Humanos.

En el contexto social actual se requiere de un trabajo arduo para que estos derechos no sean cercenados; el docente, por tanto. debe ser una persona con un criterio definido y ser una persona con una alta capacidad analítica y critica ya que el derecho educativo abarca diversidad de temas relacionado al hecho educacional, citando a García quien menciona lo siguiente:

          El Derecho Educativo comprende una temática jurídica amplia, que incluye al derecho fundamental de la educación y su correlato enseñar y aprender, los educandos, los docentes y sus interacciones, sus derechos, sus obligaciones, la organización educativa, la institución educativa, (sus autoridades, sus objetivos, estructuras, tecnologías, medios, su regulación normativa sus principios y valores). Toda esta enumeración adquiere un carácter enunciativo.

De acuerdo a lo anterior, es notorio que al hablar de derecho educativo, no nos estamos refiriendo sólo al hecho de garantizar la educación sino también a todo lo surgido de la garantía de tal derecho, ya que una vez garantizado el derecho a la educación el funcionamiento de la acción educativa también debe estar normado ya que estará funcionando porque personas lo hacen funcionar de allí que las personas que participen en el acto educativo también deben regirse por normativas para que la practica educativa sea armoniosa y de calidad, de allí que es ineludible la  existencia de  los instrumentos necesarios para garantizar deberes y derechos de estudiantes y docentes, así como las normas que rijan el funcionamientos de las distintas instituciones educativas en todos sus niveles sean estas públicas o privadas, siendo ésta, la única manera de lograr tener una educación que cumpla con los estándares de calidad que requiere la sociedad actual y que esta contribuya a formar mejores ciudadanos que aporten a un mejor desarrollo de la humanidad.

Para finalizar  es importante hacer mención a que las leyes siempre han jugado un papel de relevancia para que podamos convivir en sociedad, sin la existencia de las mismas resultaría cuesta arriba preservar el orden y la convivencia,para nadie  es un secreto que en la sociedad en la que vivimos casi todo está normado , un hecho resaltante es que toda nación o país posee  su marco jurídico que ordena las distintas materias y la educación no escapa de ella. Como docentes en los momentos actuales poseemos un magno compromiso ya que como protagonistas de la praxis educativa debemos estar preparados en distintos ámbitos y uno de ellos precisamente es el derecho. Es necesario que quien ejerza la carrera docente posea los conocimientos básicos en jurisprudencia educativa , pues el docente debe ser un actor activo para la defensa de lo relacionado a la educación y luchar en el caso que sea necesario para que por parte del estado se cumplan los derechos que se han obtenido en materia educativa.

El derecho educativo como se pudo estudiar es de vital importancia pues contempla jurídicamente lo relacionado a un derecho humano fundamental como es el Derecho a la Educación, que está establecida en la Declaración Universal de los Derechos Humanos del año 1948.Es por tanto menester que los gobiernos de las diferentes naciones deban poner especial interés en este tema ya que la educación ha de ser una función indeclinable para cada país pues es la educación el instrumento de mayor importancia que poseen la naciones para su pleno desarrollo por la única y sencilla razón que es la educación la que permite formar a todas las generaciones de una nación.

Fuentes de investigación

 

 

  • García Leiva, Luis Alberto. (s/f). El derecho educativo: sus relaciones con el desarrollo en la Sociedad del Conocimiento. Docente Universitario en Derecho Administrativo Universidad Nacional de La Plata Argentina. Revista Iberoamericana de Educación.  Disponible en rieoei.org/deloslectores/060garcialeiva.PDF. Extraído marzo 2017
  • https://www.un.org/es/sections/issues-depth/human-rights/index.html

Autor: Dioni Valladares

Fuente de la Información: OVE

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La necesidad de revertir la inmunización social como estrategia biopolítica

La inmunidad en su acepción profiláctica es una práctica sociocultural a la que se le ha adherido una valoración representacional predominantemente favorable. Son muy pocos los que detractan de ella o ponen en duda sus beneficios. Casi que se considera un contrasentido hacerle observaciones o críticas. Dentro de las justificaciones para neutralizar cualquiera observación al respecto, destaca la argumentación de que ella es tan natural como el sistema inmunitario inherente al cuerpo humano. Igual ocurre con su acepción sociopolítica, en tanto dispensa o exención de obligaciones o retribuciones a algunas personas, tan solo es objeto de señalamiento cuando se juzga inmerecida. Sin embargo, su connotación asocia la inmunización a la acción o al poder de quien la propicia, administra o concede. Entre estos agentes y agencias instituidos a cargo de ella sobresale el Estado y la gubernamentalidad. El Estado se ha atribuido a través de técnicas de gobierno, la vigilancia y el control de las poblaciones, entre éstas, la del control epidemiológico. No obstante, esta atribución no ha contado con el beneplácito de grupos sociales, como los denominados neoliberales, quienes consideran que esto ocasiona gastos económicos al presupuesto gubernamental que son requeridos como inversiones, créditos, préstamos, etcétera, para beneficio principalmente de los sectores privados; y que por ello presionan para que los servicios de salud pública, inmunización o sanitarios, sean privatizados y así generen más beneficios para el mismo sector o grupo. De aquí que la inmunización, o la salud pública, se haya convertido en un asunto político, o mejor dicho, biopolítico.

La biopolítica como dominio y resistencia.

Para el autor de esta categoría de biopolítica, Michel Foucault, lo importante de ella radica en su aportación para entender la transformación del Estado moderno al incorporar la vida (sus condiciones de producción y de reproducción) al ejercicio de la gubernamentalidad, –de la construcción de técnicas y dispositivos de seguridad del Estado para salvaguardarse–, por cuanto la salud de la población es el reverso de la salud del mercado y también de la salud del Estado. La biopolítica la concibe Foucault (2007) como el complejo de tecnologías disciplinarias o acciones de poder sobre los aspectos anatómicos y biológicos del cuerpo considerado individuamente como una máquina reparable y colectivamente como especie gobernable. De esta forma el Estado moderno estableció las condiciones para el «cuidado de la vida», de su gestión y de su administración, de su gubernamentalidad, por ejemplo, a través de las políticas sanitarias.

Es así como los enunciados políticos del Estado de Bienestar (que «desprivatiza» y hace pública la asistencia social del Estado), o del Estado Neoliberal (reprivatizando el asistencialismo social y público del Estado), devienen en poder de normalización o disciplinamiento biopolítico de los cuerpos al regimentarlos normativamente (por ejemplo, la cuarentena o el confinamiento). En la medida que, al interesarse por la administración de la salud y/o calidad de vida de los cuerpos, debido a su potencial efecto recursivo sobre la economía y la legitimidad del Estado mismo, intervienen activamente en sus condiciones de vida asimilándolas a cierta racionalidad gubernamental por medio de las normas impuestas.

En consecuencia, la biopolítica responde a una nueva racionalidad política interesada instrumentalmente en la gestión de los problemas que se le plantean a la práctica de la gubernamentalidad, referidos a las condiciones de vida de las poblaciones (salud, natalidad, morbilidad, mortalidad, etcétera); asumidos individualmente y como población a regular mediante acciones de poder en cuanto cuerpos dóciles y útiles, fuerza productiva o laboral para el capital, por vía de su examinación médica y estadística.

Hay que advertir que la categoría de biopolítica es asumida por otros autores desde otra significación. Como es el caso de Negri (2003), quien la significó como resistencia de la vida ante el biopoder (el poder sobre la vida); es decir, su capacidad de creación, de invención, de producción, de subjetivación-objetivación, de afectualidad, de autopoiésis, «es lo que llamamos ‘biopolítico’: la resistencia de la vida al poder, dentro de un mismo poder que ha inventado la vida» (p.63). Esta referencia a la biopolítica como resistencia al biopoder nos relaciona con el planteamiento ecosófico de Guattari (1996). Por cuanto su conceptualización biocéntrica, demanda la necesidad de definir, criticar y reconfigurar las existencialidades en un marco ecológico integral histórico de relaciones ambientales, sociales y mentales, y para cuidar, defender y redefinir, por consiguiente, la vida planetaria o local en la actualidad ante las crisis superpuestas que atravesamos (sanitaria, econímica, social, política, educativa, etcétera) que contemple a la naturaleza recuperada como otredad, y civilizatoriamente a las sociedades proyectándolas en otro mundo posible para el habitar contrario a la explotación de la Tierra o Pachamama y de los seres humanos.

Inmunidad y comunidad.

Si se pone en perspectiva histórica el análisis de la relación entre la individuación subjetiva y las sociedades modernas capitalistas, estas se reproducen como comunidad tomando previsiones inmunitarias con respecto a que se puedan intensificar y extender sus formas colectivistas o comunitarias de expresión. Por ello la dialéctica de lo individualista y lo común no se resuelve a favor de lo comunitario ya que la hegemónica inmunización contra lo colectivo o común se regula favoreciendo al individualismo o separación de los unos respecto de otros en sus variadas formas de manifestación. De esta manera, lo individualista se vuelve complementario y no contradictorio de la comunidad.

La relación potencialmente emancipadora de lo comunitario entre los integrantes de las sociedades es contrarrestada por vía de la acción anticomunitaria y los dispositivos de inmunización negativa de la biopolítica del Estado moderno que principalmente busca en la inmunización social, no tan solo médico-sanitaria, su legitimidad soberana (la potestad de «hacer vivir y dejar morir», o de cómo vivir y cómo morir), de allí la estrategia de la «inmunizadora reclusión» de los cuerpos o aislamiento de los demás con pandemia o sin pandemia, por paradójico que parezca, recordemos la existencia foucaulteana de los otros encierros disciplinarios o «normalizadores» inmunitarios para hacer los «cuerpos dóciles y útiles»: el hospital, el cuartel, la escuela, la cárcel, etcétera. Por ello, Espósito (2006) señala la ambivalencia del nexo de la vida con la inmunización o biopolítica negativa y con la inmunización o biopolítica positiva, «la inmunidad no es únicamente la relación que vincula la vida con el poder, sino el poder de conservación de la vida» (p. 74).

La soberanía del poder estatal moderno sobre el «hacer vivir» y el «dejar morir» (Foucault, 2000), revela la falsa retórica discursiva de la radicación de la soberanía en los ciudadanos, el pueblo o la comunidad. Esa legalmente supuesta soberanía es usurpada al pueblo a través del dispositivo del voto en las «democracias representativas». Por medio de la elección de representantes se expropia esa soberanía popular por esos supuestos representantes electos que deciden en su nombre y contra ellos. En la medida que esta expropiación, junto con otras, es sancionada o recubierta con leyes, lo que supone su legitimación por el derecho dominante, el derecho mismo actúa como dispositivo inmunizador de quienes deseen actuar en su contra. De este modo el Estado y la gubernamentalidad capitalista liberal y neoliberal, así como la burocracia o la burguesía estatal en el capitalismo de Estado o «socialismo», previenen inmunizadoramente cualquiera forma de contrapoder emergente por parte del pueblo o de poder instituyente de la multitud. Asimismo, en las sociedades modernas capitalistas el derecho presupone y auspicia solapadamente la separación o el individualismo entre los sujetos para poder actuar como mecanismo inmunitario ante las rivalidades y acciones consideradas delictivas que surgen principalmente por disputas sobre las propiedades o las apropiaciones. El derecho acciona como dispositivo cohesionador e inmunizador ante los sujetos justificando contradictoriamente algún tipo de sentencia separadora prevalecientemente ya que no hay derecho moderno del todo o de todos, afianzador de lo igualitario-comunitario, sino de la parte o del fragmento individualista aunque su discurso se revista fetichistamente de justicia igualitaria para todos.

Para comprender mejor lo inmunitario, es necesario entender la etimología de munus, ya que de este término al agregarle los prefijos cum-im derivan los conceptos de communitas e immunitas que están intrínsecamente vinculados. El munus, en tanto vínculo, define a los integrantes de una comunidad ya que este es interpretado como un principio obligante o legal que contempla la exigencia o retribución de ser miembro de la comunidad. Principio o ley inherente a la comunidad del cual pueden ser dispensados o excluidos algunos miembros, según la lógica de seguridad o «protección» de la biopolítica del poder de Estado (sobre todo cuando aplica su política de exención o de estado de excepción) y la operacionalidad del gobierno y de la aceptación o de las resistencias que presenten los contrapoderes existentes de la colectividad, es decir, a partir de ese principio-ley se podría inmunizar a la comunidad respecto de sus integrantes. Este principio-ley es implícito a la constitución y existencia de toda comunidad moderna, por tanto ninguno de los dos términos precede al otro, la comunidad y el principio-ley están coimplicados. Por consiguiente, communitas e immunitas (Espósito, 2007)) no son conceptos opuestos, son polos de un continuum que no se pueden pensar aisladamente el uno del otro. Se semejan, en este aspecto coimplicativo, la comunidad y lo inmunitario a un cuerpo biológico cuyo sistema inmunitario actúa para sobrevivir.

La inmunidad se transforma así en un dispositivo que atraviesa a toda la comunidad en sus diferentes expresiones como cuerpo biológico, económico, social, político, etcétera. Desde esta perspectiva la comunidad se define internamente en relación o delimitación a lo que le es exterior, buscando inocularse ante ello, por ejemplo, en cuanto cuerpo militar se define inmunitariamente ante un posible enemigo invasor externo. Expandiendo por medio de la subjetivación ideológica el exceso de prevención inmunitaria frente a la amenaza contaminante de los migrantes, los extranjeros, los diferentes, etcétera.

A través de la extensión de este sentido inmunizador se forja una identidad que bloquea el reconocimiento de lo común en quienes son diferentes por no proceder de la misma comunidad y son excluidos o aislados. De este modo se pasa de una inmunización necesaria a un «exceso inmunitario». A la par, hacia su interior lo que cohesiona paradójicamente a la comunidad capitalista es su opuesto, lo propio, ya que lo propio es lo común. De aquí que de entrada, la comunidad moderna es una comunidad inmunizada ante lo colectivo o común que no sea el intercambio mercantil entre sus miembros de lo propio o lo que es de su propiedad, dan algo a cambio (por ejemplo, dinero) de lo que reciben (por ejemplo, mercancías). No obstante, este tipo de inmunidad es como una enfermedad autoinmune por alienante cuyo exceso inmunitario puede implosionar a la comunidad, como cuando se ataca una virosis inoculando al cuerpo riesgosamente con más virus, tratando de proteger la vida negativamente. En consecuencia, para una sociedad que aspire a emanciparse de esa lógica inmunizadora alienante de intercambio de propiedades, deberá revertir esa lógica inmunizadora mercantilista sustituyéndola por otra, una biopolítica emancipadora, que anteponga la prevalencia inmunitaria de los bienes comunes o valores de uso ante los valores de cambio mercantil entre propietarios intercambiantes.

La biopolítica emancipadora.

Ha de ser una biopolítica ecosófica liberadora actuante en función de la defensa de un Paradigma Ecoprotector Inmunitario que proponga rehabitar el mundo, una biopolítica inmunitaria impugnadora y confrontadora del biopoder soberano de un Estado y de una gubernamentalidad neoliberales, así como del biopoder del capitalismo de Estado, que arbitrariamente inmunizan negativamente la vida incrementando la exclusión, el aislamiento, el confinamiento, el encierro, la morbilidad, la mortalidad, etcétera. La soberanía del biopoder estatal, si bien es, por un lado, continuidad del antiguo poder soberano del monarca sobre la vida y la muerte; por otro lado, ha adquirido en la modernidad la forma biopolítica inmunitaria a través de las técnicas de gubernamentalidad o control de las poblaciones. Esa arbitrariedad soberana del Estado y su gubernamentalidad se devela como tal cuando se revela quienes son mayoritariamente inmunizados negativamente por el «exceso inmunitario» que puede conducir a sacrificar vidas: grupos sociales, étnicos, de género, etcétera, que ya habían sido segregados o subordinados en sus derechos dentro de las comunidades estratificadas. Realidad ésta que conlleva a establecer la correspondencia biunívoca, término a término, entre el par inmunidad-comunidad con el de derechos-humanos cuando consideramos que intrínsecamente están correlacionados porque se contienen recíprocamente para verificar su naturaleza ética o bioética, sobremanera si asumimos que la inmunidad debiera garantizar positivamente los derechos, o viceversa, de quienes son objeto de políticas inmunizadoras negativas. En este sentido, sustentamos la vigencia de proponer la necesidad de construir colectivamente un Paradigma Ecoprotector Inmunitario que guie y oriente las reflexiones y las acciones para hacer cohabitable el mundo ante las distintas pandemias sanitarias, económicas, sociales, políticas, etcétera, que vulneran la vida y la ponen en riesgo.

Referencias

Espósito, R. (2006). Bios. Biopolítica y filosofía. Buenos Aires: Editorial Amorrortu.

_________ (2007). Communitas. Origen y destino de la comunidad. Buenos Aires: Amorrortu.

Foucault, M. (2000). Defender la sociedad. Buenos Aires: Editorial FCE.

_________ (2007). Nacimiento de la biopolítica. Buenos Aires: Editorial FCE.

Guattari, F. (1996). Las tres ecologías. Valencia: Editorial Pre-Textos.

Negri, A. (2003). Del retorno. Abecedario biopolítico. Barcelona: Ediciones Debate.

Fuente: https://www.aporrea.org/tecno/a291009.html

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Venezuela: Campaña Maestros al Teléfono de Fe y Alegría busca optimizar la educación a distancia

América del Sur/ Venezuela/ 02.06.2020/ Fuente: efectococuyo.com.

 

Vencer barreras. Para lograr un mejor acompañamiento de los maestros de Fe y Alegría a sus alumnos durante la cuarentena por el COVID-19, se inició una campaña para dotar a los educadores de teléfonos inteligentes y así mejorar la calidad de la educación a distancia.

Debido a la suspensión de las clases presenciales por el nuevo coronavirus, docentes y directores del movimiento educativo han tenido que reinventarse para garantizar el derecho a la educación y la igualdad de oportunidades de 102.982 niñas, niños y adolescentes que forman parte de la institución. Sin embargo, para quienes no cuentan con esta herramienta tecnológica, el proceso se hace más difícil.

Desde que se detectaron los primeros casos de COVID-19 en Venezuela, solo el 58% de los docentes de la organización han podido trabajar a distancia. Mientras, solo el 43% de los estudiantes pudo participar en las actividades remotas, mientras que 57% no pudo ser localizado.

Por eso el programa Escuelas de Fe y Alegría, junto con la asociación Unidos en la Misión, lanzaron la iniciativa en redes sociales que llamaron Maestros al Teléfono. El objetivo es recaudar fondos para dotar de teléfonos inteligentes a sus 4.581 docentes de los 176 planteles que tienen en todo el país.

Intercambio cercano

La profesora Noelbys Aguilar, directora del programa Escuelas, explicó a Radio Fe y Alegría que la telefonía móvil “se ha convertido en este contexto de cuarentena social, en un medio tecnológico que facilita los procesos de enseñanza” y les permite a los educadores “estar más cerca” en esta situación.

Añadió que un teléfono inteligente cuenta con una variedad de funciones “que podemos poner al servicio educativo, permitiendo que el maestro produzca e intercambie contenido, estar en contacto con sus estudiantes y los representantes y así facilitar este proceso de educación a distancia”.

La educadora también detalló que la campaña Maestros al Teléfono va dirigida a todas las personas que dentro y fuera de Venezuela que puedan colaborar, “al igual que a instituciones y organizaciones que estén en condiciones de contribuir para generar las condiciones y seguir cambiando vidas a través de la educación“, reseña el sitio web de Radio Fe y Alegría.

Inclusión e igualdad

Los retos de no contar con un celular inteligente para la educación a distancia los conoce bien Irais González, la maestra de quinto grado de la escuela de Fe y Alegría San Judas Tadeo, en el barrio La Cruz de El Valle. Relató a Efecto Cocuyo cómo debe apoyarse en familiares y vecinos para poder recibir las guías de la dirección y hacérselas llegar a sus estudiantes, o para mantener contacto con los representantes.

También le ha tocado elaborar instructivos a mano y algunos alumnos que viven cerca de la zona acuden a su hogar a tomar fotos o a copiar las asignaciones en una hoja. Como mamá de un adolescente que está en bachillerato, también tiene dificultades para integrarse a grupos de WhatsApp de padres y para bajar las tareas de su hijo que se envían por correo.

“No espero que sea solo para mi, sino para todos mis compañeros, sí creo que haría una gran diferencia porque en estos momentos es indispensable la tecnología”, dijo.

La campaña confía en que “la implementación de tecnologías móviles hará que el aprendizaje sea más inclusivo, accesible e igualitario a lo largo de toda la vida de nuestros estudiantes. Si logramos poner por lo menos 5 teléfonos móviles por escuela, estaremos reduciendo el porcentaje de estudiantes no localizables y ampliando las oportunidades educativas”.

Fuente de la noticia: https://efectococuyo.com/la-humanidad/campana-maestros-al-telefono-de-fe-y-alegria-busca-optimizar-la-educacion-a-distancia/

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Venezuela: Nuestro Quehacer Docente y la Ética Robinsoniana, como Modelo para enfrentar la Crisis Axiológica Actual.

Nuestro Quehacer Docente y la Ética Robinsoniana, como Modelo para enfrentar la Crisis Axiológica Actual.

Autor: Dioni Valladares

Bolívar, quien es uno de los más grande personajes de la historia y nuestro Libertador, mencionaba en el célebre Congreso de Angostura: “…Moral y luces son nuestras primeras necesidades, en esa frase el Padre de la Patria nos invitaba a la imperiosa necesidad de ser seres éticos para salvar la Patria en aquel entonces de la garras del imperio español; pero no solo eso, sino también de nosotros mismos.

Bien es sabido en las ciencias históricas que el Congreso de Angostura sentó las bases de una nueva República y esto se logró sólo, mediante la discusión de los motivos que habían conllevado al fracaso de las Repúblicas anteriores, y que habían nacido del proceso independentista. Uno de los problemas que Bolívar analizó e hizo referencia en ese magistral discurso, fue el problema moral que enfrentaban los ciudadanos de la nueva República, y para ello propuso la creación de un nuevo poder que se añadirá a los tres poderes tradicionales y que tenía como función principal velar por el correcto comportamiento de los funcionarios públicos y del comportamiento ético de la sociedad en general. La mención a este hecho histórico se hace para denotar la importancia que tiene la formación, en lo seres humanos, pues, Bolívar para lograr tal elocuencia debió transitar por un proceso formativo donde tuvo la oportunidad de encontrarse con varios maestros que fueron forjando su personalidad.

La historiografía resalta con especial valor a uno de ellos : Simón Rodríguez, de quien hay pruebas fehacientes de la influencia que ejerció sobre el Libertador de las naciones del continente Sudamericano, para demostrar el respeto y admiración que sintió Bolívar por quien fuese su maestro, basta remitirnos a una carta que este le dirigiera a Rodríguez y de la cual se extraerá el párrafo siguiente: “…usted maestro mío, ¡cuanto debe haberme contemplado de cerca, aunque colocado a tan remota distancia! ¡Con que avidez había seguido usted mis pasos, dirigidos muy anticipadamente por usted mismo! Usted formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para lo grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que usted me señaló. (Bolìvar, 1824).

La anterior frase sustraída de la aludida carta que fue escrita en Pativilca, Bolivia en 1824 denota el gran respeto y admiración que sentía Bolívar por Rodríguez, lo que hace pensar que es irrefutable lo que con la praxis docente de Simón Rodríguez logró con el Libertador, tal hazaña hubiese sido imposible sin que Rodríguez no tuviese la ética necesaria para conducir a aquel niño a convertirse en la persona que fue, años más tarde.

Es importante observar qué contexto histórico ocurrieron estos hechos ya finalizando el siglo XVIII , cuando imperaba una sociedad que estaba en crisis, una sociedad donde la falta de escrúpulo era tal, que se veía normal la esclavitud, el racismo, el desconocimiento a la mujer como sujeto igual al hombre, y  tantos otros males del colonialismo; por lo tanto la ética exigía que se debía vencer esos abusos para una mejor sociedad, y por lo tanto, maestros como Rodríguez, con su noble compromiso ético y moral, encontró en la docencia el medio idóneo para influir en los jóvenes de la época, entre ellos Bolívar, quien vio la necesidad de romper con los esquemas de aquella sociedad.

Como en la época colonial, hoy nuestra sociedad esta en crisis, los problemas éticos y morales son otros pero se hace necesario que emulemos a ese espléndido  docente que fue Bolívar, y que con nuestro ejemplo inspiremos a nuestros estudiantes a que se conviertan en los agentes de cambios que hoy la sociedad requiere; por supuesto ubicándonos en el momento histórico que vivimos, pues, la sociedad actual no es la misma del siglo XVIII y XIX en la cual vivió Bolívar, por lo que nuestro quehacer docente necesariamente debe adecuarse a los nuevos tiempos.

Ser Docente hoy en día implica una enorme responsabilidad, un compromiso formidable y esto debe ir acompañado de que seamos referentes éticos y morales para esta generación que estamos formando, que han estado influenciados por valores negativos que se transmiten como normales, pero que tiene como objeto crear un ser que, además de no practicar valores éticos, sea un ser no pensante, un ser no crítico y que actué según lo impongan los medios de comunicación.

Como Docentes, debemos ser capaces en nuestro quehacer pedagógico, de ser los sembradores de esa semillita que reclama con urgencia nuestra sociedad, pero ¿qué reclama la sociedad de hoy al Educador?, la respuesta puede tener muchas aristas pero la más clara, sin duda alguna, es que con nuestros ejemplo seamos lideres que transcendamos el modelo de la vieja escuela que aún predomina y de la que muchos niegan salirse; debemos dejar de ser simples dadores de clase, para mutar hacia un nuevo modelo docente que eduque al joven para ser sujeto activo en la construcción d una nueva sociedad.

Es menester que el educador transmita con su ejemplo la imperiosa necesidad se ser sujetos éticos y morales, que muy a pesar de la crisis que enfrentamos no nos corrompamos; esto sin duda es un punto difícil hoy en nuestro país, pues, podemos observar Docentes que debido a la situación salarial están desmotivados,  cuestión que representa una situación grave, aunque es entendible que el Docente como ser humano, está lleno de sentimientos, resulta terrible que en un aula estén Docentes desmotivados, ya que un docente bajo esas condiciones, difícilmente transmite actitudes positivas a sus estudiantes y aún mas difícil es que influyan en ellos para que cambien.

En referencia a esto la PhD. Emilia Ferrera en una entrevista realizada en mayo de 2018 manifestaba lo siguiente:” …cuando un maestro está convencido de que puede hacer algo termina descubriendo la manera de hacerlo, y si deja que el malestar general lo apabulle no va a poder hacer nada. Si acepta estar ahí es porque cree que algo puede hacer. Si forma parte de la desesperación colectiva, si se deprime junto con el ambiente, no va a poder hacer nada. Pero hay maestros creativos que consiguen llevar adelante algo que da esperanza.

Partiendo de lo que plantea Ferriera nuestro quehacer docente debe necesariamente tener la convicción necesaria para poder transformar nuestro medio, por eso es de vital importancia que nuestra moral y nuestra ética se mantengan en alto muy a pesar de las situaciones que se puedan vivir; como Maestros estamos llamados a cambiar esas condiciones que afectan a nuestra comunidad, existen diversas maneras de hacerlo y cada Maestro, siempre y cuando tenga la vocación, la moral, la ética y la praxis necesaria,  estará contribuyendo a ese cambio tan necesario.

Un maestro es un líder y un líder debe predicar con el ejemplo; el contexto actual  exige de nuestra parte que, como Simón Rodríguez en su tiempo, formemos a nuestros estudiantes para lo hermoso, para la justicia, para lo grande, para la libertad y para lo que Bolívar  señaló en su carta que había logrado su maestros.  Así que es grande el reto que nos corresponde.

Surge otra interrogante ¿cómo lograr esto en los tiempos actuales?, la respuesta a estas inquietudes no se debe tomar a la ligera; pero en primer lugar para poder cumplir con este objetivo es necesario que dentro de nuestras escuelas seamos un referente ético, moral y profesional: es de suma importancia cumplir con estos requisitos, ya que solo de esta manera nuestros estudiantes podrán tomarnos como ejemplo y de esta forma es que podemos influir en ellos.

Nuestro quehacer se enfrenta a un  poderoso enemigo como son los medios de comunicación en donde nuestros estudiantes  pasan muchísimas horas de su vida, y al decir medios de comunicación en la actualidad debemos referirnos necesariamente a redes sociales, internet, televisión por suscripción, etc., generalmente son influenciados por programas que están dirigidos al sector de la juventud y que precisamente, muchos de ellos, no están diseñados para fomentar,  valores positivos en el individuo; de allí que surge la necesidad que en nuestro día a día, si queremos luchar contra este flagelo, promovamos el pensamiento crítico y analítico en nuestros estudiantes, promover debates que finalicen con proceso reflexivo y que provoque en el estudiante la necesidad de cambiar esos valores negativos por valores positivos. Pero insisto, solamente esto lo lograrán los Maestros con la vocación docente, que sean ejemplos de ética y moral para sus estudiantes; no con esto digo que el docente debe ser especie de un santo, sino que con su ejemplo dentro de la labor educativa, pueda ser lo suficientemente digno de promover la ética y la moral en sus alumnos.

Nuestro quehacer docente exige igualmente que promovamos además de valores, la educación para la vida, que el sujeto que estamos educando aprenda a ser una persona que produzca para la sociedad, que sea útil, y en esto los docentes jugamos un papel fundamental, el mismo Simón Rodríguez fue un apasionado defensor de una escuela con docentes distintos; veía Rodríguez a la escuela como un centro de producción y de trabajo. La denominó Casa de Industria Pública y por sus propios esfuerzos conformó un medio de escuela experimental, Simón Rodríguez estaba convencido de que había que unir la cultura con el trabajo, la formación académica con la manual; esto era muy importante debido a que las nacientes Repúblicas ameritaban de carpinteros, albañiles, agricultores, en fin, obreros que sepan producir y respetar.

Nuestra sociedad actual amerita también de este tipo de personas, por lo tanto, como maestros, es nuestra responsabilidad formar a los estudiantes, no solo en lo académico, sino en algún oficio. Las escuelas en nuestro país están llenas de Docentes que saben hacer algún oficio, por lo que se puede aprovechar la oportunidad de enseñar a nuestros estudiantes distintas labores. En la actualidad existe dentro de la malla curricular de la educación media general los Grupos de Creación, Producción y Recreación que, sabiéndolo aprovechar, serian una oportunidad valiosa de lograr dicho objetivo; para ello se requiere de un compromiso enorme por parte del docente.

Para que se tenga éxito en la labor, es importante proyectarnos a futuro, de comprometernos con nuestra labor docente en este objetivo. En tiempos de Rodríguez las personas sin conocimientos eran blancos de convertirse en servidumbre de la clase dominante de la época, hoy un joven que no esté en la escuela, que no tenga buenos Maestros, que no sepa hacer oficios y que aparte tenga una muy mala base moral en el hogar, es sin duda una persona vulnerable en medio de la delincuencia; por ende que nuestro compromiso ético y moral es precisamente evitar eso; las herramientas las tenemos, pues, somos Docentes, lo que hace falta es que las utilicemos y que día a día crezcamos académica y moralmente a fin de que, como he venido insistiendo, seamos los ejemplos a seguir de los futuros Bolívar de nuestra nación.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuentes de investigación

 

Calzadilla, Juan (2007). Moral y luces son los polos de una República. Primera Edición. Editorial el perro y la rana. Guarenas, Venezuela.

Cano, María del Carmen (2015). Ética social, profesional, profesoral y de la ciencia. Universidad de la Habana. Medisur vol.13 no.6, La Habana, Cuba. Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1727-897X2015000600003

Ferreiro, Emilia. Entrevistada realizada disponible en: https://webdelmaestrocmf.com/portal/si-los-docentes-no-leen-son-incapaces-de-transmitir-el-placer-de-la-lectura/

Pérez Esclarin, Antonio (2010). Se llamaba Simón Rodríguez luces y virtudes americanas. Segunda Edición. Editorial Distribuidora estudios. Caracas, Venezuela

Prieto Figueroa, Luis Beltrán (2007) El concepto de líder, e maestro como líder. Decima quinta edición. Fondo editorial Ipasme. Caracas, Venezuela

Autor: Dioni Valladares

Fuente de la Información: OVE

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Feministas venezolanas convocan al acompañamiento a mujeres, niños y niñas en situación de violencia

América del Sur/Venezuela/ALBATV

En Venezuela, las organizaciones feministas Tinta Violeta y la 5ta Ola convocan al acompañamiento a mujeres, niños, niñas y adolescentes en situación de violencia durante la cuarentena.

Tinta Violeta: Voluntariado “Mayell Hernández”

El pasado 21 de marzo, Tinta Violeta y el Voluntariado “Mayell Hernández” publicaron un comunicado en el que alertan al Estado Nacional sobre la violencia machista en las condiciones de aislamiento social, e informaron de un acompañamiento telefónico a mujeres, niñas, niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad.

“La cuarentena incrementa la violencia contra las mujeres, debido a que éstas conviven más tiempo con sus agresores, por eso pusimos a la orden nuestros teléfonos con los que cinco compañeras de Tinta Violeta acompañamos los casos. Es decir, brindamos gestión de casos, el acompañamiento médico, psicosocial y asesoría jurídica de denuncias”, explicó Daniella Inojosa, militante de Tinta Violeta.
Con más de setenta denuncias hasta abril, esta organización registra 200 llamadas. Las voluntarias a diario atienden de tres a cinco casos, incluso a mujeres que están en Chile, Estados Unidos y Argentina. “Para nosotras el acompañamiento a venezolanas trasciende las fronteras”, acotó.

La mayoría de las violencias diagnosticadas son agresión psicológica, patrimonial, acoso, violencia sexual y física. “Hemos atendido dos casos que han terminado en femicidios porque las autoridades, en este caso la Policía Nacional y Guardia Nacional Bolivariana, no respondieron a tiempo. Además, por falta de casas de abrigo en el país, una voluntaria mantuvo en su casa a una víctima con sus dos hijos, por estar en riesgo inminente”, denunció Inojosa. Sin embargo, este acompañamiento de Tinta Violeta continúa.

Comenzó en el 2019 con el Voluntariado Amoroso “Mayell Hernández”, a partir de dos talleres en los que participaron mujeres y hombres, quienes, con la facilitación de la profesora Yurbin Aguilar, aprendieron sobre patriarcado, círculo de violencia y violencias machistas, además de herramientas psicosociales y jurídicas para asistir a víctimas.

“Con el femicidio de Mayell Hernández, notamos que las compañeras en situación de violencia estaban muy solas. El voluntariado nace para acompañar a las mujeres, niños, niñas y adolescentes en un sistema judicial y policial que les adversa culturalmente”, señaló Daniella Inojosa, militante de Tinta Violeta.

Por su parte Yoseglis Cabrera, participante y voluntaria, expresó que «acompañar» significa “escuchar a las mujeres, demostrar que sí les creemos, ofrecerles la contención sorora de respeto y empatía en momentos de desaliento, revictimizacióny violencia. Decirles que no están solas”, resaltó.

Actualmente, con el fin de integrar a más acompañantes, el Voluntariado “Mayell Hernández” y la organización Tinta Violenta, en alianza con FALDAS-R y AVESA, abrieron las postulaciones a una formación virtual que arrancó el pasado 14 de mayo.

5ta Ola feminista: a por una Red Nacional de Voluntarias

En marco de sumar esfuerzos para la atención y acompañamiento a víctimas de violencia, la plataforma de comunicación la 5ta Ola feminista también puso a disposición sus líneas telefónicas.

Yekuana Martínez, integrante de esta plataforma, destacó que a más 10 años en la lucha feminista, las compañeras de la 5ta Ola, en las comunidades y en la institucionalidad de Estado venezolano, han acompañado a mujeres “con la certeza de que juntas es más fácil romper el ciclo de la violencia”, resaltó.

Desde inicios de abril, la plataforma comunicacional La 5ta Ola ha recibido veinte denuncias de violencias machistas en el país. “Las mujeres que solicitan el acompañamiento son diversas, hay trabajadoras, estudiantes, compañeras de urbanismos donde vivimos, compañeras cercanas a las militancia y mujeres que no conocemos”. A todas ellas, jóvenes y adultas, les ofrecen vía telefónica la asesoría psicológica y legal.

Comentó que a pesar de los avances en materia legal por los derechos de las mujeres, la cultura patriarcal se impone con trabas ante la aplicación de la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. “Por eso nuestra labor es brindar un punto de apoyo para que las mujeres que denuncian se mantengan firmes, aun con esta adversidad”, acotó Martínez.

Ante esta situación, la 5ta Ola pide la activación de una Red de Casas de Abrigo Temporales para el albergue, cuidado y estadía de las víctimas de violencia.

Asimismo, exigen la activación, difusión y ampliación del Protocolo Especial de Prevención, Atención y Sanción de la Violencia hacia las Mujeres. También, proponen plataformas digitales de denuncias y la elaboración de campañas comunicacionales en redes sociales, radio y televisión para la prevención de la violencia de género.

Por otro lado, Yekuana Martínez, militante de la 5ta Ola, consideró necesario unificar los esfuerzos de acompañamientos en Venezuela, a través una Red Nacional de Voluntarias, que “esté compuesta por activistas, militantes, profesionales e integrantes de organizaciones, instituciones y movimientos con experiencia en prevención y atención en materia de violencia hacia las mujeres”, mencionó.

Fuente: http://www.albatv.org/Feministas-venezolanas-convocan-al-acompanamiento-a-mujeres-ninos-y-ninas-en.html

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Sobre el sujeto histórico de la Revolución Bolivariana de Venezuela

Sobre el sujeto histórico de la Revolución Bolivariana de Venezuela

Limber Salazar

Docente de la UBV

Adscrito al Centro de Estudios Educación Emancipadora y Pedagogía Crítica (CEPEC)

Se inicia la Revolución Bolivariana de Venezuela con el intento fallido del golpe de Estado del 04 de febrero 1992, liderado por Hugo Chávez. Indultado el 26 de marzo de 1994, convierte su Movimiento Bolivariano Revolucionario (MBR – 200) en Movimiento V República (MVR), partido político con el cual gana las elecciones presidenciales de 1998.

A partir de 1999, desde la presidencia de la República impulsa una serie de cambios profundos en la política nacional, comenzando por la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente, cuya finalidad fue la de redactar una nueva Constitución Nacional. Sometida ésta a consulta popular, fue aprobada por más del 85% del electorado el 15 de diciembre de ese mismo año.

Se conformó así una nueva mayoría política en el país y prácticamente la desaparición orgánica de los partidos social demócratas tradicionales (AD, COPEI, URD y otros grupos a ellos asociados) Es decir: se constituye un gobierno comandado por Hugo Chávez con el respaldo del Polo Patriótico, cuya columna vertebral fue el MVR (partido cívico-militar), secundado por La Causa R, el PCV, el MAS, el MEP y otros grupos minoritarios de convicciones revolucionarias de varias tendencias (Marxistas, Guevaristas, Maoístas, cristianos y otras)

Toda esta historia es bien conocida en el país tanto, como el reconocimiento del liderazgo carismático e indiscutible del Comandante Chávez. Pero ¿Cuál es la fuerza social que sustenta a la Revolución? ¿Qué ocurrió en Venezuela en cuanto a la conformación de sus clases sociales? ¿Qué cambió en las estructuras económicas y del Estado con el desarrollo de esta Revolución?

Hay que puntualizar algunas cosas, aunque también son de dominio público. Por ejemplo: no hubo cambios esenciales en la estructura económica del país, así como tampoco en la del Estado, aunque desde el Gobierno sí hubo muchos cambios de nombres de las instituciones públicas.     Ahora bien, antes de la Revolución, los ingentes ingresos de divisas al Fisco Nacional por concepto de la venta del petróleo enmascaró la situación de pobreza en la mayoría de la población venezolana, se acallaron los conflictos de clases sociales y se ocultó el racismo y la exclusión de las etnias afro descendientes e indígenas. La política de inclusión social de la Revolución intenta saldar esta “deuda social” como se le calificó en el discurso revolucionario.

Gustavo Pereira (1) citando los datos de FUNDACREDESA (Fundación estatal para el Crecimiento y Desarrollo de la población) afirma que para 1988, más del 70% de la población venezolana se hallaba ubicada en los estratos de pobreza, y a la llegada de Chávez al poder (1999) las cifras eran las siguientes: dos millones novecientas mil familias en situación de pobreza, cuarenta mil niños en situación de prostitución, 16% de desempleo, ochenta de cada cien familias al margen de los servicios básicos, seiscientas mil familias sin acceso al agua potable y 41% de la población viviendo en ranchos.

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Jesús María Herrera Salas en su artículo La economía política del racismo en Venezuela (2) coincide en que para ese año 1999, el 70% de la población nacional estaba en situación de pobreza.

Ahora bien, todo ese contingente humano invisibilizado y excluido se identificó y aglutinó entorno a Chávez constituyendo el Chavismo, como la gran fuerza social de la Revolución. Su debilidad estratégica era la poca presencia organizada de la clase obrera (petrolera, de las Industrias Básicas de Guayana y del resto de las industrias del país) aunque sus trabajadores se incorporaran de manera espontánea, como la mayoría del pueblo, al respaldo del Comandante.

Los partidos y agrupaciones económicas y gremiales de las clases dominantes desplazadas del poder político del Estado por Chávez en 1999 (AD, COPEI y otros partidos, FEDECÁMARAS, CTV, Alta Gerencia de PDVSA, Alto Mando Militar, Conferencia Episcopal Venezolana y otros) bajo la dirección de Washington, organizaron el sabotaje económico, político y militar en gran escala para luego dar el golpe de Estado de 2002 (derrotado) y la huelga petrolera y general de fines de 2002 a 2003 (también derrotada) le permitieron al gobierno reforzar algunas de sus debilidades y mejorar el control de factores claves del poder, como por ejemplo: reestructuración de PDVSA, de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana con la incorporación del Cuerpo de la Milicia y la formulación de una estrategia de defensa cívico-militar, la conformación del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) con millones de militantes y la organización del llamado poder popular (Consejos comunales, CLAP, comunas y otros colectivos) en las 1146 parroquias que forman los 335 municipios del país.

Hasta el presente, todos los intentos hechos por diferentes vías por la oposición venezolana para derrocar al gobierno, incluida la peligrosa invasión militar con mercenarios por Macuto y Chuao el 03/05/20, han fracasado. El respaldo masivo y decisivo al gobierno sigue siendo el de la población antes excluida y ya mencionada. ¿Puede ser ésta calificada como una clase social, o alianza de clases, siguiendo la definición de Marx? ¿Dónde quedó el rol protagónico de la clase obrera, o mejor, de su alianza estratégica obrero-campesina (Rusia)  o de los campesinos (China, Vietnam, Cuba y otras) en la revolución socialista?

El caso Venezuela plantea evidentemente una situación muy particular, aunque no totalmente inédita. Por lo tanto, es bien importante definir con mucha aproximación cuál es el sujeto histórico de esta revolución, si se pretende derrotar la estrategia del “rollback” puesta en práctica por  el Pentágono durante el período de La Guerra Fría, y actualizada como la “Obama’s Rollback Strategy” para derrocar a Manuel Zelaya en Honduras y revertir el avance de la Revolución Bolivariana en América Latina y el Caribe.

La rollback strategy según James Petras (3) es sencillamente “hacer retroceder, revertir o volver a una situación previa para recuperar espacios políticos perdidos” haciendo uso de todas las opciones. István Mészáros (4) se lo achaca a la carga del tiempo histórico, lo que equivaldría a decir a la fuerza de la costumbre, o según su propia metáfora “a esa ancla que jala al barco de nuevo a la rada”

Son evidentes las dos estrategias contrapuestas: la de la unión en favor de la autodeterminación de las naciones y la de la desintegración de América Latina y el Caribe en pro de la hegemonía yanqui.

Ahora bien, ¿Cuáles son las fuerzas que propician la unión y cuáles la frenan y obstaculizan? El tema es de cardinal importancia y guarda estrecha relación con el sujeto histórico de la revolución social en cada país, porque de él dependerá en última instancia la reversibilidad o no del proceso, la construcción o no de una sociedad sin retorno al modelo anterior. Es esta fuerza la que deberá tomar en sus manos todo el poder.

En la Rusia de 1917 los revolucionarios plantearon la unión de obreros, campesinos pobres y soldados como el sujeto de la revolución. A esa alianza la llamaron Soviet (Consejo) Pues bien, la consigna clave de su triunfo fue: Todo el Poder al Soviet. Al definirse ese sujeto histórico del cambio, automáticamente se está definiendo quién o quiénes asumirán el poder político del Estado.     Según el Art. 5 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (primera parte) lo ejercerá el pueblo directamente y de manera intransferible. Pero no el pueblo abstracto a cuyo nombre se enseñorean y mandan otros (segunda parte del mismo Artículo) donde se le da la vuelta: “e indirectamente (…) por los órganos que ejercen el Poder Público”

Hasta el presente ha comandado la segunda parte del Artículo citado. ¿Cuándo “estará preparado” el pueblo concreto para ejercer su soberanía popular como lo consagra la primera parte del 5 Constitucional? ¿Cuándo el barrio o la parroquia (en las ciudades), pero también el caserío y el pueblo del interior, con sus nombres propios, su historia, sus costumbres y tradiciones tomará en sus manos las riendas de su caballo?

Ese pueblo que hasta ahora ha defendido con sus vidas al que lo va a defender (¿De quién?) o a proteger, es quien deberá trazar la ruta y establecer las metas de su propio destino dentro de una estrategia nacional de liberación. Es decir: a través de un plan de desarrollo económico, político y social que partiendo de lo local vaya copando todo el territorio nacional.

Aparentemente no hay contradicción con lo planteado por el gobierno al proponerse éste la construcción del poder popular, sólo que esta estructura ha sido hasta ahora un apéndice útil al estatus quo. Ya el “ancla” no necesita tirar al barco de regreso a la rada. La crítica, siguiendo a Marx, deberá destruir las apariencias para poder ver con claridad la esencia de las cosas, si es que de veras se pretende cambiar la realidad de manera irreversible.

En diciembre de 2012 – ante lo avanzado de su enfermedad y probable muerte, como efectivamente ocurrió el 05/03/13 – Chávez llamó al pueblo para que eligieran como su sucesor al obrero Nicolás Maduro. Adicional a las cualidades políticas de este dirigente, probablemente Chávez pretendió dar una señal clara sobre la necesidad de incorporar a la clase obrera como pilar de la Revolución, debilidad que aún era (¿o es?) manifiesta. Después de ocho años de gobierno, se impone hacer un análisis sobre el carácter y el rumbo de la Revolución, cuestión ésta que escapa al alcance de este ensayo. Sin embargo, aquí se toca una de las aristas neurálgicas para dicho análisis y es justamente definir quién establece el rumbo estratégico de los cambios, quién dirige las luchas y en favor de quiénes se hace la revolución, lo que se ha venido denotando como el sujeto histórico de los cambios. Las cifras que a continuación se dan pretenden aportar elementos de juicios al respecto.

Jesús M. Herrera Salas (Ibídem) citando información de más de catorce fuentes concluye que “la política social y étnicamente incluyente de la Revolución Bolivariana del Siglo XXI ha provocado una reacción tan racista y clasista (…) en sectores importantes de las clases altas y media alta de la Venezuela actual, como aquellas que provocaron entre la oligarquía mantuana la Real Cédula de Gracias al Sacar, el levantamiento de José Leonardo Chirinos y la Revolución de Gual y España durante el Siglo XVIII”

¿Y quiénes respaldan hoy a la Revolución? Vale decir: ¿Qué sensibilidades sociales hacen suyas estas banderas? Es evidente que el cuadro social presentado por FUNDACRESA a la llegada de Chávez (ya citados) debe haberse movido en función de las políticas públicas aplicadas por el gobierno. Justamente los beneficiados, más los que aún no hubieran sido favorecidos pero que aún continúan con sus esperanzas, lo cual constituye “más del 70% de la población venezolana”, calificado como pueblo, conforman ese nervio sensitivo de la Revolución.

Y este contingente ¿Quiénes son, desde el punto de vista de la sociología política? ¿Clases sociales? ¿Estratos o Sectores D, E, etc., como los clasifica eufemísticamente el Instituto Nacional de Estadísticas? ¿Esta es la multitud, según Michael Hardt y Antonio Negri criticado por Atilio Boron(5) quien así tipifica al sujeto de la revolución antiimperial en nuestros tiempos? ¿El pueblo en abstracto? como prácticamente se asume en el Art. 5 de la CRBV ya comentado, aunque sean muy concretas las etnias indígenas, afro descendientes, desempleados, niños abandonados, población indigente etc. ¿Es este el sujeto de la Revolución Bolivariana, también identificada como Socialismo del Siglo XXI? ¿Quién es aquí el proletariado, o asume su rol de vanguardia? (La única clase revolucionaria, según Marx) ¿Quién traza el rumbo y mantiene firme el timón? ¿Fue en respuesta a estas inquietudes que Chávez planteó el 20 de octubre de 2012 la necesidad de dar cambio de timón? ¿Sigue vigente ese estratégico y urgente llamado?

Actualmente Venezuela vive el momento más dramático y complejo de su historia: el cerco económico, político y militar por parte de Estados Unidos y sus aliados, cuya última y peligrosa arremetida se consumó en la invasión con mercenarios por Macuto y Chuao (ya comentada); el azote del coronavirus, pandemia que ha requerido de ingentes recursos del Estado, lo cual ha devastado la ya maltrecha economía nacional, producto esto a su vez del férreo cerco económico, del bloqueo de las cuentas bancarias del gobierno y del descarado pillaje de los activos de la nación por parte del gobierno de los Estados Unidos; caída (literal) de los precios del petróleo; escasez casi total de gasolina, gasoil y lubricantes, lo cual a su vez incide negativamente sobre todas las actividades económicas y sociales en todo el país, principalmente en la producción de alimentos, medicinas y otros bienes y servicios de urgente necesidad; y todo esto en medio de una cuarentena radical y necesaria, debido a que en los países vecinos se mantiene una curva exponencial de infectados y muertos causados por el Covid 19. De hecho, más del 75% de los casos reportados en el país provienen de los vecinos más inmediatos (Brasil, Colombia, Perú y Ecuador)

Es en este contexto de severa crisis como cobra vigencia, pertinencia y necesidad preguntarse, no sólo como asunto de interés teórico ¿quién es el sujeto de esta revolución? Porque es precisamente ese sujeto social quien emprenderá las medidas salvadoras, si es que las hubiera. A pesar de lo destartalado de la economía popular (entendida ésta como la de la población rural, periurbana y urbana pobre) que el modelo capitalista venezolano ha implantado, la respuesta que ese sector ha dado ante esta crisis ha sido mucho más alentadora que la observada en los estratos medios de la población.

Tímida respuesta, es cierto, pero por ahí está llegando una clara señal. A pesar de la precariedad en la cual se encuentran las comunidades, de la escasez de gasolina que prácticamente las paraliza, de la especulación dolarizada con los bienes y servicios esenciales, están resistiendo con lo poco que pueden producir en sus predios y pequeños fundos familiares, más el subsidio directo que el gobierno les aporta a través de los bonos y de la caja de alimentos CLAP. ¿Qué faltaría para organizar una resistencia a largo plazo y a prueba del bloqueo externo y aún de la pandemia?

Que en cada comunidad surgiera la verdadera organización social y productiva, con su mercado comunitario y su dinámica particular, pero además, con sus propios líderes naturales, independientemente que sean o no del gobierno, de la oposición o mixtos, pero con una clara conciencia de sí mismos, de sus propias fuerzas creadoras de soluciones y de su razón de ser como pueblo. La necesidad los unirá. Sólo este poder organizado y con una dirección colectiva puede dar una respuesta adecuada a la actual crisis del Siglo. Sólo entonces se puede hablar con objetividad del sujeto social del cambio de este modelo cultural que hasta ahora nos arropa. Es una necesidad perentoria des lastrarse de toda ideología, entendiendo como tal, todo aquello que enmascara la realidad, que oculta lo esencial y propicia la manipulación de la gente.

Referencias:

  1. Pereira, Gustavo (2013): La poesía es un caballo luminoso, Fondo Editorial El Perro y la Rana, p. 46, Caracas, Venezuela.
  2. Herrera Salas, Jesús María: Revista Poliética, 2009, Año 2, N° 9, (pp 14 – 20) Fondo Editorial Mihail Bajtin, Caracas, Venezuela.
  3. Petras, James: La estrategia de recuperación imperial de Obama, Poliética, 2009 – Año 2 – N° 9 (p 40 – 51) Fondo Editorial Mihail Bajtin, Caracas, Venezuela.
  4. Mészáros, István. El desafío y la carga del tiempo histórico, El Socialismo en el Siglo XXI, Vadel Hermanos Editores, Caracas 2009, p.249.

Borón, Atilio (2004) El Perro y la Rana, 7ª edición, Caracas, 2015: Imperio & Imperialismo una lectura crítica de Michael Hardt y Antonio Negri. También disponible en Internet:  http:/tienda.elviejotopo.com/teoríapolítica/1077-imperio-imperialismo-una lectura-crítica-de-michael-hardt-y-antonio-negri-97884957 (Consultado: 21/06/18)

 

Autor: Limber Salazar

Fuente de la Información: OVE

 

 

 

 

 

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Venezuela: Al menos 19 venezolanas han sido asesinadas en el primer mes de cuarentena, según Cepaz

América del Sur/Venezuela/24-05-2020/Autor(a):Basyl Macías/Fuente: www.el-carabobeno.com 

El informe analiza los asesinatos de mujeres registrados por medios de comunicación digitales, en el período comprendido entre el primero de enero y el 13 de abril de 2020, tiempo en el que se recolectó la evidencia de los femicidios.

Según un estudio realizado por el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), correspondiente al primer trimestre de 2020, al menos 19 mujeres asesinadas en Venezuela, durante el primer mes de la cuarentena decretada por el Ejecutivo Nacional.

El informe analiza los asesinatos de mujeres registrados por medios de comunicación digitales, en el período comprendido entre el primero de enero y el 13 de abril de 2020, tiempo en el que se recolectó la evidencia de los femicidios.

El análisis inidica que durante el primer mes de cuarentena, ocurrieron 19 femicidios. “Esto es, cada 36 horas una mujer fue asesinada en Venezuela. De estas 19 mujeres, dos eran niñas y dos adolescentes”.

Al evaluar las cifras se puede observar que en 31,5% de los casos seis de 19 de estos casos el móvil fue la venganza; en 10,5% de los casos el móvil del crimen fue por violencia sexual.

Uno de estos ataques sexuales fue contra una niña menor de 10 años.De los 19 femicidios, el 42%, o sea ocho casos sufrieron múltiples lesiones, acuchillamiento, golpes y asfixias.

En 26,1% de los femicidios el crimen fue perpetrado con armas de fuego mientras que en dos casos arrojaron el cuerpo en la vía pública y Uno de los agresores se suicidó.

En el 64% de los casos los culpables no han sido capturados por las autoridades.Un dato importante es que cinco niños quedaron huérfanos durante el primer mes de la cuarentena al ser asesinadas sus madres y dos de estos pequeños presenciaron el asesinato de sus madres y el suicidio de sus padre.

En el 42% de los casos, ocho de 19 asesinatos hubo arma de fuego. Uno de los casos fue el de un funcionario activo de las FAES quien asesinó a su pareja y luego se suicidó. Al investigar el lugar donde ocurrieron los crímenes el 42% de estos casos ocurrieron en la casa de la mujer mientras que en 26,3% ocurrió en la vía pública.

Vale destacar que el Monitor de Femicidios registró 167 asesinatos de mujeres durante el año 2019, el año pasado el estado más proclive a la violencia contra las mujeres fue Zulia con 25 casos, seguido por Miranda con 22 asesinatos.

Ese año 52 de las 167 víctimas fueron abandonadas en la vía pública, 18 casos de violación, en 12 casos las mujeres fueron quemadas y en seis casos fueron mutiladas.

En el año 2018 en América Latina se produjeron 3 mil 287 femicidios, según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe.

La punta del iceberg

Magdimar León, coordinadora de la Asociación Venezolana para una Educación Sexual Alternativa (Avesa), señala que la impunidad es uno de los graves problemas en la lucha contra la violencia sexista.

“En el informe Violencia sin Límites correspondiente al año 2017, en el que manejamos las últimas cifras del Ministerio Público que salieron a la luz pública, se pudo observar que apenas el 1% de los casos de denuncias de violencia contra mujeres llegaban a juicio”, subrayó.

Encerradas con sus agresores

A ese problema hay que agregar el contexto de crisis que vive Venezuela que sumada a la del COVID-19, deja a las mujeres en condición de vulnerabilidad.“La crisis humanitaria aumenta la brecha de género en cuanto al acceso a alimentos, mejoras y seguridad y a eso debe sumarse que la cuarentena impuesta ante el COVID-19 que implica encerrar a muchas mujeres con sus agresores”.

“Si estamos obligados a permanecer en un solo espacio en el que debemos convivir, no podemos salir a drenar, entonces cualquier diferencia puede generar violencia.

”Dictar medidas de confinamiento genera más presión en los hogares, facilitan episodios de violencia y la no haber lugares a dónde acudir, las mujeres quedan atrapadas con sus agresores y si el contexto no la ayuda muchos de esos casos terminan en homicidios.

Prevenir la violencia

León asegura que es necesario identificar la situación de violencia, luego de identificado el riesgo debe informar a personas del entorno sobre lo que está viviendo, debe pedir ayuda y buscar información sobre instituciones que brindan apoyo, hay líneas de atención telefónica que pueden brindar asesoría ante casos de violencia contra la mujer.

La víctima debe tratar de permanecer en otro lugar, uno que sea más seguro, o estar en contacto con otras personas que sepan lo que ocurre y puedan brindarle protección y seguridad, tener el teléfono con saldo, así como números de teléfonos de ayuda, llamar a personas cercanas cuando se presenten situaciones de violencia.

“La comunidad familiares y amigos pueden hacer cosas, cuando las víctimas no pueden poner límites, otros deben intervenir, se debe reconocer la violencia y actuar la violencia de género es delito, no un problema privado”, señaló finalmente la activista por los derechos de la mujer.

Fuente e Imagen: https://www.el-carabobeno.com/al-menos-19-venezolanas-han-sido-asesinadas-en-el-primer-mes-de-cuarentena-segun-cepaz/

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