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Colombia: “Están dejando de aprender”: profesores defienden la alternancia en medio del coronavirus

Frente al anuncio del inicio de la alternancia en la educación en algunas regiones no COVID-19 o con bajo contagio, varios profesores se pronunciaron a favor del regreso a clases.

El anuncio es muy bienvenido en este momento. El cierre de colegios está causando unos efectos muy negativos en los estudiantes, en muchas dimensiones: están dejando de aprender, muchos niños están en riesgo de abuso, de maltrato, de desnutrición”, opina Sandra García, profesora de la Universidad de los Andes.

En el mismo sentido se pronunciaron padres de familia como Ana Núñez que, si bien tienen sus dudas, creen que esta situación hace parte de los nuevos desafíos del sistema educativo en Colombia.

En municipios no COVID como Pensilvania, Caldas, la rectora de una institución educativa asegura que para ellos es imperativa la alternancia, pues la virtualidad para sus alumnos no ha sido posible.

“Los niños no tienen ni siquiera televisión, son muy poquiticos los que tienen celular y conexión a internet. Desde un principio, nosotros siempre hemos estado trabajando con guías y con talleres. Queremos la alternancia, la necesitamos y esperamos tener todas las medidas de bioseguridad para poder entrar a laborar”, señala Ofelia Giraldo, rectora de la institución rural Santa Rita.

Este método de alternancia -una parte en casa y otra presencial- iniciará en agosto y será una apuesta del Ministerio de Educación para sobrellevar la pandemia.

Fuente: https://noticias.caracoltv.com/colombia/estan-dejando-de-aprender-profesores-defienden-la-alternancia-en-medio-del-coronavirus

 

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La necesidad de revertir la inmunización social como estrategia biopolítica

La inmunidad en su acepción profiláctica es una práctica sociocultural a la que se le ha adherido una valoración representacional predominantemente favorable. Son muy pocos los que detractan de ella o ponen en duda sus beneficios. Casi que se considera un contrasentido hacerle observaciones o críticas. Dentro de las justificaciones para neutralizar cualquiera observación al respecto, destaca la argumentación de que ella es tan natural como el sistema inmunitario inherente al cuerpo humano. Igual ocurre con su acepción sociopolítica, en tanto dispensa o exención de obligaciones o retribuciones a algunas personas, tan solo es objeto de señalamiento cuando se juzga inmerecida. Sin embargo, su connotación asocia la inmunización a la acción o al poder de quien la propicia, administra o concede. Entre estos agentes y agencias instituidos a cargo de ella sobresale el Estado y la gubernamentalidad. El Estado se ha atribuido a través de técnicas de gobierno, la vigilancia y el control de las poblaciones, entre éstas, la del control epidemiológico. No obstante, esta atribución no ha contado con el beneplácito de grupos sociales, como los denominados neoliberales, quienes consideran que esto ocasiona gastos económicos al presupuesto gubernamental que son requeridos como inversiones, créditos, préstamos, etcétera, para beneficio principalmente de los sectores privados; y que por ello presionan para que los servicios de salud pública, inmunización o sanitarios, sean privatizados y así generen más beneficios para el mismo sector o grupo. De aquí que la inmunización, o la salud pública, se haya convertido en un asunto político, o mejor dicho, biopolítico.

La biopolítica como dominio y resistencia.

Para el autor de esta categoría de biopolítica, Michel Foucault, lo importante de ella radica en su aportación para entender la transformación del Estado moderno al incorporar la vida (sus condiciones de producción y de reproducción) al ejercicio de la gubernamentalidad, –de la construcción de técnicas y dispositivos de seguridad del Estado para salvaguardarse–, por cuanto la salud de la población es el reverso de la salud del mercado y también de la salud del Estado. La biopolítica la concibe Foucault (2007) como el complejo de tecnologías disciplinarias o acciones de poder sobre los aspectos anatómicos y biológicos del cuerpo considerado individuamente como una máquina reparable y colectivamente como especie gobernable. De esta forma el Estado moderno estableció las condiciones para el «cuidado de la vida», de su gestión y de su administración, de su gubernamentalidad, por ejemplo, a través de las políticas sanitarias.

Es así como los enunciados políticos del Estado de Bienestar (que «desprivatiza» y hace pública la asistencia social del Estado), o del Estado Neoliberal (reprivatizando el asistencialismo social y público del Estado), devienen en poder de normalización o disciplinamiento biopolítico de los cuerpos al regimentarlos normativamente (por ejemplo, la cuarentena o el confinamiento). En la medida que, al interesarse por la administración de la salud y/o calidad de vida de los cuerpos, debido a su potencial efecto recursivo sobre la economía y la legitimidad del Estado mismo, intervienen activamente en sus condiciones de vida asimilándolas a cierta racionalidad gubernamental por medio de las normas impuestas.

En consecuencia, la biopolítica responde a una nueva racionalidad política interesada instrumentalmente en la gestión de los problemas que se le plantean a la práctica de la gubernamentalidad, referidos a las condiciones de vida de las poblaciones (salud, natalidad, morbilidad, mortalidad, etcétera); asumidos individualmente y como población a regular mediante acciones de poder en cuanto cuerpos dóciles y útiles, fuerza productiva o laboral para el capital, por vía de su examinación médica y estadística.

Hay que advertir que la categoría de biopolítica es asumida por otros autores desde otra significación. Como es el caso de Negri (2003), quien la significó como resistencia de la vida ante el biopoder (el poder sobre la vida); es decir, su capacidad de creación, de invención, de producción, de subjetivación-objetivación, de afectualidad, de autopoiésis, «es lo que llamamos ‘biopolítico’: la resistencia de la vida al poder, dentro de un mismo poder que ha inventado la vida» (p.63). Esta referencia a la biopolítica como resistencia al biopoder nos relaciona con el planteamiento ecosófico de Guattari (1996). Por cuanto su conceptualización biocéntrica, demanda la necesidad de definir, criticar y reconfigurar las existencialidades en un marco ecológico integral histórico de relaciones ambientales, sociales y mentales, y para cuidar, defender y redefinir, por consiguiente, la vida planetaria o local en la actualidad ante las crisis superpuestas que atravesamos (sanitaria, econímica, social, política, educativa, etcétera) que contemple a la naturaleza recuperada como otredad, y civilizatoriamente a las sociedades proyectándolas en otro mundo posible para el habitar contrario a la explotación de la Tierra o Pachamama y de los seres humanos.

Inmunidad y comunidad.

Si se pone en perspectiva histórica el análisis de la relación entre la individuación subjetiva y las sociedades modernas capitalistas, estas se reproducen como comunidad tomando previsiones inmunitarias con respecto a que se puedan intensificar y extender sus formas colectivistas o comunitarias de expresión. Por ello la dialéctica de lo individualista y lo común no se resuelve a favor de lo comunitario ya que la hegemónica inmunización contra lo colectivo o común se regula favoreciendo al individualismo o separación de los unos respecto de otros en sus variadas formas de manifestación. De esta manera, lo individualista se vuelve complementario y no contradictorio de la comunidad.

La relación potencialmente emancipadora de lo comunitario entre los integrantes de las sociedades es contrarrestada por vía de la acción anticomunitaria y los dispositivos de inmunización negativa de la biopolítica del Estado moderno que principalmente busca en la inmunización social, no tan solo médico-sanitaria, su legitimidad soberana (la potestad de «hacer vivir y dejar morir», o de cómo vivir y cómo morir), de allí la estrategia de la «inmunizadora reclusión» de los cuerpos o aislamiento de los demás con pandemia o sin pandemia, por paradójico que parezca, recordemos la existencia foucaulteana de los otros encierros disciplinarios o «normalizadores» inmunitarios para hacer los «cuerpos dóciles y útiles»: el hospital, el cuartel, la escuela, la cárcel, etcétera. Por ello, Espósito (2006) señala la ambivalencia del nexo de la vida con la inmunización o biopolítica negativa y con la inmunización o biopolítica positiva, «la inmunidad no es únicamente la relación que vincula la vida con el poder, sino el poder de conservación de la vida» (p. 74).

La soberanía del poder estatal moderno sobre el «hacer vivir» y el «dejar morir» (Foucault, 2000), revela la falsa retórica discursiva de la radicación de la soberanía en los ciudadanos, el pueblo o la comunidad. Esa legalmente supuesta soberanía es usurpada al pueblo a través del dispositivo del voto en las «democracias representativas». Por medio de la elección de representantes se expropia esa soberanía popular por esos supuestos representantes electos que deciden en su nombre y contra ellos. En la medida que esta expropiación, junto con otras, es sancionada o recubierta con leyes, lo que supone su legitimación por el derecho dominante, el derecho mismo actúa como dispositivo inmunizador de quienes deseen actuar en su contra. De este modo el Estado y la gubernamentalidad capitalista liberal y neoliberal, así como la burocracia o la burguesía estatal en el capitalismo de Estado o «socialismo», previenen inmunizadoramente cualquiera forma de contrapoder emergente por parte del pueblo o de poder instituyente de la multitud. Asimismo, en las sociedades modernas capitalistas el derecho presupone y auspicia solapadamente la separación o el individualismo entre los sujetos para poder actuar como mecanismo inmunitario ante las rivalidades y acciones consideradas delictivas que surgen principalmente por disputas sobre las propiedades o las apropiaciones. El derecho acciona como dispositivo cohesionador e inmunizador ante los sujetos justificando contradictoriamente algún tipo de sentencia separadora prevalecientemente ya que no hay derecho moderno del todo o de todos, afianzador de lo igualitario-comunitario, sino de la parte o del fragmento individualista aunque su discurso se revista fetichistamente de justicia igualitaria para todos.

Para comprender mejor lo inmunitario, es necesario entender la etimología de munus, ya que de este término al agregarle los prefijos cum-im derivan los conceptos de communitas e immunitas que están intrínsecamente vinculados. El munus, en tanto vínculo, define a los integrantes de una comunidad ya que este es interpretado como un principio obligante o legal que contempla la exigencia o retribución de ser miembro de la comunidad. Principio o ley inherente a la comunidad del cual pueden ser dispensados o excluidos algunos miembros, según la lógica de seguridad o «protección» de la biopolítica del poder de Estado (sobre todo cuando aplica su política de exención o de estado de excepción) y la operacionalidad del gobierno y de la aceptación o de las resistencias que presenten los contrapoderes existentes de la colectividad, es decir, a partir de ese principio-ley se podría inmunizar a la comunidad respecto de sus integrantes. Este principio-ley es implícito a la constitución y existencia de toda comunidad moderna, por tanto ninguno de los dos términos precede al otro, la comunidad y el principio-ley están coimplicados. Por consiguiente, communitas e immunitas (Espósito, 2007)) no son conceptos opuestos, son polos de un continuum que no se pueden pensar aisladamente el uno del otro. Se semejan, en este aspecto coimplicativo, la comunidad y lo inmunitario a un cuerpo biológico cuyo sistema inmunitario actúa para sobrevivir.

La inmunidad se transforma así en un dispositivo que atraviesa a toda la comunidad en sus diferentes expresiones como cuerpo biológico, económico, social, político, etcétera. Desde esta perspectiva la comunidad se define internamente en relación o delimitación a lo que le es exterior, buscando inocularse ante ello, por ejemplo, en cuanto cuerpo militar se define inmunitariamente ante un posible enemigo invasor externo. Expandiendo por medio de la subjetivación ideológica el exceso de prevención inmunitaria frente a la amenaza contaminante de los migrantes, los extranjeros, los diferentes, etcétera.

A través de la extensión de este sentido inmunizador se forja una identidad que bloquea el reconocimiento de lo común en quienes son diferentes por no proceder de la misma comunidad y son excluidos o aislados. De este modo se pasa de una inmunización necesaria a un «exceso inmunitario». A la par, hacia su interior lo que cohesiona paradójicamente a la comunidad capitalista es su opuesto, lo propio, ya que lo propio es lo común. De aquí que de entrada, la comunidad moderna es una comunidad inmunizada ante lo colectivo o común que no sea el intercambio mercantil entre sus miembros de lo propio o lo que es de su propiedad, dan algo a cambio (por ejemplo, dinero) de lo que reciben (por ejemplo, mercancías). No obstante, este tipo de inmunidad es como una enfermedad autoinmune por alienante cuyo exceso inmunitario puede implosionar a la comunidad, como cuando se ataca una virosis inoculando al cuerpo riesgosamente con más virus, tratando de proteger la vida negativamente. En consecuencia, para una sociedad que aspire a emanciparse de esa lógica inmunizadora alienante de intercambio de propiedades, deberá revertir esa lógica inmunizadora mercantilista sustituyéndola por otra, una biopolítica emancipadora, que anteponga la prevalencia inmunitaria de los bienes comunes o valores de uso ante los valores de cambio mercantil entre propietarios intercambiantes.

La biopolítica emancipadora.

Ha de ser una biopolítica ecosófica liberadora actuante en función de la defensa de un Paradigma Ecoprotector Inmunitario que proponga rehabitar el mundo, una biopolítica inmunitaria impugnadora y confrontadora del biopoder soberano de un Estado y de una gubernamentalidad neoliberales, así como del biopoder del capitalismo de Estado, que arbitrariamente inmunizan negativamente la vida incrementando la exclusión, el aislamiento, el confinamiento, el encierro, la morbilidad, la mortalidad, etcétera. La soberanía del biopoder estatal, si bien es, por un lado, continuidad del antiguo poder soberano del monarca sobre la vida y la muerte; por otro lado, ha adquirido en la modernidad la forma biopolítica inmunitaria a través de las técnicas de gubernamentalidad o control de las poblaciones. Esa arbitrariedad soberana del Estado y su gubernamentalidad se devela como tal cuando se revela quienes son mayoritariamente inmunizados negativamente por el «exceso inmunitario» que puede conducir a sacrificar vidas: grupos sociales, étnicos, de género, etcétera, que ya habían sido segregados o subordinados en sus derechos dentro de las comunidades estratificadas. Realidad ésta que conlleva a establecer la correspondencia biunívoca, término a término, entre el par inmunidad-comunidad con el de derechos-humanos cuando consideramos que intrínsecamente están correlacionados porque se contienen recíprocamente para verificar su naturaleza ética o bioética, sobremanera si asumimos que la inmunidad debiera garantizar positivamente los derechos, o viceversa, de quienes son objeto de políticas inmunizadoras negativas. En este sentido, sustentamos la vigencia de proponer la necesidad de construir colectivamente un Paradigma Ecoprotector Inmunitario que guie y oriente las reflexiones y las acciones para hacer cohabitable el mundo ante las distintas pandemias sanitarias, económicas, sociales, políticas, etcétera, que vulneran la vida y la ponen en riesgo.

Referencias

Espósito, R. (2006). Bios. Biopolítica y filosofía. Buenos Aires: Editorial Amorrortu.

_________ (2007). Communitas. Origen y destino de la comunidad. Buenos Aires: Amorrortu.

Foucault, M. (2000). Defender la sociedad. Buenos Aires: Editorial FCE.

_________ (2007). Nacimiento de la biopolítica. Buenos Aires: Editorial FCE.

Guattari, F. (1996). Las tres ecologías. Valencia: Editorial Pre-Textos.

Negri, A. (2003). Del retorno. Abecedario biopolítico. Barcelona: Ediciones Debate.

Fuente: https://www.aporrea.org/tecno/a291009.html

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«Milagro en la celda 7»: La explicación del emotivo final de la película turca de Netflix

Redacción: RPP

La película turca llegó a Netflix y se posicionó como una de las favoritas por los usuarios de la plataforma, sin embargo, ¿qué significó su final? 

La película “Milagro en la celda 7” presenta una historia bastante conmovedora,  ya que narra la vida de Memo, un hombre con discapacidad intelectual que convive con su hija Ova y su abuela Fatma.

Él es injustamente encarcelado por un crimen que no cometió, así que, se tuvo que separar de su pequeña, cosa que lo deja bastante destrozado. Su vida da un giro radical luego de entrar a la celda, ya que es despreciado por sus compañeros porque lo consideraban “un asesino de niños”.

Luego, es injustamente sentenciado a muerte por lo que debe soportar toda esa carga de pena tras saber que no volverá a ver nunca más a Ova. Por otro lado, la niña hace lo posible por reencontrarse con él y además, está convencida de que es inocente.

¿QUÉ PASO AL FINAL?

Dos días antes de que se realice la ejecución de Memo, Akorozlu se une con el alcalde de la prisión quien también decide ayudar al prisionero porque están convencidos de su limitación intelectual.

Su compañero de celda, Yusuf, es un hombre con gran corazón que «perdió» a su hija creyendo que fue su culpa, así que decide ponerse en el lugar de Memo para que Ova no se quede sola.

Los guardias intercambian a Memo por Yusuf y finalmente, él es ejecutado. Sin embargo, los hombres de Akorozlu hacen una jugada y el alcalde anuncia que el preso se escapó, mientras tanto, sacan a Memo en un auto para que pueda verse con Ova.

Ambos escapan del país en un bote dejando atrás a Turquía, un país que los hizo sufrir tanto. El tiempo pasa y la niña se convirtió en mujer, sale con un vestido de novia y en la mano tiene un regalo que le dio Yusuf antes de sacrificarse por su padre.

A pesar de todo, “Milagro en la celda 7” tiene un final feliz porque Ova pudo estar con su padre y siempre confió en su inocencia.

Regalo de Yusuf que le hizo a Ova antes de sacrificarse por su padre.
Regalo de Yusuf que le hizo a Ova antes de sacrificarse por su padre. | Fuente: Facebook

EL REGALO DE YUSUF

Se han tejido teorías sobre el regalo que tenía Ova cuando ya se va casar y quienes han podido ver “Milagro en la celda 7”, sabrán que es un presente que le dio Yusuf. No obstante, uniendo las historias, puede que la mamá de Ova haya ocultado a su padre la niña, porque tenía miedo de que le hiciera algo.

Por alguna razón, él la mató y la enterró, pero Yusuf no sabía que su hija estaba casada simbólicamente con Memo. Cuando recién llegó a la cárcel se dio cuenta que él no tenía ni una malicia, por eso Ova, con el corazón inocente que tiene, reconoció inmediatamente el árbol en la pared.

Ahí Yusuf se dio cuenta de que había cometido un error con su hija y se sacrificó por Memo para que la niña no se quedara sola. Esa es la razón por la que Ova tiene el regalo al principio y al final de la historia. Yusuf dejó sin madre a Ova pero le devolvió a su padre.

Fuente: https://rpp.pe/tv/netflix/netflix-milagro-en-la-celda-7-la-explicacion-del-emotivo-final-de-la-pelicula-turca-noticia-1255399?ref=rpp

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España: El Ministerio de Educación y Formación Profesional y RTVE lanzan hoy ‘Aprendemos en casa’

El Ministerio de Educación y Formación Profesional y RTVE lanzan hoy ‘Aprendemos en casa’

El objetivo es facilitar el aprendizaje de todo el alumnado durante la suspensión de las clases presenciales a causa de la crisis del coronavirus Covid-19.

Hace 50 años, las marionetas de Barrio Sésamo, su llegada a los hogares estadounidenses, resultó revolucionaria. En plena Guerra Fría, EEUU quería vencer a la URSS en todo, y descubrió que, de todas las variables, la que más influía en que los rusos estuvieran aventajándoles en la carrera espacial, era que los niños rusos a los cinco años ya tenían todos los prerrequisitos para leer.

Entonces, con la incorporación masiva de la mujer al mercado de trabajo, los niños estadounidenses pasaban muchas horas en casa solos y sin demasiada atención. Por ello surge Barrio Sésamo, como programa de compensación educativa (“Soy el 1, soy el 2…”, “Izquierda, derecha…”) para tratar de subsanarlo. Se puede ver por ejemplo en Mad Men, cuando Joan trabaja desde casa mientras su hijo pequeño ve a los personajes de Barrio Sésamo en la televisión de la cocina.

50 años después, y en plena emergencia sanitaria (otra guerra), el Ministerio de Educación y Formación Profesional se ha fijado en la televisión, ese aparato con que el 99,1% de los hogares españoles cuentan, según el INE, frente al 80,9% que cuentan con ordenador y el 56,8% con tablet, según la misma encuesta. El 91,4% tiene acceso a internet.

Lo ha hecho de la mano de RTVE para lanzar ‘Aprendemos en casa’, que, desde hoy ofrece una programación especial de televisión impulsada para paliar la falta de clases presenciales motivada por la crisis del coronavirus, “especialmente entre el alumnado socialmente más vulnerable”, un sector que requiere una atención prioritaria en esta situación, como ONG como Save the Children han resaltado los últimos días.

Programación

La programación incluye cinco horas diarias de contenidos educativos dirigidos a estudiantes de 6 a 16 años en abierto en la franja matinal de Clan TV y La 2 de TVE.

En ella ha sido clave la colaboración de distintas editoriales y portales educativos (Edebé, Edelvives, McGraw-Hill, Planeta, Santillana, MacMillan, SM, Anaya, Bromera, Bruño, Algaida, Oxford University Press, Bristish Council, Editorial Casals, Pearson, LingoKids, Smile&Learn, Unicoos, Unprofesor.net, Happy Learning, Quantum, Derivando y La cuna de Halicarnaso) a la hora de ofrecer sus contenidos para elaborar estos espacios. El MEFP ha formado varios equipos de trabajo para revisar y filtrar los materiales audiovisuales para asegurar su calidad de trabajo, mientras que RTVE ha creado otro grupo de trabajo que colabora con el MEFP.

La programación pretende ser una “ayuda anímica” para los menores y sus familias en medio del confinamiento. Además de incluir contenidos relacionados con las distintas áreas de conocimiento trabajará las competencias emocionales para mejorar la convivencia en familia y fomentar que todos aprendan en casa de esta situación. Entre los objetivos figura desde el fomento de la lectura y el estímulo de la curiosidad hasta el refuerzo de la actividad física y los valores solidarios.

  • De 6 a 8 años: Lunes-Matemáticas; Martes-Ciencias Sociales; Miércoles-Educación Artística y Educación Física; Jueves-Lengua e idiomas, Viernes-Ciencias Naturales. De 9.00 a 10.00 en Clan TV. 
  • De 8 a 10 años: Lunes-Matemáticas; Martes-Ciencias Sociales; Miércoles-Educación Artística y Educación Física; Jueves-Lengua e idiomas, Viernes-Ciencias Naturales. De 10.00 a 11.00 en Clan TV.
  • De 10 a 12 años: Lunes-Matemáticas; Martes-Ciencias Sociales; Miércoles-Educación Artística y Educación Física; Jueves-Lengua e idiomas, Viernes-Ciencias Naturales. De 11.00 a 12.00 en Clan TV. 
  • De 12 a 14 años: Lunes-Matemáticas; Martes-Ciencias Sociales; Miércoles-Educación Artística y Educación Física; Jueves-Lengua e idiomas, Viernes-Ciencias Naturales. De 12.00 a 13.00 en La 2 TVE.
  •  De 14 a 16 años: Lunes-Matemáticas; Martes-Ciencias Sociales; Miércoles-Educación Artística y Educación Física; Jueves-Lengua e idiomas, Viernes-Ciencias Naturales. De 13.00 a 14.00 en La 2 TVE.

Fuente de la Información: https://www.magisnet.com/2020/03/el-ministerio-de-educacion-y-formacion-profesional-y-rtve-lanzan-hoy-aprendemos-en-casa/

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Argentina: Infancia hoy. La mitad de los niños no tiene libros en su casa y a 2 de cada 10 no le festejan el cumpleaños

Redacción: mdzol

Estos datos se desprenden del informe «Futuro de la infancia en la Argentina: mapa actual y políticas pendientes». Los especialistas que participaron del trabajo coincidieron que si bien el hambre es el mayor problema, la estimulación también es clave.

A dos de cada diez niños en Argentina no le festejaron su último cumpleaños y un 45,5% no tiene libros en sus casas. Son algunos de los datos que se difundieron en el contexto de la conferencia anual del Centro para la Evaluación de Políticas basadas en Evidencia (CEPE).

La especialista indicó que desde el Observatorio consideran el festejo del cumpleaños «muy importante en la estimulación emocional y social del niño y en la construcción de su identidad, ya que tiene la posibilidad de reconocer a otros y en otros roles».

Un niño pobre tiene cinco veces menos posibilidades que uno de sector medio de que le festejen su cumpleaños».

En relación a otros indicadores de estimulación intelectual y emocional, Tuñón describió que el 45,5% de los niños hasta 4 años no tiene libros infantiles en su casa y que al 34,3% no les leyeron un cuento en el último año«.

La estimulación es sólo una de las patas de los indicadores que la especialista del Barómetro presentó en la apertura de la Conferencia Anual del CEPE, perteneciente a la Universidad Torcuato Di Tella, que este año se convocó bajo el nombre «Futuro de la infancia en la Argentina: mapa actual y políticas pendientes».

Desde el Barómetro recordaron otros datos como que el 51,8% de los hogares de niños menores de 4 años se encuentran bajo la línea de pobreza mientras que uno de cada diez está en pobreza crítica o grave, lo que implica que el 12,9% tiene inseguridad alimentaria severa.

En ese contexto, el neurocirujano Facundo Manes recordó la «importante evidencia que hay sobre el impacto de la pobreza en el desarrollo cognitivo de la persona», y aseveró que «en un contexto de escasez, los recursos cognitivos se ponen al servicio de la supervivencia y no se puede proyectar».

El fundador de la Fundación Ineco reafirmó, a través de evidencia, que «tanto la alimentación como el estímulo» son clave en el desarrollo intelectual del niño, y desterró el mito de que «lo que no se hizo en los primeros 1.000 días de vida ya no se podrá hacer» porque, explicó, «el cerebro tiene plasticidad hasta el último día de vida de una persona».

Presente en el panel de apertura, el diputado Daniel Arroyo, una de las personas que suena más fuerte como futuro ministro de Desarrollo Social, reiteró ante el auditorio el proyecto de la creación del Plan Nacional Argentina contra el Hambre, que conformaría un Consejo y un Observatorio que planifiquen y controlen que la política sea efectiva.

Paralelo a atacar el hambre hay que generar políticas que permitan mejorar los ingresos de las familias a través de acciones concretas en la construcción, producción de alimentos, textil, cuidados y reciclado, que son los que emplean a los sectores más vulnerables».

El diputado señaló que «para llevar adelante estas propuesta no hay que hacer nada fundacional sino, por el contrario, trabajar con lo que ya está en marcha porque en Argentina hay una enorme red de organizaciones de la sociedad civil y la iglesia».

Fuente: https://www.mdzol.com/sociedad/infancia-hoy-la-mitad-de-los-ninos-no-tiene-libros-en-su-casa-y-a-2-de-cada-10-no-le-festejan-el-cumpleanos-20191115-52276.html

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El Salvador: Educación sexual integral. Un derecho negado

Redacción: Gato Encerrado

Tengo siete sobrinas y tres sobrinos, de las cuales dos son más cercanas por área geográfica y por haber convivido con ellas. Una  actualmente tiene 16 años y la otra tiene ocho. Elizabeth, de 16, tuvo hace unos meses una experiencia que nos cambió la vida, a ella y a  mí. Yo por primera vez sentí en carne propia el discurso que elaboramos, partiendo de datos estadísticos sobre violación, desapariciones y violencias contra  niñas y adolescentes. Mi sobrina fue víctima de una privación de libertad en el que ella solita llego hasta ahí. Pero ¿Cómo llego hasta la jaula de su privación? Bueno la respuesta es simple, por la falta de educación integral en sexualidad (EIS).

Una adolescente con deseos de conocer afectividad y sentirse “madura” recibió una invitación a su Facebook de un hombre de 26 años de edad. Al no tener clara las relaciones de poder, cualquiera diría que no es mucha la diferencia. Empezaron con mensajitos, hasta que un día la llegó a ver a la escuela, ubicada en uno de los municipios violentos de San Salvador. Se vieron, hablaron y le pidió el número de teléfono para chatear en whatsapp.

Las conversaciones de amistad terminaron en una relación de “novios”, donde ella creía que había confianza como para contarle que su mamá la restringía de ciertas actividades y que no le permitía tener novio, y que si lo hacía la sacaría de la escuela. Con esta información, el sujeto vio un escenario perfecto para un día llegar en su moto y llevársela hasta un cantón de Tonacatepeque, donde no todas las compañías de telefonía tienen señal de celular.

Ahí empezó la cruzada, mi hermana no quería que su hija tuviera novio pero tampoco le importaba lo que ella quería, nunca le dijo cómo se debía cuidar ante las señales de trata de menores, del uso de las redes sociales, ni mucho menos le explicó como tener una relación afectiva sin violencia, porque resulta que ella (la mamá) también había pasado por esas misma limitantes.

Crecimos en el seno de una familia religiosa y conservadora, los temas de sexualidad no se discutían. Esa limitante, heredada en las tres generaciones más cercanas de mi familia, terminaba con una de mi sobrina privadas de libertad por un delincuente vinculado a grupos criminales del país, resultado de la ignorancia por no hablar de EIS.

Pero esta situación pudo ser diferente, cuando este hombre le dijo “veníte a mi casa, aquí no vamos hacer nada (tener relaciones sexuales) hasta que cumplas 18 años”, ella no lo habría creído y no hubiera esperado a que la encerraran, que le quebrara su celular y que le dijera que de esa casa no salía, si no era con él o muerta.

Esa experiencia me llevó a pensar: ¿qué les espera a las niñas y adolescentes si se sigue postergando la EIS como una política pública? Me encontré en internet con un artículo titulado: El libro apócrifo de Galileo, publicado en el 2009[1], donde relata cómo fue la batalla perdida de la ciencia ante la religión. Una vez más, pero hoy en lugar de creer que la tierra gira alrededor del sol, era que la sexualidad debía tener un solo enfoque: abstinencia, hablar de la sexualidad desde la religión y los valores de un grupo de ultra conservadores liderados en ese momento por el exarzobispo de San Salvador Fernando Sáenz Lacalle y Regina de Cardenal, presidenta del Movimiento Sí a la Vida.

Resulta que en el año 2000 el Ministro de Salud José Francisco López Beltrán presentó el manual: “De adolescentes para adolescente”, un material que hablaba a partir de investigaciones científicas sobre sexualidad, pero que fue modificado, por no agradar a la iglesia y ciertos poderes políticos. Se imaginan ¿qué hubiera pasado con esta generación de niñez y adolescentes si se hubiera aplicado aquel manual que tocaba todos los temas de sexualidad? Seguramente no tendríamos a estas alturas las tasas tan elevadas de embarazos, trata de menores y de violencia sexual. Según el Ministerio de Salud, solo en 2017 hubo 19,190 niñas y adolescentes embarazadas, lo que representa el 28 % de embarazos de todo el país. De ellas 781 tenían edades de 10 a 14 años.

Mi sobrina estuvo a punto de formar parte de las cifras de desaparecidas, pero gracias a la presión que se ejerció y demandó a fiscalía y policía, se pudo ubicar dónde estaba, pero no hubiera funcionado sin una tía recitando todos los programas que supuestamente estas instituciones tienen para casos de desaparición de menores de edad. Ese día, mientras iba en la patrulla de policía, pensé en todas esas niñas que son dejadas a la deriva por la famosa frase “marido quieren, marido tienen”, que lamentablemente viene de las familias que simplemente no tienen formación en EIS.

Hoy no quiero que mi sobrina de ocho años llegue la adolescencia y se convierta en una cifra más de embarazo no deseado, una adolescente desaparecida o violada, una niña que la engañan y la privan de libertad mientras la violan. No quiero que ella sea fuerte, si no que camine por las calles libre, y que nadie le diga que las calles no son para ella; quiero que en la escuela le enseñen y fomente la cultura de denuncia, para que cuando un tipo mayor le empiece a escribir por las redes sociales, la persiga por la calle, o si la pareja de mi hermanas le toca su vulva y le diga “es un secreto entre vos y yo” tenga la capacidad de identificar que es una agresión sexual.

Como tía quiero que mis sobrinos y sobrinas tengan las capacidades instaladas para protegerse en su salud sexual y reproductiva. Es un derecho humano para su desarrollo pleno; pero mientras grupos religiosos y conservadores se opongan, nos quedaremos atrapados en una especia de edad media, donde se niega el conocimiento y se expone a las mayorías, las clases con menos recursos económicos. Datos indican que la tasa de embarazo de adolescentes es de 118 por 1000, en el quintil más pobre y solo del 35 por 1000, en el más rico, que tiene acceso a otros niveles de educación y servicios.

Fuente: https://gatoencerrado.news/educacion-sexual-integral-un-derecho-negado/

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Las 14 mejores lecciones del psiquiatra chileno Claudio Naranjo para aplicar en tu vida

Redacción: Actualidad

Este viernes falleció el reconocido experto en psicología transpersonal, pero antes dejó una serie de importantes enseñanzas que, según afirmó, podrían ayudar a mejorar el mundo. ¿Cuáles son?

 

El reconocido psiquiatra chileno Claudio Naranjo falleció este viernes a los 86 años y muchos de sus seguidores ya lo recuerdan por sus enseñanzas y visiones del mundo. En los últimos años, el experto en psicología transpersonal compartió conversaciones con RT donde los espectadores pudieron tomar nota de los aprendizajes de este médico que aboga por una forma sana de relaciones humanas para tener un mundo mejor, desde su perspectiva.

A continuación, repasamos las más interesantes, para crecer de un modo más saludable.

Repensar el rol de los padres y la niñez

1. Ser menos severos y más comprehensivos con los chicos:

«El niño es un ser que nace libre, y poco a poco es domesticado a través del miedo. La palabra que más escucha, es el ‘no’, para evitar hacer lo que le gusta. La llamada moral del padre severo piensa que con la amenaza se puede corregir a los niños, pero se podría intentar con la comprehensión, y preguntarle qué es lo que le pasa. En definitiva, se cree que el niño es malo, y por eso no querrá obedecer. Esta lógica se aplica a los delincuentes, aumenta la severidad ante la necesidad de doblegar».

2. No confundir respeto con amor:

«A un niño se lo puede castigar de manera cariñosa, con comunicación. Puede haber una forma de crear respeto sin temor. A los padres les gusta mucho ser respetados, es un mandamiento cristiano: ‘respetarás y honrarás al padre y la madre’. Yo creo que esa ley religiosa, en realidad, es el amor de los padres, pero se fue transformando en el respeto hacia una autoridad intocable».

3. Tener más contacto físico:

«Como patrón, parece que los humanos tienen falta de tacto, y eso genera problemas en la infancia. Se debe a la sumisión de la mujer, y que la civilización es demasiado masculina. En los gatos, por ejemplo, la mamá lame a sus gatitos. Para sobrevivir no basta solo con comida, también se necesita el tacto, la comunicación».

4. Además de querer a los niños, hay que mejorar individualmente:

«Siempre se dice que a los niños hay que quererlos, pero es un consejo que no nos lleva muy lejos. Ya estamos queriéndolos, son nuestro hijos. La clave es hacer algo para mejorar como persona. Pero es cierto, cada vez hay menos tiempo, una esclavitud laboral muy fuerte y poco espacio para el ocio».

5. Buscar tiempo libre para compartir:

«Salimos muy heridos y resentidos de las heridas que recibimos en la infancia, por la carencia de amor también, que es una epidemia. Los padres, con el trabajo y la situación económica, han perjudicado a los chicos. ¿Dónde está el tiempo para los niños? Cada generación está en la situación de querer ser querido. Porque los padres no pudieron llenar esa situación de amor en la infancia. Y cuando deben dar amor a sus niños, también están en falta de cariño por su pasado, y entran en conflicto. No tienen la plenitud para hacerlo».

Cambiar la mentalidad

6. Dejar de pensar como cazadores y recolectores:

«Todos somos víctimas de una sociedad enferma. La civilización es una respuesta a una situación traumática del mundo, dice Freud. Lo que llamamos un mundo civilizado, es un mundo muy inmoral. Conquistamos todo, y queremos seguir conquistando, pero ya no hay qué conquistar. Es como si siguieran viviendo pensando que se va a acabar la comida, se va acabar el territorio y que hay que defenderse, como en las épocas de escasez».

7. Volver a actuar de modo infantil:

«A los adultos hay que devolverles la rabia y el dolor infantil, para que vuelvan a estar enteros. Solo así se puede recuperar el amor. Para amar hay que tener la libertad de decir sí o no, no se puede ser un animal domesticado. Hay que salir del ‘tengo que ser un niño bueno'».

8. Mejorar con otras personas:

«Los avances de la psicoterapia son con técnicas en grupo, para relacionarse de forma sana».

9. Quererse: «Hay una contradicción en la ética cristiana: predica el amor por el prójimo, pero no el amor por uno mismo. No funciona el amor al prójimo sin amor a uno mismo».

Revolucionar la educación

10. Valorar la creatividad de los jóvenes:

«Así, podríamos ver una generación no solo más feliz que la nuestra, también más sabia y benévola. Los problemas no van a ser resueltos por la conciencia que los creó».

11. Los maestros deberían aprender de los alumnos:

«Yo sé, y tú no sabes. Ahora vas a saber lo que yo quiero que sepas’. Eso termina sin ganas de querer saber nada. Los niños quieren hacer miles de preguntas, y se van muriendo en el camino. Un profesor instruye y traspasa información, como si lo más importante fuese estar informado. En la era de la información, casi no sirve eso. Se les imparte conocimiento de forma obligatoria, pero sin interesarse realmente en ellos».

12. Usar otro tipo de enseñanza:

«No se les enseña a relacionarse, y eso es muy importante».

13. Entender la razón de ser del sistema educativo actual:

«La educación es para tener trabajadores, no es para tener desarrollo humano. Esto comenzó con la sociedad industrial, creado por el sistema económico. Es un sistema de reproducir una forma de ser. A veces decimos que este es un mundo loco, y no pensamos por qué. Nosotros creamos este mundo loco,y no reconocemos nuestra propia locura».

14. Cambiar la realidad desde el aprendizaje:

«El cambio del mundo es a través de la conciencia. Otra manera de ver, sentir, comprender y de ser. La educación es la principal manera para inyectar eso en la humanidad de forma masiva, más allá de las guerras y las revoluciones».

Fuente: https://actualidad.rt.com/actualidad/320917-mejores-lecciones-psiquiatra-chileno-claudio-naranjo

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