Page 1 of 9
1 2 3 9

Colombia: 34 secretarías de Educación están listas para iniciar alternancia

América del Sur/ Colombia/ 19.07.2020/ Fuente: noticias.caracoltv.com.

El regreso a clases en algunos municipios no COVID o con bajo contagio se dará durante agosto. Así lo confirmó la ministra de Educación María Victoria Ángulo.

“Tendremos 34 secretarías de Educación que iniciarán un proceso de alternancia, allí hay 16 departamentos, 18 municipios, 11 comunidades indígenas”, explicó la funcionaria.

Además, aclaró que ciudades como Armenia, Bogotá, Manizales, Cali, Cartagena, Barranquilla, así como los departamentos de Montería, Huila, Atlántico y Bolívar seguirán en el mes de agosto con educación en casa.

No obstante, instó a que sigan preparando todos los protocolos de bioseguridad para iniciar el modelo de alternancia tan pronto como la pandemia del COVID-19 lo permita.

“Cada rector del colegio irá comentando los detalles”, añadió la ministra Ángulo.

Según el gobierno, se invirtieron siete mil millones de pesos en elementos de protección para quienes harán parte de este modelo de alternancia de la educación en Colombia.

Fuente de la noticia: https://noticias.caracoltv.com/colombia/regreso-a-clases-34-secretarias-de-educacion-estan-listas-para-iniciar-alternancia

Comparte este contenido:

Los diez desafíos de la educación en Colombia para la próxima década

Por: Julián De Zubiría Samper

  • El propósito de esta columna es invitar a reflexionar sobre los diez desafíos establecidos en el Plan Decenal de Educación que deberían incorporarse en los Planes de Desarrollo Nacional, regional y municipal, si en verdad queremos construir la política de Estado en educación de la cual hemos carecido.

En este contexto, no tiene sentido iniciar las “conversaciones” en educación que ha planteado el actual gobierno, sin partir de los acuerdos y planes previos. Solo así podremos construir la política de Estado en educación, de la cual hemos carecido. Analicemos cada uno de los Desafíos.

Para profundizar: https://www.semana.com/opinion/articulo/un-pais-en-busca-de-esperanza-que-todavia-no-ha-aprendido-dialogar-julian-de-zubiria/642445

Primero. Se establece un compromiso gradual y de largo plazo por parte del Estado para hacer efectivo el derecho a la educación en todos los niveles. Se trata de una política seria y responsable para garantizar acceso y permanencia, de manera que se asegure el cumplimiento pleno del derecho. Es particularmente grave el incumplimiento de este derecho en educación inicial y superior para los sectores más vulnerables de la población, al tiempo que tan solo el 10% del estrato 1 accede a educación superior y que, en el campo es inexistente la educación inicial oficial y, en las ciudades, su acceso es muy limitado, se destinan pocos recursos y la calidad sigue siendo muy baja. En las pruebas PISA de 2018, solo uno de cada tres jóvenes colombianos dijo haber recibido educación inicial y la entidad estima que recibirla eleva en 56 puntos los resultados alcanzados a los 15 años en lectura y matemáticas.

El Sistema General de Participaciones (SGP) determina los recursos que transfiere la Nación, a las entidades territoriales para atender los servicios de educación preescolar, básica y media. En el corto plazo será indispensable una revisión del SGP, dado que en la última década se han debilitado los recursos que el gobierno central transfiere para la educación de los colombianos.

Segundo. El “sistema” actual está por completo desarticulado: la educación inicial y la tecnológica parecen “ruedas sueltas”, al tiempo que entre la básica y la superior se carece de los necesarios puentes comunicantes. El PNDE le apunta a la construcción de un sistema educativo articulado, participativo, descentralizado y con mecanismos eficaces de concertación. Para lograrlo, tendríamos que articular todos los subsistemas y consolidar las comunidades educativas en el nivel local, regional y nacional.

Tercero: El currículo actual en Colombia es impertinente y está por completo fragmentado. Matemáticas es un buen ejemplo de ello, ya que el área está orientada a garantizar el dominio de algoritmos rutinarios y mecánicos. La casi totalidad de exámenes que hoy se aplican se podrían resolver con la ayuda de Google, lo que implica que no exigen procesos de pensamiento o interpretación de la información.

Habría que decidir que, en lugar de enseñar 15 asignaturas desarticuladas, trabajáramos en todas en torno a las mismas competencias esenciales: pensar, convivir y comunicarnos. Algo análogo a lo que hizo Chile en su reforma curricular de 1998 o lo que tiene establecido Finlandia desde el año 2020.  Debe ser un lineamiento general que respete la autonomía y que sea pertinente para el joven, la época y el contexto. El último lineamiento curricular en Colombia hizo exactamente lo contrario. Se llamaron los Derechos Básicos de Aprendizaje (DBA) y nos retrocedieron en educación unos 50 años al abandonar el concepto de competencias y al volver a prescribir de manera específica y fragmentada lo que había que trabajar. Ojalá ninguna institución educativa tenga en cuenta los DBA en su trabajo curricular.

Para profundizar: https://www.semana.com/educacion/articulo/julian-de-zubiria-que-es-necesario-ensenar-hoy-en-el-colegio/527540

Cuarto. Las Facultades de educación no están haciendo bien la tarea, porque no desarrollan en sus egresados las competencias que ellos van a desarrollar en sus estudiantes. Es triste reconocerlo, pero los egresados de estas facultades siguen siendo los profesionales con más bajos niveles de lectura crítica y razonamiento numérico. Mientras eso continúe, será imposible alcanzar altos niveles de lectura y pensamiento matemático en los estudiantes. El problema es todavía más grave si se tiene en cuenta que sabemos por múltiples investigaciones, que las maestrías y los doctorados no elevan la calidad de los docentes de la educación básica. Por paradójico que parezca, no son mejores maestros los magíster y doctores. La explicación es sencilla: con un sistema tan desarticulado como el que hemos creado, las universidades no tienen claro qué es lo que hay que hacer en los colegios y cómo hacerlo.

En consecuencia, necesitamos una profunda reestructuración en los procesos de formación de los docentes, de manera que se garantice que los docentes universitarios acompañen los procesos innovadores en los colegios, fortalezcan la articulación entre los dos niveles y nos ayuden a que la formación que reciben esté centrada en consolidar en ellos las competencias que requieren para evaluar y para favorecer el desarrollo integral de sus estudiantes.

Quinto. En la práctica educativa se cumple el dicho: “Cada maestrito con su librito”. Eso pasa porque el modelo pedagógico sigue siendo rutinario, mecánico y memorístico. Equivocadamente la escuela ha creído que su finalidad esencial es la de transmitir múltiples informaciones específicas, impertinentes y desarticuladas.  El Desafío que tenemos en frente es impulsar la transformación pedagógica, de manera que aseguremos que los jóvenes en la escuela aprendan a pensar, leer, escribir y convivir. Esto no se podrá lograr sin un cambio curricular (Desafío 3) y sin un cambio en la formación docente (Desafío 4). Tampoco sin un profundo cambio en el modelo pedagógico vigente. Necesitamos impulsar una educación que transforme el paradigma que ha dominado la educación hasta el momento y que se centre en el desarrollo integral y no en la transmisión de informaciones.

Debe llamarse la atención sobre los intentos que han sucedido en el Congreso para limitar la libertad de cátedra, pues van exactamente en sentido contrario a la finalidad esencial de la educación. Necesitamos –como decía García Márquez–: “Una educación desde la cuna hasta la tumba, inconforme y reflexiva, que nos inspire en un nuevo modo de pensar y nos incite a descubrir quiénes somos”.

Para profundizar: https://www.semana.com/educacion/articulo/debemos-limitar-la-libertad-de-catedra-por-julian-de-zubiria-samper/602133

Sexto. Las tecnologías llegaron al mundo para quedarse. Necesitamos aprender a utilizarlas inteligentemente y no prohibirlas como equivocadamente están intentando hacer en los colegios algunos congresistas, que más parecen expresar las voces del siglo XIX que las del XXI. En consecuencia, la nación tiene que impulsar el uso pertinente, pedagógico y generalizado de las nuevas y diversas tecnologías para apoyar la enseñanza, la construcción de conocimiento, el aprendizaje, la investigación y la innovación, de manera que se fortalezca el desarrollo para la vida.

Séptimo. En La Habana y en Cartagena se firmaron unos acuerdos esenciales, pero la educación sigue siendo el único camino para alcanzar la paz. La intolerancia, la ira y el odio, han sido el alimento de todas las guerras. Se necesita un área de Comprensiones humanas que consolide la empatía, la comprensión de sí mismo, de los otros y del contexto, para fortalecer la tolerancia. Este trabajo tiene que ser llevado a cabo por todos los docentes y en todas las asignaturas. Precisamente por eso, mejorar la convivencia debe ser una competencia transversal en todas las escuelas.

Octavo. El fin último de la educación es ampliar la movilidad y disminuir las brechas sociales. Por el completo abandono en el que ha permanecido la educación rural, en Colombia, ha pasado exactamente lo contrario. Es así que, durante los dos periodos de Álvaro Uribe, se duplicó la brecha que existía en los resultados de las pruebas SABER entre los colegios privados y los oficiales rurales y si bien logró cerrarse durante el primer periodo de Juan Manuel Santos, volvió a aumentarse para el segundo. En la práctica esto significa que hemos creado un sistema educativo que aumenta las inequidades, en lugar de disminuirlas.

Mantenemos una deuda histórica acumulada de abandono de la educación rural, lo que nos obliga a la implementación de programas dirigidos a universalizar el acceso y la permanencia en el sistema educativo a nivel rural y garantizar la educación de calidad, de la cual han carecido niños y jóvenes en el campo. Para ello tendremos que cualificar la formación, la pertinencia, llevar a cabo ajustes curriculares, generalizar textos y generar beneficios especiales a los docentes, entre otros. Dicho apoyo también será condición necesaria para fortalecer la paz.

Noveno. Contrario a lo que han insistido los últimos gobiernos, la inversión en educación en Colombia es similar a la que teníamos veinte años atrás. Lo que efectivamente ha sucedido, es que, gracias a las gigantescas movilizaciones estudiantiles, los recursos para las universidades oficiales, que se debilitaron significativamente entre 1992 y el año 2017, recuperaron una buena parte del terreno perdido. Por eso el PNDE establece que, la importancia otorgada por el Estado a la educación se debe medir por la participación de la inversión en educación en el PIB y en el gasto general del Gobierno. Para 2018 dicha inversión fue del 4.5% del PIB, la misma que habíamos alcanzado en 1997. Si queremos cumplir con los desafíos anteriores e impulsar el desarrollo nacional, tenemos que comprometernos como sociedad en aumentarla.

Décimo. El PNDE hace propio el principio del investigador español Bernardo Herradón: “Los países no investigan porque son ricos, sino que son ricos porque investigan”. Como lo prueban cientos de testimonios en los últimos dos siglos, la investigación es condición para impulsar el desarrollo nacional. De allí que una condición para que alcancemos el desarrollo será la de fomentar la investigación que lleve a la generación de conocimiento en todos los niveles del sistema. La segunda Misión de Sabios es un buen precedente, siempre y cuando no pase lo que ya sucedió con la primera: los gobiernos siguen sin tener en cuenta sus recomendaciones formuladas dos décadas atrás.

Para profundizar: https://www.semana.com/educacion/articulo/presupuesto-para-investigacion-cientifica-en-colombia/517070

En últimas, de lo que se trata es de formular una política de Estado en educación de largo aliento, que garantice un Acuerdo Nacional, una revisión del Sistema General de Participaciones y una profunda reforma pedagógica al currículo, al sistema de formación y al modelo pedagógico. Que ayude a construir la paz y el desarrollo nacional. Si garantizamos que el PNDE se incorpore a los planes de desarrollo nacionales, regionales y municipales, si creamos una Comisión Nacional de Educación y si todos trabajamos en esa dirección, lo podremos lograr.  Ese es uno de los mayores desafíos que tenemos como sociedad para la década 2020-2029.

Comparte este contenido:

“Pude haber sido yo”: las reflexiones necesarias tras la muerte del estudiante de la Universidad Javeriana

Por: Revista Semana.

Abordar la salud mental no solo desde lo clínico, sino desde los entornos de los estudiantes; ser empatía, no subestimar la depresión. En El Diario hablamos con una estudiante que quiso contar su caso. También conversamos con docentes y médicos.

https://www.spreaker.com/user/revistasemana/diario-20-sep

 

Fuente de la reseña: https://www.semana.com/educacion/articulo/pude-haber-sido-yo-las-reflexiones-necesarias-tras-la-muerte-del-estudiante-de-la-universidad-javeriana/632780

 

 

Comparte este contenido:

Panorama de la educación en Colombia y el mundo

América del Sur/ Colombia/ 17.09.2019/ Fuente: elnuevosiglo.com.co.

La OCDE presentó su informe sobre la educación en 2019. La mirada hace una crítica al exceso de horas de clase sin calidad y le sugiere a Colombia mejorar en primera infancia. También, cerrar las brechas salariales entre hombres y mujeres

_____________

La OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) presentó su informe Panorama de la educación 2019, en inglés Education at a Glance. Es un indicador de la situación de la educación, la inversión y la empleabilidad en los países miembros. Ofrece información sobre el desempeño de los sistemas educativos, su vínculo con el mercado laboral y los recursos que se invierten en el sistema, tanto financieros, como de formación y dedicación.

El informe lleva a debatir un tema polémico, y es la intensidad horaria, el tiempo destinado para estudiar. Porque los países con mejor desempeño académico tienen menos horas de clase, es el caso de Finlandia, Estonia y Portugal. España y Túnez son señalados como algunos de los países donde la jornada escolar es muy extensa y en promedio los estudiantes aprenden dos años menos que un finlandés.

En palabras del director de las pruebas PISA, Andreas Schleicher, más horas de clase no garantizan calidad, eso es posible cuando se mejora la calidad de la enseñanza, tienden a conseguir mejores resultados, sin necesidad de incrementar las horas de clase. Un ejemplo son los japonenses que están en aula 28 horas a la semana y los coreanos con 30 horas de aula. Es decir, seis o algo menos de seis horas de lunes a viernes, a lo que se incrementan las 14 horas extra clase de los japoneses y las 20 horas de los coreanos. Con baja intensidad horaria, han logrado grandes avances en la formación escolar.

El informe respecto a Colombia

El informe destaca a Colombia en cuatro aspectos. Es uno de los países de la OCDE con menor porcentaje de adultos con estudios universitarios, y las expectativas de estudiantes que se inscribirán a doctorados, seguirán siendo muy bajas. Sin embargo, es de los países de la región donde realizar estudios terciarios (pregrado, maestría o doctorado) genera más ganancias. Es decir, en Colombia sigue existiendo la posibilidad de que estudiar, permite salir de la pobreza y mejora la calidad de vida.

Otro aspecto relacionado con la inequidad es que las mujeres colombianas en promedio tienen mayor nivel educativo que los hombres, lo que representa un salto en el acceso y la inclusión, sin embargo, ganan menos que los hombres. La OCDE estima que una colombiana con maestría gana un 20% menos de salario en promedio frente a su colega hombre con el mismo nivel de formación.

Un llamado de atención que hace la organización es que se necesita una mayor inversión en recursos, acceso y calidad para los programas de primera infancia. Señala el informe que el país suramericano tiene muy baja tasa de acceso para los niños entre tres y cinco años. Además, los niveles de gasto siguen siendo bajos frente a los otros miembros de la OCDE. Por otra parte, hay hacinamiento y en los primeros años de escuela Colombia tiene una de las tasas más altas de número de estudiantes por profesor de los 87 países analizados.

Por último, respecto a los educadores colombianos destaca que no hay diferencia salarial entre profesores con el mismo nivel de formación frente al nivel en el que enseña, sea primaria, secundaria o superior. Dice el informe que un profesor de secundaria en Colombia enseña 120 horas al año menos que un profesor de primaria. Pero, en promedio el profesor de secundaria tiene siete estudiantes más en el salón de clases que el profesor de primaria.

El informe de Panorama de la educación 2019 fue presentado en París, el pasado martes. Falta por hacer públicos los resultados de la Prueba PISA realizada en 2018 y en la cual se centran expectativas frente a las apuestas por la calidad de la educación colombiana. Queda una tarea para el Gobierno y es trabajar en la calidad de la educación, en la efectividad y en el fortalecimiento del acceso y la cobertura en la primera infancia.

Por último, como sociedad, romper las brechas salariales, ahora que hay más mujeres con altos niveles de formación, que sus ingresos también se equiparen a los de los hombres, una tarea de las empresas, el Gobierno y la sociedad civil.

Fuente de la noticia: http://elnuevosiglo.com.co/articulos/09-2019-panorama-de-la-educacion-en-colombia-y-el-mundo

Comparte este contenido:

Las lecciones de Ruanda para la educación en Colombia

América del Sur/ Colombia/ 12.08.2019/ Fuente: www.telesurtv.net.

Un país del centro de África con heridas muy profundas de la guerra se ha recuperado con inversión puntual en educación y se proyecta como un territorio para la colocación de recursos, el crecimiento económico y el aumento del turismo

CUANDO se habla de prácticas exitosas en educación los clichés siempre responden a países desarrollados como Singapur (una ciudad), Finlandia, Japón o Estonia, naciones pequeñas y sin cercanía a las realidades colombianas. Por eso, si hay que mirar un país parecido y que nos puede enseñar para pensar la educación, a partir del segundo centenario, es Ruanda.

Ruanda es una pequeña nación africana en medio de las montañas Virunga, es un poco más grande que Cundinamarca. Sin embargo, tiene más de 12 millones de habitantes y una geografía abrupta como la colombiana, que incluye en un pequeño territorio, montañas, volcanes, lagos, mesetas, valles y pisos bioclimáticos desde el cálido, hasta el frío.

El país a pesar de su diversidad tiene una de las historias de horror más grandes de la historia. Una guerra civil que enfrentó a los grupos étnicos, los hutus, la población mayoritaria y que durante el periodo colonial belga padeció la mayor discriminación racial, y los tutsis, más altos, y más claros, por lo que los belgas decidieron co-gobernar con ellos. En los años 60 los tutsi pierden el poder y quedan reducidos a minoría. La venganza de los hutus en la década del 90 termina en una masacre con más de 1 millón de muertos y 2 millones de desplazados, la mayoría tutsis, el país llegó a ser uno de los más pobres del mundo y símbolo del horror.

Hoy, cuando se conmemoran 25 años de la masacre, Ruanda presenta los mejores indicadores educativos del África y recibió el premio a las mejores prácticas educativas que otorga la Comunidad Británica de Naciones. Los logros se pueden sintetizar en los siguientes puntos:

  • Mayores recursos focalizados para educación. No es la frase de cajón de Colombia que afirma que la educación nunca había tenido tantos recursos, pero realmente la mayoría de ellos se van a pagar pensiones, salarios de profesores y en comida. La diferencia es que en Ruanda esos incrementos se miden en aumento de recursos para la elaboración de currículo, compra de libros de texto, capacitación docente, créditos para la educación y así se pueden medir políticas en función de la calidad.
  • Se hizo una nivelación salarial porque se descubrió que los profesores de primaria y preescolar eran peor pagos que los de secundaria. Eso llevó a que se buscara nivelar para llevar profesionales de mejor cualificación a la educación inicial.
  • Las metas que propone el Ministerio de Educación son medibles y cuantificables, incluyen asistencia pedagógica y seguimiento. A diferencia de nuestro país donde cada administración empieza de cero y elimina la memoria histórica y las experiencias exitosas de las administraciones anteriores.
  • Se creó un nuevo currículo que incluyó dotación de materiales de texto y didácticos por parte del gobierno. El fortalecimiento de los acuerdos de paz y la enseñanza de la historia como objetivo de cerrar las heridas fue central. Colombia tiene en eso una responsabilidad central. No podemos eliminar la historia o modificar expresiones para acomodarse a los intereses políticos del gobierno. La negación de las realidades sociales y de los hechos llevaron a Ruanda y Colombia a prolongadas guerras. Los ruandeses lo aprendieron, los colombianos, no podemos perder la oportunidad del fin del conflicto armado.
  • Existe una articulación entre sector empresarial y formación. De ese modo fundaciones y organizaciones religiosas han apoyado las mejoras en infraestructura y en formación docente.
  • En la educación superior se han fortalecido los temas de investigación en las universidades e implementado programas como Financiación Dependiente del Ingreso, es decir, el gobierno financia la educación de estudiantes talento en áreas específicas y cuando ellos se gradúan y emplean, destinan un porcentaje de su salario para que otros estudiantes pueden acceder al beneficio.

En general temas como la paz, el cierre de las heridas del conflicto armado, la inversión en textos escolares, la mejora de la infraestructura educativa, el mantener buenas prácticas y destinar recursos para objetivos claros y medibles son tareas que el sector en Colombia debe revisar, valorar y tratar de implementar.

Fuente de la noticia: https://www.telesurtv.net/news/sindicato-estudiantes-brasil-rechazan-programa-future-se-20190808-0039.html

Comparte este contenido:

Colombia entre los países más innovadores en educación

América del Sur/ Colombia/ 18.06.2019/ Fuente: caracol.com.co.

Sin embargo, el Secretario de la Organización de los Estados Iberoamericanos dice que se debe seguir trabajando en superar la desigualdad.

En el marco del Seminario Internacional: Educación en Primera Infancia en la Era Digital, Mariano Jabonero, Secretario General de la Organización de los Estados Iberoamericanos para la educación, la ciencia y la cultura señaló que la situación de la niñez en la región tiene una calidad baja y cobertura insuficiente y afirmó que, aunque Colombia está por encima de la media, mantiene unos problemas de desigualdades internos.

Jabonero también señala que Colombia debe avanzar en disminuir las enormes brechas que existen entre las zonas rurales y urbanas y entre los que tienen mejores condiciones económicas y los que no.

Sin embargo, destaca que el país en cuanto a primera infancia es “profundamente innovador”, que ha puesto en marcha proyectos de bienestar social que incluso tienen cierta referencia en la región, ubicándose en la misma línea de otros países como Chile, Argentina y Uruguay.

El Secretario también dice que se debe incentivar la lectura en los menores y así despertar las mentes curiosas; añade que los niños a los que sus padres le inculquen el hábito de leer tendrán una aptitud pre-científica, algo que no desarrollará un niño que dura muchas horas en frente de una pantalla digital.

Fuente de la noticia: https://caracol.com.co/radio/2019/06/12/nacional/1560362795_346918.html

Comparte este contenido:

Moisés Wasserman: ¿Es posible que las universidades desaparezcan algún día?

Por: Sebastián Cortés.

Moisés Wasserman, académico, bioquímico e investigador, tiene claros los desafíos que enfrenta la educación en Colombia.

En entrevista con Guía Académica, de EL TIEMPO Casa Editorial, el gurú de la educación colombiana, habló sobre la brecha que existe entre lo público y lo privado, el futuro de las universidades y las redes sociales, entre otros temas.

¿Qué está pasando con la educación en Colombia?

Hay algo positivo y es que la cobertura ha crecido sustancialmente. En básica es total, en media se acerca a eso y en superior llega a ser un poco más del 50%. El lunar es la preescolar, que no llega al 20% y la psicología moderna coincide en que es crucial para el desarrollo posterior. La superior es de 50%, pero en los países de la Ocde supera al 80%. Es decir la situación ha mejorado, no obstante, falta camino.

En la educación superior hay una gran heterogeneidad en la calidad. Ninguna de nuestras instituciones está entre las mejores 500 del ranking de Shanghái, pero sí hay varias públicas y privadas entre las mejores de la región. Sin embargo, la heterogeneidad nuevamente está en contravía de la equidad. Estudiantes con recursos acceden a buena educación privada, los muy capaces a buena educación pública, pero una buena capa de jóvenes se ve ‘a gatas’ para lograr su objetivo: muchos deben asumir deudas onerosas y que les reducen sus posibilidades posteriores de acceder a posgrados y a construir una vida familiar tranquila.

Lo más grave, en todos los niveles, es la inmensa diferencia en calidad y en facilidades de acceso a la educación entre las regiones urbanas y las rurales, empeorando en la medida en que la región rural esté más alejada de los centros urbanos. Hay problemas de acceso, de maestros y de infraestructura. Todos desfavorecen a los estudiantes rurales.

Para el experto, la educación virtual, en un futuro cercano, no reemplaza a la universidad y al maestro.

¿Usamos la metodología de enseñanza adecuada en colegios y universidades?

Hay muchas formas de hacer las cosas bien, y de hacerlas mal. Seguramente hay docenas de metodologías y doctrinas pedagógicas aplicándose en el mundo y no es sencillo decidir cuál es mejor, sobre todo porque los efectos se perciben tardíamente.

Yo diría, sin embargo, que no estamos en la frontera del cambio y de la innovación educativa. Hay colegios y universidades que, como decía antes, son comparables con los mejores de la región, pero tenemos también en esto una gran heterogeneidad, y hay algunos realmente alejados de las tendencias dominantes en el mundo.

¿Cree que las universidades desaparecerán algún día?

Creo que cambiarán, como han venido cambiando de acuerdo con los nuevos retos que se les han presentado en los mil años de su existencia. Lo que pasa es que ahora el cambio es cada vez más rápido. Hay que adaptarse a esta situación y eso significa que hay que cambiar muy rápidamente. Las nuevas tecnologías son a la vez una oportunidad y un reto. Quién sabe si algún día el cambio llegue incluso a que desaparezca la institución formal. De todas formas será reemplazada por otra institución que asuma tareas como laboratorios, talleres prácticos, estudios de campo, y muchos más que no se pueden hacer a distancia ni virtual, ni solitariamente.

¿Qué opinión tiene acerca de la educación virtual?

Creo que es una tecnología muy útil, pero, al menos en el futuro cercano, no reemplaza a la universidad y al maestro. Estudios que han medido su impacto llegan a la conclusión de que de todas formas quien determina la calidad de la enseñanza es el maestro. Quienes piensan que esa tecnología hará mucho más barata a la educación están equivocados, posiblemente la encarecerá. Sí es posible que la haga más cercana a quienes tienen problemas de acceso por vivir en lugares alejados de los centros urbanos.

noticias falsas

Para Wasserman, las redes sociales «tienen peligros y son que así como se informa con gran rapidez puede desinformarse igualmente rápido».

¿La educación en Colombia debería enfocarse en el emprendimiento, en formar mejores seres humanos o en graduar excelentes profesionales para que se vinculen rápido al mercado laboral?

Sin lugar a dudas debe enfocarse en la formación. Mejores personas incluye también seres humanos con una mejor instrucción, que saben más, que conocen el mundo en el que viven y que lo entienden mejor. En la formación, incluyo la artística, la científica, la matemática, la literaria, la filosófica y, por supuesto, también la moral.

Lo que seguro nos espera en el futuro cercano es una obsolescencia acelerada tanto de los trabajos como de las profesiones. Por tanto una persona bien formada se podrá defender porque tendrá las capacidades para autoeducarse. Una persona formada en un oficio podrá quedar desamparada cuando este desaparezca.

¿Las redes sociales están volviendo más inteligentes o más ignorantes a las nuevas generaciones?

Las redes sociales tienen aspectos positivos y otros que lo son menos. Por un lado tienen una extraordinaria capacidad para informar muy rápidamente sobre lo que pasa. Generan también un potencial democrático en el que la gente puede decir su opinión y ser escuchada aunque no tenga el privilegio de tener acceso a medios, ser político, o comunicador. Pero tiene peligros y son que así como se informa con gran rapidez puede desinformarse igualmente rápido. La formación del futuro tendrá que incluir la del buen criterio para distinguir lo bueno de lo espurio.

¿Cuál es el cambio más urgente que requiere la educación colombiana?

Crecimiento en cobertura donde es aún insuficiente (muy seriamente en preescolar y en superior) y crecimiento de calidad de forma que sea más armónico entre público y privado, entre instituciones de alta calidad y las de menor calidad, y entre urbano y rural. Si la oferta de lo público no es tan buena, o más, que la de lo privado, la educación perpetuará la inequidad en lugar de resolverla.

Fuente de la entrevista: https://www.eltiempo.com/vida/educacion/entrevista-con-moises-wasserman-sobre-la-educacion-en-colombia-375448

Comparte este contenido:
Page 1 of 9
1 2 3 9