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México: La Montaña de Guerrero, un lugar violento para niñas y mujeres

El nuevo sistema de justicia penal no evita la impunidad para casos de violencia contra las mujeres indígenas de la Montaña de Guerrero, donde este 2020 se registraron 5 asesinatos de niñas indígenas y 19 muertes violentas de mujeres, aseguró el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan en su XXVI informe anual “Como una noche sin estrellas”, presentado el pasado 7 de diciembre.


“México, vive momentos terribles de violencia contra mujeres y niñas. Atender, prevenir, sancionar y erradicar la violencia ha sido una tarea difícil. En las comunidades indígenas de la Montaña de Guerrero, la situación de vulnerabilidad que viven las mujeres es grave, por su triple condición: por ser mujeres, pobres e indígenas” detalló Tlachinollan.

De acuerdo con la organización, entre febrero y octubre de 2020 se registraron 19 casos de muertes violentas de mujeres; Tlachinollan actualmente acompaña 7 casos de feminicidios. Durante este período, también se registraron 6 casos de mujeres desaparecidas, 5 casos de niñas indígenas asesinadas, así como 14 casos de agresiones sexuales, la mayoría contra niñas de 9 a 16 años de edad.

A pesar de que desde 2010 la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió una sentencia contra el Estado mexicano por la violación de los derechos a la integridad personal, dignidad, a la vida privada, las garantías judiciales y a la protección judicial en perjuicio de las indígenas de la Montaña de Guerrero, Inés Fernández y Valentina Rosendo, “el difícil camino de las víctimas violentadas para acceder a la justicia a menudo se vuelve un mecanismo de revictimización. Las instituciones de justicia son insensibles al dolor y violencia que viven las mujeres; dilatan las investigaciones, maltratan, discriminan y no les creen- Su palabra y testimonio no cuentan”, observó Tlachinollan.

La organización documentó este 2020 que la primera respuesta del operador de justicia ante la denuncia de las mujeres es la duda. “Se creía que con el sistema penal acusatorio, los formalismos y la burocracia en los procesos se superarían; que las investigaciones serían más ágiles, sin embargo, los problemas siguen siendo los mismos, pues son falencias estructurales no tienen que ver con el modelo procesal penal”, se detalló en el informe.

Pese a la exigencia de las organizaciones civiles que acompañan a las víctimas en la región, persiste falta de peritos del sexo femenino, personal especializado para atender a las mujeres, insensibilidad de las y los agentes investigadores, personal de psicología que desconoce el tema y maltrata a las víctimas, sobrecarga laboral y dilación en las indagatorias, fallas procesales en los actos de investigación e inobservancia de las reglas del debido proceso al realizar los actos de investigación, es una constante, lo que debilita la obtención de condenas y sanciones para las personas responsables.

A esto se suma, de acuerdo con Tlachinollan, que las mujeres indígenas en Guerrero enfrentan situaciones de marginación y de exclusión social. “La crueldad con la que han acabado con la vida de mujeres y niñas ha dejado mensajes claros en el interior de las comunidades indígenas: el dominio lo ejerce el hombre y el papel de la mujer es obedecer sin más. Cualquier osadía se paga con la vida”, señaló.

En su informe, Tlachinollan también documentó distintas violaciones a los Derechos Humanos que ocurrieron este 2020 contra personas defensoras, como Teodomira Rosales, así como contra periodistas (tres asesinados este año) y familiares de víctimas, como las madres y padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa desde 2014.

De acuerdo con lo documentado, al contexto de la pandemia, que retrasó los servicios de atención para la población en Guerrero, en especial para las víctimas, se sumó un incremento en asesinatos y “ajustes de cuentas” entre organizaciones criminales en la región. “En nuestra entidad es donde se han fragmentado más los grupos del crimen organizado, al grado que ahora hay un escenario cada vez más diverso de células rivales, involucradas en un espectro más amplio de negocios ilícitos y formas de control territorial más estrictas y agresivas”, denunció la organización.

Fuente e imagen:  CIMAC Noticias

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Colombia: Alarmante cifra de mujeres en riesgo de feminicidio en Bogotá

América del Sur/Colombia/06-12-2020/Autor(a) y Fuente: www.publimetro.co

La Secretaría Distrital de la Mujer dio a conocer que, en lo corrido de este 2020, han sido valoradas por el Instituto Nacional de Medicina Legal 1.223 mujeres en Bogotá «en riesgo de feminicidio». Solo entre el 1 y el 15 de noviembre de 2020, la entidad valoró 31 mujeres.

Hay que señalar que ellas ya cuentan con seguimiento y acompañamiento jurídico y psicosocial por parte de los diferentes equipos de la Secretaría Distrital de la Mujer.

Otras cifras dan cuenta que, entre enero y noviembre de 2020, en Bogotá han sido asesinadas 87 mujeres (el mismo número de mujeres asesinadas en este periodo de tiempo durante 2019). 14 de estos casos fueron tipificados como feminicidios.

MUJERES EN RIESGO DE FEMINICIDIO EN BOGOTÁ 

Estos datos fueron revelados este viernes, en el marco de la conmemoración del 4 de diciembre -Día distrital contra el feminicidio-, cuando precisamente se cumplen cuatro años del lamentable feminicidio de Yuliana Samboní.

“Esta fecha es una oportunidad para honrar la memoria y la vida de las víctimas de feminicidio. También es la ocasión de condenar este delito y rechazar esta máxima expresión de violencia ejercida contra las mujeres. Por eso la invitación es a dar el primer paso, porque el feminicidio es prevenible si Estado y sociedad actuamos en conjunto”, afirmó Diana Rodríguez Franco, Secretaria Distrital de la Mujer.

Fuente  e Imagen: https://www.publimetro.co/co/noticias/2020/12/04/mujeres-en-riesgo-de-feminicidio-en-bogota.html

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Semiótica de los feminicidios

Por: Fernando Buen Abad Domínguez

En el comportamiento hacia la mujer, botín y esclava de la voluptuosidad común, se manifiesta la infinita degradación en que el hombre existe para sí mismo… Del carácter de esta relación se desprende en qué medida el hombre ha llegado a ser y se concibe como ser genérico, como ser humano: la relación entre hombre y mujer es la más natural de las relaciones entre uno y otro ser humano”. C. Marx

Pocas formas del asesinato poseen más carga simbólica que los feminicidios. En ellos se coagula un poliedro de fenómenos  históricos degradantes, cocinados en las entrañas del poder hegemónico más podrido. Lo ya de suyo macabro, en lo particular, trasciende y salpica al contexto mientras destruye los mejores valores colectivos amasados durante milenios. En el asesinato alevoso de mujeres, niñas o adultas, reina una moraleja pútrida que se ha dejado macerar para que haga metástasis en todo el cuerpo social y nos deprima, nos agobie, nos cancele todo futuro. No es un problema nuevo ni ingenuo. Se lo ha dejado progresar para hacernos sucumbir en los pantanos del pesimismo donde no hay salida porque convence al mundo de que las mujeres nada valen.

Hay geopolíticas macabras emblemáticas, como las “Muertas de Juarez”, y también hay paradigmáticos, como los crímenes incontables silenciados en la intimidad de la gente “pudiente”, abrigada con impunidad mediática a fuego. Violencia de género que siempre ha sido tolerada como un derecho de machos, cultivado en la nervadura ideológica de la burguesía que fue siempre permisiva y siempre impune. La violencia contra las mujeres en los hogares, en las parejas o en cualquier forma de las relaciones de producción, no es otra cosa que un crimen social tolerado largamente. No hay seguridad para las mujeres que conviven con hombres orgullosos de ser violentos. Hay muchas patologías fúnebres en el “sistema patriarcal” que se repite en las casas, las empresas, las oficinas, las iglesias, las calles y en todo lugar. La mitad de los asesinatos de mujeres, por razones de género, no se esclarece. ¿Hay que llamar a la palestra a Henri Désiré Landru? ¿A Thomas De Quincey con su “On murder considered as One of the Fine arts” (Sobre el asesinato considerado como una de las bellas artes)?

Si alguien pretende reducir lo macabro del feminicidio a “episodios aislados”, de “locura individual”; reducirlo a un tema de debate en sesudas “sobremesas” a propósito de la violencia “de unos cuantos”, en vez de abrir el cuestionamiento al capitalismo todo. Si alguien pretende tal reduccionismo, debe saber que muchas mujeres morirán mientras nosotros discutimos porque, para ellas, la vida depende de la comunidad, de la defensa colectiva de su integridad, de su cuerpo y su dignidad. Y tal defensa depende de destruir el poder patriarcal hegemónico desde sus fuentes ideológicas, en sus fuerzas opresoras concretas y en el consenso ético y jurídico que lo protege; desde la familia y en su forma más horrorosa del Estado Nacional que perpetúa la supremacía machista para, a través de la violencia, lograr la posesión, la colonización y la destrucción de las mujeres. Buñuel lo retrató muy bien en más de una de sus películas.

La violencia que asesina mujeres es un producto más de la ideología de la clase dominante infestada con mentiras y perogrulladas. Se trata de violencia basada, incluso, en el miedo a que las mujeres sean “superiores”. Eso es intolerable para el poder machista. El asesinato de mujeres tiene relación íntima con un sistema social basado en desigualdades por el hecho, incluso, de pertenecer al “sexo débil”. Es un problema creciente. Históricamente se aceptó que el vínculo entre hombres y mujeres conlleva una licencia para abusar. Fueron silenciados miles de episodios de violencia real, plenamente asimilada en la vida cotidiana. El extremo de esa pedagogía de la violencia es el permiso reservado para la industria de la pornografía que vende la imagen de mujeres dispuestas siempre a soportar, una y otra vez y para siempre, cientos y cientos de vejaciones. Estímulo audiovisual para la violencia sexual, la violación y el asesinato perpetrado, en el fondo, por los valores morales del establishment retrógrado que mercantiliza a las mujeres y las somete al absolutismo lujurioso del placer machista… hasta el asesinato. Un placer de la carne humana en su forma más deshumanizada. Como ocurre en muchos matrimonios.

No es ilógico que, en cada feminicidio, esté anidada una moraleja y una simbología contra la sociedad condenada a ser esclava de la supremacía conservadora que es, a su vez, un campo de concentración ideológico lleno de víctimas muertas. Y nadie parece poder frenarlo. Falta mucha investigación sobre las causas, de manera fundamentada y rigurosa. Investigaciones históricas en torno al feminicidio sobre un escenario histórico de desigualdad genérica. Son asesinatos que simbolizan la misógina extrema, e histórica, orientada a producir más explotación y más subordinación de las mujeres. El significado es tan terrible por lo complejo como por lo macabro. Simboliza la moral de los cuchillos, las pistolas y las trompadas destinadas a la piel de las mujeres reducidas a un genital despreciado que puede herirse bajo la complicidad cultural del establishment. El mensaje lumpen del feminicidio es “que no importa lo que le hagan a una mujer y de cuántas maneras la lastimen, a ella le va a gustar” (Andrea Dworkin). Hay un cancionero amplísimo que lo avala y lo repite hasta el hartazgo. Con tríos, mariachis, regetones o bandas de rock.

He aquí el tiempo de los asesinos. Es una atrocidad histórica como las bombas sobre Hiroshima y Nagasaki, como Vietnam o como Irak. Son crímenes de lesa humanidad que simbolizan violación, mutilación y humillación, usadas con placer de clase incluso promovidos por los “mass media”. Es la industria de una semiótica fúnebre generada como insulto de clase contra la conciencia humana. Las muertas se reducen a estadísticas que nadie quiere conocer y se apilan en una zona oscura de la memoria colectiva para que no estorben antes, durante y después del asesinato próximo. Por cierto la palabra “feminicidio” también sirve, paradójicamente, para esconder el horror parido por el capitalismo. Por eso la difunden con furor algunos moralistas conservadores que se escandalizan, sólo, mientras llega la publicidad de turno. En los feminicidios habita la violencia como solución final que evidencia el anhelo de dominar al otro aniquilarlo. Ejercicio de un poder auto conferido para conducir a la víctima a la totalización de la negación. Poder enano pero poder omnipotente cuya violencia es siempre respuesta aterradora ante el exhibicionismo del poder así sea efímero y robado.

¿Qué significa esto? Una sociedad que tolera y no combate, decididamente, la degradación humana, la violencia y el asesinato, fomenta lo macabro y lo hace crecer. Nos acostumbra a que nada de esto es “grave”, que es parte del “paisaje”, que es una calamidad con la que vivir sin escandalizarse. Que ya nada importa, ni el saqueo, ni la explotación, ni la corrupción. Es el marco perfecto para toda degradación imaginable. Pero la vida es otra cosa y no se debe bajar la guardia, hay que identificar el dolor de la brutalidad sistematizada y luchar organizadamente en su contra. Gran parte de ese dolor es ocasionado por un sistema económico e ideológico diseñado para someternos a todas las patologías del poder. En lo general y en los casos específicos. Es vital luchar contra los feminicidios antes de que la indolencia nos haga cómplices de la lógica que asesina a mujeres. Y pueblos.

Todos los asesinatos de mujeres dejan una marca indeleble en la memoria de los pueblos, dejan tatuada una referencia que desnuda a la cultura y a los valores dominantes. Los asesinos actúan impregnados con los tufos más fétidos y complejos de la ideología del poder dominante y son criaturas dolidas de ser “la gente normal”, de ser humanos de carne y hueso pero hambrientos de poder. Los feminicidios son intentos de dominación monstruosa cuya empatía mediocre conduce a la nada del otro, a la condición de víctima irremediable ahogada con el carisma ideológico del verdugo. La víctima es la realización del exterminio pletórico de un rol macabro en el proceso morboso del homicida y cierta fascinación insólita de origen social siempre en la lógica criminal. Funciona como alegoría amarga de la realidad política, su cultura y valores. Es un poderoso tufo de brutalidad a veces  disfrazado de amor.

Es urgente desarrollar la investigación, el interés semiótico por el homicidio de mujeres. Desarrollar la crítica de cuanto signifique para ser intervenido semióticamente. Cuando un feminicidio está en desarrollo (antes, durante y después de cometido) llega a nosotros inyectado semánticamente con todos los medios. Necesitamos una teoría de acción semiótica que identifique que el asesinato como “sentido” destinado a causar golpes de azoro ¿de qué, a quién? A la víctima al victimario, a quien analice los hechos y sienta compasión por el dolor ajeno y el temor por sufrir lo que lo conduzca a cierto estado de miedo. La representación del asesinato y su realización verdadera deben conocerse desde sus entrañas semánticas. En el alma de las primeras expresiones de pena por quienes han perecido, en el epicentro del tiempo, en la vehemencia de la pasión donde es inevitable examinar y evaluar los aspectos textuales y contextuales, su estética, sus valores comparativos, los móviles y fuentes. Semiótica del feminicidio en las circunstancias que lo hacen índice de efectos  sociales, misterio, venganza…dominio.

Semiótica de los actos secuencias en un feminicidio como plan de horror sobre un plano de las ideas que se ha hecho “natural” porque aniquila y degrada la grandeza de los seres humanos, porque exhibe cierta naturaleza humana abyecta y humillante. Semiótica de la víctima que no lo es sólo del asesinato sino de la cultura, también, de sus sentimientos, del pensamiento, del flujo y reflujo de la pasión criminal sistémica encarnada en un asesino que, también, es víctima del proceso de la muerte generada y que lo aplasta todo con su mazo ideológico. En el asesino habita una semiosis violenta como tormenta de pasión, celos, ambición, venganza, odio… un infierno en él;  y donde nosotros todos habitamos Sale por la tele.

Nos urge una mayor sensibilidad científica ante el horror. ¿Cómo enfrentar semióticamente algo que condenamos moralmente? ¿Todos podríamos sentir impulsos homicidas en algún momento? Nos urge una semiótica detective, crítica que intervenga y transforme. No aceptemos ser superficiales, semiótica como instrumental para desactivar las emboscadas ideológicas burguesas y los fines que fomenta, la cultura, las facultades del espíritu feminicida capitalista que se infiltra en la poesía, la pintura, la música, el cine, que representan el asesinato y crean un placer -y no un rechazo- por tantos crímenes a destajo exhibidos como entretenimiento en todos partes. Placer por el espectáculo mismo de matar, que sea perfecto e impune, el crimen perfecto. Cuando alguien asesina a una mujer, muere su racionalidad íntegramente, su racionalidad creativa, interactiva, plural, dialéctica. Aunque pase en las películas o en las series de Netflix o de Amazon.

Por ejemplo: Los niños que se exponen excesivamente a la violencia en la televisión tienden a ser más agresivos. Algunas veces, el mirar un sólo programa violento puede aumentar la agresividad. Los niños que miran espectáculos en los que la violencia es muy realista, se repite con frecuencia o no recibe castigo, son los que más tratarán de imitar lo que ven. Los niños con problemas emocionales, de comportamiento, de aprendizaje o del control de sus impulsos puede que sean más fácilmente influenciados por la violencia en la TV. El impacto de la violencia en la televisión puede ser evidente de inmediato en el comportamiento del niño o puede surgir años más tarde y la gente joven puede verse afectada aun cuando la atmósfera familiar no muestre tendencias violentas. Esto no indica que la violencia en la televisión sea la única fuente de agresividad o de comportamiento violento, pero es ciertamente un factor contribuyente significativo. (American Academy of Child and Adolescent Psychiatry)

La esencia humana reclama su emancipación revolucionando las relaciones sociales. Eso requiere un humanismo producto de su propia praxis transformándose también en sus propias circunstancias. Humanismo pleno, histórico y creador. Tal humanismo no pudo nacer sino en el corazón mismo de la barbarie capitalista, es su contradicción más aguda. Está llamado a ser fuerza emergente superadora de una etapa histórica mayormente “deshumanizada”, vergonzosa y macabra. Humanismo que debe recoger lo mejor de los seres humanos para hacerse nuevo en nosotros y con nosotros. Humanismo como una concepción lógica de la política y como ética de lo colectivo. Una idea de lo humano que, por tanto, al no echar la filosofía por la borda, permite distinguir con claridad los territorios de sus luchas más concretas e inmediatas. De lo que se trata es de acrisolarlo en la praxis. Estamos a tiempo. Lo peor que puede pasarnos es ser derrotados por la irresponsabilidad, propia y ajena. Ya tenemos suficientes diagnósticos sobre la guerra mediática burguesa; ya tenemos suficientes consecuencias deleznables y excesiva mediocridad y miseria comunicacional. Ya sabemos cómo se entrena, se organiza, se financia y celebra los triunfos la clase que domina las riquezas, el trabajo y las cabezas de la inmensa mayoría de los seres humanos. Ya sabemos de qué es capaz, en lo objetivo y en lo subjetivo, la ideología de la clase dominante para garantizar la enajenación, el saqueo y la explotación.

Urge una guerra abierta contra los prostituyentes, proxenetas y puteros (disfrazados de lo que se disfracen) que reducen a las mujeres a objetos de posesión para cumplir fantasías y placeres que las convierte en “bienes y servicios”. En las sociedades capitalistas hay emboscadas simbólicas (juzgados, fiscalías, academias, iglesias…) que disfrazan al asesino y lo convierten en derecho de dueños o “clientes” de mujeres que en realidad son cómplices activos de la “industria” del odio que crece y se multiplica en feminicidios. Un sistema de “consumidores” de mujeres. Aunque asesinen.

Fuente e imagen tomadas de: https://rebelion.org/semiotica-de-los-feminicidios/

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Ecuador: Violencia en la casa

La violencia intrafamiliar este 2020 ha encendido las alarmas en el contexto del coronavirus. Mas, esa pandemia oculta, que es la agresión en casa, trasciende en Ecuador al confinamiento que supuso el covid-19.

¿Pandemia oculta? Sí, histórica. Hay que revisar los registros del ECU 911. Del 1 de marzo al 31 octubre del 2020, en medio del covid, el sistema recibió 73 961 emergencias por violencia intrafamiliar. En igual período del 2019 se reportaron 83 112; hubo 71 383 en los mismos ocho meses del 2018; en promedio, 300 víctimas por día. ¡Escalofriante!

¿Emergencias? “Mujeres encerradas en clósets, escondidas bajo la cama llamaron pidiendo auxilio”, reseña Fundación Aldea. Este 25 de noviembre del 2020, el Día de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer -para tomar acción contra la violencia de género- ha encontrado a Ecuador con 101 feminicidios (del 1 de enero al 16 de noviembre , Aldea), con 95 084 reportes de violencia intrafamiliar (enero – octubre, ECU 911)…

¿Feminicidios? Sí. La máxima expresión de la violencia machista. Crímenes perpetrados por hombres que se arrogan la perversa idea de “propiedad” sobre los cuerpos de las mujeres al punto de segar sus vidas. Muertes atroces en una sociedad que trata como “asuntos de pareja” o “problemas de casa” la recurrente vulneración de derechos.

¿Derechos? Sí. A la equidad de género; a que no se naturalice la subordinación al hombre: en el trabajo, educación, familia… En Ecuador hay un feminicidio cada 72 horas. En el 66,3% de casos los feminicidas eran las parejas o exparejas; en el 7,9%, padres o padrastros (Aldea, 2020). ¿Niñas víctimas? Sí, seis menores de 5 años muertas este año. 98 niños en la orfandad sin su madre. Señores, la Ley para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra la Mujer está escrita; es tiempo de que el Estado la desempolve del librero y que este año sí asigne recursos para cumplir lo que allí reza: diseñar una política pública con enfoque de género en educación, en salud, en seguridad, en inclusión, en trabajo… ¿Es tiempo? Sí, aún si ya no quedan ministros “feministas”.

Fuente: https://www.elcomercio.com/app_public.php/blogs/derechos-y-humanos/violencia-casa-feminicidio-ley-recursos.html

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México: Ausentes, resultados por desaparición de mujeres y violencia en informe de AVG

Texto: Angélica Jocelyn Soto Espinosa / Foto: Hazel Zamora Mendieta

Sin reducción en desaparición de mujeres ni en feminicidio, el gobierno de la Ciudad de México informó resultados sobre el primer año de su autodecretada Alerta de Violencia de Género (AVG).

El gobierno de la CDMX presentó este 22 de noviembre el “Informe Anual de la Declaratoria de Alerta por Violencia contra las Mujeres y las Niñas a un año de su implementación”.

Esta AVG se publicó oficialmente el 25 de noviembre de 2019, pero no corresponde con una decisión de la Secretaría de Gobernación (como es el caso del resto de AVG en el país), sino que fue autodecretada por la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, a fin de evitar la declaratoria oficial de una AVG que solicitaron las organizaciones civiles desde 2017 por feminicidio y desaparición, y cuya resolución permanece en litigio en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a espera de que la ministra Ana Margarita Ríos Farjat prepare y presente un proyecto al respecto.

Al presentar los avances de su AVG, la jefa de gobierno hizo el balance de las 11 acciones que la integran y dejó fuera las recomendaciones que derivaron del Grupo de Trabajo para la AVG que solicitaron las organizaciones. Este fue el balance:

1. Compromiso: Presentar la iniciativa de ley para la creación del Registro Público de Agresores Sexuales.

Avance: el Registro Público de Agresores Sexuales está listo y en espera de que el Poder Judicial dicte sentencias ejecutorias para iniciar su integración.

2. Compromiso: Exhortar al Congreso de la Ciudad de México para la aprobación de la iniciativa de la llamada “Ley Olimpia” que sanciona el acoso y la violencia digital, así como la iniciativa de ley por la que se crea el Banco de ADN para uso forense, para la persecución de delitos sexuales.

Avance: La Ley Olimpia para la CDMX fue aprobada en diciembre de 2019, y desde entonces se han iniciado 600 denuncias a octubre del 2020. Sin ninguna sentencia. El Banco de ADN, por otra parte, permanece en construcción y se espera que comience a operar a inicios de 2021.

3. Compromiso: Fortalecer las Unidades Territoriales de Atención y Prevención de la Violencia de Género o también llamadas LUNAS.

Avances: Las Lunas brindan atención presencial en las 16 Alcaldías, al corte de octubre, hemos llevado a cabo 51 mil atenciones; sin embargo, como documentó Cimacnoticias en diciembre de 2019, las abogadas que conforman estas unidades sólo dan asesorías y no pueden litigar ningún caso.

4. Compromiso: Enviar la propuesta para incorporar en la iniciativa de Ley de la Fiscalía la obligación de certificar a ministerios públicos, asesores jurídicos y peritos en la atención de mujeres víctimas de violencia.

Avances: la jefa de gobierno no informó ningún avance en esta acción en específica.

5. Compromiso: incrementar el número de senderos seguros del Programa “Camina Libre, Camina Segura”, con el objetivo de erradicar la incidencia delictiva, mejorar las condiciones de seguridad de las mujeres y fomentar el disfrute del espacio público.

Avance: se construyeron 139 Senderos Seguros

6. Compromiso: Fortalecer las acciones del Programa “Viajemos Seguras y Protegidas” en el transporte público y por plataformas.

Avance: se “intervinieron” 27 Centros de Transferencia Modal (CETRAM) y siete líneas del Metro, y se instalaron 15 mil 500 kits de seguridad en unidades de transporte público.

7. Compromiso: Mejorar los espacios físicos y de atención a mujeres en la procuración de justicia para una atención más rápida, cálida y digna.

Avance: Se remodelaron de manera integral siete Fiscalías Especializadas y cinco sedes de las Lunas, además se construyeron tres nuevas unidades para la atención de delitos sexuales.

8. Compromiso: Establecer una estrategia de formación integral de cuerpos policiales con perspectiva de género y de derechos humanos.

Avance: a partir de la Declaratoria se ha capacitado en perspectiva de género y de Derechos Humanos a 51 mil 257 elementos policiales, 46 mil de ellos pertenecientes a la Secretaría de la Seguridad Ciudadana, y el resto a la Fiscalía General de Justicia.

9. Compromiso: Conformación una auditoría social de procesos en materia de procuración de justicia.

Avance: en 2019 se seleccionaron a 47 personas ciudadanas para ser Observadores Ministeriales Ciudadanos y se capacitó con perspectiva de género, pero se desconoce su desempeño a un año de la AVG porque la jefa de gobierno no informó al respecto en su balance.

10. Compromiso: Creación de la Unidad Especializada de Género en la Secretaría de Seguridad Ciudadana para la atención integral y oportuna de delitos cometidos en contra de las mujeres.

Avance: a partir del inicio de operaciones de la Unidad Especializada en Género de la Secretaría de Seguridad Pública se han procesado 423 carpetas de investigación, de las cuales han concluido 161.

11. Compromiso: Generar campañas masivas para visibilizar y sensibilizar a la sociedad respecto del problema de la violencia hacia las mujeres.

Avance: No se proporcionó información oficial al respecto.

Acciones por feminicidio y desaparición permanecen pendientes

A pesar de los resultados del informe, en este primer año de la AVG local la violencia feminicida se mantiene a la alza. De enero a septiembre de 2020 se registraron 58 víctimas de feminicidio, lo que representa 11 casos más que en el mismo periodo de 2019.

Asimismo, el 2019 terminó con 241 niñas y mujeres desaparecidas y no localizadas en toda la Ciudad pero para noviembre de 2020, la cifra creció a 398 casos, de acuerdo con la versión pública del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas.

La propia Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México emitió a lo largo de este año al menos dos Recomendaciones para la Fiscalía General de la CDMX, el Poder Judicial y la Secretaría de Protección Ciudadana y Seguridad Pública de la capital por violaciones a los Derechos Humanos de las familias de mujeres asesinadas y desaparecidas, sin que por ello la AVG de la Ciudad contemplara acciones específicas para la atención de estos delitos.

De acuerdo con la abogada feminista, y directora de la organización Justicia Propersona, Ana Yeli Pérez Garrido, las organizaciones peticionarias de la AVG federal participan en una mesa de seguimiento de “las Alertas” la cual busca, entre otros objetivos, generar un plan estratégico que determine cuál serían las acciones prioritarias para la implementación y seguimiento de las AVG en la Ciudad de México.

Entre las prioridades que han identificado las organizaciones que conforman esta mesa está la creación de un mecanismo de implementación y seguimiento de las órdenes de protección que se dictan a mujeres víctimas de violencia feminicida y que la Fiscalía cuente con una área encargada de dar seguimiento a estas órdenes.

En el tema de feminicidio, la prioridad era la creación de una Fiscalía Especializada. Si bien ésta ya existe, precisó la abogada, aún está en reacomodo y no cuenta con el personal suficiente para operar.

De acuerdo con una solicitud de información hecha por Cimacnoticias, hasta mayo de 2020, la recién creada Fiscalía de Investigación del Delito de Feminicidio no contaba con partida presupuestal asignada, por lo que su operación corre a cargo de una bolsa llamada “costos compensados” que implica reducir recursos a otras áreas para la operación de esa nueva.

Para esa fecha, además de la Fiscal, Sayuri Herrara, sólo un Ministerio Público y 1 administrativo era todo el personal comisionado para su funcionamiento. De acuerdo con la Fiscalía, 22 personas más entre administrativos, MP y oficiales de otras dependencias prestarían sus servicios a la Fiscalía Especializada en lo que terminaba de consolidarse.

Y en el tema de desaparición, aún debe actualizarse al Protocolo Alba, para la búsqueda inmediata y localización de mujeres, niñas y adolescentes no localizadas o desaparecidas. Actualmente este protocolo mantiene los criterios establecidos en la administración anterior y establece como primera fase la búsqueda administrativa (papeleo) en lugar de la búsqueda en campo y con vida.

A decir de la abogada feminista, el informe de ayer que ofreció la Jefa de gobierno dejó fuera estos temas y sólo se rindió cuentas de las acciones que conforman la AVG local, o autodecretada por el propio gobierno capitalino.

Fuente e imagen:  CIMAC Noticias

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México: Denuncian agresiones sexuales de la Policía en protesta feminista en Cancún

América del Norte/México/15-11-2020/Autor(a) y Fuente: www.publimetro.co

Activistas y periodistas agredidos en la protesta feminista contra la violencia de género que fue reprimida a tiros por la Policía, el pasado lunes por la noche en Cancún, denunciaron este miércoles agresiones sexuales por los agentes.

Los afectados se presentaron en la vicefiscalía general del estado de Quintana Roo para ratificar sus denuncias por lesiones, abuso de autoridad, privación ilegal de la libertad, tortura, amenazas, omisión, homicidio en grado de tentativa, robo a mano armada, entre otros delitos.

Julián Ramírez, director del Colegio Kukulcán y maestro de Bianca Alejandrina Lorenzana Alvarado, conocida como Alexis y cuyo feminicidio provocó las protestas, aseguró que en el caso de algunas mujeres detenidas también hubo agresiones sexuales.

«Escuché los gritos de compañeras, mujeres detenidas que gritaban que las soltaran y que no las pegaran, ‘déjame de golpear y sácame las manos eran sus gritos», relató a medios el profesor.

Con lesiones en el rostro y en el cuerpo, el maestro de Alexis relató lo sucedido en la explanada central del Palacio Municipal de Cancún, y explicó la forma en la que fueron detenidos y más tarde trasladados junto con siete mujeres a las instalaciones de Seguridad Pública Municipal y luego a la vicefiscalía, a través de unos patios que comunican ambas dependencias.

DENUNCIAN AGRESIONES SEXUALES DE LA POLICÍA EN PROTESTA FEMINISTA EN CANCÚN

Para Cecilia Solís, periodista con más de 20 años cubriendo nota roja, el exceso de fuerza que aplicó la Policía municipal de Cancún fue algo que jamás había visto.

«Estoy muy impactada, voy poco a poco tomando conciencia de lo que pasó, al principio por el trabajo, que siempre hemos estado movidos, no había tomado tanta conciencia, pero ahora me han ido explicando tantas cosas que la verdad estoy asustada e impactada», comentó.

La mujer aseguró que «el ataque fue directo», pues le dispararon hacia la pierna cuando ella corría para intentar ponerse a salvo.

Fuente e Imagen: https://www.publimetro.co/co/mundo/2020/11/11/agresiones-sexuales-de-la-policia-en-protesta-feminista-en-cancun.html

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México: Policía de Cancún dispara contra mujeres que exigían justicia por feminicidios

Encapuchados, con chalecos antibalas y armas largas, alrededor de 50 policías municipales dispararon durante varios minutos frente al Palacio Municipal de Cancún para dispersar una protesta de mujeres, quienes exigían justicia por tres feminicidios registrados el fin de semana en Quintana Roo.

Mujeres protestaron por el feminicidio de Vianca Alejandría, las inconformes realizaron pintas en el edificio del gobierno local pero fueron agredidas por policías que salieron del lugar haciendo disparos al aire, se habla de una persona herida, varias de las manifestantes fueron detenidas. FOTO: ELIZABETH RUIZ/CUARTOSCURO.COM

Al menos dos periodistas que cubrían la manifestación resultaron heridos por las balas, las cuales fueron disparadas a mansalva por los uniformados que aparecieron repentinamente cuando las mujeres se aproximaban a entrar al edificio principal del Palacio Municipal.

Los policías abrieron fuego a tiro limpio y persiguieron y golpearon a quienes trataban de grabar la agresión, así como detuvieron e intentaron quitar teléfonos y cámaras a los periodistas en la protesta.

Mujeres protestaron por el feminicidio de Vianca Alejandría, las inconformes realizaron pintas en el edificio del gobierno local pero fueron agredidas por policías que salieron del lugar haciendo disparos al aire, se habla de una persona herida, varias de las manifestantes fueron detenidas. FOTO: ELIZABETH RUIZ/CUARTOSCURO.COM

De acuerdo con la periodista Paola Chiomante, del periódico Novedades, los policías dispararon desde la azotea del Palacio Municipal y gritaron “ahora si van a valer madres las pinches mujeres” cuando entraron en la plaza.

La protesta fue convocada por la Red Feminista de Quintana Roo y congregó a alrededor de 2 mil jóvenes que exigían justicia al fiscal Óscar Montes de Oca, al gobernador Carlos Joaquín González y la alcaldesa “Mara” Lezama, acusados de dedicarse al “cuidado de la imagen” de Cancún y no a la seguridad y protección de las mujeres.

Las autoridades de Cancún y del estado se deslindaron de los hechos, por lo que nadie asumió la responsabilidad de la brutalidad policial. Sin embargo, Lezama informó que fue separado de su cargo el director de Seguridad Pública de Cancún, Eduardo Santamaría, para proceder con la investigación oficial de los hechos.

Con información de El País y El Universal

Fuente: https://desinformemonos.org/policia-de-cancun-dispara-contra-mujeres-que-exigian-justicia-por-feminicidios/

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