Colombia / 10 de septiembre de 2017 / Autor: Centro Virtual Memoria Pedagogica / Fuente: Youtube
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Colombia / 10 de septiembre de 2017 / Autor: Centro Virtual Memoria Pedagogica / Fuente: Youtube
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Venezuela / 10 de septiembre de 2017 / Autor: TecnoEduc507 / Fuente: Youtube
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México / 10 de septiembre de 2017 / Autor: Manuel Gil Antón / Fuente: El Universal
No es malo corregirlo mal hecho, ni deshonroso reconocer aspectos positivos si lo que importa es que la educación mejore
Forma es fondo: el mensaje del presidente Peña, al día siguiente de la entrega de su 5to Informe, ocurrió frente a sus invitados. Así como la investigación del asunto de la Casa Blanca fue realizada por un subordinado —él lo designó—, la reacción de los convidados a Palacio Nacional era predecible: absolución en el primer caso, y aplausos abundantes en el segundo. Me investiga al que nombro y pago; me oyen los que sé que sí aplauden y en el momento justo. Nadie va a responder ni a ensuciar con la más mínima crítica la presentación de su mirada sobre el país: qué ganas de tener pasaporte para vivir en esa nación de la que habla. Vivimos en otra, distinta, que se llama igual.
Atento a su parecer sobre la reforma educativa, el elogio de su iniciativa inicial, y el desarrollo posterior, no tuvo límites. Si no va a haber pobreza extrema en 10 años, ¿qué dicultad se atisba en que dentro de 20 seamos, todos, bilingües?
La orientación central del discurso, a mi juicio, se concentró en conducir a su auditorio donde quería, y procurar eco en los medios: “La disyuntiva es clara: seguir construyendo un país del siglo XXI o apostar por un modelo fracasado del pasado”. ¿Qué es una disyuntiva? “Situación en la que hay que elegir entre dos cosas o soluciones diferentes”, aclara un diccionario. La Real Academia (RAE) coincide: “Alternativa entre dos cosas, por una de las cuales hay que optar”. Es preciso elegir (optar) por una de dos soluciones: sí una, no la otra.
La edicación de la nación en esta centuria, dijo, depende de la continuidad de su exitoso proyecto, reformas perfectas y funcionarios impolutos. El modelo fracasado del pasado refiere al que construyó, encabezó y defendió su propio partido durante décadas en el siglo XX. El nuevo o el viejo PRI: esas son las dos sopas. Maniqueo. Blanco o negro. Nosotros o el caos. No hay más ruta que la nuestra: la otra
vereda fue un fracaso, el sendero actual va “por el rumbo correcto”.
La cuestión, bien vista, no es elegir una de las dos posibilidades, sino demoler la noción de disyuntiva: ¿por qué entre esas dos y sólo esas dos? Existen más opciones, de lo que se sigue que lo que es falso es que estemos frente a una disyuntiva: son varias las posibilidades.
Esbozo, a manera de ejercicio, una adicional en materia educativa. Dicen los gerentes de hoy: ¿mérito o venta y herencia de plazas? ¿Memoria o aprender a aprender? ¿Evaluación o impunidad? ¿Precariedad laboral como impulsor de la calidad, o estabilidad en el trabajo pese a incumplimiento? Esta es la traducción de la disyuntiva en el terreno de la educación. Hay, al menos, otra, y es necesario considerarla: generar un espacio real para revisar a fondo lo realizado, y reformar la reforma, ya sea a través de enmendar los errores en las leyes secundarias, o, incluso, derogar cambios constitucionales, inadecuados, que derivaron de prejuicios e ignorancia.
No es nada malo corregir lo mal hecho, ni deshonroso en reconocer aspectos positivos en lo realizado, si lo que importa es que la educación mejore. Esos son, creo, los parámetros de la discusión. Del debate informado y serio, se desprendería el alcance de la imprescindible transformación de la reforma actual: ir hasta donde sea necesario, sin límites previos, por razones fundadas, y con miras no a predominar sobre los otros, sino en procurar generar las mejores condiciones para el aprendizaje en nuestras escuelas.
En los tiempos por venir no estaremos ante una disyuntiva, como dijo el Presidente, sino en una encrucijada: de nuevo la Real Academia: “lugar en donde se cruzan dos o más calles o caminos”. Hay, seguro, más opciones. La política es el arte de reconocerlas y argumentar: amplía. La soberbia, el espantapájaros, simplica. ¿Seguir a toda costa como vamos o el desastre? Falso, aunque aplaudan.
Fuente del Artículo:
http://www.eluniversal.com.mx/articulo/manuel-gil-anton/nacion/la-falsa-disyuntiva#.WbPpaor3bO8.twitter
Fuente de la Imagen:
http://themexicantimes.mx/maestros-gobierno-y-reforma-educativa-que-discutimos/
Colombia / 10 de septiembre de 2017 / Autor: El abecedario La educación de la A a la Z / Fuente: Youtube
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Argentina / 10 de septiembre de 2017 / Autor: Daniel Ricardo Machuca Téllez / Fuente: SEDICI – UNLP
En el presente escrito, realizaremos el análisis de dos producciones musicales, en las cuales se pone en evidencia las particularidades de la música popular que permiten desmitificar su lugar inferior dentro de los cánones tradicionales y ontológicos de la música. Las producciones propuestas el marco del curso «Estudio y producción de música popular» perteneciente a la Especialización en Lenguajes Artísticos, han permitido dar paso a una reflexión con vistas a una mirada amplia de la música popular, una integración e inclusión dentro de los marcos curriculares e institucionales y una reconfiguración del pensamiento ontológico musical tradicional. para ello, hemos propuesto una descripción de la actividad, seguido de un análisis de la misma de acuerdo a los marcos conceptuales trabajados, y posteriormente una reflexión a partir de dos apartados: (i) Concepción musical lejos de categorizaciones y (ii) Pedagogía y didáctica de la enseñanza musical.
http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/62066
Link de descarga:
http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/62066/Documento_completo.pdf?sequence=1
Fuente de la Imagen:
http://diiaf.com.mx/index.php/features/musical
México / 10 de septiembre de 2017 / Autor: Mario Beltrán Rueda (coord.) / Fuente: IISUE UNAM
En la búsqueda de elementos explicativos que permitan mejorar el quehacer docente en las instituciones de educación superior, surge el “Estudio sobre las prácticas y condiciones institucionales para el desarrollo de la docencia”, que reunió a un grupo de investigadores de cuatro países, quienes analizaron el contexto en el que los docentes desarrollan su práctica desde tres dimensiones de análisis –macro, meso y micro– en siete universidades. Mediante la aplicación de diferentes técnicas para recabar la opinión de directivos, profesores y estudiantes, así como del análisis de textos, se obtuvieron los resultados reportados en el libro, los cuales nos ofrecen elementos para reflexionar sobre la función docente y los aspectos contextuales que la influyen, además de identificar procesos y condiciones que pueden favorecerla.
Link de descarga:
http://132.248.192.241/~editorial/wp-content/uploads/2017/01/Pra%CC%81cticas-y-condiciones-institucionales.pdf
Fuente:
http://www.iisue.unam.mx/libros/?dd-product=practicas-y-condiciones-institucionales-para-el-desarrollo-de-la-docencia
España / 10 de septiembre de 2017 / Autores: Jaume Martínez Bonafé y Julio Rogero / Fuente: El diario de la educación
La recuperación de lo mejor del proyecto de escuela pública y la crítica contundente a los discursos neoliberales en educación requieren de diálogos multidisciplinares e interdisciplinares y miradas que ayuden a complementar perspectivas y análisis.
«Cuántos siglos necesita la razón para llegar a la justicia que el corazón entiende instantáneamente»
(Concepción Arenal)
Al hilo de los últimos artículos de Jaume Carbonell y Enrique Galindo (primero, segundo y tercero) en torno al debate surgido con motivo del libro Escuela o Barbarie, aportamos nuestra breve reflexión sobre un tema que aparece de forma reiterada en determinada literatura promotora de cierta “antipedagogía”, en algunos aspectos justificada y, en otros, no tanto: la descalificación a todos los pedagogos y todas las pedagogas como los y las culpables de los males que aquejan a la escuela pública de nuestro país.
En esos textos se ligan conceptos y prácticas como la innovación educativa, la comprensividad, el constructivismo, la inclusión educativa, la pedagogía activa, las metodologías educativas, el aprendizaje a lo largo de la vida, el “aprender a aprender” con la penetración de las grandes corporaciones en el mundo de la educación para colonizarlo y ponerlo al servicio de la economía capitalista neoliberal. Un ejercicio intelectual que corre con el riesgo de mezclarlo todo y descalificar de forma generalizada a colectivos enteros. Parece que lo único bueno es la instrucción ilustrada y la razón frente a la educación basada en la emoción.
Eso es lo que está pasando, desde hace tiempo, en algunos sectores del profesorado que sistemáticamente culpan de los males de la educación y de la escuela pública a los pedagogos y a la pedagogía, a las facultades de educación, a los orientadores, a la comprensividad y la inclusión como instrumentos del neoliberalismo (que no dudamos que en algunos casos puedan ser utilizados para sus intereses), a las metodologías activas, a la innovación, a la renovación pedagógica, a la izquierda, “al establishment progresista, incluyendo la Institución Libre de Enseñanza y sus herederos”…
Visto así, nos parece que el desprecio a la pedagogía (en singular) no es más que el desconocimiento de un complejo campo social en el que se vienen enfrentando, desde hace tiempo, discursos y prácticas pedagógicas muy diferentes. Como seguramente ocurre con otros ámbitos del saber y de las prácticas sociales, por ejemplo, la filosofía, donde sabemos que tampoco hay un discurso único.
En el estado español vienen desarrollándose propuestas de renovación pedagógica donde claramente el proyecto transformador se vincula a la lucha por la dignificación de la escuela pública y por hacer lo más eficaz posible el derecho de todos a la educación y el acceso, sin ningún tipo de barreras, al amor por el conocimiento. Desde ese criterio político no hay renovación pedagógica al margen del proyecto de escuela pública, en el que se concibe a la educación como un derecho del sujeto -individual y colectivo- a crecer intelectual, cultural y socialmente emancipado.
Nunca, en ese proyecto, se desvinculó la lucha por un conocimiento emancipador del mejor método para su enseñanza y aprendizaje. La obsesión por una didáctica instrumental vacía de reflexión crítica sobre el sentido y la función del conocimiento que construir en la escuela forma parte de una larga tradición pedagógica muy combatida por los planteamientos de las pedagogías críticas.
La crítica de quienes, reclamándose en una posición ilustrada -ideológicamente cargada-, simplifican la lectura y el análisis de los proyectos pedagógicos críticos, en nada favorece la urgente y necesaria reflexión sosegada sobre el avance de los modelos mercantilistas para la educación. Las miopes miradas paternalistas y los lenguajes autoritarios con los que se suele simplificar el esfuerzo intelectual, político y práctico de muchos docentes e investigadores comprometidos con la defensa y dignificación de la escuela pública, puede ser el síntoma de una comodidad intelectual y una ausencia de esfuerzo de quienes nunca aceptarían esto mismo de sus alumnos de bachillerato y de universidad.
La recuperación de lo mejor del proyecto de escuela pública y la crítica contundente a los discursos neoliberales en educación requieren de diálogos multidisciplinares e interdisciplinares y miradas que ayuden a complementar perspectivas y análisis. Tergiversar argumentos, descontextualizar la lectura de proyectos educativos y prácticas docentes o simplificar la complejidad de un campo social en el que se cruzan hoy combates tan evidentes por el dominio del discurso sobre la escuela, es hacer un flaco favor a la necesaria contrahegemonía. Y así nos va. Por ello nos parece importante que se abran espacios de diálogo sin prejuicios, sin saltos en el vacío, sin descalificaciones, con argumentos, con coherencia.
Jaume Martínez Bonafé y Julio Rogero Anaya. Miembros de los Movimientos de Renovación Pedagógica
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http://hansmejiaguerrero.blogspot.mx/2015/05/fobia-la-pedagogia-y-desprecio-los.html