Saltar al contenido principal
Page 89 of 935
1 87 88 89 90 91 935

Las estrellas solo se ven en la oscuridad

Las estrellas solo se ven en la oscuridad

Agustín Moreno

Siempre parece imposible hasta que se hace”
Nelson Mandela, (después de ganar la batalla al Big Pharma con los genéricos para el VIH)

Es importante empezar el nuevo año haciendo una recapitulación de un año tan difícil como 2020. Intentar responder a una pregunta crucial que yo mismo me hacía en plena crisis sanitaria¿hemos aprendido algo de la pandemia? y que no parece que tenga una respuesta positiva a la luz de los acontecimientos posteriores. Ayuda en la reflexión, el recomendable ensayo del sociólogo y político de la izquierda belga, Peter Mertens: Los olvidados (Editorial Atrapasueños, Madrid 2020). Sigamos su ejercicio de pedagogía para razonar sobre qué nos está pasando y qué hacer.

Que un hombre se coma un animal exótico en un rincón del mundo y cien días después media humanidad esté confinada, demuestra lo interconectados que estamos y lo vulnerables que somos. Un virus microscópico ha golpeado al planeta como si fuera un meteorito. A estas alturas, hay cien millones de contagiados, más de dos millones de muertes y un 90% de los países del mundo sufren un serio retroceso en su economía, mucho mayor que el Gran Crack de 1929.

cuando la estructura de esta civilización se venía abajo como un castillo de cartas, aparecen los sanitarios, el personal de los cuidados, de la limpieza, los trabajadores de los supermercados, del transporte y la seguridad, el profesorado, los empleados públicos, los repartidores, los trabajadores de las fábricas y del campo… y hacen que todo vuelva funcionar.

Cuando todo estaba oscuro fueron los trabajadores y trabajadoras normales y corrientes quienes nos ayudaron a sobrevivir en tiempos de pandemia. Como dice Mertens: “Las estrellas solo se ven en la oscuridad”. Sin ellos nadie nos curaría, ni cuidaría, ni tendríamos qué comer, no estaríamos a salvo. La población ha tomado conciencia del carácter esencial de su trabajo, como expresaban los aplausos al personal sanitario.

Pero no son suficientes esos aplausos y el agradecimiento. Eso no llena las neveras, no asegura el empleo, no mejora sus condiciones de trabajo. Se mantiene una gran brecha entre la escasa consideración laboral de muchos de los trabajos (bajos salarios, precariedad…) y su importancia social real. Por eso tienen que plantarse. Un ejemplo, fue la protesta de las batas blancas en el mes de mayo, cuando la primera ministra belga Sophie Wilmès fue de visita al hospital Saint-Pierre de Bruselas. El personal sanitario, uno a uno, se fue girando a su paso y le dieron la espalda. Un acto de protesta de gran simbolismo porque, como dicen los sanitarios, “los políticos nos dan la espalda constantemente cuando les pedimos ayuda».

No han sido los especuladores financieros, los consultores, los charlatanes de todo tipo los que han hecho que las cosas funcionen, han sido aquellos desde hace tiempo no sabíamos quiénes eran y que antes llamábamos clase obrera. La pandemia ha puesto en evidencia que los trabajadores existen y son imprescindibles, que son los héroes en la crisis sanitaria, aunque el capitalismo les trate como si fueran chusma.

Pero, como dice Owen Jones, es evidente que el coronavirus es una cuestión de clase. Ello se ha dejado de ver en las condiciones del confinamiento en las viviendas, la capacidad de atender a los niños, los riesgos obligados a asumir, el tipo de garantías de seguridad en el trabajo, la protección social, etc. No hay ninguna duda de que la pandemia se alimenta cuando las condiciones de vida y de trabajo son terribles.

Ello produjo auténticas revueltas, como la de los metalúrgicos italianos, en huelga para garantizar la seguridad y no ser carne de cañón. No hay que olvidar que los neoliberales más conspicuos se oponían a parar la producción para que “el remedio no fuera peor que la enfermedad” (Trump); consideraban que “no había lugar en el debate sobre el covid para las emociones (…) y que las flores marchitas se podan, quizá unos meses antes” (Marianne Zwagerman); o que el 99% de la población no se iba a sacrificar por el 1% (Ayuso).

Pero los ricos y grandes empresarios quieren volver a la anormalidad anterior, a aplicar las viejas mentiras neoliberales basadas en la explotación, la especulación y el negocio. Volver al “no hay dinero para” las pensiones, los servicios públicos, los salarios y condiciones de trabajo dignas, para luchar contra la pobreza. No hay que olvidar la cita de Marx de que “El Estado es el comité ejecutivo de la burguesía”, algo que habrá recordado la izquierda en el Gobierno de coalición en España. Y que estará presente a la hora de participar en las ayudas del Fondo de Recuperación de la Unión Europea y las condiciones que se pretenderán imponer. ¿Por qué se tienen que aceptar recortes sociales o la degradación del mercado de trabajo para recibir estos fondos? Lo lógico sería aplicar limitaciones para recibir ayudas del Estado a las empresas que evaden impuestos, que contaminan, que deterioran las condiciones del empleo, que reparten dividendos, que discriminan a las mujeres… Ahora bien, todo es una relación de fuerzas.

Pero un gigante, la clase trabajadora, ha despertado. Los trabajadores que habían desaparecido como sujeto histórico han vuelto. Han mantenido el país en marcha y ahora deben recuperar su orgullo, la conciencia de su carácter indispensable, la confianza en sus propias fuerzas. Y, para ganarse el respeto, deben luchar. De lo contrario, los héroes de hoy, serán olvidados mañana si no se organizan y se movilizan para cambiar las cosas. Hoy tienen la autoridad que emana de sus actos: haber sacado adelante el país en unos momentos muy difíciles.

Los sindicatos también se deben levantar y ser capaces de resetearse para recuperar prestigio y la confianza de los trabajadores de toda condición. La defensa del empleo digno y de calidad pasa por derogar las últimas reformas laborales; una protección social adecuada supone mejorar las pensiones y no admitir ningún tipo de recorte; fortalecer servicios esenciales como la sanidad y la educación pública exige más inversión; otro modelo productivo y más democracia en las empresas es un horizonte estratégico. Han anunciado movilizaciones para febrero, ojalá vayan en serio, porque ése es el camino.

Y, claro, que hay alternativas. Peter Martens recurre al Green New Deal de Bernie Sanders y de Alexandria Ocasio-Cortez, inspirado en el New Deal con el que Roosevelt hizo frente a la Gran Depresión de los años treinta. Hace propuestas para afrontar las dos crisis: la económica y la climática. A través de un plan europeo de reconstrucción basado en inversiones públicas para que la transición ecológica y digital no quede en manos privadas. Se estructura en cuatro ejes estratégicos: la energía, el transporte, la transición digital y la sanidad. Creando grandes consorcios públicos europeos y apostando por un impuesto europeo sobre el patrimonio. Le da un nombre cargado de significado: Plan Prometeo, porque de eso se trata, de dar el fuego a la ciudadanía para que no tengan que inclinarse, para que lo usen para cubrir sus necesidades, y para que sea un fuego interior que los permita pensar, soñar y osar.

Pero el camino no será fácil, porque también advierte de la aparición de monstruos, como la ultraderecha y nuevas formas de autoritarismo. Con el discurso ramplón de “Nuestra gente primero”, los que siembran el odio forman parte del problema y no de la solución. No hay que olvidar que el fascismo ha sido el recurso utilizado por las élites cuando ven en peligro sus intereses.

Con la pandemia hemos pasado del vivir de uno en uno, a necesitarnos los unos a los otros. Por ello, una cosa es evitar el contacto físico y otra el social. Y aunque la distancia física hay que mantenerla a metro y medio mientras dure la pandemia, no debe haber un milímetro de distancia social, porque eso significa interiorización y derrota. Hemos empezado a recuperar el principio sagrado de la solidaridad, que en tiempos de crisis es más importante que el dinero. No debemos olvidar ni dejar atrás nada ni a nadie. El futuro les pertenece a los que hacen que el mundo gire.

Artículo publicado originalmente en Cuarto Poder.

Fuente de la Información: https://www.elviejotopo.com/topoexpress/las-estrellas-solo-se-ven-en-la-oscuridad/

Comparte este contenido:

España: Científicas ‘detectives del cáncer’ ponen la oncología bajo lupa para acercar la ciencia a jóvenes

Aseica conecta un total de 150 científicas ‘detectives del cáncer’ con 6.500 estudiantes de España para acercar la oncología molecular

Un total de 150 científicas, bajo la denominación de ‘detectives del cáncer’, acercarán la ciencia a 6.500 estudiantes de toda España. Esta es la nueva iniciativa de la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (Aseica). El objetivo del proyecto ‘CONÓCELAS‘ es acercar el campo de la oncología molecular a las nuevas generaciones. Esta iniciativa ve la luz con motivo del Día Internacional de la Mujer y Niña en Ciencia.

“Este tipo de charlas son importantes para que vean que las científicas no somos raras, somos interesantes”, ha destacado la vicepresidenta de Aseica, Marisol Soengas, en una entrevista con Gaceta Médica.

Vicepresidenta de Aseica, Marisol Soengas.

La experta ha indicado que se trata de la iniciativa más grande que se ha hecho en España para acercar el cáncer en centros educativos. Sin embargo, Soengas insiste en la importancia de construir referentes femeninos que abarquen todas trayectorias profesionales, no solo la ciencia.

Con esta iniciativa, Aseica anima a todo el alumnado y, especialmente, a las niñas y chicas de distintos niveles educativos a interesarse por la Ciencia. Para ello, tendrán la oportunidad de hablar y preguntar directamente a investigadoras que son líderes en sus campos de investigación. Para ello, contará con la participación de científicas que desarrollan sus investigaciones en centros de investigación punteros españoles, del resto de Europa y norteamericanos.

“A las mujeres que se dedican a la investigación las llamamos las detectives del cáncer, y queremos que se conozca lo que está más allá de la bata y sus éxitos profesionales”


Vicepresidenta de Aseica, Marisol Soengas

Romper estereotipos

En este sentido, para llamar la atención de las estudiantes, Aseica ha presentado un cartel que rompe los estereotipos que abarcan las científicas. La imagen muestra una científica con tatuajes y vestida con una gabardina, haciendo honor al término ‘detective del cáncer’.

Además, Aseica ha impulsado un dossier con las participantes de la iniciativa que muestra la “faceta científica y fuera del laboratorio”. En este contexto, todas las investigadoras tienen una foto en el laboratorio y otra practicando sus hobbies, recogiendo mujeres haciendo escalada, baile o salto en paracaídas, entre otras aficiones.

La iniciativa ‘CONÓCELAS’ tendrá lugar el próximo 8 de febrero y se realizará de forma virtual y en directo.

“Es un reto, pero también una gran ilusión, porque nunca se había llegado a este volumen de alumnos y alumnas en colegios, institutos y universidades por toda la geografía española”, ha indicado Soengas. Además la vicepresidenta de Aseica señala que las ‘detectives del cáncer’ voluntarias tienen “muchísimas ganas de colaborar en esta iniciativa”.

Soengas ha indicado que una de las finalidades del proyecto es poder dar visibilidad a las científicas en cáncer de una forma “dinámica e interactiva”. En esta afirmación coincide el presidente de Aseica, Luis Paz-Ares, añade que “es importante es presentar mujeres investigadoras referentes dinámicas y comprometidas con la ciencia aquí y ahora”.

Por este motivo, el próximo 8 de febrero cada centro educativo participante se conectará con una investigadora de ASEICA en “charlas de tú‐a‐tú”. El estudiantado podrá hacerlo desde sus propias aulas o desde casa sin ninguna infraestructura adicional.

Numero de alumnos por comunidad autónoma de la iniciativa Conócelas.

La mujer en la ciencia

En el campo del cáncer, 3 de cada 10 altos puestos están ocupados por mujeres, pero “creo que las perspectivas son relativamente buenas”, ha señalado Soengas.

“Nuestra intención es que ‘Conócelas’ ofrezca una visión fresca y diferente de la importancia del trabajo en un laboratorio que, en el caso de ASEICA, tiene como fin mejorar la salud de los pacientes con cáncer”. Así lo comentan las investigadoras María Abad y María Mayán, coordinadoras también del evento.

“CONÓCELAS no termina aquí, seguiremos trabajando para generar nuevas vocaciones científicas y para acercar la ciencia al estudiantado y la sociedad en general”, ha concluido Soengas.

CONÓCELAS cuenta además con la colaboración de la Red de Asociaciones de Investigadores y Científicos Españoles en el Exterior (RAICEX), así como con la iniciativa “Ciencia es Femenino” de Científicas de Galicia.

Fuente: https://gacetamedica.com/investigacion/cientificas-detectives-del-cancer-ponen-la-oncologia-bajo-lupa-para-acercar-la-ciencia-a-jovenes/

Comparte este contenido:

España: ¿Cómo puede el sector privado contribuir a reducir la desigualdad?

El IV informe del Observatorio Empresarial para el Crecimiento Inclusivo (OEPCI) propone ser una herramienta útil en la búsqueda de soluciones sostenibles para los retos de desigualdad y pobreza. En este sentido, la publicación ilustra cómo las empresas pueden contribuir a un crecimiento inclusivo y así ayudar a disminuir la pobreza y la desigualdad que no han hecho más que aumentar tras la pandemia.

La mejor forma de corregir un problema es comprenderlo, así comienza el IV informe del El Observatorio empresarial para el crecimiento inclusivo (OEPCI) en el cual aborda los problemas de la pobreza y la desigualdad. A las consecuencias todavía visibles de la crisis económica de 2008, se suma ahora el golpe de la COVID-19 y la pobreza y la desigualdad en nuestro país y el mundo entero es uno de los problemas más urgentes a resolver.

Las preguntas son muchas y difíciles de responder: ¿Qué entendemos por pobreza? ¿Cómo se mide? Y, sobre todo: ¿cómo puede contribuir a reducirla el sector privado? , estas son algunas de las cuestiones que aborda la publicación “Crecimiento inclusivo. En busca de una prosperidad compartida”, el cual profundiza en el concepto de “crecimiento inclusivo”, facilitando la adhesión a esta forma de hacer empresa. También visibiliza la situación de pobreza y desigualdad en España, agravada por la COVID-19. Por último, trata de guiar a las empresas en su compromiso con el crecimiento inclusivo a través de sus negocios, más allá de la filantropía y la acción social.

El informe sostiene que lograr reducir la pobreza es responsabilidad de todos los sectores. Y solo lo lograremos con un esfuerzo conjunto de toda la sociedad, empresas e instituciones. En medio de un escenario adverso, el liderazgo del sector empresarial es clave en este esfuerzo para que, junto a la necesaria y rápida reactivación económica, se logre que ese crecimiento beneficie a toda la sociedad y contribuya a una prosperidad más amplia y compartida.

La desigualdad es tratada en la publicación del OEPCI desde las perspectivas sociológica, políticas y económicas. Asimismo, según el informe, la desigualdad es, junto al cambio climático, uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la humanidad en un mundo globalizado e interconectado. El documento asevera que aquello que no se mide, no se conoce, y lo que no se conoce, no se cambia. Pese al acuerdo en cuestiones como la crisis climática y la importancia del sector privado en su solución, los avances en materia social parecen ir un paso por detrás. En este sentido, la investigación afirma que uno de los motivos por los cuales esto ocurre es la indefinición de cómo contribuir, de qué significa lo social o cómo ser inclusivo desde el propio negocio. Ya no es cuestión de proyectos puntuales, sino de un modelo nuevo. O, en otras palabras, una empresa comprometida con el crecimiento inclusivo busca cómo lograrlo a través de cualquier área de negocio y hacia todos sus grupos de interés.

El documento explica que en relación con la desigualdad económica, uno de los baremos más utilizados es el índice de Gini, que no considera nuevas formas de pobreza presentes en nuestro país, como la pobreza laboral, infantil o energética. Para mejorar la medición de la desigualdad, nació el Índice de Desarrollo Inclusivo (IDI), promovido por el Foro Económico Mundial. Esta herramienta añade al análisis otras variables, como la esperanza de vida, los índices de pobreza y la ratio de dependencia. En comparación con el resto de países europeos, España no sale bien parada, concretamente, ocupa la posición 26 de 29. El informe también menciona el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). El IPM considera dimensiones como la educación, la asistencia sanitaria y el grado de bienestar social. Por su parte, el Indicador AROPE de la Red Europea de Lucha contra la pobreza y la Exclusión social (EAPN) ofrece una radiografía del impacto de la pobreza y la exclusión social en España. Según los registros, en nuestro país, el porcentaje de españoles en situación de pobreza relativa es del 26%.

Con la COVID-19, han surgido nuevos indicadores que reflejan la pobreza o la desigualdad. Por ejemplo, tener o no tener ordenador puede ser un indicador para acceder a la educación. En definitiva, esta pandemia ha hecho más visible la pobreza y la vulnerabilidad de grandes sectores de la población. Para contribuir a hacerle frente a esta grave situación, el informe propone que el crecimiento inclusivo es una gran alternativa en tiempos de pobre y desigualdad, siguiendo esa línea argumental, la publicación esboza una serie de consejos que puede tomar le sector privado para aportar su granito de arena:

  • Buscar alianzas que se puedan sostener a largo plazo. Compartir propósitos y estrategias.
  • Identificar los objetivos de forma clara.
  • Cambiar el modelo de empresa. El compromiso comienza en el interior de las organizaciones.
  • Adaptar el impacto social a la capacidad de la organización.
  • Responder a demandas reales con capacidades reales. Vincular negocio y compromiso social.
  • Garantizar la diversidad en los órganos de dirección y equipos de trabajo.
  • Apoyarse en dinámicas y procesos ya asentados: retribuciones variables, obligaciones de reporting.
  • Contribuir también es innovar. Apostar por soluciones de crecimiento inclusivo que puedan suponer un ingreso, no solo un coste.

Fuente: https://diarioresponsable.com/noticias/30606-como-puede-el-sector-privado-contribuir-a-reducir-la-pobreza

Comparte este contenido:

Bruselas sigue la ley de Educación española pero niega tener competencias

La Comisión Europea (CE) dijo este jueves que está siguiendo el desarrollo en España de la Lomloe, o «Ley Celaá», que posibilita reemplazar escuelas concertadas por plazas en colegios públicos, aunque recalcó que no tiene competencias sobre Educación, ya que ésta recae exclusivamente en los gobiernos nacionales.

«Estamos siguiendo de cerca los desarrollos respecto a la nueva ley de Educación, así como las intenciones del Gobierno español de reemplazar ciertas escuelas concertadas por plazas en escuelas públicas», indicó este jueves la portavoz comunitaria de educación, Sonya Gospodinova, en la rueda de prensa diaria de la Comisión.

Preguntada por si los planes del Gobierno español estarían violando artículos de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, la portavoz señaló que este derecho está recogido en ese documento, pero precisó que el mismo «impone obligaciones a los Estados miembros sólo respecto a políticas donde hay competencia a nivel europeo».

«Como he mencionado, Educación es una competencia a nivel nacional, así que, en este sentido, la Comisión no tiene base para pronunciarse sobre los desarrollos legislativos en España y los planes del Gobierno español», añadió Gospodinova.

Más Plurales, una plataforma que engloba a los centros concertados, registró este miércoles ante la Comisión Europea un escrito denunciando que la Lomloe o ley Celaá «pone en grave riesgo los derechos fundamentales y libertades» y vulnera la libertad de enseñanza establecida en el artículo 27 de la Constitución «al convertir a la enseñanza concertada en subsidiaria de la pública».

También argumenta que va contra la libertad de creación al limitar la posibilidad de apertura de nuevos centros con ideario propio y con ello el pluralismo en el sistema educativo.

La ministra de Educación, Isabel Celaá, rechazó este martes en el Senado las críticas que el PP hizo a la Lomloe en el mismo sentido que Más Plurales, negando que se ataque a la libertad o a cualquier derecho fundamental.

Fuente: https://www.eldiario.es/internacional/bruselas-sigue-ley-educacion-espanola-niega-competencias_1_7193239.html

Comparte este contenido:

Las colas del hambre

Por: Víctor Arrogante

En Madrid la crisis social sigue aumentando ante el rebrote de la emergencia alimentaria. Las colas del hambre, que se generaron durante el confinamiento ante la falta de ingresos de una gran parte de la ciudadanía, se han vuelto a incrementar en las últimas semanas.

Si hay algo que me produce ansiedad y provoca en mí un enojo exacerbado, son las imágenes de personas haciendo cola para recibir alimentos y productos de primera necesidad. Que eso ocurra en España a estas alturas de la historia, es una auténtica vergüenza, que nos transporta a la posguerra, cuando tanta necesidad había y que sufrimos millones de personas.

En Madrid la crisis social sigue aumentando ante el rebrote de la emergencia alimentaria. Las colas del hambre, que se generaron durante el confinamiento ante la falta de ingresos de una gran parte de la ciudadanía, se han vuelto a incrementar en las últimas semanas. Esta situación recuerda el establecimiento de racionamientos y cupos durante el franquismo hasta 1959, cuando se aprobó el Plan de Estabilización que produjo que en los años sesenta comenzara el desarrollo, aunque persistió el atraso tecnológico, científico y educativo. No se como hemos podido sobrevivir.

Este artículo bien podía haberse titulado Las colas de la muerte, si nos referimos al número tan elevado de personas muertas en las residencias de mayores, que se están convirtiendo en auténticos centros de exterminio, cuando son imprescindibles para la sociedad y deberían consolidarse como un pilar social esencial del Estado de bienestar. Los últimos datos ofrecidos muestran que 26.905 personas con covid-19 o síntomas similares han fallecido, según los datos procedentes de las comunidades autónomas. Esto significa que más del 46% de las muertes notificadas oficialmente se ha producido entre mayores que vivían en residencias de personas mayores.

La mayoría de las defunciones se han producido en Madrid, Cataluña, Castilla y León y Castilla-La Mancha. En el último caso conocido, diez ancianos han muerto en un mes por un brote de coronavirus en la residencia Los Nogales Puerta de Hierro. Otro caso es el de la residencia Vigor de Becerril de la Sierra, donde han muerto 11 mayores por coronavirus, que ha sido denunciada por presuntos delitos de homicidio imprudente, lesiones y omisión de socorro. La comunidad donde hay más expedientes penales abiertos es Madrid con 112. Desde que comenzó la pandemia, las 710 residencias de la Comunidad suman 6.038 fallecidos, frente a un total de 12.578 muertos.

No podemos consentir que continúe la tragedia contra las personas mayores en las residencias. Es necesario un mayor control y un incremento de la financiación pública en los centros que realizan un servicio imprescindible para la sociedad; y «si fuera posible» (que habría que hacerlo posible), que figuras políticas como la de Isabel Díaz Ayuso, tuvieran prohibido la gestión de estos y otros centros esenciales, que los convierten en fábricas de miseria, con sus colas de la muerte.

Desde el inicio de la pandemia, se ha multiplicado por diez el número de personas que acuden a los repartos de comida. La falta de ingresos y de políticas eficaces y efectivas del Gobierno, comunidades y ayuntamientos, se han convertido en las principales causas del aumento de afectados. Como consecuencia de esta trágica situación, los bancos de alimentos, centros sociales y asociaciones se han constituido en la red fundamental que está consiguiendo auxiliar a los más vulnerables.

Hasta 1952, España no empezó a recuperar los niveles de vida que tuvo en 1935. Estados Unidos, valoró como muy positiva (ya lo había hecho Hitler), la situación geoestratégica de la España atlántica, mediterránea y pirenaica y en su beneficio, convinieron el pacto con la dictadura franquista y la instalación de sus bases militares, que aquí siguen. Eran los años del hambre, del estraperlo, de la escasez de los productos más necesarios, del racionamiento, de las enfermedades contagiosas, de la falta de agua, de las restricciones eléctricas, del empeoramiento de las condiciones laborales, del frío y los sabañones; de la leche en polvo y del queso amarillo-naranja americano. Las cárceles abarrotadas de presos políticos y en las cunetas fosas comunes, ciento cuarenta mil desaparecidos en la guerra y la dictadura; que hay siguen.

En el informe Diagnóstico Social de la crisis por covid-19, el Ayuntamiento de Madrid asegura que la pandemia está creando una «expansión descomunal de nuevos vulnerables». Nadie se libra: mujeres, familias con hijos, jóvenes menores de 35 años y personas mayores de 65 años son los colectivos más golpeados por la crisis. Es normal en una ciudad que ha visto como su tasa de paro crecía más de un tercio hasta situarse en un preocupante 16,1%, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa. Los datos son desoladores. Uno de cada tres hogares de la ciudad se ha empobrecido durante 2020 debido a la crisis del coronavirus, especialmente aquellos con menores a cargo y los de familias monoparentales encabezadas por mujeres.

Desde que se desencadenó la pandemia, allá por el mes de marzo del año pasado, las asociaciones vecinales han actuado como una auténtica red solidaria para la inmensa mayoría de las personas arrasadas por la crisis. Donde el Ayuntamiento no llega, ahí están las asociaciones de vecinos, las organizaciones solidarias de todo tipo, casi todas las ONG y los bancos de alimentos. Ellos han sostenido a los más necesitados, aquellos que engrosan las llamadas colas del hambre. Al Ayuntamiento le estamos solucionando la papeleta, explican desde la Asociación de Vecinos de Aluche (AVA), uno de los barrios al sur de Madrid donde más ha golpeado la crisis: «de los servicios sociales del Ayuntamiento aquí no sabemos nada». La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) asegura que la ayuda del Ayuntamiento es «lenta, insuficiente e ineficaz». Las colas del hambre no dejan de crecer: Son los grandes olvidados, de los que pocos se acuerdan y las instituciones públicas, casi nada.

En mi barrio, durante mi infancia, en la calle Goya esquina Alcántara, se formaba la cola desde las cuatro de la mañana y abrían a las nueve. Vendían un kilo de galletas rotas por persona. Había colas para embarazadas y las que no lo estaban, lo simulaban para conseguir más alimentos y esperar menos tiempo. La gente llevaba sillas para que la espera fuera menos dura, cuando alguien intentaba colarse había incluso violencia. Sus hijos esperaban la comida en casa.

La crisis económica desatada por la pandemia está causando estragos en España. Se han destruido 622.600 empleos, la peor cifra desde 2013. El número de personas sin trabajo asciende a 3.719.800. Los hogares con todos sus miembros en paro subieron a 1,2 millones en 2020. Cuatro millones de personas se han visto afectados por regulaciones temporales de empleo, lo que significa que, a pesar de las ayudas decretadas por el Gobierno, en muchos casos sus salarios se han visto reducidos en un 50-80%.

La economía franquista significó la profundidad y duración de la depresión durante los años cuarenta. Para la mayor parte de los españoles fueron los años del hambre, del estraperlo, de la escasez de los productos más necesarios, del racionamiento, de las enfermedades, de la falta de agua, de los cortes en el suministro de energía, del hundimiento de los salarios, del empeoramiento de las condiciones laborales, del frío y los sabañones. Todo un desastre. La miseria se veía, se vivía, se sentía y se sufría.

En Madrid ya se habían dado episodios de hambre. En el verano de 1811 estalló una calamidad jamás sospechada: ¡el hambre!, como lo llamó Ramón Mesonero Romanos, cronista y concejal madrileño. Un capítulo negro de la historia madrileña: El hambre de Madrid, título basado en el cuadro de José Aparicio; un encargo gubernamental en referencia a este espantoso episodio. Después de cuatro años de guerra encarnizada, las cosechas, escasas, eran robadas por unos y otros ejércitos, y por las partidas de guerrilleros. Madrid aislada, por lo que sufría de un abastecimiento insuficiente.

La posguerra fue una época de mucho miedo y poco pan; la comida era un bien escaso que había que racionalizar. Los más miserables iban a Legázpi a por los deshechos del mercado de abastos. Si aquella busca salvó a mucha gente a morir de hambre, en los últimos tiempos se ha puesto en evidencia una  nueva categoría social: los trabajadores pobres, que ha trastocado el concepto de pobreza, como consecuencia de los bajos salarios y la baja la calidad de los empleos.

El hambre ha pasado de ser un fenómeno colectivo, a convertirse en una tragedia individual y familiar. No se trata solamente de las personas sin hogar, que han alcanzado el nivel máximo de exclusión social y marginación en una sociedad moderna, sino que cada vez haya más gente necesitada de.

La pandemia tiene rostro humano. La de los que han enfermado, los fallecidos, y la de tantos que se han empobrecido a causa del covid. El Ayuntamiento de Madrid ha constatado la caída en la edad de los demandantes de ayuda social; de una edad de 71 años a la actual de 41. También ha sido el año de la explosión de la solidaridad ciudadana.

Por cierto y al paso;  la crisis de las vacunas contra el coronavirus, es una auténtica vergüenza. No es que no crea en la efectividad de las vacunas, no soy científico para valorarlo, pero la programación institucional es un desastre. El Gobierno todavía dice que antes del verano estaremos inmunizados el 70% de la población española. No se si es por una inocencia irreflexiva o por una complicidad criminal con las farmacéuticas, que con su estrategia han aumentado sus capitales en la Bolsa, mintiendo en su capacidad de fabricación y suministro e incumpliendo compromisos contractuales.

De las colas del hambre a las colas de la muerte por la crisis de la covid-19 inundan Madrid y la España entera, que cualquier gobernante decente debería incluir entre sus prioridades de acción.

Fuente e imagen: https://nuevarevolucion.es/las-colas-del-hambre/

Comparte este contenido:

España: Estudiantes universitarios: «Siempre hemos defendido la máxima presencialidad posible, pero no a cualquier precio»

Cargan contra la Crue por escudarse en el argumento de que si los exámenes son online los estudiantes copiarán.

Los estudiantes universitarios han pedido este jueves a las universidades que suspendan los exámenes presenciales por el riesgo de contagio de COVID-19 y que se pasen a la modalidad online. Siempre hemos defendido la máxima presencialidad posible, pero no a cualquier precio», señalan la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (CREUP) y el Consejo de Estudiantes Universitarios del Estado (CEUNE) en un comunicado conjunto.

Tras las imágenes y vídeos que se han vuelto virales en las últimas semanas en las que se mostraban aglomeraciones de alumnos universitarios en clases y pasillos por la celebración de los exámenes de enero en muchas facultades del país, el debate sobre la vuelta a la evaluación telemática ha vuelto a surgir.

Aunque las asociaciones estudiantiles y sindicatos llevan pidiendo desde antes de Navidad y principios del mes de enero que los exámenes se hicieran de forma online, la polémica ha vuelto a aflorar esta semana después de que este miércoles, 27 de enero, el Ministerio de Universidades emitiera un comunicado pidiendo a las universidades, al fin, que los exámenes se realizasen de manera telemática si no se podía garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad, como se aprecia en varios vídeos grabados por los propios estudiantes en una jornada de exámenes.

Ante esta petición –que ha sido reafirmada este jueves por el propio ministro de Universidades, Manuel Castells, en una rueda de prensa en la que esta cuestión se ha convertido en protagonista–, los rectores (Crue) alzaron su voz a última hora de la tarde del miércoles para asegurar que las universidades eran «espacios seguros», para censurar la opinión del Ministerio y para defender la presencialidad como «el sello de identidad de la gran mayoría del sistema universitario».

«LA SITUACIÓN MÁS CRÍTICA DESDE EL INICIO DE LA PANDEMIA»

Según recuerdan CREUP y CEUNE, durante este mes de enero, cerca de un 1,5 millones de estudiantes universitarios regresaron a las aulas bajo un contexto de «incertidumbre», con unas cifras de contagios cada vez más elevadas y «sin respuesta por parte de las instituciones».

Aunque ambas defienden el formato presencial, ven viable que la enseñanza y evaluación sean online porque, según destacan, «la gran mayoría de universidades han tenido durante meses un modelo de docencia híbrido o mayoritariamente online por motivos sanitarios», mientras que «ahora, con la situación más crítica desde el inicio de la pandemia, se está congregando a todo el estudiantado en las aulas». «Siempre hemos defendido la máxima presencialidad posible, pero no a cualquier precio», insisten.

En este sentido, CREUP y CEUNE lamentan que desde hace meses se ha podido prever esta situación y trabajar para minimizar sus efectos en el plano académico. Sin embargo, ya sea por «incapacidad de las universidades» o por una «falta de voluntad para adaptar la educación a la nueva era digital», se está obligando a los estudiantes, a su juicio, a asumir unas «exigencias desmedidas».

Ambas asociaciones han cargado contra la Crue por el comunicado que difundió ayer a última hora de la tarde, en concreto, por que esta organización «asume que la calidad y el formato telemático son extremos incompatibles».

Para ambas, se trata de un «falso dilema» que se está utilizando para argumentar el riesgo de plagio entre los estudiantes, escondiendo así el debate real sobre la falta de renovación de los métodos de evaluación, «mientras se divide a los estudiantes en honestos o deshonestos». «Resulta inaceptable que se pongan en entredicho los valores de ‘honestidad, transparencia y responsabilidad del estudiantado», opinan.

LA POSTURA DEL MINISTERIO LLEGA «MUY TARDE»

También se ha manifestado el Sindicato de Estudiantes. Su secretaria general, Coral Latorre, asegura a Europa Press que el cambio de postura del Ministerio de Universidades, pidiendo a las universidades el cambio a la modalidad online de la evaluación, llega «muy, muy, muy tarde». «No es suficiente con decir ahora que los exámenes tienen que ser online. ¿Qué medidas adoptará el Ministerio para garantizar que así sean?», se pregunta.

El Sindicato de Estudiantes exigió el pasado 11 de enero la cancelación inmediata de los exámenes universitarios, tanto presenciales como online, durante este semestre por la emergencia sanitaria provocada por la COVID-19. «Pero llegados a este punto, deberían ser online, garantizando que todas y todos podamos examinarnos en condiciones seguras», reclama Latorre.

Para la secretaria general del sindicato, es «muy indignante» la «campaña de criminalización contra la juventud» que ha habido con este tema. «Parece ser que el problema aquí somos nosotros, no que no se haya invertido ni un euro en la Sanidad y Educación públicas, sino que los jóvenes somos muy irresponsables», se queja.

«También nos preguntamos que cómo es posible que no podamos ir a dar un paseo o ir a ver a nuestras familias por las restricciones de la pandemia, pero se dé por visto bueno que nos metamos en clase con decenas de personas más», denuncia Latorre, que asegura que los estudiantes están haciendo los exámenes presenciales en la universidad en unas «condiciones lamentables»: «con más de 50, 70 ó 100 personas en una clase, con aglomeraciones en los pasillos y hacinados en un transporte público masificado».

También el Sindicato de Estudiantes ha cargado contra la Crue: «La justificación que se nos da para que vayamos a hacer los exámenes a las facultades es porque así es más difícil que hagamos trampas o que nos copiemos». «Nos parece insultante que se nos siga criminalizando de esta manera, como si los estudiantes sacáramos provecho de esta situación cuando somos uno de los sectores más golpeados por la crisis y por la pandemia», concluye.

Fuente: https://www.europapress.es/sociedad/educacion-00468/noticia-estudiantes-universitarios-siempre-hemos-defendido-maxima-presencialidad-posible-no-cualquier-precio-20210128181053.html

 

 

Comparte este contenido:

Los beneficios de la escolarización temprana de 0 a 3 años

 

La escolarización temprana (0-3 años) es el primer ciclo de la Educación Infantil y proporciona a los más pequeños diversos beneficios relacionados con el desarrollo de habilidades cognitivas, emocionales o sociales.

¿Sabías que en España el porcentaje de estudiantes que asisten al primer ciclo de Educación Infantil es del 75%? Un dato que está muy por encima del promedio del resto de los países de la Unión Europea y de la OCDE, según el informe TIMSS 2019 (Trends in International Mathematics and Science Study) de la Asociación Internacional para la Evaluación del Rendimiento Educativo (IEA).

Educación Primaria con destrezas de lectura, escritura y matemáticas superiores al promedio de la OCDE y también de la Unión Europea, además de influir positivamente en su rendimiento.

Objetivos de la escolarización temprana

La escolarización temprana es el primer ciclo de la Educación Infantil (desde los cero hasta los tres años de edad). Los objetivos de este ciclo están centrados en atender de forma progresiva el desarrollo afectivo, los hábitos de control corporal, las manifestaciones de la comunicación y del lenguaje y las pautas esenciales de convivencia y relaciones sociales de los niños, tal y como señala el Ministerio de Educación y Formación Profesional.

Escolarización temprana

Asimismo, la Asociación Mundial de Educadores Infantiles (AMEI-WACE), indica que los avances de la neurociencia demuestran que es durante los tres primeros años de la vida de un ser humano cuando se ‘construye’ el cerebro, creando más de un millón de conexiones neuronales cada segundo. De ahí la importancia de esta etapa educativa, que desde AMEI-WACE consideran totalmente segura aún en tiempos de pandemia. Según esta asociación, los contagios en escuelas infantiles durante el primer trimestre de este curso académico han sido bajos, situando el número de aulas en cuarentena en el 1,67% del total del sistema educativo español.

Beneficios de la escolarización temprana: autonomía, seguridad y valores

Un entorno estable, la posibilidad de desarrollar distintas habilidades o aprender diversos valores para la vida son algunos de los beneficios de la escolarización temprana para Ana Herrero, psicóloga y coordinadora del departamento de orientación del grupo Brains International School, que recoge a continuación cinco claves de esta etapa educativa.

  • Ambiente seguro. Las escuelas infantiles suponen un entorno estable y estructurado que se compone de rutinas muy claras, unos horarios y unos ‘rituales’ con los que los niños van creando esquemas internos sobre el mundo que les rodea.
  • Fomenta la autonomía del niño. El alumnado puede desarrollar su necesidad de exploración y curiosidad, además de otras habilidades a través del juego, como la autonomía personal, el cuidado de las cosas, la alimentación, la higiene, el sueño…
Escolarización temprana
  • Educación emocional. En los primeros años de vida, los niños se enfrentan a distintas emociones, como el enfado, el miedo o la frustración, y sin apenas recursos para entenderlas. En esta etapa, los educadores les enseñan a identificar las emociones, a legitimarlas y gestionarlas de una forma adaptativa. Los profesionales saben de la importancia de establecer narrativas de lo que va ocurriendo, para que los estudiantes puedan ir comprendiendo e integrando lo que sienten y sucede a su alrededor.
  • Favorece el desarrollo del lenguaje. Esta etapa educativa se considera esencial para el aprendizaje de una segunda lengua, ya que existe mayor receptividad por parte de los estudiantes, pero también favorece otras capacidades cognitivas y motrices, que se desarrollan mediante el juego y la exploración sensoriomotora y que estimula el desarrollo del pensamiento.
  • Educación en valores. Los niños tienen que compartir espacio y materiales, además de aprender a esperar (como el tiempo de atención por parte del adulto). Eso les permite entender que las demás personas también tienen necesidades, y a ir tomando poco a poco conciencia de las normas que rigen la convivencia: el respeto, la generosidad y el cuidado por uno mismo y por los demás.

Fuente e imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/escolarizacion-temprana/

Comparte este contenido:
Page 89 of 935
1 87 88 89 90 91 935
OtrasVocesenEducacion.org