Por: Centro Integral Lotus
Autoestima es un tema muy discutido y ventilado sobre todo en foros de mujeres. Nos alentamos unas a las otras a amar cada rincón de nosotras y abrazarse ciegamente a ser mujer. Sin embargo, al mismo tiempo aconsejamos sobre como perder peso, como vestir para disimular imperfectos, como corregir el cabello «feo», como evitar tener arrugas. Es muy incierto lo que significa autoestima y vivirlo coherentemente.
Partamos de que autoestima significa una valoración positiva y agradable de uno mismo. Cuando hablamos de auto valorarse no hablamos de algo estético, sino de algo existencial. No referimos a la percepción global que tiene una persona de sí mismo y que tan valioso, preciado o importante se percibe.
Una sana autoestima no es un enamoramiento personal.
Amar no tiene nada que ver con ignorar tus diferencias, tus errores, tus imperfecciones, ni tu pasado.
Aceptar mis perfecciones
La autoestima abarca la realidad completa de una persona y eso incluye su cuerpo, su historia, su relación con otros, sus aciertos, fracasos y recursos. Es imposible que alguien haya tenido puras experiencias satisfactorias y agradables durante todo el trayecto de su vida y de ser así, hablamos de una persona emocionalmente inmadura, pues no ha tenido la oportunidad de adaptarse y superar retos evolutivos. Para hablar de autoestima, no podemos amar todas las partes que nos integran.
Es una utopía exigirte ser perfecta para amarte. No se trata de ignorar tus diferencias, tus errores, tus imperfecciones, ni tu pasado, amar es aceptación. Si amamos a los otros a pesar de sus imperfecciones, ¿ por qué a nosotras mismas no? Amarte no significa ser perfecta.
Autoestima es también aceptar tus raíces, quién eres y cómo eres. Fotos: fuente externa.
Paradoja
El comercial y popular concepto de “amor propio” se ha convertido en una exigencia, una cuasi obligación que ha roto con el verdadero significado de aceptarnos y comprendernos como seres humanos decididamente imperfectos. Es parte de nuestra naturaleza ser limitados, imperfectos y en evolución constante.
La paradoja del cambio es que solo puedo cambiar lo que acepto, esto es, solo puedo transformar lo que existe. Para ser mejor persona debo reconocer mis faltas, si soy perfecto, no tengo nada para que trabajar, esto incluye lo físico. La idea de la aceptación no significa estar de acuerdo ni estar a gusto, sino el poder convivir con la realidad. Es real y lógico que partes de ti no te gusten o las hayas asociado a un significado negativo, tal vez producto del bullying o del rechazo, pero solo a través de la aceptación de esa parte de ti como algo tuyo, lo podrás cambiar.
Inicia un proceso de aceptación personal viéndote como un ser humano digno de ser amado a pesar de sus imperfecciones y digna de amar a pesar de su torpeza.
Inicia contigo. ¡Vivirás en la forma en la que te ames!
Sobre lic. Karem González
Psicologa clínica, egresada Magna Cum Laude de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Completó sus estudios superiores con una Maestría en Psicología de la Salud en la Universidad Antonio de Nebrija, España.
Actualmente culmina una especialidad en Terapia Familiar Sistémica en la UASD. Especialista en diversos abordajes de psicoterapia, con mayor concentración en Dependencias afectivas, Codependencia Clínica y Acompañamiento y manejo de Duelo.
Sobre el Centro Integral Lotus: es un espacio para el bienestar integral del individuo y la familia. Brindan asistencia, evaluación y apoyo en las distintas etapas evolutivas de la persona y el núcleo familiar. A través de un equipo multidisciplinario ofrecen servicios de psicoterapia familiar, infanto- juvenil, individual y parejas. Contactos: Info@centrointegrallotus.com
Fuente e imagen: https://revestida.com/no-tienes-que-ser-perfecta-para-amarte-autoestima.html