América del Norte/Estados Unidos/Octubre de 2016/Fuente: Banco Mundial
Durante una cumbre precursora en el marco de las Reuniones Anuales del Fondo Monetario Internacional y del Grupo Banco Mundial, nueve países prometieron hoy emprender una serie de importantes inversiones dirigidas a reducir notablemente el retraso en el crecimiento infantil y a dotar a decenas de millones de niños pequeños de las habilidades necesarias para prosperar en un mundo que cambia aceleradamente. Se prevé que estos compromisos contribuyan al crecimiento económico en el futuro, ya que permitirán preparar a las personas —en la primera infancia— para los empleos que les esperan.
“La nutrición deficiente, las escasas oportunidades de aprendizaje y estimulación tempranas, y los ambientes tóxicos programan, literalmente, a niños pequeños para no aprovechar las oportunidades de aprender y, con posterioridad, de ganar un buen sueldo”, dijo Jim Yong Kim, presidente del Grupo Banco Mundial. “Pero cuando los jefes de Gobierno y los ministros de Hacienda se comprometen a combatir el retraso en el desarrollo y a cultivar el poder que encierra el cerebro de los niños, podemos evitar crisis futuras que impidan a las personas y a las economías alcanzar su pleno potencial”.
Hablando en representación de un país en que el 47 % de los niños menores de cinco años padecen retraso en el crecimiento a causa de la malnutrición crónica, el presidente de Guatemala, Jimmy Morales, dijo: “Si nuestros niños no tienen buena salud y no están bien nutridos, no estarán en condiciones de asistir a la escuela y no podrán aprender bien; en la edad adulta, no podrán encontrar empleos buenos y bien remunerados, por lo que no tendremos una sociedad productiva, saludable y segura. Por esta razón, para mí, para mi Gobierno y para mi país, la prioridad más importante durante mi mandato es reducir en 10 % el retraso en el crecimiento”.
El primer ministro de Côte d’Ivoire, Daniel Kablan Duncan, dijo: “Côte d’Ivoire espera conseguir un crecimiento económico, social y cultural dinámico. Este desarrollo no es posible si no se desarrolla el capital humano, principal riqueza de toda nación. Esta conciencia nacional ha puesto de manifiesto la necesidad de dar prioridad a la primera infancia para lograr un crecimiento cada vez más inclusivo y la prosperidad compartida”.
En el mundo hay 156 millones de niños menores de cinco años que sufren malnutrición crónica; tan solo la mitad de todos los niños de entre tres y seis años tienen acceso a educación preescolar, y al cumplir los tres años, los niños provenientes de las familias más acomodadas han escuchado hasta 30 millones más de palabras que los niños de las familias más pobres. Además, según un informe reciente del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el número de niños refugiados ha aumentado 77 % en cinco años. Es más, en un informe de Lancet publicado ayer se señala que, según estimaciones, en África al sur del Sahara el 66 % de los niños corren el riesgo de tener un desarrollo deficiente debido al retraso en el crecimiento y a la pobreza, mientras que en Asia meridional dicha estimación es del 65 %.
La situación se torna crítica a medida que una economía mundial cada vez más digital confiere gran importancia a la capacidad para razonar, aprender, comunicarse y colaborar. Sin embargo, nuevas pruebas muestran que durante un breve período en la primera infancia el desarrollo del cerebro tiene un profundo impacto en estas habilidades, tanto para las personas como para las economías. El Grupo Banco Mundial estima que hoy en día el producto interno bruto per cápita de los países de África al sur del Sahara y de Asia meridional sería 9 % y 10 % superior si hubieran eliminado el retraso en el crecimiento cuando los trabajadores actuales eran niños.
Conscientes de que la nutrición, la estimulación y un ambiente saludable para los niños pequeños influyen directamente en el aprendizaje, la salud, el comportamiento, los ingresos y el desarrollo económico nacional, el primer ministro de Côte d’Ivoire y los ministros de Hacienda de Camerún, Etiopía, Indonesia, Madagascar, Pakistán, Senegal y Tanzanía prometieron tomar firmes medidas en sus respectivos países en varios frentes a fin de poner a decenas de millones de niños en el buen camino.
DECLARACIONES DE LOS PAÍSES:
Camerún: El Gobierno de Camerún se ha comprometido firmemente a invertir en la primera infancia en el país, con miras a mantener su acelerado crecimiento económico y social. Esperamos reducir la tasa de malnutrición crónica de los niños menores de cinco años, del 32 % al 25 % para 2019. Para lograr estos resultados, continuaremos aplicando un enfoque multisectorial que genere sinergias entre nuestros programas de educación, salud y protección social, centrándonos particularmente en las regiones del norte y el oriente del país.
Côte d’Ivoire: En mayo de 2016 pusimos en marcha el Plan Nacional Multisectorial para la Nutrición, que movilizará USD 470 millones a fin de aumentar las inversiones en nutrición; de esta cifra, el Gobierno de Côte d’Ivoire financiará USD 70 millones. Las autoridades deben garantizar el acceso universal a servicios esenciales para el desarrollo de los niños pequeños.
Etiopía: La Asociación Financiera Internacional (AIF) ha brindado un respaldo y una colaboración fundamentales en nuestros esfuerzos para abordar los desafíos que plantea nuestra agenda para la primera infancia. Continuamos avanzando con USD 150 millones adicionales para un proyecto de salud que incluye un importante componente de nutrición. También hemos solicitado recursos adicionales por un monto de USD 900 millones en apoyo de la agenda para la primera infancia en lo que respecta a educación y protección social. Complementaremos estos esfuerzos a nivel nacional con USD 600 millones para servicios descentralizados a fin de apoyar los servicios locales en los sectores de salud, educación y agricultura.
Indonesia: Indonesia lleva adelante varias iniciativas orientadas a mejorar los resultados en la primera infancia, que incluyen un programa de transferencias monetarias condicionadas para incentivar cambios de comportamiento y promover el desarrollo infantil, y un fondo destinado específicamente a apoyar la educación en la primera infancia. Indonesia también mejorará la eficacia de las instituciones mediante la adopción de políticas armonizadas y una mejor coordinación entre distintas instituciones gubernamentales y la sociedad civil.
Madagascar: Hemos dado prioridad a los sectores sociales, y centrado la atención específicamente en medidas que mejoren la situación de las madres y los niños. El Ministerio de Educación está elaborando una nueva estrategia sectorial que incluye la educación preescolar. Estamos probando diversos tipos de intervenciones para reducir la malnutrición crónica, y nuestra política de protección social incluye transferencias monetarias condicionadas para incentivar a los niños a asistir a la escuela y a las madres a participar en actividades de estimulación de los niños pequeños.
Pakistán: Pakistán planea fortalecer el liderazgo político y los mecanismos institucionales, y llevar adelante intervenciones prioritarias relacionadas con la primera infancia, a través de diversos sectores clave y en gran escala. Planeamos innovar y establecer alianzas con el sector privado mediante la utilización de financiamiento público, y comprometer mayores recursos financieros del Estado.
Tanzanía: El Fondo de Acción Social de Tanzanía proporciona transferencias monetarias condicionadas al 15 % más pobre de los hogares a fin de fomentar la atención prenatal y la matrícula en la educación preescolar. También estamos utilizando financiamiento basado en los resultados para mejorar los resultados en materia de nutrición, e iniciativas de financiamiento novedosas que movilizan recursos del sector privado, como por ejemplo El Poder de la Nutrición.
Senegal: Las inversiones en la primera infancia en Senegal reportarán beneficios mediante una mayor eficiencia interna y externa en la educación, el aumento de la productividad, los recursos humanos del país, la empleabilidad y los mayores ingresos en el largo plazo, lo que redundará en un crecimiento económico más alto, más sostenible y más inclusivo.
El Grupo Banco Mundial está dispuesto a brindar apoyo a estos países a medida que invierten en la nutrición, la estimulación y la protección de su principal recurso. El Servicio Mundial de Financiamiento en Apoyo de la Iniciativa Todas las Mujeres, Todos los Niños; El Poder de la Nutrición; el Movimiento SUN para el Fomento de la Nutrición, y la Red de Acción para el Desarrollo en la Primera Infancia, puesta en marcha en abril de 2016 por el Grupo Banco Mundial y UNICEF, forman una red creciente de instituciones asociadas comprometidas con esta causa.
Fuente: http://www.bancomundial.org/es/news/press-release/2016/10/06/nine-countries-pledge-greater-investments-in-children-powering-economies-for-long-term-growth
Imagen: http://www.bancomundial.org/hp.html