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Del leviatán y el naufragio COVID-19

Por: Stefany Ocampo Hernández

“Estrategia de apoyo al profesorado durante la pandemia que debe persistir para mejorar la educación y el aprendizaje en línea. Esto no acabó con la pandemia, al contrario, debe mejorarse y evolucionar para adaptarse a las nuevas necesidades educativas”.

Tal y como el leviatán genera caos y desesperación en lo profundo del océano atemorizando a los marineros, este sentimiento puede ser comparado y trasladado a la incertidumbre que generó la pandemia por COVID-19 en el personal docente universitario. Nos sentimos acorralados a la vez que el deber nos exigía el cómo resolver el daño generado del barco fuertemente golpeado y engullido por este monstruo devorador; la emergencia nos exigía trasladar nuestras prácticas educativas de la presencia física a la completa virtualidad a pie de página. ¡Todo a babor! Esa fue la apuesta en un intento por mantener a flote el gran Barco Educativo con los ya destrozos generados por la serpiente marina y así fue como nosotros, los valientes docentes nos tiramos al agua.

«Antídotos contra la magistralidad, es una estrategia gestada en una incubadora de innovación pedagógica a partir de la creación de una pócima para acortar las “distancias cognitivas, físicas y emocionales».

Dime qué quilla anda y te diré cómo navega

Leviatán del hebreo “enrollado” muestra a una criatura mitológica que en su fuerza asesta y evidencia dos golpes claves que dan probablemente paso al naufragio COVID-19: 1) la falta de conectividad motivo de las consecuencias de la injusticia social y, por otra, 2) una quilla que no logra sostener el esqueleto de ese barco que no estaba preparado para ser forzado a las aguas virtuales. El famoso refrán habla por sí solo, el problema no fue el monstruo, fue la quilla. Sin ton ni son, se opta como medida de contención las sesiones virtuales en variedad de plataformas. Los docentes despliegan su didáctica y los aprendientes, intentan solucionar cómo tener una computadora con conexión (en el mejor de los casos) mientras prestan atención, todo al mismo tiempo.

La científica Nazareth Castellanos, menciona que la atención plena se controla en la corteza prefrontal y que la interpretación interna que cada uno hace de la realidad se basa en la relación constante entre cerebro y organismo. Ante esto, los neurocientíficos denuncian que se debe acabar con la dicotomía entre mente y cuerpo, ya que las sensaciones del cuerpo son memorizadas y tenidas en cuenta por el cerebro para tomar decisiones… Imaginemos este escenario: un aula de cuatro paredes y una presentación de 40 diapositivas; estudiantes que en apariencia escuchan; ahora saltemos a la virtualidad con el único cambio del uso de una plataforma que permite la conexión virtual sincrónica. ¡EUREKA!

Fuimos ingenuos al creer que la serpiente daba tregua ante la calma y silencio de una pantalla negra, sin respuestas, ni emociones. ¿Por qué continuamos subestimando el cuerpo y sus emociones? Si se reconoce que el cuerpo es el lugar donde está enmarcada la experiencia (Castellanos, 2022). El leviatán espanta sí, pero ni la serpiente marina ni el virus crearon el naufragio, lo cierto es que ese barco ya estaba hundido antes de zarpar. Anclados a un paradigma reduccionista lo más obvio era apostar a la estrategia de la exposición magistral, pero eso no es suficiente para alzar el barco educativo y evitar que se siga hundiendo ante los desafíos del siglo XXI.

Acompañando a los valientes marineros

Se propone un traslado de la visión de la enseñanza hacia el aprendizaje, del uso poderoso y potenciador de las herramientas digitales. Lo anterior, requiere un acompañamiento personalizado al profesorado, un estar en compañía ante la desazón y no presencia en la virtualidad. Hay conexión, pero no hay personas conectadas, gran diferencia.

Se comparte aquí una experiencia para acompañar al personal docente titulada: “Antídotos contra la magistralidad”, gestada en una incubadora de innovación pedagógica, un Laboratorio de aprendizaje. Ahora bien, la propuesta incluye actividades como la simulación, escucha activa de la explicación acerca del uso de la herramienta para la mediación pedagógica, y finalmente, construcción de un recurso pedagógico para las sesiones de clase. Nace de la intención de mostrar una estrategia alternativa a las clases centradas en la magistralidad para acortar “distancias cognitivas, físicas y emocionales” (Badilla, 2016). La ruta de aprendizaje (Imagen 1), señala los diferentes momentos de la experiencia, de esta manera el profesorado trae como parte de sus recursos una presentación (formato PDF o PowerPoint) para transformarla en un antídoto que integre actividades evaluativas interactivas a través del uso de la herramienta Nearpod. Concretamente, se muestra cómo agregar contenido: diapositiva clásica, video interactivo y las actividades de tablero colaborativo y encuesta.

La consigna final consiste en crear una pócima de manera simultánea con los facilitadores, como parte del reto y presentarla a los demás colegas. Asimismo, durante el acompañamiento, se insta a los docentes a mantener sus cámaras encendidas, esto porque al tener la cara y manos, más recursos neuronales que otras zonas, es trascendental vernos, sonreír. (Castellanos, 2022). Aunado a lo anterior, se favorece un ambiente de aprendizaje de confianza, apertura y un uso interactivo de otras herramientas digitales (Google Forms y Geniall.ly), las cuáles permiten al equipo encargado (gestores pedagógicos) llevar el “pulso” y captar constantemente la atención de los docentes quienes se asumen en el rol de aprendientes.

Imagen 1. Ruta de aprendizaje que muestra los diversos momentos del taller, dicha secuencia didáctica va guiando a cada docente hasta crear su propia pócima. (Creación propia, 2023).

En la socialización de sus antídotos se recalca la necesidad de:

  • Realizar actividades de comprobación de lo explicado en clases. Las personas tendemos a olvidar un 40 % de la información por lo que crear actividades que resulten emocionalmente agradables, será resaltado por el cerebro, mientras que lo aburrido llevará cuesta arriba el aprendizaje (Castellanos, 2022).
  • Promover pausas intencionadas que generen reflexión, asimilación y conexión de ideas. Hacer pausas entre lo explicado y las expectativas de aprendizaje son necesarias ya que el cerebro no es un sistema inmediato, las transiciones son muy importantes. Para Zinn (2009), la atención plena es consciencia y atención, cultivarla implica conectar con el mundo que nos rodea, con nosotros y con el otro.

Esta estrategia sirvió como apoyo docente durante la pandemia, sin embargo, debe persistir para mejorar la educación y el aprendizaje en línea, esto no acabó con la pandemia, al contrario, se debe mejorar cada vez más.

Si educar es seducir con lo valioso (Rojas, 2016), se espera que este insumo y la figura del Leviatán sean de inspiración; así como nuestra experiencia didáctica planteada en este artículo conlleve a la reflexión. Es importante aclarar que, aunque fue una experiencia que apoyó la labor del profesorado durante la pandemia, está en mejora continua, debe seguirse evaluando con el fin de adaptarse a las necesidades de los aprendientes y al acompañamiento que brindan los docentes. Las universidades continuamos enfrentando desafíos ante los rezagos de la pandemia, así como el legado de un paradigma tradicional insuficiente para atender los desafíos del siglo XXI. Sin embargo, son el miedo, la incertidumbre, el no acceso a la conexión (traducido a una injusticia social), la desinformación, el poco acompañamiento al rol docente y a los estudiantes, quienes continúan acechando y acentuando una de las crisis más grandes del sistema educativo. Al fin y al cabo, el Leviatán es un mito, pero sin una quilla que ciña la fuerza de las velas seguiremos navegando sin ningún puerto definido.

Pero… ¿Quién es la criatura que ronda los mares y está atemorizando a la educación actualmente?

Hace poco se compartió en las noticias el caso de un docente de una universidad pública quién reprobó a 18 estudiantes por usar Inteligencia Artificial (IA) para responder un examen. Ante esto, se lanzó una bandera blanca que invita a un diálogo crítico y sostenido que corte con la visión de islas académicas con que trabajamos las instituciones de educación superior para abrirnos paso a un mar de conocimiento. ¿Cuál es el mundo pospandemia que se está fraguando? ¿Están las universidades reconociendo, reflexionando y validando las nuevas tecnologías de IA para la educación? Se educa para qué: para saber, para hacer, ¿para ser? Y ante esto, ¿Cuáles son los saberes necesarios para responder a los desafíos del siglo XXI? Creíamos que el Leviatán era una pandemia, pero el mundo continúa y sigue anclado a una visión arcaica y tradicionalista desde hace mucho tiempo. Esta nueva criatura que emerge y arremete contra los docentes universitarios y la educación del futuro, parece ser una emoción muy visceral reconocida por todos los seres humanos. ¿Podría el nuevo Leviatán ser las herramientas basadas en inteligencia artificial que cambiarán el paradigma de la educación actual?

“El gran leviatán es la única criatura del mundo que irrevocablemente debe quedar sin ser pintada” – H. Melville.

Acerca de la autora

Stefany Ocampo Hernández (socampo@castrocarazo.ac.cr) es graduada de la carrera de Educación Inicial de la Universidad de Costa Rica, magíster en Pedagogía por la Universidad Nacional de Costa Rica. Desde el 2017 se dedica al acompañamiento a docentes universitarios y a la investigación de herramientas digitales que potencian los aprendizajes, sobre todo los mapas conceptuales como herramienta que permite la representación gráfica del conocimiento a partir del desarrollo de habilidades de pensamiento de orden superior. Actualmente, es estudiante del doctorado en Educación de la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad de Buenos Aires.

Referencias

Badilla Saxe, E. (2016). Educación sin distancia. https://www.castrocarazo.ac.cr/web/vida-universitaria/noticias/educacion-sin-distancia

Castellanos, N. (2022). Neurociencia del cuerpo: como el organismo esculpe el cerebro. Editorial Kairós.

Rojas, E. (2016). Cinco consejos para potenciar la inteligencia. Editorial Planeta.

Zinn, K. (2009). Mindfulness en la vida cotidiana: donde quiera que vayas, ahí estás. Gaia.

Edición


Edición por Rubí Román (rubi.roman@tec.mx) – Editora de los artículos Edu bits y productora de los Webinars del Observatorio- «Aprendizajes que inspiran» – Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación del Tec de Monterrey.

Fuente de la información e imagen:  https://observatorio.tec.

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Explorando la importancia de adquirir habilidades digitales y su integración en las prácticas pedagógicas.

Por: Luz D Palomino M/CII-OVE

Este escrito examina la importancia de que las/los docentes adquieran habilidades digitales y algunas propuestas para la formación permanente que posibilite integrar las tecnologías en su práctica pedagógica. En un mundo cada vez más digital, estas capacidades se han vuelto esenciales para las/los educadores. Exploraremos cómo el desarrollo de habilidades digitales puede beneficiar a las/los docentes y a sus estudiantes, así como los desafíos y las estrategias para la formación permanente a los/las profesionales de la educación en el uso de la tecnología.

En la sociedad actual, caracterizada por avances tecnológicos constantes y una creciente dependencia de la tecnología fundamentada en algoritmos, la educación no puede permanecer ajena a estos cambios. La transformación digital en las aulas se ha convertido en una necesidad imperante para garantizar que las/los estudiantes adquieran las habilidades necesarias para prosperar en un mundo cada vez más mediado por el internet de las cosas, los bloques de datos y la realidad aumentada. La integración de la tecnología en la práctica pedagógica presencial ofrece numerosas demandas y oportunidades para mejorar la educación.

A pesar de la creciente importancia de las capacidades digitales en la educación, much@s docentes enfrentan desafíos al intentar integrar la tecnología en sus prácticas pedagógicas. Algun@s docentes carecen de la formación (brecha epistémica) y las habilidades necesarias para utilizar herramientas digitales de manera significativa, lo que limita su capacidad para aprovechar al máximo los escasos recursos tecnológicos disponibles. Esto puede conducir a una brecha digital en el aula y a una falta de preparación de los estudiantes para el mundo digital en el que viven.

También, «La adquisición de habilidades digitales por parte de l@s docentes abre puertas a una amplia gama de recursos educativos en línea, incluyendo contenido interactivo, simulaciones, plataformas de aprendizaje en línea y comunidades de práctica. Esto permite enriquecer las experiencias de aprendizaje y acceder a materiales actualizados y relevantes» (Rojas & Serrano, 2019).

Las demandas de integración de la tecnología en las aulas se basan en las necesidades cambiantes de l@s estudiantes y en la preparación para la sociedad y el mercado laboral del siglo XXI; resulta imposible desconocer el impacto de la cultura algorítmica y la minería de datos en todos los campos del saber.

L@s estudiantes de hoy han crecido inmersos en una cultura digital y están acostumbrados a utilizar dispositivos y recursos digitales en su vida diaria, aunque en muchos casos ese uso sea instrumental y consumista, desprovisto de pensamiento crítico. Esa falencia debe ser resuelta por la educación y los sistemas escolares, quienes deben alumbrar el camino para ir más allá de la reproducción cultural. Como resultado, los y las estudiantes esperan que la educación refleje su entorno tecnológico y se les brinde la oportunidad de aprender de manera activa y atractiva a través de herramientas digitales.

Además, la integración crítica, constructiva y creativa de la tecnología en la práctica pedagógica ofrece oportunidades para mejorar la calidad de la educación. Las herramientas digitales pueden aumentar la participación de los estudiantes al proporcionar interactividad y experiencias de aprendizaje más dinámicas. También permiten el acceso a una gran cantidad de recursos educativos en línea, lo que enriquece el proceso de autonomía en la enseñanza y los aprendizaje.

La incorporación de lo digital a las actividades educativas no solo promueve el desarrollo de habilidades claves para el siglo XXI, como la creatividad, el pensamiento crítico, la colaboración y la resolución de problemas, sino que hace de la escuela y la universidad lugares actualizados y dinámicos que democratizan el conocimiento de la época.

Las herramientas digitales pueden usarse para fomentar el trabajo en equipo y la comunicación, ya sea a través de proyectos colaborativos en línea o de herramientas de comunicación digital. Estas habilidades son fundamentales para que l@s estudiantes se conviertan en ciudadanos activos y competentes en un mundo cada vez más conectado y globalizado.

La tecnología proporciona a los docentes y estudiantes herramientas y recursos para fomentar la creatividad, permitiendo a los estudiantes expresarse de maneras nuevas y originales. Además, la integración de la tecnología puede aumentar la participación de los estudiantes al brindarles oportunidades interactivas y estimulantes» (Bawane & Spector, 2020).

Después de este recorrido teórico presentamos algunas propuestas para mejorar las capacidades y habilidades digitales:

  1. Alfabetización digital: Tiene dos dimensiones, la primera se refiere a la capacidad de utilizar y comprender las herramientas y tecnologías digitales de manera clara y efectiva. Implica habilidades básicas como el manejo de dispositivos, la navegación en Internet, el uso de aplicaciones y la comprensión de conceptos fundamentales relacionados con la tecnología. La segunda, apropiarse de los algoritmos y la programación básica, para superar la reproducción y entrar a la creación de sentidos, herramientas, plataformas y contenidos. La alfabetización digital es fundamental para que l@s docentes puedan aprovechar al máximo las herramientas digitales en su práctica pedagógica.
  2. Capacidad tecnológica: Se refiere a las posibilidades de actuar autónomamente en el diseño virtual-digital de dinámicas de selección, utilización y evaluación, adecuando contextualmente diferentes herramientas y tecnologías disponibles en el contexto educativo. Implica conocer y comprender las aplicaciones y recursos digitales relevantes para el aprendizaje, así como saber cómo integrarlos de manera efectiva en la planificación y ejecución de actividades educativas. La capacidad tecnológica permite a los docentes utilizar las herramientas digitales de manera eficiente y aprovechar su potencial educativo.
  3. Competencia informacional: Se relaciona con la capacidad de buscar, evaluar y utilizar información de manera crítica y ética. Incluye habilidades para localizar fuentes confiables, evaluar la calidad de la información, seleccionar la información relevante y utilizarla de manera efectiva en el proceso de enseñanza y aprendizaje. La competencia informacional es fundamental para ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades de pensamiento crítico y para fomentar la investigación y el análisis en el contexto educativo.
  4. Competencia comunicativa: Esta se refiere a la capacidad de utilizar eficazmente las herramientas y tecnologías de comunicación digital para interactuar, colaborar y compartir información con l@s estudiantes, otr@s docentes, padres y la comunidad educativa en general. Implica habilidades para utilizar herramientas de comunicación en línea, plataformas de aprendizaje colaborativo y redes sociales de manera efectiva y responsable. La competencia comunicativa permite a los docentes facilitar la comunicación y la colaboración en el entorno educativo, promoviendo así el intercambio de ideas y la participación activa de los estudiantes.

Estas habilidades digitales son esenciales para que l@s docentes puedan utilizar la tecnología de manera efectiva y aprovechar sus beneficios en el contexto educativo. Al desarrollarlas, l@s docentes pueden mejorar la enseñanza y el aprendizaje, fomentar la creatividad y la participación de los estudiantes, y facilitar el acceso a recursos educativos en línea. Además, estas competencias preparan a los docentes para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que surgen en un entorno educativo cada vez más digitalizado.

Implicaciones y recomendaciones

Basado en los hallazgos anteriores, se derivan las siguientes implicaciones y recomendaciones:

  1. Es fundamental proporcionar a l@s docentes oportunidades de formación y desarrollo profesional en habilidades y capacidades digitales, adaptadas a sus necesidades específicas.
  2. La formación permanente del profesorado debe ser práctica y basada en el aprendizaje activo, permitiendo a l@s docentes experimentar directamente con herramientas y tecnologías digitales.
  3. Fomentar la colaboración entre docentes y establecer comunidades de práctica para compartir experiencias y recursos, promoviendo así el aprendizaje entre pares.
  4. Es necesario abordar los desafíos relacionados con la resistencia al cambio, la falta de recursos y el acceso limitado a la tecnología, mediante la implementación de políticas y estrategias que faciliten el acceso equitativo a la tecnología.
  5. Es importante diseñar actividades y recursos digitales significativos que promuevan el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la creatividad de los estudiantes.

En general, la adquisición de habilidades digitales por parte de los docentes y su integración efectiva en la práctica pedagógica tienen el potencial de transformar la educación y preparar a los estudiantes para un futuro digitalmente competente. Es necesario que las instituciones educativas y los responsables de la formulación de políticas apoyen activamente la formación inicial y e servicio vinculada a lo digital-virtual y el desarrollo profesional de los docentes en este ámbito, brindándoles los recursos y el apoyo necesarios para abordar los desafíos y aprovechar las oportunidades que ofrecen las tecnología de la tercera y cuarta revolución industrial en la educación.

Bibliografías Consultadas:

Bonilla, L.B. (2023): Nueva cruzada conservadora en las escuelas y universidades: el lápiz contra la inteligencia artificial

https://luisbonillamolina.com/2023/05/02/nueva-cruzada-conservadora-en-las-escuelas-y-universidades-el-lapiz-contra-la-inteligencia-artificial/

García-Valcárcel, A., & Tejedor, F. J. (2016). Competencia digital y competencia mediática: diferentes etiquetas para una misma realidad. Edutec. Revista Electrónica de Tecnología Educativa, 55, 1-15.

Tejedor, F. J., & García-Valcárcel, A. (2017). La competencia digital del profesorado en Europa y Latinoamérica: revisión sistemática de estudios e instrumentos de medida. Revista de Investigación Educativa, 35(1), 59-77.

Imagen realizada con inteligencia artificial

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Herramientas digitales para docentes, estudiantes e investigadores

Por Selene Kareli/CII-OVE

En el marco de la Escuela Internacional sobre contenidos digitales y virtualidad, misma que se llevará a cabo del 25 al 31 de octubre, se comparten algunos recursos digitales que pueden ser de apoyo para docentes, estudiantes e investigadoras e investigadores.

PDF2go

PDF2Go permite editar archivos PDF de forma rápida y sencilla. Rota una página o fusiona varios PDF en uno. Divide archivos PDF y reduce el tamaño de archivo fácilmente. También se puede proteger un PDF con el servicio gratuito que ofrece.

Puedes acceder aquí: https://www.pdf2go.com/es

Padlet

Padlet, antes conocido como Wallwisher, es una plataforma digital que ofrece la posibilidad de crear murales colaborativos. En el terreno de la escuela, funciona como una pizarra colaborativa virtual en la que docentes y estudiantes pueden trabajar al mismo tiempo dentro de un mismo entorno.

Puedes acceder aquí: https://es.padlet.com/

Pixton

Pixton es una herramienta web en español para crear cómics usando figuras, escenas, personajes. Se pueden utilizar las figuras de las que dispone la herramienta web, añadiendo solo diálogos a los personajes, o, por el contrario, se pueden crear los cómics desde el principio, seleccionando escenas, personajes, añadiendo objetos y diálogos. Esta herramienta suele sur útil dentro de la enseñanza de la historia para crear escenarios determinados en contextos y épocas particulares.

Puedes acceder aquí: https://edu-es.pixton.com/solo/

Miro

Miro es una plataforma de pizarra colaborativa en línea que permite a los equipos remotos trabajar juntos de forma práctica. Miro es ideal para hacer lluvias de ideas, mapas mentales, ejecutar revisiones, crear cuadros organizacionales y crear un eje visual central para proyectos.

Puedes acceder aquì:https://miro.com/es/LBhDQARIsAO0a6aJazJL2FjqVseYPQDOP6cRVVFZFBSJkE10T6JVviKRoPJSIyI8FJUYaAlKyEALw_wcB

Zotero

Zotero es una aplicación para la administración de referencias bibliográficas. Es una aplicación (software libre) que funciona con un conector para los navegadores Chrome, Mozilla Firefox, Safari y Opera, lo cual da la posibilidad de crear bibliotecas virtuales a partir de aquellas fuentes bibliográficas que se consulten de manera digital en un mismo proyecto. Los usuarios pueden añadir notas, etiquetas, y sus propios metadatos a través de la interfaz del navegador.

Puedes acceder aquí: https://www.zotero.org/download/

Si deseas inscribirte a la Escuela Internacional sobre contenidos digitales y virtualidad puedes encontrar más información en el siguiente enlace.

https://otrasvoceseneducacion.org/vi-escuela-internacional-premisas-y-caminos-para-la-generacion-de-contenidos-digitales-alternativos

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Perú: ¿Eres docente? Participa en las capacitaciones sobre el uso de herramientas digitales

América del Sur/Perú/18-06-2021/Autor(a) y Fuente: www.andina.pe

Las sesiones virtuales serán gratuitas entre el 12 y 14 de julio.

Si bien ya se ha iniciado el proceso de vacunación y el Ministerio de Educación ya prepara el retorno a clases presenciales de manera gradual y voluntaria, la educación a distancia ha llegado para quedarse. La reapertura de las escuelas del país no implicará el abandono de las herramientas digitales que alumnos y docentes han aprendido a utilizar desde el inicio de la pandemia.

Es por ello que el continuo desarrollo de capacidades digitales y el aprovechamiento de las ventajas de la tecnología es importante para los docentes.  Para reforzar estos conocimientos, la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) y el Ministerio de Educación anunciaron una nueva edición de Educamp Virtual, un programa que ofrece capacitaciones gratuitas en herramientas digitales para que los profesores puedan brindar educación online de calidad.
En la edición de este año, que se llevará a cabo del 12 al 14 de julio, el Educamp Virtual contará con más de 50 ponentes y expertos de primer nivel procedentes de 12 países y con más de 20 universidades e instituciones educativas de América y Europa.
El Dr. Eric Mazur, reconocido docente de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, es uno de los invitados destacados de este evento, cuya temática girará en torno a la innovación, el aprendizaje autónomo y la educación híbrida.
Los asistentes contarán con espacios de interacción con la colaboración de distintas universidades e institutos, además de tener la posibilidad de interactuar en 3 charlas principales, 6 mesas de discusión, 12 talleres y 12 webinars.
El evento es coorganizado por Ministerio de Educación (Minedu), la Universidad Nacional de Educación a Distancia (España), la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Ecuador), el Fondo Nacional de Desarrollo de la Educación Peruana y la Fundación Telefónica.
Para participar, los interesados solo deberán registrarse en la web principal del evento.
 
Potenciar metodologías en entornos digitales
“Estamos comprometidos con la educación peruana de calidad y creemos firmemente que la innovación es real cuando impacta en la sociedad; por eso queremos compartir nuestros aprendizajes y metodologías con todo el sector educativo», indica la Dra. Silvia Lavandedra, directora del Centro de Excelencia en Enseñanza y Aprendizaje de UTEC.
«Nuestro propósito es promover y fortalecer nuevas formas de enseñanza y aprendizaje que orienten a los docentes hacia la educación del futuro, en entornos presenciales y virtuales”, apunta.
“Este evento internacional -dirigido a académicos, directivos y educadores- nace con el ideal de promover y fortalecer nuevas formas de enseñanza en línea que permita el intercambio de reflexiones y experiencias de aprendizaje en esta nueva normalidad y en el futuro educativo postpandemia”, agrega Lavandera.
Fuente e Imagen: https://www.andina.pe/agencia/noticia-eres-docente-participa-las-capacitaciones-sobre-uso-herramientas-digitales-849298.aspx
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ESPECIAL: Jóvenes de Argentina acuden a herramientas virtuales para aprender mandarín

América del Sur/Argentina/29-11-2020/Autor(a) y Fuente: Spanish. xinhuanet. com

 La modalidad de educación virtual y a distancia no ha sido impedimento para unos 150 estudiantes argentinos que se han volcado a aprender mandarín en el recién inaugurado Instituto Confucio de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).

Los jóvenes, quienes ven en el nuevo Instituto una forma de aproximarse a una «cultura totalmente distinta» y una «fuente de aprendizaje», han logrado sortear las múltiples dificultades que ha traído consigo la pandemia de COVID-19 en estos últimos tiempos.

El contexto «era totalmente desafiante, pero valió la pena», comentó a Xinhua la abogada egresada de la UNC Martina Jeifetz, quien integró el curso inicial para principiantes de la institución.

«Fue un gran desafío para mí porque no sabía nada del idioma ni de la cultura china. Aprender algo de lo que no tienes la más remota idea y, a parte, de manera virtual por el contexto que estamos viviendo, era un poco desafiante, pero estuvo bueno», comentó.

Martina, de 32 años, relató que las clases se desarrollaron a través de plataformas de internet con profesores, principalmente, desde China.

Esto implicó horarios poco flexibles y grandes sacrificios para los profesores chinos en Beijing, quienes tuvieron que comenzar a impartir clases desde tempranas horas de la mañana.

«Las clases se daban vía Zoom, los martes de siete a 8:30 de la tarde, y nuestra profesora ‘Roxi’ nos enseñaba desde China, lo que lo hacía más emocionante también porque en su país serían las seis de la mañana», comentó.

«Teníamos un aula virtual y ahí también iban subiendo cada clase grabada y todos los materiales del curso, si quería repasar algo tenía esos materiales, eso me pareció bueno y creo que es una de las ventajas de la virtualidad», agregó la estudiante.

El instituto, que es el tercero que se instala en Argentina, ofrece cursos introductorios, de nivel 1 y 2, de lectocomprensión de chino en español e inglés, un taller de chino para negocios en inglés, y además se encuentra en fase de preparación de los exámenes HSK (prueba escrita) y HSKK (prueba oral) para certificar el aprendizaje del idioma chino.

Sus autoridades se encuentran desarrollando además cursos orientados a niñas y niños que incluyen rondas infantiles, caligrafía, técnica del papel cortado y la grafía de los nombres propios.

«Es uno de los idiomas más hablados del mundo y creo que China hoy en día se posiciona como un país líder mundial. El idioma es importante para extender los horizontes e ir ensanchando los conocimientos», sostuvo Martina.

«Por otro lado, si te interesa la cultura de otro país, un paso fundamental es a través del estudio del idioma. Estoy muy interesada en continuar, en realizar una instancia de investigación o continuar mis estudios en China», continuó.

Inaugurado oficialmente el pasado 10 de octubre, el Instituto Confucio de la Universidad de Córdoba es el resultado de cuatro años de esfuerzos entre autoridades de este recinto, la Universidad de Jinan en China y la Embajada de China en Argentina.

Para los estudiantes, este nuevo espacio para el aprendizaje del idioma permite adentrarse a un «territorio enorme» con «variedad de costumbres, prácticas sociales, comida y cultura».

«Me parece que hay muchas cosas por explorar en la cultura china, y espero que muchos jóvenes que estén interesados en aprender sobre ella lo hagan a pesar de las dificultades. Hoy en día hay muchos recursos y sólo basta tener mucha dedicación, compromiso y ganas», concluyó la estudiante.

Fuente e Imagen: http://spanish.xinhuanet.com/2020-11/25/c_139541923.htm

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Los docentes adaptan contra el reloj los ya discutidos contenidos escolares

Por: Ana Torres Menárguez

La seguridad de los centros educativos está consumiendo casi todas las energías y concentrando el debate público en esta vuelta a las clases en mitad de una pandemia que no deja de ofrecer cifras preocupantes; ya hay más de medio millón de casos en toda España. Pero una vez decidido que es imprescindible reabrir las escuelas, tal y como defiende la ONU, para evitar una “catástrofe generacional”, sobre todo entre los alumnos más desfavorecidos y con menos conexión a Internet, hay que resolver otro gran problema: ¿qué y cómo se va a enseñar a los alumnos en estas circunstancias excepcionales?

La realidad es que, mientras los docentes trabajan a marchas forzadas para adaptar los programas académicos, centrándose en contenidos esenciales e integrando los temas imprescindibles para seguir adelante que no se llegaron a ver el año pasado, se hace más presente que nunca el debate, arrastrado desde hace años, sobre si el currículo educativo español es demasiado extenso, enciclopédico y anticuado. “Es una ficción, todos saben que es inabarcable; el currículo prescrito en la ley no se corresponde con el que finalmente aprenden los alumnos en el aula”, opina el profesor Carlos Magro, presidente de la asociación Educación Abierta.

Los educadores que estos días andan adaptando las clases de los colegios e institutos a la realidad de la pandemia no son ajenos a esa cuestión. “Nuestro currículo es muy denso, hay demasiado contenido y desde las sociedades matemáticas llevamos años peleando para que se reduzca, como poco un 20%”, señala Lluís Bonet, docente del instituto público Mare Nostrum de Alicante, antes de volver a temas más inminentes: “Se dice que los deberes están hechos, pero en los centros solo se ha hablado de las medidas de prevención higiénicas y sanitarias; está claro que hay que prever más allá de la distancia social en las aulas, pero lo pedagógico sigue en un segundo plano”, decía el jueves pasado, poco antes del inicio de las clases. Su gran preocupación es cómo van a seguir las lecciones desde casa los estudiantes de 2º de ESO y de los cursos posteriores, ya que solo irán al centro el 50% de ellos en días alternos.

A grandes rasgos, los centros de infantil y primaria y los de secundaria coinciden en un punto: este curso se centrarán en los contenidos esenciales. Durante el tercer trimestre del pasado curso, todos los centros siguieron las recomendaciones acordadas por el Ministerio de Educación y los consejeros autonómicos de no seguir avanzando en el temario para no dejar atrás a quienes tienen menos recursos y apoyo familiar. En junio, los docentes hicieron informes individualizados, dejando por escrito las calificaciones finales de cada alumno y sus carencias. Ahora, durante el mes de septiembre, deben elaborar las programaciones académicas —tienen autonomía para hacerlo—, teniendo como base los contenidos prescritos por el ministerio y las consejerías; el Estado fija el 65% y las autonomías el resto, salvo en las que existe lengua cooficial, donde el Gobierno fija el 55%.

“Vamos a optar por integrar lo que no se trabajó solo en las áreas en las que es imprescindible, como Inglés. En primaria, los contenidos de la mayoría de asignaturas se repiten en los diferentes cursos, y en ese sentido estamos muy tranquilos”, explica Vicent Mañes, presidente de la federación de asociaciones de directores de infantil y primaria, que aglutina a los responsables de unos 2.600 colegios de toda España. Pone un ejemplo: “Si en Inglés queremos trabajar la circulación en las ciudades, tenemos que recuperar los verbos de movimiento que no pudimos ver en el tercer trimestre”. Mañes recuerda que siempre diseñan las programaciones a partir de las evaluaciones finales del año anterior y de los datos de evolución de los alumnos. Pero en esta ocasión, reducirán los objetivos curriculares, con menos temas, y lo que quede pendiente lo integrarán en los próximos años, “ya libres de pandemia”, anhela.

El patio del colegio San Sebastián de El Bolao (Madrid).
El patio del colegio San Sebastián de El Bolao (Madrid).

El “gran reto” que afrontan los docentes de estas etapas es el de formarse para seguir integrando las herramientas tecnológicas en su metodología, porque hasta ahora “era un recurso auxiliar a lo manual”. “En infantil y primaria el niño se tiene que ensuciar con la arena, usar el pegamento… Con la pandemia hemos aprendido que esto tiene que complementarse con las herramientas digitales que permitan a los alumnos trabajar de forma más autónoma en casa”, añade.

En el caso de algunas autonomías, como la valenciana, la consejería lanzó cursos de formación en TIC para más de 5.000 profesores durante el mes de julio con el objetivo de que aprendieran a usar la plataforma Moodle Aules, un entorno de trabajo digital que permite compartir tareas y comunicarse con los alumnos de forma sencilla.

“El ritmo en los institutos va a ser más lento”, afirma Esteban Álvarez, presidente de la asociación de directores de secundaria de Madrid. Como en primaria, ellos adaptarán las asignaturas a los contenidos esenciales. “En los diferentes cursos de la ESO, los conceptos se repiten con diferente grado de dificultad, de modo que lo que no podamos ver este curso, lo incluiremos en las programaciones del próximo”, añade. Como en el resto de comunidades, el primer mes de clase se va a destinar a planes de refuerzo, en los que se recordará lo más relevante del curso anterior. Su gran preocupación es segundo de Bachillerato. “No podemos mantener el mismo temario ni ritmo que cuando todos los alumnos acudían de forma presencial; necesitamos que el Ministerio de Universidades y las consejerías vuelvan a adaptar la selectividad como hicieron el pasado julio, que en lugar de proponer opciones cerradas, dejaron que el alumno pudiera desarrollar entre una amplia gama de temas”, clama Álvarez.

Conjunto enciclopédico

Pero todo ese trabajo no puede abstraerse del otro debate más amplio sobre los contenidos escolares, pues la pandemia y el cierre prematuro de los centros ha puesto sobre la mesa un obsoleto sistema educativo, demasiado hinchado y con unos métodos de enseñanza con dificultades para funcionar sobre raíles tecnológicos. Docentes, estudiantes, familias y políticos reconocen que el conjunto de asignaturas en España es enciclopédico y que el país va a la cola en cuanto a la modernización del modelo de escuela, por detrás de otros como Portugal, que después de adelgazar los contenidos ha conseguido reducir la tasa de abandono escolar temprano al 12,6% (aún por encima del 10,6% de media de los países europeos), frente al 17,2% de España.

El objetivo es ir hacia los llamados aprendizajes significativos, los que dejan huella. El biólogo y psicólogo cognitivo Héctor Ruiz, director de la International Science Teaching Foundation —con base en Londres y Barcelona en la que analizan la forma en la que los niños aprenden las ciencias en diferentes países—, coincide con los docentes en la idea de sobredimensión. “La memoria no funciona como un músculo; la retención de datos sin profundizar en ellos no ayuda al pensamiento crítico”, expone. “Aprender listados de nombres no te va a dar una ventaja a la hora de entender cualquier otro contenido; para tener la capacidad de resolver problemas hacen falta conocimientos profundos, es la única forma de conectar diferentes campos”.

En el Ministerio de Educación son conscientes del problema y quieren dar un vuelco al currículo. “Sabemos que los programas para cada uno de los cursos están recargados y queremos ir a un modelo más ligero que se centre en lo fundamental”, señala el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana. Prefiere no hablar de porcentajes o de qué asignaturas podrían suprimirse, pero sí adelanta que los centros tendrán la posibilidad de fusionar las asignaturas por ámbitos, como ya ha hecho Portugal, catalogada por la prensa internacional como “la estrella emergente en educación” por sus avances en el informe PISA (que mide las competencias en matemáticas, comprensión lectora y ciencias de los alumnos de 15 años de los países de la OCDE) y considerada como la nueva Finlandia.

Algunos docentes ya hackean el sistema desde hace años. Reaccionan con unos contenidos realistas, a sabiendas de que, un curso más, no serán capaces, o no querrán, llegar al final del temario propuesto por la Administración. “El enfoque, como cuando yo estudiaba, sigue siendo memorístico, almacenar en el cerebro los títulos de las obras sin entender los motivos que llevaron a esos autores a escribirlas; desactiva toda curiosidad por la lectura”, explica Rosa Linares, profesora de Literatura en el instituto público Leonardo Da Vinci de Majadahonda, en Madrid. Junto a un grupo de profesoras unidas en el colectivo Guadarrama, cree que no basta con dar a los estudiantes de secundaria las nociones generales de la historia de la literatura española, que tienen carencia de referentes internacionales, y que no se trabajan las habilidades de expresión y comunicación. “No se dan cuenta de que con ese currículo conseguimos el efecto contrario al que buscamos: fomentar de por vida el hábito de lectura”.

Fuente e imagen tomadas de: https://elpais.com/educacion/2020-09-09/los-docentes-adaptan-contra-el-reloj-los-ya-discutidos-contenidos-escolares.html

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Las redes sociales en tiempos de aplausos

Por: Ana Mariño

El mundo estaba cambiado tanto y tan rápido que nos costaba ponernos al día en todas las tendencias. Con esta nueva situación global, la velocidad se ha multiplicado y ha hecho modificar muchísimas cosas de nuestro día a día. Incluso la idea que tenemos de las redes sociales y su utilización se está modificando de manera irreversible

Con esta amenaza mundial, donde las prioridades y necesidades son más elementales que nunca -salud, seguridad física y alimentación, en primera instancia-, hasta nos estamos olvidando de cualquier tecnofobia para abrazarnos a las herramientas digitales más a mano; curiosamente,  dos cosas que parecen antagónicas: por un lado mantener la distancia, pues nunca tanto hemos pagado con el móvil, incluso utilizado la identidad facial o dactilar,  nunca tanto hemos solicitado recibos digitales; y por otro, mantener el contacto, y aquí las redes sociales se llevan la palma.

En un mundo donde no existe estrategia de marketing que no contenga un plan de comunicación en redes sociales, dejamos a un lado todas nuestras dudas sobre el Big data, la infoxicación, la privacidad de datos, el uso y abuso o incluso las tecnoadicciones, para suplir un mal común bastante peor: superar el trauma del aislamiento.

Ocultos quedan comportamientos tan criticados de las redes sociales como la necesidad de afiliación, admiración, presumir por un logro  y la búsqueda constante del “like”. Hoy lo que buscamos es mantener el contacto, la compañía o mitigar la soledad.

Hoy más que nunca las redes sociales nos ayudan a unirnos, a sentir que formamos parte de algo, nos avivan la esperanza, nos mantienen la confianza en el ser humano.

La organización de la no organización de nuestra casa es el espejo de lo que ocurre fuera de ella, la organización dentro caos: que a las ocho de la tarde salgamos a aplaudir ha conseguido programar eventos de nuestra cotidianidad como quedar por videoconferencia o el comienzo de programas de televisión para “después de los aplausos” con total normalidad.

Siempre me he mantenido firme en que las redes sociales van a existir, de ahí que sea importante conocerlas y, sobre todo, usarlas bien. nos proporcionan y nos quitan lo que los demás piensan de nosotros casi por partes iguales.

Este mensaje ahora adquiere más sentido. Como también el de la elaboración responsable de nuestro propio PLE, entorno personal de aprendizaje, y nuestra PLN, red personal de aprendizaje. Hoy, más que nunca, es necesario añadir y complementar a estos conceptos el de Red Social de Aprendizaje, como un entramado de relaciones sociales, con las que aprendemos, somos, vivimos, compartimos, estamos. No, no dejamos de aprender y, pasada la fase de considerar esto como una oportunidad para hacerlo, para aprender, tú decides qué aprendes, dónde y con quién..

Ahora es momento de evaluar nuestros actos, nuestro comportamiento en las redes: ni prescindir ni abusar, es momento de tener la aristotélica virtud del control, de no dejarse llevar. De hecho, en un momento en el que compartir todo tipo de información ha sido el comportamiento generalizado de la primera fase, poco a poco, se ha ido imponiendo el pensamiento crítico y se ha verificado la información a nivel colectivo. Este gesto también se mantendrá: seremos más comprometidos a la hora de compartir algo o, incluso, al recibirlo.

Cosas como la nomofobia, el miedo irracional a permanecer un intervalo de tiempo sin el teléfono móvil, por ejemplo, porque se nos olvida en casa cuando nos vamos a trabajar, han dejado de manifestarse. Ahora surgen otros miedos, miedos que no tienen nombre, como el idea vivir sin wifi, hoy más que nunca podemos ser nowifóbicos.

Vivimos un momento histórico sin igual de relaciones con el mundo próximo y lejano a través de lo virtual y tecnológico. Caben riesgos, el más típico es el de la cosificación de las personas. En esto también tenemos esperanza, pues se está tomando Internet como espacio de autoaprendizaje y conocimiento.

Hay un concepto antropológico que me gustaría destacar aquí, es el del “capital social” como conjunto de los recursos obtenidos a partir de una estructura social. Pensemos en ello por un momento: ahora mismo el recurso más importante sería la cantidad de información que fluye por las redes: noticias, lecturas, enlaces, películas, posibilidad de visitar museos, sesiones de entrenamiento de cualquier deporte, tutoriales de todo tipo de destrezas, charlas de los temas más variados, mensajes, conciertos, artículos, webinars, etc.

Esto podría relacionarse con la teoría de los dones: los dones entendidos como regalos. La reciprocidad es un término muy adecuado para categorizar un tipo de relaciones entre individuos o grupos, caracterizadas por la contraprestación de bienes y servicios que no tienen la transacción económica típica, es decir, en las que no se traspasa dinero. Marcel Mauss, autor de esta teoría, realizó un estudio comparado en distintas culturas subrayando que la continuidad de la vida social se basaba en una clave de acción en secuencia indispensable para mantener el cimiento de la vida en sociedad: dar-recibir-dar.

He aquí el quid de la cuestión. La necesidad de reciprocidad como movimiento de la calidad humana, hoy más que nunca, la obligación de reciprocidad generada por la confianza mutua de los agentes de una misma red de devolver, de volver a dar, de al menos, agradecer.

Me gustaría que esta crisis sirviese para muchas cosas: la mejora del medioambiente, el fin del capitalismo patriarcal como única opción, disminución de los niveles de contaminación, generación de otros movimientos de consumo más responsables,… También me gustaría que sirviese para que, entre nuestros referentes, estuviesen más mujeres, que esto haga visibilizarlas y visibilizarnos, no por generar conflictos, sino por solucionarlos, por ayudar a conseguirlo, por ser y estar. Las mujeres, a lo largo de la historia, a lo largo de cualquier catástrofe, guerra y asedio, hemos estado silenciadas y al mismo tiempo manteniendo esos trabajos básicos para perdurar la vida como el cuidado y la alimentación, todo lo que tiene que ver con el bienestar físico y emocional. Esta vez hay algo a nuestro favor: las redes sociales y su carácter democrático: las redes sociales no discriminan, a no ser que no se esté en ellas. Es más que probable que este medio nos permita, por fin, poner en valor ese importante poder.

Vivimos en un momento clave, como antes mencionaba,  en el que si no estás en las redes, no existes. Quien no está, quien no tiene acceso a la tecnología está, por desgracia, más excluido y solo que nunca. Podríamos llegar a decir que quien esté privado de tecnología está privado de libertad. Al menos en estos tiempos donde todo pasa en o por las redes.

El empoderamiento de la red es incalculable, la red nos empodera como sociedad, como colectivo sea el que sea, como individuo seamos como seamos. Las redes nos dan voz, sobre todo han dado voz a las minorías. Espero que eso siga así, mantengámonos ahí, lo que no se silencia nos beneficia a todos y a todas.

Aunque no todo es bonito, hoy más que nunca estamos vigilados, confinados, sin poder salir, trabajar, abrazar, en definitiva, controlados. Lo privado pasa a ser público, nunca antes mostramos tanto el interior de nuestras casas. Es un momento sin igual. La cantidad de información que estamos dando de nosotros mismos no se sabe qué alcance tendrá.

Hoy más que nunca también es necesario momentos de desconexión de las redes, de cerrar los ojos y visitar con la mente (de no poder con la vista) lugares de la naturaleza, mirar por la ventana e investigar cuál es el punto más lejano al que la vista alcanza, respirar conscientemente, escuchar el interior, los sonidos internos y externos, no dejar de sonreír; pedir ayuda, encontrar apoyo en las redes, ofrecer y colaborar, encontrar la manera de ser útil. Hoy y siempre es necesario tener presentes estas cuatro ces: colaborar, comunicar, crear y mantener vivo tu pensamiento crítico.

Estoy muy agradecida por la oportunidad de escribir mis pensamientos, gracias por leer este artículo.

Fuente e imagen tomadas de: https://eldiariodelaeducacion.com/espiral/2020/05/15/las-redes-sociales-en-tiempos-de-aplausos/

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