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Razones por las cuales no llevar a cabo la Olimpiada de Conocimiento Infantil (OCI)

Por: Andres Octavio Varela Enriquez

 

No existe ningún tipo de evaluación desde un enfoque crítico y emancipador, como lo proponen los libros sin recetas para la maestra y el maestro.

1.- Los concursos, por su naturaleza excluyente, contravienen a los principios filosóficos de la NEM; el único plan de estudios vigente.

2.- La idea de reconocer a los niños o niñas “más sobresalientes”, se construye sobre la exclusión sistemática de los “menos sobresalientes”. En la gran mayoría de los casos, los niños y las niñas que no tienen “buenos resultados” en las escuelas, sufren violencias de diferentes tipos por su condición de clase, raza y género; se violan sus derechos. El concurso y el premio, en este caso, legitima las desigualdades y justifica las violencias. Además, se manda un mensaje contundente a aquellos niños y niñas a quienes nunca se les reconocen sus talentos y diferencias, ni sus derechos, mucho menos las violencias que provocan las desigualdades por las cuales no tienen las mismas oportunidades que sus compañerxs.

3.- Existe en este momento una Recomendación de la CNDH en donde, después de una robusta investigación, se probó que la gobernadora de Chihuahua, al interponer una Controversia Constitucional para evitar la distribución de los LTG de la NEM, violentó los derechos de los NNA. Uno de esos derechos se refiere a la Participación. Por esta razón, la CNDH recomienda al Gobierno del Estado que emita un circular en el que informe a todos los servidores públicos que, cuando exista un asunto en donde estén involucrados los derechos e intereses de las NNA, se construyan mecanismos eficientes para su participación. En la OCI no hay ningún mecanismo de ese tipo y con ello se violenta ese derecho; existe un ejercicio de revictimización.

4.- Bourdieu, desde hace un par de décadas, nos advirtió de las prácticas de la lógica escolar que, aún autoproclamándose un lugar en el que “caben todos”, terminan por excluir a quienes menos tienen y más violencias sufren. Para el caso de la OCI, en el que están involucrados apoyos económicos a quien “gana” estos concursos, se manda un mensaje claro: se apoya a quien ya tiene otros apoyos y suficiente capital cultural y económico para tener un “buen desempeño escolar” y no a quien más lo necesita. Es cierto que la gran mayoría de estudiantes, incluso aquellxs que participan en la OCI, necesitan estas becas escolares, pero estamos convencidos de que, al no existir universalidad de apoyo, primero debe optarse por beneficiar a quien más lo necesita.

5.- Por si fuera poco, si la OCI tiene el agravante de llevarse a cabo con un examen estandarizado, no sólo se contravienen los principios de la NEM, sino cualquier intento de promover una educación liberadora y enfocada en la resolución de problemas reales, que guarden una relación con la vida de las y los estudiantes y los contextos comunitarios en los que viven. Además de someter a un terrible estrés a las y los estudiantes y construir una imagen artificial, meritocrática y excluyente de los procesos educativos.

6.- Porque la forma en la que se está planteando para el estado de Chihuahua por las autoridades locales, aún y cuando se trata de que los participantes expongan un proyecto que hayan elaborado en el aula, escuela o comunidad, no deja de tener una lógica individual y sujetarse a una evaluación externa de un “comité evaluador” que es ajeno al proyecto construido en comunidad. En consecuencia, no existe ningún tipo de evaluación desde un enfoque crítico y emancipador, como lo proponen los libros sin recetas para la maestra y el maestro.

7.- Porque ya existe una gran sobrecarga de trabajo en las escuelas, sobre todo a estas alturas del ciclo escolar.

8.- Porque demandamos, primero, políticas educativas que ayuden a fortalecer la apropiación de la NEM y no su obstaculización.

P.D. del momento histórico que vivimos con la NEM.- Afortunadamente, y para la tristeza de sus malquerientes, la NEM sigue caminando, al grado de que hoy ya hay bastantes maestros/as, escuelas, zonas e, incluso, sectores que se oponen a la tan “tradicional” y violenta “Olimpiada del Conocimiento Infantil”.

P.D. para el adultocentrismo.- Si tanto agradan esos concursos al ego de los adultos, que concursen los adultos.

P.D. de la incongruencia.- Pobre SEP, a veces, tan lejos de la NEM que, con estos concursos, contraviene sus propias luchas y le brinda elementos a los gobiernos antiderechos -como el de Chihuahua- para llevar a cabo políticas educativas excluyentes. Un reconocimiento pa los compas que, al interior de la SEP, resisten y hacen posible las transformaciones en la medida de las posibilidades.

P.D de otra incongruencia.- Encima de que es un mecanismo para deducir impuestos: ¿Tan sólo 28 becas para todos los participantes del estado de Chihuahua otorgadas por la banca extranjera que más ha crecido en México? En fin, banqueros.

Fuente de la información e imagen:  https://profelandia.com

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La educación, un derecho humano amenazado por la desigualdad

 Por: María P. Martínez

La vicesecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, considera que es necesario que los líderes mundiales aborden esta situación de manera urgente.

Durante su intervención en una reunión de alto nivel sobre educación convocada por la Unión Europea (UE) en Bruselas, Mohammed rindió homenaje a los niños de la Franja de Gaza, que han sido privados de educación durante más de seis meses debido a ataques directos contra escuelas. «Hoy la luz se ha apagado para Gaza y sus niños. Necesitamos un compromiso para volver a encender esa llama para sus jóvenes y su comunidad. La educación es esperanza. La educación es el futuro», afirmó.

Este año se celebrarán una serie de reuniones que se basarán en la Cumbre para la Transformación de la Educación convocada por la ONU en septiembre de 2022 en respuesta a la crisis mundial educativa, después de que más del 90% de los niños del mundo perdieran el acceso a las aulas durante la pandemia de la Covid-19.

La número dos de la ONU hizo hincapié en la necesidad de que los líderes mundiales reconozcan la urgencia de “transformar la educación e invertir en ella como un imperativo mundial”. También enfatizó la importancia de lograr avances significativos en áreas críticas como “la reforma de la arquitectura financiera internacional, el fortalecimiento de la cooperación digital y una nueva agenda para la paz”.

UN DERECHO HUMANO

El desafío es monumental: se estima que para 2030, 84 millones de niños y jóvenes seguirán sin acceso a la educación, y aproximadamente 300 millones carecerán de habilidades básicas en aritmética y lectura. Mohammed recordó que “la educación es un derecho humano fundamental. Invertir en educación es la mayor inversión que podemos hacer en nuestro futuro común, en la paz y el desarrollo sostenible, y en particular en la igualdad de género”.

La vicesecretaria general también aprovechó su visita a Bruselas para presidir la reunión del Consejo de Administración de la Iniciativa Spotlight, un esfuerzo conjunto de la ONU y la UE para combatir la violencia contra las mujeres y las niñas.

Esta iniciativa, que opera en 30 países y regiones, se centra en áreas críticas como la violencia doméstica, la violencia sexual y de género, y el feminicidio, junto con la trata de personas.

Desde su lanzamiento en 2019, ha logrado importantes avances, permitiendo que millones de mujeres y niñas accedan a servicios contra la violencia de género y promoviendo la educación sobre masculinidad positiva entre hombres y niños.

https://www.mundiario.com/articulo/sociedad/educacion-derecho-humano-amenazado desigualdad/20240411222139304914.html

 

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Estudio: Desigualdad, pobreza y clases medias en América Latina: del relato a los datos

José Juan Ruiz Gómez. Presidente del Real Instituto Elcano

 

AMÉRICA LATINA

Tema[1]

La desigualdad es un problema grave y extendido en América Latina, tanto en términos absolutos como relativos respecto a la economía global. A pesar del relato, los datos sugieren que no parece razonable considerar que nada ha pasado en América Latina en la lucha contra la desigualdad y la pobreza. Han pasado muchas cosas y la mayor parte de ellas positivas.

 

Resumen

Los datos confirman que, en términos de distribución de la renta, América Latina es una de las regiones más desiguales del mundo. Existe una extensa literatura académica que analiza los orígenes históricos y la evolución de este grave problema no sólo moral, sino también político y económico.

 

La desigualdad es por tanto un problema grave y extendido en la región, tanto en términos absolutos como relativos respecto a la economía global. Sin embargo, la mayoría de los países latinoamericanos han tenido un éxito relativo es su empeño –explícito o implícito– de reducción de la desigualdad.

 

Análisis

Mapa de la desigualdad: coeficiente Gini, 2019

Fuente: World Bank Poverty and Inequality Plataform.

Nota: según el país y el año, los datos se refieren a la renta disponible o al consumo per cápita.

Los datos, esta vez sí, confirman que, en términos de distribución de la renta, América Latina es una de las regiones más desiguales del mundo. Existe una extensa literatura académica que analiza los orígenes históricos y la evolución de este grave problema no sólo moral, sino también político y económico.

 

La Figura 1 toma los datos que Our World in Data obtiene del Banco Mundial y muestra que entre los 25 países con peor distribución de la renta –sobre un total de 89 economías– figuran 16 países latinoamericanos.

 

Figura 1. Índices Gini, circa 2023 (16 países de América Latina entre las 25 economías del mundo con peor distribución del ingreso)

La desigualdad es por tanto un problema grave y extendido en la región, tanto en términos absolutos como relativos respecto a la economía global.

 

La Figura 2 describe la frontera de desigualdad global que configuran los Índices Gini de estas 89 economías. Se ha construido sin ponderar por población o por tamaño de la economía, por lo que más que un indicador sintético de la desigualdad global lo que traza es el éxito o fracaso de esas 89 economías en su objetivo de reducir los Índices de Gini, una medida popular de la desigualdad pero que, no hay que olvidar, no capta todas las dimensiones del problema: discriminación en el acceso a la salud, a la educación, sesgos de género, discriminación racial, intergeneracional, igualdad de oportunidades o movilidad social.

 

Figura 2. Frontera global de la desigualdad (promedio móvil sin ponderar por población o PIB de los Índices de Gini de 89 economías entre circa 1980 y circa 2023)

Puede observarse que los máximos en los Gini se registraron entre los años 80 y 90 del siglo pasado y que, hasta la pandemia, a lo largo de las dos décadas del siglo XXI ha habido un intenso y sostenido proceso de reducción de los valores de esos indicadores. El mínimo se alcanzó en 2011, momento en el que nuevamente el indicador agregado comenzó a aumentar. El promedio del periodo es un Gini global de 0,36 y una reducción entre 2001 y 2019 del 7%.

 

Tomando esas referencias se ha construido la Figura 3 en el que se representan los Índices de Gini más recientes de esas 89 economías –eje vertical– y los cambios que se han acumulado en ellos a lo largo de estas dos décadas.

 

La figura distingue cuatro cuadrantes: países con Gini por encima de la media pero que en estos 20 años han reducido su nivel de desigualdad más que el promedio del total de países (Cuadrante I), países con Gini por debajo de la media y en los que se ha reducido más que en el promedio (Cuadrante II), países con desigualdad menor que la media, pero en aumento (Cuadrante III), y países con desigualdad por encima de la media y en los que la brecha ha seguido aumentando (Cuadrante IV).

 

Figura 3. Variación del Índice Gini en siglo XXI (14 países de América Latina en cuadrante que indica Gini altos, pero reduciéndose)

Como puede observarse, la mayor parte de los países latinoamericanos (14) se sitúan en el Cuadrante I, los dos que están por debajo de la media (El Salvador y Venezuela, con datos sólo hasta 2006) en el Cuadrante II, y Colombia, Costa Rica y Nicaragua (que ya estaban por encima de la media global de desigualdad) en estas dos décadas han agravado su situación de desigualdad. Junto a ellos están economías desarrolladas (EEUU), países africanos (Tanzania y Burkina Faso), asiáticos (Laos e Indonesia) y europeos emergentes (Rumanía).

 

Junto a estos fracasos, la mayoría de los países latinoamericanos han tenido un éxito relativo es su empeño –explícito o implícito– de reducción de esta dimensión de la desigualdad.

 

La Figura 4 muestra que, entre las nueve economías más grandes de la región, ocho –la excepción es Colombia– habían conseguido en el año 2020 situarse en el valor más bajo de la brecha frente a la mediana mundial.[2] Particularmente destacables son las trayectorias de Republica Dominicana y Uruguay, dos economías muy cercanas ya a la frontera global. En términos de mayores éxitos, Brasil encabeza el ranking y México se sitúa en segunda posición. Un hecho nada menor ya que se trata de las dos economías más grandes de América Latina que concentran más del 60% del PIB regional.

 

Figura 4. Reducción en América Latina de la brecha frente a la Frontera Global de Desigualdad (salvo Colombia, todos los países de América Latina están en valores mínimos de distancia a la Frontera

Interpretar correctamente los factores que están detrás de esta evolución es muy complejo porque sobre el resultado han influido un gran número de factores.

 

Por supuesto, una mejor evolución macroeconómica y un menor número de crisis sistémicas, la apertura al exterior y el consiguiente debilitamiento del poder de los grupos captadores de rentas, pero también políticas públicas específicas como los efectos acumulados del aumento del gasto público en educación, salud y otras políticas sociales.

 

Dentro de ellas, por su naturaleza y capacidad de innovación destacan las nuevas generaciones de políticas públicas de “transferencias condicionadas” (PTC).

 

La primera fue Progresa en México en 1997, después denominada México Oportunidades, pero la más famosa internacionalmente ha sido Bolsa Familia de Brasil.

 

En estos 20 años se han puesto en marcha 30 programas de este tipo en 20 países de la región, convirtiendo América Latina en el mayor laboratorio en el mundo de políticas sociales. Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la cobertura de esos programas había pasado de menos de un millón de personas en 1996 a 132 millones en 2015 –el 20,9% de la población regional– y, en términos de hogares, de menos de 300.000 hogares en 1997 a 29,8 millones en 2015, el 17,5% del total de hogares de América Latina.

 

La Figura 5, tomado del referido documento de la CEPAL, cuantifica por países el importe de la inversión en PTC. Para el conjunto de América Latina esa inversión equivalía hacia 2015 al 0,33% del PIB, pero en Ecuador, Argentina y Brasil está por encima del 0,5% del PIB.

Aunque las PTC fueron diseñadas para combatir la pobreza más que la desigualdad y aunque tengan también consecuencias no deseadas sobre los incentivos políticos y económicos, sin duda, han marcado una nueva etapa en la historia de las políticas sociales del continente.

 

Un continente que además de los avances –insuficientes– en la lucha contra la desigualdad también ha cosechado un significativo éxito en la reducción de la pobreza, sobre todo de la pobreza extrema.

 

La Figura 6 compara la evolución de la pobreza y la distribución del ingreso por los tramos de renta habituales en la literatura académica entre la economía global y América Latina.

 

  1. Figura 6. Distribución de la población de América Latina y del mundo por umbrales de renta: pobreza extrema, pobreza y clases medias vulnerables y consolidadas en el mundo

(más…)

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Importancia de la educación para combatir la desigualdad

Por teleSUR – Isbelia Farías

La desigualdad podría definirse como la condición en que las personas no acceden por igual a diferentes recursos y servicios, y se asocia con el género, las clases sociales, la religión, la etnia, entre otras.

La desigualdad social se concibe como una situación en la que los ciudadanos de un estado o diferentes países no tienen acceso a las mismas oportunidades.

La igualdad y la desigualdad son nociones que van de la mano y se refiere a la forma en la que distribuyen los bienes entre la población.

Son varios los factores que influyen en la desigualdad, incluyendo el patrimonio que se hereda o que se tiene acumulado, la educación, el contexto social y la salud. Las desigualdades se pueden medir y observar cuando hay individuos ricos y pobres en una misma nación.

Las nociones de igualdad y desigualdad se refieren a la manera en que se distribuye un bien entre una población.

La desigualdad se ha convertido en un tema de estudio para muchas áreas, tales como la sociología y la filosofía, ya que esta problemática está presente en muchas sociedades. A esta, se le considera como un problema social y no natural, aunque algunos autores enfatizan que se trata también de un hecho cultural e histórico.

En resumen, la desigualdad, podría definirse como una condición en la que las personas no tienen acceso por igual a diferentes recursos y servicios. De igual manera, la desigualdad social se puede asociar con el género, las clases sociales, la religión, la etnia, entre otras.

Por ello se dice que la desigualdad social toma una forma de opresión, pues, el sujeto queda oprimido de forma política, religiosa, económica y cultural.

De acuerdo con los debates sobre la pobreza, se pueden diferenciar varias perspectivas, tal como lo expone Federico Stezano, en su estudio para la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

  1. Concebida la pobreza como una necesidad, relacionada con bienes y servicios.
  2. Pobreza como un estándar de vida, de quienes vive con más privaciones, que otras personas.
  3. La pobreza como una carencia en los recursos que se reciben en un hogar.
  4. Pobreza como violación y falta del ejercicio de los derechos económicos, culturales y sociales.

La desigualdad y la educación como medio para combatir la desigualdad

La desigualdad y la educación están vinculadas a nivel mundial. Sobre todo, en relación con la permanencia de los niños en los centros escolares. Además, esto también se ve afectado por el hecho de vivir en zonas urbanas o rurales.

Se dice que el fenómeno no es de forma natural, porque se deriva de una falta de políticas que incluyan la equidad en la educación como una forma de alcanzar la convivencia en ciudades más justas.

A nivel mundial, hay 258 millones de niños, niñas y adolescentes que se encuentran sin escolarizar. En los países en desarrollo, el número es mayor.

Sin embargo, la solución radica en la misma educación, pues sin ella. no es posible alcanzar el progreso ni el desarrollo de las naciones.

No se trata solo de proporcionar a todos los niños los mismos recursos, ya que algunos especialistas consideran que el problema es mucho más complejo y que los gobiernos deben avanzar para alcanzar la igualdad.

El proceso de alfabetización, por ejemplo, fomenta la confianza, el respeto hacia otras culturas y es una herramienta fundamental para el logro de los derechos económicos, sociales y civiles.

Sin una buena educación, las personas carecen de conocimientos o de los problemas a los que se enfrentan las comunidades y cómo solucionarlos, por lo que quedan vulnerables a la manipulación por parte de otros, al odio y a la violencia.

De igual manera es necesaria una buena educación para que todos conozcan sus derechos humanos y sepan cómo pueden hacerlos valer.

La carencia de educación también lleva hacia la pobreza, el desempleo, los problemas de salud y los actos delictivos.

El mundo también avanza a pasos vertiginosos y quienes carecen de educación no conocen sobre los avances tecnológicos, especialmente en países que no están desarrollados.

Quienes tienen menos conocimientos, también tienen menos conciencia sobre las emisiones nocivas y las crisis ambientales a las cuales se enfrentan los seres humanos y cómo disminuir los niveles de contaminación para vivir en un entorno más saludable.

En conclusión, la igualdad educativa es fundamental para abordar los desafíos, tanto a nivel nacional como internacional, el cambio climático y la desigualdad económica. Si los niños obtienen una buena educación, tendrán mejores trabajos, salarios más altos y una mejor calidad de vida, convirtiéndose en miembros productivos de la sociedad.

https://www.telesurtv.net/telesuragenda/importancia-educacion-combatir-desigualdad-20230821-0032.html

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En México, estudiantes más pobres tienen un retraso de aprovechamiento educativo de dos años

El Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes de la OCDE reveló que en México, los alumnos de escasos recursos tienen un aprovechamiento inferior en comparación a los que acuden a escuelas privadas: la falta de dinero les impide el acceso a mejores sistemas educativos.

En México la desigualdad económica también se ve reflejada en el aprovechamiento educativo. Los resultados del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA), dados a conocer este martes por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), revelaron que los estudiantes con menores recursos económicos obtuvieron una calificación inferior en ciencias con relación a los de mayores recursos.

Según las cifras de la evaluación PISA 2015, la más reciente disponible, el bajo aprovechamiento de los alumnos de nivel básico con escasos recursos equivale a un atraso académico de 2 años. Es decir, su aprendizaje no está acorde a su edad escolar, a diferencia de los alumnos con mayores recursos, quienes al acudir a mejores escuelas logran un mejor rendimiento.

Los resultados de PISA demuestran que el desempeño de las y los alumnos mexicanos de educación básica se encuentra por debajo del promedio OCDE en ciencias (416 puntos), lectura (423 puntos) y matemáticas (408 puntos). “En estas tres áreas, menos del 1% de los estudiantes en México logran alcanzar niveles de competencia de excelencia”, detalla el informe.

El puntaje promedio en ciencias de los estudiantes en desventaja socioeconómica fue de 386 puntos, mientras que en los estudiantes con ventaja socioeconómica fue de 446 puntos. Esta diferencia de 60 puntos, según el programa de la evaluación, es la que equivale a dos años menos de escolaridad.

Según la evaluación el rendimiento de los estudiantes en ciencias está relacionado con las diferencias en el nivel socioeconómico de los estudiantes. A pesar de la prevalencia, resaltan que entre 2006 y 2015 la equidad en el desempeño en ciencias mejoró en México.

Además mejoró la autoeficacia de los estudiantes.

La diferencia está en las escuelas

El informe del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes explica que la brecha de aprovechamiento deviene del nivel de las escuelas a los que los alumnos tienen acceso.

Se empeñan a pesar de las diferencias

El informe resalta que el 12% de los estudiantes en desventaja son “resilientes a nivel nacional», lo que significa que su puntaje se ubica en una buena posición del rendimiento en ciencias a pesar de sus condiciones económicas.

Pasa lo mismo con el 3% de los estudiantes en desventaja en cuanto a las habilidades básicas. Su puntuación se sitúa en el nivel de desempeño 3 o superior en ciencias, lectura y matemáticas.

En tanto que, alrededor del 22 % de los estudiantes en desventaja son “social y emocionalmente resilientes”, en otras palabras, están satisfechos con su vida, se sienten integrados socialmente en la escuela y no sufren de ansiedad ante los exámenes.

El estudio concluye que México es uno de los cuatro países con las mayores proporciones de estudiantes en desventaja (80% o más) y que reportan altos niveles de satisfacción con la vida. En contraparte, la proporción de estudiantes que reportaron sentido de pertenencia a la escuela disminuyó en más de 15 puntos porcentuales entre 2003 y 2015.

Políticas equitativas para combatir la desigualdad

Ante esto, la OCDE plantea que una forma de revertir los niveles de desigualdad sería la aplicación de políticas y prácticas enfocadas en proporcionar oportunidades de educación más equitativas para los y las menores de educación básica.

“Los países pueden promover un mayor acceso a la educación inicial, particularmente entre las familias más desfavorecidas, ya que estos programas proporcionan entornos de aprendizaje más equitativos y ayudan a los niños a adquirir habilidades sociales y emocionales esenciales”.

Otra medida sería el monitoreo del avance de los estudiantes en desventaja, para destinar recursos adicionales a sus escuelas y propiciar una mejora en su sistema educativo.

La OCDE menciona que también es importante el desarrollo de los docentes para que logren identificar las necesidades de los estudiantes y manejar grupos con diversidades, además de promover una mejor comunicación con los padres de familia y alentarlos a involucrarse más en la educación de sus hijos.

“Los docentes y las escuelas pueden fomentar el bienestar y generar un ambiente de aprendizaje positivo para todos los estudiantes al resaltar la importancia de la persistencia, invirtiendo esfuerzo y utilizando estrategias de aprendizaje apropiadas, e invitando a los estudiantes a apoyarse unos a otros”, finalizan.

Fuente: https://www.animalpolitico.com/sociedad/desigualdad-mexico-estudiantes-pobres-menor-aprovechamiento-educativo-ocde

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Laura Marrone: «La crisis educativa que vive América Latina y el Caribe se agravó durante la pandemia»

Por: Mario Hernández

-Estamos en comunicación con Laura Marrone, algunos se preguntarán cómo seguimos con una columna de educación si no hay clases, ¿no?

-Pero como vos me dijiste que tenía que hacer el balance del 2023 me pasé trabajando todo el día. El 2022, perdón.

-Te estás anticipando… ya querés que pase el 2023.

-No, no por favor que la vida es corta y quiero que dure un poco.

-Bueno, entonces ¿cuáles son los hechos más importantes de acuerdo a tu criterio?

-Decidí que voy a centrarme en el ángulo del derecho a la educación. Hemos trabajado bastante en el año con la lucha docente, entonces estuve rastreando un poquito bajo el tema ‘¿Qué pasó con la educación este año?’. Bueno, hay un informe del 2022, y partí de los organismos internacionales, de la UNESCO, UNICEF y otros organismos, titulado: ‘Situación de la pobreza de aprendizaje a nivel mundial. Actualización 2022’.

En este informe se dice que la crisis educativa que vive América Latina y el Caribe se agravó durante la pandemia y que las medidas adoptadas pospandemia no han logrado revertir. Y según ese informe, y eso me sorprendió, nuestra región es la segunda peor del mundo después de la región subsahariana de África. En África la parte más pobre es la subsahariana.

-No me extraña porque la verdad todos los indicadores de pobreza, de desigualdad, esto que planteás vos de educación, etc., ubican a Latinoamérica en el último lugar o en el anteúltimo.

-Anteúltimo lugar en este caso con respecto con la región subsahariana.

-Claro, con respecto a una región muy particular de África, ni siquiera todo África.

-Hay zonas que no están. Datos que dan: 9 de cada 10 estudiantes no podrían comprender un texto al terminar la escuela primaria. En el marco de esto señala la cantidad de población que no tiene conectividad dado que está en zonas rurales y aun las escuelas que les falta conectividad, eso lo hemos trabajado acá.

Un dato que me está preocupando más, que lo da UNICEF, y que después lo vamos a trabajar a nivel nacional, es el problema de salud mental de la niñez y la adolescencia. Para el caso de adolescentes de entre 10 a 19 años señala que 1 de cada 7 sufre algún trastorno de salud mental y que los Estados están dedicando solo un 2% del presupuesto de salud a este tipo de problemas.

Lo voy a tomar y lo dejo acá en el tintero porque el gran drama de las maestras y los docentes son los problemas de salud mental que están teniendo en el aula y no tienen recursos para derivarlos al sistema de salud. No tengo estadísticas precisas de nuestro país para comparar, por ejemplo, con estas que da el documento internacional, pero podemos decir que el diagnóstico es compartido en los grandes temas. Por ejemplo, es una preocupación muy grande hoy de las maestras y los docentes en general pospandemia que no logran recuperar el atraso en los contenidos que produjo todo el proceso de la pandemia.

Los problemas de aprendizaje prepandémicos no se solucionaron y se agravan. Hay problemas de sociabilidad entre los pibes, hay problemas de concentración y de hábitos para estudiar y, por supuesto, esto que te decía, agravamiento en los problemas de salud mental. Por ejemplo, me comentaba una maestra con la que estuve antes de que terminaran las clases de 1º grado, estaba angustiada porque para el año que viene el jardín le traslada de preescolar a 1º grado tres casos de niños con autismo.

Fijate un dato que comentábamos con un amigo, que es también más grave en la adolescencia porque en la adolescencia se combina con elementos de autoflagelación, de mutilaciones. Un dato curioso a indagar es que no hubo festejos del 21 de septiembre en las calles. Habrás estado en tu lejana juventud, yo también, el Día del estudiante era algo muy importante. Aunque sí lo hubo después para el mundial, en un marco escolar no lo hubo. Estos temas son para preocuparnos, sobre todo porque no estamos teniendo las herramientas para poder encararlos. Es decir, los organismos internacionales recomendaron a los gobiernos invertir más en educación como una agenda prioritaria, priorizar la enseñanza de la matemática y la lectura, evaluar el nivel de aprendizaje y tener programas para recuperar los aprendizajes perdidos, pero a gran escala, y abordar las necesidades psicosociales de la población tanto de estudiantes como de docentes, y atender las brechas digitales.

Terminé de leer ese informe y decía ‘qué hipocresía’ porque son los mismos organismos que luego sostienen los tremendos ajustes que le hacen los gobiernos a la población para poder pagar las deudas externas. Porque está reconocido el carácter usurario que tienen estas deudas y que hacen muy difícil cumplir con estas cuentas que se señalan.

-Deudas que, por otra parte, los ajustes se hacen generalmente en áreas como educación y salud.

-Una de las que más ajustaron en el presupuesto. Vamos ahora a que medidas hubo este año, qué pasó en educación, qué cosas nuevas presentaron los gobiernos, la quinta hora. Nosotros hemos trabajado esto durante el año, pero pongámosla como parte de la síntesis. No hubo mayores inversiones como lo que requeriría el diagnóstico que hemos analizado antes. Ya lo vamos a analizar luego en los presupuestos de este año. Pero los dos lineamientos en disputa en la escena nacional en el gobierno del Frente de Todos a nivel nacional y sus gobernadores, y el gobierno de Juntos por el Cambio en CABA, Mendoza y Jujuy el 2022 pasó sin que hayan desplegado iniciativas acordes a la gravedad que hemos denunciado.

En el caso del ministro de educación nacional, Jaime Perzcyk, que se desempeñó este año, su propuesta más publicitada fue la extensión de una hora de la jornada escolar del nivel primario, al mismo tiempo que redujo el presupuesto del 2022 en un 5%. Recordarás que redujeron el programa Conectar Igualdad, el fortalecimiento de inicio de jardines de infantes y la inversión en infraestructura y equipamiento. Una contradicción con lo que se suponía era su propósito. Con mucho ruido mediático en la página web del ministerio de Educación se señala que 6.727 escuelas ya convinieron instalar una hora más de clase sobre un total de 18.024 escuelas primarias que hay en el país.

-O sea un 30%.

-Hablamos de 1 cada 3. Pero ojo que dice convinieron, no sabemos si las realizaron o no. Pero efectivamente si nosotros comparamos la carga horaria de nuestras escuelas con la de los países del norte, el llamado mundo desarrollado, hay una diferencia. La nuestra es claramente menor. Pero la medida fue inconsulta para la familia, para los docentes, en medio del año escolar, no fue acompañada de una verdadera inversión en infraestructura y en los salarios docentes para que la hicieran productiva. ¿Qué pasó realmente? En los países del norte los edificios escolares coinciden con la unidad educativa, en cambio, en nuestro país en su gran mayoría los edificios son compartidos por varias instituciones. Entonces no había tiempo para la famosa quinta hora con espacios acordes. Materialmente era muy dificultoso, en algunos casos fue un fracaso, las clases se desarrollaron en espacios comunes, de paso, con docentes que no eran del ciclo del estudiante, con propuestas que no completaban las necesidades del nivel y se transformaron en una hora recreativa o de contención social de niñez con familias con problemas laborales que les venía bien una hora más.

Esa fue la gran propuesta del año de Jaime Perzcyk. En CABA la novedad fueron las ACAP, las aproximaciones al mundo laboral que implementó el gobierno de Larreta y Acuña que anunciaron también con bombos y platillos. Impuso un régimen de pasantías laborales para el 5º año donde les estudiantes deberían asistir 80 horas de clase a instituciones industriales, comerciales, culturales, a empresas privadas o públicas de la Ciudad. Ochenta horas que equivalen a casi un mes escolar. La propuesta es en realidad una versión desteñida del proyecto inicial de la Escuela secundaria del futuro, que en 2017 presentó Acuña, que comprendía además un 30% más de horas de clase a cargo del docente y un 70% en actividades en plataformas digitales.

Esa Escuela secundaria del futuro no pasó en su verdadera dimensión porque fue resistida por estudiantes secundarios que tomaron las escuelas y te acordás que fue una gran lucha. La táctica de Juntos por el Cambio es amenazar con todo y avanzar con lo que puede. Esa experiencia fue resistida por estudiantes, familias y sindicatos.

Este año con esta nueva ACAP también hubo una resistencia de estos tres sectores, también hubo una toma de estudiantes y se realizó la marcha más grande desde la prepandemia a la Jefatura de Gobierno acompañada por tomas de escuelas y paros docentes. Se cuestionó el carácter improvisado sin relación con la formación que pretendían los estudiantes, desprovisto de un carácter pedagógico, sin docentes a cargo y en algunos casos reducidos a la repetición de tareas que responden más a un trabajo de mano de obra no paga que a una formación profesional. Veremos qué pasa este año.

-Esta señora Acuña en su carácter de precandidata a jefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ¿se va a tomar licencia este año?

-No tengo la menor idea. Tampoco sabemos si va a ser precandidata.

-Por lo menos es una idea fuerte.

Dos propuestas educativas que dejaron un sabor amargo 

-Señalemos, y acá viene esto, tanto la medida de la ACAP como el tema de la quinta hora fueron dos propuestas que dejaron un sabor amargo. Estaban ofreciendo una carrera de competencia desde los dos lados de la grieta abismal, quién ofrecía algo que era más en términos de impacto electoral que educativo. Esa fue la sensación que tuvimos.

-Bueno, Larreta se la pasa haciendo campaña en las escuelas.

-Sí, y le da mucha importancia en sus campañas a la educación.

-Hay que ver Laura, para la próxima te dejo una tarea, de qué se trata este programa de JxC que ha trascendido.

-Lo estuve mirando, lo que pasa es que está anunciado, pero no está desarrollado y no logré en las páginas web…

-Dicen que es un documento de 40 páginas dividido en 6 ejes.

-El tema es que yo me metí en la página de la fundación con la que acordaron ese documento, que sería, para nuestra audiencia, la plataforma de Juntos por el Cambio para las elecciones del 2023. Lo elaboraron en forma conjunta las fundaciones que componen la coalición. La fundación Alem de los radicales, la fundación Pensar del Pro y el centro Hannah Arendt de la Coalición Cívica…

-Y la fundación Encuentro Federal. Te olvidás de Susana Decibe, ex ministra de Educación de la nación.

-Así es, me pareció que no tenía relevancia y no lo quise poner, pero tenés razón. Está también la fundación donde está Susana Decibe que fue parte del gobierno de Menem. Ellos ponen el eje de su campaña electoral en la educación y dentro de esta la reforma en la formación docente y en una Universidad flexible con bimodalidad, presencial y digital, y con movilidad internacional. Esto es el tema de las acreditaciones internacionales, los convenios internacionales. Vamos a tener que estudiarlo, pero todavía no tengo las 40 páginas. Pero sí destacar la preocupación de Juntos por el Cambio por el tema de reformar la formación docente.

Y acá volvemos sobre una nueva cuestión que estuvimos trabajando la semana pasada o la anterior, ya no recuerdo, en otro programa, que fue y es el ataque que persiste todavía, y vamos a ver si lo vamos a derrotar, del Pro en CABA para el cierre de profesorados. Aquí hay dos lógicas en el ataque a la formación docente, una es política. El contenido de lo que se enseña en sentido de la formación docente porque es el nodo central para cualquier reforma educativa. Esto ya lo venimos estudiando. Desde el Banco Mundial se promueven profesores excelentes, un documento que hemos estudiado mucho desde el 2018 hasta ahora que en general lo que tiende es a condicionar la formación docente a las nuevas demandas del mundo productivo en el marco de la 4ª revolución industrial y las nuevas relaciones laborales que de ellas se desprenden, como trabajadores sin derechos haciendo home office a cambio de contratos a término, no de salarios o relaciones laborales estables.

Bueno, reformar los profesorados viene siendo anunciado desde la época de Esteban Bullrich. Compartió también declaraciones el Frente de Todos, lo que pasa es que yo creo que la debilidad del gobierno actual le ha impedido a la fecha presentar un proyecto para su debate en el Congreso Nacional, pero está en carpeta.

Y esto también lo hacen los gobernadores del Frente de Todos. Zamora en Santiago del Estero fue uno de los que más avanzó en el cierre de profesorados en esa provincia. Y acá estamos en CABA con que amenazan cerrar el Profesorado de Lengua y Literatura en el profesorado del Mariano Acosta y el de Física en el Alicia Moreau de Justo. Así como la reducción de carreras, por ejemplo, al profesorado Romero Brest le redujeron muchísimo la currícula y, en general, tienden a focalizar y a destacar materias del tipo instrumental y quitar las que tienen que ver con formación humanística, filosofía, historia, todo aquello que desarrolle el pensamiento crítico.

-Laura, la seguimos en 15 días.

-¿Terminó? Bueno, me había quedado el capítulo del aumento de la desigualdad.

-Lo retomamos en dos semanas.

-Muy bien, un abrazo Mario.

Fuente: https://rebelion.org/la-crisis-educativa-que-vive-america-latina-y-el-caribe-se-agravo-durante-la-pandemia/

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Desigualdad y Pobreza: Chile y el mundo en manos de una pequeña élite

Por: Jorge Molina. 26/01/2023

En junio de 2017, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, publicó el libro Desiguales. Orígenes, cambios y desafíos de la brecha social en Chile, el que dio a conocer las
enormes brechas que existen en nuestro país. Uno de los investigadores principales de aquel libro es Matías Cociña, quien referente al tema de las pensiones, uno de los más señalados y cuestionados durante años comentó que “los datos que mostramos en Desiguales indicaban que en el año 2015, de los pensionados y pensionadas de 65 y más años, un 47% recibía una pensión que estaba por debajo del 70% del salario mínimo. Sin los aportes previsionales solidarios (APS) del sistema, la cifra habría llegado al 73%. No es coincidencia, entonces, que en nuestra encuesta solo una de cada tres personas del primer quintil de ingresos pensara que contaría con ingresos suficientes en la vejez para cubrir sus necesidades básicas. En el corto plazo, es muy importante aumentar los aportes provenientes del pilar solidario. En el mediano plazo, probablemente habrá que discutir elementos más estructurales del sistema de seguridad social, discusión que le corresponde a las instituciones políticas”.

Otro de los temas que representan una demanda que no se circunscribe solo a la movilización actual, sino que viene de mucho antes, es el que dice relación con la presencia de “los mismos de siempre” en la toma de decisiones, terminología popular que se refuerza con los datos del libro.
Cociña manifiesta que “respecto de las autoridades políticas a nivel nacional, nuestros datos muestran que entre 1990 y 2016, siete de cada diez ministros o ministras, seis de cada diez senadores o senadoras y cuatro de cada diez diputados o diputadas, fueron a uno de 14 colegios de elite (todos de Santiago). En efecto, en Chile las personas que toman decisiones tienden a escogerse desde un subconjunto bastante reducido de la sociedad. Los mecanismos de reproducción de los segmentos de altos ingresos, particularmente mediante la educación, tienen mucho que ver con esto”.

Uno de los puntos más oscuros de la desigualdad social tiene que ver con la incertidumbre, específicamente la laboral, que es la que determina todo lo demás para las personas de escasos recursos. Del universo de trabajadores cubiertos por el seguro de cesantía en un período de 11 años, aquellos que partieron en un trabajo de bajo salario tuvieron empleo formal y con contrato indefinido menos de un 30% de esos 132 meses y tuvieron en promedio casi 10 empleadores.
Quienes partieron en un trabajo de alto salario estuvieron en esa situación más de un 72% de los meses y tuvieron en promedio menos de cinco empleadores. En otras palabras, la estabilidad de las trayectorias laborales está tremendamente estratificada en Chile.

El 1 % más rico ha acaparado casi dos terceras partes de la nueva riqueza (valorada en 42 billones de dólares), generada a nivel global entre diciembre de 2019 y diciembre de 2021, casi el doble que el 99% restante de la humanidad, según revela hoy un nuevo informe de Oxfam Intermón.
Durante la última década, el 1 % más rico ha capturado alrededor del 50 % de la nueva riqueza.

El informe La ley del más rico se publicó el día en que comenzó el Foro Económico Mundial en Davos. “Las élites se están reuniendo en un contexto en el que la riqueza y la pobreza extremas en el mundo se han incrementado simultáneamente por primera vez en 25 años”, afirmó Franc Cortada, director de Oxfam Intermón.

«Latinoamérica ha sido la región más golpeada por la pandemia en el mundo. Y a pesar de ello, sus ultra ricos se han embolsado ganancias estratosféricas durante la crisis, en gran medida como
resultado de los planes de estímulo inyectados con fondos públicos y su voraz aprovechamiento de las condiciones de mercado. Décadas de privilegios fiscales para los más ricos han sido elementos
clave en el aumento de las desigualdades", afirmó Gloria García Parra, directora regional en Oxfam para América Latina y el Caribe.

En América Latina, durante la pandemia, la riqueza de los 91 multimillonarios de la región ha crecido un 21%, cinco veces más rápido que el PIB de la región durante el mismo período. De estos 91 milmillonarios, 17 viven en países en los que no deben pagar ningún impuesto sobre herencias, donaciones o sucesiones: esto significa que pasarán más de 158.000 millones de dólares totalmente libres de impuestos a la próxima generación. Por otro lado, los salarios reales han perdido un 10% de valor (de 2020 a 2022) y 201 millones de personas (32,1% de la población total) viven ya en la pobreza. De ellos, 82 millones (13,1%) se encuentran en situación de pobreza extrema. A finales de 2022, la inseguridad alimentaria pasó a impactar a cuatro de cada diez personas.

Por cada dólar de nueva riqueza global que recibe una persona del 90 % más pobre de la humanidad, un multimillonario se embolsa US$1.7 millones. La fortuna de los milmillonarios crece a un ritmo de US$2.700 millones diarios. Esto se suma a una década de ganancias históricas en la que el número de esta casta privilegiada y su riqueza se han duplicado.

Por otro lado, la actual crisis de precios es también una crisis de desigualdad. Según el Banco Mundial, podríamos estar ante el mayor incremento de la pobreza y desigualdad entre países desde la Segunda Guerra Mundial. Países enteros se encuentran al borde de la bancarrota. Los más pobres destinan cuatro veces más recursos al servicio de la deuda (en manos de ricos acreedores) que a los servicios de salud pública. Brasil destinó en 2021 tres veces más al servicio de la deuda que a inversión en salud.

Mientras los hogares más vulnerables sufren para llenar el refrigerador o mantener una temperatura adecuada, el extraordinario crecimiento de los beneficios empresariales en sectores como el de la energía y la alimentación ha disparado de nuevo los patrimonios de los más ricos.

El extraordinario crecimiento en sectores como el de la energía y la alimentación ha disparado el patrimonio de los más ricos. Según las estimaciones de Oxfam, 95 empresas internacionales de
energía y alimentación han anunciado en 256% sus beneficios en el 2022. Generaron unos beneficios extraordinarios por un total de US$306.000 millones, y destinaron US$257.000 millones
(el 84 %) a remunerar a sus ya muy ricos accionistas. En América Latina y el Caribe, la alimentación, la salud, las finanzas y la minería han sido los principales sectores en que operan los nuevos milmillonarios de la región. Desde el inicio de la pandemia, la fortuna de tres de ellos ha crecido más del doble y para otros catorce, se ha incrementado en más del 50%.

En Latinoamérica, cerca del 50% de la población pertenece al sector informal. Sin redes de protección social y frente a un escenario de crisis que perfila bajo crecimiento, alta inflación, presión de deuda pública y una recaudación fiscal insuficiente, esta combinación letal puede dar lugar a movimientos de descontento social profundo. Una bomba de tiempo en un territorio que vive bajo la constante amenaza de democracias frágiles. A esto se suma que las medidas de austeridad de los gobiernos reducen el gasto en servicios públicos garantes de derechos, y no en el servicio a la deuda que generalmente está en manos de ricos acreedores.

La dinastía familiar Walton, por ejenplo, propietaria del 50 % de la multinacional Walmart, recibió 8.500 millones de dólares de dividendos a lo largo del año pasado. Solo en 2022, la riqueza del
multimillonario indio Gautam Adani, propietario de grandes compañías energéticas, se incrementó en 42.000 millones de dólares (un 46 %).

Durante los últimos 40 años, los Gobiernos de África, Asia, Europa y las Américas han ido reducido los tipos impositivos sobre las rentas más altas, mientras se han elevado los impuestos al consumo
sobre bienes y servicios, es decir, impuestos que recaen desproporcionadamente sobre quienes tienen menos y que amplían las brechas de género, de raza y otras desigualdades. Entre 2007 y 2019, la recaudación tributaria en América Latina y el Caribe creció apenas en un 7%, y ha sido a costa de elevar un 11% la contribución fiscal que recae sobre las familias a través de los impuestos al consumo y el trabajo, mientras la recaudación por rentas corporativas y riqueza ha caído en 5%.
Ningún país de la región grava las rentas del capital por encima de las rentas del trabajo en la actualidad.

En contraste, al menos 1.700 millones de trabajadoras y trabajadores viven en países donde el crecimiento de la inflación se sitúa por encima del de los salarios, y más de 820 millones de personas en todo el mundo (aproximadamente una de cada diez) pasan hambre. Las mujeres y las niñas suelen comer en último lugar y en menores cantidades en los hogares, y representan casi el 60 % de la población mundial que padece hambre.

Volviendo a Chile, de acuerdo al politólogo Ben Ross Schneider, del MIT, nuestro país posee un modelo denominado capitalismo jerárquico, donde la mayor parte de las grandes empresas son
controladas por un grupo reducido de personas vinculadas por la sangre y la clase. Ese capitalismo, describe Schneider, ofrece muy pocos buenos puestos de trabajo (los puestos gerenciales quedan
en manos de la élite) y muchos puestos mal pagados (temporales, en poder de la gran mayoría de los trabajadores).

Siguiendo ciertas estimaciones, en Chile el 1% más rico captura cerca del 17% de los ingresos fiscales, mientras que el 10% más rico percibe más del 50% de todos los ingresos. Peor aún, estas cifras parecieran ser estimaciones conservadoras ya que cuando se incluyen las ganancias no distribuidas de las empresas (ganancias retenidas al interior de las firmas) las cifras resultan aún más alarmantes: solo el 1% del país percibe alrededor del 24% de todos los ingresos generados (Top incomes in Chile: a historical perspective of income inequality; 2019).

Para mayor abundamiento, el índice Gini de la Región Metropolitana para el año 2017 correspondió a 0,50, levemente por sobre el de Chile (0,49), pero muy por sobre el de otras regiones, tales como la de O’Higgins (0,40), Arica y Parinacota (0,41), Tarapacá (0,42) y Antofagasta (0,43). De hecho, el segundo lugar del ranking de desigualdad en Chile lo ocupan La Araucanía, Aysén y Los Ríos, todas con coeficientes de Gini de 0,47, lo que constituye una diferencia no menor respecto de la Región Metropolitana y del promedio nacional (CIPER; 2019).

De acuerdo al informe How’s Life (2020) de la OCDE, el 53% de la población chilena está en riesgo de caer en la pobreza si tuviera que renunciar a tres meses de sus ingresos, el quinto país del
bloque con el mayor porcentaje y lejos del 36% que promedia todo el grupo.

Según la ONG Techo, entre los años 2011 y 2019 los campamentos aumentaron en Chile un 22%, llegando a 47 mil hogares y que, tras la crisis social, el número estaría acercándose -en los primeros análisis- a 52 mil familias o más y lo más probable es que en el contexto post Covid-19 esto se va a disparar probablemente a 100 mil hogares.

El gobierno de Piñera señaló que en tiempos de crisis sanitaria debía emplearse el seguro de cesantía para tener ingresos; sin embargo, se estimaba, en aquel período, que habían 2.5 millones de trabajadores informales, quienes cuentan con escasos ahorros, producto de precariedad laboral y la vorágine de tener que sobrevivir diariamente.

Los médicos siempre piden lavarse las manos varias veces al día para evitar el contagio de coronavirus, pero, de acuerdo a los datos del censo 2017, hay 383.204 viviendas que no cuentan con agua potable.

Unos 14 millones de trabajadores están afiliados a Fonasa, muy criticado por los pacientes por la mala atención en los hospitales, largas esperas para obtener una cita médica, incluso en urgencias,
y las malas condiciones de los establecimientos.

Chile tiene una situación muy deficitaria de médicos y enfermeras, de camas hospitalarias y de medicamentos genéricos, como lo revelan datos de la OCDE: en comparación con los países
integrantes de esa organización, Chile muestra un menor número de médicos (1,7 x 1.000 hab.) que el promedio de los otros países (3,2 x 1.000 hab.), menor número de enfermeras (4,2 x 1.000
hab. versus 8,8 x 1.000) y menor tasa de camas hospitalarias (2,1 x 1.000 hab. versus 4,8 x 1000), así como el porcentaje de medicamentos genéricos en el mercado es de 30 por ciento en Chile y
de 75 por ciento en los países de la OCDE.

Menos de 50 por ciento de los médicos trabajan en el sector público y una mayoría en el sector privado, atraídos por más cómodas condiciones laborales y mayores ingresos económicos.

El 56% de las viviendas en la Región Metropolitana son menores de 70 m2; siendo las 3 comunas con viviendas de menor área: María Pinto con 47,8 m2, San Pedro con 48,37 m2 y La Pintana 48.48
m2. En los sectores acomodados, los promedios del tamaño de las viviendas son: Lo Barnechea, 169,1 m2; Vitacura, 154,5 m2 y Las Condes 116,6 m2.

En cuanto a la enseñanza, la PAES 2022 arrojó la confirmación de las distancias existentes entre los colegios municipales y los particulares pagados, las que aún no logran ser revertidas. De acuerdo a lo afirmado por el Ministerio de Educación (Mineduc), existe una brecha “grande” la existente en ambas pruebas de Matemática, la que también existe entre recintos particulares pagados y
subvencionados.

La brecha entre hombres y mujeres en la prueba específica de Matemática también creció de un 0,21 en 2021 a un 0,23 en 2022, y llegó a un 0,32 durante este año, lo que es calificada como “pequeña” por el Gobierno.

Además, la PUC precisó que el promedio de estudiantes de colegios municipales en Competencia Lectora y Matemática fue de 611,2 y 528,8 respectivamente, mientras que en particulares
subvencionados fue de 643 y 552,9, y en particulares pagados de 749 y 700,5 puntos.

En el top 3 aparecieron las escuelas Los Andes de Vitacura, The Grange School y Villa María Academy, seguidas por Los Alerces, Cordillera de Las Condes, Tabor y Nazareth, Tabancura y Santiago College.

En cuanto a la educación pública, apenas tres liceos de administración municipal aparecieron entre los 100 primeros en puntaje. Estos colegios son el Liceo Augusto D’Halmar de Ñuñoa (15° lugar), el Liceo Bicentenario de Temuco (40°) y el Colegio de Maipo, de Buin (88°).

Además, en el top 100 solo apareció un colegio particular subvencionado. Se trata del Liceo San Pedro Poveda de Maipú (91°).

En el informe de la OCDE Hacer frente a la crisis del coste de la vida: ayuda a la renta de las personas y sus familias (2022), se señala que Chile es el octavo de los 36 países que integran el organismo que más ayuda entregó a los ricos que a los pobres.

Además, la OCDE plantea que “a medida que prosiguen los esfuerzos para contener la inflación, las ayudas públicas han sido fundamentales para aliviar la caída del nivel de vida que conlleva. Como
parte de las estrategias para repartir las cargas del aumento del coste de la vida entre los hogares, los empresarios y el gobierno, las transferencias directas también pueden frenar las presiones al
alza sobre los salarios”.

Sin embargo, estas políticas de ayuda no han logrado dar en el clavo para que lleguen a quienes más las necesitan, siendo uno de los problemas elegir entre la selectividad con aportes directos al
ingreso para los más pobres o la generalización, con aportes, subvenciones estatales y baja de impuestos para todos, incluidos quienes tienen rentas más altas.

Analizando las prestaciones sociales, el informe de la OCDE apunta directamente a aquellos países en que debido a problemas de focalización en sus ayudas han terminado por beneficiar a los grupos de renta más alta, en desmedro de los de renta más baja. Así, Chile figura como el octavo de los 36 países miembros de la OCDE en que el Estado ha ayudado más a los más ricos que a los pobres durante esta crisis mundial. Ahora bien, solo cuatro países presentan una brecha mayor entre lo que reciben los más ricos versus lo que recibe el quintil más bajo.

El Estado chileno ha destinado cerca de un 28% de sus transferencias al quintil más rico de la población, mientras que el quintil más pobre recibe apenas un 18% estimado de estas ayudas.

Finalmente, para contrarrestar esta creciente desigualdad, Oxfam está pidiendo a los gobiernos que aumenten los impuestos a sus residentes más ricos. Propone introducir un impuesto único sobre el patrimonio e impuestos sobre las ganancias extraordinarias para acabar con la especulación de las crisis mundiales, así como aumentar de forma permanente los impuestos sobre el 1% más rico de la población hasta al menos el 60% de sus ingresos del trabajo y el capital.

Fuente de la información e imagen: https://www.pressenza.com

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