Page 16 of 61
1 14 15 16 17 18 61

La Reforma Educativa que queremos

Por: Juan Carlos Miranda Arroyo

Desde que se firmó el acuerdo político llamado “Pacto por México”, en 2012, al inicio de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, los partidos políticos más importantes de México, el Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD), generaron la idea de que las reformas estructurales serían “correctas y pertinentes”, no sólo como mecanismo de concertación política, sino como punto de partida de un nuevo “contrato político y social” para concretar las reformas convenientes para el país. Por lo tanto, el diagnóstico que presentaban los legisladores y dirigentes de dichos partidos sobre el estado de la nación, era válido (para ellos) y las necesidades sociales estaban claramente identificadas en materia de Energía, Salud, Educación, Comunicaciones y Transportes, Derechos Laborales, Reforma Fiscal, entre otras.

En ese marco se insertó la idea “original” de llevar a cabo, en particular, una reforma estructural de la Educación Pública en México, que posteriormente dio lugar a los procesos legales e institucionales desarrollados y a los resultados que hoy conocemos: La aprobación y decreto de un paquete de reformas al marco legislativo, desde la Constitución Política (Artículos 3 y 73) hasta las leyes secundarias o complementarias, eso en primer lugar (2012-2013); luego, por detrás, las modificaciones plenamente educativas y curriculares: En particular, la definición de los fines de la educación, del modelo educativo (2016) y la formulación del plan y los programas de estudio para la Educación Obligatoria (2017). Por delante las carretas y, en la parte posterior, los caballos. ¿Por qué no se definió, primero, el proyecto educativo, el rumbo, y después, las modificaciones legales?

Se podría afirmar, a partir de diversos estudios sociológicos, pedagógicos y de psicología social, tal como lo subrayo en varios de los textos de este volumen, que existen tres fallas de origen en el lanzamiento y aplicación de las Reformas Educativas experimentadas en distintas partes del mundo: 1ª. Se producen primero los cambios legislativos o normativos; 2ª. Se diseñan e implantan, después, los modelos educativos o pedagógicos; y 3ª. El cambio se diseña en forma vertical y desde arriba, y no en forma horizontal ni desde abajo. Ahí tenemos los ingredientes perfectos para cocinar un nutritivo “fracaso” de políticas públicas educativas. Lo cual da cuenta de que la no viabilidad de la Reforma Educativa actual, no fue sólo un asunto de contenidos y métodos, sino también una cuestión de falta de planificación y de estrategia.

Como parte de un ejercicio crítico en torno a ese fenómeno político, social y educativo, la llamada “Reforma Educativa”, este libro reúne 86 artículos de opinión y divulgación publicados entre los años 2016 y 2018 en “SDP Noticias.com”, diario mexicano de circulación electrónica o vía Internet, donde muestro, con razonamientos elaborados sobre información oficial, fuentes especializadas y con reflexiones argumentadas, cómo la Reforma Educativa 2012-2018 en nuestro país, ha transitado del diseño a la operación en medio de grandes inconsistencias, obstáculos, e incluso con el riesgo, -de continuar en los mismos términos-, de ir de frente y sin frenos hacia el “precipicio” o a la negación de los propósitos implícitos que busca toda Reforma, que es el cambio, en términos de aprendizajes, en beneficio de la sociedad.

En la primera parte del libro, abordo y analizo las primeras acciones del gobierno federal de Enrique Peña Nieto en materia de políticas educativas; es un conjunto de artículos que he denominado: “Los tropiezos de la Reforma Educativa”. En una segunda parte, integro aquellos textos de opinión en los cuales esbozo algunas “Críticas generales y específicas sobre la concepción de Reforma Educativa” que promovió e impuso el gobierno mexicano, según como fue diseñada y puesta en operación durante los últimos 5 años (2013-2017). Posteriormente, en un tercer grupo de colaboraciones, todas ellas publicadas gentilmente por el mismo medio de comunicación, pongo a consideración del lector una mirada prospectiva sobre los proyectos que hacen falta o le han fallado al país en el ámbito de la educación pública, así como algunas propuestas específicas para avanzar en medio de las contradicciones y las crisis que ha suscitado esta singular Reforma. He decidido subtitular a esta parte: “Las grietas y los alcances de la Reforma”. En la cuarta y última parte, examino algunas propuestas, ideas prácticas y alternativas a las políticas públicas oficiales, y converso acerca de los futuros y horizontes de la Reforma en cuestión, misma que denomino: “La Reforma que queremos”.

El interés principal de estos comentarios breves, reunidos a veces de manera asincrónica y otras en forma sucesiva en este libro, sobre el curso de la Reforma Educativa mexicana durante el periodo 2012-2018, es propiciar el debate de ideas, profundizar la discusión con argumentos informados en torno a las limitaciones y alcances del proyecto gubernamental, ejercer el derecho de crítica, así como ensayar la libre interpretación de los hechos, a través del pensamiento analítico y desde la oposición, con un enfoque fenomenológico, y poner sobre la mesa algunas propuestas o razonamientos presuntamente viables acerca de cómo se ha gestionado el cambio educativo en México. Esto, a veces, a partir de insostenibles políticas públicas en ese ámbito de la vida nacional, por parte de los responsables o funcionarios públicos. Frente a ello, este conjunto de observaciones tiene la finalidad de avanzar en el plano analítico y de divulgación, no obstante, los diversos obstáculos que se presentan o advierten para externar puntos de vista divergentes, y contribuir desde este foro a la transformación democrática de la educación pública en México.

Fuente: https://www.sdpnoticias.com/nacional/2018/06/08/la-reforma-educativa-que-queremos

 

Comparte este contenido:

A mentir, tijera en mano

América del Sur/05.06.18/Por: Mario Wainfeld/ Fuente: www.pagina12.com.ar.

Un discurso sólo para rotarios. Las universidades del conurbano, realidad pujante negada por Vidal. Estar cerca, necesario para ejercer derechos. Historias de vida, inclusión y ascenso social. Reformas educativas: todas toman tiempo. Reproches por doquier, hasta de radicales con memoria. Reparto desigual de los sacrificios

“Cualquier transeúnte curioso tiene perfecto derecho a entrar a una facultad (de la Universidad pública)y escuchar una clase que le interese, sin necesidad de estar ‘inscripto’ en carrera o materia alguna. Desde ya, casi nadie lo hace. Muchos no lo harán porque en efecto no les interesa, y no tienen por qué hacerlo. Pero otros muchos no lo saben, o aun sabiéndolo no se animan. La sociedad de clases levanta barreras culturales invisibles pero infranqueables ante la conciencia de aquellos/as que presuponen que no ‘pertenecen’ a esos espacios”.

Eduardo Grüner. “El lugar de la universidad en la calle”, publicada en PáginaI12.

Distendida, como quien juega en su cancha sin tribuna visitante, la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal sinceró su cosmovisión. “¿Es de equidad que desde hace años hayamos poblado la provincia de Buenos Aires de universidades públicas cuando todos los que estamos acá sabemos que nadie que nace en la pobreza en la Argentina hoy llega a la universidad?”.

Las imágenes, profusamente divulgadas, muestran que los socios del Rotary Club que la entornaban (varones, todos los que se ven) no la miraban, ni parecían destinarle mucha atención. Por suerte o por decoro, no aplaudieron.

Las respuestas atosigaron las redes sociales, si tal cosa fuera posible. Chicas y chicos del Conurbano, sin reconocerse en el rótulo de pobres, relataron historias de vida. Su núcleo, integrar la primera generación en su familia que accedió a la educación terciaria, que se recibió o la está remando. Nobles semblanzas de empeños familiares compartidos ubicados enlas antípodas del imaginario macrista. Gente común que “sabe” como piensa y qué derechos reivindican.Pertenecen a “otras” clases sociales, ausentes en los ágapes VIP.

Las llamadas Universidades del Conurbano comenzaron su saga durante las presidencias de Carlos Menem, las hay con más de un cuarto de siglo recorrido, otras con pocos años. Su número creció desde 2003; se crearon diez.

La cercanía territorial cumple varias funciones, entre ellas atenuar la macrocefalia de la Universidad de Buenos Aires. La vecindad posibilita el acceso, una obviedad para cualquiera que no sea otario… ni, tal vez, rotario.

Viajar desde los suburbios bonaerenses a las dispersas facultades porteñas o de La Plata insume horas.El costo del transporte es un escollo para potenciales educandos peroel mayor gravamen no es la plata sino el tiempo. La mayoría de los estudiantes provenientes de familias de bajos recursos trabajan, ahorrar tiempo multiplica las perspectivas de laburar, ayudando a madres o grupos familiares a parar la olla.

La vecindad es asimismo emocional. En la Universidad cercana, se convive con las amistades del barrio, con los pares, con pibas o pibes que van a los mismos boliches.

Llegar con un solo viaje en bondi o a pata o en bici, cumple un puñado de micro ventajas en la vida cotidiana.Quienes son mamás o papás solo pueden hacer el esfuerzo de cursar en una universidad cercana.

Un relevamiento del Observatorio Educativo de la Universidad Pedagógica Nacional –publicado anteayer en la nota de tapa de este diario– prueba que la representación de los dos quintiles más bajos por ingresos en la Universidad creció mucho más que el promedio entre 2008 y 2015. “Nacieron en la pobreza” según el tosco decir de Vidal, llegaron a la Universidad. “Nadie” mintió la gobernadora; son más de 200.000 (ver recuadro aparte).

La condición universitaria ayuda a conseguir conchabo durante la carrera. Una mínima defensa contra la prepotencia del “mercado”, objetivo dilecto de Cambiemos.

– – –

Inserciones, perspectivas, dilemas: La inserción social y cultural acompañan la entrada a la Universidad. Se suele estudiar valiéndose defotocopias porque los libros son costosos, pero se dispone de bibliotecas a mano, que no las hay en muchos hogares.

La flexibilización laboral, un objetivo anhelado por el presidente Mauricio Macri, es dura de lograr por vía legal porque cuesta reformar a la baja las normas vigentes o los convenios colectivos.

La pérdida de derechos, como en los ‘90, comienza de facto como consecuencia de la baja de calidad del empleo, del aumento de la informalidad. El clima cultural ensoberbece a las patronales, que saben que el Gobierno las banca y que los ministerios de Trabajo no hacen honor a su nombre.

Cualquier supermercado que busca un repositor al que ni siquiera le reconocerá relación de dependencia exige un “CV” en la búsqueda. Las mujeres jóvenes casadas caen bajo sospecha: en una de esas se creen con derecho a tener hijos. El domicilio de los postulantes agrega un factor de rechazo: determinados barrios populares o villas garantizan el bochazo.

Consignar que se está cursando en una Universidad mitiga la flexibilización de facto. Parece mentira, es realidad cotidiana.

– – –

La musa involuntaria: De modo tan involuntario como eficaz, Vidal actuó como musa inspiradora para espontáneas historias de vida, que testimonian novedades en la vida de personas jóvenes (ver asimismo páginas 16 y 17 de esta edición y video de la Universidad de Florencio Varela accesible en www.pagina12.com.ar). Los impulsa el deseo aspiracional, el ansia de progresar, de no resignarse.

Un profesor de la Universidad de Hurlingham pregunta a los cursantes porqué ingresaron. Hablan de sueños, de anhelos postergados. De nuevo, en algo concuerdan todos; “porque está aquí”.

El aprendizaje, la capacitación y la salida laboral (ardua en un contexto que no la garantiza para nada) se combinan con el acceso a bienes o experiencias habituales hasta para personas de clase media. Subirse a un avión por primera vez, viajar para un postgrado o un curso de especialización, sacar pasaporte.

Las casas de estudio del Conurbano albergan al 14 por ciento de los universitarios argentinos, pero captan solo el 7 por ciento de las respectivas partidas del Presupuesto Nacional.

La dispar distribución de las competencias, el “capital cultural” viene desde la cuna, detalle que ignoran los apologistas de la educación privada. Un hogar con escasos recursos está imposibilitado de contratar un profe particular para dar clases de apoyo a un joven que se rezaga eventualmente.

Se cuestiona que son demasiados los estudiantes que no llegan a graduarse. Es un aspecto serio, que debe atenderse y mejorarse en establecimientos que comienzan el recorrido histórico. La solución, siempre transitoria y parcial, es mejorar la dotación de recursos materiales y humanos, perfeccionar a docentes y alumnos. Incluso-y por qué no-hacer introspección sobre los métodos y la calidad educativa. Jamás tronchar las trayectorias de decenas de miles de jóvenes y centenares de profesores.

La diatriba de Vidal apesta a anuncio anticipado de recortes del Estado manos de tijera, con cruel criterio de clase. Todos lo sabemos o nos damos cuenta, gobernadora.

Un vistazo a la historia: Alternar en espacios de saber abre la mente, pasar horas en un campus mejora las perspectivas, subjetivas y objetivas.

La educación como resorte de la movilidad social se cuenta entre las clásicas tradiciones argentinas.Embola un poco tener que subrayarlo cuando se cumplen cien años de la Reforma Universitaria.

La conquista de la educación universal no se concretó, de volea y por encanto, con la mera sanción de la notable ley 1420, en 1884. Los académicos Emilio Tenti Fanfani y Alejandro Grimson enseñan en el libro “Mitomanías de la educación argentina” que once años después de su promulgación la mitad de la población argentina era analfabeta. Cumplidos treinta años, el porcentaje se había reducido al 33 por ciento.

La conquista de la gratuidad comenzó con la escuela primaria primero.El final del arancelamiento en las Universidades públicas arribó con el primer peronismo.

Los precedentes ilustran: las transformaciones se van construyendo de modo sucesivo, en distintas promociones y hasta generaciones.

Un poco de memoria: Se agolparon reacciones de la comunidad educativa, hubo para regalar. Vaya un resaltado para aquellos dirigentes de la agrupación Franja Morada que, distanciándose del alineamiento genuflexo de casi toda la dirigencia radical, fueron consecuentes con su mejor historia.

Hugo Juri –rector de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)– refutó de plano a la gobernadora. Según informam.cba24n.com.ar expresó: “se vuelve a discutir equidad en términos totalmente equivocados como en la década del ‘90. La equidad se obtiene llevando la mejor educación a los lugares donde se encuentran los más necesitados. Capital Federal tiene muy buenas universidades públicas y privadas, pero en los sectores de mayor concentración de pobreza la educación privada no está presente y es donde está la universidad pública.(…)La universidad pública contagia cultura como está demostrado con múltiples ejemplos, entre los cuales mencionó a la Universidad Arturo Jauretche, localizada en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires En sectores vulnerables del Gran Buenos Aires está una excelente universidad cuyos estudiantes son primera generación de su familia y son hijos de padres que no han terminado el colegio secundario. (…) Cuando se habla de equidad y justicia significa que una persona que habita lejos de las universidades o en lugares pobres debe tener posibilidades de acceder a la universidad. Hay que romper los preconceptos como lo han hecho países como Vietnam, que superan a países como los nuestros cuando hay una voluntad nacional sin errores conceptuales”.

Radical también, Juri fue ministro de Educación durante la presidencia de Fernando de la Rúa. Renunció a su cargo en disconformidad cuando Ricardo López Murphy, designado ministro de Economía, propuso un recorte formidable del “gasto público” que golpeaba especialmente a la Universidad. El gesto o, mejor dicho, los dos gestos merecen recordarse. La gran masa boina blanca reincide en la línea De la Rúa-López Murphy: antes como cabeza de la Alianza gobernante, ahora como furgón de cola del macrismo. Vale la pena saludar las excepciones.

Contornos y contextos: Tal vez sea impresión del cronista, pero, justo cuando se reclaman sacrificios a la población, se multiplican ágapes fastuosos para dirigentes políticos y empresarios. En ese contorno Vidal emitió su proclama, coherente con dos años y medio de gestión cambiemita. La educación pública es una de sus bestias negras, aunque de eso no debe hablarse.

Macri y Vidal bregan por bajarles el copete y el valor adquisitivo de los salarios a los docentes. El Programa Conectar igualdad, que entregó más de cinco millones de computadoras a estudiantes secundarios, en comodato primero y en propiedad al egresar, fue discontinuado, mediante la clásica alquimia oficial. Falta de entrega de las compus, asfixia presupuestaria en paralelo.

Los “gastos” en infraestructura escolar se encogieron dramáticamente.

Se interrumpió la entrega de libros gratis.

Las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional no podrán apuntar a esos “costos” porque el macrismo se anticipó a sus mandatos.

La jerga oficialista rehúye las palabras “derechos”, “conquistas” o “desigualdad” con toda coherencia. Una derecha ramplona domina la política mundial, construye muros y cárceles para los inmigrantes, segrega, discrimina, apuesta a cristalizar las desigualdades. Las vallas, techos o fronteras invisibles pero infranqueables pueden ser más eficaces que los ladrillos o los alambrados con púas.

La ampliación del sistema educativo, un afán constante de las fuerzas nacional-populares constituye un avance, una tentativa para acortar brechas.

La invectiva de Vidal enfila en sentido contrario.Su aseveración “todos sabemos” rezuma ideología. Esa primera del plural es bien singular: expresa a minorías, elites, una clase arrogante que cada día se saca un poco más de maquillaje.

 

Fuente del artículo: https://www.pagina12.com.ar/119034-a-mentir-tijera-en-mano

Comparte este contenido:

Cuatro estampas de la política en la educación

América del Norte/México/05.06.2018/Por: Carlos Ornelas/ Fuente: www.excelsior.com.mx.

Tal vez hoy como nunca en México pudiera pulsarse la máxima de Antonio Gramsci de que “la política es educación y la educación es política”, aunque no en el sentido elevado en que el filósofo italiano lo planteó. Sirvan de ejemplo cuatro viñetas de la política educativa que se concatenan de manera compleja.

CPrimera, defensa. El secretario de Educación Pública, Otto Granados Roldán, en una conferencia de prensa en Los Pinos, hizo un alegato en favor de la Reforma Educativa que emprendió este gobierno. Si bien las cifras que proporcionó muestran avances y pueden cotejarse, su discurso tiende a salvaguardar la política educativa del presidente Peña Nieto. Expresó que “el país ha hecho un gran esfuerzo por el diseño e instrumentación de la reforma. Es una inversión muy relevante, no sólo en términos presupuestales, sino políticos, institucionales, humanos, que sería una tragedia que se viera interrumpida”. La intención del gobierno —intuyo— es consolidar la reforma lo más que pueda; blindar todo lo hecho es imposible.

Segunda, embate. En su gira por Michoacán, Andrés Manuel López Obradorratificó su intención de cancelar la Reforma Educativa. Excélsior reportó que, en Puruándiro, AMLO amonestó a los docentes y los conminó a despabilarse: “Ya es hora de que los maestros despierten, porque en la pasada elección, no es un reproche, es un señalamiento fraterno, la pasada elección todavía votaron por los partidos que votaron la mal llamada Reforma Educativa, ahí estuvieron votando por el PRI, por el PAN, por el PRD”. Además, les dijo: “Ya es tiempo de que los maestros tengan conciencia y que se vote por una transformación”.

Algo no me cuadra con el mensaje de AMLO. Él fue el candidato del PRD y ciertos de sus fieles de hoy fueron afanosos promotores de la Reforma Educativa.

Tercera, perorata. El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, se reunió el jueves con la comisión política de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación con el fin de resolver sus demandas. Los líderes de la S-22 mostraron su “buena voluntad” al abrir un carril de la carretera Oaxaca-Puerto Ángel. Pero mantenían bloqueado el aeropuerto, el plantón en el zócalo, la toma de la terminal de ADO y las casetas de la autopista Oaxaca-México. Además, según sus voceros, estaban en paro y diez mil de sus militantes estarán en la Ciudad de México el 4 de junio para forzar a la Secretaría de Gobernación a abrir una mesa nacional de negociación con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.

Cuarta, foros. El Consejo Mexicano de Investigación Educativa, que agrupa a la elite de investigadores de la educación del país, organiza foros en varios temas que arrojen elementos de diagnóstico y propuestas para una mejor política educativa en favor de México. Quieren hacer llegar sus propuestas a los candidatos a la Presidencia de la República y dialogar con ellos o sus representantes. Aspiran a elevar el nivel de las campañas electorales.

Política: La SEP quiere apuntalar sus logros; AMLO, echarlos para atrás; la S-22 causa desmanes —aunque el gobierno local diga que nada más diez por ciento de las escuelas está en huelga— y los investigadores piden racionalidad.

Esas cuatro vías —razonamiento, presión, ataque y amparo— no corren en líneas paralelas, se entrecruzan. La política, coligo, a veces deseduca. Por más que los investigadores quieran discursos razonables y profundos, las campañas son para conseguir votos; la hondura conceptual no los consigue. La movilización y el chantaje que practica la CNTE le producen frutos, aunque los docentes abandonen las escuelas. Si los maestros no tienen conciencia, ¿con qué convicción irán a votar? Y sí, como dijo el secretario, sería una tragedia cancelar la reforma.

Fuente del artículo: http://www.excelsior.com.mx/opinion/opinion-del-experto-nacional/cuatro-estampas-de-la-politica-en-la-educacion/1242793

Comparte este contenido:

Los maestros y las elecciones

Luis Hernández Navarro

n la Arena México, la capitalde la lucha libre azteca, se libró el pasado sábado 26 de mayo un sensacional combate por el voto magisterial. Enfundado en el traje de técnico, el abanderado de la coalición Todos por México, José Antonio Meade, preguntó a los 15 mil maestros presentes en el espectáculo: ¿Dónde están los que no le tienen miedo a los rudos que tenemos por delante? ¿Dónde están los técnicos que van a salir a ganar?

Seguramente el aspirante presidencial tuvo que morderse la lengua. Sus anfitriones no son conocidos en el mundo electoral por la limpieza con la que aplican a sus rivales la quebradora, la Wilson o la Nelson. Son famosos por usar máscara debajo de la máscara, por hacer de la democracia un ejercicio de acrobacia y por propinar codazos en los ojos a sus rivales con la complicidad del réferi. Más que fama de técnicos, Juan Díaz de la Torre, el presidente del SNTE que se encumbró en el puesto traicionando a Elba Esther Gordillo, y Luis Castro, el antiguo agente del Cisen en Europa y actual dirigente del Panal, tienen la bien ganada reputación de ser rudos entre los rudos.

Muchos maestros que asistieron a la Arena México fueron obligados a hacerlo. En Puebla, por ejemplo, la instrucción fue: necesitamos que se llenen dos camiones por región para estar llegando a México el sábado. Donde los profesores se negaron a ir, obligaron a quienes sí fueron a llevar a sus familias. El viernes anterior, las clases fueron suspendidas teóricamente para realizar consejos técnicos escolares, pero éstos fueron cancelados en su mayoría

Recordando las viejas glorias gremiales, se lanzó la consigna: El que no apoya a Nueva Alianza no apoya al SNTE. Frente a Meade, Juan Díaz de la Torre puso a su disposición una estructura de 322 mil maestros encargados de llevar votos y cuidar casillas. El corporativismo en su más pura esencia. La demostración de que la afirmación de Aurelio Nuño de que la reforma educativa terminó con la relación clientelar entre el SNTE y el PRI es demagogia.

El acto fue el revire priísta a la concentración magisterial convocada por AMLO en Guelatao, Oaxaca, el pasado 12 de mayo, acto en que el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia dio a conocer sus 10 compromisos para mejorar la educación en México. Entre ellos, la cancelación de la mal llamada reforma educativa, el uso de las facultades del Ejecutivo para detener las afectaciones laborales y administrativas al magisterio nacionaly el respeto a la independencia y autonomía del magisterio.

Participaron unos 4 mil 500 profesores de tres fuerzas político-sindicales y pobladores de la Sierra Juárez. Las Redes Sociales Progresistas (RSP), representantes de 20 estados del Comité Ejecutivo Nacional Democrático del SNTE y maestros de la sección 22 de Oaxaca, que asistieron a título individual o de su corriente.

En esta ocasión, a diferencia de lo sucedido el 10 de febrero en Zacatecas, López Obrador no firmó acuerdo alguno. Incluso, cuando un grupo de maestros acercó una mesita para subirla al estrado con el objetivo de que el candidato signara el documento, no pudo hacerlo. En lugar de eso, AMLO se tomó fotos, abrazó niños, puso una ofrenda floral a Benito Juárez y firmó el libro de visitantes distinguidos diciendo: La próxima vez lo haré como presidente.

En el mitin, además de los líderes partidarios de la coalición estuvo el controvertido futuro secretario de Educación Esteban Moctezuma (repudiado por la CNTE) y dos ex dirigentes de la sección 22 candidatos a diputados por Morena, que están impugnados por otras corrientes magisteriales locales: Azael Santiago Chepi e Irán Santiago Manuel.

La ausencia de la coordinadora en el acto (ese mismo día a esa misma hora la sección 22 sesionó en la ciudad de Oaxaca) no fue casualidad. Le resulta indigerible la alianza de AMLO con Elba Esther Gordillo, por medio de las RSP encabezadas por el ex secretario general del SNTE Rafael Ochoa, hoy candidato a senador de Juntos Haremos Historia, y de los movimientos magisteriales de base, promovidos por Tomás Vázquez Vigil, mentor de Juan Díaz de la Torre en Jalisco.

Esa alianza ha sido duramente descalificada por la CNTE. El 14 de febrero, la explicó como parte de un pleito entre las mafias del sindicato por ver quién conduce el proceso electoral entre los profesores. Los charros y Obrador –dijeron– van por el voto del magisterio. A Díaz de la Torre, o en este caso al PRI, le llegarán los votos corporativos. A Obrador los votos contra la reforma educativa.

Pero la decisión de no pactar con AMLO es parte, también, de consideraciones políticas e ideológicas. La coordinadora sostiene que en lugar de abrogar la reforma educativa, López Obrador plantea transferir al Congreso la decisión de modificar una de las leyes secundarias.

En la declaración política de su cuarto congreso nacional extraordinario, la CNTE condena y repudia a los partidos políticos que aprobaron las reformas estructurales y que firmaron el Pacto por México. Ratifica su independencia ideológica, política y económica de todos los partidos que hoy participan en la contienda electoral, del gobierno y del charrismo sindical. Y reconoce la validez de todas las formas de lucha, siempre y cuando eleven la conciencia de clase, respetando la libre militancia de sus integrantes.

En su manifiesto a la nación del 9 de abril, advierte que en la actual contienda por la Presidencia de la República no existe el proyecto de izquierda; no hay una propuesta de nueva nación; lo que hay es más de lo mismo. Hay alianzas de candidatos con empresarios y delincuentes; una migración de políticos de un partido a otro sin respetar sus propias características ideológicas.

Y, para que no quede duda de que su movimiento camina por un rumbo distinto a la lógica electoral, acordó estallar este 4 de junio un paro nacional indefinido, arribar a Ciudad de México en caravanas motorizadas y exigir al gobierno federal la instalación de una mesa nacional de negociación para reinstalar a los maestros cesados y derogar de la reforma educativa.

Fuente del Artículo:

https://www.jornada.com.mx/2018/05/29/opinion/017a2pol

Comparte este contenido:

Michael Apple: «Chile ha sido un laboratorio de malas políticas educacionales

Es uno de los principales exponentes de la pedagogía crítica y respalda la experiencia de Porto Alegre, donde desde 1988 en varias escuelas públicas la comunidad escolar decide cómo invertir su dinero y qué enseñar en el currículo. «Sin duda mejora la educación», asegura. Respecto de las políticas que persiguen el lucro, «muchas de estas políticas son copias de políticas fracasadas del norte. En Estados Unidos, la búsqueda del lucro nos ha llevado a Donald Trump», lamenta.

Una visita a Chile realizó este mes el académico estadounidense Michael Apple (Paterson, 1942), en el marco de la presentación de su último libro, ¿Puede la educación cambiar la sociedad? (Ediciones LOM).

«Venir acá es venir a aprender y a mostrar solidaridad», cuenta, junto con manifestar su alegría por la aceptación de sus obras en nuestro país, que visitó por primera vez en 1996.

Apple fue un gran amigo de Paulo Freire, el gran pedagogo brasileño obsesionado por iluminar con la educación a los sectores populares de nuestra sociedad, una preocupación que el estadounidense comparte.

«Chile me enseña lo resiliente que puede ser la gente y cómo luchan. Si puedo ayudar, lo haré», expresa.

Un sistema segregacionista

Apple, académico de la Universidad de Wisconsin y uno de los principales representantes de la pedagogía crítica, está convencido de que la educación puede transformar la sociedad y de eso habla en su último libro. El tema es qué tipo de educación para qué tipo de sociedad.

«La evidencia muestra que las instituciones de lucro llevan a más desigualdad, destruyen el futuro de estudiantes de la clase trabajadora, donde las universidades se chupan el dinero de los alumnos más pobres. Muchas de estas políticas son copias de políticas fracasadas del norte. En Estados Unidos, la búsqueda del lucro nos ha llevado a Donald Trump», lamenta.

«Chile ha sido un laboratorio de, en mi opinión, malas políticas educacionales», afirma en alusión a las políticas neoliberales como losvouchers y la «libertad de enseñanza» de inspiración estadounidense, que critica por su sesgo segregacionista y por estar centradas en el mercado y los beneficios económicos.

«La evidencia muestra que las instituciones de lucro llevan a más desigualdad, destruyen el futuro de estudiantes de la clase trabajadora, donde las universidades se chupan el dinero de los alumnos más pobres. Muchas de estas políticas son copias de políticas fracasadas del norte. En Estados Unidos, la búsqueda del lucro nos ha llevado a Donald Trump», lamenta.

«Es una tragedia y el actual gobierno comete algunos graves errores al respecto», señala, con miras a la reciente decisión del Tribunal Constitucional de avalar a las entidades con fines de lucro.

¿Funcionan estas políticas?

¿Funcionan estas políticas neoliberales? ¿Qué tipo de persona crean? Es una de las razones por las cuales se ha dedicado a estudiar el caso chileno.

«La educación es fundamental para la transformación social», algo que incluso la derecha ha comprendido, comenta. Y en Chile, por cierto, han tenido resultados: el académico la vincula directamente a una democracia de «baja intensidad»

«Es la democracia de los mercados, donde eres conocido como un consumidor». Allí, la libertad de elegir «beneficia a las personas con dinero», porque el mercado privilegia a aquellos con capital económico o cultural, este último entendido como aquel necesario para «navegar» en el sistema.

En su país, de hecho, este sistema ha llevado a más injusticia social, y pone un ejemplo: el pago mayor que reciben aquellos maestros cuyos alumnos tienen mejores resultados en las pruebas estandarizadas. El resultado es que los chicos más pobres y de menor rendimiento reciben menos atención, y tienen más posibilidad de quedar fuera del sistema.

Un sistema donde todo se transforma en «commodities», incluidas las escuelas, y donde los adultos creen que las mejores son aquellas de mejores resultados en las pruebas estandarizadas.

«Allí los alumnos aprenden a odiar la escuela, porque todo se basa en la memorización de pruebas», apunta.

Todos se transforman: padres y estudiantes. Allí el aprendizaje es que «la justicia social es menos importante y sí lo es la ‘libertad de elegir'».

«En Estados Unidos, tenemos como consecuencia una sociedad más polarizada, racial y socialmente», advierte.

Las consecuencias

Es en este contexto que, a su juicio, en Chile ocurren eventos como la eliminación de la filosofía del currículo.

«Luego será el turno de arte, literatura, teatro, música, cosas que no pueden medirse fácilmente ni rentabilizarse económicamente», comenta.

Otra consecuencia es una mayor inversión en lo que son las «ciencias duras» o lo que en Estados Unidos se conoce como STEM (acrónimo de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Esto ya ocurre en Chile, donde por cada peso que se invierte en el Fondart, tres van al Fondecyt.

«¿Qué es bueno? ¿Qué es malo? ¿Qué conocimiento es importante, cuál no? ¿Qué es calidad y qué no?», todas estas preguntas se ven alteradas, según Apple, en la educación mercantilizada.

«El tema es qué podemos hacer nosotros. Y para mí, ‘nosotros’ incluye a los migrantes, las mujeres, los negros, los jóvenes, gays y transgéneros», afirma.

El modelo participativo

El académico señala que tiene «gran fe en el pueblo chileno», a pesar de esta corriente predominante. «Veo cómo buscan retomar el control de sus vidas y la democracia tras una dictadura asesina que fue apoyada por Estados Unidos, mi país», dice con pesar.

El académico insiste en que, aunque la educación neoliberal es mayoritaria, también hay una gran tradición de resistencia. «El neoliberalismo no duerme; nosotros tampoco debemos hacerlo», sostiene.

«No todas las políticas son neoliberales, aunque sean dominantes. Lo concreto es que el neoliberalismo es un proyecto fracasado a nivel educacional, incluso el Banco Mundial reconoce eso», puntualiza.

El estadounidense contrapone al modelo norteamericano la experiencia de la «escuela participativa» de Brasil, específicamente de Porto Alegre. Allí, en las escuelas más pobres de las favelas, desde 1988 rige un modelo llamado «orçamento participativo».

La comunidad en su conjunto decide en qué invertir su dinero y otros temas, como la elección del currículo. «Los pobres sienten que tienen respeto y poder, y que por primera vez pueden elegir, que pueden participar plenamente y realizarse», cuenta.

«Allí el Estado es un alumno, no solo un docente», grafica.

Los resultados están a la vista: una caída de la deserción escolar y la asistencia de muchos de sus estudiantes a la universidad, por primera vez en sus familias, y un acceso a mejores trabajos. Específicamente, en la escuela primaria la deserción ha pasado de entre 50% y 90% a 20%.

«Antes los alumnos odiaban la escuela, porque era represiva y expulsadora. El currículo era aburrido y los niños no veían futuro. Ahora sí lo ven. Respetan y confían en la escuela. Se dan cuenta de que pueden ser intelectuales, aunque no sea la palabra que usan, que pueden ser creativos. Y ven a los profesores como alguien que puede enseñarles, no como un enemigo. Todavía hay niños que se enganchan con la violencia, pero mucho menos que antes. También ha mejorado la satisfacción de los profesores con sus trabajos», relata.

Tal es el éxito, que ni siquiera el cambio de gobierno en ese Estado brasileño, tras largos años de mandato del Partido de los Trabajadores (PT), que introdujo este sistema, ha llevado a que sea removido. No solo eso: el modelo ha sido exportado a algunas escuelas de Estados Unidos, países escandinavos como Finlandia y Noruega, Reino Unido, Francia, Corea del Sur, Sudáfrica e India.

«Porto Alegre nos ha dado valiosas lecciones», concluye Apple. «¿Puede ser aplicado en otros países? No estoy seguro. En Brasil funcionó porque no tocó a las escuelas de los niños más ricos. Creo que es un modelo que debe adaptarse según cada nación. Chile aprendió del desastre de importar desde la Escuela de Chicago, así que confío en que no importarán algo sin más desde Brasil. Pero en general es un modelo que apoyo. Sin duda mejora la educación, tenemos mucha evidencia al respecto. Ahora hay que defender este modelo. También transforma la sociedad», recalca

Fuente: http://www.elmostrador.cl/cultura/2018/04/17/eminencia-estadounidense-en-educacion-chile-ha-sido-un-laboratorio-de-malas-politicas-educacionales/

Comparte este contenido:

Libro: Pedagogía de la igualdad

Pedagogía de la igualdad
Ensayos contra la educación excluyente

Pablo Gentili. [Autor]

…………………………………………………………………………
CLACSO Coediciones.
ISBN 978-987-629-172-9
CLACSO. Siglo XXI Editores.
Buenos Aires.
Junio de 2011

Cuando se habla de la educación en América Latina, predomina una actitud escandalizada ante la situación de los docentes y de la infraestructura escolar o ante los pobres resultados en las pruebas anuales de rendimiento. Queriéndose o no, esta actitud le atribuye a la educación una misión redentora: supone que la raíz de los males sociales reside en la crisis educativa, y que revertir esa crisis permitiría arribar a una sociedad equitativa. En los ensayos que componen este libro, Pablo Gentili acumula razones para cuestionar esa esperanza simplista, con la convicción de que la educación no puede cambiar el mundo si en el mundo no cambian otras cosas: entre ellas, el modelo de producción y acumulación de la riqueza, las condiciones de acceso al mercado laboral, las formas de exclusión ligadas al género, la etnia o el origen social. A partir de estudios recientes, Gentili analiza hasta qué punto el derecho universal a la eduación se verifica en América Latina. Su propósito no es, sin embargo, hacer un diagnóstico de las carencias, sino proponer una caja de herramientas para el pensamiento y la acción. En este marco, explica la incidencia de las reformas neoliberales, el panorama de la enseñanza media y superior, la actualidad de los postulados reformistas de 1918 y la necesidad de profundizar los avances insoslayables que tuvieron lugar en los últimos años, a fin de garantizar no sólo el ingreso al sistema sino, sobre todo, una educación de calidad. Genuinamente comprometido con la realidad de la región, el autor se aboca a una rigurosa crítica de las perspectivas economicistas y tecnocráticas con que suelen abordarse los procesos de reforma educativa, y procura establecer qué valores y sentidos deben fundar hoy una eduación liberadora. Pedagogía de la igualdad es, así, un aporte indispensable para repensar el papel de la educación en la construcción de sociedades más justas y democrática
Para descargar, haga clic aquí:
Descargar .pdf
Fuente de la Reseña del Libro:
https://www.clacso.org.ar/libreria-latinoamericana/buscar_libro_detalle.php?id_libro=598&campo=autor&texto=gentili
Comparte este contenido:

Paraguay: La nueva escuela: formación sin exámenes, sin tabúes y con debates

Paraguay/05 de Mayo de 2018/Hoy

Mientras la reforma educativa en Paraguay sigue tropezando con cuestiones ideológicas y religiosas, se erige una nueva escuela. Una modalidad busca sacar lo mejor de chicos y jóvenes y priorizar las relaciones personales para darles armas que les sean útiles para el mañana.

“Los padres quieren darle a los chicos lo que no tuvieron ellos pero en realidad lo que tienen que hacer es pensar en el futuro”. Esta reflexión fue una de las tantas que el director del espacio comunitario de aprendizaje del Centro para el Desarrollo de Inteligencia Luis Fernando Ramírez dijo al equipo de HOY Digital que fue a recorrer la sede.

La nueva visión pedagógica del siglo XXI promueve el aprendizaje de los alumnos en tres corrientes pedagógicas que son: las inteligencias múltiples, el desarrollo del pensamiento y el desarrollo de las emociones.

En la nueva escuela no existen aulas, hay espacios de aprendizaje que son ocupados por los alumnos de acuerdo a la necesidad que tienen. En todos ellos se desarrolla el aprendizaje colaborativo. Todo sin dejar de lado las responsabilidades ya que los estudiantes tienen un tiempo determinado para entregar su tareas.

La modalidad educativa rompe con el paradigma de la educación actual y este podría ser un factor de retroceso para padres tradicionalistas. Ramírez dijo al respecto que el trabajo más importante es el que involucra a los padres. Dijo que ellos van hasta el centro educativo a dar clases, a informarse y tienen una participación activa para que sepan de qué se trata y qué están aprendiendo sus hijos.

La directora académica Patricia Talavera, expresó que la nueva escuela tiene espacios de conversaciones donde se discuten, se comparten sobre distintos temas y también cuenta con sectores de relajación.

Allí se reduce a un mínimo el trabajo individual y se deja de lado el aprendizaje de memoria para dar paso a lo grupal y a las lecciones vivenciales. Tampoco hay exámenes, los chicos debaten sobre una teoría -por ejemplo, científica-, sus argumentos son evaluados por docentes y por expertos invitados. Los chicos se preparan como si vayan a dar un examen tradicional solo que la evaluación es distinta.

Con respecto a temas considerados tabú por sectores conservadores de la sociedad como las relaciones sexuales y el uso de drogas, Talavera expresó que se trabaja con el autoestima de los chicos para saber qué quieren. “La educación sexual no se da en una clase teórica, se forma al chico desde temprana edad en los fundamentos de su persona”, expresó. El tema drogas no se aborda en las clases de educación sanitaria sino que se conversa sobre cómo se debe enfrentar situaciones relacionadas en la calle, en una fiesta o simplemente entre compañeros.

Antes de empezar la jornada educativa, los chicos realizan actividades físicas durante 45 minutos. En ese lapso de tiempo el cerebro libera serotonina y consigue un máximo nivel de rendimiento para iniciar el proceso de aprendizaje.

Existe un aula dentro de la nueva escuela que tiene sillas que se hamacan. Luis Fernando Ramírez explicó que gracias al movimiento el alumno se concentra y aprende. “Cuando te estás moviendo tu cerebro se tranquiliza. Tenés más oportunidades de aprender. Es la mesa favorita de todos”, sostuvo.

Estos son solo algunos de los aspectos que la nueva escuela ofrece a los alumnos. Lejos de cualquier influencia negativa de las estructuras educativas convencionales y de debates sobre una reforma educativa que no llegan a consenso, hay alumnos que se explotan su parte humana. La idea es demostrar que un joven con desarrollo físico y mental puede ser más útil que una máquina, la cual va a ser su principal competencia, en un futuro cercano.

 Fuente: http://www.hoy.com.py/nacionales/la-nueva-escuela-sin-examenes-sin-tabues-y-con-debates-forman-a-los-alumnos
Comparte este contenido:
Page 16 of 61
1 14 15 16 17 18 61