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Entrevista con Yassin Al-Haj Saleh El intelectual sirio definido como “la conciencia de Siria”

Entrevista con Yassin Al-Haj Saleh
El intelectual sirio definido como “la conciencia de Siria”

Ruud Goossens/Chams Eddine Zaouigui
Al Jumhuriya English

Dieciséis años y catorce días. Ese fue el tiempo que Yassin al-Haj Saleh estuvo encarcelado en las celdas de Asad padre. Sin embargo, el escritor sirio no es un hombre roto, a pesar de que su esposa y su hermano desaparecieron hace tres años secuestrados por islamistas radicales. Ni siquiera ahora, que Alepo está en ruinas. “En la cárcel, me volví inmune a la desesperación”.

Nuestra entrevista termina cuando Yassin al-Haj Saleh, de 55 años, tiene que subir al escenario. El escritor sirio ha sido invitado a Bruselas por el European Endowment for Democracy. Mientras las bombas caían inmisericordes sobre Alepo –la ciudad donde estudió Medicina hace mucho tiempo-, ha venido a Bruselas para pedir atención hacia la única parte en este conflicto que está siendo constantemente olvidada: el pueblo sirio. Pero antes, quiere decirnos algo más.

“En esta última hora, he notado que esperabais que tuviera respuesta para todas las preguntas posibles”, dice, ya desde la puerta. “Es algo que me sucede habitualmente: como soy sirio, la gente piensa que lo sé todo sobre este conflicto. Pero cada vez es más difícil explicar lo que sucede sobre el terreno. Lo que hay en mi país no es una guerra civil. Se ha convertido en un complejo conflicto internacional en el que participan decenas de países”. Levanta las manos. “No tengo todas las respuestas”.

Sin embargo, Saleh es un testigo privilegiado. El 30 de marzo de 2011, dos semanas después de que empezara la revolución siria, decidió pasar a la clandestinidad en Damasco. En la lucha contra Bashar al-Asad, el escritor no escatimó esfuerzos ni se mordió la lengua. Saleh había experimentado ya de primera mano los horrores de los Asad. En 1980, cuando tenía 19 años, fue encarcelado por el régimen de Hafez al-Asad, el padre de Bashar. No le dejaron libre hasta 1996, cuando tenía 35.

No fue el final de su calvario. En 2013, la situación en su propio país se volvió demasiado peligrosa para él, por eso se trasladó a Estambul, donde sigue viviendo. Poco después de su marcha, su esposa, Samira Khalil, fue secuestrada en Siria por un grupo islamista radical. Saleh no sabe nada de ella desde entonces. Ese mismo año, pocos meses antes del secuestro de Samira, los terroristas del Estado Islámico se llevaron a su hermano Firas. También él desapareció sin dejar rastro.

Saleh ha seguido activo todo este tiempo. En Estambul, cofundó Hamish, la Casa de la Cultura Siria. También sigue siendo un escritor prolífico, publicando libros, ensayos y artículos de opinión, principalmente en publicaciones árabes. Se le define a menudo como la “conciencia” de la revolución siria. Es un hombre encantador, de ojos melancólicos y maravillosa sonrisa, aunque cada día le resulte más duro mostrar esa sonrisa. En las últimas semanas y meses ha observado con aversión todo lo que estaba pasando en Alepo.

“La situación me afecta muy profundamente”, explica. Nuestra entrevista se desarrolla en inglés, una lengua que Saleh aprendió en la soledad de sus años en la cárcel. “Hice la enseñanza secundaria en Alepo. Viví en la ciudad durante siete años. Conozco los barrios que están siendo bombardeados y a la gente que está muriendo allí. Es terrible. Pero es mucho más que un drama personal. Frente a nuestros ojos, en tiempo real, una de las ciudades más antiguas del mundo está siendo destruida. Alepo es una de las cunas de la civilización. El silencio ensordecedor de la comunidad internacional lo hace mucho peor aún. Apartan la mirada para no ver un sufrimiento indecible y masivo. Al hacerlo así, la humanidad está aniquilándose a sí misma.

-De Standaard (DS): ¿De qué forma?

-Yassin al-Haj Saleh (YHS): En un primer momento, una persona es asesinada y el hecho se ignora. Después, se mata a diez personas, a mil, y se sigue ignorando todo. Ahora hay ya medio millón de víctimas en Siria. Mirar hacia otro lado sólo es posible para los que pueden desconectar su sensibilidad del sufrimiento humano. Para justificar su postura, utilizan el más reprobable de los argumentos: los sirios son atrasados, extremistas, terroristas, etc. La gente es asesinada y calumniada. Esto es, de hecho, un doble asesinato. El drama de Alepo perseguirá al mundo durante décadas.

-DS: Vd. conoce a mucha gente allí. ¿Todavía anhelan la libertad? ¿O sólo esperan que la guerra pueda terminar ya?

-YHS: ¿Acaso pueden escoger? Anhelan el final de esta guerra y anhelan la libertad.

-DS: ¿No cree que hay sirios que aceptarían de nuevo a Asad con tal de que las bombas dejaran de caer?

-YHS: No, una gran mayoría de sirios quiere que se vaya. No le respeta ni la gente que le muestra lealtad de forma ostensible. También ellos quieren un cambio político. Y ese cambio es sólo posible si la dinastía Asad desaparece. Uno debe tener en mente que Siria tenía una forma muy especial de dictadura: el clan Asad no gobernaba el país, eran sus amos. Nosotros, los ciudadanos, éramos sus esclavos. Su estrategia para Siria es clara: o Asad o nadie. Si Asad no puede aferrarse al poder, entonces todo el país –que llevan décadas saqueando- debería desaparecer del mapa.

Pienso que los sirios están ante todo agotados. No ven ya ninguna perspectiva de cambio. Este conflicto se agrava cada año. 2016 ha sido más sangriento que 2015, que fue peor que 2014, etc. Seguimos cayendo cada vez más profundamente en el infierno. No hemos recibido nunca apoyo o protección significativa de aquellos podían habernos apoyado y protegido. El mundo ha abandonado a los sirios.

-DS: ¿Cree que los sirios que se manifestaron contra Asad en 2011, habrían tomado la misma decisión si hubieran sabido entonces lo que saben hoy?

-YHS: Pienso que sí. Los sirios se sentían alentados por las revoluciones en Túnez, Egipto, Libia, Yemen y Bahréin. Estaban convencidos de que el mundo no iba a quedarse de brazos cruzados si el régimen les golpeaba con dureza. Eso ya había sucedido antes, en los primeros años de la década de 1980: Hafez al-Asad mató a miles de sirios en Hama, un crimen horrible del que tenemos un recuerdo fresco. Nos levantamos de nuevo en 2011, y pensábamos que era imposible una segunda Hama. Bien, nos equivocamos. Por ahora, la cifra de muertos en Siria es veinte veces la de Hama o más.

-DS: En la primavera de 2011, Vd. mismo estaba convencido de que Bashar al-Asad sería destituido a finales de año.

-YHS: En aquellos días, comparé la revolución con un embarazo. Confiaba en que duraría nueve meses, más o menos. Pero necesita de mucho más tiempo, la lucha está lejos de acabar.

-DS: El ejército sirio controla ya todo Alepo, por vez primera en cuatro años. ¿Es un punto de inflexión importante?

-YHS: Quizá, pero no es realmente el fin de la guerra. A propósito, no fue el ejército sirio el que conquistó Alepo. El trabajo lo hicieron los rusos, los iraníes, Hizbollah. Incluso me pregunto cuántos soldados de Asad participaron realmente en la batalla.

Desde el atentado del 18 de julio de 2012, cuando la cúpula de oficiales y jefes de inteligencia del régimen de Asad fueron asesinados en Damasco, todo el mundo se involucró en Siria. ¿No es absurdo que de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, cuatro estén combatiendo en Siria? Rusia, EEUU, Francia y el Reino Unido, todos ellos están implicados. ¿No es absurdo que haya en Siria yihadistas activos de decenas de países distintos?

Se ha convertido en un conflicto global. Perdimos nuestra soberanía hace ya bastante tiempo. Los iraníes y los rusos son ahora los verdaderos amos de Siria.

-DS: Asad parece controlar mucho más todo que hace dos o tres años, aunque tenga que agradecérselo a Rusia y a Irán. ¿Ve alguna posibilidad de que pueda reajustar su actitud en una dirección más humana?

-YHS: Estoy muy convencido de que Asad actuará de forma aún más represiva. Cuando su padre aplastó a la oposición en los primeros años de la década de 1980, una oleada de fascismo barrió el país. Decenas de miles de personas fueron encarceladas, torturadas, humilladas. Esta vez no va a ser diferente. Cuando se aplasta una revolución, los regímenes actúan siempre incluso con más brutalidad que antes. En Egipto, la situación es peor tras el golpe del general Sisi de lo que estaba con Mubarak. En las cárceles están violando a las mujeres e incluso a los hombres. Esto no sucedía antes.

-DS: Vd. pasó 16 años en la cárcel con Asad padre. ¿Cómo le cambiaron esos años?

-YHS: No sólo me “cambiaron”, esta palabra no es lo suficientemente contundente como para describir aquellos años. Aquellos 16 años fueron mi segunda infancia. En ese sentido, uno podría definirlos como un privilegio. Tener dos infancias es un privilegio, ¿no es verdad? ¿Quién puede decir que creció dos veces? Tengo un conjunto doble de recuerdos. A menudo retrocedo a mis años de escolar en Raqqa, a los amigos de mi niñez. Cerca de esos recuerdos veo imágenes de mi tiempo en la cárcel y de mis colegas allí.

-DS: Para empezar, ¿por qué le arrestaron?

-YHS: Porque era miembro de un Partido Comunista que se oponía al régimen. Cuando terminé en la cárcel, desde luego que no tenía ni idea de que estaría allí tanto tiempo.

Ahora veo esa experiencia formativa como un proceso de emancipación. Todo el mundo tiene prisiones en su interior, prejuicios y limitaciones que uno no puede superar. Me dieron dieciséis años para luchar contra todo eso. Se podría decir que conseguí mi verdadero diploma en la cárcel. Aprendí más en las celdas de Hafez al-Asad que en la universidad de Alepo.

-DS: Estuvo encarcelado en la infame prisión Tadmor, que es conocida como…

-YSH: (interrumpiendo) Era el lugar más horrible sobre la Tierra.

-DS: ¿Cuánto tiempo permaneció allí?

-YHS: Once meses y dieciséis días. Un período terrible. Tadmor no era una prisión, era un campo de concentración. Allí se torturaba a todo el mundo, se le hacía pasar hambre, se le humillaba, y lo mismo pasó conmigo. No lo hacían para castigarnos o conseguir información. Algunos de los presos llevaban en la cárcel más de quince años y seguían siendo torturados y así durante años. No tenía ningún sentido. Era una forma de disciplinar a toda la sociedad. Era un lugar donde todos los sirios estaban siendo humillados. Era una fábrica donde la esencia del régimen de los Asad, el miedo, se producía a escala industrial.

-DS: Estuvo en la cárcel durante dieciséis años. Sin embargo, cuando se inició la revolución en 2011, decidió participar y pasar a la clandestinidad. Podría haber decidido en aquel momento que ya había cumplido con su deber.

-YHS: Ese sería un razonamiento vergonzoso. Uno no acaba nunca de cumplir con su deber. Guardar silencio no era una opción.

En los años anteriores a la revolución, también escribía artículos. Pero, desde luego, no podía mostrarme demasiado tajante. Nunca escribí falsedades, pero no podía llamar por su nombre a ciertas cosas. En marzo de 2011 ya no quise seguir haciendo eso. Pasé a la clandestinidad para dejar atrás cualquier forma de autocensura. Sentí que habíamos llegado a un punto de inflexión histórico.

Quizá había otro factor en juego. Durante mis años en la cárcel, me había vuelto adicto, por decirlo de algún modo, a esas experiencias. Al principio de la revolución, tuve el sentimiento de que se me había dado una segunda oportunidad para cambiar. Para mí, esa es la verdadera libertad: cambiarte a ti mismo. Si sigues siendo la misma persona durante ochenta años, es que estás viviendo realmente tras las rejas. Pero, si soy honesto, tengo que decir que nunca pensé que la lucha fuera a ser tan larga, tan dura y tan costosa.

-DS: ¿Fue un error?

-YHS: No.

-YHS: Pero pagó un precio muy alto.

-YHS: Por supuesto que nunca pensé que secuestrarían a mi mujer y a mi hermano. Por eso el precio fue tan alto. A nivel personal, pasé por una guerra civil. Desde 2013, no sé nada de Samira ni de Firas.

-DS: ¿Mereció la pena?

-YHS: No. Son dos “obligaciones” que chocan la una contra la otra. No podía sino implicarme en la lucha por el cambio político en Siria. Pero eso me llevó a una tragedia personal total.

En la cárcel, solían ponernos en situaciones que nos desgarraban. El régimen se ofreció a liberarme en varias ocasiones, pero a cambio de que firmara un documento que me robaba la dignidad. Hicieron una propuesta de este tipo cuando tenía veintitantos años… Era muy difícil no firmarla. A esa edad, cuando eres tan joven, no quieres estar en prisión. Pero no la firmé.

Ahora, ni siquiera tengo el lujo de poder escoger. Mis enemigos me han robado el privilegio de rendirme. Lo que hace inevitable que continúe luchando. Si no, me arriesgaría a dejar a Samira y a Firas sin su dignidad. No puedo rendirme. Soy su representante ahora.

-DS: Su mujer y su hermano fueron secuestrados por islamistas radicales. ¿Vio venir el peligro?

-YHS: En mayo de 2012, escribí un largo ensayo en el que advertía de la aparición del “nihilismo militante”, como lo llamé en aquella época. En sus comienzos, la revolución en Siria fue en gran medida no violenta. Pero como el régimen respondió de forma tan implacable y como la ayuda internacional no se materializó, el modelo de los yihadistas fue ganando terreno. Cuantos más cadáveres aparecían en las calles –una vez en Duma, en 2013, vi 26 cuerpos en un mismo día-, más atractivo resultaba el islamismo militante. Especialmente en un país como Siria, donde la mayoría religiosa sunní llevaba años siendo reprimida.

Así fue cómo desembocamos en una escalada de miedo y violencia. Los sirios estaban cada vez más indignados, frustrados, desesperados. Los salafíes proporcionaban una respuesta a un deseo de destrucción. Destruir al régimen y al mundo entero. Y a uno mismo. Las organizaciones yihadistas salafíes son manifestaciones autodestructivas en nuestras sociedades contemporáneas. Los suicidas-bomba son la encarnación de esta tendencia.

-DS: Parece que ahora, en el campo de batalla, los islamistas radicales como el Estado Islámico y Al-Qaida están perdiendo.

-YHS: Ese es el único aspecto positivo que podemos ver en todo lo que está sucediendo ahora. Quizá sea este el Waterloo de los islamistas. Pero no nos equivoquemos: incluso si así sucediera, la situación no va a mejorar. Hay un país destruido. Medio millón de personas han sido asesinadas. Doce millones de sirios están forzosamente desplazados. Aunque uno quisiera borrar esos hechos, sencillamente, no es posible.

-DS: ¿Cree que la “Guerra contra el Terror”, definida ahora como la lucha contra el Estado Islámico, se ha convertido en una prioridad esencial para Occidente?

-YHS: Se trata de una guerra posdemocrática. No hay un comienzo claro, ni un enemigo claramente definido, ni un juego final claro. Es una guerra que lleva a un estado de emergencia perpetuo. Las democracias occidentales están ya sufriendo mucho por esta razón. Y es algo muy peligroso.

Al mismo tiempo, se permite que continúe en el poder el hombre que entre marzo de 2011 y agosto de 2013 había torturado hasta la muerte a más de diez mil personas. ¿Por qué la guerra contra el EI es mucho más importante que la lucha contra Bashar al-Asad? De hecho, el mensaje que Occidente envía al pueblo de Siria es muy claro: pensamos que nuestras vidas son mucho más importantes que las vuestras.

-DS: ¿Siente que Occidente les está sacrificando?

-YHS: No, peor aún, hemos sido sacrificados y despachados como seres irrelevantes. En agosto de 2013, Asad perpetró asesinatos masivos contra su propia población con armas químicas. Después de esa acción, EEUU y Rusia concluyeron cobardemente un acuerdo que autorizaba al verdugo a irse de rositas a cambio de destruir sus armas químicas. Ambas partes salvaron la cara, pero el mismo pueblo que había perdido 1.466 vidas justo unas semanas antes se quedó muy decepcionado. Pero fue aún peor: el régimen consiguió un laissez-passer para proseguir su masacre con otras armas. Eso es exactamente lo que Asad hizo: arrojó cantidades masivas de bombas de barril y antibúnker. Incluso continuó utilizando armas químicas porque de alguna manera se las arregló para no entregarlas en su totalidad.

En mi punto de vista, la reacción a ese ataque con gas venenoso es el peor crimen internacional de las pasadas décadas. Fue un ataque gigantesco contra la verdad. Nadie puede decir que no sabía. Sucedió justo ante los ojos de la comunidad internacional.

-DS: Los críticos occidentales sostienen con frecuencia que la oposición siria no consiguió los apoyos necesarios porque los opositores a Asad estaban divididos entre sí. ¿Compartes ese argumento?

-YHS: No. Claro que la oposición estaba dividida. ¿Cómo no iba a estarlo, después de décadas de dictadura? ¿Esperaba alguien realmente que de repente apareciera en escena una oposición unida con una mente abierta, un discurso moderado y un plan de acción potente? ¡Qué hipocresía! ¿Vamos a culpar a las víctimas de ser débiles? Pueden también recordar que antes de la revolución ningún líder mundial tuvo nada crítico que decir cuando Bashar ocupó el puesto de su padre. (La ex Secretaria de Estado de EEUU) Madeleine Albright fue incluso a Damasco a estrecharle la mano. Y ningún partido izquierdista ni comunista hizo ruido alguno en todos esos años sobre el destino de la república en Siria. Ninguno de ellos.

-DS: ¿Sigue siendo comunista?

-YHS: No, aunque sigo siendo de izquierdas. Si hay algo en lo que destacan la mayor parte de mis antiguos compañeros a nivel mundial es en su completa ignorancia sobre Siria. Sus puntos de vista sobre el mundo se han quedado totalmente obsoletos. Los conocimientos de los que presumen se basan en recuerdos. Recuerdan principalmente los viejos días en que en el Oriente Medio había un país supuestamente socialista llamado Siria. Algo que, en primer lugar, ha sido siempre un disparate. A partir de 1980, como máximo, ese disparate se convirtió en autoengaño. Es altamente sorprendente que la vieja izquierda, cuando discute sobre Siria, exprese casi los mismos puntos de vista que la derecha populista.

-DS: ¿Y la nueva izquierda?

-YHS: Los socialdemócratas son menos arcaicos, pero se han concentrado completamente en Occidente y han perdido sus creencias internacionales en algún lugar del camino.

-DS: Vd. es ahora un refugiado, ¿qué piensa de la forma en que Europa está manejando la crisis de refugiados?

-YHS: ¿Para quién es realmente una crisis? ¿Para los refugiados o para Europa? [de forma categórica] El problema real es que la gente se vio obligada a abandonar su país, sus hogares y sus familias, después de llevar ya años abandonados. Desde luego que esa gente quiere ir ahora a países como Alemania o Suecia. ¿Por qué Turquía, el Líbano o Jordania son lugares más lógicos para albergarles? Esos refugiados son extremadamente racionales: saben que tienen menos posibilidades en nuestra región que en Europa.

-DS: ¿Todavía cree que hay una forma de salir del rompecabezas sirio?

-YHS: No mientras Asad siga en el poder. Parece inevitable una gran conferencia internacional, que tenga como objetivo encontrar una nueva mayoría política para Siria. Si tenemos que continuar con Asad, habrá un resentimiento enorme.

-DS: ¿Confía aún en volver a Siria algún día?

-YHS: Mis esperanzas no son muy grandes. Pero después de todos esos años en prisión, me he vuelto inmune a la desesperación. Tenía entonces veinte años. Debería haber seguido en la universidad, conocido amigas, disfrutado de fiestas. Todo ese tiempo perdido no volverá nunca. Entonces, todo eso me desesperaba. Ahora me siento liberado para siempre de esos sentimientos de desesperación. Porque sigo en la lucha.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=221934

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Estados Unidos: Piden universidades de California no deportar estudiantes indocumentados

Estados Unidos/01 diciembre 2016/Fuente: Televisa

Los tres sistemas de educación superior pública de California enviaron una carta conjunta a Trump; piden que no deporte a estudiantes que están sin documentos migratorios en Estados Unidos.

Líderes de universidades públicas de California pidieron al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que permita a estudiantes indocumentados continuar con sus estudios sin miedo a la deportación.

En una carta firmada por líderes universitarios de California, instaron al presidente electo a abrazar a estudiantes que están sin documentos migratorios en Estados Unidos.

Los tres sistemas de educación superior pública de California enviaron el martes la carta conjunta a Trump.

«Estos hijos e hijas de inmigrantes indocumentados son tan estadunidenses como cualquier otro niño en toda la nación» en todos, excepto la letra de la ley, no representan una amenaza para la seguridad y han contribuido a sus comunidades».

Así lo suscribieron la presidenta de la Universidad de California (UC), Janet Napolitano, el canciller estatal de Cal State, Timothy P. White, y Eloy Ortiz Oakley, canciller designado de Colegios Comunitarios de California.

Los alumnos «representan algunos de los mejores que nuestra nación tiene para ofrecer», expresó la misiva.

«Deberían ser capaces de perseguir su sueño de educación superior sin temor a ser arrestados o deportados sólo por tratar de aprender».

«Le imploramos que les hagan saber que son miembros valiosos de nuestras comunidades y que se les permitirá continuar con el sueño americano».

Trump advirtió durante su campaña que iba a revertir un programa de la administración del presidente Barack Obama que aplazó los procedimientos de deportación contra ciertos jóvenes que fueron llevados al país ilegalmente como menores, pero permanecieron en la escuela y fuera de problemas.

Ese programa, conocido como Acción Diferida por Llegadas desde la Niñez, o DACA, ha aprobado casi 1.3 millones de casos a nivel nacional, incluyendo 367 mil en California, la mayor representación de cualquier estado.

La súplica de California se produce después de que más de 300 presidentes de universidades firmaron una carta abierta a los líderes del país que presionan para que el DACA sea mantenido y ampliado como un «imperativo moral y una necesidad nacional».

Esa carta anterior fue iniciada por el presidente del Colegio Pomona, David Oxtoby, y firmada por líderes en campus como Yale, Harvard, UC Davis, Occidental College, Pitzer College y Scripps College.

Sin embargo, no está claro que los estudiantes corran un riesgo inmediato.

Terry Hartle, vicepresidente del Consejo Estadunidense de Educación, dijo que las recientes declaraciones de Trump sugieren que puede concentrarse primero en construir un muro a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México y en deportar a personas con antecedentes criminales.

Los sistemas no rastrean el estatus migratorio de los estudiantes, pero la estimación aproximada más cercana proviene del AB 540, una ley estatal de 2001 que permite a algunos estudiantes de California que se encuentran en Estados Unidos ilegalmente calificar para la matrícula universitaria en el estado.

El año pasado, se otorgaron exenciones AB 540 a cerca de 61 mil estudiantes en colegios comunitarios, 10 mil en Cal State y tres mil 700 en la UC. En general, los tres sistemas educan a 2.8 millones de estudiantes.

Los administradores dicen que el programa DACA, que también da acceso a permisos de trabajo, ha permitido a más estudiantes salir de las sombras.

En la UC, por ejemplo, el número de estudiantes que calificaron para las exenciones AB 540 saltó de 885 en 2011 a tres mil 765 el año pasado. Los colegios comunitarios, Cal State y los campus privados como Pomona también reportaron aumentos significativos.

«Queremos hacer todo lo posible para proteger a los estudiantes (cobijados por el programa) DACA», dijo Napolitano. «Han hecho todo lo que la sociedad les ha pedido, excepto que fueron traídos aquí como niños indocumentados», finalizó.

Fuente:http://noticieros.televisa.com/mundo/2016-11-29/piden-universidades-california-no-deportar-estudiantes-indocumen/

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Why should Indian students be looking at Canada now?

América del Norte/Canadá/Noviembre de 2016/Fuente: Hindustantimes

RESUMEN: Algunas buenas noticias han llegado para los jóvenes indios con el objetivo de estudiar en Canadá. El número de nuevas inmigraciones que se permitirán entrar en el país en 2017 se mantuvo en 300.000, igual que en 2016. Sin embargo, aunque hubo una disminución en la ingesta de refugiados, los objetivos para las categorías más utilizadas por los indios (clases de unificación económica y familiar) ) Fueron criados. El ministro de Refugiados y Ciudadanía, John McCallum, también admitió recientemente que los estudiantes internacionales estaban siendo cambiados por políticas y leyes hostiles que hacían difícil que se convirtieran en ciudadanos canadienses. Un anuncio cambiaría las cosas pronto, prometió. El ministro admitió que los estudiantes internacionales no eran bien tratados y que estaban entre el grupo más prometedor de inmigrantes – ya que eran jóvenes, podían hablar inglés o francés y sabían mucho sobre Canadá. «Vamos a darles más puntos bajo entrada expresa y hacer más fácil para ellos convertirse en residentes permanentes», prometió McCallum.

Some good news has come in for young Indians aiming to study in Canada. The number of new immigrations to be allowed into the country in 2017 was kept at 300,000, the same as 2016. However, though there was a drop in the intake of refugees, the targets for categories most used by Indians (economic and family unification classes) were raised.

Refugees and citizenship minister John McCallum also reportedly admitted recently that international students were being short-changed by unfriendly policies and laws that made it difficult for them to become Canadian citizens. An announcement would change things soon, he promised.

The minister admitted that international students were not treated well and that they were among the most promising group of immigrants – as they were young, could speak English or French and knew a lot about Canada. “We’re going to give them more points under express entry and make it easier for them to become permanent residents,” McCallum promised

Education policy

However, even before these friendly moves, Canada’s new education policy in 2014 had marked India out as a priority country. Universities Canada (then the Association of Universities and Colleges of Canada) played an active role in consultations led by the Advisory Panel on Canada’s International Education Strategy. It highlighted Canadian universities’ commitment to internationalisation and interest in a multi-faceted approach to international education, including two-way international student and faculty mobility, international research collaboration, joint academic programming etc. Universities Canada noted that the rapidly emerging economic powers (Brazil, China, India) were priority countries for many Canadian universities, which were also building people-to-people linkages and institutional partnerships with other emerging markets on the horizon. “The development of Canada’s International Education Strategy was informed by recommendations in the Advisory Panel’s final report,” a Universities Canada official said.

The Canadian government was making a targeted effort to recruit top talent in India, so through various initiatives India’s students were being made aware of “Canada’s value proposition – a consistently high-quality education at an attractive price in a tolerant, diverse, safe and welcoming environment,” the official said

The numbers are growing. Between 2004-2005 and 2013-2014, the number of international ­students enrolled in Canadian universities almost doubled, from 66,000 to 124,000. Their population grew 88% between 2004-2005 and 2013-2014 even as the number of Canadian students grew by 22%.

When it came to individual source countries for Canada in 2013-2014, the top five were China (34.1%), France (7.6%), the United States (6.2%), India (5.7%), and Saudi Arabia (4.5%).

Popular fields of study

In 2013 (from the latest available data from Statistics Canada), the most popular fields of study for full-time international students from India were: architecture, engineering and related technologies (37%), business, management and public administration (22%), mathematics, computer and information sciences (12%) and physical and life sciences, and technologies (11%).

Canada was seen to be attractive for many reasons. The universities were known for high-quality, internationally-recognised education, regardless of size, location and area of focus, all at an affordable cost. English, French and bilingual universities ensured there were language barriers for English and French speakers.

Lifestyle counted too. Three Canadian cities – Vancouver, Toronto and Calgary – were among the world’s top five most livable cities, according to The Economist 2015 list. Montreal was also ranked high in 14th place. What were the problems that Indian students were likely to face? In a Quora response, Shilpa Isabella, a ‘Bangalorean in Toronto’ says the cold is hard to deal with. University is also no joke. “It is hard. B (minus) or 70% is the passing grade. In India, 70% was a distinction at my university, here it meant I barely scraped through. It doesn’t matter what course you take. Every class would need 100% commitment.”

Fuente: http://www.hindustantimes.com/education/why-should-indian-students-be-looking-at-canada-now/story-bolANSVWNheTGGvVpzl9HO.html

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Estados Unidos: Educadores ofrecieron propuestas para ayudar a los estudiantes inmigrantes

Estados Unidos/10 noviembre 2016/Fuente: La Tribuna Hispana

Desde hace 4 años varios distritos escolares en Long Island, Nueva York, han visto crecer el número de estudiantes inmigrantes —mayormente de los países centroamericanos afectados por la pobreza y la violencia—, que necesitan más recursos para poder aprender inglés y flexibilidad para cumplir con los requisitos de graduación, dijeron un grupo de panelistas que, el pasado lunes 7 de noviembre, llevaron a cabo un simposio organizado por el Distrito Escolar de Roosevelt.
Los administradores escolares presentes en el foro, donde estuvieron presentes docenas de residentes del distrito y educadores de los sistemas escolares de Nassau y Suffolk, cuestionaron la efectividad de un enfoque educativo actual, denominándola “de talla única”, porque los recién llegados necesitan una ayuda adicional para ponerse al día académicamente y superar el trauma emocional de los peligrosos viajes que realizaron en su travesía para cruzar la frontera de Estados Unidos con México.

Piden nuevas políticas educativas
“Debemos desarrollar un marco de políticas estatales, que apoye un sistema integral de vías de aprendizaje flexibles”, dijo en su discurso inaugural Betty Rosa, la Canciller de Regentes, remarcando que ella favorece el uso de “planes de aprendizaje individuales” para adaptarse a las necesidades individuales de diferentes estudiantes.
Los maestros y los padres también dijeron que se necesita más información para los familiares o tutores de los niños, quienes han venido a Estados Unidos desde el 2012, como parte de una ola migratoria de menores no acompañados, en su mayoría de El Salvador, Honduras y Guatemala. Muchos de ellos fueron reasentados con sus padres o familiares cercanos en la Isla y la mayoría eran adolescentes y no hablaban inglés cuando fueron matriculados en las escuelas, pero se espera que ellos logren los estándares de los hablantes nativos para poder graduarse.

Crear nuevas iniciativas
Rosa señaló que apoyará la creación de iniciativas para ayudar a los menores. “En lugar del Common Core, necesitamos encontrar un núcleo de resultados comunes”, dijo ella, al tiempo que abordó “el tema de la equidad y la justicia social”.
Como miembro de la junta de Regentes, que establece la política educativa a nivel estatal, Rosa ha criticado la implementación del estado de los planes educativos del Common Core, el cual ha tenido un amplio rechazo en Long Island. Ella asumió el cargo de canciller del Panel de Regentes, de 17 miembros, en abril pasado.
El simposio, para discutir “un camino para el éxito académico, social y emocional” de los estudiantes inmigrantes, trató de abrir una conversación sobre la mejor manera de responder a la migración de estos niños a la Isla. La mayor parte de ellos asisten a escuelas en comunidades donde gran parte de sus residentes son inmigrantes, dijo Marnie Hazelton, superintendente de las escuelas de Roosevelt.

Un llamado al departamento de Educación
En una sesión anterior en el simposio del lunes, los superintendentes de los distritos escolares de Mineola y Glen Cove, acordaron que les gustaría encontrar otras maneras de integrar, evaluar y medir el progreso de los estudiantes inmigrantes que llegaron en la edad de acudir a la escuela secundaria y que tienen pocas probabilidades de pasar los exámenes estandarizados. También destacaron la necesidad de más fondos para las escuelas que están haciendo frente a una afluencia de estos estudiantes.
“Le ruego al Estado que escuche”, dijo Maria Rianna, la directora de las escuelas de Glen Cove, refiriéndose al Departamento de Educación del estado. “Dennos la oportunidad de presentar propuestas de subvenciones que provean una variación en cómo proveemos servicios de ENL [Inglés como un Nuevo Idioma]… Para que nuestras fórmulas de ayuda estatal satisfagan mejor las necesidades de los estudiantes”.

Los estudiantes inmigrantes en número
Long Island es uno de las principales regiones en toda la nación donde se han reasentado los menores no acompañados, porque allí se encuentran grandes comunidades de inmigrantes centroamericanos, establecidas desde hace más de tres décadas.
Las cifras emitidas recientemente por la Oficina Federal de Reasentamiento de Refugiados, muestran que en el año fiscal que finalizó el pasado 30 de septiembre, la población de niños reasentados aumentó en un 140 por ciento en los últimos 12 meses, con 2,691 menores no acompañados que ahora viven en Nassau y Suffolk. Miles más llegaron en los últimos años.

Fuente noticia: http://www.tribunahispanausa.com/long-island/educadores-ofrecieron-propuestas-para-ayudar-los-estudiantes-inmigrantes/

Fuente imagen:http://epmghispanic.media.clients.ellingtoncms.com/img/photos/2016/02/12/inmigrantes_t670x470.gif?23a6cf1936a4889561e6226c97c290c4239edcb5

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Más que un colegio

Por: Misiones Salesianas

Tras el verano, como cada año, llega la vuelta al cole. Una rutina para muchas familias, pero no para todos los niños y niñas. En el mundo, 59 millones de niños y niñas en edad de ir al colegio no lo hacen y, según alerta Naciones Unidas, si la tendencia no se revierte, dos de cada cinco de esos niños y niñas no pisarán un aula en su vida. Es cierto que las cifras de acceso a la educación básica han ido mejorando año tras año, pero la realidad es que mientras haya niños privados del derecho a la educación, no podemos bajar la guardia ni un segundo.

Dos de las graves amenazas con las que se encuentra la educación son los conflictos y las guerras en las que el mundo está inmerso hoy. Más de 24 millones de niños, niñas y adolescentes no pueden acudir a las escuelas para formarse debido al conflicto en sus países. Sudán del Sur, Siria, Afganistán, Níger… son lugares donde ir a la escuela puede suponer jugarse la vida.

Millones de niños y niñas necesitan una escuela integradora que los prepare para el futuro. Que consiga desarrollar las capacidades de cada uno y los convierta en jóvenes llenos de oportunidades y agentes de cambio de un mundo injusto.

La educación de los niños, niñas y jóvenes más desfavorecidos es el punto clave para el desarrollo, para luchar contra la pobreza y mejorar la calidad de vida de millones de personas.

Ir al colegio es más que recibir educación y conocimientos, es tener la oportunidad de desarrollarse como personas, de ser ciudadanos de provecho y de conseguir un futuro esperanzador. Los misioneros salesianos se esfuerzan cada día en los más de 130 países en los que están presentes para que el derecho a la educación sea una realidad para todos los niños y niñas del planeta.

TÚ PUEDES CAMBIAR EL FUTURO
DE MILLONES DE NIÑOS, NIÑAS Y JÓVENES

Fuente: http://www.misionessalesianas.org/especiales/2016/mas-que-un-colegio-0109/

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HRW: Brindar refugio genuino a la población desplazada en el mundo

Estados Unidos/Septiembre de 2016/hrw.org

Asumir un compromiso con la reubicación y la ayuda en Cumbres Globales sobre Refugiados

La crisis masiva de refugiados exige una respuesta global sin precedentes, señaló hoy Human Rights Watch. En dos cumbres que se celebrarán el 19 y el 20 de septiembre de 2016 en las Naciones Unidas, los líderes mundiales deberían adoptar medidas audaces para repartir la responsabilidad por los millones de personas desplazadas debido a violencia, represión y persecución.

Los líderes se reunirán en Nueva York para analizar la posibilidad de brindar mayor asistencia a los países donde primero llegan los refugiados, en un momento en que esas naciones están al límite de sus capacidades. La situación ha puesto en jaque el principio fundamental de la protección de los refugiados, que es la prohibición de la devolución, es decir, no obligar a los refugiados a regresar por la fuerza a sitios donde podrían ser perseguidos o sufrir otras graves amenazas. Estas personas huyen de contextos de violencia en Afganistán, Birmania, la República Democrática del Congo, Eritrea, Honduras, Irak, Somalia y Siria, entre otros.

“Están en juego millones de vidas”, sostuvo Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch. “No se trata solamente de asegurar más dinero o mayores cupos de reasentamiento, sino también de fortalecer los principios legales de protección de refugiados, que están más en riesgo que nunca”.

Este año, Human Rights Watch ha documentado instancias en que guardias fronterizos turcos dispararon y obligaron a retroceder a civiles que aparentemente pedían asilo; la negativa de Jordania a permitir el ingreso de solicitantes de asilo sirios o brindarles asistencia en su frontera; el anuncio de Kenia de que cerrará el campamento de refugiados más grande del mundo en noviembre y obligará a los somalíes a regresar a su país, a pesar de los posibles peligros que enfrentan allí; y los actos de Paquistán e Irán para hostigar y excluir de los registros a refugiados afganos, y para coaccionarlos con el fin de que regresen a un país en conflicto.

La Asamblea General de la ONU ha convocado a la cumbre del 19 de septiembre “con el finde unir a los países en torno a un enfoque más humanitario y coordinado” en materia de refugiados. La declaración final, cuya versión preliminar ya se ha redactado, hadesperdiciado una oportunidad de ampliar el alcance de la protección y reduce la expectativa de que haya nuevos compromisos concretos. No obstante, reivindica los derechos de los refugiados y exige que la responsabilidad por esta cuestión se distribuya de manera más equitativa. Debido a la magnitud de la crisis de refugiados y el rebrote populista en muchas regiones del mundo, esta reivindicación debería servir de base para la acción colectiva, apuntó Human Rights Watch.

El 20 de septiembre, el presidente de EE. UU. Barack Obama auspiciará una “Cumbre de Líderes” para incrementar los compromisos sobre asistencia, aceptación de refugiados y oportunidades laborales y educativas para estas personas. Se espera que los gobiernos asuman compromisos concretos para cumplir las metas de duplicar la cantidad de cupos de reasentamiento y otras admisiones, incrementar el volumen de asistencia en un 30 por ciento, escolarizar a 1 millón más de niños refugiados y reconocer a 1 millón más de adultos refugiados el derecho a trabajar. Aunque los participantes no han sido anunciados, se espera que asistan entre 30 y 35 países. Canadá, Etiopía, Alemania, Suecia y Jordania se sumarán a Estados Unidos como cofacilitadores.

Promover la asistencia humanitaria a los países de primera llegada
La gran mayoría de los 21,3 millones de refugiados del mundo se encuentran en el sur global, donde con frecuencia están expuestos a nuevos peligros, discriminación y abandono. Human Rights Watch exhortó a países de primera llegada como Turquía, el Líbano,Jordania, Tailandia, Kenia, Irán y Pakistán a adoptar propuestas para ofrecer a los refugiados un mayor acceso a trabajo y educación.

Las naciones más ricas del mundo en general no han ayudado a los países que están en primera línea a afrontar la crisis de desplazados. Al 9 de septiembre, se habían cubierto un 39 por ciento de los llamamientos de asistencia de la ONU. Los niveles más bajos de financiamiento se registraban en África, donde el llamamiento para los refugiados procedentes de Sudán del Sur se situaba en el 19 por ciento. La planes regionales de respuesta a refugiados para Yemen y Siria alcanzaban un financiamiento del 22 y el 49 por ciento.

Incrementar el número de reasentamientos en otros países
Aunque el reasentamiento desde los países de primera llegada es clave para ayudar a los refugiados a reconstruir sus vidas y aliviar la situación de los países receptores, la solidaridad internacional brilla por su ausencia. En 2015, la agencia de la ONU para los refugiados facilitó el reasentamiento de 81.000 de los  960.000 refugiados que se proyectaba que necesitarían ser reubicados a nivel global. La agencia calculó que más de 1,1 millón de refugiados necesitarían ser reasentados durante 2016, pero previó que los países solamente ofrecerían 170.000 lugares. Durante una reunión de alto nivel de la ONU celebrada en marzo, los representantes de 92 países se comprometieron únicamente a un leve incremento en el cupo de reubicaciones para refugiados sirios.

En la Unión Europea, la llegada por vía marítima durante 2015 de más de 1 millón de solicitantes de asilo y migrantes —y las más de 3.700 muertes en el mar— pusieron en evidencia la necesidad de establecer vías seguras y lícitas para el desplazamiento de refugiados, como las reubicaciones. Sin embargo, numerosos países de la UE, como Austria,Bulgaria y Hungría, centran su estrategia principalmente en prevenir las llegadas espontáneas, desviar responsabilidades a tercero y provocar una regresión de los derechos de refugiados.

Un plan europeo de 2015 para reubicar a 22.500 refugiados procedentes de otras regiones durante un lapso de dos años ha conseguido reubicar solamente a 8.268 de estas personas, según cifras de julio de 2016. La mayoría de los países de la UE tuvieron resultados inferiores a los esperados, y 10 directamente no reubicaron a ninguna persona en el marco del plan.

Terminar con sistemas abusivos y acuerdos con graves falencias
En marzo, la UE concluyó un acuerdo con Turquía para permitir el regreso a ese país de casi todos los solicitantes de asilo, sobre la base del endeble argumento de que Turquía es un país seguro para el asilo, cuando en realidad está al borde de la desintegración. Australia transfiere de manera forzada a todos los solicitantes de asilo que llegan por vía marítima acentros de procesamiento extraterritoriales, donde estas personas sufren abusos, un trato inhumano y abandono.

La UE y Australia deberían renunciar a estas políticas abusivas. Los países de la UE deberían adoptar sin demora una propuesta de marco permanente de reubicación con metas más ambiciosas y un compromiso claro de cumplimiento, destacó Human Rights Watch. Deberían compartir de manera justa la responsabilidad por los solicitantes de asilo que lleguen espontáneamente, y ayudar a mitigar las presiones sobre Grecia e Italia.

Los gobiernos también frustran la posibilidad de asilo al cerrar campamentos, como KeniaTailandia, y al detener a solicitantes de asilo, como ocurre en Australia, Grecia, Italia,México y Estados Unidos.

Si bien en muchos aspectos EE. UU. ha estado a la delantera en la reubicación de refugiados y la respuesta a los llamamientos de ayuda humanitaria de la ONU, ha actuado con suma lentitud y escasa generosidad en la recepción de refugiados sirios. Y ha mostrado considerables puntos débiles, como sus políticas sobre fronteras para menores y otras personas que huyen de la violencia de pandillas en América Central, y el uso de México como filtro para evitar que lleguen a la frontera estadounidense.

El gobierno de Obama cumplió su meta de aceptar a 10.000 refugiados sirios durante este año fiscal, aun con la oposición de más de la mitad de los gobernadores del país y sin que el Congreso asignara fondos de reasentamiento; sin embargo, Estados Unidos tiene capacidad para reubicar a una cantidad de personas muchas veces superior. Debería comprometerse a cumplir los objetivos de la Cumbre de Líderes, lo cual implicaría duplicar el total de 85.000 refugiados acogidos este año a 170.000.

Varios otros países con capacidad para recibir a muchos más refugiados, como Brasil, Japón y Corea del Sur, han tenido una contribución bochornosamente pobre. Japón admitió a 19 refugiados en 2015, Corea del Sur solamente a 42 (además de los ciudadanos norcoreanos) y Brasil apenas a 6.

Rusia no recibe a refugiados reubicados. Los Estados del Golfo no responden a los llamamientos de reubicación de la ONU, aunque Arabia Saudita afirma que ha suspendido la deportación de cientos de miles de sirios que excedieron el plazo previsto para las visas de visitante. La mayoría de los Estados del Golfo, salvo Kuwait, también han respondido insuficientemente a los llamamientos de la ONU relativos a refugiados sirios, conforme se indica en un análisis de Oxfam.

“Cada país tiene una responsabilidad moral de asegurar los derechos y la dignidad de las personas que se ven obligadas a huir de su hogar”, observó Roth. “Cuando más de 20 millones de personas dependen de un esfuerzo internacional genuino para resolver su difícil situación, no basta con efectuar declaraciones grandilocuentes”.

Fuente: https://www.hrw.org/es/news/2016/09/13/brindar-refugio-genuino-la-poblacion-desplazada-en-el-mundo

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Migrantes infantiles son una arteria abierta en América Central

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La crisis migratoria desatada por los miles de niñas y niños de América Central detenidos en  Estados Unidos, representa una pérdida masiva de generaciones que huyen de la pobreza, la violencia y la inseguridad en Honduras, Guatemala y El Salvador, los tres países más violentos del llamado Triángulo Norte del istmo.

Unos 200 especialistas y funcionarios de países y organismos involucrados se congregaron en Tegucigalpa para promover soluciones a la emergencia humanitaria, el miércoles 16 y este jueves 17, en una Conferencia Internacional sobre Migración, Niñez y Familia, convocada por el gobierno hondureño y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

La conferencia concluyó con un llamado a establecer vías para que los países involucrados implementen un programa con recursos suficientes para el control efectivo de fronteras y la eliminación de “puntos ciegos”, usados en la ruta del migrante.

También exhortaron a concretar rápidamente una iniciativa regional que permita abordar esta crisis humanitaria en forma conjunta y definitiva, en reconocimiento de una responsabilidad compartida para alcanzar la paz, la seguridad, el bienestar y la justicia de las poblaciones centroamericanas.

Pero la declaración Hoja de Ruta: Una Invitación a la Acción no pasó de generalidades y careció de compromisos específicos para afrontar una crisis de dimensiones inéditas.

El gobierno de Estados Unidos afirma que las patrullas fronterizas capturaron este año a  unos 47.000 menores de edad, que permanecen retenidos en saturados albergues mientras se cumplen los trámites para su deportación.

José Miguel Insulza, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), dijo durante la conferencia que en el año 2011 los menores migrantes no acompañados de América Central que buscaban ingresar a Estados Unidos fueron 4.059 menores.

Pero esa cifra trepó a 21.537 en el 2013 y a 47.017 en lo que va del 2014.

“Esa gran cantidad de niños son de México, Guatemala, Honduras y El Salvador. Se ha identificado que 29 por ciento de esa cifra es de niños de Honduras, 23 por ciento de México, y 24 por ciento de Guatemala y El Salvador”, resumió Insulza, antes de hacer un llamado a no criminalizar la ola migratoria.

Las imágenes de cientos de menores, subiendo solos o acompañados con familiares o extraños en los vagones del tren mexicano conocido como “La Bestia”, con destino a la frontera con Estados Unidos, despertó finalmente la preocupación de los gobiernos del área por la situación.

En ello influyó el anuncio de la administración de Estados Unidos de que comenzaría a realizar deportaciones masivas de las niñas y niños interceptados en los últimos meses, lo que comenzó a hacerse realidad con los menores hondureños el lunes 14.

La reunión de Tegucigalpa congregó a funcionarios y expertos de países receptores y expulsores de los migrantes. Durante sus debates, los participantes analizaron que en el caso de Guatemala, la migración está dominada por la situación de pobreza, mientras que en El Salvador y Honduras, la gente huye más aún de la inseguridad ciudadana y la violencia criminal.

El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, los llamó incluso “desplazados de guerra” y consideró que se está ante una emergencia “que hoy ha explotado entre nosotros”.

De nueve menores migrantes no acompañados que cruzan la frontera de Estados Unidos, siete son hondureños que proceden de localidades denominadas como “territorios calientes” de la inseguridad y violencia, dijo el mandatario.

Ricardo Puerta, un experto en temas migratorios, dijo a IPS que la región centroamericana está perdiendo a sus generaciones, “esto está golpeando duro, en especial en países como Honduras donde la gente huye de la violencia y la edad de quienes emigran oscila entre los 12 y 30 años”.

“Estamos perdiendo muchos nuevos y buenos brazos y cerebros que por regla general no regresan, si lo hacen es como turistas nacionales, pero no en forma permanente”, acotó.

Laura García realiza servicios de limpieza. Cobra un promedio de 12 dólares por casa u oficina que limpia, pero apenas sobrevivel. Ella quiere emigrar, sin importar los riesgos ni lo que oye sobre el endurecimiento de las políticas migratorias de Estados Unidos, cuyos funcionarios repiten sin cesar que los migrantes centroamericanos no son “bienvenidos”.

“Escucho todo eso, pero aquí no hay trabajo. Hay días en que limpio dos casas, otro solo una y a veces ninguna. Y como soy una mujer mayor, que pasa los 35 (años), nadie quiere darme empleo. Lucho y lucho, pero quiero probar allá en el Norte, dicen que pagan mejor por cuidar gente”, explicó a IPS con voz entrecortada.

Además, vive en la conflictiva y pobre colonia (barrio) San Cristóbal, en el norte de Tegucigalpa, que las pandillas controlan y donde a partir de las 6:00 de la tarde imponen su propia ley: nadie sale y nadie entra sin autorizarlo los delincuentes.

“Dicen que en el camino (ruta migratoria) pasan muchas cosas, que asaltan, que secuestran, que violan, dicen muchas cosas, pero tal como está aquí la situación, da igual morir en el camino que aquí, acechada por las maras (pandillas), a la espera que un día te peguen un tiro”, acotó.

En una intervención ante la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, el 7 de julio, el cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, advirtió en Washington sobre la desesperanza que se vive en Honduras y el resto de América Central.

“Es como si alguien ha desgarrado una arteria en Honduras y otros países centroamericanos. El miedo, la pobreza agobiante y sin futuro, significa que estamos perdiendo nuestra alma, nuestros jóvenes. Si esto continúa sucediendo, los corazones de nuestra región dejarán de latir”, aseguró el cardenal, en una intervención que aún no fue difundida en Honduras.

El prelado católico fustigó las deportaciones masivas de menores hondureños que comenzaron a llegar procedentes de México y Estados Unidos. “¿Se imagina si usted comienza su vida adulta siendo tratado como un criminal? ¿A dónde ir desde allí?”, inquirió.

La Iglesia Católica hondureña ha insistido en que el miedo y la pobreza agobiante, junto al desempleo y la violencia, inducen a los padres a la desesperada medida de encaminar a sus hijos al peligroso camino de la migración para salvarles la vida, al tiempo que demanda políticas públicas incluyentes que eviten esta fuga generacional.

Guatemala, Honduras y El Salvador son considerados países en donde la violencia creció, impulsada por el desplazamiento de los carteles de México y Colombia del tráfico de drogas, debido a la guerra antidrogas que libran los gobiernos de esos países.

En 2013, en El Salvador la tasa de homicidios fue de 69,2 cada 100.000 habitantes, en Guatemala de 30 y en Honduras de 79,7, según datos oficiales.

Actualmente, se estima que más de un millón de hondureños residen en Estados Unidos, de una población total de 8,4 millones de personas. En el 2013, esos migrantes aportaron remesas al país por 3.100 millones de dólares, según datos de la Asociación Hondureña de Instituciones Bancarias.

 Fuente: http://www.ipsnoticias.net/2014/07/migrantes-infantiles-son-una-arteria-abierta-en-america-central/

 

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