Page 102 of 472
1 100 101 102 103 104 472

“Hacemos lo posible para que no pierdan el año escolar”: la desesperación de profesores ante niñas y adolescentes embarazadas. El Salvador

América Central/El Salvador/28-05-2021/Autor(a) y Fuente: www.elsalvador.com

Directores de algunos centros escolares confirman que llevan a cabo programas de prevención y en algunos casos han logrado reducir el fenómeno.

Imagen del cantón donde los estudiantes sacaron una de las menores nota de la PAES en 2017. Los estudiantes del Complejo Educativo del Guadalupe La Zorra, en San Luis La Herradura, obtuvieron 2.95 de promedio en la PAES 2017. En este lugar, que tiene acceso al estero de Jaltepeque, los jóvenes y niños se dedican a la pesca para subsistir. La desnutrición y la falta de recursos agrava el déficit de aprendizaje. EDH/ Jessica Orellana

Los embarazos precoces siguen como piedra de tropiezo para el desarrollo educativo de niñas y adolescentes, y de acuerdo con algunos directores consultados en el país, es en el área rural en donde las escolares aún tienden a desertar por esa causa.

El profesor Daniel Rodríguez, director del Centro Escolar Cantón El Cedro, de Panchimalco, sostiene que si bien desde hace varios años las instituciones educativas públicas tienen mandato de recibir a las niñas que salen embarazadas, a estas alturas los convencionalismos sociales y los prejuicios todavía provocan que ellas queden sin acceso a la educación.

Para 2020, Ormusa, una de las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres, abordó con preocupación esta problemática, cuando las estadísticas del Hospital Nacional de la Mujer “Doctora María Isabel Rodríguez” apuntaron que en el primer trimestre se registraron 144 embarazos en niñas en edades comprendidas entre 10 y 14 años; cifra que para agosto, en plena pandemia, ya había incrementado a 258.

Decenas de niñas y adolescentes deben sobrellevar embarazos no deseados.
Foto EDH / Archivo

En el primer trimestre de ese año, 3,835 niñas embarazadas inscritas durante el mismo periodo tenían entre 15 y 19 años.

Aunque el profesor Rodríguez afirma que ni el año pasado ni en lo que va del presente se han dado casos de embarazos en su escuela, recuerda que en 2017 se presentaron dos; una niña que atendía el séptimo grado y otra el noveno, de las cuales solo esta última terminó estudios.

Para 2019 tuvieron un caso de una niña de tercer ciclo que tampoco continuó, aunque los profesores le insistieron de distintas formas, e incluso le brindaron opciones, como la de solo ir a retirar material para estudiar.

“La misma familia no quería, (por) la pena que la vean embarazada, pero en el caso del centro escolar le dimos todas las facilidades, la buscamos; mandamos a llamar a la mamá, pero aun así no mandaron a la muchacha”, comenta.

El educador sostiene que en 2013 y 2014, en esa escuela que está ubicada en la zona rural de la parte sur del departamento de San Salvador se daban de 3 o 4 casos de niñas embarazadas, pero hoy son menos debido a que en la escuela tienen una campaña sobre salud sexual reproductiva, misma que se lleva con apoyo de la Unidad de Salud contigua.

Según cuenta el profesor Rodríguez, los últimos casos de niñas embarazadas en su escuela son por noviazgos con jóvenes; además, siempre hay una tendencia a que se acompañen a temprana edad.

“En el caso de los adultos que han tenido cuestiones con las niñas les ha ido mal, los han denunciado y algunos están presos”, detalla.

Vidas truncadas

“Este tipo de cosas (que deserten por embarazos) para nosotros significa una derrota, porque siempre buscamos que les vaya bien a todos los estudiantes; y por eso en el caso del centro escolar hacemos todo lo imposible porque las muchachas no pierdan el año escolar”, insiste.

Según expone, hasta ahora de las alumnas de tercer ciclo que salieron embarazadas no ha visto que alguna siga estudiando el bachillerato; sino que se han quedado como amas de casa, sobre todo cuando no hay nadie que las oriente y brinde ánimos de salir adelante después que pasan el alumbramiento.

“Ahí se han quedado en noveno grado (las niñas). No es lo que uno espera de sus estudiantes. Uno espera verlas profesionales, porque es un gusto verlas cuando ya vienen de su trabajo”, comenta.

El profesor Óscar Martínez, director del C. E. Anselma Sánchez de Mancía, de El Congo, Santa Ana, asevera que ni el año pasado ni en 2021 se les han presentado casos de niñas embarazadas, también gracias a que desde 2012 tienen un programa de orientación a los escolares, en donde se abordan temas como los hijos no deseados, el autocuidado del cuerpo y las enfermedades venéreas.

“La escuela de padres también ha ayudado mucho para que estos tomen conciencia que hay que hablar con las hijas sin ningún tapujo, sin ningún temor, hablándoles la verdad, sin andarles cambiando las versiones de las consecuencias de tener una relación sexual”, insiste.

Martínez precisa que cuando las niñas y adolescentes salen embarazadas, los docentes lo identifican porque ellas tienen ciertas conductas, se muestran retraídas, no participan en clases, se aíslan, no salen a recreo, no quieren comer, se ven bastante pensativas, preocupadas, en algunos casos es notable en su aspecto pues el color de la piel les cambia, de repente bajan o aumentan de peso.

Otras actitudes en la ciudad

Al consultar sobre el tema al profesor Hugo Canjura, director del Instituto Nacional Francisco Menéndez (Inframen), de San Salvador, señaló que en años anteriores se reportaba un promedio de diez casos de niñas embarazadas al año, pero en 2020 solo hubo 5 en el sistema regular.

Canjura expone que, a diferencia de la zona rural en donde se trata de esconder a las niñas, en la ciudad es diferente; son las mismas alumnas las que informan de su situación a la institución educativa, incluso llegan a presentar las constancias médicas de que por su estado no pueden participar en la clase de Educación Física.

El educador afirma que en la ciudad ahora las niñas, pese a su embarazo, continúan con su proceso educativo; incluso tratan de retomar sus actividades extracurriculares lo más pronto posible, como ocurrió con una cachiporrista que quería reintegrarse a la banda luego de unos cuantos días de haber dado a luz.

“Como la ley las ampara ellas saben que aquí no hay ningún problema (para que vengan a estudiar). Lo que hacen es modificar, por ejemplo si es de salud (cambian) la batita, o si es de general vienen holgadas con sus batas, normal”, indica.

Comenta que algunas escolares que salen embarazadas maduran rápidamente, cambian de actitud y se vuelven más responsables, y que salen bien en sus notas.

Canjura contrasta la situación de las niñas que salen embarazadas hoy con las de antaño; antes se les negaba asistir a clases y las pocas opciones que tenían era estudiar en sus casas y llegar a retirar el título después de la graduación. La situación era más dramática en colegios católicos, de donde eran expulsadas.

El director del Inframen explica que hoy las alumnas que se convierten en madres y cuentan con el apoyo familiar suelen continuar estudiando en la universidad, pero hay quienes no cuentan con ayuda alguna, por lo que tienen que trabajar pronto para mantener a su bebé.

Señala que a la fecha no hay un programa específico del Ministerio de Educación que les dé lineamientos de cómo actuar si se dan casos de niñas embarazadas, pero en el Inframen se auxilian de su bachillerato en Salud para llevar a cabo entre todos los estudiantes charlas sobre salud reproductiva y los derechos que las niñas tienen para seguir estudiando.

Los departamentos en donde en 2020 se dieron más casos de niñas y adolescentes embarazadas fueron San Salvador, La Libertad, Sonsonate, Santa Ana y Ahuachapán.

Fuente e Imagen: https://www.elsalvador.com/eldiariodehoy/embarazo-educacion-escolar-profesores-desesperacion/841362/2021/

Comparte este contenido:

Participar de verdad

Por:

La SEP sigue sin convocar, incumpliendo el artículo 145 de la Ley General de Educación, al Consejo Nacional de Participación Social…

La educación es un derecho irrenunciable: toda persona tiene el derecho intrínseco de desarrollar el conjunto de sus capacidades, y por ende es acreedora al apoyo sistemático; es destinataria de las obligaciones del Estado para ejercer a cabalidad ese “derecho a desarrollarse sin obstáculos, sin discriminación ni exclusión”. Si a ello le agregamos que niñas y niños son titulares con eminencia, con urgencia y con prioridad, el derecho a la educación debería ser uno de los más estudiados y defendidos, en la práctica y en los tribunales.

Niñas y niños requieren de educación más que los demás, pues –aunque es un derecho universal– se encuentran en especial vulnerabilidad si no son acompañados, y si no tienen a disposición los medios adecuados y suficientes para su crecimiento físico, emocional e intelectual, para que no se frustre su potencial para el discernimiento ético, la creatividad, la socialidad. El “interés superior de la niñez”, consagrado en la Constitución y pieza inexcusable de las responsabilidades de México como Estado parte de las convenciones internacionales, cuenta en la educación como nunca. La educación es la diferencia entre una vida digna y plena, o la sujeción emocional o política, la fragilidad, la imposibilidad de perseguir el propio proyecto de vida y caer en ser usados como medios para la voluntad de alguien más. En la educación no sólo nos jugamos el bienestar futuro, sino la autodeterminación presente de la joven generación.

Desde Aprender Primero, el brazo jurídico de Mexicanos Primero, interpusimos una demanda de amparo contra la Ley General de Educación (LGE) señalando elementos de inconstitucionalidad en la reforma –apresurada y por aplanadora legislativa– que se hizo de esta ley general; lo que correspondía era hacer concretos elementos presentes en el artículo tercero de nuestra Carta Magna, pero siendo una ley derivada, contradice su fuente. Tras más de dos años, el juicio recorrió todas las instancias, y fue llevado a la consideración de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Los puntos relevantes que litigamos tienen que ver con el hecho de que los artículos de la LGE vigente no atienden a los criterios de consulta a pueblos y comunidades indígenas, a personas con discapacidad y a los propios niñas y niños, además de cuestionar que no se hicieran puntuales los deberes de transparencia y que quede confuso que la responsabilidad de la infraestructura es de los funcionarios, no de las familias.

En la sesión de ayer, con una votación dividida 4 a 1, la sentencia no nos dio la razón. El asunto no fue ‘sobreseído’, es decir, se reconoció que legítimamente desde la sociedad civil podamos cuestionar la constitucionalidad de las leyes generales. La sentencia sentará de todos modos antecedentes valiosos de interpretación, por ejemplo, aclarando que la infraestructura es deber de las autoridades, y que la participación debe estar en la orientación de las inversiones, y no cargar con la definición técnica por parte de los comités de cada escuela. También se reconoce que no hubo propiamente consulta con los parámetros debidos… esa omisión es grave, y empobrece la ley, haciéndola excluyente en sus efectos pero también en su punto de partida mismo.

Muchas lecciones: que recurrir al Poder Judicial, aunque golpeado y por momentos amenazado desde la soberbia del Ejecutivo, es un contrapeso democrático que todas y todos debemos sostener. Que el Legislativo que se pliega al mandatario en turno desmerece su papel de representación popular, y acaba restringiendo derechos de aquellos a quienes juró defender. Que la verdadera participación debe ser permanente y desde la definición; es triste ver que después de más de 14 meses, autoridades educativas, de repente inspiradas por la visibilidad en época electoral y no por auténtico compromiso, ahora apresuran la apertura de planteles que antes –con negación cerril– dejaron caer; no probaron formas intermedias de presencia, y ahora quieren imponer un esquema “mitad y mitad, y viernes para los que van más rezagados” que es detestable en lo pedagógico y riesgoso en lo epidemiológico. No creen en la participación que no sea “les pedimos ayuda para financiar”; veloces para querer compensar lo que no cuidaron y lentos para dialogar y entender las críticas, para atender las propuestas estudiadas, para no poner las cosas en tono electoral y con operadores territoriales. La SEP sigue sin convocar, incumpliendo el artículo 145 de la Ley General de Educación, al Consejo Nacional de Participación Social. La participación de maestras y maestros está, con mucho, limitada a esperar con agobio que se reestablezcan las páginas web en las que deben capturar sus datos de calificaciones, o de aspiraciones a promoción. Ya es hora de exigir, con más fuerza, participar de verdad.

Fuente: https://profelandia.com/participar-de-verdad/

Comparte este contenido:

Una generación de niños y niñas pornográficos

Por: Educación 3.0

El doctor en psicología clínica, sexólogo y escritor José Luis García asegura que algunos niños consumen pornografía a los 8 años, por lo que propone educar y capacitar en la sexualidad a menores.

En los últimos 30 años, Internet nos ha cambiado la vida, las relaciones y el tiempo libre, tanto a menores como a adultos. Se trata de un avance tecnológico sin igual, que ha desencadenado una transformación extraordinaria en la sociedad, pero también ha venido acompañada de riesgos de salud importantes que es preciso conocer.

La inmensa mayoría de los menores y jóvenes consumen pornografía, contenidos que, en su mayoría, presentan ciertas dosis de violencia. En España, algunos comienzan a los 8 años, otros incluso antes. Las niñas algo menos, pero en algunos países ya se están acercando en torno a los 16 años. Cualquiera que tenga un móvil con acceso a la red puede hacerlo, no solo en las webs específicas, sino que está presente en varias redes sociales y en ciertos videojuegos.

Posibles consecuencias

Un niño se sorprende antes el contenido de su móvil, sin vigilancia parental. - Una generación de niños y niñas pornográficos

Este consumo, a pesar de ser gratis, no es en balde: tiene consecuencias y algunas de ellas muy graves. Diferentes estudios científicos sugieren efectos tales como: adicción, hipersexualidad, alteraciones cerebrales, disfunciones sexuales, problemas de pareja, trastornos de la conducta, alteraciones de la sociabilidad, consumo de prostitución, riesgos reproductivos y de infecciones entre otros, pasando por el aprendizaje de un modelo de relaciones sexuales agresivos, inaceptable desde todo punto de vista, cuando nos referimos al porno violento.

Lo inquietante es el hecho, tan real como terrible y lamentable, de que niños y niñas se inicien en la sexualidad con ese modelo que ven en las pantallas de sus móviles, modelo que contribuye a configurar el concepto y el sentido de su sexualidad y de sus relaciones a partir de ese momento. El porno es el manual de instrucciones 3.0 de las primeras relaciones sexuales de muchos chicos y chicas.

“El porno es el manual de instrucciones 3.0 de las primeras relaciones sexuales de muchos chicos y chicas.”

Educación sexual

Ante esta situación, proponemos una capacitación específica de padres, madres y docentes, en base a diferentes temas prioritarios, contenidos que, luego, ellos van a aplicar en sus respectivos ámbitos con niños, niñas y jóvenes según su edad y necesidades. Se trataría de competir con los contenidos que ofrecen estos vídeos, de ahí que la finalidad de nuestra propuesta es que lleven a cabo una adecuada educación sexual que les permita hacer frente a esa vigorosa influencia de la industria pornográfica, ante la que se hallan, demasiado a menudo, sin vigilancia de ningún tipo.

En una sociedad hipersexual como la nuestra, la pornografía seguirá existiendo durante mucho tiempo y, en este momento, la formación es el único recurso realista que tenemos. En consecuencia, se propone educar y capacitar en la sexualidad a menores para que puedan hacer frente a los desafíos, y sus consecuencias, que plantea el consumo de pornografía en la sociedad actual, fenómeno de grandes implicaciones, muy complejas, que requiere una sólida formación.

Dado que las agresiones sexuales a mujeres y a niñas son un drama lacerante en nuestra sociedad, y que se ha señalado a la pornografía como un factor etiológico de este problema, esta propuesta educativa pivota sobre esta vinculación.

Fuente e Imagen: https://www.educaciontrespuntocero.com/opinion/una-generacion-de-ninos-y-ninas-pornograficos/

Comparte este contenido:

España: Los institutos advierten de problemas de espacio para separar a los alumnos 1,2 metros

Europa/España/28-05-2021/Autora: Olga Esteban/Fuente: www.elcomercio.es

Los sindicatos ven con «inquietud» el aumento de ratios y piden mantener las contrataciones. La consejería guarda silencio por el momento.

«Estamos a favor de que vuelva la presencialidad, que es necesaria. Pero hay que tener los medios para hacerlo. El espacio va a ser un problema». Milagros Madiedo, presidenta de la Asociación de Directivos de Secundaria de Asturias, pone el foco en el que, para ellos, será el principal problema de las vuelta a las aulas de septiembre: la distancia de seguridad. Los ministerios de Educación Sanidad han aprobado que la distancia entre alumnos en Secundaria sea de 1,2 metros (en lugar de 1,5 metros, como ahora). Pero no será suficiente. «En algunos centros, especialmente en la zona central, no hay sitio para meter a los 25 alumnos en un aula con esa distancia». Y eso, advierte Madiedo, «tiene difícil solución». La única, si se descarta la semipresencialidad, será desdoblar unidades.

Por lo demás, los directores de Secundaria piden que el Principado mantenga a los docentes contratados como refuerzos este año, o incluso «a más», para mejorar la atención y paliar los déficits que se han producido este curso. Y recuerdan que no todo el profesorado está vacunado aún (a un alto porcentaje le falta la segunda dosis y algunos ni siquiera han recibido la primera inyección, dicen los sindicatos).

Por lo demás, las medidas aprobadas por el Gobierno y las comunidades no han convencido a la comunidad educativa. «Inquietud» y «decepción» son las sensaciones más repetidas tras confirmarse que las ratios en las aulas asturianas volverán a ser las anteriores a la pandemia: 23 alumnos (25 en la concertada) en Infantil; 25 en Primaria y Secundaria y 30 en Bachillerato (excepcionalmente se puede llegar a 27 y 33). Y eso, dice CC OO, es hablar de una «presencialidad ‘low cost’» y de optar por medidas «que no suponen inversión», lamenta Suatea, como las mascarillas y los grupos burbuja. Los profesores están molestos. Habían pedido mantener los grupos de 20 alumnos y los 754 puestos creados.

Pero por ahora, y aunque la Consejería de Educación guarda silencio, no parece que ninguna de las dos cosas vaya a producirse. Con una excepción que sigue sobre la mesa: la posibilidad de mantener los grupos pequeños hasta cuarto de Primaria. Eso obligaría a ciertos desdobles y a algunas contrataciones. «Es una irresponsabilidad», dice Borja Llorente, de CC OO. «No se pueden relajar las medidas», añade Gumersindo Rodríguez, de ANPE, preocupado como los demás por el hecho de que aún hay docentes sin vacunar. «Dan la espalda a los docentes», critica CSI.

De «agravios y deficiencias» habla UGT. «Volvemos a la vieja ‘anormalidad’», lamenta Suatea, que considera que no solo son necesarios esos 754 refuerzos, sino más. A eso se añade la petición que la ministra Celaá hizo para que se mantengan los contratos ‘extra’. La consejería insiste en que está ultimando el plan organizativo, con la prioridad de la presencialidad, el avance hacia «la máxima normalidad posible» y «la seguridad de la comunidad educativa», explica Carmen Suárez. Mientras, siguen las protestas contra la semipresencialidad. En Oviedo, varias esculturas y figuras aparecieron con carteles en los que se leía: «¿Cómo será ir a clase todos los días? Seguro que se aprende mucho».

La concertada, si bien comprende la flexibilización de las medidas por la vacunación y la evolución de la pandemia, considera necesario «que Educación facilite el mantenimiento de profesores adicionales que permitan responder a las necesidades de refuerzo educativo del alumnado que se haya visto más afectado por la situación ocasionada por la pandemia y que presenten carencias en el aprendizaje», explica Simón Cortina, de Escuelas Católicas.

Fuente e Imagen: https://www.elcomercio.es/asturias/institutos-advierten-problemas-espacio-separar-alumnos-20210521001259-ntvo.html

Comparte este contenido:

Cuba reabrirá escuelas en septiembre

América Central/Cuba/28-05-2021/Autor(a) y Fuente: Spanish.xinhuanet.com 

Los estudiantes de primaria, secundaria y preuniversitaria volverán a las clases presenciales en Cuba a partir de septiembre venidero, anunció hoy la ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez.

«Teniendo en cuenta la situación epidemiológica y el esquema de vacunación diseñado prevemos que en septiembre pudiéramos iniciar el curso de manera presencial», dijo la ministra en un programa televisivo.

La titular del Ministerio de Educación (MINED) afirmó que en junio o julio retornarán a las clases presenciales algunos territorios que tienen una mejor situación epidemiológica, señalando que ese regreso a la nueva normalidad le confiere una alta responsabilidad a la escuela.

Velázquez recordó que las autoridades esperan tener inmunizado en agosto al 70 por ciento de la población de 11,2 millones de cubanos para comenzar a controlar los efectos de la pandemia, que acumula 890 muertos y 134.208 infectados desde que el nuevo coronavirus apareciera en el país en marzo de 2020.

El curso escolar fue suspendido en marzo del pasado año como parte de las primeras restricciones sanitarias para contener la propagación del nuevo coronavirus, y el proceso docente continuó por televisión, dado la baja penetración de internet en los hogares.

En diciembre del pasado año, el MINED intentó reabrir las escuelas en el curso 2020-2021, pero la aparición de un tercer rebrote, en enero último, obligó a cancelar de nuevo las clases presenciales y a retomar las llamadas teleclases.

Cuba tiene unas 10.700 escuelas de las enseñanzas primaria, secundaria y preuniversitaria, donde estudian cerca de 1,7 millones de niños y jóvenes.

Fuente: http://spanish.xinhuanet.com/2021-05/25/c_139968177.htm

Comparte este contenido:

Argentina: Lanzan nueva plataforma educativa

América del Sur/Argentina/28-05-2021/Autor(a) y Fuente: www.diariodecuyo.com.ar

El Ministerio de Educación sanjuanino habilitó una nueva plataforma digital para la continuidad de las trayectorias educativas virtuales. Se trata de Innovatec, que fue diseñada para proporcionar a educadores, administradores y estudiantes un sistema integrado único y seguro para crear experiencias educativas personalizadas y grupales. Innovatec se suma a la plataformas que se crearon tras suspenderse las actividades escolares en 2020. La página oficial es www.san juan.magnaplus.org.

Fuente e Imagen: https://www.diariodecuyo.com.ar/sanjuan/Lanzan-nueva-plataforma-educativa-20210522-0080.html

Comparte este contenido:

Vera Sacristán: «Subir el precio en las universidades públicas favorece a las universidades privadas»

Por: 

  • Vera Sacristán, coordinadora del informe ¿A qué puede llamarse universidad? recuerda que «a pesar de que el número de estudiantes se haya ido multiplicando por dos cada diez años, no lo han hecho igual en todas las clases sociales». Y avisa de que «si la enseñanza se ve abocada al negocio en lugar de al «bien común», la tentación digital es muy grande, porque es muy barata»

era Sacristán, presidenta del Observatorio del Sistema Universitario, es la autora principal del informe ¿A qué podemos llamar universidad?. Las conclusiones del estudio son demoledoras: solo 18 universidades del total de 81 que existen en España cumplen los requisitos fijados por la Administración. El resultado aún es peor si se tienen en cuenta las nuevas normas que está a punto de aprobar el Gobierno. En conclusión, las públicas cumplen en actividad investigadora, pero no en las condiciones de sus plantillas, con exceso de empleos a tiempo parcial y de duración temporal. En las universidades privadas está ausente la investigación, uno de los requisitos básicos para ser consideradas como tal.

Vera Sacristán, profesora de Matemática aplicada en la Universidad Politécnica de Catalunya, es una de las voces más respetadas y críticas a la hora de diagnosticar la salud de nuestras universidades. Es fundadora y presidenta del Observatorio del Sistema Universitario, una asociación creada el año 2013 y cuyos estudios son un referente para conocer cómo funcionan las universidades. La asociación, formada principalmente por profesores de las cuatro universidades públicas de Barcelona, se financia exclusivamente por la cuota de sus miembros. La independencia de criterio constituye una de sus grandes cualidades y, en este sentido, Vera Sacristán insiste en que dejemos constancia de que “las opiniones expresadas en la entrevista no tienen relación explícita con los resultados del informe presentado por el Observatorio del Sistema Universitario, sólo reflejan las opiniones de la entrevistada”. Estas son sus opiniones.

Antes de preguntarle por el informe en cuestión le preguntaré de manera general por la gestión de Manuel Castells al frente del ministerio. ¿cree que las propuestas de reforma responden a las necesidades estructurales del sistema universitario?

Esta regulación lo que pretende es poner unos cuantos requisitos mínimos en las universidades para considerarlas como tal, es un intento de modernizar, actualizar el decreto que existe el cual, a su vez, sustituye al anterior de 1991. Este tipo de normativa ha existido siempre. La novedad principal de lo que pretende el Ministerio es que en los requisitos que hoy en día sólo son un mínimo sobre la oferta docente y las plantillas, añadir otro sobre la actividad investigadora que debe tener una universidad. Además, también, modernizar un poco los requisitos sobre la oferta docente, incrementándolos. En cambio reduce un poco los de plantillas. Dicho esto, ¿parece razonable que en un sistema universitario que está en expansión porque hay muchas universidades privadas nuevas se introduzcan requisitos sobre la investigación que no existían? A priori, parece coherente con el principio y función de las universidades.

Lo que sí es cierto es que los hechos indican que el grueso de las universidades privadas no hacen investigación. El motivo es que es cara. El grueso estas cosas no las hace al igual que no ofrece carreras costosas, como las de ciencias o de ingenierías pesados ​​(no TIC). Es todo muy coherente.

En concreto, ¿cómo valora la propuesta de Real Decreto: qué elementos destacaría que pueden reforzar positivamente la salud del sistema universitario español y cuáles que la pueden perjudicar?

Sí. A mí me parece que los requisitos que añade en cuanto a la investigación son razonables y son de mínimos, que están bastante lejos de lo que es la media de las universidades públicas. Quiero puntualizar que son propuestas de real decreto y no de ley, lo que significa que lo aprueba el Consejo de Ministros y se acabó. En la propuesta que hemos leído, que es la que se sometió a audiencia pública y que, por lo tanto, no está escrito que sea la final, de las cosas que aparecen en ese texto, el requisito que se reduce y que a mí me parece que no es buena idea, es el que dice que las universidades no deben tener un mínimo del 60% de su personal docente investigador a tiempo completo.

¿Por qué le parece un error?

Pues porque no cuadra. No cuadra con la parte de la investigación. Es decir, el personal investigador a tiempo parcial es contratado para hacer docencia, y la parte que no se le contrata es la parte de investigación. Por lo tanto, si quieres garantizar unos mínimos de investigación debes garantizar unos máximos de personal a tiempo parcial. Y, sorprendentemente, estos máximos que han existido siempre, en el texto que vimos en la web del Ministerio, han desaparecido. Esto, creo, es inconsistente y no está argumentado.

Después, hay otra cosa que me parece preocupante, que es el control. Esto no depende sólo del decreto, pero en parte sí. Al hacer este estudio sobre qué grado de cumplimiento había por parte de las universidades de los nuevos requisitos nos encontramos con la sorpresa de que muchas no cumplen los vigentes. Esto significa que el mecanismo de seguimiento y de corrección de los problemas y, si es necesario, de sanción, no ha funcionado. El nuevo decreto debería ser consciente de ello y ponerle remedio con un sistema que pueda ser efectivo. Esto creo que también es una carencia y debería concretarse más.

A raíz de esto le quería preguntar, ya que el informe elaborado por el Observatorio del Sistema Universitario se basa en el análisis del cumplimiento de las universidades españolas a la normativa en vigor, el Real Decreto 420/2015, así como de la nueva propuesta de decreto. Una de las cosas que señala el informe no es que el actual modelo universitario no cumpla con los requisitos del nuevo borrador, sino que no cumple con la normativa vigente. ¿Por qué cree que estos datos son un suspenso ahora si, según se afirma en el informe, había un incumplimiento sistemático de los requisitos de la ley?

No te sé explicar por qué ha habido tanto eco de este informe respecto de otros que habíamos hecho. Es un poco sorprendente. Me temo que puede ser por un motivo que no me gusta, que es el de los rankings. Este tipo de titular es muy impactante, pero es poco matizado. Tienen más éxito este tipo de titulares que otros más complicados. Pero, por otra parte, en buena hora un conjunto de cuestiones como las tratadas en el informe puedan tener este eco.

Pero, ¿cuántas universidades incumplen los criterios?

No importa tanto cuántas universidades cumplen los criterios, sino mirar a cada una que no cumple y en qué medida no lo hace. De los 22 criterios que propone el Ministerio hemos podido valorar 14 porque del resto no hay datos públicos. Si de estos, una universidad incumple uno y por muy poco, aunque formalmente falle no tiene nada que ver con la universidad y que ves que no saldrán tras los cinco años de margen que considera el decreto. Este es el matiz que cuesta, lo que realmente importa al final.

El informe hace un análisis detallado por comunidades autónomas y destaca dos grandes perdedores: Catalunya y la Comunidad de Madrid. ¿Tiene alguna explicación de por qué las comunidades que precisamente tienen algunos de los centros con más reputación del Estado son, a la vez, las que menos cumplen la legislación vigente?

Sí, esto es algo curioso y que llama la atención. ¿Son universidades exitosas? La respuesta es sí. Ponemos de ejemplo las catalanas, pero en Madrid es muy similar. Si tú miras las universidades públicas catalanas –después hablamos de las privadas–, miras la oferta docente y está por encima de la media del conjunto. Miras la actividad investigadora y lo mismo. En este sentido son universidades exitosas. Ahora, miras la situación de sus plantillas y están mucho peor que el resto de España. Catalunya es premio en temporalidad y en contratos a tiempo parcial en las universidades.

¿Cómo es que estas dos cosas pueden convivir? La respuesta es que los efectos de una precarización de una plantilla son lentos. Desde el momento que comienza una investigación hasta que se publican los resultados pueden pasar años.

Entonces, si tú produces unos grandes recortes como hizo la Generalitat de Catalunya en la financiación de las universidades públicas en el año 2011, tardas en ver los efectos porque tienes unos grupos de investigación que tienen unas inercias de trabajo, y si deben incorporar una persona a tiempo parcial para seguir la rueda, lo hacen. Ahora bien, esto es pan para hoy y hambre para mañana, porque con el personal senior que tienes sigue la máquina funcionando, pero no estás alimentando de jóvenes estos grupos de investigación, o grupos de investigación nuevos.

A raíz de la publicación del informe, algunos representantes políticos de algunas comunidades han salido el paso criticando los resultados. El secretario de Universidades e Investigación catalán, Francesc Xavier Grau Vidal, tildó el informe de «tendencioso», porque cuestiona el modelo de coexistencia entre personal contratado y personal funcionario dentro de las universidades. ¿Qué opina de esta crítica y, también, qué opinión le merece un modelo basado en la coexistencia de dos estatutos diferentes para los trabajadores?

Una puntualización: sólo una comunidad ha protestado, y ha sido el Secretario de Universidades de Catalunya, que creo que se equivoca en su crítica. En primer lugar, la cuestión de si el modelo debe ser laboral y funcionarial al mismo tiempo o no. Aquí, de lo que estamos hablando es de temporalidad o no, porque es igual si el personal permanente es o no funcionario o laboral. Lo que estábamos discutiendo respecto a las universidades catalanas en concreto era la cuestión de la temporalidad y del tiempo parcial, y esto no tiene nada que ver con el hecho de que los permanentes sean de una manera u otra. Por tanto, no era un ataque al modelo de la doble carrera.

Dicho esto, el modelo de la doble carrera –y hablo a nivel completamente personal, porque el Observatorio nunca se ha posicionado en esta cuestión– desde mi punto de vista está mal justificado. Es decir, quien es partidario de la vía paralela y que haya dos (funcionarial y laboral) te cuenta que lo que quiere es que ambas  tengan los mismos derechos y deberes. Y, entonces, ¿cuál es la diferencia? Es decir, si esto fuera así, ¿cuál es la justificación para tener dos vías, si tienen que ser iguales en derechos y deberes? ¿En qué se diferencia entonces un funcionario de uno laboral? Bueno, en al que el laboral lo echas más fácilmente. Es que, si no, no veo cuál es la diferencia desde el punto de vista institucional.

Otra cosa es que en España la legislación sobre funcionarios universitarios está en manos del Congreso y el Senado, y la legislación laboral está en manos de las comunidades autónomas. Esta puede ser la otra explicación de por qué hay una defensa de la doble vía. Por el otro lado, quien es contrario a la doble vía, normalmente hace una defensa de la vía funcionarial basada en dos factores: al funcionario, para echarlo, debe haber hecho algo gordo, y, dos, la libertad de cátedra se defiende mejor desde la función pública debido a esta condición laboral.

Una universidad que está en manos de un fondo de capital riesgo y que tiene estrictamente ánimo de lucro no está claro que le resulte tan rentable adaptarse como lo que está haciendo ahora, que es hacer de academia

Posiblemente el punto más conflictivo del borrador de Decreto ley está en el artículo 2.1, donde se afirma que sólo podrán denominarse como universidades aquellos centros que cumplan con los requisitos de la ley. El informe, sin embargo, prevé que los cinco años de margen que da el decreto no serán suficientes y que, por lo tanto, algunas universidades perderán la categoría de universidad. ¿Cree que, llegado el momento, la amenaza se acabará cumpliendo?

No lo sé decir, pero a juzgar por los datos que hemos visto en el informe los problemas detectados en universidades públicas se arreglan muy fácilmente porque son de precarización de la plantilla. Todo lo demás, en general, lo cumplen, y lo que no, con un pequeño esfuerzo, llegará, salvo la cuestión de la precarización de las plantillas. Y entiendo por precarización de las plantillas el tiempo parcial y temporalidad. Esto se arregla con dinero de manera fácil, porque las universidades públicas españolas no han parado de generar doctores, titulados y todo lo necesario. Por lo tanto, lo único que hay que hacer es captar personal con la titulación adecuada para incorporarla a tiempo completo. No es falta de capital humano, es falta de dinero para pagarlo y tenerlo contratado en condiciones.

¿Y en las universidades privadas?

Aquí el problema es mucho más grave. Lo que hemos detectado es la inexistente actividad de investigación. Hay algunas excepciones notables, como sería el caso de la Universidad de Navarra. Ahora bien, el grueso de las otras no es así, y eso tiene mucho más mal arreglo.

¿Por qué?

Primero, porque no está claro que lo deseen. Una universidad que está en manos de un fondo de capital riesgo y que tiene estrictamente ánimo de lucro no está claro que le resulte tan rentable como lo que está haciendo ahora, que es hacer de academia.

Y por parte de las universidades que sí quisieran hacer investigación y que ahora no la estén haciendo –porque las que empezaron hace poco tiempo lo conseguirán dentro de unos años– deben de hacer muchas cosas. Debe cambiar su estructura de plantilla para tener personal capaz de sacar adelante grupos de investigación, tiene que hacer propuestas de proyectos, tiene que conseguir la financiación para los grupos de investigación, proponer programas de doctorados, etc. Tiene que hacer muchas cosas antes de que lleguen los resultados mínimos que requieren que, por otra parte, insisto, son sorprendentemente mínimos.

¿Desde cuándo se aprecia el boom en las universidades privadas?

España legalizó la posibilidad de que haya universidades privadas en 1983. Hace muchos años de eso. En cambio, el boom se produce mucho más tarde. Yo lo atribuyo al crecimiento de la población universitaria. Una de las cosas más interesantes de ver son los datos de cuántos estudiantes universitarios hay en España desde la Guerra Civil hasta ahora. Cuando la gente comienza a poder comer, hacia la década de los 50, comienza a despegar y la población universitaria comienza a crecer exponencialmente. Hasta el año 2000 aproximadamente, los estudiantes universitarios se doblan cada década. La última vez que doblamos pasamos de 700.000 a un millón y medio, y cuando la población que quiere estudiar llega a estas cifras, crear universidades privadas se convierte en una posibilidad de negocio.

Asimismo, y podríamos decir aproximadamente que desde los últimos diez años, los precios de las carreras universitarias y de los másters han ido en aumento de manera continuada, y la capacidad adquisitiva de la población, en general, ha ido disminuyendo.

Los precios que subieron en 2011 fueron los de las universidades públicas, que son los únicos regulados por ley. Por lo tanto, hace más competitiva la oferta privada. Por otro lado, hay otro factor para entender cómo funciona el negocio de las universidades que es: ¿quiénes son los estudiantes universitarios? A pesar de que se hayan ido multiplicando por dos cada diez años, no lo han hecho igual en todas las clases sociales.

¿El origen social de los padres cada vez tiene más peso?

Exactamente. Hay muy poca gente de origen social bajo en las universidades, y mucho estudiante de origen social alto. Entonces, cuando suben los precios, una parte de la franja más alta de los estudiantes puede optar por irse a la privada porque encuentra que no hay tanta diferencia. Esto es algo que hemos constatado en Catalunya. En cambio en el otro extremo, el de las clases sociales más bajas, estos pocos que llegan a la universidad son las «lumbreras» de cada familia, y llegan pase lo que pase, porque son tan pocos que las familias hacen lo que sean para que lleguen.

¿Qué niveles de financiación cree que debería destinar el Ministerio para solucionar este desfase entre clases sociales en el acceso a la universidad?

Aunque es cierto que las universidades reciben dinero para hacer investigación del Ministerio de Ciencia e Innovación, el dinero de funcionamiento proviene de las comunidades autónomas. Y aquí hay una gran diferencia, en términos relativos, entre cómo son financiadas unas y otras. Nosotros hicimos un informe sobre este tema en el Observatorio, y te puedo asegurar que las diferencias son muy notables entre unas y otras.

¿Por ejemplo?

Las que más recortaron el año 2011 son, en primer, lugar Catalunya y, en segundo lugar, la Comunidad de Madrid. Estamos hablando de reducciones en la financiación ordinaria de las universidades del orden del 30%. Son cifras muy grandes. La diferencia, en el caso de Catalunya, es que esto no lo ha llegado a compensar nunca. Otras comunidades comenzaron a remontar con los años –otra cosa es que la Covid-19 y los datos postCovid no los tenemos–. Hay un matiz respecto a la política de la Generalitat y es que, este año, decidió retrotraer el incremento de precios que hizo el año 2011, y también ha subido la financiación pública para compensarlo.

¿Qué otras comunidades lo han hecho mejor?

Hay algunos datos que podrían sorprender si se pretende hacer un análisis en función de los partidos políticos que están en el gobierno.

En el tema de precios, por ejemplo, Galicia no ha modificado nunca los precios de las matrículas. Ni siquiera el IPC, por lo que en términos reales los ha ido bajando. Andalucía los bajó. Se han hecho políticas muy diferentes y no todas responden a una clasificación política fácil. Ahora bien, las dos comunidades más emblemáticas por su línea más neoliberal –que son Catalunya y Madrid–, estas sí recortaron, aunque Madrid lo fue bajando con el tiempo.

Tenemos una estructura económica laboral en la que la cualificación no es lo que prima. Priman los puestos de trabajo de niveles bajos

Si comparamos España con el resto de los países de la OCDE en el ámbito de la calidad del sistema universitario, así como en el acceso que garantice una igualdad de oportunidades a la población, ¿con qué nos encontramos?

El porcentaje de población que tiene un título universitario en España es perfectamente comparable con las europeas, las de la OCDE, o las de cualquier país similar a España. En cambio, si miras la clasificación internacional de los puestos de trabajo de ejecutivos, de técnicos, etc., es decir, la estructura de los puestos de trabajo de nuestro país, hay un crecimiento inequívoco de puestos de trabajo de baja cualificación comparado con los países similares en España. No hay color. Tenemos una estructura económica laboral en la que la cualificación no es lo que prima. Priman los puestos de trabajo de niveles bajos, lo cual es completamente coherente con un país muy centrado en el turismo y poco en la innovación. No es que tengamos sobrecualificados, tenemos infratrabajo. Es un problema de la estructura económica del país.

Una última pregunta: la pandemia de la Covid-19 ha puesto sobre la mesa una necesidad –inevitable por el contexto– de una digitalización de la educación. ¿Cómo cree que puede evolucionar la educación universitaria en los próximos años en este sentido, con los nuevos modos y tecnologías?

Depende. Y depende, sobre todo, de hasta qué punto la enseñanza universitaria se mercantilice o no. Es decir, lo que nos ha enseñado la pandemia es que si no puedes ir de manera presencial, obviamente que no te queda más remedio que hacerlo de manera digital. Ahora bien, lo que también nos ha enseñado es que el estudiante dice que no hay color. Que es infinitamente más fructífera la enseñanza presencial y la interrelación más directa, etc.

La enseñanza online está muy bien como herramienta de apoyo, por ejemplo, en caso de una enfermedad que me impida ir a clase o para aquella gente que trabaja y no puede acudir presencialmente. Pero son casos específicos, más condicionados a no poder hacerlo de manera presencial. Ahora bien, si la enseñanza se ve abocada al negocio en lugar de al «bien común», la tentación digital es muy grande, porque es muy barata. Y más en España, donde por el tema de la lengua el mercado potencial de América Latina es gigante y desde aquí lo puedes captar sin moverte. Si impera el ahorro público, y el negocio privado… la enseñanza será mucho más digital.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/2021/04/05/vera-sacristan-subir-el-precio-en-las-universidades-publicas-favorece-a-las-universidades-privadas/

Comparte este contenido:
Page 102 of 472
1 100 101 102 103 104 472