13 marzo 2017/Fuente: educaciontrespuntocero
Consultor educativo internacional y autor de más de una docena de libros como ‘Neurociencia educativa’ o ‘Cómo aprende el cerebro’, David A. Sousa reflexiona en esta entrevista sobre el papel que juega el cerebro en la educación. Según su opinión, la neurociencia educativa ayuda a entender diversas maneras de abordar el aprendizaje de los estudiantes.
¿Por qué es tan importante conocer el funcionamiento y la estructura del cerebro?
Los maestros intentan cambiar el cerebro humano todos los días. No se trata de pedirles que se conviertan en neurocientíficos pero, cuanto más sepan sobre cómo aprende el cerebro, más éxito tendrán en la enseñanza.
¿Se tiene en cuenta hoy en día en los centros educativos?
Sí, pero muy poco. Los educadores están empezando ahora a conocer los estudios sobre cómo aprende el cerebro. Esta información debería formar parte de la base de conocimiento de todos los maestros. Por ello, estamos trabajando duro para actualizar las aulas, sobre todo, para conseguir que los profesores de las universidades educativas incluyan la neurociencia en sus cursos.
Cuanto más sepan los docentes sobre cómo aprende el cerebro, más éxito tendrán en la enseñanza.
¿Dónde y por qué se produce el aprendizaje en el cerebro?
Son muchas las partes del cerebro que se activan durante el proceso de aprendizaje. La parte frontal (lóbulo frontal) es la responsable de la atención, la memoria activa, la resolución de problemas y la toma de decisiones. El centro profundo del cerebro (sistema límbico) procesa las emociones y decide qué aprendizaje se codificará en la memoria a largo plazo. La información sensorial se procesa a través de otras áreas.
¿Qué aporta la neuroeducación al proceso de enseñanza-aprendizaje?
A medida que los investigadores hacen nuevos descubrimientos sobre cómo el cerebro aprende, los educadores pueden decidir si cualquiera de esos descubrimientos se traducen en estrategias de enseñanza más eficaces.
¿Propiciaría una educación individualizada que respetara los ritmos de cada alumno?
A medida que la población estudiantil se diversifica en cultura, idiomas y habilidades, los maestros necesitan diferenciar su instrucción para satisfacer las necesidades individuales de sus estudiantes. La neurociencia educativa les ayuda a entender diversas maneras de abordar el aprendizaje de los estudiantes.
La neurociencia educativa ayuda a los maestros a entender diversas maneras de abordar el aprendizaje de los estudiantes.
¿Qué cambios serían necesarios en el proceso de evaluación actual?
Deberíamos hacer evaluaciones formativas con frecuencia para comprobar la comprensión del estudiante y su progreso hacia el objetivo de aprendizaje. Así, los profesores podrían adaptar la enseñanza. Además, deberíamos centrarnos menos en una evaluación sumativa —esas pruebas ‘de alto riesgo’ al final de la unidad—, con la que poco se puede hacer para mejorar el aprendizaje de los alumnos una vez terminada la lección.
¿Y en otros aspectos (entorno físico, modo de trabajo…)?
En cuanto al ambiente físico, éste debería ser un lugar donde los estudiantes se sientan físicamente seguros y tengan suficiente espacio para poder moverse por el aula durante la lección. El movimiento es un factor importante para generar aprendizajes, así como para activar la memoria.
El movimiento es un factor importante para generar aprendizajes, así como para activar la memoria.
¿Qué papel desempeñan las emociones en el aprendizaje?
Las emociones juegan un papel muy importante en el aprendizaje. Las dos estructuras cerebrales responsables de crear recuerdos a largo plazo se encuentran en la parte emocional (límbica) del cerebro. Por eso recordamos las mejores y peores cosas que nos han pasado. Siempre que los maestros puedan conectar el objetivo de aprendizaje con las emociones, habrá una mayor probabilidad de que los estudiantes recuerden el nuevo aprendizaje.
¿Qué rol juega la tecnología en este contexto?
La influencia de la tecnología en el proceso de enseñanza-aprendizaje es complicada. La tecnología puede ser útil, por ejemplo, cuando permite a los estudiantes ver lo que están aprendiendo aplicado al mundo real, o ponerse en contacto con estudiantes de otras partes del mundo para obtener sus puntos de vista sobre los temas tratados en el aula. Sin embargo, la tecnología también puede alejarnos de un aprendizaje efectivo cuando se convierte en el foco de la lección, en lugar de asistir al logro del objetivo real de la lección.
David A. Sousa ofrecerá una conferencia sobre ‘Cerebro y aprendizaje‘ el jueves 30 de marzo en Madrid durante el Encuentro Internacional de Aprendizaje. Neurociencia en la Educación y un seminario sobre ‘Neurociencia en el aula‘, el viernes 31 de marzo. ¡Imprescindible inscribirse previamente!
Fuente:http://www.educaciontrespuntocero.com/entrevistas/david-sousa-aprender-conecta-emociones/44296.html