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China: Art education goes online

China/Junio de 2017/Fuente: The Nation

Resumen: El reciente lanzamiento de la L-Art University en China promete dar acceso a personas a cursos impartidos por profesores de todo el mundo. L-Art University se puso en marcha el 20 de mayo para ofrecer capacitación a profesionales del arte y la cultura. También atiende a los amantes del arte y coleccionistas que visitan regularmente museos. Cualquier persona interesada puede inscribirse y seguir un curso en el sitio web de la universidad, LArt.org, o descargar su aplicación. Se ofrecen 10 cursos, incluyendo animación 3D, cine, diseño de exposiciones, arte europeo del siglo XX y gestión de museos.

The recent launch of the online L-Art University in China promises to give people access to courses taught by lecturers around the world.

L-Art University went live on May 20 to provide training to professionals in art and culture. It also caters to art lovers and collectors who regularly visit museums.

Anyone interested can register for and follow a course at the university’s website, LArt.org, or download its app.

On offer are 10 courses, including 3D animation, filmmaking, exhibition design, 20th-century European art and museum management.

Young people take art courses offered by LArt University, a new online-education institute, taught by lecturers around the world. Photo/China Daily

Each course involves seven to 14 classes, each of which is a 30-minute video uploaded weekly. The course prices start at a few hundred yuan.

The lecturers – in Hong Kong, Paris, London and Los Angeles – are experienced teachers at art schools. Some are also artists.

The curriculum is to be enriched as more courses on design, architecture and the art market are composed, filmed and produced.

About 180 courses will be available by the end of 2018, says Lyu Peng, the art historian who heads L-Art University.

Lyu, who teaches a 12-session course on the history of modern Chinese art, says more lecturers teaching in art schools in Germany, Italy, Spain and Russia are expected to join the institute’s faculty soon.

“The curriculum zooms in on various elements of the art world – how an artwork is produced, consumed, marketed and collected,” says Lyu. “We’re trying to build a knowledge repository of how the art world operates.”

The courses are filmed in the cities where the lecturers are based and feature local scenes to give students a more holistic learning experience.

One of the lecturers, Paul Gladston, a professor at the University of Nottingham in England, taped his courses on contemporary visual culture and critical theory earlier this year.

The videos shot in London show viewers the city’s street art and architecture.

“What I teach is theoretically difficult,” says Gladton, “so I hope to encourage students to think about interesting ideas and how one film connects to another. We do that by making them cool and visually engaging, and London is an extraordinary place.”

This is Gladston’s first experience teaching online and he finds the video-making process “very hard” but “very rewarding”.

Not only does it force him to think about how to say things in a way that people can understand, but it also makes him reflect on his teaching methods.

“Young students today are so used to consuming things online,” he says. “So the filming process makes me think about how to restructure the information and communicate.”

Frank Vigneron, who lectures on Western art theory and philosophy, says a truly globalised education spreads the “voice” of art to every corner of the world and “make it louder”.

Fuente: http://www.nationmultimedia.com/news/life/art_culture/30318254

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La idoneidad de las preguntas de comprensión de lectura generan debate en China

Una pregunta en la sección de comprensión de lectura del último examen nacional de ingreso a la universidad en la provincia de Zhejiang confundió a varios estudiantes e incluso al autor del texto.

Una pregunta en la sección de comprensión de lectura en el último examen nacional de ingreso a la universidad, conocido como Gaokao, en la provincia de Zhejiang confundió a varios estudiantes e incluso al autor del texto

La interrogante requería que los alumnos escogieran la respuesta más apropiada entre las opciones para explicar la razón por la cual el autor terminó la historia con una oración que decía»los ojos del pez brillan de manera extraña»

En su cuenta de Weibo, una red social china parecida a Twitter, Gong Gaofeng, quien escribió el artículo seleccionado, indicó que estaba tan perplejo como los estudiantes con las posibles respuestas presentadas.

Gong no es el único en mostrarse de tal forma respecto a su propio material. En 2011, en la provincia de Fujian se solicitó a los jóvenes explicar por qué el escritor describió dos veces una intensa lluvia en su trabajo. No obstante, más tarde el primero declaró ante la prensa que simplemente lo hizo porque redactó el texto mientras llovía.

Pese a que el examen terminó hace pocos días, el debate sobre si el análisis de la lectura debe ir más allá de las verdaderas intenciones de su autor continúa.

De acuerdo con Gong, la parte final de su historia sobre los ojos del pescado buscaba copiar el estilo de O. Henry, quien generalmente concluye sus novelas de manera misteriosa o inesperada.

El director del equipo pedagógico de lengua de la secundaria Chaiqiao en Ningbo, Yu Yonggang, apuntó: «El diseño de las opciones múltiples no se desvía del ámbito de conocimientos requeridos, ya que las obras de O. Henry forman parte de los textos obligatorios, mientras que la escritura enigmática es un género incluido en los cursos electivos»

El extracto de la novela escogida para el examen refleja la vida dura del pasado, un contexto que podría contrastar con lo vivido por la generación nacida después de 2000, he ahí la dificultad de la interrogante, añadió.

Según las directivas del Gaokao, la prueba busca evaluar la habilidad del estudiante en lectura, escritura, relatos, análisis y pensamiento crítico. Los postulantes deben medir sus competencias en comprensión del espíritu, las aspiraciones y los valores culturales ocultos entre líneas de los textos literarios, y analizarlos a través del uso de diferentes ejemplos.

«Dado que la prueba está diseñada para seleccionar a los candidatos más idóneos, las respuestas deben siempre cumplir ciertos estándares?, precisó Yu, «No obstante, no deben ser tan rígidas para que permitan a los alumnos tener diferentes puntos de vistas»

En cuanto a la razón por la cual los autores a menudo no pueden responder a las preguntas de sus propias creaciones, el profesor asociado del Departamento de Lengua y Literatura de la Universidad de Beijing, Shi Shengxun, sostuvo que no se supone que ellos estén involucrados en el diseño de la evaluación.

Este es un proceso especial, durante el cual la respuesta del escritor, pese a su seguridad y exclusividad, puede restringir la creatividad y los distintos pensamientos de los docentes responsables de las pruebas y de los postulantes, enfatizó Shi.

«En lo que insistimos es en presentar un entendimiento de las razones y la lógica detrás de cada palabra, no respuestas absolutas?, explicó.

El investigador del Instituto Nacional de Ciencias de la Educación, Chu Zhaohui, aconsejó aprender de la experiencia de otros países con el fin de brindar un mejor sistema de evaluación que garantice la razonabilidad de los exámenes de ingreso.

«Necesitamos debates grupales antes de fijar los contenidos de la prueba?, indicó Chu.

Para mas información visite: Mundinews.com

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Chine: Best-selling Chinese dictionary Xinhua launches mobile app

Asia/China/news.xinhuanet.com

Xinhua Dictionary, the reference book with the largest circulation in the world, launched its first mobile app for readers and Chinese learners.

In April 2016, Guinness World Records recognized the Xinhua Dictionary, published by China’s Commercial Press, as the «most popular dictionary» and the «best-selling regularly updated book.»

The app will provide various search methods, including handwriting input, photo scanning and voice input.

Not only does the app include all of the content in the dictionary’s paper edition, but it will also provide value-added services such as quizzes and Chinese character games.

The dictionary’s first edition came out in 1953, and as of July 2015 the dictionary had sold 567 million copies globally.

It was the first dictionary written in simplified Chinese, as opposed to the traditional Chinese widely used before the May Fourth Movement in 1919. Since the founding of the People’s Republic of China in 1949, 11 editions of the dictionary have been published.

Dubbed the «National Dictionary,» Xinhua Dictionary has been a tool for several generations of Chinese people, bearing the culture of a great country and influencing billions. It is also a tool for foreigners who are learning about Chinese language and culture.

Download APP in: https://play.google.com/store/apps/details?id=com.googapp.xinhua

Fuente: http://news.xinhuanet.com/english/2017-06/14/c_136365505.htm

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El acceso a la universidad en China no es igual para todos

Asia/China/10 Junio 2017/Fuente: El país

El examen actual es considerado como el método más equitativo, pero las diferencias entre alumnos empiezan desde su lugar de nacimiento

Chen Guoxuan y Yang Xiyan llevan meses preparándose para el temido gaokao, el examen de acceso a la universidad en China. Son buenos estudiantes y apuntan alto: el primero quiere cursar ingeniería mecánica y la segunda medicina, los dos en la prestigiosa Universidad de Tsinghua de Pekín. Cuando se les pregunta cuántas horas estudian al día, terminan antes descontando las que duermen y las que comen. A priori ambos van sobrados de talento y esfuerzo, pero Chen lo tendrá algo más fácil que Yang simplemente por ser oriundo de la capital china.

9,4 millones de estudiantes se presentan este año al equivalente a la selectividad en China, que comenzó este miércoles. Las pruebas mantienen en vilo a miles de familias que confían en que una buena nota garantizará el futuro de sus vástagos, muchos de ellos hijos únicos. Una de las pocas ocasiones en China, dicen, en las que todos pasan por el mismo tamiz sin importar si son descendientes de líderes del Partido Comunista, ricos o pobres. Una fiesta de la meritocracia que premia la constancia y el esfuerzo ante el llamado guanxi, los tejemanejes de nepotismo urdidos a través de contactos e influencias.

Chen confía en sus posibilidades. Ha estudiado el equivalente al bachillerato en una escuela secundaria asociada precisamente a la Universidad donde quiere entrar. Unas instalaciones envidiables, profesores chinos y extranjeros, 38 alumnos por aula y un historial de centenares de chavales que han logrado plaza en las mejores universidades del país, especialmente en la propia Tsinghua y la Universidad de Pekín, conocida como Beida. «No estoy al 100% seguro, pero creo que si lo hago bien ese día, los resultados acompañarán», decía el joven pocas semanas antes de que empezaran las pruebas.

En uno de los vestíbulos del instituto de Yang Xiyan, situado en la ciudad de Zhumadian (provincia interior de Henan), cuelga el retrato de una alumna que hace siete años logró una plaza en Beida. Es la única de la historia del centro, con hasta 50 estudiantes por aula y hasta hace poco sin ni siquiera un laboratorio en condiciones, que lo ha conseguido. «No puedo ni imaginarme el orgullo que debió sentir», dice la aspirante. Los profesores -explican sus padres- creen que Yang es «una de las mejores alumnas que ha pasado por la escuela en mucho tiempo», pero dudan que pueda llegar tan arriba.

En China, parte de la financiación de los centros educativos depende de los resultados de los alumnos en el gaokao. Los que sobresalen reciben más dinero, con lo cual pueden contratar a mejores profesores, pagarles más y renovar las instalaciones. Este modelo crea un círculo vicioso que aumenta la desigualdad entre las zonas rurales y urbanas, por lo que en la práctica las calificaciones de los estudiantes en la prueba están altamente ligadas al lugar de donde proceden. «El gaokao en sí es un sistema justo, el problema es que la brecha socioeconómica de la sociedad china está aumentando. Lo que se necesita no es tanto cambiar el examen, sino establecer otros criterios a la hora de repartir el dinero que va a los centros», asegura Bie Dunrong, subdirector del Instituto de Educación de la Universidad de Xiamen.

Pero no solamente el nivel del instituto de Yang juega en su contra, también la estadística. Las grandes universidades dividen las plazas disponibles en cuotas por provincia, por lo que los estudiantes compiten con los de su región para acceder a los mejores centros. Estos cupos, dicen las autoridades, son necesarios para asegurar que al menos algunos estudiantes de las provincias menos desarrolladas son admitidos en las universidades de más nivel. Pero también perjudica enormemente a las zonas más pobladas, como Henan.

El año pasado, 626 de los 61.200 estudiantes que se examinaron en Pekín lograron acceder a Beida o Tsinghua, un 1% del total. En Henan fueron 426 alumnos de un total de 820.000, un 0,05%. Así, un estudiante de la capital tuvo 20 veces más posibilidades de lograr una de las preciadas plazas que uno de Henan. La controversia en torno al gaokao es tal que los intentos de reformar la prueba a nivel nacional se han quedado solamente en meros retoques. Cuando el año pasado las autoridades de la provincia de Jiangsu trataron de cambiar el sistema de cuotas para dar más plazas a los estudiantes de otras regiones, centenares de padres salieron a protestar contra la medida.

Esta estratificación por provincias provoca diferencias hasta en la nota de corte: los pequineses necesitaron sacar como mínimo 680 puntos sobre los 750 máximos de la prueba para acceder a las carreras de ciencias en Tsinghua, mientras que para los de Henan la cifra se situó en los 685. Cinco puntos no parecerán muchos, pero en China marcan la diferencia entre miles de candidatos.

En las prácticas anteriores al examen, Chen ha obtenido una horquilla de entre 671 y 705 puntos. La de Yang es algo inferior, entre 665 y 693. Son resultados espectaculares que les garantizarían, de hacerlo igual de bien en los próximos dos días, una plaza en una muy buena universidad. Pero puede que no sean suficientes para entrar en Tsinghua. Chen lo tiene muy difícil; para Yang es casi imposible.

Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2017/06/06/actualidad/1496751025_253772.html

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China sets up foundation for autistic children

BEIJING, May 27 (Xinhua) — The China Children and Teenagers’ Fund (CCTF) set up a foundation on Saturday that will serve as a service platform for autistic children and their families.

The foundation will focus on issues including subsidizing families facing financial difficulties, and supporting colleges and medical institutions in personnel training.

The foundation was set up with the support of enterprises, experts on autism and supporters after a year of planning by the CCTF, a source from the fund said.

According to Zhu Xisheng, secretary general of the CCTF, the treatment of autistic children still needs to improve in a few aspects, such as early examination and diagnosis, as well as long-term education of people with autism.

Founded in 1981, the CCTF has launched campaigns to improve education, health care and security for children in China.

Fuente: http://news.xinhuanet.com/english/2017-05/27/c_136321039.htm

Imagen tomada de: https://pbs.twimg.com/media/DA1xhoSXsAQbnT6.jpg

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China: Universities the biggest winners from China’s top 100 philanthropists

China/Junio de 2017/Fuente: The Sydney Morning Herald

Resumen: Los multimillonarios de China han estado tan ocupados haciendo dinero que no han tenido tiempo de gastarlo – y las universidades están ganando de un boom resultante de la caridad. La lista de filántropos top 100 de China 2017 muestra la tendencia de los promotores inmobiliarios más ricos del país, la financiación y los magnates de la tecnología para hacer grandes donaciones de caridad. Casi la mitad (44 por ciento) de las donaciones en 2017 se hicieron a las universidades, frente a un tercio (27 por ciento) hace tres años, según la Lista de Filantropía Hurun 2017.El hombre más rico de China, el fundador de Alibaba, Jack Ma, ocupó el puesto 18 en la lista, por su donación de 26 millones de dólares a la Universidad de Newcastle en Australia.

China’s billionaires have been so busy making money that they haven’t had time to spend it – and universities are winning from a resulting boom in charity.

China’s 2017 top 100 philanthropist list shows the trend for the country’s wealthiest property developers, finance and technology tycoons to make big charitable donations is gathering pace.

Almost half (44 per cent) of donations in 2017 were made to universities, up from a third (27 per cent) three years ago, according to the Hurun Philanthropy List 2017.

China’s richest man, Alibaba founder Jack Ma, ranked 18th on the list, for his $26 million donation to the University of Newcastle in Australia.

Chen Yidan, co-founder of the Chinese social media platform WeChat, ranked as the top education donor with $US320 million ($424 million), after establishing the world’s richest educational grant, the $US8million Yidan Prize.

China’s second-richest man, Wang Jianlin, whose company Dalian Wanda owns the Hoyts cinema chain in Australia, donated $US92 million to rank sixth.

Hurun Report founder Rupert Hoogenwerf said: «There has been so much wealth created in China in the last decade, it is the fastest creation of wealth in the history of the world. Now people are looking at how to use it.»

«There was a huge boom in interest in people buying property overseas, particularly Australia, and Sydney Harbour. Now they are looking to do a lot of legacy building,» he said.

He said China’s billionaires, often from modest backgrounds, felt they could make a difference to society through education, whereas donations to medicine or the environment had greater difficulty in showing results or risked being caught in government red tape.

«Universities are very prestigious. On Wednesday we had the ‘Gao kao’, the Chinese university entrance exam, and across the country, that is all anyone was talking about. The Chinese central examination system is very much associated with social mobility,» he said.

«In China, to be allowed to have a building at a university named after you is a huge honour. If you are a top alumni from Peking University orTsinghua University, and your gift is accepted to do something amazing, that gives you a platform deep into the roots of the top leadership.»

He said most of the education philanthropists donated to their own alma mater, although a new trend of making donations to specific university research fields, such as neuroscience, was beginning to emerge.

Mr Ma made the largest philanthropic donation in the University of Newcastle’s history in February in honour of the Morley family from Newcastle, who had encouraged him to strive for university after meeting him as a child in China.

Property developer Evergrande’s chief Xu Jiayin ranked third, donating $US180 million, including a smaller amount to Harvard University. Mr Xu was forced to sell his $30 million Sydney home by the Australian government in 2015 for breaching foreign buyer laws.

But the biggest donations are being made to Chinese universities. This week, it was reported the chief executive of online shopping business JD.com, Liu Qiangdong, had donated a record $US44 million to Renmin University in Beijing.

Australian citizen Chau Chak Wing, who ranked 29 last year after making a $US11million donation to the University of Sydney to expand its museum, fell off the list.

Dr Chau had previously donated $20 million to the University of Technology, Sydney, in 2012 to build a business school, because his son Eric was a graduate.

Mr Hoogenwerf said there were more rich Chinese at the top making bigger donations than ever before.

The threshold to make the top 100 list rose 20 per cent to 15 million Chinese yuan ($2.9 million). A total of $US2.35 billion was donated to charity by the top 100, with the average donated amount of $US23 million.

Overall, donations fell 45 per cent compared to a year earlier because of the massive, $US2.15 billion donation Tencent founder Pony Ma made in 2015.

Fuente: http://www.smh.com.au/world/universities-the-biggest-winners-from-chinas-top-100-philanthropists-20170608-gwnco3.html

 

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China se paraliza: diez millones de jóvenes enfrentan al Gaokao

China/08 junio 2017/Fuente: La Capital

Es el examen que permite el ingreso a las universidades de todo el país y que le da un status al estudiante que marca su carrera para siempre. Todo el país se pone al servicio del Gaokao.

Un total de 9,4 millones de estudiantes de secundaria chinos asisten hoy y mañana el examen de acceso a la universidad, conocido como Gaokao, célebre desde hace 40 años por su exigencia y considerado como la gran apuesta al futuro académico, una prueba que paraliza al país y que se rinde en medio de importantes medidas de control.

Según informó el Ministerio de Educación de la República Popular China, tras la prueba se espera que unos 3,72 millones de esos estudiantes se matriculen en títulos de grado, un aumento de casi 10 mil con respecto a 2016, de acuerdo con el plan de matrícula de 2017.

En las dos jornadas “en algunas provincias dura tres- del Gaokao, la policía se aposta en la entrada de los colegios, el tráfico se desvía, las ambulancias esperan en la puerta por si alguien se descompone y los exámenes siguen una custodiada línea. Los taxis y patrulleros llevan gratis a los chicos y se sirve comida y bebidas sin costo en algunas cafeterías aledañas a los colegios. El país se pone al servicio del Gaokao.

“En China, la mayoría de los estudiantes y sus padres están convencidos de que entrar en una buena universidad significa un futuro brillante, por eso la consideran la tarea más importantes en sus primeros 18 años”, contó a Télam Claudia Chen, estudiante de español en la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing.

El llamado Gakao es un antes y un después en la vida académica y laboral de un chino. Una vez aprobado el examen y, de acuerdo a la puntuación, se elige universidad y carrera de grado. Los alumnos pagan la mitad de la matrícula y el Estado abona la otra mitad, unos 12.000 yuanes en total (casi 1.800 dólares). Aquellos que entran con calificaciones bajas, estudian carreras con menos demanda.

“Los chinos estamos acostumbrados a esto, tan importante para la vida. En China, desde Confucio hasta hoy, apreciamos a la gente intelectual y con buena educación. Para trabajar, tanto como funcionarios o profesores, tienen que estar graduados y para encontrar un buen trabajo necesitamos una educación superior”, dijo a Télam Chang Fuliang, catedrático y vice-decano de la Facultad de Filología Española y Portuguesa de la Universidad de Estudios Extranjeros de Beijing.

“Los que no pasan el examen no pueden entrar a la universidad, pero pueden repetir la prueba al año siguiente. Si fracasas, puedes volver sin límite. Cuando yo era joven, el límite era 25 años, hoy ya no hay. Si no entras, puedes trabajar de campesino, obrero y se reducen las opciones”, agregó Chang.

A 40 años del primer examen, hoy “hay nuevos problemas”. Los que pueden entrar en las mejores universidades “son hijos de familias acomodadas” porque en la primaria y secundaria “reciben mejor educación”, sostuvo el profesor.

Pero, desde hace cinco años “tenemos otra política, la de dar oportunidades a hijos de familias humildes y rurales por medio de recomendación antes del examen”, explicó el profesor, quien sostiene que esta prueba “no hace diferencias”.

Sin embargo, algunos jóvenes ven con más distancia sus posibilidades. Li Yichen, estudiante de portugués, no cree que el Gaokao haya decidido su futuro porque aún no encontró “un trabajo relacionado con este idioma”.

En cambio, Yang Wenqian, ya recibida en Literatura china, refrendó en diálogo con Télam que este examen “es lo más importante en la vida de los estudiantes” y que también es “un test para ver cómo los padres superan sus dificultades psicológicas y ayudan a sus hijos a atravesar este momento”.

Tanta a ella como a Zhang Yunning, de 22 años, sus padres les dijeron, “hace lo que puedas” o “tranquila”. Pero no es la postal más común: en estas horas, padres nerviosos aguardan a sus hijos en las puertas de las escuelas, otros se encomiendan a alguna deidad y otros varios llevan a toda la familia para atravesar este momento.

Para este crucial examen, considerado uno de los más difíciles del mundo, las preguntas son una suerte de “secreto de Estado” y su publicación antes de tiempo es un delito grave. Además, desde el año pasado, copiarse una falta incluída en el Código Penal y sancionada hasta con siete años de prisión. Incluso, el Ministerio de Educación reforzó la seguridad en la impresión, transporte, almacenamiento, entrega y calificación de los exámenes para evitar filtraciones.

También el gobierno impuso medidas como el control del calor y la reducción del ruido en los centros de examen y sus alrededores para garantizar condiciones óptimas.

El Gaokao es una suerte de “obsesión nacional”, considerado duro, pero justo.

Sin embargo, algunos no pueden aguantar la presión. Hace dos años se conoció la noticia del suicidio de dos jóvenes en una escuela de la provincia de Hebei, donde luego colocaron barreras en sus balcones para evitar nuevas tragedias.

Como una forma de animar a los estudiantes, el año pasado el físico británico Stephen Hawkins les envío un mensaje antes de rendir: “Si tu objetivo es ser médico, maestro, científico, músico, ingeniero o escritor, sea intrépido en tu búsqueda de tus aspiraciones”, escribió en la red social china, Weibo.

Las pruebas duran tres horas y son en cuatro asignaturas: Chino, Inglés, Matemáticas, una optativa de ciencias (Biología, Química, Física) o Humanidades (Geografía, Historia o Política). Y algunas provincias diseñan sus propios cuestionarios, bajo la órbita del Ministerio.

Si bien fue establecido en 1952 por el gobierno comunista,áel actual es de 1977. En la China postmaoísta y desde el primer año se convirtió en una dura competencia para los pocos lugares.
La Universidad de Beijing o la de Tsinghua son dos de las más solicitadas; le siguen las universidades de Fudan, en Shanghai, o la de Nankai, en Tianjin.

El 80% de los estudiantes es admitido para las ingenierías, pero otras carreras elegidas son Negocios, Finanzas, idiomas como inglés, español, alemán y francés; periodismo y medicina, que pide más rigor a la hora de la admisión.

En la actualidad, sostuvo Chang, China está sumergida “en una época de muchos cambios, entonces la gente primero se fija en la economía, y pocos escogen según su interés”.

De acuerdo con un informe publicado por China Education Online, el número de estudiantes que rinde disminuyó desde el máximo de 10,5 millones de 2008 y se mantiene estable en alrededor de 9,4 millones desde 2014.

Este año, hay 20 mil chicos menos, pero según el gobierno, cientos o miles no rinden porque están estudiando en el extranjero o se les ha concedido la admisión previa, por recomendación.

Las tasas de admisión pasaron de ser del 25% en los años 90 aá76% en 2014 y la prensa china afirma que, para el 2020, el 50% de los que rinde encontrará su lugar en las universidades.

Fuente: http://www.lacapitalmdp.com/china-se-paraliza-diez-millones-de-jovenes-enfrentan-al-gaokao/

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