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TDAH Trainer, una app para tratar el déficit de atención infantil

31 de diciembre de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Andrés Moncada

El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) constituye el problema psiquiátrico más prevalente en la etapa escolar de los últimos años.

El tratamiento farmacológico suscita muchas veces dudas entre los padres, si bien parece que todos los profesionales coinciden en la necesidad de realizar pautas conductuales y terapias de entrenamiento y/o estimulación cognitiva en los niños con TDAH, de manera complementaria al tratamiento farmacológico.

TDAH Trainer

TDAH Trainer es una aplicación terapéutica diseñada para niños TDAH, que pretende ser una herramienta terapéutica complementaria al tratamiento farmacológico y/o psicoterapéutico en niños con TDAH.

La finalidad terapéutica de “TDAH Trainer”, es la de facilitar un entrenamiento cognitivo regular de manera diaria y con un componente lúdico que facilite la adherencia y mejore la motivación en los niños. Un entrenamiento cognitivo regular permitiría restablecer las áreas cognitivas afectadas en estos niños.

Cómo funciona

TDAH Trainer se basa en el método TCT (Tajima Cognitive Training) que es un método desarrollado por el Dr. Tajima que trata de mejorar y potenciar la capacidad cognitiva, a través de ejercicios cognitivos de carácter lúdico.

Este método trata de desarrollar un entrenamiento cognitivo diario, de 10 minutos diarios, centrándose en mejorar las áreas cognitivas, sin ser percibido por parte del usuario como un ejercicio o una terapia, sino más bien como lo contrario.

Los padres pueden seguir el progreso del niño, gracias al registro de usuario que se realiza al inicio de la aplicación. Este registro permite también que se puedan establecer comparaciones con los resultados de otros usuarios, estableciendo percentiles y medias, y permitiendo que en futuras actualizaciones se pueda ajustar el entrenamiento cognitivo de una manera todavía más individualizada y personalizada. Además este registro personalizado fomenta el afán de superación del niño en su rendimiento.

La aplicación permite de esta manera facilitar un entrenamiento cognitivo al niño con TDAH, a la vez que les brinda a los padres y profesionales implicados en la atención del niño, la posibilidad de seguir su progreso.

Las ventajas de una aplicación móvil

Las ventajas de TDAH Trainer frente a otras terapias de entrenamiento cognitivo son:

1) Mejora la motivación, al ser ejercicios que son concebidos por el niño como un videojuego, incrementa el afán de superación, al poder ver sus propios resultados y los de otros usuarios de sus mismas características. Al mejorar la motivación, se mejora la constancia en la realización de los ejercicios.

2) Se posibilita la realización de un entrenamiento cognitivo en cualquier lugar y momento del día.

3) Bajo Coste. Puesto que no existen cuotas mensuales, ni desplazamiento a un centro.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/recursos/herramientas-tic/tdah-trainer-una-app-para-tratar-el-deficit-de-atencion-infantil

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El TDAH existe (y es un trastorno del cerebro)

Por: Redem

El mayor estudio realizado hasta el momento sobre el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad confirma que no se trata de una patología del comportamiento sino de una alteración del cerebro.

El Transtorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es un foco de preocupación y debate en entornos sociales como el científico, el psicológico o el pedagógico. De preocupación por los efectos que tiene en niños, niñas y jóvenes a quienes se le ha diagnosticado. Para las familias, porque afrontan el día a día a su lado. Y, como no, para los docentes que deben encontrar la forma de potenciar su aprendizaje y gestionar su correcta inclusión en el aula. Las personas con este trastorno suelen manifestar síntomas como dificultad para mantener la atención, hiperactividad, desorganización, impulsividad e inestabilidad emocional. Suele asociarse también con un bajo rendimiento académico y con cierta dificultad para establecer relaciones personales.

Pero el TDAH es especialmente motivo de debate entre aquellos que niegan que sea un trastorno y llaman a no etiquetar a los alumnos, y los que defienden científicamente su existencia. Unos llaman a los afectados “alumnos movidos”; otros optan por administrarles cierta medicación para que puedan llevar un día a día más normalizado. Pues bien, una nueva investigación da luz al debate y expone que el cerebro de las personas con TDAH sufre un retraso en el proceso de maduración y alternación en su estructura. Su cerebro es más pequeño y madura menos y más tarde. Son las conclusiones de un estudio del Grupo de Trabajo Enigma TDAH publicado en la revista científica The Lancet y en el que ha participado, entre investigadores de once países distintos, el Vall d’Hebron Barcelona Campus Hospitalario.

El cerebro con TDAH

El estudio ha realizado resonancias magnéticas a más de 1.700 pacientes de entre 4 y 63 años diagnosticados con TDAH y más de 1.500 sin él para analizar las imágenes y buscar diferencias en la estructura del cerebro. Los resultados obtenidos muestran la existencia de estas diferencias en las zonas llamadas hipocampo y putamen. La primera determina la memoria y el sentido de la orientación espacial y, la segunda, el aprendizaje de actividades motoras y los movimientos. Además de las diferencias en estructuras del cerebro, los datos muestran también un retraso en la maduración del mismo. Se confirma, pues, que se trata de un trastorno del cerebro equiparable al que se produce en enfermedades mentales de otras tipologías, y no de un trastorno en el comportamiento.

Los datos obtenidos representan sin duda un paso enorme para comprender mejor el origen del TDAH y seguir avanzando en las investigaciones sobre su origen y causa. Por el momento, afectados, familias y docentes tienen un dato más para la comprensión de este fenómeno tan expandido, especialmente entre la población infantil y juvenil.

5% de la población infantil

El TDAH es uno de los trastornos más importantes en el ámbito de la psiquiatría infantil y juvenil, representando un 50% de los casos tratados en los centros. En España, entre un 2 y un 5% de la población infantil lo padece, según datos de la Federación Española de Asociaciones de Ayuda al Déficit de Atención e Hiperactividad (FEAADAH). La misma entidad denuncia que tiende a ser diagnosticado y tratado de forma insuficiente, pues se trata de una patología crónica que acostumbra a mostrarse antes de los 7 años y en la mayoría de casos continua durante la adolescencia y en la edad adulta.

Los resultados del reciente estudio permitirán, más allá de una mejor comprensión y diagnóstico del TDAH, tratar mejor a las personas afectadas y combatir el estigma social que sufren en tantas ocasiones.

Fuente: http://www.redem.org/el-tdah-existe-y-es-un-trastorno-del-cerebro/

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Nivel superado.

Un proyecto Erasmus + pone al alcance de padres, profesores, educadores y niños con dificultades específicas de aprendizaje una serie de herramientas para que mejoren su rendimiento escolar, videojuego incluido.

Por: Pilar Benito.

Bajo la denominación ´Training of learning disabilities for parents and teachers. New strategies and methologies and ict contribution´ se esconde un proyecto europeo que ofrece una serie de herramientas, muy variadas en su metodología, para mejorar el rendimiento escolar en los estudiantes con dificultades específicas de aprendizaje. En él han participado cinco países, uno de ellos España, que ha estado representada por el Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica (EOEP) de Molina de Segura.

Una plataforma web, un videojuego, cursos para profesores, talleres para familias, una guía metodológica de buenas prácticas con metodologías alternativas de aprendizaje, y un cuestionario sobre necesidades destinado a padres y profesores, son los principales instrumentos que tienen a su disposición quienes intentan que estos alumnos no sufran fracaso escolar ni tampoco vean la escuela como una carrera de obstáculos interminable.

Todos estos materiales son gratuitos, se ofrecen en los cinco idiomas oficiales de los países participantes en el proyecto Erasmus+ (español, polaco, lituano, italiano y turco) y en inglés, y a ellos se puede acceder a través de la web www.helpdeskindl.com.

Son estudiantes que tienen dislexia, disgrafía, disortografía, discalculia, trastornos del aprendizaje no verbal y Déficit de Atención con más o menos Hiperactividad (TDAH). «El alumnado con dificultades específicas de aprendizaje puede tener un rendimiento escolar, si no inferior a la media, al menos por debajo de su verdadero potencial intelectual. La mayoría de ellos, además, suspenden algunas áreas del currículo», explica Juana Guillén Caballero, psicóloga, directora del EOEP y coordinadora del proyecto por parte de España.

Guillén detalla que esta iniciativa surgió al constatarse que en muchos países se han desarrollado leyes educativas que tratan de introducir estrategias que ayuden a este alumnado a alcanzar los objetivos educativos, pero las mismas adolecen de materiales que permitan a docentes y familias lograrlos.

«Cuando entrevistamos a profesores y padres que tienen alumnos o hijos con dificultades específicas de aprendizaje, siempre dicen que necesitan más entrenamiento en cómo ayudarlos, teniendo en cuenta que estos alumnos son inteligentes, pero no aprenden de acuerdo con su verdadero potencial intelectual», añade.

La web está dividida en tres grandes ejes de intervención, con los que se pretende cubrir todos los elementos de lo que se considera ´buenas prácticas´ en dificultades específicas de aprendizaje. Uno son metodologías inclusivas, «la necesidad de dar la vuelta a lo que se hace en el aula y en un centro educativo». Otro, el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) «para trabajar funciones ejecutivas y otras capacidades que se encuentran normalmente alteradas en los niños con dificultades de aprendizaje». Y el tercero, las medidas específicas de acceso al currículo que necesitan estos niños, según la dificultad.

Fuente: http://www.laopiniondemurcia.es/comunidad/2017/11/26/nivel-superado/878177.html

Imagen: http://fotos02.laopiniondemurcia.es/2017/11/25/328×206/externas20171125123455.jpg

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Entrevista a Heike Freire: “Los niños de hoy necesitan adultos que sepan asumir su responsabilidad”

25 septiembre 2017/Fuente: El Diario de la Educación

Heike Freire apuesta por ampliar los espacios educativos, que no sean tan cerrados, para que la infancia pueda buscar sus propios intereses. También reclama que las familias se preocupen menos de la normalidad y mejoren sus relaciones con niñas y niños.

Conferenciante, educadora, psicóloga, filósofa, periodista, formadora de padres y maestros, Heike Freire tiene una gran preocupación por los entornos en los que estamos educando a nuestros niños y niñas. “Apasionada” de la naturaleza, defiende una educación más humana, que salga a la calle y en la que se valoren las cualidades de cada niño como algo único. Autora de un centenar de artículos sobre infancia, naturaleza, arte, aprendizaje, etc, Freire acaba de reeditar y actualizar el segundo libro que escribió, Estate quito y atiende (Heder).

¿Por qué ha decidido reeditar su libro?

Esta nueva edición es mucho más el tipo de libro que yo quería desde el principio. El anterior editor quiso venderlo con la idea del TDAH, que ha levantado mucho interés y controversia, pero yo ni soy una experta en ello ni lo pretendo. No es un libro sobre TDAH. Es un libro sobre la infancia, sobre los trastornos que tienen los niños y las niñas y cómo muchos de ellos, la mayoría, tienen que ver con los entornos en los que están. El libro es una apuesta por una transformación de los entornos para que sean más saludables para la infancia.

¿Hablamos de los entornos físicos o en general?

De todo tipo. Para una criatura, el primer entorno es su padre o su madre. Pero además están los ambientes naturales, familiares, escolares, urbanos.… El ser humano es igual que una planta: se desarrolla en interacción con un entorno que satisface o no sus necesidades. En mis conferencias a veces pongo la imagen de una plántula que acaba de brotar de la semilla. ¿Por qué brota esa plántula? ¿Cómo brota? Por las condiciones de humedad, los nutrientes de la tierra, la luz del sol. Todo ello hace que se desarrolle de una forma u otra. Del TDAH ha habido mucho sobrediagnóstico, forma parte del tipo de enfermedades promovidas por la industria farmaceútica —esto lo dice un informe de la Comunidad Europea—. Que haya generado tanta controversia, que muchas personas nieguen su existencia, no significa que no haya problemas, que los niños y niñas no sufran o tengan dificultades. A mí no me interesa tanto de qué se trata sino cómo lo resolvemos, y desde mi punto de vista tiene que ver con los entornos.

Ha mencionado el TDAH. ¿Qué otros trastornos se dan entre niños y niñas?

¿Son trastornos modernos, que antes no existían?

Sí. Una persona que se dedica a estos temas en Canadá comentaba que hace 30 años la mayor parte de los niños y niñas que tenía en terapia presentaban problemas físicos. Ahora la mayoría tiene trastornos del comportamiento o el aprendizaje. El TDAH, como la depresión en el mundo adulto, son trastornos del estilo de vida, que tienen mucho que ver con la forma en que vivimos. Ahora muchos orientadores que empiezan a desobedecer: se niegan a clasificar a los niños y niñas en cajitas y ven las cosas de otra manera. También hay que dejar de situar el problema en el niño o la niña, aunque esto alivie a muchos padres, madres, maestras y maestros que no quieren sentirse culpables. La mayoría se molesta cuando el psicoterapeuta o el psiquiatra les habla de la forma de criar, de relacionarse y entender a los niños y niñas, de la forma de vida. Liberarnos de la culpa y empezar a asumir nuestras responsabilidades es una forma de madurez. Y lo que necesitan los niños, niñas y jóvenes de hoy mucho más que cualquier otra cosa, es adultos y adultas maduros, que digan sí a la vida, que asuman sus errores y sean capaces de corregirlos.

Usted trabaja con adultos. Es complicado siempre generalizar, pero, ¿es común encontrarse padres que no están preparados para educar a sus hijos?

Vivimos en una sociedad adolescente. Es muy difícil encontrar personas maduras, y este es uno de los mayores problemas que tienen los niños y niñas.

Cambio de tema. Usted aboga por educar en la naturaleza, volver al campo. ¿Qué beneficios aporta?

Muchos. Aporta relajación, un espacio abierto. Las maestras más jóvenes reconocen que una parte del tiempo que pasan en el aula lo dedican a evitar que se escapen los niños. Cuando a un mamífero lo estabulas, lo metes en una jaula, el mero hecho de estar encerrado le genera estrés. La naturaleza suaviza nuestro sistema nervioso. Aporta salud: cuando andamos descalzos nos ajustamos al campo electromagético de la tierra y se armonizan todos los sistemas orgánicos. Aporta aprendizaje, es una gran maestra. Aporta relación, comunidad. Cuando estás en un lugar abierto es más fácil comunicarse con los demás porque estás más relajado. Un árbol te enseña muchas cosas también, hay que saber escuchar. Lo más importante es que te conecta con la vida que hay en ti, con lo que es importante. Te conecta con un deseo de vida, con tu felicidad, con las cosas que te gustan y te hacen sentir bien. A los niños y niñas les ayuda a reconocer mucho mejor cuáles son sus necesidades, si necesitan correr, hablar, llorar… Su estimulación suave y no invasiva es ideal para desarrollar el sistema sensorial del ser humano, que es fundamental, y también el sistema locomotor. En la ciudad todo quiere atrapar tu atención. Un cartel, un sonido. Y ese sonido lo que hace es cerrarte el oído, mientras el canto del pajarito te lo abre. La atención continua, concentrada que demanda el mundo social y construido es agotadora, especialmente para los más pequeños.

¿Cuál es su propuesta concreta de trabajo con la naturaleza?

Darle la vuelta a las escuelas y transformarlas, que partan de la conexión con la naturaleza y lo concreto: puede ser en su entorno inmediato o cambiando su estructura. Una de las cosas que hacemos es acompañar a las escuelas en la transformación de los patios para convertirlos en espacios de vida. Para que los niños puedan tener ese contacto con la naturaleza: que haya bosquecillos, pequeñas granjas, huertos….que sean espacios vivos, que se pueden compartir con la ciudad (en algunos casos pueden ser jardines de fin de semana) y sobre todo que sean espacios donde los niños puedan desarrollarse. A partir de esa conexión con la naturaleza se transforma todo. Se transforma la manera de trabajar, ya no es media hora de recreo. Es todo lo que yo puedo desarrollar y aprender, porque el aprendizaje tiene mucho que ver con un desarrollo saludable. Si no te sientes bien, si tu organismo no se desarrolla plenamente y es difícil que puedas aprender de verdad, tu aprendizaje será más bien superficial.

¿Qué habría que cambiar en los centros educativos?

Hay tres aspectos de la escuela de hoy que es necesario transformar. Uno es acompañar a las personas para que entren en conexión con su vitalidad, sus deseos, esa vida que se mueve dentro de ellos, ese algo especial que pueden aportar al mundo. Cada ser humano es milagroso, único, y eso debería apoyar la educación. Por otro lado, la conexión con el otro. Ahora mismo, al darle tanta importancia al aspecto congnitivo, a la competencia, la evaluación, etc. se pierde la capacidad de entrar en relación, el diálogo, la amistad entre las personas. Las escuelas tendrían que ser lugares donde se hacen los mejores amigos, donde se establecen relaciones profundas de compañerismo. Donde se aprende a tomar decisiones democráticamente, a pactar, a negociar… También deben ser faros hacia fuera, abrirse al entorno, a la comunidad, expandir valores ecológicos y democráticos, de respeto e igualdad entre todos los seres vivos. Esta conexión con uno mismo, con los demás a través del diálogo —la democracia es diálogo— y la relación con la comunidad son tres aspectos básicos en la escuela de hoy en día.

Comentaba antes que hay orientadores que están dejando de etiquetar tanto a los niños, que ahora las escuelas cambian su perspectiva. ¿Cree que hay un pequeño cambio de mentalidad en la escuela?

Hay muchos cambios. Hace 18 años no me hubiera imaginado que pudiera haber escuelas públicas en este país donde los niños y las niñas no se pasan 7 horas atados a una silla sino que pueden circular entre el espacio interior y el exterior, elegir las actividades que quieren desarrollar, juntarse en pequeños grupos o trabajar individualmente, y que están acompañados en todos sus procesos, no solo los cognitivos sino también emocionales, sociales… Y cada vez pasa más y en más escuelas. Los orientadores se están dando cuenta de que los problemas no son de los niños. Yo suelo decir que muchas criaturas no tienen un trastorno, lo que tienen es una historia. Para cualquier persona que viene al mundo es muy difícil que se reúnan todas las condiciones para que se desarrolle correctamente. En vez de etiquetar a las personas con un trastorno, vamos a ver de qué manera su historia puede brillar. De todo se puede sacar brillo. Incluso de los errores y los problemas. La singularidad de cada persona, lo que podríamos llamar su estilo tiene que ver precisamente con los errores que comete, con sus pequeños y grandes defectos, especialmente cuando se hacen conscientes, cuando se trabajan… En cambio, vivimos en una escuela en la que se persigue el error….

Se persigue y se castiga.

Se persigue y se castiga en general lo diferente. Tenemos que ser todos normales, los padres están obsesionados con eso. Entras en cualquier foro y todos preguntan si sus hijos son normales: si es normal que coma, que no coma, que duerma, que no duerma. En lugar de preocuparnos tanto de la normalidad, de buscar a todo precio la conformidad, deberíamos mirar a las personas, a ese milagro que es cada uno y ver cuáles son sus cualidades, qué hace latir a esa persona, qué aporta esa persona de único.

Uno pensaría, sin conocer las escuelas tan bien como usted, que estamos lejísimos de todo esto…

Depende. En España hay muchas diferencias. Sería interesante hacer un estudio de lo que puede estar pasando en Cataluña o en algunos lugares del País Vasco o de Valencia y las diferencias con el resto del territorio. En Madrid, a un amigo mío le llevaron a visitar colegios innovadores de estos donde los niños van con corbata y maletín a los tres años y tienen que aprenderse los 44 morfemas de la lengua inglesa con cuatro. Son colegios de altas capacidades cuyo único objetivo es, como decía una orientadora, tirar de los niños. Algo que nunca nos plantearíamos hacer con una planta. Aunque sí podemos echarle abonos químicos… Se trata además de potenciar a toda costa sus capacidades cognitivas y nada más: nadie se pregunta cómo está esa persona a nivel emocional, qué aptitudes tiene, qué valores, qué cosas le gustan o le disgustan. Estamos haciendo máquinas cognitivas, máquinas de hacer cálculos y pensar. Las demás dimensiones de las personas, ¿no le importan a la educación? Contenidos, contenidos y la competición continua. ¿Eso es educar?

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2017/09/21/los-ninos-de-hoy-necesitan-adultos-que-sepan-asumir-su-responsabilidad/
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Los problemas de salud mental en la población escolar: Asignatura pendiente

Por: Saray Marqués

¿Qué pasa cuando tras ese alumno disruptivo hay algo más? ¿Es la conexión entre lo educativo y lo sanitario la adecuada? ¿Cómo afecta a niños y adolescentes el estigma?.

De repente, el profesor se pone en contacto con el orientador: “Mírame a este niño a ver qué le pasa”. Necesita etiquetas. Cree que detrás de los problemas conductuales, de esa caída inesperada del rendimiento, puede haber algo más… ¿Quizá un TDAH?

“Tenemos un problema”: Las cifras

El doctor en Psicología y Ciencias de la Salud Javier Urra menciona entre las señales de alarma “el niño que está siempre solo, que no recibe llamadas, que se pasa el día en su cuarto con su ordenador, que ha dicho en alguna ocasión: ‘El mundo sabrá de mí’, que genera, desde el silencio, mucho rencor…”. “Eso es un ‘Tenemos un problema’, ese chaval está en riesgo”.

Y dentro de esos problemas está el TDAH, pero el énfasis que se ha puesto en este hace olvidar, para Urra, muchos otros trastornos. Hay niños hiperactivos, pero también psicóticos, psicopáticos, con depresión, con trastorno límite de la personalidad, con ideas autolíticas, con trastornos de la alimentación, con pensamientos inusitados y extraños, con personalidades obsesivas, con trastornos del vínculo… Y el aula es un buen observatorio para captarlo, “sobre todo si se rompe con el tabú que suele acompañar a la enfermedad mental y si se deja de creer que tras esa sensación de que algo no funciona solo hay un problema de conducta”. En su guía Primeros auxilios emocionales para niños y adolescentes (La esfera de los libros, 2017) Urra cifra en un 20% los niños y adolescentes que llegan a presentar algún tipo de trastorno psicopatológico. Además, sitúa en 68% el porcentaje de adolescentes con depresión que no recibe tratamiento.

Son cifras que comparte el presidente de Salud Mental España, Nel González Zapico, que añade que la mitad de los trastornos mentales se dan antes de los 18 años. También el catedrático del Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos de la Universidad de Barcelona, Antonio Andrés Pueyo, que cita a la Asociación de Psiquiatría Americana, según la cual aproximadamente una cuarta parte de los niños y adolescentes ha tenido un trastorno mental en el último año antes de la evaluación y un tercio tendrá algún trastorno a lo largo de su vida como menores. “La mayoría serán trastornos de ansiedad, y los siguientes problemas son los trastornos de conducta, los afectivos y los derivados del abuso de drogas”.

El consultor en educación Christopher Clouder, ligado a la pedagogía Waldorf, aludía en una reciente ponencia en Madrid sobre el valor de las artes en la escuela a la preocupante situación en el Reino Unido, donde tres niños por aula tienen un diagnóstico de trastorno mental, uno de cada 10 sufrirá un trastorno antes de sus 21 cumpleaños, la hospitalización por autolesiones y trastornos de la alimentación se ha duplicado en tres años, el índice de depresión se ha multiplicado por seis y la edad media de sufrirla, que en 1960 era de 45 años, hoy se sitúa en los 14.

Sin llegar a estos extremos, Ana Cobos, orientadora y presidenta de la confederación Copoe, explica que hace 15 años tenía como máximo un caso (en un centro de unos 500 alumnos) que requiriera un informe de evaluación psicopedagógica para derivar a salud mental a través del pediatra y en coordinación con la familia. El último curso firmó cuatro informes de este tipo.

Foto: Teresa Rodríguez

¿Las causas? 

“¿Qué estamos haciendo como sociedad para que los niños estén sufriendo así? ¿Qué es una escuela?”, se preguntaba Clouder, que cuestionaba que esta esté satisfaciendo las necesidades de los estudiantes de ser creativos, espontáneos, asumir riesgos, descubrir su capacidad innata de aprender, experimentar o asombrarse y llamaba a incorporar un currículo rico en artes en los centros escolares.

¿Está el currículo, los estándares de aprendizaje, detrás de la mayor incidencia, o más temprana, de determinados trastornos? Sería aventurado afirmarlo, pero Ana Cobos abunda en la idea de que “ver a los niños de 12 años seis horas y media en el instituto, desde las 8.00, es antinatural”, un modelo frente al que plantea grupos más reducidos, jornadas partidas o no tan extensas o una vuelta de tuerca al sistema tradicional, para que los alumnos aprendan competencias para la vida a través de actividades prácticas que entronquen con las emociones. Ha conocido algún caso aislado de chicos y chicas con fobia escolar que no han podido incorporarse al instituto pero, sin llegar a tal patología, considera que en ocasiones para un alumno instituto es sinónimo de hastío, ansiedad o amargura, “y tendemos a olvidar lo que nos genera esas sensaciones y a repetir lo que nos genera placer, como la emoción que provoca aprender si se logra atrapar el interés”.

También para el psicólogo educativo Antonio Labanda habría que romper de una vez por todas con la idea de la enseñanza como mera transmisión de conocimientos y optar por una individualización cada vez mayor, por dejarle autonomía al alumno para experimentar, por la introducción de adaptaciones metodológicas: “Hay alumnos que requieren que se les deje un tiempo, otros que no plasmarán bien lo que saben en un modelo de examen escrito, otros a los que se les resistirá si es oral…”.

No se puede decir que un colegio o un instituto sean un caldo de cultivo para el trastorno mental, pero sí que en ocasiones se transforman en un terreno hostil si se padece. Que se acerquen los exámenes puede incrementar enormemente la ansiedad para estas personas, pero hay más. Para el orientador del IES Juan de la Cierva de Madrid, Chema Salguero, el centro educativo debería ejercer de “colchón” en que se sienten bien, pero no siempre es así. Enumera el problema que supone, por ejemplo, tener un trastorno alimenticio y que en el instituto proliferen los motes, que se asocie un TDAH con vaguería o se confunda una depresión con absentismo.

Las raíces, sin embargo, son más profundas, van más allá de la institución escolar. Entre los factores de riesgo, las tendencias que deberíamos revisar, apunta Javier Urra, la sublimación de la infancia, la falsa creencia de que los niños tienen que ser felices por el hecho de serlo. También, el hecho de que se tienda a acortar cada vez más la infancia y a alargar la adolescencia. “Si minimizáramos los problemas sociales tendríamos menos psicopatología social. Vivimos en sociedades muy estresadas y estresantes, saturadas de información, pero en que la gente no sabe estar en soledad, compartir, mirarse a los ojos”, expone.

Ana Cobos añade la falta de límites en la niñez: “Si estos fallan, cuando estos niños crecen no saben comportarse, carecen de unas pautas claras. Estamos viendo adolescentes desatados en una sociedad desorientada, y no sabemos qué ha sido antes, si la falta de pautas educativas o el trastorno”.

Muchos problemas relacionados con la salud mental aparecen en la adolescencia, apunta Salguero, porque es una etapa más social, pero en realidad ya estaban ahí: “El grupo de iguales es más importante, hay más actividades juntos, ya no es solo el cumpleaños, y es donde esas dificultades dan la cara”. En otras ocasiones, es la propia familia la que prefiere que no se sepa salvo que sea necesario. Salguero, que además de orientador, jefe de estudios y profesor de FPB en el instituto es profesor asociado en la Facultad de Educación de la Complutense, analiza: “Nos ocurre con adultos, en la facultad tenemos una unidad de atención a la diversidad para personas que necesitan todo tipo de apoyos: traducciones, apuntes en Braille… pero con los casos de salud mental lo común es que no se diga. Igual sucede con los niños y adolescentes: Hay familias que no nos dicen que sus hijos han tenido un brote psicótico o problemas de esquizofrenia o que se están medicando. Casos de ataques epilépticos que nos han revelado in extremis, la víspera de una excursión de varios días”.

Detrás está, en muchos casos, el miedo al estigma, o a que se sugiera un cambio de centro, a que se inicie un peregrinaje de uno a otro que marque una trayectoria de fracaso escolar, “porque en un problema de salud mental el cambio de centro es llevar en la mochila tu problema a otro sitio, con eso no se arregla la situación”, razona Labanda.

Las reivindicaciones

Al estigma se suma muchas veces la falta de formación e información, la carencia de recursos humanos, la saturación de los servicios de salud mental, donde el seguimiento suele ser una vez al mes, la comunicación no tan fluida entre esta y el colegio o el instituto, la escasez de plazas en los centros de escolarización combinada (en las que lo terapéutico convive con lo académico, el último recurso y que siempre se pretende que sea transitorio, previo a la vuelta al aula ordinaria)… Las distintas personas consultadas vinculadas a la salud mental infanto-juvenil repiten casi como una coletilla: “Es una asignatura pendiente”.

Lo es para Javier Urra: “Creo que la sanidad en España es una de las dos mejores del mundo, pero para salud mental está un poquito por debajo y en infanto-juvenil podemos mejorar mucho”. También para Pueyo, aunque él lo achaca no a que no sea prioridad para las autoridades sanitarias o a educativas sino a que “los avances y desarrollos científico-técnicos no son tan evidentes como en otros campos. Los conocimientos disponibles de esta problemática nos limitan, como muestra por ejemplo el debate entre los partidarios y los reacios a aceptar la existencia del TDAH. Los propios especialistas están muy divididos”.

Para González Zapico, estamos a años luz de países como Australia o Canadá, Holanda o Dinamarca, como muestra el hecho de que la especialidad de psiquiatría infanto-juvenil, a punto de ver la luz, desapareciera con el último decreto de troncalidad.

También en la formación inicial de los docentes detecta Cobos fallos, pues considera que deberían incluirse una especie de primeros auxilios para estos casos, “un conocimiento básico, saber qué hacer cuando un alumno entra en una situación de bloqueo, con la mirada hacia abajo, cuando no basta un “Vamos, vamos”, porque no te escucha”.

Otra vieja reclamación de COPOE es que todo orientador u orientadora, para serlo, y precisamente por esa potestad que tiene de derivar a salud mental, cuente con formación en Psicología, Pedagogía o Psicopedagogía. A día de hoy basta con un Grado y el máster de formación del profesorado, “con lo que tenemos licenciados en Historia, Sociología o Ingeniería con máster que están diagnosticando TDAH o Altas Capacidades”, explica Cobos.

La pregunta de Salguero cuando le preguntamos sobre salud mental en las aulas, “¿en el alumnado o en el profesorado?”, esconde una realidad detrás de profesionales sobrepasados, en el terreno de la orientación pero no solo. Si en Finlandia la ratio es de un orientador para 250 alumnos (la pauta de la UNESCO, también), en nuestro país estamos en uno para cada 750. En su centro perdieron el profesor técnico de servicios a la comunidad (más de una vez el trastorno mental va acompañado de problemas socioeconómicos, el centro trabaja en coordinación con salud mental y servicios sociales) y dedican 16 horas semanales entre una compañera (a media jornada) y él para 1.700 chicos y chicas. Entre ellos, chicos y chicas en que se detectan trastornos incipientes, como la adicción a internet (el 21% de quienes no han cumplido los 18 años están en riesgo de sufrirla), que llegan al instituto sin dormir, tras una quedada para jugar on line, o chicos y chicas que fueron niños y niñas sin pautas y que hoy practican la violencia filio-parental, describe Cobos.

Para ella, el mecanismo está listo para detectar estos y otros problemas graves, pero falta conciencia. A veces se olvida el gran cambio que puede suponer atajarlos a tiempo, o que el enfermo no es un sujeto pasivo, sino que puede poner de su parte para armarse de valor y salir de determinados trastornos o adicciones.

Falta, también, que se hable de ello. Es lo que pretende hacer el programa #Descubre. No bloquees tu salud mental, con el que Salud Mental España prevé, en su tercera edición, llegar a 10.000 alumnos de todo el país con testimonios de personas con un trastorno mental que tuvo su debut por un origen tóxico. Pero este tipo de iniciativas puntuales no parecen bastar.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2017/03/16/los-problemas-de-salud-mental-en-la-poblacion-escolar-asignatura-pendiente/

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Entrevista a Fred Baughman: El Fraude del TDAH

Por: Mike Adams/Ecoportal 

1º parte de la entrevista realizada a Fred Baughman prestigioso médico neurólogo que ha testificado sobre sus denuncias ante el Congreso de los EEUU

Mike: Hola a todos, este es Mike Adams, el Guardián de la Salud, y estoy hablando de la mítica-enfermedad conocida como déficit de atención e hiperactividad, y la sobre-medicación de la población, con el Dr. Fred Baughman.

Quiero darle un poco de historia acerca de por qué estoy tan interesado en entrevistarlo. Nuestros lectores apreciarán realmente su información, porque cubrimos extensivamente este tema. Tenemos puntos de vista similares sobre el mismo y hay mucho interés creciente.
Las personas se están dando cuenta de que han sido engañados todos estos años, así que esta es la razón por la cual quise ponerme en contacto con usted.

Dr. Fred Baughman: En el área de los medicamentos psiquiátricos infantiles, el principal enfoque ha sido el reciente inicio de audiencias de la FDA, pertinentes a reportes sobre muertes, accidentes cerebro-vasculares y ataques cardíacos en niños y adultos. El primer informe referente al Aderall salió hace un año. Adderall es una las principales drogas para el TDAH, y ese reporte trata con 12 o más individuos que se dice que han tenido accidentes cerebro-vasculares, si se puede imaginar un derrame cerebral ocurriendo en un niño pequeño.

Algunas fueron muertes repentinas y otras fueron complicaciones del corazón, y un total de 20 a 30 de tales reportes llevaron a Salud de Canadá a retirar el Adderall del mercado.

Mike: Ahora bien, estos registros son a través del sistema voluntario de Med Watch, ¿correcto?

Dr. Baughman: Exactamente, lo que explica la FDA en un folleto sobre la mecánica de MedWatch y otros sistemas similares de notificación voluntaria. Confesaron que tales sistemas normalmente identificar no más del 1 por ciento de las incidencias reales. Así que, en todo caso, tuvimos esa ocurrencia hace aproximadamente un año, con Health Canada retirando Adderall del mercado, y nuestra FDA no retiró el Adderall del mercado. Posteriormente, supimos que la FDA presionó a Salud de Canadá detrás de bambalinas, para que no la quitara del mercado.

Mike: Eso es increíble. ¿La FDA aplica presión a las naciones extranjeras para proteger a las drogas peligrosas en nuestro propio mercado?

Dr. Baughman: Sí, es exactamente eso. Luego hace unos tres o cuatro meses atrás, Health Canada puso el Adderall de nuevo en el mercado. No era porque hubieran tenido buena evidencia sobre su seguridad o efectividad. Adderall es una mezcla de las dos sales de anfetamina, por lo que es una anfetamina pura.

Mike: Yo quiero hablar más sobre lo que realmente está en estas drogas más adelante.

Dr. Baughman: Lo fascinante sobre el Adderall es que era originalmente una droga de reducción de peso para adultos, llamada Obetrol. El Obetrol es tan extremadamente adictivo que fue retirado del mercado por esa razón. Ahora tenemos a la FDA trayendo esta droga sumamente adictiva al mercado para los más pequeños.

Mike: ¿Así que era demasiado peligroso para los adultos, pero no peligroso para los niños?

Dr. Baughman: De hecho, lo están introduciendo en el mercado para niños más pequeños completamente normales que dicen que padecen de la falsa enfermedad ilusoria, llamada TDAH.

Mike: Para los que están leyendo, usted es un neurólogo pediátrico, ¿correcto?

Dr. Baughman: Sí, y he practicado neurología, tanto de adultos como neurología infantil, con certificado por la junta en ambos. He sido un hombre miembro de larga trayectoria de la Academia Americana de Neurología.

Mike: Bueno, así es que usted procede del mundo que podríamos llamar la medicina convencional. Usted es médico, y, sin embargo, a lo largo de los años, y estoy seguro de va a explicar cómo sucedió esto, encontró algunas distorsiones en masa ocurriendo con el TDAHpor lo que lanzó un sitio Web llamado http://www.adhdfraud.org/

Mi primera pregunta: ¿En qué momento como neurólogo pediatra comenzó usted a ver que algo andaba mal con esta imagen?

Dr. Baughman: Comencé a publicar trabajos de investigación reales cuando estaba en formación, en primer lugar en el Hospital Sinaí de Nueva York y después de eso, en el Hospital de Veteranos de Boston. Después de los primeros 10 años en mi práctica, que fue en Grand Rapids, Michigan, publiqué un volumen considerable de investigaciones originales sobre todo que tuviera que ver con las decisiones del cerebro genéticamente determinadas o enfermedades neurológicas y anomalías cromosómicas.

Gran parte de ese trabajo fue publicado con el Dr. Joseph Mann, también de Grand Rapids. He descubierto y descrito enfermedades reales, y esos son los antecedentes y la base que traigo a mi deber recién descubierto de evaluar y criticar la psiquiatría moderna, especialmente en lo pertinente a sus totalmente fraudulentas afirmaciones de que sus diagnósticos, como el TDAH, TOC (trastorno obsesivo-compulsivo) bipolar y depresión son verdaderas enfermedades cerebrales, cuando en realidad no lo son.

Ahora, estuve en la práctica privada desde 1964 hasta 1993 cuando me retiré, y fue durante los años 70 que empecé a notar, en primer lugar en Grand Rapids y luego aquí en San Diego, hacia donde me trasladé, la frecuencia cada vez mayor de la explosión de los diagnósticos de hiperactividad y daño cerebral. Luego, en 1980, la Asociación Americana de Psiquiatría inventó el TDAH, o trastorno por déficit de atención, y con eso, la epidemia parecía empeorar. [Trastorno por déficit de atención con hiperactividad, por las siglas de uno de los nombres que ha recibido en inglés (Attention Deficit Disorder).]

Me pareció que la frecuencia de tales diagnósticos y su tratamiento con Ritalina, una droga similar a la anfetamina, y cada pequeña porción tan adictiva como la cocaína, fueron incrementándose en mi comunidad.

Al principio tomé nota y más tarde me alarmé ante la frecuencia con que los niños eran referidos a mí por las escuelas a través de su médico, con estas etiquetas diagnósticas puestas en marcha, básicamente por los maestros.

Mike: Esto fue una «enfermedad» que casi parecía estarse regando como un virus.

Dr. Baughman: Fue una idea de una enfermedad, una enfermedad ilusoria, con la psiquiatría infantil repitiendo la mentira lo suficientemente a menudo como para estarse convirtiendo en una realidad, especialmente para el establecimiento escolar y los maestros en todo el país, y cada vez más, los medios de comunicación o del público en general.

*del Sitio Web TruthPublishing, traducción de Adela Kaufmann

Ecoportal.net

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Ecuador: Los niños hiperactivos sufren “trastorno cerebral” y no son unos maleducados.

América del Sur/Ecuador/28.02.2017/Autor y Fuente: http://expreso.ec/

Los niños hiperactivos y con déficit de atención sufren “un trastorno cerebral” producto de la lentitud en el crecimiento neuronal, según un estudio internacional publicado en Holanda que pide poner fin al estigma tradicional de “mala educación” para explicar el comportamiento de esos pequeños.

“Hay una base neurobiológica que explica el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Y eso los padres deben tenerlo claro y aprender a lidiar con sus hijos”, explica a Efe Marcel Wortel, del hospital universitario de Nijmegen, en Holanda, que dirigió esta investigación.

Hay cinco puntos o regiones visibles en el cerebro que muestra una lentitud en el crecimiento neuronal en las personas con TDAH, lo que no ocurre con los que no lo sufren.

Uno de los trastornos más evidentes localizados por los científicos está en los ganglios basales, la parte del cerebro involucrada en el control de la emoción y la cognición, y que se encuentra cerca de la base del cerebro, dentro del telencéfalo.

Esto muestra que el volumen total del cerebro es menor en personas con TDAH, en comparación con personas totalmente sanas.

Dos de los puntos visibles de tamaño reducido están también en la amígdala y el hipocampo.

En la amígdala radican las emociones básicas como el enfado o el miedo; es decir, la región del cerebro que desempeña la regulación de las emociones.

El papel del hipocampo está menos claro -explican los investigadores- pero “posiblemente tenga también que ver con la motivación y la regulación emocional”.

En cuanto a la medicación, el estudio demuestra que ésta suprime los síntomas, pero no tiene ningún efecto sobre el volumen cerebral de las personas con TDAH, es decir, no cura el problema original.

Según el estudio, las diferencias son aún más evidentes en niños y adultos jóvenes, que en personas más mayores, y por ello los investigadores asumen que el retraso en el desarrollo del cerebro es una característica del TDAH.

La investigación se basó en el mayor estudio de neuroimágen realizado hasta la fecha en personas con déficit de atención.

En total se compararon imágenes de 1.713 personas con TDAH y 1.529 personas sin este trastorno, todos en edades comprendidas entre los 4 y los 63 años.

“Las diferencias que hemos encontrado pueden explicar el retraso en el desarrollo cerebral que caracteriza este trastorno de atención”, aseguran los científicos del centro Radboud de Nijmegen.

El TDAH se caracteriza por síntomas de falta de atención, impulsividad e hiperactividad, y lo sufren uno de cada veinte niños (menores de 18 años) en todo el mundo, y dos tercios sufren sus efectos o mantienen signos en su vida adulta.

“Este es un trastorno del cerebro al igual que lo es la depresión clínica, la esquizofrenia y el trastorno bipolar, también asociados con los volúmenes cerebrales anormales”, explica la investigadora Martine Hoogman, del centro médico de Nijmegen.

Los resultados de esta investigación, resalta, exigen poner fin a los estigmas tales como que el TDAH está causado por “la mala educación” o que los niños “son difíciles” de educar, ya que solo es cuestión de que el cerebro madura a otro ritmo.

La investigación, dirigida por la científica holandesa Barbara Franke, ha sido publicada en el último número de la revista científica Lancet Pschiatry.

Según la publicación, en investigaciones anteriores se solían detectar “diferencias conflictivas” en los cerebros de un grupo de personas con TDAH, probablemente -añade- debido al uso de una población de estudio muy pequeña y poco comparativa.

Sin embargo, las causas siguen siendo objeto de controversia, por eso los autores de esta investigación piden “no estigmatizar” a los pequeños con hiperactividad y déficit de atención, a la espera de encontrar remedio a este trastorno, si lo hay.

“Sólo hemos encontrado las diferencias, no las causas de estas diferencias o los efectos de un tratamiento”, lamenta Wortel, ante la pregunta de cómo deberían lidiar los padres con los niños que sufren este trastorno.

Fuente: http://expreso.ec/vivir/ciencia-salud-hiperactividadinfantil-trastornos-educacion-XX1099880

Imagen: http://expreso.ec/documents/10157/0/762×428/0c0/0d0/none/12113/COFM/image_content_22262068_20170217211244.jpg

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