Page 2 of 17
1 2 3 4 17

Mundo: El cambio climático también afecta al ‘lado oscuro’ de la biodiversidad

El cambio climático también afecta al ‘lado oscuro’ de la biodiversidad

Expertos en biología subterránea de varios centros de investigación de España, EE UU, Italia y Finlandia piden en una carta publicada en la revista Nature Climate Change que los ecosistemas subterráneos sean considerados en las agendas internacionales de conservación de la biodiversidad y mitigación del cambio climático. 

El cambio climático se presenta como una amenaza creciente para la conservación de la biodiversidad. En un futuro cercano, la provisión de múltiples servicios ecosistémicos que son críticos para el bienestar humano podrían estar comprometidos y, también, el logro de la mayoría de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Para hacer frente a este desafío, se han avanzado varias iniciativas globales a caballo entre la ciencia y la política para delinear agendas internacionales sobre biodiversidad y cambio climático, más allá de 2020⁠. Por ejemplo, la red de seguridad global (Global Safety Net, en inglés) tiene como objetivo que el 50 % de la Tierra esté protegida formalmente para detener la pérdida de biodiversidad, reducir las emisiones de CO2 y fomentar la eliminación de carbono por la naturaleza.

biodiversidad, cambio climático, fondo marino, cuevas, microorganismos, polinización, agua dulce

En la misma línea, la Estrategia de Biodiversidad 2030 de la Unión Europea es un plan obligatorio a largo plazo que tiene como objetivo transformar el 30 % de las tierras y mares de Europa en áreas protegidas, al tiempo que impulsa el desarrollo económico y la mitigación del clima. Para ser efectivas, estas agendas internacionales deben considerar cuantas más especies y ecosistemas sean posibles. Sin embargo, en una carta publicada recientemente en la revista Nature Climate Change, que hay una omisión recurrente: el medio subterráneo.

A pesar de que este es probablemente el ecosistema no marino más extendido de la Tierra (se encuentran bajo el 20 % de la superficie global) su porcentaje de solapamiento con áreas protegidas es de tan solo un 7 %. El olvido de los ecosistemas subterráneos de los planes globales de conservación margina su importancia ecológica y económica, además de obstaculizar la voluntad política de protegerlos.

Qué importancia tiene el medio subterráneo

La sociedad típicamente reconoce las cuevas –que representan solo la fracción accesible a los humanos del medio subterráneo– por su inherente belleza y misterio, así como por contener tesoros de materiales paleontológicos y arqueológicos. Aquí es donde generalmente termina nuestra comprensión general del medio subterráneo, pero la importancia del medio subterráneo va mucho más allá.

En primer lugar, se estima que el 95 % del suministro de agua dulce líquida disponible en el mundo se encuentra en el medio subterráneo y más de una cuarta parte de la población humana depende total o parcialmente de ella.

Los ecosistemas subterráneos albergan organismos altamente especializados, con unas adaptaciones impresionantes a vivir en la oscuridad y que son de gran interés tanto desde una perspectiva evolutiva como de conservación. Esta biodiversidad proporciona una serie de servicios a la humanidad de incalculable valor, por ejemplo, participan en la polinización (murciélagos cavernícolas), en la renovación del carbono, la atenuación y degradación de contaminantes peligrosos, pudiendo incluso, eliminar virus y microorganismos patógenos.

En resumen, parece que el aforismo “ojos que no ven, corazón que no siente” haya dirigido hasta ahora tanto el interés científico como las decisiones políticas. Casualmente, 2021 es el Año Internacional de las Cuevas y el Karst. Dada su importancia, es el momento de que los ecosistemas subterráneos asuman el lugar que les corresponde en las estrategias y agendas internacionales sobre cambio climático y conservación de la biodiversidad global.

Ecoportal.net

Fuente de la Información: https://www.ecoportal.net/temas-especiales/cambio-climatico/cambio-climatico-afecta-biodiversidad/

 

Comparte este contenido:

La Agenda 2030 y el papel de las universidades latinoamericanas

Por: Paola Estrada Villafuerte

Las publicaciones recientes de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible, ofrecen una guía para las universidades en su camino hacia la implementación de los ODS.

A cinco años de la definición de los Objetivos y Metas de Desarrollo Sostenible (ODS), las instituciones educativas continúan detallando los pasos a seguir para su implementación en las comunidades universitarias. Estos 17 objetivos, adoptados por la ONU en septiembre del 2015, forman parte de la Agenda 2030 y dan continuidad a la Declaración del Milenio. Cada uno contiene metas específicas a alcanzarse en los próximos 15 años y aborda temáticas necesarias para el desarrollo humano óptimo dentro de los actores internacionales involucrados. Se plantean líneas de desarrollo en materia de igualdad de género, reducción de desigualdades, acción por el clima, educación de calidad, entre otros.

La Universidad, como institución principal de difusión de conocimiento, es pieza clave en el progreso de estas metas. Desde su incorporación, la academia ha tenido que establecer nuevas medidas educativas que se acoplen a la formación de ciudadanos y comunidades de aprendizaje con consciencia humana. La Red Española para el Desarrollo Sostenible (REDS), presentó durante el webinar, Las Universidades como Agentes del Cambio, dos distintos documentos de gran importancia en este eje temático: la guía «Cómo evaluar la contribución a los ODS de las universidades» y el dosier «Casos prácticos de Educación para los ODS». Ambos reflexionan sobre la transformación que las instituciones requieren para ocupar un papel de liderazgo en la acción de la Agenda 2030.

El papel de las universidades en la implementación de los ODS

La educación superior es incuestionablemente un potencializador de la innovación y de ciudadanos con sentido humano. Suele destacarse el papel de este actor precisamente en el cuarto ODS: educación inclusiva, equitativa y de calidad. Y para que esto se lleve a cabo, se espera que estos objetivos se aborden de forma transversal en todas las distintas áreas de la vida universitaria: formación, investigación y extensión. Siendo así que se debe involucrar a todos los que conforman las instituciones educativas de manera directa e indirecta.

“Se ha puesto en evidencia la necesidad de actuar y acelerar los procesos en marcha para lograr la transformación de nuestras sociedades, para lo cual las universidades son piezas fundamentales”.

Objetivos de Desarrollo Sostenible.

La Universidad de Alcalá, explica que la academia desempeña un papel fundamental en la formación de la ciudadanía global, misma que construye estrategias socialmente responsables en sus estudiantes, quienes serán en un futuro agentes de cambio necesarios. Gran parte la educación directa que debería abordar problemáticas trascendentes, se desarrolla en el área docente y de investigación. Para entonces, generar una retroalimentación activa en la sociedad donde la universidad se desarrolla.

En este sentido, la universidad debería entonces también incorporar en estos campo las competencias adecuadas para la transmisión de visiones en el cumplimiento de los ODS. Desde una enseñanza  y búsqueda de información orientadas a la mejora social, se logra dar respuesta a los problemas que la Agenda 2030 aborda. Utilizar estos objetivos como referentes para la administración educativa, significa no sólo un progreso notable en su implementación oportuna, sino también una ventaja para aquellas universidades que deseen propiciar la construcción de alianzas con otros actores implicados y el acceso a diversas fuentes de financiación.

“México reprueba en ocho de los 17 ODS, mientras que en los nueve restantes, obtiene un puntuación intermedia, ya que a nivel regional en América Latina y el Caribe los principales desafíos tienen que ver con los altos niveles de desigualdad, de violencia e inseguridad”.

La guía “Cómo empezar con los ODS en las universidades”, publicada en el 2017 por la SDNS Australia/Pacific, fue de las primeras en su tipo y proporcionó información en cuanto a las herramientas necesarias en el vínculo de la Agenda 2030 y las instituciones educativas. Aquí se respondió la pregunta, ¿qué pueden hacer las universidades?

¿Qué pueden hacer las universidades para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible?

  • Dotar al alumnado de conocimientos, habilidades y motivación para entender y abordar los ODS.

  • Crear más oportunidades para la creación de capacidades de estudiantes y profesionales de países en desarrollo para abordar los desafíos relacionados con los ODS.

  • Apoyar todo el espectro de enfoques de investigación necesarios para abordar los ODS, incluida la investigación interdisciplinar y transdisciplinar.

  • Apoyar y fomentar la innovación para soluciones de desarrollo sostenible

  • Alinear las estructuras de gobierno universitario y las políticas operativas con los ODS.

A partir de esta publicación, la Red Española para el Desarrollo Sostenible, desarrolló eventualmente la importancia del papel de la actividad docente en su dosier mencionado anteriormente. Aquí, se proyectaron experiencias sobre la implementación de los ODS en esta área. Algunos de los más significativos logran servir como inspiración para otras universidades que se encuentran en el camino de la aplicación de la Agenda 2030 en sus comunidades educativas.

Igualmente, se plantea que una correcta iniciativa gira entorno a “proporcionar  a los  estudiantes  y  al  personal  de  la  universidad  los conocimientos, habilidades y actitudes necesarios para abordar los complejos desafíos del desarrollo sostenible a través de cualquier carrera o trayectoria vital que tomen”. Además de “implementar los ODS en la forma más apropiada a su  propio  marco  académico: estrategia y cultura de la universidad; particularidades de cada centro, titulaciones y asignaturas; así como los intereses y capacidades de su comunidad universitaria”. De modo que cada institución diseñe sus propios medios y planes de desarrollo, construidos a partir de la información proporcionada pero siempre en función de sus capacidades.

La guía “Cómo evaluar los ODS en las universidades”, brindó una propuesta de herramientas útiles para evaluar y monitorear la contribución de las universidades en el desarrollo de los ODS. Con una serie de tres indicadores para cada objetivo y estrategias que permiten su valoración, se intenta dar el seguimiento necesario para saber si su ejecución se está cumpliendo y si se presentan resultados significativos en áreas estudiantiles, docentes y de investigación. Más que la creación de una rúbrica estricta para la designación de un ranking institucional, la REDS brinda la oportunidad a las universidades de autoevaluar su progreso en la transmutación de valores de desarrollo sostenible.

Esta misma red también plantea que para que esta evaluación y el desarrollo mismo de los objetivos sean completos, se debe dar pie a la transdisciplinariedad. Las instituciones con un sistema de división rígido, podrían llegar a presentar dificultades en el desempeño por la búsqueda de los objetivos. “Es fundamental el trabajo en proyectos compartidos entre distintas facultades dentro del campus universitario, favoreciendo así los procesos de integración entre disciplinas, y contar con personas que lideren y dinamicen estos procesos de cambio”, explica Javier Benayas de la UAM.

Academia latinoamericana

Desde el 2017 en México, se implementó la Estrategia Nacional para la Puesta en Marcha de la Agenda 2030 y la instauración del Consejo Nacional de la Agenda 2030. Estas instituciones se proyectaron entonces como un paso concreto en la visión del 2030 con las universidades mexicanas. Un año después, la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior publicó el documento “Visión y acción 2030”. Este sugiere y crea un trazo claro del proceso que la academia mexicana debe atravesar para convertirse en un agente de cambio activo.

“Es fundamental el trabajo en proyectos compartidos entre distintas facultades dentro del campus universitario, favoreciendo así los procesos de integración entre disciplinas, y contar con personas que lideren y dinamicen estos procesos de cambio”.

Las instituciones líderes del país, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Tecnológico de Monterrey, se situaron en el sitio número 62 y número 101, respectivamente, en el Ranking de Impacto publicado por el Times Higher Education. Ambas universidades coordinan en conjunto la SDSN de México, establecida apenas hace un año y de primera mano con su entidad en Chile. Esta red de instituciones se mantienen desarrollando propuestas que propicien el involucramiento en problemáticas locales y globales. Desafortunadamente, “nuestro país reprueba en ocho de los 17 ODS, mientras que en los nueve restantes, obtiene un puntuación intermedia, ya que a nivel regional en América Latina y el Caribe los principales desafíos tienen que ver con los altos niveles de desigualdad, de violencia e inseguridad”, explica Miguel Ruiz Cabañas para CONECTA.

Sin embargo, las recientes publicaciones ofrecen para estos países el seguimiento oportuno para el trabajo continuo en la búsqueda de los ODS. La propuesta de evaluación, será una herramienta indispensable para todas aquellas universidades que se encuentran interesadas en la acción de la Agenda 2030 dentro de sus comunidades de aprendizaje.

¿Puede la crisis actual acelerar las acciones para contribuir a la Agenda 2030?

La REDS plantea que la pandemia de COVID-19  ha proporcionado el escenario ideal para comprender la importancia de la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Es fundamental identificar y fortalecer las herramientas que serán de gran utilidad para mantener su cumplimiento sobretodo en este panorama. “Se ha puesto en evidencia la necesidad de actuar y acelerar los procesos en marcha para lograr la transformación de nuestras sociedades, para lo cual las universidades son piezas fundamentales”.

Fuente e Imagen: https://observatorio.tec.mx/edu-news/rol-de-las-universidades-agenda2030

Comparte este contenido:

UNESCO: Un programa en línea analiza los avances hacia el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4

Con el fin de conmemorar el Día Internacional de la Educación, el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo ha puesto en marcha una nueva herramienta interactiva en línea que examina el progreso hacia el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 y las prioridades políticas para 2030.

Disponible en siete idiomas, la página web de Education Progress reúne datos de varios productores, sobre todo del Instituto de Estadística de la UNESCO. Así pues, esta herramienta analiza el progreso realizado por los países para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4: Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
Cinco ámbitos 
Asimismo, esta herramienta, publicada por el Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo el 24 de enero, pone de manifiesto las trabas y las prioridades políticas que se plantean desde ahora hasta 2030 en los siguientes cinco ámbitos: acceso, equidad, aprendizaje, calidad y finanzas.
Por ejemplo, destaca que se requieren esfuerzos especiales para garantizar que todos los niños y niñas y jóvenes puedan beneficiarse de manera equitativa del poder transformador de la educación.
También revela que aproximadamente uno de cada 60 niños, de los cuales la mayoría habita en países de bajos ingresos, nunca irá a la escuela. Además, las niñas tienen aún más probabilidades que los niños de no asistir nunca a la escuela, ya que la discriminación hacia ellas implica que se espera que se encarguen del cuidado de los hijos y otras responsabilidades domésticas.
Informe de la Internacional de la Educación 
La página web recoge muchas conclusiones del informe elaborado por la Internacional de la Educación en 2019, “Off Track: Los y las docentes evalúan el progreso realizado hacia el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4”. Dicho informe, que evaluaba el progreso realizado para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, fue presentado en julio del año pasado ante el Foro Político de Alto Nivel de las Naciones Unidas en Nueva York por Susan Hopgood, presidenta de la Internacional de la Educación.
Los gobiernos no van por buen camino 
Según sostiene el informe, los gobiernos de todo el mundo van mal encaminados en lo que respecta al logro del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 para 2030. No suficientes gobiernos han tomado las medidas necesarias para implementar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, y algunos han puesto en marcha políticas que socavan de manera activa el programa.
El informe se documentó con los puntos de vista de las organizaciones miembros de la IE, y los docentes sostenían que los desafíos a los que se enfrenta el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 no son insalvables. La Internacional de la Educación insta a todos los gobiernos a que lleven a cabo una sólida voluntad política, una buena planificación y coordinación, y una inversión adecuada con el fin de poner en marcha el programa del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4.
Fuente https://www.ei-ie.org/spa/detail/16599/un-programa-en-l%c3%adnea-analiza-los-avances-hacia-el-objetivo-de-desarrollo-sostenible-4
Comparte este contenido:

ONU: Matrimonio infantil difícil de erradicar para 2030

Redacción: Ips Noticias

Los casos de matrimonio temprano pueden aumentar en contextos de inseguridad y con crisis humanitaria», ONU Mujeres

“En este momento, no quiero casarme. Tengo toda la vida por delante y un sueño por cumplir”, le dijo a sus padres una adolescente de 14 años en Bangladesh.

En la actualidad, 12 millones de niñas contraen matrimonio cada año antes de cumplir los 18 y 650 millones de mujeres se casaron antes de esa edad, según un informe publicado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en junio de 2019. Una realidad que busca revertir la meta tres del quinto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que procura erradicar el matrimonio infantil para 2030.

La evidencia muestra que el matrimonio precoz no se limita a grupos particulares ni se vincula con normas culturales específicas, sino que es una combinación de factores estructurales y socioculturales, explicó a IPS el asesor y coordinador de Prevención de Prácticas Culturales Nocivas de Unicef, Nankali Maksud.

“Incluye pobreza, falta de oportunidades económicas y educativas, expectativas sociales, discriminación contra niñas y mujeres y roles de género restringidos, creencias sobre la protección de las niñas y falta de conciencia y de acceso a alternativas”, precisó.

“En muchos contextos, las niñas se consideran una carga para la economía del hogar, y el matrimonio infantil aparece como la mejor opción dentro de un menú con pocas alternativas”, añadió.

Esta práctica también permite “aliviar la carga de la familia y preservar su honor a la vez que ofrece protección a las niñas”, acotó.

“La evidencia sugiere que cuando se eliminan las causas estructurales y socioculturales, la práctica disminuye y se logra poner fin”, añadió.

Por su parte, una portavoz de ONU Mujeres dijo a IPS que los casos de matrimonio temprano pueden aumentar en contextos de inseguridad y con crisis humanitaria.

“Por ejemplo, la prevalencia del matrimonio infantil en Medio Oriente y el norte de África se acerca al promedio mundial con una de cada cinco jóvenes casadas antes de los 18 años. Es un avance con respecto a los últimos 25 años, pero la disminución parece haberse estancado”, indicó.

Sin embargo, en algunas zonas en conflicto, “como en Siria y Yemen, el avance se revirtió de forma sustancial porque el conflicto suele producir mecanismos de adaptación negativos, en particular en situaciones económicas difíciles y que pueden aumentar el matrimonio infantil”, apuntó.

Asia meridional es la región donde más disminuyó eesta práctica, pasando de casi 50 por ciento a 30 por ciento, lo que en gran parte obedece a los avances de India.

“La proporción de mujeres casadas siendo menores de edad disminuyó 15 por ciento, representando una cada cuatro a una cada cinco niñas en la pasada década”, indicó Maksud.

En África, “los datos muestran avances. Por ejemplo, en Etiopía, que supo ser uno de los cinco países con mayor número de matrimonio infantil de África subsahariana, la prevalencia cayó una tercera parte en los últimos 10 años”, agregó.

Los países con gran prevalencia de esta práctica nociva deben priorizar sus responsabilidad para alcanzar el ODS 5.3 para 2030.

“Con una correcta inversión y un avance acelerado, es posible alcanzar la meta”, opinó Maksud.

"La prevalencia del matrimonio infantil en Medio Oriente y el norte de África se acerca al promedio mundial con una de cada cinco jóvenes casadas antes de los 18 años.", ONU Mujeres. Crédito: Cortesía, Naciones Unidas.

«La prevalencia del matrimonio infantil en Medio Oriente y el norte de África se acerca al promedio mundial con una de cada cinco jóvenes casadas antes de los 18 años.», ONU Mujeres. Crédito: Cortesía, Naciones Unidas.

En cambio, Heather Barr, de la organización Human Rights Watch (HRW), con sede en Nueva York, dijo a IPS que es poco probable que se erradique el matrimonio temprano para 2030.

“La meta ya contribuyó notoriamente a reducir el matrimonio infantil y lo seguirá haciendo. Pero falta mucho, y muchos países siguen tolerándolo, de forma legal o ilegal”, explicó.

La portavoz de ONU Mujeres dijo a IPS que a pesar de los avances significativos de la última década, ninguna región parece estar cercar de eliminar el matrimonio precoz para 2030.

“Se necesita una aceleración sustantiva porque la disminución actual es insuficiente”, remarcó.

“Si no se acelera la reducción con respecto a 1990, llevará un siglo eliminar el matrimonio precoz, y más de 150 millones de niñas más estarán casadas en 2030”, observó.

“Y aún con la disminución registrada en la última década, llevará 50 años terminar con el matrimonio infantil. El avance debe acelerarse de forma significativa”, insistió.

Igualdad de género

Según ONU Mujeres, “el mayor desafío sigue siendo la falta de un enfoque transformador en materia de género. La evidencia muestra que no basta con demorar la edad del matrimonio”.

“La equidad de género debe promoverse de forma holística, como subrayar la capacidad de agencia de niñas y mujeres, atendiendo las dinámicas de poder heredades, en los matrimonios y la sociedad, cambiando actitudes, normas y comportamientos vinculados a los roles de género”, explicó.

“Nuestra investigación en muchos países nos ha convencido de que la principal causa del matrimonio infantil es simplemente la desigualdad de género”, coincidió Barr, de HRW.

La portavoz de ONU Mujeres también mencionó otros factores. “Hay un cambio en los matrimonios que muestran que el casamiento entre pares, la cohabitación y el embarazo adolescente, que terminan en matrimonios, coexiste con la creencia tradicional del matrimonio infantil o forzado”, explicó.

“Un enfoque de género adecuado requiere que reconozcamos que el matrimonio temprano y los voluntarios también constituyen prácticas dañinas dado el desproporcionado impacto que tiene en niñas, y las barreras que atentan contra sus oportunidades económicas y educativas”, añadió.

Es fundamental incluir el empoderamiento económico en las intervenciones educativas que responden al matrimonio infantil.

La pobreza no es el único factor responsable, pero sigue siendo clave en el matrimonio infantil, temprano y forzado, que afecta de forma desproporcionada a niñas y jóvenes y que sigue siendo una práctica totalmente asociada a los roles de género.

“Para impulsar a niñas y jóvenes a usar su voz, tomar sus propias decisiones y ejercer su capacidad de agencia, es fundamental garantizar todo un sistema y enfoque que contemple el ciclo de vida de las jóvenes mediante la promoción de sus habilidades y la protección social de niñas y jóvenes que podrían ser víctimas del matrimonio infantil, temprano o forzado”, puntualizó.

Unicef concluyó que hay una gran correlación entre el tiempo que las niñas permanecen en la escuela y una mayor reducción del matrimonio precoz.

“Y para las adolescentes, la evidencia que surge indica que la educación secundaria es mucho más beneficiosa para poner fin al matrimonio infantil que solo la primaria”.

Se estima que habría 14 por ciento de matrimonios menos si todas las niñas tuvieran solo educación primaria, comparado con 64 por ciento menos que se lograría si terminarán también la secundaria.

“Y no basta solo con estar escolarizada, la evidencia muestra que la calidad de la educación tiene consecuencias importantes. A las adolescentes que les va mal en la escuela, no aprenden bien y quedan rezagadas, los padres terminan por sacarlas y obligarlas a casarse”.

Según Maksud es posible lograr el ODS 5.3 para 2030 si se toman ciertas medidas como “mejorar el acceso de las niñas a la educación, y en particular a la secundaria, aumentar la inversión estatal en programas de protección de adolescentes, así como un fuerte mensaje público sobre la ilegalidad del matrimonio infantil y sus perjuicios”.

Fuente: http://www.ipsnoticias.net/2020/01/matrimonio-infantil-dificil-de-erradicar-para-2030/

Comparte este contenido:

Banco Mundial llama a poner fin a la pobreza de aprendizaje

Redacción: Listín Diario

A inicio de este mes, el presidente del Banco Mundial, David Malpass, anunció una nueva meta mundial sobre educación para reducir la tasa de pobreza de aprendizajes al menos a la mitad para el 2030.

El organismo, mediante una publicación en su página web, expresa que la evidencia revela una crisis mundial del aprendizaje que amenaza los esfuerzos de los países para desarrollar capital humano, las habilidades y los conocimientos necesarios para los trabajos del futuro.

Señala que alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) también está en riesgo, incluido el objetivo de acabar con la pobreza extrema. La pobreza de aprendizaje es un nuevo concepto que introduce el Banco Mundial en base a datos mundiales elaborados con el Instituto de Estadística de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y se determina cuando un niño o niña no puede leer y comprender un relato  simple a los diez años.  

Explica que los nuevos datos muestran que el 53% de niñas y niños de países de ingreso bajo y mediano se ven afectados por la pobreza de aprendizajes y que los avances en la reducción de la pobreza de aprendizajes son demasiado lentos para satisfacer las aspiraciones establecidas en el Objetivo de Desarrollo Sostenible #4, que manda a garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad.

Detalla que al ritmo actual de mejora, en 2030 un 43% de infantes seguirá sin aprender lo suficiente. “Si los países disminuyen la pobreza de aprendizajes a tasas tan rápidas como las observadas hasta ahora en este siglo, la tasa mundial de pobreza de aprendizajes caería al 28%”, refiere el organismo en una publicación.

El BM señala que los países deberían definir su propio camino (y las metas intermedias) en términos del financiamiento y la implementación de reformas para garantizar que niños y niñas  tengan oportunidades en sus vidas. “el contrato social del país debe diseñarse de manera que todos, independientemente de su origen socioeconómico, raza o género, tengan acceso a una educación de buena calidad”.

Centrar la atención en la lectura
?El organismo pone especial énfasis en la necesidad de que niñas y niños sean bien alfabetizados y se les enseñe a leer correctamente.

«Cuando un niño sabe leer bien, puede tener acceso a los diversos conocimientos codificados en textos de todo tipo. Si el niño aprovecha esa habilidad dependerá de muchos factores, incluida la calidad del sistema escolar en los grados posteriores, pero no adquirir la competencia en lectura dificultaría claramente su capacidad de aprender a lo largo de su vida social y laboral», indica la publicación.

Refiere que la competencia en lectura sirve también como indicador del aprendizaje básico en otras materias, de la misma manera que la ausencia del retraso en el crecimiento infantil es un indicador del desarrollo saludable en la primera infancia. Apunta que los datos confirman que las tasas de competencia en lectura se correlacionan estrechamente con la competencia en otras asignaturas.

Fuente: https://listindiario.com/economia/2019/11/10/590803/banco-mundial-llama-a-poner-fin-a-la-pobreza-de-aprendizaje

Comparte este contenido:

Poner fin a la pobreza de aprendizajes: Una meta para incentivar la alfabetización

© Mouslim Sidi Mohamed / Banco Mundial

En una escuela de Malawi, los estudiantes disfrutan jugando en el recreo. Desafortunadamente, a veces el recreo dura todo el día porque el maestro no va a trabajar.

En un salón de clases en Armenia, los alumnos son calificados por su capacidad de repetir textos memorizados, siendo los libros de texto los que dominan el proceso de aprendizaje en lugar de la instrucción del maestro y la innovación, lo que deja a los estudiantes que terminan la escuela mal preparados para un entorno laboral competitivo.

Y en Bangladesh, pese al mejoramiento de las tasas de matriculación, las niñas aún no aprenden tanto como los niños, y las tasas de deserción son altas. Los años perdidos de estudios se atribuyen al matrimonio infantil, las responsabilidades domésticas y otros factores.

Medir la pobreza de aprendizajes

La evidencia revela que estamos en medio de una crisis mundial del aprendizaje que amenaza los esfuerzos de los países para desarrollar capital humano —las habilidades y los conocimientos necesarios para los trabajos del futuro. Alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) también está en riesgo, incluido el objetivo de acabar con la pobreza extrema.

Para poner en primer plano esta crisis, el Banco Mundial introdujo el nuevo concepto de la pobreza de aprendizajes, a partir de nuevos datos mundiales elaborados conjuntamente con el Instituto de Estadística de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

La pobreza de aprendizajes significa no poder leer y comprender un relato simple a los 10 años. Este indicador integra indicadores de escolaridad y aprendizaje: comienza con el porcentaje de niños que no han logrado adquirir una competencia mínima en lectura (medido en las escuelas) y lo ajusta por el porcentaje de niños que no asisten a la escuela (y que se supone que no leen correctamente).

Los nuevos datos muestran que el 53 % de los niños de países de ingreso bajo y mediano se ven afectados por la pobreza de aprendizajes. Y los avances en la reducción de la pobreza de aprendizajes son demasiado lentos para satisfacer las aspiraciones establecidas en el ODS 4 —garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad. Al ritmo actual de mejora, en 2030 un 43 % de los niños seguirá sin aprender lo suficiente. Si los países disminuyen la pobreza de aprendizajes a tasas tan rápidas como las observadas hasta ahora en este siglo, la tasa mundial de pobreza de aprendizajes caería al 28 %.

Esta alta tasa de pobreza de aprendizajes y los lentos avances en los países de ingreso bajo y mediano son una señal de alerta temprana que indica que todas las metas descritas en el ODS 4 corren el riesgo de no cumplirse, incluido el objetivo de aumentar el número de jóvenes y adultos que tienen las competencias necesarias, para acceder al empleo, el trabajo decente y el emprendimiento.

Lanzamiento de la meta educativa

Para impulsar la acción hacia el cumplimiento de los objetivos de educación mundiales y abordar la crisis del aprendizaje en el mundo, el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass, anunció una nueva meta mundial operativa sobre educación para reducir la tasa de pobreza de aprendizajes al menos a la mitad para 2030. Simulaciones muestran que esta meta, aunque ambiciosa, se puede lograr si todos los países mejoran los niveles de aprendizaje tal como lo hicieron aquellos con mejor desempeño en el periodo de 2000 a 2015, lo que significa en promedio casi triplicar la tasa de avances mundiales.

Reducir la pobreza de aprendizajes a la mitad es en la práctica una meta intermedia. Los países deberían definir su propio camino (y las metas intermedias) en términos del financiamiento y la implementación de reformas para garantizar que todos los niños tengan oportunidades en sus vidas. En muchos países, alcanzar este objetivo de desarrollo puede llevar algún tiempo, pero el contrato social del país debe diseñarse de manera que todos, independientemente de su origen socioeconómico, raza o género, tengan acceso a una educación de buena calidad.

¿Por qué centrar la atención en la lectura?

En las sociedades alfabetizadas de todo el mundo, la lectura ha sido durante siglos el núcleo de la educación formal. Los padres y otras partes interesadas en todos los lugares concuerdan en que la primera tarea de una escuela es garantizar que los niños puedan leer correctamente.

Cuando un niño sabe leer bien, puede tener acceso a los diversos conocimientos codificados en textos de todo tipo. Si el niño aprovecha esa habilidad dependerá de muchos factores —incluida la calidad del sistema escolar en los grados posteriores—, pero no adquirir la competencia en lectura dificultaría claramente su capacidad de aprender a lo largo de su vida social y laboral.

La competencia en lectura sirve también como indicador del aprendizaje básico en otras materias, de la misma manera que la ausencia del retraso en el crecimiento infantil es un indicador del desarrollo saludable en la primera infancia. Es probable que los sistemas que garantizan que todos los niños sepan leer, los ayuden también a aprender otras materias. Los datos lo confirman: en todos los países y escuelas, las tasas de competencia en lectura se correlacionan estrechamente con la competencia en otras asignaturas.

Por ejemplo, como se explica en el nuevo informe del Banco, (PDF, en inglés) el puntaje en lectura y el puntaje en matemáticas de un país en el Estudio Internacional sobre el Progreso de la Competencia en Lectura (PIRLS), medidos por el Estudio Internacional de Tendencias en Matemáticas y Ciencias (TIMSS), se correlacionan casi totalmente, y las correlaciones entre asignaturas en otras evaluaciones también son fuertes. El desarrollo del lenguaje, que es reforzado por las habilidades de lectura, también se nutre con el desarrollo del autocontrol del niño, una habilidad socioemocional básica.

¿Qué se puede hacer para garantizar que los niños aprendan a leer?

Para apoyar los esfuerzos de los países por mejorar la alfabetización, el Banco introdujo un paquete de políticas de alfabetización conformado por intervenciones de nivel nacional y subnacional probadamente eficaces. Por ejemplo, en Egipto, el Gobierno está implementando un programa de reforma (i) para cambiar el plan de estudios y los sistemas de evaluación de manera que los estudiantes sean evaluados durante todo el año, con exámenes que se centren en la adquisición de habilidades y los maestros reciban credenciales de formación y aprendizaje entre pares. Un elemento clave de las reformas ha sido un cambio hacia el aprendizaje, no para obtener una credencial. Y en Brasil, en estados como Ceará, Espíritu Santo, Acre y Pernambuco, la calidad del servicio educativo mejora constantemente, lo que demuestra que el cambio es posible. Estos son solo algunos ejemplos; otros casos se describen en el nuevo documento titulado Ending Learning Poverty: What will it take?” (Poner fin a la pobreza de aprendizajes: ¿Qué hace falta?). (PDF, en inglés)

Los países que obtienen buenos resultados invierten en cambiar la mentalidad de todos los actores del sistema educativo para centrarse continuamente en el aprendizaje. Proporcionan a los maestros materiales de apoyo, como guías de enseñanza, que pueden facilitar su trabajo diario; brindan a los maestros formación y retroalimentación para mejorar sus prácticas en el aula; garantizan que todos los niños tengan material de lectura, y aseguran un programa de estudios simple y eficaz para guiar a los maestros.

En muchos países, enseñar en el idioma natal en los primeros años de la escuela primaria resulta ser esencial para mejorar el desempeño. Los sistemas con mayor capacidad institucional aumentan sus inversiones en educación de calidad para la primera infancia, implementan estructuras que permiten impartir la enseñanza en el nivel adecuado y fortalecen la carrera de los directores de las escuelas. En todos los casos, la tecnología puede ayudar a que la implementación de estas intervenciones sea más eficiente en función de los costos, y medir el aprendizaje es esencial para hacer seguimiento de los avances y orientar la mejora del sistema. Aunque el tipo de evaluación puede variar, es esencial que los sistemas de evaluación tengan maneras bien definidas de proporcionar la información sobre el desempeño de los estudiantes para orientar las decisiones. La mayoría de los sistemas escolares donde el 90 % de los niños aprende a leer tienen objetivos explícitos, concretos y con plazos determinados para los estudiantes de primer grado.

Para tener éxito y centrar la atención del sistema en el aprendizaje de los estudiantes, los países deberán avanzar en un enfoque doble: implementar estas reformas a corto plazo para mejorar la prestación de servicios para los estudiantes que asisten a la escuela ahora y, al mismo tiempo, introducir cambios para mejorar el funcionamiento del sistema educativo a largo plazo, tales como reformar la carrera de los maestros para atraer y retener a buenos profesionales, la formación antes de ejercer sus funciones y la estructura de gestión de todo el sistema, y ampliar la infraestructura, entre otras medidas.

Image

Las intervenciones en el sector educativo no son suficientes

La lucha contra la pobreza de aprendizajes requerirá un enfoque respaldado por acciones más allá del sector educativo. El agua y saneamiento, el transporte, los programas de transferencias en efectivo, la salud y nutrición, y las reformas de la administración pública son todas áreas esenciales para mejorar el aprendizaje. Con el Proyecto de Capital Humano del Grupo Banco Mundial se reconoce la necesidad de contar con un enfoque que abarca todo el Gobierno para fortalecer el capital humano. Para reducir las tasas de pobreza de aprendizajes también será necesario poner más atención en el papel de las familias y las comunidades en la generación de demanda de educación, la creación del entorno adecuado para el aprendizaje y la generación de demandas sociales en pro de reformas educativas adecuadas.

Para crear conciencia sobre lo que se necesita para poner fin a la crisis del aprendizaje, nuestra nueva campaña mundial, Literacy Makes Sense (La alfabetización tiene sentido), ofrece ideas claves a las partes interesadas de la comunidad educativa — padres, maestros, directores, funcionarios de educación y empleadores— sobre qué acciones pueden tomar para ser partícipe de este tema y ayudar a poner fin a la pobreza de aprendizajes.

¡Porque la alfabetización tiene sentido, únase a nosotros y sea parte del movimiento para poner fin a la #PobrezaDeAprendizajes! Todos tenemos un rol que desempeñar.

Fuente: https://www.bancomundial.org/es/news/immersive-story/2019/11/06/a-learning-target-for-a-learning-revolution?cid=ECR_E_NewsletterWeekly_ES_EXT&deliveryName=DM48859

Comparte este contenido:

África oriental: las escuelas preescolares en Kenia y Tanzania impulsan los resultados del aprendizaje a largo plazo

Africa Oriental/ Kenia / 

Los países de África subsahariana han logrado un progreso impresionante hacia el logro de la matrícula escolar universal en las últimas décadas. Pero estudiar no es lo mismo que aprender.

Estudios recientes revelan que los niños en esta región aprenden notablemente poco en la escuela. Por ejemplo, solo uno de cada cinco estudiantes de tercer grado en Kenia, Tanzania y Uganda tiene habilidades de alfabetización y aritmética de segundo grado, y menos de un tercio de los estudiantes de sexto grado en África meridional y oriental pueden resolver un problema de resta simple.

Esta » crisis de aprendizaje » significa que África subsahariana está muy lejos de lograr una educación de calidad para todos, que es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030. Los bajos niveles de habilidades también reducen las perspectivas del mercado laboral de los estudiantes, y frenar el crecimiento económico de los países .

Entre las muchas causas potenciales de esta crisis, una que a menudo se menciona es la falta de preparación de los niños que ingresan a la escuela. El plan de estudios primario es exigente y puede ser difícil de seguir para los niños sin experiencia previa de aprendizaje en un salón de clases. Por lo tanto, el aumento de la matrícula en los centros preescolares, que preparan a los niños para la escuela primaria, a menudo se considera una política prometedora para aumentar los niveles de aprendizaje. En consecuencia, la educación preescolar está en aumento en el África subsahariana, y la matrícula se duplicó del 15% al ​​32% entre 2000 y 2017.

Pero hasta hace poco, había poca evidencia empírica de la efectividad de los preescolares para impulsar los resultados del aprendizaje. Algunos observadores incluso especulan que las escuelas preescolares podrían estar haciendo más daño que bien debido a su enfoque limitado en la enseñanza de habilidades académicas básicas, que ignora la necesidad de los niños para el desarrollo social y emocional.

En nuestra investigación, mis coautores, Sanna Ericsson y Fredrick M. Wamalwa, y yo buscamos cerrar esta brecha. Investigamos los impactos a largo plazo de los preescolares en los resultados de aprendizaje de los niños en Kenia y Tanzania. Nuestro estudio empleó datos nuevos a gran escala de la iniciativa Uwezo , que utiliza encuestas de hogares para medir las habilidades de alfabetización y aritmética de los niños en edad escolar en ambos países.

Es importante para nuestros propósitos, los datos incluyeron información a nivel individual sobre si un niño asistió a preescolar antes de comenzar la escuela primaria. Esto nos permitió rastrear el efecto de la asistencia preescolar de los niños en sus habilidades hasta la edad de 16 años. Reflejando el alcance de las encuestas de Uwezo, nuestro análisis cubrió a más de medio millón de niños de entre 7 y 16 años en Kenia y Tanzania.

Descubrimos que hay beneficios importantes a largo plazo al asistir a preescolar. En particular, los niños que iban a preescolar tenían menos probabilidades de abandonar la escuela y tenían mayores niveles de alfabetización y aritmética al llegar a la adolescencia.

La investigación

Una característica importante de nuestro estudio es el enfoque en los efectos causales, en lugar de las meras correlaciones. Para ilustrar la diferencia entre estos conceptos, imagine dos niños de primaria de diferentes familias, uno de los cuales fue al preescolar y el otro no. Ahora imagine que el ex niño tiene mejores habilidades de alfabetización y aritmética. La asistencia y el aprendizaje preescolar parecen ir de la mano, están correlacionados.

Fuente: https://allafrica.com/stories/201910310107.html

Comparte este contenido:
Page 2 of 17
1 2 3 4 17