Page 2 of 56
1 2 3 4 56

Los jóvenes senegaleses celebran el cambio político tras años de protestas y represión: “Hemos hecho historia”

Los jóvenes senegaleses celebran el cambi
Bassirou Diomaye Faye acaba con más de una década de gobierno de Macky Sall y da esperanzas a los jóvenes del país, más de la mitad de la población, en un momento de fuerte incremento de la emigración a Canarias

— El principal candidato opositor arrasa en la primera vuelta de las elecciones en Senegal y se perfila como futuro presidente del país

Simpatizantes del candidato presidencial de la oposición Bassirou Diomaye Faye y el líder de la oposición Ousmane Sonko celebran en la sede de la coalición de Diomaye mientras se cuentan los votos en Dakar.

Cuando no habían cerrado las urnas, Sidi, de 25 años, ya había salido a la calle a celebrar el cambio político en Senegal. Saint Louis, uno de los principales puntos de partida de los cayucos hacia Canarias y ciudad de pescadores, cerraba la jornada sin vítores en contra del presidente saliente, Macky Sall. Después de dos meses de manifestaciones y revueltas callejeras, la exaltación tenía un solo nombre: Bassirou Diomaye Faye, aclamado ganador de las elecciones presidenciales y líder del partido de Patriotas Africanos de Senegal por el Trabajo, la Ética y la Fraternidad (también conocido como el PASTEF).

Oposición de Senegal celebra triunfo electoral de Faye pese a la falta de datos oficiales

“Hemos hecho historia. Teníamos claro que esto iba a pasar, pero no sabíamos cuándo”, cuenta Sidi a este medio. El joven, que regenta una tienda de souvenirs en el casco antiguo de Saint Louis, asegura que ha votado por Diomaye Faye en las elecciones presidenciales del pasado 24 de marzo.

“Quiero vivir en un país donde exista esperanza para los jóvenes”, cuenta. Desde 2021, Sidi ha tenido que salir en varias ocasiones de Senegal en busca de trabajo. “La victoria del PASTEF no es importante por las medidas en contra del neocolonialismo de Francia. Es importante para nuestro futuro económico y laboral”, añade.

A más de 200 kilómetros de distancia, la felicidad de Pape Malick, de 30 años, se une a la voz de Sidi. “Con la victoria de Diomaye, Senegal vive una nueva etapa. El pueblo senegalés está en un estado de euforia total. El sentimiento es unánime”, cuenta en conversación con este medio. “Estamos contentos de que el régimen opresor de Macky Sall ya no esté al frente de este país”, añade. Pape Malick, fundador de Afrothèque, una biblioteca en Dakar con literatura exclusiva del continente africano, su diáspora y el Caribe cree que “con Diomaye al frente del país, se han despertado nuevas esperanzas entre los jóvenes”.

Las urnas y las calles han hablado. Desde 2021, la represión política y el encarcelamiento de líderes de la oposición han envalentonado la popularidad de la oposición, con Ousmane Sonko a la cabeza. Cuando el exlíder político del PASTEF fue acusado de presunta violación, las primeras reacciones entre la sociedad civil denunciaban un plan y una estrategia estatal planificada contra la candidatura del joven. Por ello, las protestas se intensificaron a favor de Sonko y del cambio político en Senegal bajo las riendas del partido de la oposición panafricanista y rupturista.

¿Cómo deja a Senegal la presidencia de Macky Sall?
Según la Agencia Nacional de Estadística, el 20% de la población activa de Senegal está en paro. El problema adquiere mayor dimensión cuando atendemos al censo demográfico del país: la mitad de la población es menor de 19 años y el 75% tiene menos de 35 años. “Los retos más urgentes de los senegaleses, y especialmente los jóvenes, es el empleo, la Justicia y la transparencia en la gestión de los bienes públicos”, apunta Abdoulaye Fall, senegalés y miembro del Grupo de Expertos en Migración de la Comisión Europea y del Consejo Consultivo de la Fundación de la Universidad Autónoma de Barcelona.

A los desafíos relacionados con el empleo se suma un letargo de iniciativas y proyectos de infraestructura que no se han consolidado durante la presidencia de Sall. Bajo el Plan Senegal Emergente (2014-2035), el presidente saliente impulsó la ampliación de la red de carreteras, incluida la que une Dakar con su aeropuerto, así como la creación de la nueva ciudad de Diamniadio o el desarrollo de un tren regional exprés en la capital.

La realidad es que una gran parte de las propuestas han encontrado dificultades para ponerse en marcha y las obras se han prolongado años. Otras, en cambio, han sido criticadas por su coste desorbitado: 36 kilómetros del tren regional resultaron en una inversión de 780.000 millones de francos CFA (más de un millón de euros).

Los 12 años de liderazgo oficialista de Macky Sall también dejan una deuda pública prevista del 67% para 2024, que el nuevo gobierno pretende ahora reducir al 60% de cara al año 2029. La gestión ineficaz de la economía y las corruptelas con los fondos públicos del país no han sido lo único. Según datos de Human Rights Watch, en los últimos tres años se han producido alrededor de mil arrestos de miembros y activistas de la oposición. La mano dura del gobierno de Sall ha mermado la libertad de expresión y reunión, ilegalizó el partido que hoy se alza como ganador y encarceló tanto a su candidato y próximo presidente, Diomaye Faye, como a otro de sus fundadores y exlíder, Ousmane Sonko.

La represión de Sall no pudo con la voz del pueblo

“Estos resultados electorales, que consagran a Bassirou Diomaye como claro ganador, son la culminación de un anhelo popular de cambio de paradigma en la gestión pública en Senegal”, apunta Fall. Ese anhelo popular se ha ido construyendo en los últimos años y se ha consagrado con el pulso de los líderes estatales y las fuerzas de seguridad por reprimir las manifestaciones que reclamaban el cambio.


Imagen de archivo. Manifestantes senegaleses intentan levantar una barricada a las afueras de la Universidad Cheikh Anta Diop en Dakar (Senegal) el 1 de junio de 2023. Jerome Favre / EFE

“En este cambio, ha contribuido tanto la trayectoria profesional del candidato, como el convencimiento de que el futuro del país no se puede construir fuera del enfoque soberanista y endógeno que defienda la formación de Ousmane Sonko”, añade.

“Si Macky Sall no hubiera anulado las elecciones, esto iba a pasar igualmente. Si Ousmane Sonko hubiera participado, este también habría sido el resultado. La población tenía ganas de votar y dejar atrás el régimen violento en el que Macky Sall ha gobernado con mano dura”, cuenta a este medio Moustapha Ady Mbaye Toure, 26 años, activista panafricanista y militante del partido político vencedor.

Tanto Moustapha como otras voces senegalesas apuntan que, desde el primer momento, las decisiones desde el Gobierno por anular o retrasar las elecciones presidenciales estaban justificadas por el miedo al cambio: “Sabían y sabíamos que la resistencia y la oposición iba a ganar”, añade Moustapha Ady.

¿Qué cambia con Diomaye Faye?
“El proyecto del partido de Faye tiene el acierto de comprender, primero, y dar respuesta, después, a las principales preocupaciones de una población mayoritariamente joven y sin perspectiva de realización personal”, cuenta Fall. Hasta el momento, durante la campaña electoral, Faye y su partido han señalado diferentes medidas que quieren llevar a cabo de manera inminente.

Entre ellas, destacan la puesta en marcha de una política anticorrupción rigurosa que incluya reevaluaciones fiscales, o el acceso a políticas de apoyo técnico y financiero para empresarios y responsables de proyectos, con el fin de limitar los efectos devastadores de la inmigración irregular. “La gente es consciente de que la solución a sus múltiples problemas no llegará en el corto plazo, pero se conformarán con que el nuevo presidente demuestre su voluntad de dar respuesta a sus expectativas”, añade Fall.


El presidente electo de Senegal, Bassirou Diomaye Faye, en su primera aparición pública, el 25 de marzo de 2024, desde las elecciones del pasado domingo Dakar (Senegal). EFE/JEROME FAVRE

Diomaye Faye se convierte en el quinto presidente desde la independencia de Senegal en 1960 y promete estrenar una era de regeneración para el país. A última hora del lunes 25 de marzo y durante su primer discurso como presidente electo, el exinspector de Hacienda insistió en abrir un nuevo capítulo tras los meses de violencia y detenciones que precedieron a las elecciones. “Me comprometo a gobernar con humildad y transparencia y a luchar contra la corrupción a todos los niveles”, señaló durante su intervención. El propio Diomaye Faye fue detenido en abril de 2023 acusado de desacato al Tribunal y fue finalmente liberado apenas dos semanas antes de su victoria en las urnas.

“Ha ganado un proyecto de ruptura y soberanía que busca nuestra dignidad. No tenemos duda de que las promesas de cambio del PASTEF se van a cumplir”, señala Moustapha Ady Mbaye Toure, 26 años, activista panafricanista y militante del partido político vencedor. “Los cambios van a ser tan profundos que podríamos encaminarnos hacia la Segunda República de Senegal. Los jóvenes tenemos que asumir lo que va a venir, acompañarlo, integrarlo y ser capaces de continuarlo durante los próximos años”, añade.

Fuente: https://www.eldiario.es/internacional/jovenes-senegaleses-celebran-cambio-politico-anos-protestas-represion-hemos-hecho-historia_1_11245303.html

Comparte este contenido:

Lucero Martinez Kasab: Un bloque social que embrutece. Colombia

Las personas actúan dentro de esa lógica entre otras cosas, porque, la opulencia se volvió un culto a través de ciertas creencias religiosas que la glorifican, como una bendición de Dios que les habla desde los púlpitos de algunos templos; es la nueva teología de la prosperidad que hace parte del bloque que embrutece. Un ardid del protestantismo convertido en doctrina de los codiciosos porque, les destraba los escrúpulos que inculca la Iglesia Católica para fomentar el respeto al prójimo.

Amparadas bajo la teología de la prosperidad se ven llegar a decenas de personas a las iglesias, gente adinerada, corrupta, que todo el mundo conoce y uno piensa, pero ¿cómo son capaces de ser tan pecadores e ir a la iglesia como si nada? Y, resulta que es que encuentran en el templo la indulgencia al exceso de ambición. Y ya sabemos la fuerza que dan las convicciones religiosas. Así, es fácil que no crean ni teman a la justicia, porque ellos tienen su propia deidad que les ampara el deseo de tener cada vez más, como los sionistas tienen su dios que les respalda el genocidio.

Lo desolador es que a esos templos de la teología de la riqueza también va gente pobre, que está endeudada, no tiene con qué pagar los colegios, debe vivir y alimentarse donde los suegros porque no les alcanza el dinero del trabajo, creen que Dios les cambiará el destino pues, la religión les embrutece la capacidad crítica como para darse cuenta de la situación macro política y económica que incide en sus vidas y, que son sus pastores los millonarios debido al dinero que reciben de ellos, los fieles, que no tienen para comer.

Se suman a este bloque de embrutecedores ciertos medios de comunicación mencionados el otro día por el presidente Petro. Donde vuelven lógica la irracionalidad de tomar un relato mítico de la Biblia como pretexto para que se cometa un genocidio en Palestina. Titulan de manera tendenciosa los logros del presidente Petro, pero, colocan fotos exaltando a una oposición con cientos de investigaciones en contra. Sus invitados expertos son los profesionales formados en EEUU que poseen la ideología de la explotación humana y de la naturaleza.  Exaltan las murmuraciones, el bochinche, la envidia en sus programas de concurso a ver cuál de los participantes arrastra más su dignidad con tal de ganar plata. Saturan la pantalla con presentadoras artificiosas que ofrecen la imagen de ser mujeres empoderadas, ¡ay, ese término! Y las mujeres humildes, trabajadoras, las que deben tomar un bus y pasar tres horas de ida y tres de venida del trabajo que las idealizan no saben que estas empoderadas sufren lo indecible cuando las canas aumentan, las caderas se llenan y la arrugas aparecen porque, esos medios las cambiarán por más jóvenes, la televisión es una recicladora de mujeres empoderadas. Esos programas son velos todos los días en las pantallas de los televisores que van apaciguando en las y los ciudadanos el deseo de conocer, de enterarse de la política real de su pueblo, ciudad o país, entonteciendo el circuito que va del sufrimiento a las neuronas y de ahí al razonamiento que, por fin, les otorgaría una explicación a sus vivencias, sin embargo no, el circuito nunca se completa como para que la gente despierte a la conciencia; se atasca en el sufrimiento que el pueblo cree curarlo identificándose con quienes se insultan en los programas de concurso.

En la Costa comenzaron las emisiones de radio más repugnantes basadas en preguntas impúdicas sobre la vida amorosa, sexual, erótica, con palabras abiertamente obscenas; con unos chistes que son una burla despiadada hacia la mujer; embruteciendo a la juventud que inicia la escucha de la radio, la vuelven su más asidua oyente porque, los jóvenes inexpertos, sin capacidad crítica se sienten atraídos por las risas grabadas y el ambiente festivo de los programas; estas emisoras van en contra vía del humanismo de otras épocas cuando nació la radio,  precisamente, en Barranquilla, con locutores dueños de un contenido y un lenguaje pulido, refinado, agradable.

Ni qué decir de quienes desde la capital de Colombia con unas voces bien moduladas y temas más serios embrutecen a la gente mediante otra táctica: la de colocar como víctima a los y las delincuentes de cuello blanco, es decir, a las personas de la élite política, económica, social que cuando delinquen y caen en desgracia las defienden con malabares idiomáticos. Buscan a toda costa corregir la realidad manipulando con una voz profunda y calmada experta en eufemismos, palabras ambiguas que definen y no definen lo que claramente es corrupción o asesinato o masacres o genocidio. Llama la atención algunas mujeres con un estilo policial, impositivo, de mil palabras por segundo como ametralladoras que imposibilitan el argumento de la otra persona y aún más el contra argumento, son verdaderos tribunales –pero el dictador es otro-. Estas emisoras tanto que critican a la Primera Línea que se opuso a la reforma tributaria de Duque y, resulta, que son la primera línea de defensa detrás de sus micrófonos de la oligarquía corrupta de Colombia. Menoscaban la inteligencia de las personas que llaman espontáneamente a dar sus opiniones cerrándoles el teléfono de la manera más grosera, haciéndolas sentir fuera de lugar, torpes, poca cosa.

Hacen parte de este bloque de embrutecedores las y los políticos que le han ocultado al pueblo que es sede del poder político; inculcándole sentimientos de inferioridad, de que es casi natural tener en los altos puestos del gobierno a gente blanca, adinerada, socia de clubes porque, el pueblo no está capacitado para dirigir esas instituciones, así, la gran masa popular se aparta, no argumenta, no discute; se cree muy lista sacándole al político bolsas de cemento, tejas, mercaditos o plata por un voto durante las elecciones y no se da cuenta que el político le desangra la vida. Los políticos perversos han distorsionado tanto la Ley que, ella, que fue creada para proteger la vida la han volteado para esparcir la muerte.

Integran este bloque de embrutecedores las universidades privadas que esparcen un conocimiento parcial, fragmentando, acomodado de la economía, filosofía, psicología, sociología, derecho, ingenierías, etc., a favor de los poderes dominantes. Sostienen doctrinas que desprecian la igualdad entre los humanos. Apuntalan teorías de las ¡manos invisibles que equilibran el marcado! Pero, se burlan de los pueblos ancestrales que le bailan al dios de la lluvia, a ver si no es más consecuente danzarle a la lluvia para que riegue los campos que creer en una mano invisible económica.  Universidades con teorías psicológicas impregnadas de la física cuántica para solucionar el vacío de una joven que necesita hablar, expresar con palabras que no sabe encontrarle sentido a su vida. No admiten la crítica ni el debate abierto. Dan por sentado que es de seres razonables la filosofía de regirse por los contratos y no por las palabras, aunque se trate de madre e hijo, así atenten contra la histórica solidaridad humana. Estas universidades forman a los futuros presidentes, gobernadores, senadores, etc., para que continúen ejerciendo un poder político impositivo, para, en palabras de los zapatistas manden mandando en vez de mandar obedeciendo al pueblo como lo propone esta revolucionaria filosofía política mexicana. No les cuentan a los alumnos sobre las ideas de la historia humana que liberan el pensamiento, que cortan las cadenas de sentirse inferiores, que fortalecen las culturas propias; sólo enseñan las teorías que muestran cómo dominar al Otro.

Este bloque social embrutecedor priva a las personas de cultivar la duda, la crítica, la confrontación de los hechos,; el razonamiento inductivo y deductivo; obstruye las capacidades de analizar, organizar y categorizar los datos; cercena la imaginación; menoscaba la propia afirmación; desconecta la felicidad o el sufrimiento de los procesos políticos manteniendo al pueblo en la ignorancia de que el ser humano hace la historia y si desea, puede cambiarse de canal, de emisora, de libros, de teorías, de políticos, de gobernantes, de ideologías, de religión, etc. Embrutecer requiere de un alto grado de perversidad, es hacer daño al Otro mediante el achicamiento de su capacidad de reflexión, es obstaculizar el curso de los pensamientos ajenos que llevan a la luz de la conciencia. Es esclavizar el intelecto, que es más terrible que someter al cuerpo porque, las cadenas del pensamiento son sutiles, abstractas, intangibles. El progresismo desde todos los campos tiene la obligación de liberar las cadenas al pensamiento del pueblo para que advierta cómo ciertas iglesias, algunos medios de comunicación, diversas teorías filosóficas y los partidos tradicionales lo han puesto a vivir el mundo al revés, pero que él, el pueblo, puede poner el mundo de pie si tiene fe en sí mismo.

 

Fuente: https://www.lanuevaprensa.com.co/component/k2/un-bloque-social-que-embrutece?s=08

 

Comparte este contenido:

Última hora: La capital de Haití entra en alerta con intensos tiroteos cerca del Palacio Nacional

El entorno del Palacio Nacional de Haití, ubicado en la capital del país, está siendo escenario de intensos tiroteos en la noche de este viernes, que han ido en aumento, según ha podido comprobar la agencia EFE.

Los disparos se están escuchando en los alrededores del Palacio Nacional, en una amplia zona que va desde Champ de Mars a Nazon, Lalue, Canape-Vert y Turgeau, en pleno centro de Puerto Príncipe.

En estos momentos la situación es de gran confusión y es posible que haya ataques en varias zonas, y algunas versiones no descartan que el objetivo de las bandas armadas sea intentar tomar el Palacio Nacional. Además, algunas imágenes muestran grandes agujeros en los muros del aeropuerto de la capital.

La jornada había transcurrido en aparente calma en la zona metropolitana de Puerto Príncipe y tan solo en la tarde se registraron disparos esporádicos. La tensión y la violencia se han incrementado exponencialmente en la capital después de que el 28 de febrero se conociera que el primer ministro haitiano, Ariel Henry, se había comprometido a celebrar elecciones antes de finales de agosto de 2025.

La violencia alcanzó su punto álgido el sábado pasado, cuando las bandas entraron en los dos principales penales en la capital, lo que permitió la huida de más de 3.000 presos.

La huida del primer ministro

Henry, cuya salida del poder persiguen las bandas armadas, está en Puerto Rico, después de varias jornadas en paradero desconocido. El primer ministro, la máxima autoridad del país tras el asesinato en 2021 del presidente Jovenel Moise, es ahora objeto de presiones tanto internas como en el exterior para que favorezca una transición que ayude a frenar la aguda crisis y la extrema violencia en el país.

Haití está a la espera del despliegue de una misión multinacional de apoyo a la seguridad liderada por Kenia y que en octubre pasado aprobó Naciones Unidas.

Fuente: https://alertas24.com/internacionales/la-capital-de-haiti-entra-en-alerta-con-intensos-tiroteos-cerca-del-palacio-nacional/

 

Comparte este contenido:

Racismo y educación en genética

Las personas que aceptan el esencialismo genético creen, entre otras ideas, que la mayoría de las diferencias raciales están determinadas por los genes. Las creencias esencialistas constituyen un error biológico.

En todo el mundo, los estudiantes reciben una educación básica en genética que se centra en la herencia de un solo gen. Los estudiantes aprenden las leyes de la herencia de Mendel y cómo se heredan diferentes versiones de un gen (es decir, los alelos) a lo largo de generaciones a través de mecanismos probabilísticos que se pueden modelar fácilmente con un cuadro de Punnett.

Esto constituye un factor de riesgo para el desarrollo del esencialismo genético durante la adolescencia, afirman Brian Donovan, de la organización sin ánimo de lucro BSCS Science Learning en Colorado Springs, Estados Unidos, y sus colegas en su estudio titulado «Human genomics education can reduce racism», publicado en la revista académica Science.

Los autores del estudio abogan por enseñar conceptos genómicos de una manera que refute el esencialismo genético en un marco que denominan «educación genómica humanitaria».

Donovan y sus colegas señalan ensayos controlados aleatorizados (ECA) llevados a cabo en Estados Unidos que ya demuestran que enseñar a estudiantes de Octavo grado a Duodécimo sobre conceptos clave relacionados puede dar lugar a una reducción en las creencias genetistas esencialistas de los estudiantes sobre la raza.

Uno de estos conceptos es que la mayoría de la variación genética se produce dentro de poblaciones geográficas, en lugar de entre ellas.

Los resultados de estudios relacionados muestran que los estudiantes formados en estos conceptos tienen más probabilidades de no creer en el esencialismo genético porque tienen más probabilidades de desarrollar la percepción de que las razas no son tan genéticamente diferentes.

Sin embargo, los autores del estudio afirman que estos ensayos controlados aleatorizados pasados presentan limitaciones clave. Para superar estas limitaciones, diseñaron nuevos ensayos cruzados aleatorizados por conglomerados, en los que todos los conglomerados participantes reciben consecutivamente ambos tratamientos de intervención (educación genómica humana) y tratamientos de control (educación básica en genética) en períodos de tiempo separados. Sus ensayos fueron los primeros en explorar cómo estos dos estilos de instrucción afectan a la conceptualización racial.

Entre diciembre de 2019 y mayo de 2022, los autores reclutaron a 15 profesores y 1063 estudiantes de biología de seis estados de EE.UU. (Colorado, Illinois, Indiana, Kansas, Nueva Jersey y Massachusetts). Los profesores participantes recibieron 40 horas de desarrollo profesional para aprender a implementar la intervención genómica humanitaria.

A juzgar por los resultados, los estudiantes que participaron en el entorno de aula de genómica humanitaria mostraron un mayor conocimiento de la genómica y menos creencia en el esencialismo genético.

Es importante destacar que, a medida que los estudiantes comienzan a no creer en el esencialismo genético, también parecen inclinarse hacia la creencia de que la raza es un concepto social y que las disparidades raciales son causadas por prejuicios.

Por el contrario, la instrucción básica en genética no produjo ninguno de estos beneficios para los estudiantes.

Para acallar posibles críticas sobre la escalabilidad de su enfoque, los investigadores describieron los resultados de un ensayo adicional previamente registrado y aleatorizado con personas que llevaron a cabo con aproximadamente 1000 estudiantes universitarios en el sistema de la Universidad de California. Los resultados sugieren que la instrucción de genómica humanitaria puede escalarse de manera relativamente rentable y eficiente en tiempo a través de una plataforma en línea, afirman los autores del estudio. (Fuente: AAAS)

 

Fuente: https://noticiasdelaciencia.com/art/49835/racismo-y-educacion-en-genetica

Copyright © 1996-2022 Amazings® / NCYT® | (Noticiasdelaciencia.com / Amazings.com). Todos los derechos reservados.

 

 

Comparte este contenido:

Los dibujos de la guerra de Ucrania

El refrán “una imagen vale más que mil palabras” puede aplicarse también a los dibujos de los más pequeños. Un dibujo puede evocar más de mil palabras y emociones. Las imágenes hablan y los dibujos también lo hacen. En un mundo en el que muchas veces los mayores hablan en nombre de los más pequeños, o en el que éstos todavía no tienen suficientes herramientas para expresar la complejidad de sus emociones, existen técnicas que ayudan a descifrar los sentimientos. Núria Casanovas, psicóloga especializada en infancia y familia, dedica su carrera a analizar e interpretar los dibujos de los niños. De hecho, también ha escrito un libro que funciona como pequeña guía de iniciación a esta rama de la psicología.

Habitualmente, los más pequeños cargan también con las consecuencias de los actos de los adultos, y muchas veces no somos conscientes de cómo pueden afectarles. En Ucrania, la guerra se inició hace ya casi dos años. Un conflicto armado que, de momento y según cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se ha cobrado miles de vidas (hay 24.900 víctimas civiles registradas), ha causado una destrucción incalculable y ha dejado casi 18 millones de personas en situación de necesitar ayuda humanitaria.

Si estas cifras no fueran suficientemente abrumadoras podríamos añadir que, en la actualidad, hay 1.060 ataques verificados contra estructuras sanitarias, que el 30% de los puestos de trabajo anteriores a la guerra han sido suprimidos y que casi 10 millones de personas, incluidos 7,8 millones de niños, corren el riesgo de sufrir un trastorno de estrés post-traumático agudo.

Hemos tenido acceso a los dibujos de niños de distintas edades, residentes en Kiev, de antes y durante la guerra. Sus historias son distintas, pero comparten un rasgo común: están viviendo su niñez en guerra. En Kiev, las alarmas antiaéreas suenan a diario y forman parte de la banda sonora del día a día. Cuando saltan las alarmas se evacuan los centros comerciales de grandes superficies y los edificios administrativos, y los maestros llevan —obligatoriamente, en cumplimiento de la normativa— a los niños a los refugios del sótano de las escuelas, para resguardarse. Allí siguen con las clases hasta que suena la alarma de cierre, que indica el fin del peligro.

Estos niños, que no han abandonado Kiev en ningún momento, han vivido la guerra desde su inicio. Durante los primeros meses del conflicto no asistían a clase, porque las escuelas funcionaban como refugios para desplazados internos de las zonas más afectadas. Han vivido ataques aéreos, bombardeos masivos y las consecuencias de la destrucción de instalaciones eléctricas, que les dejaron sin luz, sin agua y sin calefacción.

Según Núria Casanovas, la guerra puede afectar a los niños a todos los niveles: emocional, neurológico o de relación con los demás, porque los lleva a vivir situaciones en las que pierden la sensación de protección y confianza, hecho que también puede influir en su aprendizaje.

“El cuerpo, a veces, prioriza la supervivencia, y por eso debe dedicar mucha energía a digerir y a gestionar el estrés vivido”, argumenta la psicóloga. “Esto interfiere en los procesos de aprendizaje y en las capacidades cognitivas; las situaciones traumáticas incluso pueden crear disociación”.

Pero, como todo, la situación de guerra puede afectar de forma diferente a cada niño, ya que son muchas las variables que hay que tener en cuenta, como el apoyo familiar, las capacidades en el ámbito de la inteligencia, los recursos emocionales o la historia precedente, alerta la psicóloga. “Sin embargo, lo que sí se observa a veces es que, a corto plazo, los niños pequeños parecen sufrir menos la guerra porque son más resilientes y en muchos casos siguen haciendo vida normal”. “Las consecuencias de estas situaciones traumáticas vividas en la primera infancia pueden convertirse en un factor de dificultad emocional a largo plazo, si no se trabaja posteriormente”. Es importante que los niños estén acompañados de profesionales para que, en un futuro, no sufran estas consecuencias. En este sentido, es necesario trabajar estos duelos, igual que la sensación de seguridad o de protección. En otros casos, también es necesario trabajar los traumas creados por la guerra, y éstos sí requieren profesionales especializados. No debe ser un tratamiento inmediato, porque hay niños que tienen una capacidad de resiliencia muy fuerte e incluso, con el apoyo del padre, de la madre o de la escuela, logran salir adelante.

Tal y como explica Casanovas, a pesar de que algunos niños son muy resilientes, los adultos pueden transmitirles la sensación de estrés. “Aunque no estén en la zona caliente de la guerra ni vean directamente una bomba, sí sienten ese estrés de su entorno, que les hace experimentar una sensación de sufrimiento”. “El niño lo vive de forma indirecta”.

Para poder ayudar a los niños a canalizar una situación como la guerra, Núria Casanovas explica que lo primero es detectar cómo les está afectando. Añade que, en edades en las que todavía no saben expresarse tan bien como quisieran, el análisis de los dibujos es una buena herramienta para conocer el estado de salud mental del niño o la niña.

1. Varia, 4 años

El primer dibujo es el de Varia, de 4 años. Después de analizarlo, Núria concluye que el tipo de gotas que hace denotan que es un niño muy sensible, muy emocional. La lluvia aparece en la esquina derecha, lo que significa que Varia se proyecta en el futuro; “significa que la solución para este niño, cuando se sienta mal o se estrese, será pensar en qué le irá bien en el futuro, pues eso le ayudará a sentirse mejor”, argumenta la psicóloga. “El otro dibujo, el de la casa, es positivo porque el sol está dibujado a la izquierda, y esto normalmente nos habla de resiliencia; al mismo tiempo, el tipo de casa que dibuja significa que mantiene mucha fuerza interior, por su temperamento, a pesar de los tiempos difíciles que le ha tocado vivir”.

2. Violetta, 4 años

Como podemos ver, el dibujo de la casa que ha hecho Violetta es parecido al de Varia, lo que denota mucha fuerza y ​​mucha resiliencia. “Además, la puerta —que tiene mucha presencia en la casa— habla de una buena capacidad de comunicación y de interacción con los demás”.

Violetta, por el contrario, no dibuja ningún paraguas para protegerse de la lluvia, y “esto indica que necesita algún recurso para hacer frente al estrés como, por ejemplo, relajarse o aprender a manejar sus pensamientos. Asimismo, esta proyección de la figura humana bajo la lluvia en el lado derecho de la hoja indica que presenta una tendencia a pensar en el futuro como recurso para sentirse mejor ante situaciones estresantes”.

3. David, 5 años

El siguiente dibujo, el de David, de 5 años, evidencia algo de malestar emocional. “Ya vemos que la figura humana está dibujada más con cuchillos. Esto habla más de una tensión a nivel emocional que está expresada desde el dibujo”. Las manos —que hablan de la relación con la familia— son rojas y están apretadas; por tanto, pueden expresar que hay tensión a nivel familiar o que los padres están más tensos”.

En el dibujo de abajo, el árbol de la derecha, que es muy grande, muestra una necesidad de apoyarse en la madre. Al mismo tiempo, tiene las orejas muy grandes, lo que indica que es un niño muy sensible a lo que siente, y por tanto, hay que decirle las cosas de una manera muy positiva. Al mismo tiempo, Casanovas señala que quizás se debería evitar decirle cosas que pretenden los mayores o cosas que le puedan preocupar demasiado.

4. Zlata, 4 años

Igual que el dibujo de David, el de Zlata denota una necesidad de la figura materna, que se representa mediante el árbol grande a la izquierda. La casa tiene una ventana en la parte de arriba, el tejado y la redonda, que está vinculada a una necesidad de conciencia. “Por tanto, Zlata necesita ser muy consciente del porqué de las cosas y de qué puede hacer y qué no. Sin embargo, dibuja la puerta alejada del suelo, y eso significa que siente que necesita protección”.

En la parte inferior del dibujo destaca un arco iris sobre la figura humana, y eso es un signo de transformación. “Este niño está viendo que las cosas están cambiando hacia mejor”.

5. Zoriana, 6 años

En el dibujo de Zoriana destaca una hierba muy larga, tan alta como las piernas, y eso significa que proyecta su necesidad de sentir ternura y mucho positivismo en la comunicación. La figura de abajo aguanta una especie de globo, que denota la necesidad de control, es decir, sería interesante dejar que esta niña decida cosas, para evitar que sienta esa impotencia. “El globo también hace referencia a la necesidad de reencontrar a la niña interior; indica que Zoriana tiene la necesidad de preservar esta vida de niña, que juega a pesar de lo seria que es la situación que la rodea”.

6. Orest, 6 años

El dibujo de Orest es bastante positivo, pues la figura humana es más grande que la casa. A la derecha del tejado hay dos líneas; una de ellas, distorsionada, puede indicar que el niño siente que se está fragilizando la protección. Normalmente, el lado derecho se vincula al padre, de modo que una posibilidad es que Orest sienta una potencial desprotección por parte del padre; puede que porque se haya ido a la guerra, o bien porque tema que deba marcharse en un futuro. Dibujar un árbol a cada lado de la casa explica que está desarrollando los recursos necesarios para sentirse más protegido.

7. Orest, 6 años

El otro dibujo de esta figura humana con la cabeza y los pies amarillos bajo la lluvia es interesante, porque contiene un muy buen paraguas, y por tanto, indica que Orest tiene la capacidad de poner en acción cosas con las que se siente protegido. Sí habría que destacar una nube, que denota la sensación del niño de “que todo me pasa a mí, todo dentro de mí se cae. También debe remarcarse que sus recursos son eficaces y el hecho de que el personaje no tenga cabello, indica que la situación que vive está afectando su autoestima”. También vemos que dibuja el sol a la derecha, junto a la nube. Esto significa que a pesar de la presencia de dificultades y el estrés que pueda estar viviendo, también es capaz de ver que hay cosas positivas.

8. Rita, 5 años

Por último, en el dibujo de Rita, de 5 años, destaca la falta de recursos: “la persona bajo la lluvia no tiene paraguas, y aunque parece una niña contenta y sensible —por las pestañas y ojos rosas que dibuja—, esta falta de herramienta de protección en el dibujo denota una necesidad de recursos para aferrarse a una situación difícil en la vida real”.

“En el dibujo del árbol destaca —por el tipo de copa y las tachaduras— que quizás sufre preocupaciones a nivel mental, ya que la copa está vinculada al nivel mental de la persona”. “La casa también es rosa, igual que la cara de abajo, por tanto, a pesar de las preocupaciones y tensiones, hay un aspecto dulce que es importante y eso sería positivo”, concluye la psicóloga.

“En estos dibujos, uno de los aspectos importantes en las representaciones de personas bajo la lluvia es ver si llevan o no paraguas. La mayoría de los personajes no lo llevan, o es poco funcional, y esto sugiere que los personajes no se acaban de sentir bien protegidos”. “Esto significa que son niños que no tienen recursos o defensas para protegerse de situaciones de dificultad”.

“Si son niños de la guerra, pese a su capacidad, han tenido una situación de la que no han podido escapar: están afectados sí o sí por situaciones estresantes”.

Sin embargo, Casanovas señala que los dibujos son bastante positivos, quizás por la zona donde residen estos niños. La psicóloga enfatiza que hizo un análisis de diferentes dibujos de niños provenientes de Ucrania que contaban con la ayuda de la Cruz Roja aquí, en Cataluña, y que “esos dibujos canalizaban situaciones extremadamente traumáticas”. “Se veían niños rotos, gente con sangre, gente muerta, cadáveres y metralletas. Y entonces es cuando el dibujo permite encauzar lo que a veces el niño no explica, porque no quiere o no puede”.

The post Los dibujos de la guerra de Ucrania appeared first on El Diario de la Educación.

Comparte este contenido:

Enseñanzas y perspectivas

Antonio Antón

La izquierda alternativa, diferenciada del PSOE y de la izquierda nacionalista, está en un proceso transitorio de rearticulación política y organizativa.

 

La coalición Sumar y Podemos, además del Partido Socialista, se han llevado un batacazo en las elecciones gallegas. Junto con la experiencia de sus tensas relaciones en los últimos meses y los retos inmediatos de las elecciones europeas exigen una reflexión colectiva. Se trata de valorar su papel y su futuro, en el marco del objetivo compartido de reforzar el bloque progresista, democrático y plurinacional frente a la ofensiva de las derechas.

 

En un libro reciente, Izquierda transformadora, he analizado el proceso de formación de ese espacio sociopolítico y electoral y sus características, así como sus límites y sus retos estratégicos; en un artículo anterior, Sumar y Podemos en la encrucijada, he expuesto y comparado, con datos del CIS, su representatividad electoral para establecer una base objetiva sobre su doble relación de cooperación y competencia. Se trata ahora de sacar las enseñanzas de estas dificultades y tentativas articuladoras últimas para desbrozar el camino de su refundación, en el que están inmersos, definir las perspectivas sociopolíticas y promover el necesario empuje reformador para garantizar el avance social y democrático.

 

Declive y refuerzo de las fuerzas del cambio de progreso

 

En el declive de Unidas Podemos, y de las fuerzas del cambio de progreso en general, intervienen tres tipos de factores: la estrategia de los poderes fácticos -política, institucional y judicial- de acoso y aislamiento a Podemos; la renovación y el giro hacia la izquierda por parte del Partido Socialista, en el llamado ‘sanchismo’ (2018/2019), tras casi una década de crisis interna y de su orientación estratégica socioliberal, y la fragmentación de la izquierda transformadora.

 

Ese debilitamiento se quiso afrontar con la renovación del liderazgo de Yolanda Díaz, en el ámbito institucional de UP, acompañado por Jone Belarra como Secretaria General de Podemos, como motor del conglomerado. Pero ese diseño colaborativo y de cierta renovación dentro de la lógica de continuidad de Unidas Podemos y su ampliación, se frustró.

 

La estrategia de división y aislamiento de Podemos ha tenido un relativo éxito, sobre todo por la descalificación mediática y el acoso de los poderes fácticos, pero también por la promoción comparativa de Yolanda Díaz y Sumar. Constituían una alternativa más moderada, dialogadora o transversal, pero con mayor respaldo público, a tenor de los estudios demoscópicos, así como con el trasvase de una parte del anterior electorado y los grupos políticos vinculados con Unidas Podemos, más exigente, crítico y de izquierdas.

 

Por otra parte, hay un interés socialista por rebajar la presión por su izquierda y garantizar una mayor normalización política, especialmente dirigido hacia Podemos, que constituía un desafío por su política confrontativa con los poderosos. Así, han conseguido dejarlo en una posición subalterna, aunque todavía con influencia sociopolítica y, en algún caso, determinante, aunque pendiente de comprobar su legitimidad pública en las elecciones europeas, el alcance de su estrategia de reafirmación y su capacidad de supervivencia como actor relevante.

 

Ante el no reconocimiento de su representatividad en el seno del grupo parlamentario de Sumar, tal como reclamaban, y la consecuencia de su inoperatividad política, era bastante inevitable su salida del grupo para intentar tener mayor iniciativa política y pública. La división ha sido dura y su futuro es difícil. Falta saber, tal como vaticinan algunos augurios, si se produce una derrota global en las elecciones europeas y, a más largo plazo, si logra una supervivencia suficiente para encarar su remontada.

 

Aquí habría que distinguir entre pronóstico y plan. El diagnóstico y la profecía del hundimiento político y electoral de Podemos está en el debate público. Es una hipótesis que, en muchos casos, se basa en ciertos hechos pero, sobre todo, en el deseo normativo de distintos actores. Y ello se convierte en plan para conseguir su irrelevancia global. Aparte de denotar poco respeto por el pluralismo político, la cuestión a valorar de ese plan es en qué medida es factible y realista y si perjudica (o no) al conjunto de las izquierdas, aunque revierta en una ventaja relativa para Sumar (con sus aliados), que ocuparía todo ese espacio, probablemente minorizado.

 

Por otra parte, hay que dejar abierta la posibilidad de ver si se modifican las condiciones unitarias para las próximas elecciones generales (y municipales y autonómicas) o, en caso contrario, si es capaz Podemos de persistir con un mínimo de representatividad electoral.

 

Por tanto, dentro del posible debilitamiento de ambos o, bien, en el mejor de los casos, de su respectivo fortalecimiento orgánico, más o menos asimétrico, en el que están empeñadas ambas dirigencias, las dificultades mayores son para Podemos, para mantenerse como un actor para tener en cuenta en el escenario público e institucional y condicionar el proceso social y político. Es el emplazamiento inmediato que tienen ambos para las elecciones europeas, especialmente la formación morada, más aislada mediáticamente. Veamos estas perspectivas.

 

La división y el difícil camino unitario

 

Desde la lejana oposición a un Ejecutivo continuista entre PSOE y Ciudadanos, que supuso el inicio de la gran fractura interna entre los llamados errejonismo y pablismo, Podemos, partidario de un cambio sustantivo de progreso, es percibido como una amenaza para la consolidación de la normalización política y el continuismo de la gestión gubernamental socialista. Tiene una actitud reformadora más valiente y exigente, especialmente en el ámbito socioeconómico y democrático, así como en el internacional. Supone un freno a las medidas gubernamentales derivadas de una reorientación centrista o el retroceso de derechos, cuestión que genera fricción, como en los últimos casos sobre la reforma punitivista de la Ley de ‘solo sí es sí’, los recortes en el subsidio de desempleo o el estancamiento de la ley de vivienda, así como en la exigencia de una solidaridad más contundente con el pueblo palestino y el rechazo al genocidio del Gobierno israelí…

 

No obstante, las propuestas reformadoras de la mayoría dirigente de Podemos, nada radicales o utópicas, podrían encajar en una negociación plural y consensuada de la mayoría parlamentaria progresista y, en particular, con Sumar. Además, puede ser un puente en la alianza plurinacional y la reforma territorial y del Estado. O sea, Podemos tiene un proyecto transformador diferenciado en algunos aspectos y es más ambicioso; pero comparte objetivos comunes con el conjunto de las fuerzas del bloque progresista o democrático y plurinacional. Por tanto, es compatible con una estrategia global de garantizar la estabilidad del Gobierno, sin ser seguidista o estar subordinado a todas y cada una de las medidas gubernamentales aprobadas, cuestión que cabe en un acuerdo desde la pluralidad.

 

En todo caso, el problema principal del conjunto de esa izquierda alternativa es el de la capacidad transformadora real, no solo discursiva o de habilidad negociadora, basada en una relación de fuerzas sociopolíticas que condicione al poder establecido y las instituciones parlamentarias y ejecutivas para el avance sustantivo en condiciones y derechos para las mayorías sociales. Es el auténtico sentido de la política ‘útil’ que reclaman ambos, Sumar y Podemos. Luego viene la pugna por el relato de cuánto se ha avanzado y para quién y, sobre todo, quién y cómo se ha conseguido, y se ve beneficiado por el incremento de su legitimidad pública y su acceso a mayor poder institucional.

 

Existe una disputa sobre el alcance y sentido de las reformas impulsadas y los objetivos de la estrategia reformadora, así como sobre la recomposición del espacio progresista y el peso socio-electoral e institucional de sus distintas corrientes para condicionar la dinámica política: socialista, Sumar, nacionalismo de izquierda y Podemos. Y si nos atenemos a la izquierda transformadora confederal, entre sus dos alas: la moderada, amable o transversal, y la más resistente, exigente o de izquierdas. Y este reequilibrio y la convivencia a través de un pacto mínimo, al menos para las próximas elecciones generales, y dadas las constricciones de la normativa y los componentes competitivos y de legitimación democrática en los procesos electorales, debiera atenerse a los procedimientos democráticos básicos de respeto a la pluralidad y basarse en los objetivos compartidos y la negociación y regulación de los disensos.

 

Partimos hoy desde la realidad de la primacía socialista, la distinta representatividad e influencia del resto de actores, así como las diferentes ventajas y desventajas derivadas del contexto. Pero, hay que arbitrar un mecanismo objetivo y democrático de articulación orgánica del conjunto del espacio alternativo, dentro de una cultura integradora y de respeto a la pluralidad.

 

Un espacio alternativo diferenciado de la socialdemocracia

 

La consolidación del bipartidismo es difícil, al menos en la izquierda, con la completa hegemonía del Partido Socialista, a través de la mayor absorción, minoración y subordinación de Sumar y la (casi) marginación de Podemos, que haría innecesario incluso un gobierno de coalición y se abriría su acariciado objetivo por gobernar en solitario o con mayor autonomía respecto de su izquierda; igualmente, respecto del nacionalismo de izquierda (ERC, EH-Bildu y BNG), aunque es más difícil su neutralización por el peso de la plurinacionalidad de la sociedad española.

 

No obstante, el conflicto social y democrático (incluido el ecológico, el feminista y el territorial) persiste y hay espacio sociopolítico para una izquierda social y política transformadora o, si se quiere, una fuerza democratizadora del Estado y reformadora de lo socioeconómico y laboral -un nuevo y renovado laborismo-. En ese sentido, la existencia y relevancia de Podemos, frena tres dinámicas problemáticas: La moderación de Sumar con su subordinación a la estrategia socialista; la propia tendencia centrista o socioliberal del PSOE, y la desarticulación de un frente plurinacional relevante, incorporado a la llamada dirección de Estado, vista con recelo en la izquierda moderada y sin convicciones federalistas. Pero ese digno y valiente papel, con el desafío al poder establecido y las inercias adaptativas, es el fundamento que explica su freno por los poderes fácticos.

 

Por tanto, el debilitamiento de Podemos sería perjudicial para mantener un espacio sociopolítico y electoral relevante autónomo del Partido Socialista, con un empuje transformador; además, su refuerzo también debiera representar una dinámica unitaria con los distintos grupos de Sumar, con los que comparten muchos objetivos de progreso frente a las dinámicas reaccionarias. Todavía hay vasos comunicantes entre las bases sociales de las dos sensibilidades y con la socialista. Así, se debería tender, especialmente por abajo, al establecimiento de puentes unitarios y consensuar una competencia ordenada y democrática que defina los equilibrios representativos en cada coyuntura, y se puedan sumar realmente todos los esfuerzos transformadores con su representatividad real.

 

En definitiva, al igual que en los grandes movimientos populares progresistas o amplios frentes sociales y políticos, es posible combinar diversidad y colaboración, frente al bloque de los poderosos. En consecuencia, es conveniente resaltar los intereses y objetivos comunes, así como consensuar los procedimientos democráticos para articular las estructuras orgánicas y de representación y la regulación de los desacuerdos y la pluralidad existentes. Ello permitirá reforzar la credibilidad de una representación política alternativa con una rearticulación político-organizativa positiva, en beneficio de las fuerzas progresistas y el avance social y democrático de la sociedad.

 

Arraigo social y reactivación cívica, claves para la remontada alternativa

 

Hay un problema estructural en la conformación de la izquierda transformadora: su vinculación con el tejido asociativo y popular, con los movimientos sociales y sus activistas, incluido el sindicalismo, el feminismo y el ecologismo, muchos con doble militancia en organizaciones sociales y políticas, así como con las demandas surgida de abajo, de la propia sociedad civil.

 

En esta década, se ha construido una representación política al calor de un amplio y heterogéneo movimiento popular, por la activación cívica y la protesta social progresista simbolizadas por el movimiento 15-M. Pero, aparte del descenso relativo de la movilización social -salvo la cuarta ola feminista y ciertas movilizaciones parciales, como la de la sanidad pública o los pensionistas-, se ha producido un giro estratégico, discursivo y organizativo por la preferencia de la acción comunicativa, como constructora de campo electoral, y la acción institucional como gestión reformadora que legitima y reproduce a esa representación partidaria.

 

No obstante, esos dos ejes, discursivo e institucional, son insuficientes para evitar su declive representativo. Y, junto con otras causas, como el acoso político y mediático y la capacidad renovadora del propio Partido Socialista, se ha ido viendo el factor decisivo de otro rasgo fundamental de su articulación: el déficit de su arraigo social, denominado mediáticamente como inserción en el territorio. Se trata de esa vinculación real y directa con la gente, especialmente la más activa y sensibilizada, con su problemática y sus aspiraciones para articular las políticas públicas. El impacto ha sido evidente en los últimos comicios autonómicos gallegos, al igual que en los anteriores del 28 de mayo, sin que en unas elecciones generales como las del 23-J tenga el mismo peso al complementarse con la credibilidad gestora y transformadora del conjunto del país.

 

En ese sentido, la prioridad reformadora de la izquierda alternativa, dentro del bloque progresista, democrático y plurinacional, no es solo sobre las cosas cotidianas de las condiciones de vida, trabajo, protección pública o sostenibilidad medioambiental de las mayorías sociales, sino también la necesidad para abordar y ser creíble respecto de las políticas globales, las estrategias y los relatos que están vinculadas con ellas. Y, normalmente, están en pugna con los de las derechas reaccionarias, incluso con el socioliberalismo continuista.

 

Forman parte de la legitimación y articulación de las representaciones políticas, su papel mediador con las demandas populares y, por tanto, por la pugna -legítima- por el poder institucional. Se trata de ligar esas aspiraciones ciudadanas inmediatas con la problemática de fondo sociolaboral, económica y democrática, con un objetivo más profundo de la justicia social y la democracia, con la defensa del Estado de bienestar y de derecho y los servicios públicos, con la redistribución pública, la justicia fiscal y la protección social, por una dinámica igualitaria y emancipadora, característica de la izquierda democrática.

 

Por tanto, la solución viene por el refuerzo de ese arraigo social y la voluntad y la credibilidad transformadora de la representación política de la izquierda alternativa, acompañada de la activación cívica y la pugna ideológica y cultural desde los valores progresistas y los derechos humanos, sociales y democráticos.

 

Algunos rasgos de la actual movilización social progresista

 

El movimiento de solidaridad con el pueblo palestino, ante el colonialismo y el genocidio del Gobierno israelí tiene una gran importancia política, simbólica y ética, y hay que reforzarlo. Ha habido masivas muestras de apoyo en las ciudades más importantes de Europa, incluido en España. No obstante, el grueso del poder establecido europeo y los principales gobiernos, junto con sus aparatos mediáticos, están muy dependientes de la estrategia estadounidense que ampara al Gobierno israelí y es una dificultad añadida para parar su agresión, aun con la oposición de muchos países del Sur global. La cultura pacifista y de solidaridad internacional es una característica fundamental ante la agudización de los conflictos geopolíticos y las dinámicas neocoloniales.

 

Dejando aparte las dinámicas nacionalistas periféricas, el movimiento específico progresista más masivo e impactante en España, en los últimos años, ha sido el movimiento feminista, con significativos cambios normativos y de mentalidades, en particular frente a la violencia machista y por la prioridad del consentimiento y la voluntariedad en las relaciones sexuales. Y ha sido evidente la reacción derechista y conservadora en su contra. Aun así, y a pesar de su relativa división interna, el grueso de esa movilización y concienciación feminista representa una buena orientación igualitaria-emancipadora y un modelo de participación feminista, incluido varones solidarios, en defensa de la igualdad de género y la emancipación de las mujeres y colectivos LGTBI. Además, ha tenido un gran impacto positivo en la sociedad, por ejemplo en el reciente caso del beso no consentido a Jenni Hermoso, campeona mundial, por parte del presidente de la Federación de futbol, Luis Rubiales, forzado a dimitir por la repulsa cívica.

 

Sin embargo, aquí habría que diferenciar, al menos dos niveles distintos sobre la dimensión, capacidad expresiva, profundidad y duración de procesos movilizadores o de una activación cívica prolongada que conforman cambios cualitativos en la experiencia popular y la actitud sociopolítica, cultural y representativa en el campo político-electoral. Y, además del movimiento antifranquista -base social de la izquierda- y, en parte, el movimiento pacifista y el sindical en los años ochenta -base electoral de Izquierda Unida-, y referido a la configuración de la izquierda transformadora en esta etapa histórica, su formación se inició con un amplio y heterogéneo movimiento popular progresista, simbolizado por el llamado movimiento 15-M que se mantuvo durante un lustro (2010/2014).

 

Su particularidad, aparte de su masividad y legitimidad social, fue que contribuyó a la oposición y la crítica de las políticas regresivas y prepotentes de austeridad, aplicadas por el bipartidismo gobernante y amparadas por las instituciones europeas, con lo que se conformó un campo sociopolítico diferenciado de la socialdemocracia y más exigente respecto de la justicia social y la democratización política.

 

La articulación partidaria con arraigo social

 

Como segundo paso y de forma complementaria es cuando surgió Podemos y el relanzamiento del conjunto de las fuerzas del cambio de progreso. Es decir, la representación política como izquierda alternativa es deudora de un amplio proceso participativo democrático y popular que sentó las bases de un espacio sociopolítico y electoral a la izquierda de la socialdemocracia y que luego se tradujo en fuerza institucional, con la consolidación de su potencial transformador.

 

Como se ha dicho, se ha ido produciendo un cierto declive gradual de ese espacio, aunque una parte votante desplazada hacia el PSOE (o la izquierda nacionalista) se puede considerar todavía una base social transformadora y reversible o dual en su expresión electoral. La opinión realista es que, por una parte, todavía permanece algo de ese impulso transformador desde abajo, con esa experiencia sociopolítica y una cultura política más social y democrática, que explica la permanencia -debilitada- de un espacio sociopolítico y electoral más crítico y exigente que el Partido Socialista y diferenciado del nacionalismo. Por otra parte, además de evitar las insuficiencias y limitaciones de la dirigencia de los grupos alternativos, en particular de Sumar y Podemos, es necesaria la revitalización y la cooperación de ese espacio.

 

No obstante, esa aproximación unitaria va a venir (si viene a corto o medio plazo), fundamentalmente, en la medida que haya una reactivación cívica de distintos movimientos sociales y su mayor o menor convergencia e impacto sociopolítico y cultural; por otro lado, según la capacidad socialdemócrata para neutralizarlo o reorientarlo. Ello permitiría condicionar a las estructuras partidarias alternativas con un proceso democrático de cambio de progreso, más unitario, constructivo, plural y reformador, en el marco de su actual recomposición.

 

O sea, la solución, de venir, vendrá de abajo y, en parte, de fuera de las élites partidistas actuales, y su liderazgo se renovará y fortalecerá en la medida que se impulse, regule y coordine esta combinación de la activación cívica, el arraigo social y la acción democrática y plural de todo el conglomerado alternativo con su gestión institucional. Y ello supondría, en tensión con la dinámica de debilitamiento y división de esta izquierda transformadora, con sus pugnas corporativas y sus implicaciones para la gobernabilidad de progreso, una renovación y recomposición de las estructuras partidarias, en un nuevo proceso de refundación, camino de un amplio frente cívico, unitario, democrático y popular.

 

Antonio Antón. Sociólogo y politólogo.

 

Fuente: https://rebelion.org/ensenanzas-y-perspectivas/

Comparte este contenido:

Brasil tiene más templos que escuelas y centros de salud

Los templos de sectas y religiones en Brasil duplican el número de instituciones educativas y de salud en todo el país, arroja el Censo de 2022 divulgados por Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

 

Los datos señalan que en el gigante latinoamericano hay 579.798 establecimientos religiosos, entre iglesias, templos, sinagogas y ‘terreiros’ (como se denomina a los sitios de oración de cultos afrobrasileños como el candomblé). El número es más del doble que las 264.445 instituciones educativas y de salud (264.445) identificadas por el IBGE en todo el país.

 

Eso supone que mientras existen 286 templos por cada 100.000 habitantes en el país, la proporción de centros educativos, entre guarderías, escuelas y universidades, cae a 130 por cada 100.000 habitantes. Ya la proporción de hospitales, clínicas y centros de urgencias baja hasta 122 por cada 100.000 habitantes.

Viviendas particulares y prisiones

 

Los datos son el resultado del primer mapeamiento de todas las coordenadas geográficas y los tipos de edificaciones que componen las 111 millones de domicilios en Brasil que fueron registradas durante la realización del Censo.

 

Según el estudio, la gran mayoría de los domicilios en Brasil corresponden a viviendas particulares, con 90,6 millones en todo el país. Le siguen los establecimientos comerciales y de otras finalidades como edificios culturales o públicos (11,7 millones), los agropecuarios (4 millones), los edificios en construcción (3,5 millones) y los domicilios colectivos -hoteles, prisiones, pensiones, residencias de ancianos- (104.500).

Fuente: https://alertas24.com/internacionales/brasil-tiene-mas-templos-que-escuelas-y-centros-de-salud/

Comparte este contenido:
Page 2 of 56
1 2 3 4 56