Page 4 of 81
1 2 3 4 5 6 81

ChatGPT y la educación del futuro: cómo la inteligencia artificial está transformando la enseñanza

Por: Karina Fuerte

 

Todo el mundo está hablando de las repercusiones del uso de ChatGPT en el aula pero, la realidad es que esta tecnología tiene el potencial de obligarnos a replantear completamente cómo aprendemos y evaluamos el aprendizaje.

 

Los recientes avances en el procesamiento del lenguaje natural (NLP por sus siglas en inglés), el aprendizaje automático y la inteligencia artificial (IA) han llevado al desarrollo de ChatGPT, un modelo de procesamiento de lenguaje natural desarrollado por OpenAI. Esta herramienta, de la que tanto se está hablando actualmente, es una red neuronal entrenada con grandes cantidades de texto para generar respuestas coherentes y naturales a preguntas y comandos de texto. Puede ser utilizado para diversas tareas, como la creación de diálogos automatizados, la generación de contenido automático y la mejora de la comprensión del lenguaje natural.

Si bien esta tecnología tiene el potencial de revolucionar la forma en que nos comunicamos e interactuamos con las máquinas, también plantea algunas amenazas y oportunidades para el futuro de la educación, el papel de los docentes y la evaluación del aprendizaje.

Una de las oportunidades más significativas que ChatGPT brinda a la educación es el potencial de revolucionar la forma en que enseñamos y aprendemos idiomas. Con su capacidad para comprender y responder a entradas de lenguaje natural, ChatGPT se puede utilizar para crear herramientas interactivas de aprendizaje de idiomas que pueden ayudar a los estudiantes a mejorar sus habilidades lingüísticas de una manera más atractiva y personalizada. Por ejemplo, ChatGPT se puede usar para crear tutores de idiomas virtuales que pueden proporcionar a los estudiantes comentarios en tiempo real y lecciones personalizadas en función de su nivel de dominio del idioma y estilo de aprendizaje. Esto podría ser especialmente beneficioso para aquellos estudiantes a quienes se les dificultan los métodos tradicionales de aprendizaje de idiomas o para aquellas personas que por falta de ingresos no pueden acceder a tutores de idiomas.

Otra oportunidad que ChatGPT brinda a la educación es el potencial para mejorar la forma en que evaluamos el aprendizaje de los estudiantes. Con su capacidad para comprender y responder preguntas, ChatGPT se puede utilizar para crear herramientas de evaluación automatizadas más precisas y confiables. Por ejemplo, se puede usar para crear evaluaciones de redacción automatizadas que pueden proporcionar a los estudiantes comentarios en tiempo real sobre sus habilidades de escritura y ayudarlos a identificar áreas en las que necesitan mejorar.

Sin embargo, también existen varias amenazas potenciales que deben tenerse en cuenta al pensar en el futuro de la educación y la evaluación del aprendizaje con herramientas de IA como ChatGPT. Una de las mayores preocupaciones es que los estudiantes hagan trampa en sus tareas y exámenes. Con la capacidad de generar respuestas similares a las humanas, los estudiantes pueden usar ChatGPT para completar evaluaciones y tareas sin comprender realmente el material. Otra de las grandes amenazas más importantes es la posibilidad de que esta tecnología reemplace a los docentes y los vuelva obsoletos. Con su capacidad para comprender y responder a entradas de lenguaje natural, ChatGPT se puede usar para crear “maestros virtuales” que pueden brindar a los estudiantes instrucción y asistencia personalizada. Esto podría socavar en gran medida la integridad del sistema educativo y conducir a una devaluación de los títulos y certificaciones.

Otra preocupación de la comunidad educativa es el potencial de sesgo y discriminación. Dado que ChatGPT se entrena con grandes cantidades de datos, es posible que sin darse cuenta recoja y reproduzca sesgos y estereotipos sociales. Esto podría conducir a evaluaciones y comentarios injustos y discriminatorios para ciertos grupos de estudiantes. Es crucial que se tomen medidas para garantizar que ChatGPT esté capacitado en conjuntos de datos diversos e inclusivos para minimizar estos posibles sesgos.

Además, existe el riesgo de que ChatGPT pueda conducir a una pérdida de interacción humana y personalización en el proceso de aprendizaje. Con la capacidad de automatizar evaluaciones, retroalimentación y comentarios, existe el riesgo de que tanto educadores como estudiantes dependan demasiado de la tecnología y pierdan las conexiones e interacciones personales que son cruciales para un aprendizaje efectivo. Por ello, es importante que el uso de herramientas como ChatGPT se utilicen únicamente como soporte en ciertas actividades de aprendizaje, no como reemplazo de la labor docente.

En conclusión, ChatGPT tiene el potencial de mejorar en gran medida la forma en que pensamos sobre la educación y la evaluación del aprendizaje, pero es importante que consideremos las posibles amenazas y oportunidades que presenta. Tomando las medidas pertinentes para garantizar que este tipo de herramientas se usen de manera responsable e inclusiva, podemos aprovechar el poder de esta tecnología para crear experiencias de aprendizaje personalizadas y efectivas para estudiantes y docentes, al tiempo que minimizamos el potencial de plagio, prejuicios y discriminación. Es importante que abordemos la implementación de ChatGPT con cautela y mirada crítica, para minimizar cualquier impacto negativo que pueda tener en el futuro de la educación.

¿Cómo ves el uso de ChatGPT en el aula? ¿Has utilizado esta herramienta? ¿Crees que la IA cambiará la forma en que evaluamos el aprendizaje y el progreso de los estudiantes? ¿Cómo cree que estas tecnologías afectarán el papel del docente en el futuro? ¿Qué consideraciones éticas deben tenerse en cuenta al utilizar inteligencia artificial en la educación?

 

Hasta la próxima semana

Karina Fuerte
Editora en jefe, Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación

 

***

¿Este texto fue creado utilizando ChatGPT?

 

La próxima semana les comparto los resultados de la encuesta.

Fuente de la información e imagen: https://observatorio.tec.mx

Comparte este contenido:

Carlos Horacio Torrendell: Escuelas del siglo 19 para estudiantes del siglo 21. ¿En qué parte del camino nos quedamos tan atrás?

Existe un proceso de cambios culturales, sociales y laborales donde es cada vez más específica y exigente la demanda de perfiles para entrar en el mundo del trabajo.

La educación, en una sociedad que está en constante y rápida evolución, se vuelve un gran desafío, pero también una gran oportunidad para incorporar los avances tecnológicos con el fin de mejorarla hacerla más accesible a todos. Insertar a la tecnología, las nuevas tendencias de cómo se produce y se intercambia la información como aliados a la hora de enseñar es un camino que favorece la inclusión de cada vez más personas en una Educación de calidad.

Esta evolución y cambio permanente de las formas que tenemos de comunicarnos, relacionarnos e interpretar la realidad que se nos presenta, también quiere decir que existen otras formas que ya van quedando atrasadas y desactualizadas para los desafíos de esta época.

En el actual sistema educativo que conocemos, y que se analiza regularmente con distintas evaluaciones estatales y privadas, se puede ver que, si bien los estudiantes egresan con herramientas que les permite desenvolverse en la vida adulta, son cada vez más los que opinan que no les sirven demasiado todos los conocimientos.

A partir de esta transformación general que mencionamos, se inició un proceso de cambios culturales, sociales y laborales donde es cada vez más específica y exigente la demanda de perfiles para entrar en el mundo del trabajo. No tan solo nos referimos a conocimientos técnicos, sino que también a las formas de trabajar, de enfrentar, resolver problemas y de trabajo en equipo.

Metodologías como Clase invertida y Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) son interesantes herramientas para esta clase de escenarios; permiten armar buenas estrategias para combinar presencialidad, virtualidad, trabajo colaborativo y tutorial.

La Formación Docente en este contexto resulta fundamental para identificar las necesidades que tienen nuestros jóvenes a la hora de aprender y formarse.

El mecanismo para concursar y alcanzar más horas cátedras que se utiliza hasta el momento se enfoca únicamente en un puntaje: los docentes sólo necesitan demostrar que asistieron a una capacitación para aprobar y no existe instancia de evaluación de lo que aprendieron. Es decir, mientras más horas estés sentado en una silla, aún sin aprender nada nuevo, más chances de ingresar a un cargo tenés. Esto no beneficia en nada al sistema educativo, ni hablar de nuestros estudiantes.

La docencia, como la entendemos desde Potenciar Argentina, se trata tanto de responder a las necesidades de ingreso y permanencia como de darles a las nuevas generaciones las herramientas y habilidades para que puedan continuar desarrollándose en el futuro.

clases
Darles a las nuevas generaciones las herramientas y habilidades para que puedan continuar desarrollándose en el futuro.

Estas herramientas y habilidades permiten que cada vez menos niños caigan en la pobreza; que cada vez más adolescentes ingresen y terminen el secundario; que cada vez más docentes accedan a mejores salarios; que toda la comunidad educativa deje atrás los viejos problemas que, a pesar del paso de las décadas y los gobiernos, siguen allí.

Los avances que, como ciudadanos argentinos, podamos lograr en la educación saltarán a la vista no tan solo en el nivel de escolarización de nuestros compatriotas sino también en la forma de afrontar los problemas que vivimos diariamente. Creemos firmemente que todos los obstáculos pueden ser trabajados desde la educación.

Una sociedad preparada, formada, instruida logra una mejor calidad de vida para sus miembros, en todos los ámbitos. En esto, la escuela y el sistema educativo en general son partes fundamentales.

Nuestro compromiso es con el desarrollo integral de todas las partes que conforman las vidas de las personas. Queremos contribuir para lograr una Argentina más justa, más equitativa y sostenible. Creemos que es nuestro deber y elegimos proponer una alternativa superadora a los problemas que tenemos actualmente.

*Dr. en Ciencias de la Educación. Presidente de Fundación Potenciar Argentina. Miembro del Consejo Nacional de Calidad de la Educación.

Fuente: https://www.perfil.com/noticias/opinion/escuelas-del-siglo-19-para-estudiantes-del-siglo-21-en-que-parte-del-camino-nos-quedamos-tan-atras.phtml

Comparte este contenido:

Una mujer contra el matrimonio infantil en Turquía y otras historias inspiradoras para afrontar 2023

El año 2022 fue sombrío por el estallido de la guerra en Ucrania, el aumento del hambre o el retroceso en el desarrollo humano. Hubo también personas e iniciativas que ayudaron a mejorar el mundo. Esta son algunas de ellas

El año 2022 fue sombrío por el estallido de la guerra en Ucrania, el aumento del hambre o el retroceso en el desarrollo humano. Hubo también personas e iniciativas que ayudaron a mejorar el mundo. Esta son algunas de ellas

Un joven pedalea por una carretera de Senegal, en una imagen cedida por la ONG Bicicletas sin fronteras.
Un joven pedalea por una carretera de Senegal, en una imagen cedida por la ONG Bicicletas sin fronteras.

El reciente estallido de contagios de covid-19 en China es un tsunami que arrastra las esperanzas de dar por zanjada la pandemia, casi tres años después de iniciarse. Así acabó el que iba a ser considerado el año de la recuperación. Aunque 2022 ya se había truncado en febrero, por la ofensiva de Rusia en Ucrania, una nueva guerra en Europa que desencadenó el mayor y más rápido éxodo de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial, y desestabilizó los mercados alimentario y energético globales, dejando a millones de personas sin comida suficiente. El hambre aumentó. Y, ante una comunidad internacional incapaz de abordar las numerosas y diversas crisis (no olvidemos el cambio climático), el desarrollo humano retrocedió a los niveles de 2016, situando a la humanidad casi en el punto de partida de la aprobación de la Agenda 2030 de la ONU para un mundo mejor, más sostenible y pacífico para esa fecha. Sin embargo, se produjeron también acontecimientos para la esperanza, pequeñas y grandes historias de personas que lograron progresos. Ellas iluminaron un 2022 sombrío. Planeta Futuro les pone rostro con una selección de la hemeroteca más positiva:

El empeño en hacer del mundo un lugar mejor

La turca Dilek Demir, obligada a casarse a los 14 años, se ha convertido en símbolo de la lucha contra los matrimonios infantiles en su país. “Jamás permitiré que casen a una niña”, prometía. Hoy, Demir, a sus 49 años, es muhtar de Müradiye, un barrio del distrito de Diyarbakir. Los muhtar son representantes electos, sin adscripción política, cuya función es servir de enlace entre los vecindarios y la Administración. Y lo primero que hizo fue colocar un buzón de quejas y chivatazos. Y de él “han salido 80 vidas”, como expresaba ella con cierta poesía el número de personas a las que ayudado. La mitad eran niñas a las que iban a casar siendo menores; otras 25, de niños que sufrían violencia y abusos sexuales en sus familias; las restantes, de jóvenes a los que ha conseguido alejar de la adicción a las drogas.

Otro ejemplo es el de Aleva Ndavogo Jude, de Yamena (Chad), un enamorado de la danza. Le encantaba bailar y su pasión le llevó a abandonar los estudios y a afrontar el repudio de su familia. Tras vivir dos años como un sin techo y tras mucho esfuerzo, se convirtió en un bailarín y coreógrafo de éxito, creando su propio grupo. Pero dio un paso más: fundó una asociación para motivar a los niños que viven en las calles y reintegrarlos en la sociedad. “Bailando, se sienten libres”, dice.

Desde Barcelona, llega la historia de Afropoderossa, la influencer que planta cara al racismo. Arrasa en sus cuentas de TikTok e Instagram, con casi 400.000 y más de 100.000 seguidores respectivamente. Nacida en Guinea Ecuatorial hace 31 años y asentada en el barrio del Poblenou de Barcelona desde los 12, en sus redes comparte información sobre África y sus culturas y trata de desmentir estereotipos y prejuicios. Reivindica, además, el derecho de las mujeres negras a salirse del canon de belleza occidental. También Charity Ekezie usa el humor y Tik Tok contra los estereotipos sobre África, pero desde Nigeria. “La gente cree que vivimos en casas de madera y chozas de barro, pero yo nunca he vivido en una. Piensan que no tenemos nada más que tierra seca, que no hay agua y que por eso somos duros”.

Otra iniciativa que ha contribuido a mejorar el mundo es la que la ONG Bicicletas sin Fronteras ha puesto en marcha en Senegal, donde ha facilitado que 7.000 alumnos africanos sin transporte escolar se desplacen a los centros educativos y obtengan mejores notas gracias a las baobikes.

Hay muchos más ejemplos:

Los jóvenes se alzan contra la crisis climática

El 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente. Y ese día presentábamos a 10 jóvenes de África, Asia, Latinoamérica y Oceanía que están escribiendo el presente y el futuro de las acciones de defensa del planeta. Tienen rostros menos famosos que Greta Thunberg, pero la misma convicción de que pueden cambiar el mundo. Los llamamos Los paladines de la lucha contra el cambio climático y todos tenían en ese momento menos de 25 años, como Melati Wijsen, nacida y criada en Bali. Allí empezó con sus paseos, cuando era niña, por las playas y los campos de arroz. A pesar de que tenía el cielo delante de ella, sus ojos no veían más que bolsas de plástico abandonadas. Y decidió empezar su lucha contra ese desastre. Así, a los 12 años creó, junto a su hermana menor, Bye Bye Plastic Bags. El proyecto, que surgió como una aventura entre compañeros de colegio, es hoy la principal ONG juvenil de Indonesia y ha conseguido que el Gobierno local de Bali prohíba las bolsas de plástico, las pajitas y el poliestireno. Time ha incluido a esta joven entre los adolescentes más influyentes del mundo y Forbes, entre los 30 menores de 30 años más importantes del planeta.

Las redes sociales son el arma de las jóvenes influencers en las que pusimos el foco durante la COP27, un grupo de mujeres brasileñas que optaron por defender el medio ambiente entre sus miles de seguidores en vez de tratar de venderles productos. “Somos la última generación que puede salvar el planeta”, publicaba en su cuenta de Instagram, Zaya (21 años), la primera modelo indígena que pisó la alfombra roja del Festival de Cine de Venecia en septiembre, durante la proyección de la película The Territory, distribuida por National Geographic.

Destaca también la historia de Olivia Mandle, una joven barcelonesa de 15 años que lucha por los animales marinos y el bienestar del planeta. ¿Cómo? Ha inventado la Jelly Cleaner, un artefacto que flota y que recoge partículas plásticas de la superficie de su amado mar Mediterráneo. Asegura que funciona. También ha iniciado una campaña para que Gobierno español cierre escalonadamente los delfinarios y sueña con crear el primer santuario para estos cetáceos en la costa Brava.

Los que no se rinden

Estas son las historias de las personas que no se rindieron ante la adversidad. Es lo que en términos de las organizaciones humanitarias se llama resiliencia, la capacidad humana de aguantar y volver a levantarse. Es lo que hizo el nepalí Kishan Adhikari, nacido en Katmandú hace 31 años. Huyó de la heroína que devoraba a otros jóvenes en su barrio, lo perdió todo en Reino Unido, recaló en España y empezó a cantar en el metro de Madrid. Su voz enamoró a una pareja que le dio trabajo en el teatro, lo que le permitió conseguir su permiso de residencia. Hoy es cantante, actor y cocinero.

Otra resiliente es Enyonam Mary Sleysor, de Togo. Una inyección mal puesta, según le cuentan, le paralizó las piernas. Tenía tres años. Las opciones terapeúticas y de atención para las personas con discapacidad son escasas en su país, pero ella no se rindió. Volvió a moverse por sí misma apoyada en unas muletas, estudió Sociología y hoy trabaja en una ONG. Es la mujer que aprendió a volar porque no podía caminar, y lo hizo con prácticamente todo en contra, pero arropada por el amor de su familia.

En Burkina Faso, un país del que apenas llegan noticias de la violencia yihadista que padece, conocimos a Awa Baguia. Tiene 37 años y es la primera mujer invidente del país que ha logrado terminar los estudios de Sociología. Hoy es funcionaria tras aprobar con éxito las oposiciones y gracias a que una ley determina que debe existir una cuota reservada de puestos de trabajo del 10% para personas discapacitadas. “Hasta mis 18 años era vidente y entonces tuve un glaucoma. Primero veía borroso, luego perdí toda la visión en un ojo. Como a la togolesa Mary Sleysor, el amor de su familia la ayudó a continuar. Cuando perdió por completo la vista, su madre la llevó a un centro para personas invidentes en el que pudo aprender a leer en braille: “Pasé tres años en este centro y acabé la secundaria. Mi madre fue la persona que más fuerza me dio en esos tiempos difíciles… Me ayudó a aceptarme y a que los demás me aceptaran”. Ella es la voz de la clarividencia.

En esta lista de quienes se reinventan, destacan las alquimistas del índigo, integrantes de la cooperativa GIE Solidaire de Confection et Artisanat del barrio de Sam Sam III en Pikine, Senegal. Estas mujeres han abierto una nueva línea de negocio en sus actividades con la recuperación de la técnica tradicional del teñido y elaboración de tejidos para fabricar vestidos, fulares, mantelerías o complementos de moda. Así se sostienen a sí mismas y a sus familias. Detrás de esta agrupación se encuentra la hermana Regina Casado, que lleva la mayor parte de sus 82 años empoderando a las mujeres de Camerún y Senegal. “Me voy a ir con los más pobres para que no los aplasten”, aseguró a este periódico para explicar su vocación.

Estas son otras historias que dejan una huella positiva:

  • Una foto cambió la vida a Mohamed Yousif, el poeta en las protestas de Sudán. El fotógrafo japonés Yasuyoshi Chiba retrató a un adolescente de 15 años en las manifestaciones contra el régimen sudanés de 2019. La instantánea, galardonada con el World Press Photo, atrajo la atención internacional hacia las protestas y hacia el potencial del joven, que acabó recibiendo fondos para estudiar en Países Bajos. De regreso a su país, planea ser el presidente de la nación más joven del mundo.
 Mohamed Yousif, en una fotografía del japonés Yasuyoshi Chiba, que ganó el World Press Photo de 2020.
Mohamed Yousif, en una fotografía del japonés Yasuyoshi Chiba, que ganó el World Press Photo de 2020.YASUYOSHI CHIBA (AGENCE FRANCE-PRESSE)
  • De delincuente juvenil en Nairobi a recibir un premio de la reina de Inglaterra. Douglas Mwangi, un joven de un suburbio de la capital keniana que se dedicaba a “perpetrar actividades delictivas” para sobrevivir, decidió cambiar de vida y fundó el primer centro digital comunitario de su barrio, pensado para facilitar a los jóvenes el acceso a la educación y al trabajo remunerado. Su labor le llevó a recibir en 2018 el Premio a los Jóvenes Líderes, que le entregó la reina británica Isabel II.
  • Las ganas de estudiar de Mahgul, a pesar de todo. Grace Armstrong, especialista en educación en emergencias de Unicef, conoció a Mahgul, una niña de 11 años brillante y con muchos proyectos, en una clase comunitaria de un pueblo rural en la provincia de Faryab, en el norte de Afganistán. Ansiosa por compartir su experiencia, Mahgul le contó cómo visitaba su aula casi todos los días mientras estuvo cerrada por covid-19 durante los primeros meses de 2021. Preguntada por las dificultades que había encontrado para recibir formación, respondió: “El único motivo que podría impedirme estudiar sería que mi padre no pudiera permitirse pagarme los estudios. Quiero ser ingeniera o doctora”.
  • Un arquitecto que nació en una aldea sin electricidad gana el mayor premio de su sectorDiébédo Francis Kéré es el primer africano en recibir el galardón Pritzker 2022 de arquitectura, el mayor premio internacional del ramo. Nacido en Gando, una aldea remota de Burkina Faso, explica su origen tradicional, su amor por la naturaleza y su persistente voluntad de cambiar la vida de sus compatriotas.

Una de animales

En julio, un hito contra la extinción de especies amenazadas se produjo en Mozambique: los rinocerontes regresaban al país subsahariano 40 años después de su desaparición. Lo contamos en fotografías.

Avances que mejoran la salud

En el ámbito de la salud global también hay razones para la esperanza. En julio, se alcanzó un acuerdo internacional que hará accesible la medicación preventiva del VIH a 90 países en desarrollo. Y poco después, en septiembre, el Fondo Mundial para el VIH, la malaria y la tuberculosis lograba la mayor recaudación de su historia: 14.250 millones de dólares (13.340 millones de euros).

También en 2022, un campo de refugiados de Sudán del Sur acogió la primera campaña de vacunación del mundo contra la hepatitis E. Así, 25.000 personas, incluyendo gestantes, recibieron entre marzo y abril las dos primeras dosis en el campo de desplazados de Bentiu, el más grande del país. También llegaron buenas noticias para quienes padecen la infección doble de leishmaniasis visceral y VIH. Antes era una sentencia de muerte. “Ahora, ya puedes decirle al enfermo que tiene esperanzas”, sentencia el doctor español Jorge Alvar, quien lidera los programas globales contra la leishmaniasis de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi por sus siglas en inglés). Un nuevo tratamiento aprobado por la OMS, basado en los resultados de los primeros estudios clínicos en Etiopía e India, reduce el tiempo de tratamiento de 38 a 14 días y se aumenta la eficacia desde un promedio de 50% hasta alrededor del 90%.

En julio, se alcanzó un acuerdo internacional que hará accesible la medicación preventiva del VIH a 90 países en desarrollo. Y poco después, en septiembre, el Fondo Mundial para el VIH, la malaria y la tuberculosis lograba la mayor recaudación de su historia: 14.250 millones de dólares

En 2022, Ruanda mostró el camino para derrotar a la malaria. Allí, la voluntad política, la financiación, la investigación y una robusta red comunitaria han permitido al país africano reducir un 76% sus casos de paludismo en cuatro años. En Perú, la esperanza de la salud viajaba (y aún lo hace) en barco. A él nos subimos para compromobar cómo, allí donde no llegan fácilmente los médicos, en el fondo de la Amazonía, el Forth Hope lleva curación, alivio, vacunas y prevención.

Las mujeres ganan terreno

Con las gafas moradas siempre puestas, en Planeta Futuro hemos sido testigos de cómo las mujeres del mundo, y las del Sur Global en particular, han avanzado en diversas áreas: política, social, personal. Dedicamos un especial a destacar la labor de una decena de lideresas africanas, con poder y mando para transformar sus países. Y contamos la historia de cuatro mujeres brillantes de Kenia, quienes, pese a tener todo en contra, han llegado a lo más alto del sistema educativo.

También en Kenia, nos topamos con las chicas de Nakuru. Mientras el mundo seguía con interés las elecciones presidenciales de aquel país de África oriental, en agosto de 2022, algo extraordinario sucedía: en los ámbitos local y regional salieron elegidas más mujeres que nunca, un logro histórico y un paso más hacia la igualdad de género.

En el continente americano, unas jovenes hondureñas demostraron que la ciencia y la tecnología también es cosa de ellas: participaron en la construcción del satélite Morazán, un cubo de 10x10x10 centímetros que servirá para proteger la vida de millones de personas de América Central frente a las frecuentes inundaciones en los lugares de menor acceso. El lanzamiento está previsto, si todo transcurre, como está planeado, para el primer semestre de 2023.

Fuente: https://elpais.com/planeta-futuro/2023-01-03/una-mujer-contra-el-matrimonio-infantil-en-turquia-y-otras-historias-inspiradoras-para-afrontar-2023.html

 

Comparte este contenido:

El nuevo capitalismo de plataformas y vigilancia, ¿el adiós a la esperanza?

Por Aram Aharonian

El contexto de la pandemia de la covid-19 creó las condiciones adecuadas para disponer de un marco institucional y normativo capaz de modificar las mentalidades, costumbres y valores de nuestras sociedades, impulsando nuevos deseos, hábitos y valores, pero, sobre todo, imponiendo el modo de producción de la economía digital, de plataformas.

Así, el comportamiento social se pudo regular, previsible y controlable, generando un nuevo estilo de vida, producción, consumo y de consumidores; respondiendo a intereses estratégicos del sistema capitalista. Las revoluciones tecnológicas no han sucedido por casualidad, sino que son la forma de asegurar el proceso de acumulación del beneficio capitalista en cada etapa de su desarrollo histórico.

El actual proceso está dando paso a una nueva modalidad del capitalismo basada en la economía digital, la deslocalización del trabajo y la precarización laboral, acompañada de la vigilancia y el confinamiento permanente; es una reorganización del sistema.

Este ahora llamado capitalismo de plataformas lo han bautizado con distintos nombres: inteligencia colectiva, web 2.0, capitalismo de vigilancia, feudalismo digital. No es una tecnología, ni una aplicación, sino el modelo de negocio, de la agricultura a la educación, del transporte a la administración pública, de la economía a la comunicación o la salud.

Los algoritmos procesan la información de cada individuo y la correlacionan con información estadística, científica, sociológica e histórica para generar modelos de comportamiento como herramienta de control y manipulación de masas. “Quien controla el presente controla el pasado, y quien controla el pasado controlará el futuro”, escribió ­George Orwell en 1984

El objetivo de esos algoritmos predictivos es conocernos lo suficiente para poder manipularnos y también sustituirnos, incluyendo tareas cognitivas como escribir artículos o pintar un Picasso.

Manuel Castells advertía que las revoluciones tecnológicas solo se producen si las sociedades disponen de un marco institucional y unas normas que fomenten nuevos deseos, hábitos, metas y valores, con capacidad de modificar las mentalidades y disolver las costumbres tradicionales, lo que posibilita nuevos cambios estructurales que permiten nuevas pautas que corrigen el comportamiento general de la población y así poder ejercer el control social.

Estas son las condiciones imprescindibles para penetrar y modificar todos los ámbitos de la existencia (sociales, económicos, políticos, etc.) y producir, consolidar y legitimar el cambio social total. Condiciones que se cumplieron en las tres revoluciones tecnológicas anteriores a la actual pandemia, señala la socióloga Carmen Torralbo.

Fue durante la crisis global económica y sobre todo financiera de 2008, que surgió la “economía de plataforma”, resultado del excedente de capital líquido tras el derrumbe de la burbuja de las puntocoms en un contexto de alto nivel de desempleo, que facilitó a la patronal imponer sus condiciones en el ámbito laboral y económico.

Para tener en claro: las plataformas digitales son mayoritariamente propiedad de empresas multinacionales -Glovo, Deliveroo, Uber, Rappi, Booking, Airbnb, Cabify, Amazon, entre otras-, las que proliferaron rápidamente acaparando actividades del sector servicios, resignificándolo y sustituyendo parte del comercio tradicional, utilizando nuevos dispositivos tecnológicos programados con inteligencia artificial y algoritmos que controlan y monitorizan todos los aspectos del proceso de trabajo y –sobre todo- a sus trabajadores.

Estas empresas son muy cuestionadas, sobre todo por la utilización y mercantilización de los ingentes datos que generan, fuente principal de sus beneficios. Esta nueva estrategia de acumulación capitalista ha debilitado las organizaciones laborales y “vende” como libertad, innovación y modernización lo que es una reedición modernizada del taylorismo -que intentó cronometrar el tiempo de ejecución del trabajo e ideó un sistema de remuneración que recompensaba el esfuerzo del obrero para aumentar la producción de este modo-, pero sin ninguna de sus ventajas.

Señala Shoshana Zuboff, socióloga, profesora emérita en la Harvard Business School y escritora estadounidense, que  denominó a esta forma de funcionamiento de “capitalismo de vigilancia” y el canadiense Nick Srnicek – asociado con la teoría política del aceleracionismo y una economía posterior a la escasez- califica de “capitalismo de plataformas”.

Los datos generados en la actualidad por los usuarios en internet constituyen una materia prima y las plataformas son quienes extraen la plusvalía de ésta. Es una forma de reorganización del capitalismo que, ante la caída paulatina de la rentabilidad de la manufactura en los últimos años,  se volcó hacia los datos como un modo de mantener el crecimiento económico y la producción.

Capitalismo de plataformas

Nick Srnicek define a las plataformas como “infraestructuras digitales que permiten que dos o más grupos interactúen”, un nuevo modelo de negocios que ha devenido en un nuevo y poderoso tipo de compañía, el cual se enfoca en la extracción y uso de un tipo particular de materia prima: los datos. Las actividades de los usuarios son la fuente natural de esa materia prima, la cual, al igual que el petróleo, es un recurso que se extrae, se refina y se usa de distintas maneras.

Las plataformas dependen de los “efectos de red”: mientras más usuarios tenga, más valiosa se vuelve una plataforma. En un ejemplo: mientras más personas googlean, más preciso se vuelve el algoritmo de Google y más útil nos resulta. Ello significa, para el autor, que hay una tendencia natural a la monopolización.

Si bien suelen postularse como escenarios neutrales, como “cáscaras vacías” en donde se da la interacción, las plataformas en realidad controlan las reglas de juego: Uber, por ejemplo, prevé dónde va a estar la demanda y sube los precios para una determinada zona. Esta mano invisible del algoritmo contradice el discurso que suelen tener estas empresas, en el cual se definen eufemísticamente como parte de la “economía colaborativa”

 Srnicek postula cinco tipos de infraestructuras digitales: plataformas publicitarias (Google, Facebook), que extraen información de los usuarios, la procesan y luego usan esos datos para vender espacios de publicidad; plataformas de la nube (Amazon Web Services, Salesforce), que alquilan hardware y software a otras empresas; plataformas industriales (General Electric, Siemens), que producen el hardware y software necesarios para transformar la manufactura clásica en procesos conectados por internet.

También habla de plataformas de productos (Spotify, Rolls Royce), que transforman un bien tradicional en un servicio y cobran una suscripción o un alquiler, y de plataformas austeras porque carecen de activos: Uber no tiene una flota de taxis, Airbnb no tiene departamentos y Rappi no tiene bicicletas. El único capital fijo relevante es su software. Por lo demás, operan a través de un modelo hipertercerizado y deslocalizado

Una pandemia para imponer el modelo

Aquellas medidas transitorias llegaron para quedarse y a medida que se prolongó la pandemia, los nuevos hábitos se incorporaron en la cotidianeidad, en un proceso paralelo al ritmo que las empresas privadas crean, implantan y expanden sus diversas plataformas digitales (durante el año 2020 se decaplicaron respecto a 2019).

Esta nueva situación está permitiendo registrar, recopilar, almacenar, mercantilizar y analizar las respuestas de la mayoría social. Porque con la implantación y obligación de las TIC, todos nuestros movimientos dejan una huella electrónica, datos al desarrollarse gran parte de las relaciones, transacciones y gestiones de forma telemática.

La pandemia impulsó un inédito y profundo cambio social, un gran salto cualitativo (y cuantitativo) respecto de la situación previa: se está consolidando y legitimando la cuarta revolución tecnológica (4.0), de forma silenciosa (paradójicamente) y sin resistencia social. La pregunta es quien impulsó la pandemia…

Esta nueva revolución tecnológica tenía como objetivos la transición digital y ecológica, mientras las élites económicas y políticas, nacionales e internacionales creaban una gran expectativa de que traerá innovación, modernización, progreso, recuperación económica, equidad e igualdad, como forma de  legitimar las transformaciones que ellos mismos están impulsando.

Inmersos en la “comodidad” de nuestros dispositivos digitales (en especial nuestro teléfono más inteligente que nosotros) no tomamos consciencia de lo que está sucediendo y, por lo tanto, de la acción social.

En este mundo de plataformas se producen bienes de producción y consumo digital (smartphone, móviles y ordenadores, etc.) y energéticos (vehículos eléctricos, productos de aislamientos de edificios y hogares, etc.) sin avanzar hacia condiciones de producción y relaciones laborales y de consumo más humanizadas.

Mientras, la economía verde y digital fueran solo nuevos nichos de crecimiento para la expansión de las empresas privadas, y lo mismo está sucediendo progresivamente con otros ámbitos claves: la educación y la salud, incluida la mental. Pero hay contradicciones para llevar a cabo la transición digital y la ecología porque la primera impacta en la segunda.

Dicen las estadísticas que 5.320 millones de personas de los 7.800 millones de habitantes en todo el mundo usan un teléfono móvil, lo que equivale al 67% de la población mundial total. Pero, cuidado: no todo el capitalismo es digital. Todavía hay gente que cosecha los tomates, la papa o el arroz con sus propias manos, hay quienes recogen la basura, y trabajadores manuales, que no están frente a la computadora. ¡Están a salvo?

Si bien las plataformas digitales brindan la posibilidad de trabajar desde cualquier lugar, en cualquier momento y dicen que uno puede aceptar el trabajo que más les convenga, dedicarse a este tipo de labor también conlleva riesgos en relación con la situación de empleo, y el goce o no de ingresos adecuados, protección social y otros beneficios.

Pero las plataformas digitales continúan implantándose, de forma acrítica, absorbiendo todo el sector público, sustituyendo las relaciones y la prestación de servicios presenciales por las virtuales: una forma de privatización encubierta, al entregarse todo el proceso de digitalización a las grandes empresas privadas, nacionales y trasnacionales.

Carecemos en (casi) todo el mundo de soberanía digital –en un contexto de gran competencia mundial para la obtención y control de estos recursos– y haber privatizado, previamente, sus recursos estratégicos (en especial telecomunicaciones y energía), dejando al descubierto una situación de gran dependencia y vulnerabilidad respecto del ámbito privado, con trascendentes consecuencias políticas, sociales y culturales.

Una de sus principales características es la demanda de trabajo no regularizado, la falta de acceso a los derechos laborales y la transmisión a los trabajadores de costos, medios de producción y horas de inactividad. Para su consolidación, las empresas-plataforma han producido discursos de mistificación de este trabajo, bien difundido por los medios hegemónicos (en el mundo y en cada uno de nuestros países).

En ese contexto, por ejemplo, se trata a los trabajadores como emprendedores, la relación laboral como una asociación, la venta o el alquiler de la fuerza laboral como un reparto de recursos con finalidad social. No obstante, los movimientos de los últimos años han demostrado que los trabajadores no captan mecánicamente estos discursos y se han rebelado contra la precariedad del trabajo al que están sometidos.

Las lógicas capitalistas y competitivas se ven favorecidas por la precariedad creciente y el individualismo de quien concentrado en su pantalla busca. La normalización capitalista de la autoexplotación habla de «un yo que se explota», cuando es algo incentivado estructural y socialmente. Las nuevas versiones del capitalismo digital están en la tejido ideológico de un mundo acelerado, que incentiva la hiperproducción como motor y la deslocalización como norma.

Para la investigadora española Remedios Zafra resulta de gran ayuda la comparación entre capitalismo y patriarcado en sus formas de autoexplotación, en tanto el patriarcado se ha caracterizado justamente por convertir a las mujeres en agentes mantenedoras de su propia subordinación, proyectando imaginarios que las definen en relación a los hombres, favoreciendo su aislamiento en la esfera privada y alentando en ellas la vigilancia y control de otras mujeres, es decir reproduciendo un sistema de dominación.

Esperar… esperanza

Como reza el refrán tradicional, la esperanza es lo último que se pierde. De hecho, estaba en el fondo de la famosa caja de Pandora. La esperanza, entendida como una fe optimista en que las cosas saldrán bien, sin necesidad de apoyarse en ninguna base real, es una muestra más del enorme poder que la capacidad de fantasear nos otorga a los seres humanos. Sembrar esperanza es también una forma de manipulación: si uno no encuentra soluciones, le queda la esperanza

La palabra esperanza viene de esperar, del latín sperare (tener esperanza) y ésta de spes, esperanza. El verbo sperare nos dio esperar, desesperar y prosperar. En la Biblia, esperanza es la expectativa confiada y el anhelo de recibir las bendiciones que se han prometido a los justos (y que no han recibido), es la espera anhelosa de la vida eterna por medio de la fe en Jesucristo.

Estamos cansados de esperar, de la obligación de tener “esperanza”, que es el reconocimiento de que no hay (¿aún?) propuesta posible en este mundo. Sabemos que, en definitiva, nuestra esperanza no vendrá de las plataformas capitalistas: quizá pueda venir de los nadies, de los sin esperanza.

*Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Creador y fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE).

Fuente: https://estrategia.la/2022/11/09/el-nuevo-capitalismo-de-plataformas-y-vigilancia-el-adios-a-la-esperanza/

Comparte este contenido:

Universidad: Retos, Desafíos, Tendencias y Propuestas. Perspectivas para la construcción de Alternativas

Autora: Rose Mary Hernández Román

E-mail: rosemhernandezr@gmail.com

Resumen

El artículo sintetiza un estudio interpretativo de los retos, tendencias y desafíos de los sistemas educativos en el contexto de la cuarta revolución industrial. El propósito es analizar las amarras que han dificultado el desarrollo de un papel emancipador de la universidad latinoamericana para la construcción de la utopía posible de nuestros pueblos; así como develar los retos, desafíos, tendencias y propuestas visionarias de una nueva universidad en nuestra región. Para ello, se debió contrastar los diferentes enfoques y posicionamientos de las y los entrevistados, donde se apunta a generar respuestas a una sociedad plural, diversa y globalizada por los constantes cambios y tensiones sociales, entre otras. La metodología utilizada fue el análisis del discurso, un proceso altamente interpretativo a partir de la decodificación de entrevistas-sistemáticas logradas de 10 de los 60 participantes que estuvieron en la consulta donde el criterio de selección fue la proximidad de contextos geográficos. Los hallazgos encontrados arrojaron que en diferentes contextos internacionales y nacionales es necesaria la transformación y el desarrollo tecnológico y de competitividad académica y laboral, potenciando los mecanismos participativos universidad-sociedad, cumpliendo con los objetivos de desarrollo sostenible. Como reflexiones finales se deja urgente, que  existe el reto de construir una sociedad justa basada en el conocimiento; nueva visión de proyecto universidad con resistencia a currículo colonizador; el valor de la presencialidad, la lucha contra la lucración institucional, la arremetida contra la educación pública, el mercantilismo de la academia, universidades al servicio de la sociedad, presupuesto e inversión universitaria.

Categorías: Universidad, Retos, Desafíos, Tendencias, Mercantilización

University: Challenges, Trends and Proposals. Perspectives for the Construction of Alternatives

Abstrac 

The article synthesizes an interpretive study of the challenges, trends and challenges of educational systems in the context of the fourth industrial revolution. The purpose is to analyze the ties that have hindered the development of an emancipatory role of the Latin American university for the construction of the possible utopia of our people; as well as reveal the challenges, trends and visionary proposals of a new university in our region. To do this, the different approaches and positions of the interviewees had to be contrasted, where the aim is to generate responses to a plural, diverse and globalized society due to constant changes and social tensions, among others. The methodology used was discourse analysis, a highly interpretive process based on the decoding of systematic interviews obtained from 10 of the 60 participants who were in the consultation where the selection criterion was the proximity of geographical contexts. The findings showed that in different international and national contexts, technological transformation and development and academic and labor competitiveness are necessary, enhancing university-society participatory mechanisms, meeting the objectives of sustainable development. As final reflections, it is urgent that there is the challenge of building a just society based on knowledge; new vision of the university project with resistance to the colonizing curriculum; the value of presence, the fight against institutional profit, the attack against public education, the commercialism of academia, universities at the service of society, budget and university investment.

Categories: University, Challenges, Challenges, Trends, Commodification

A manera de introducción

Desde las universidades el Sur global persisten grandes desafíos y obstáculos para contribuir hacia la conquista de un desarrollo humano sostenible y sustentable. Si bien se reportan avances en la disminución de los niveles de pobreza en las últimas dos décadas, también se confirma la elevada incidencia de la pobreza absoluta en América Latina (CEPAL, 2018). Estos contextos se caracterizan por una importante diversidad de desigualdades: de ingreso, de tenencia de la propiedad, de género y étnico-raciales, entre otras; así como una gran insuficiencia en la gestión y distribución de recursos públicos destinados al financiamiento de las políticas sociales que ayuden a superar la pobreza y esas desigualdades sociales existentes.

Ante este escenario, las universidades públicas deben establecer sus objetivos, contenidos pedagógicos y agendas de producción de conocimiento centradas en las prioridades sociales. Al acercarnos al panorama universitario, encontramos una serie de preocupaciones y disputas con prioridades diferentes a las que aquejan nuestras sociedades. Por un lado, a partir de los años 80 del pasado siglo, surgen con mayor intensidad un paradigma neoliberal centrado en la economía y el capital humano, instrumentalizando discursos, políticas y prácticas pedagógicas universitarias.

Esta educación superior neoliberal reduce el modelo de universidad a las demandas del tejido productivo (Manzano-Arrondo y Boni, 2019), orientando sus objetivos formativos y la asignación de recursos a la transferencia de conocimiento para la mejora de los niveles de especialización y de los ingresos económicos (Walker, 2012). Este enfoque de la educación se caracteriza, a su vez, por poner el énfasis en el gerencialismo basado en criterios de eficiencia económica y competitividad, con el fin de asegurar una mejora en la productividad laboral y el desarrollo económico (García y Mirón, 2013), la empleabilidad (Suleman, 2016) y los indicadores bibliométricos globales (Wilson-Strydom y Walker, 2015). Para Serna (2007) este modelo de universidad interfiere y restringe su función como agente promotor de la superación de los desafíos socioeconómicos y ambientales, indispensable para el desarrollo de las presentes y futuras generaciones.

El hecho de que actualmente, las universidades en América Latina y el Caribe enfrenten problemas estructurales como: falta de recursos, burocracia, desactualización de programas de formación y académicos, entre otros; las coloca frente a demandas que implican novedosas formas de aprender, dialogar, comunicar, valorar y conectarse con una realidad que busca vías para una sociedad más equitativa, verdaderamente democrática y solidaria. Sin embargo, las respuestas que ha podido dar la universidad frente a esas demandas se han visto mediatizadas por crisis a las cuales ha tenido que enfrentar: crisis de hegemonía, de legitimidad y crisis institucional.

En consecuencia, se hace necesario discutir ¿de dónde viene esa universidad para poder plantear hacia dónde queremos avanzar?, ¿Cuáles son los retos, desafíos, tendencias y propuestas visionarias de una nueva universidad  para nuestra región?

Siendo así el cuestionamiento, se establecen como propósitos medulares, analizar las amarras que han dificultado el desarrollo de un papel emancipador de la universidad latinoamericana para la construcción de la utopía posible de nuestros pueblos; develar los retos, desafíos, tendencias y propuestas visionarias de una nueva universidad en nuestra región.

Como importancia de esta entrega, se tiene que, se hace necesario una universidad que desarrolle una conciencia crítica y una fuerza institucional que le permita consustanciarse con su carácter de ser un bien público, que esté comprometida con la construcción de un proyecto de país que busca acelerar el proceso de restitución del poder al pueblo. Los obstáculos son múltiples y diversos pero hay que avanzar hacia la universidad necesaria, hacia la utopía posible.

Metodología

En base a un estudio cualitativo, centrado en el análisis del discurso,  entendido por Soague (2006), «la que procura entender el lenguaje en uso, estudian sistemáticamente el discurso escrito, oral y audiovisual» (p.6). Por consiguiente, quienes participaron en esta investigación confluyen en ambientes con características comunes, siendo el escenario  las Universidades en distintas partes de América Latina y el Caribe y, en atención a entrevistas realizadas, correspondientes a: Consulta Social Internacional: «Universidad, retos, desafíos, tendencias y propuestas” realizadas desde el Centro Internacional  de Investigaciones Otras Voces en Educación entre los meses de febrero a mayo del año 2022, donde participaron más de sesenta (60) académic@s, investigadores y referenciales en la región, se la autora de este estudio consideró de manera significativa, incorporar las voces de diez entrevistad@s cuya evidencia se encuentra descargable en https://www.youtube.com/watch?v=Gn82Lm2OiqA, quienes se centraron en apuntalar los constructos principales que tejen la temática de este estudio científico. Por tanto, una vez decodificados los diálogos en formatos de textos legibles, se procedió a resaltar las ideas fuerzas de sus discursos, para posteriormente estructurarlas, cruzándolas de forma organizada para posteriormente, obtener en un todo coherente la síntesis  de las aportaciones.

Participan:  

Ángel Rodríguez (APPU, Puerto Rico): Entrelazar proyectos económicos-políticos-educativos.

“La falta de educación incide de manera directa en  la imposibilidad de desarrollo de político y económico y aumento y mantenimiento de la pobreza”, “Nueva visión de proyecto de universidad: resistencia al proyecto educativo norteamericano”, Recorte presupuestario universitario: “Ausencia de fondos a la universidad, detrimento sobre todos los procesos que se dan en la universidad”.

Reto en Universidades en América Latina: Presencialidad: “Como nivel organizativo permite el proceso desde el contacto personal para las acciones políticas necesarias que modifiquen lo hegemónico”.

Ideas Fuerza: Nuevo proyecto de Universidad, Resistencia educativa, Hegemonía

Nora González Chacón (OMEP, Costa Rica): Modelo universitario latinoamericano y el Derecho Humano a la Educación

Educación Superior: “Reflejo del sistema político dominante”,  “La universidad latinoamericana debe verse en su propio proceso histórico”,  Contexto universitario latinoamericano actual: “Reúne características políticas propias de hace 100 años atrás, Inestabilidad del profesorado, falta de presupuesto, intromisión del poder político de la Asamblea Legislativa para imponer una agenda educativa en las universidades, control del presupuesto universitario”. “Las crisis de las universidades públicas responden a una desarticulación entre la ideología y la práctica en nuestras regiones”, Principales amenazas al Derecho a la Educación: “Reducción de presupuesto, privatización, aumentos de aranceles, universidades que lucran”.

Retos en Universidades en América Latina: “Democratizar las universidades, actuar sobre las desigualdades que se reproducen en todos los niveles del sector educativo. Gratuidad educativa, igualdad de oportunidades y no discriminación social. Establecer como mandato para los Estados nacionales a la Educación universitaria como Derecho humano”.

Ideas Fuerza: Sistema político dominante, Democratización universitaria, Desigualdades

Juan Borjas (FEPUPE, Ecuador): Las políticas neoliberales han provocado cambios radicales y negativos en la política y economía del mundo.

“Disminución de ingresos, deterioros de las condiciones de vida de la mayoría del planeta y el atentado contra los derechos económicos, sociales y políticos alcanzados por la humanidad mediante las luchas sociales”, “Muchos avances de la ciencia y la tecnología alientan la acumulación desmedida y acelerada”, “Los organismos multinacionales han impuesto una disciplina vertical, buscado funcionalizar las universidades públicas, limitando la autonomía universitaria”, Entramado Burocrático: “Reduce la capacidad de investigar y  frena el desarrollo del pensamiento crítico, sumisión y empobrecimiento docente”, Reducción de presupuesto universitario: “Reducción sustantiva de la universidad”. Participación de la comunidad universitaria: “Participación en la toma de decisiones en los organismos colegiados, consejos directivos y universitarios, elección de autoridades”

Reto en Universidades en América Latina: “Desarrollo de una ciencia y consciencia crítica que ayuden a la construcción de sociedades radicalmente democráticas”, “Lograr una organización social económicamente sostenible”, “Integración en condiciones de igualdad de las universidades de América Latina y el mundo”. 

Ideas Fuerza: Deterioro de las condiciones de vida, Autonomía universitaria, Desarrollo científico

Maruja Romero Yépez  (FOVEDE, Venezuela): Educación a distancia

“Las universidades han estado empeñadas en un proceso de transformación”, “Las universidades venezolanas presentan serios problemas de funcionamiento: gremiales, organizacionales, de participación, de estructura administrativa y académica”, “La transformación se refiere dentro de los criterios que impone la realidad existente”, “Para entrar en la transformación universitaria deben tomarse aspectos esenciales: cambios en las formas de pensar, cambios de valores y prácticas establecidas que se han hecho rutinarias en las universidades”, “La transformación no es técnica como muchas universidades lo piensan”, “Es necesario superar las carencias tecnológicas”, Transformación: “significa cambio epistémico en la educación”, “El concepto de comunidad universitaria debe ser revisado y formular una teoría que nos ayude a entender el contexto social, histórico y político en el cual la universidad se ha desarrollado y los problemas que confronta”. “La educación a distancia tiene necesidades de planteamientos actualizados sobre su modelo educativo que responda a la realidad actual”.

Reto en Universidades en América Latina: “Armonía con los desafíos”, “Globalización de la economía y la cultura vs. el Desarrollo endógeno y la  participación multidireccional del pueblo, el conocimiento tecnológico en rápida evolución”, “ la información y la comunicación que modifican los conceptos en el tiempo y espacio”, “Necesidad de una educación permanente a lo largo de la vida”, “Respuestas educativas para las personas excluidas del sistema de educación superior”.

Ideas Fuerza: Desarrollo endógeno, Globalización, Carencia tecnológicas, Transformación

Roberto Aguilar (Bolivia): La universidad en su contexto social

“La Conferencia Mundial de Educación Superior impulsada por la UNESCO tiene un gran vacío de participación de los actores  sociales y directos de las universidades”, “La esencia de la universidad lleva al recuento de un conjunto de categoría de palabras que sintetizan profundidad en su concepto e historia de construcción”, Campo de la universidad: “Campo de la educación como proceso social.  Es el campo del conocimiento, de la ciencia, de la academia, de la investigación, en el contexto de recuperar todo lo que construyó la humanidad y que lo proyecta hacia el futuro en términos de transformación de la propia sociedad”, Esencia de la universidad: “Sentido histórico social”, “Las luchas universitarias buscan conquistar espacios de emancipación y para el desarrollo científico, tecnológico, social”, “El movimiento universitario debe  reafirmar la  concepción que, la universidad juega un democrático,  rol revolucionario, rol popular”, “Las propuestas orgánicas de transformación deben estar compaginadas con los movimientos sociales”, “En Bolivia se juega un rol de exigente al estado para que responda a las necesidades de la universidad para que, la universidad responda a las necesidades de la sociedad”.

Reto en Universidades en América Latina: “La validación del sector privado como eje central de la educación superior en el mundo es riesgoso”, “La universidad y la educación no pueden ser bethas económicas que reproduzcan lo que el neoliberalismo, en década de los ochenta, resultó como desastroso para los movimientos universitarios”.

Ideas Fuerza: Transformación, Movimientos universitarios, Luchas universitarias

Francisco López Segrera (Cubano-Español y ex director del IESALC-UNESCO): Transformación de la sociedad.

Las habilidades del siglo XXI yo las divido en tres categorías: las que están vinculadas al aprendizaje y a la innovación como la creatividad y el pensamiento crítico, las vinculadas a la información a los medios y a la tecnología como es la alfabetización informacional y las habilidades para la vida y la carrera que implica la inteligencia emocional. Hoy en día el graduado universitario tenemos que ser capaces de dotarlo con una serie de herramientas y no confundir educación que enseña valores, con simple entrenamiento que lo que enseña son aptitudes. Que tienen que enseñaros los profesores en esta era del impacto de la automatización, de la inteligencia artificial en el empleo: pensamiento crítico, colaboración, creatividad, comunicación, resiliencia, a no darse por vencido y saber lidiar con el cambio, desarrollar la inteligencia emocional. Hay que además hacer estrategias de recaudación de fondos, hay que hacer un marketing con los alumnos con posibles financiadores, crear asociaciones de exalumnos, tener un profesorado del más alto nivel e impartir cursos de posgrado en idioma inglés yo siempre le digo a mis alumnos no hubiera tenido ningún ninguno de los cargos internacionales que he tenido.

Reto en Universidades en América Latina Si nosotros no somos capaces de hacer una transformación profunda de la educación superior en nuestros países el tema de desempleo va a ser algo dramático.

Ideas Fuerza: Inteligencia Emocional, Empleo, Pensamiento crítico

Fernando Buen Abad (semiólogo argentino-mexicano): Decodificación de la comunicación

Estoy convencido de que en América Latina, para ser más preciso en México y por supuesto en Argentina y en varios otros lugares debemos reflexionar sobre el problema del burocratismo dentro de las universidades y fuera de las universidades, el burocratismo académico que en algunas de sus corrientes ha producido una especie de esclerosis teórica metodológica que el que vemos en un paisaje general.

La burocracia interna que está impidiendo el desarrollo de experiencias o experimentos teóricos metodológicos que permiten revolucionar la dinámica comunicacional entre los estudiantes, los profesores y en todo caso todas las formas de producción del conocimiento.

Reto en Universidades en América Latina: Es urgente considerar que hoy por hoy las herramientas para la comunicación de las problemáticas dentro de las aulas, las herramientas para la comunicación del conocimiento y las herramientas para la absorción del conocimiento y toda esta dinámica conjunta están quedándose retrasadas por el peso brutal de formas de tramitar la educación impregnadas por el burocratismo. Los presupuestos no están a la altura de la necesidad del conocimiento colectivo, los financiamientos están retrasados y están orientados y algunos de ellos están determinados por tendencias y favoritismos de tipo incluso puramente mercantil, no hay transparencia suficiente sobre el financiamiento en la educación, hay  incluso episodios de alta corrupción en los universos educativos.

La pregunta es si estamos produciendo una masa de conocimiento, si estamos produciendo la multiplicación del saber, la producción social del saber para el beneficio de todos o solamente para el estrellato de algunos cuantos. Es urgente una buena una buena reflexión crítica y profunda.

Ideas Fuerza: Conocimiento colectivo, Financiamiento, Producción social

Stela García (docente e investigadora paraguaya): Universidad y Sociedad

 Hay muchos procesos tardíos que hoy le dejan a la universidad en un lugar donde tiene muchos más desafíos a pesar de sus de sus logros.  Recién las últimas décadas podemos hablar de que la agenda universitaria introduce de forma importante distintos temas que lo vinculan más con la sociedad, que hacen que la universidad salga de sus muros, que investigue, que tenga proceso y proyectos de extensión.

Entre los retos y desafíos Paraguay necesita la apertura de muchas carreras, en todas las ciencias, en todos los grupos de ciencias, en las ciencias naturales, en las ciencias sociales, etc todas y necesita correrse un poco de este auge ingenieril que hay en este momento, en todos los campos orientados al hacer que se conecta mucho más con las demandas del mercado. Necesitamos que la universidad también se conecte con el pensar, el producir, el problematizar y sobre todo develar distintos aspectos de la realidad que no están develadas críticamente, que no están mostradas académicamente y por tanto tampoco se puede dar este proceso de que el saber popular dialoga y se alimente de lo que la academia produce. También hay retos respecto a la investigación, hacen falta seguir incentivando y conquistando más políticas de investigación.

También creemos que es un reto y un desafío instaurar más miradas críticas y de veladoras de la desigualdad que hay en Paraguay, existen desigualdades que son feroces que necesitan ser problematizada desde todas las aristas, desde todas las profesiones, desde todos los campos del conocimiento.

Hace falta que la universidad intensifiquen miradas críticas respecto a la relación entre la universidad y el mercado, es indiscutible que en la universidad formamos profesionales que deben ser competitivos en ámbitos laborales, sin embargo que el mercado dirija los destinos políticos académicos de la universidad o que el mercado se constituya en el eje perdiendo todo sentido humanista propio del neoliberalismo que lleva cuatro décadas o más en la región y por los procesos tardíos lleva aproximadamente tres décadas en Paraguay ,esto es inadmisible. Todo lo que implica el debate universidad mercado estado también necesita tener como más insumos críticos desde la universidad, desde todas las esferas de la vida social pero fundamentalmente desde la universidad.

Reto en Universidades en América Latina: Finalmente nos parece que la universidad tiene como un imperativo ético, de demostrar, de develar, contar, problematizar y ofrecer insumos para nuevas propuestas que haya lejos pueden ser propuestas anti-patriarcales, anticapitalistas, anticoloniales, propuestas mucho más humanizadoras y humanizantes como las requeridas hoy día.

Ideas Fuerza: Anti-patriarcado, Anti-colonización, Anti-capitalismo

Ivania Padilla (Hondureña): Actores subalternos

Como comunidad universitaria a todos y todas nos toca hacernos preguntas fundamentales, que son preguntas que se han venido haciendo muchas y muchos pensadores a nivel latinoamericano, sobre todo en estos últimos dos años en donde la pandemia ha irrumpido en los procesos educativos y son preguntas relacionadas con la importancia que tiene el conocimiento que estamos creando en nuestras universidades y hacia dónde está dirigiéndose ese conocimiento, hacia quiénes y a quiénes estamos dejando por fuera en la creación de ese conocimiento. Si estás siendo parte es de conocimiento de soluciones de alternativas ante esta situación actual o por el contrario, si el conocimiento que se está creando desde nuestras universidades está más bien ahondando más estas brechas y la desigualdad que se vienen dando. Es uno de los principales desafíos que tenemos como universidades, como vincularnos con estos actores sobre todo actores subalternizados y como eso provoca una transformación hacia adentro de nuestras universidades, apoyándonos en ese cambio necesario: de una universidad iluminista que solo transfiere conocimiento a una universidad que aprende a la vez que enseña.

Los principales pasos que hemos dado fueron:

  1. la problematización del vínculo universidad sociedad, en el caso nuestro por ejemplo en Honduras pasamos por un proceso de reforma hace muchos años para incorporar estas características dialógicas y críticas de las relaciones universidad sociedad, reconociendo que la relación universidad-sociedad forma parte de las funciones académicas sustantivas junto a la docencia y la investigación en nuestra universidad
  2. la integralidad de las funciones sustantivas, es decir cómo lograr esa real integralidad en la práctica cotidiana académica en donde nuestros estudiantes, nuestras estudiantes, puedan pasar por estas experiencias en contacto directo con la realidad y sus problemáticas en vínculo con actores sociales y puedan aprender de estos escenarios en esas aulas vivas, en esa salida del territorio y en ese vínculo concreto con actores sociales que están hoy por hoy creando conocimientos.
  3. reconocer la necesidad de establecer alianzas estratégicas tanto con el estado con la sociedad civil y a lo interno de nuestras universidades reconocernos en clave interdisciplinaria, cómo podemos vincular los de manera interdisciplinaria en la resolución de estas problemáticas.
  4. priorizar acciones de intervención en territorios con clave ética y de solidaridad, además de poder contribuir en estos espacios estas intervenciones deben de ser desde la perspectiva además del conocimiento desde la perspectiva de la solidaridad.
  5. Mantener espacio de participación en donde las universidades podemos aprender unas de otras de cómo venimos trabajando, tanto en territorio y los desafíos que se nos van planteando. La comunicación es clave, los dispositivos de comunicación son fundamentales para poder trabajar un enfoque de este tipo.
  6. La asignación del presupuesto de parte de las universidades para este tipo de acciones, porque fuera del aula se requiere muchísima logística para trabajar en territorios, para la participación en estas aulas vivas de las cuales nosotros apostamos para poder integrar las funciones sustantivas.

Reto en Universidades en América Latina: La tarea que se asigna a nuestras universidades públicas en estos tiempos no es menor y por ello se requiere de la contraparte de la sociedad y que la sociedad reconozca en nuestras universidades estas instituciones comprometidas y que nos aporten también a garantizar como sociedad que para cumplir con estas funciones esenciales como universidades necesitamos que nuestras universidades conserven su autonomía y que además reciban todo el apoyo de los porque de esa manera cómo vamos a poder contribuir a la transformación social.

Ideas Fuerza: Autonomía, Conocimiento, Sociedad y Universidades, Instituciones comprometidas, Presupuesto

Raúl Gil (Docente e investigador Uruguayo). Autonomía Universitaria

 No hay que olvidarse queridos compañeros que la autonomía está bajo un proceso de resignificación que el neoliberalismo de segunda generación ha jugado con mucha habilidad, es decir el estado es un espacio público conserva ese nombre pero administrado y dirigido con una concepción completamente empresarial y con un diseño de gestión. De hecho eso es tan importante que están redefiniendo las condiciones del trabajo docente estableciendo que una de ellas que no teníamos es la responsabilidad de la gestión. Cambios de gobierno, nuevos pactos legales sobre cuáles son las condiciones que estructuran el trabajo y luego viene la transformación institucional, la transformación curricular y los cambios laborales.

Una de las tensiones curriculares es la hipótesis de que usted formará gente o para una economía que tiene una amplia diversidad interna o de lo contrario está formando para exportarlos al mundo no parece tener muchas otras posibilidades al respecto.

Las transformaciones institucionales señalan cosas muy interesantes en Uruguay que es la proliferación rizomaticas de instituciones haciendo cosas distintas creo que aquí hay que pensar seriamente y observar con cuidado si algunas de estos cambios están ajustados a que estructuralmente las modificaciones de los cambios de gobierno cambien las disposiciones estructuradas de las instituciones gubernamentales.

Reto en Universidades en América Latina: Los nuevos planes de estudios en las nuevas formaciones y carreras que se presentan asegurarán una rápida inserción en el mercado laboral. Pero lo que nunca aparece es la formación académica y el cometido, es decir las consecuencias en la cultura de una población donde todo se organiza a partir de una rápida y generalizada racionalidad instrumental organizada sobre logros no está ya más organizadas sobre una comunidad de ciudadanos como era el viejo criterio del liberalismo de fines del siglo 19 principios del siglo XX que estuvo orientado a formar ciudadanos miembros de una comunidad política, lo que estamos formando son otras cuestiones.

Los planes de estudio para la formación de profesores y maestros no señalan y enfatizan una formación de carácter académico por asignaturas sino esencialmente una cuestión interdisciplinaria sin siquiera discutir el campo epistemológico de que se dice sobre eso y sí que sí y asumiendo que una postura es una cuestión que ya está laudado no lo está.

Todos estos cambios además devienen en una reducción presupuestal sustantiva de los recursos tanto para la universidad como para la formación docente, en esas condiciones hay que observar qué es lo que legitima estos procesos, unas legitimaciones centrales es enseñemos aquello que el mercado de referencia requiere, por lo tanto estamos frente al agotamiento del aparato institucional vinculado a otras formas académicas y la divulgación de la cultura general para toda la población sustituida por otras cuestiones.

Ideas Fuerza: Divulgación de la cultura, Epistemología, Reducción presupuestal, Mercado laboral, Cambio laboral

 

Diagramación de las ideas fuerza

Fuente: Autora del estudio (2022)

 

Resultados y discusión de los hallazgos: Interpretación global de las ideas fuerza

El asunto de la educación superior en América Latina es uno de los más complejos y difíciles que se plantea hoy día, teniendo en cuenta sus realidades  y problemas que, por implicaciones en primer orden es un tema político. Un rango que tipifica a todas las universidades de la región. En esta perspectiva, la crisis estructural del capital marca un nuevo momento en la Educación Superior, concretamente en lo que refiere a la universidad y al visionar un proyecto universitario, su análisis es fundamental para comprender la regresión educativa actual y sus posibles relaciones con los proyectos societarios en curso: represivos y asistenciales, con el desempleo estructural masivo como base de la organización social de las últimas cinco décadas.

Como génesis de esta problemática, conviene hacer hincapié en que la universidad ha sido siempre una entidad productora de la cultura hegemónica, y por tanto, un ente de reproducción social del sistema imperante (Aibar, 2018). Un aspecto importante a resaltar es que, en la actualidad el potencial de creación de saber, conocimiento y cultura de las universidades está siendo atrapado por los intereses empresariales, lo que degenera en que la institución favorezca una mayor desigualdad de oportunidades y una más que evidente falta de democracia.

Este sistema actual de dominación y, en el ámbito universitario, se ve reflejado no solo en la precariedad laboral, la cual puede formularse en función de cuatro grandes dimensiones: la inestabilidad en el empleo, la vulnerabilidad, los menores ingresos, y la menor accesibilidad de la población afectada a prestaciones y beneficios sociales. Esta categoría en cuestión permite incorporar de manera parafraseada la opinión de Mezzadra&Neilson (2016) quienes consideran al neoliberalismo como una actualización de las estrategias de las clases dominantes, con el objetivo de implantar un régimen de expoliación de carácter global en una nueva forma y expresión.  En este régimen, se integran las dinámicas y marcas históricas de precarización, racismo, vulnerabilidad y violencia normalizadas en los regímenes de poder capitalista, cuyo objetivo central es la expansión de los “límites del capital” y la generación de sociedades, relaciones sociales, subjetividades, acordes a la reproducción de la monetarización y mercantilización de la vida.

Es por esto que, nos encontramos con la realidad de trabajadores más horas que cumplir, profesores/as contratados/as a tiempo parcial que ejecutan el mismo número de horas que quienes tienen cargo fijo recibiendo un sueldo netamente inferior, imposición de un perfil docente-investigador con clara intención de una, execrable, práctica de la venta del conocimiento y, a la vez, la privatización de los sistemas de educación superior, fenómeno no aislado, sino producto de las políticas de los gobiernos que siguen políticas educativas dictada por los organismos internacionales, FMI (Fondo Monetario internacional), BM (Banco Mundial) y, la realidad es que, hasta ahora, los resultados para los países de América Latina en lugar de generar crecimiento, aumentaron la desigualdad.

Sin embargo, este esquema basado en el neoliberalismo, centrado en el sistema económico globalizado, constituye un reto para la educación superior y, para nuestras universidades. Hoy en día, la nueva relación entre las universidades y los poderes del Estado deberá aprender de las dolorosas lecciones desprendidas de las luchas y avatares contra el capitalismo, el neoliberalismo y a favor de la autonomía. La región en su conjunto enfrenta el reto de desarrollarse, con tasas de crecimiento altas y sostenidas, así como el de impulsar políticas públicas democráticas y solidarias que favorezcan la redistribución de la riqueza para combatir la terrible desigualdad social. América Latina necesita cambiar sus paradigmas para el desarrollo y la inclusión; por lo que habrá de corregir las distorsiones del mercado ocasionadas por el modelo de desarrollo imperante. Se trata, entre otras cosas, de que se restablezcan los nexos entre la educación superior y el trabajo, deteriorados por el curso que ha seguido el mercado laboral.

Desde ese matiz, las Universidades de la región, hoy día tienen entre sus retos y desafíos:

Defensa y promoción de la autonomía. Un asunto crucial para los nuevos tiempos y, que debe ser garantía de la independencia política y administrativa frente a factores externos. La autonomía debe integrar y trascender la realidad sistémica para crear conocimiento y trasformar su contexto multidimensional.

Carácter laico. Su compromiso con la verdad científica la obliga a una responsabilidad ética por la libertad de conciencia, en la defensa del derecho que tiene cada individuo de formarse su propia visión del mundo, sin imposiciones doctrinarias, alejada de fanatismos y fundamentalismos.

Responsabilidad social. Urge superar la priorización de la educación superior como forma de desarrollo sostenible desde la educación y las ciencias, ligados a los ODS, así como a los Planes de Desarrollo Estratégico de cada país, a los rediseño de los procesos de aprendizaje con base en la innovación colectiva, utilizando todos los recursos que brindan las comunidades del conocimiento para la multiplicación de escenarios de aprendizaje e investigación-acción no tradicionales, multi-actores, abiertos a los desafíos y oportunidades territoriales, por lo cual se requiere un nuevo modelo de gestión  que les empodere  y concientice sobre sí mismo y el  entorno, enfrentado así un doble reto: atender los problemas y necesidades para el desarrollo nacional, al mismo tiempo que los problemas de orden global que lo afectan.

Investigación. Otro gran desafío para las universidades latinoamericanas consiste en mantenerse como el sitio donde avanzan la ciencia y la tecnología, además de, en el corto plazo, formar investigadores y realizar investigación de alto nivel. Eso requiere que las universidades cuenten con las condiciones apropiadas para producir conocimiento y académicos que lo produzcan, lo que está asociado al financiamiento, público y privado, y al uso del conocimiento por parte de quien tenga interés en él.

La transmisión del conocimiento es una realidad que rebasa las fronteras nacionales e institucionales, y que estimula la investigación; de ahí que para la universidad implique estar conectada con su producción a escala mundial. En este sentido, la universidad está cambiando hacia un espacio donde circulan flujos de conocimiento provenientes de diversos orígenes, que son aprovechados para elaborar conocimiento propio. La universidad es la única institución social que puede desempeñar este papel de recibir, procesar y producir conocimiento pertinente, al mismo tiempo, para el campo científico y para la sociedad en su conjunto.

Generación de conocimiento, capital humano y capacidad tecnológica. Estos son los tres elementos indispensables para que países como los nuestros consigan más altos niveles de bienestar y compitan con otras naciones en el campo internacional. La combinación de estos elementos supone que los resultados de la investigación se orienten a resolver los problemas del entorno social y a impulsar el desarrollo tecnológico local y la innovación.

Generar innovación para el desarrollo. La universidad debe irradiar, hacia su interior y hacia el conjunto de la sociedad, una cultura de la innovación y aprecio por el quehacer científico. Esto estimulará la creatividad para la transformación cualitativa de los procesos, productos y servicios necesarios para el desarrollo económico. Especialmente, debe establecer una colaboración estrecha con las pequeñas y medianas empresas, que reúnen el mayor volumen de empleo, con el fin mejorar la calidad de su personal y crear proyectos de innovación sustentados en el conocimiento. Es necesario estimular la solicitud de patentes, la transferencia de conocimientos y los servicios tecnológicos.

Afrontar las tensiones con el mercado. Otro de los retos que tienen las universidades es sortear las tensiones entre el Estado y el mercado. Las relaciones entre ambos deberían organizarse bajo el principio de cooperación, aceptando que la rectoría de la política educativa nacional le corresponde al primero. Para salvar las posibles tensiones, los gobiernos deberían tomar la iniciativa de hacer una convocatoria amplia para acordar un programa de colaboración con las instituciones académicas y las empresas. La debilidad de este vínculo es un obstáculo de primer orden para estimular una economía basada en el conocimiento.

Desarrollo de una comunidad universitaria mundial. Para ello es indispensable hacer alianzas estratégicas, conformar redes académicas, desarrollar programas conjuntos de investigación, impulsar la formación de currículos integrados con contenidos globales, de manera que ello nos conduzca a conformar en el futuro una comunidad universitaria mundial. La cooperación internacional entre las universidades debe contribuir a un mayor entendimiento entre las culturas y respeto a la diversidad y a la solidaridad humanas. Esto representa una oportunidad de encontrar soluciones colectivas a los serios problemas que nos aquejan.

Reforzamiento de la movilidad estudiantil y académica. Es importante enfrentar con creatividad el desafío de la movilidad estudiantil y académica, con el diseño de instancias eficientes de gestión, así como mediante adecuaciones normativas que atiendan todas las dimensiones implicadas en estos intercambios, especialmente el reconocimiento de los periodos de estudio. Desde sus inicios, las universidades han vivido procesos de movilidad de estudiantes y académicos. Con la internacionalización esto se ha profundizado, por ello habrá que reforzar el reconocimiento curricular.

Se considera posible, deseable e imperativo establecer un espacio Latinoamericano del Conocimiento. Tenemos antecedentes comprobados y una serie de organizaciones capaces de contribuir a la colaboración horizontal entre las universidades.

Síntesis conclusiva y algunos aportes a la educación universitaria 

¿Cuál queremos que sea la universidad latinoamericana del siglo XXI?, ha sido la pregunta central que rigió el análisis del discurso.  Por tanto,  es posible dar algunas ideas sobre las orientaciones finales en pro de mejorar la realidad crítica dentro de las instituciones universitarias en América Latina y el Caribe, más aún, luego de las condiciones estructurales en que se ha presentado durante periodos históricos que abarca los últimos lustros del siglo pasado y los últimos tres de este siglo. Durante este tiempo, las universidades de nuestros países, por cierto, han experimentado cambios en las políticas públicas de los gobiernos y en los efectos de la globalización sobre la academia.

Si bien es cierto que las grandes instituciones públicas han mantenido diferencias y tradiciones universitarias propias en cada uno de los países que componen esta región del continente, también han mantenido semejanzas en cuanto a historia y al reconocimiento de que la universidad latinoamericana cumple propósitos académicos y, al mismo tiempo, compromisos con la sociedad y el Estado, que la hacen ser una institución visible e indispensable, y en este sentido específica, en distintas esferas de la sociedad.

En América Latina estamos, todavía, en un momento de cambios y reformas institucionales para darle viabilidad a nuestras sociedades, dentro de las corrientes globalizadoras, que impulsan transformaciones en casi todos los órdenes del espacio social. Sin duda, en este proceso, la universidad juega un papel de primordial relevancia y requiere sortear enormes desafíos, como los que enunciamos en el apartado anterior, para cumplir mejor sus propósitos, responsabilidades, y compromiso social.

La universidad de estos tiempos, en la región, ya no está dedicada a otorgar títulos, acceso a profesiones liberales para abrir oportunidades de movilidad social y fortalecer a las clases medias, además de satisfacer las expectativas de las élites. Hoy, la docencia se ha multiplicado a cientos de carreras y se han tenido que construir y desarrollar programas de posgrado para responder a las demandas de sociedades más complejas; entre ellas, la de formar personas que posean, apliquen y puedan producir conocimiento.

Los nuevos desafíos de la universidad parten de las políticas de desarrollo que  necesariamente deben establecer los gobiernos junto a sus ciudadanías. Por lo que hace necesario una universidad  en conjunto, que desarrolle una conciencia crítica y una fuerza institucional que  permita consustanciarse con su carácter de ser un bien público, que esté comprometida con la construcción de un proyecto de país que busca acelerar el proceso de restitución del poder al pueblo. Los obstáculos son múltiples y diversos pero hay que avanzar hacia la universidad necesaria, hacia la utopía posible.

De ahí que, el desarrollo y la participación de los países latinoamericanos en el concierto internacional exigen no sólo el crecimiento y fortalecimiento del sector productivo, sino también la creación de sistemas nacionales de innovación que le den vitalidad. Tales sistemas incluyen a la educación superior, como un factor de primera importancia, y particularmente a aquellas universidades públicas que han creado, a lo largo de muchos lustros, áreas de investigación en ciencias y humanidades que son claves para producir y distribuir conocimiento acorde con los fines nacionales, que no son sólo económicos, sino también políticos; esto último dada la necesidad de gestar ciudadanía, mejorar la calidad de la democracia, manejar las nuevas formas de gestión de lo público y enriquecer el patrimonio cultural.

En la discusión actual de la universidad latinoamericana hay un eje de cambio que está orientado por los escenarios tecnológicos a escala mundial. Tales escenarios se circunscriben a la necesidad imperiosa de que las universidades cuenten con un amplio desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación para entrenar a los estudiantes en su uso y para educarlos en los avances de las ingenierías que las nutren. Pero también porque la difusión del conocimiento y la educación superior tienen, hoy en día, en dichas tecnologías la posibilidad de crear plataformas docentes con las que se puede llegar a amplios públicos de estudiantes y de profesionistas que requieren renovar sus conocimientos. La universidad virtual, desde las instituciones universitarias, es una realidad poderosa para educar y satisfacer demandas específicas de la población en materia educativa, con lo cual la sociedad gana competitividad. A través de las tecnologías de la comunicación, las universidades de los países latinoamericanos pueden iniciar la construcción de un espacio común que sirva para transmitir conocimiento a las comunidades docentes, pero también a la comunidad científica. Sin duda, por esta vía, puede agilizarse e incrementarse el diálogo académico.

La educación superior latinoamericana de hoy se está construyendo en un entorno de competencia entre sistemas educativos, cuya capacidad y diversidad responden a situaciones nacionales que ordenan su organización y funcionamiento de acuerdo con políticas de Estado que pueden variar según el régimen de gobierno. Por tal motivo, pensar en el futuro de las universidades latinoamericanas supone entenderlas como parte de sistemas nacionales de educación superior y como parte de redes internacionales.

La educación superior, en países como los nuestros, debe focalizarse como uno de los ejes principales en las estrategias de desarrollo económico. Entre otros motivos, porque el crecimiento requiere una fuerza laboral mejor formada y calificada, mayor producción de conocimiento adecuado a las circunstancias de cada sociedad en particular, investigación aplicada y transferencia de tecnología. Se reconoce, además, que la educación universitaria tendrá cada vez mayor demanda porque es un factor para que las personas tengan una mejor ubicación en el mercado laboral, que en el corto plazo continuará segmentado y con un alto nivel de competencia por los puestos de mejor rendimiento económico en la estructura ocupacional.

Será menester, para tales fines, que en las universidades públicas de la región se defina como prioridad tener una comunidad académica y científica sólida, que soporte el desarrollo institucional universitario, con las mejores condiciones laborales posibles, y cuya libertad de pensar y hacer esté cobijada por la autonomía. Esta última servirá para que la multiplicidad de demandas emergentes a la universidad, y sus intercambios con todos los sectores de la sociedad, resulten benéficos a las partes.

Vivimos, entonces, en una situación donde al Estado le toca formular políticas públicas de educación superior teniendo en cuenta no sólo las necesidades nacionales, sino también la internacionalización de este nivel educativo. Algunas de estas políticas hay que reinventarlas para que las universidades y los sistemas de educación superior vayan adaptándose a los cambios educativos y científicos en el contexto global, que impactan lo nacional y lo local. Además, al Estado le toca ubicar tales políticas en la presencia de actores y proveedores, tradicionales y nuevos, de servicios educativos. Las fuerzas del mercado en la educación superior, y sus tensiones con el Estado, son de gran importancia para analizar la dinámica de la educación superior—en cada país y en su conjunto— de aquí en adelante.

 

Referencias

García y Mirón (2013).  La empleabilidad. España: Excelencia

Manzano-Arrondo, V. y Boni, A.(2019). Despertando la universidad: propuestas desde el desarrollo humano. En A. Casado da Rocha (Ed.) Cultura Dual: Nuevas identidades en interacción universidad-sociedad. Madrid: Plaza y Valdés

Serna (2007) este modelo de universidad interfiere y restringe su función como agente promotor de la superación de los desafíos socioeconómicos y ambientales, indispensable para el desarrollo de las presentes y futuras generaciones.

Soage, A. B. (2006) «La teoría del discurso de la Escuela de Essex en su contexto teórico», Círculo de Lingüística Aplicada a la Comunicación

Suleman (2016) y los indicadores bibliométricos globales.  España: Universidad de Barcelona

Walker, D.  (2012). El aprendizaje a partir de la experiencia. Interpretar lo vital y cotidiano como fuente del conocimiento. Madrid: Narcea

 

 

Comparte este contenido:

Escenario Económico Internacional del 10/11-08-2022 Temas centrales: AIE, Petróleo, Inflación, EEUU, Rusia, China, Europa, Rublos, Argelia

Observatorio Latinoamericano y Caribeño de Organismos Multilaterales, Bancas de
Desarrollo, Corporaciones Tecnológicas y Filantropía

Escenario Económico Internacional del 10/11-08-2022

Temas centrales: AIE, Petróleo, Inflación, EEUU, Rusia, China, Europa, Rublos, Argelia

AIE afirma que en 2023 crecerá la demanda de petróleo: la agencia internacional de energía indica que la demanda de petróleo en 2023 subirá unos 2,3 millones de barriles por día.

Caen los inventarios mundiales de crudo: una caída de 5 millones de barriles ha estimado la AIE la caída de los inventarios de petróleo.

Argelia reduce 42% exportación de gas a España: durante el 2022 Argelia pasó de ser el primer exportador de gas a España al cuarto lugar.

India está adquiriendo monedas asiáticas: se debería a la necesidad de comprar petróleo y gas proveniente de Rusia.

Hungría paga en rublos gas ruso: Hungría paga en Rublos la energía de Europa a Rusia, ante las demandas que este fuera el mecanismo de pago.

China descubre petróleo en el Oeste del país: generaría los insumos suficientes para abastecer el mercado Chino durante 2 años.

Reino Unido plantea recortes de energía durante el mes de enero: los sectores afectados serían la industria y los hogares.

Sequía en Europa deja 80.000 millones de dólares en Europa: la sequía de los ríos estaría afectando considerablemente la economía Europea.

Foxconn crece 12%: el gigante tecnológico y proveedor de Apple en Shenzhen ha reportado ganancias de hasta un 12%.

Inflación en EEUU baja al 8,5%: con una reducción de un punto porcentual se ha logrado disminuir la inflación durante el último mes.

Sube la inflación en China en Julio: con un 0,5% mensual y una tasa anualizada de 2,7% China empieza a ver un crecimiento en la demanda.

Mercado de valores estadounidense se recupera luego del dato de inflación: los principales índices de la Bolsa de Nueva York reportaron importantes ganancias luego del reporte de la inflación en EEUU.

Indicadores más relevantes
Þ Futuros de crudo: durante la semana sube 5,6% ubicándose alrededor
de los 93 dólares.

Documento descargable en formato PDF: EEIOVE-10-11082022 (3)

Comparte este contenido:

Escenario Económico Internacional del 08-08-2022 Temas centrales: Rusia, Turquía, China, Japón, Petróleo, Semiconductores, Taiwán, Oro, Apple

Observatorio Latinoamericano y Caribeño de Organismos Multilaterales, Bancas de
Desarrollo, Corporaciones Tecnológicas y Filantropía

Escenario Económico Internacional del 08-08-2022
Temas centrales: Rusia, Turquía, China, Japón, Petróleo,
Semiconductores, Taiwán, Oro, Apple

Rusia y Turquía llegan a un acuerdo comercial: la cooperación incluye suministro de gas ruso a Turquía.

Francia cierra tres centrales nucleares: el causante sería el calentamiento del agua de los ríos. Esto afecta considerablemente el provisionamiento energético de Francia.

Nasdaq sube 12% durante la semana: es el primer repunte considerable de las empresas tecnológicas que cotizan en la Bolsa de Nueva York. Se pudiera deber a los buybacks (recompra de acciones) de las grandes compañías.

China y Japón registran una baja inflación: en medio de una elevada tasa de inflación global estos dos mercados asiáticos siguen manteniendo los mismos niveles históricos de demanda en el consumo.

Goldman Sachs pronostica subida del oro durante la semana: la razón serían las tensiones en Taiwán y el problema relacionado con los semiconductores.
Parece ser que la nueva batalla de los precios se dará en el oro.

China gana la batalla en la tecnología de los semiconductores a EEUU: habrían desarrollado tecnologías de 7 nanómetros, algo que permitiría avances considerables en la industria.

Iphone 14 retrasa su salida: Apple tendría problemas en el suministro de chips por el conflicto en Taiwán, ya que esta región junto a China serían sus principales proveedores.

Blackrock se retira de la bolsa de valores de Rusia: este fondo de inversiones estadounidense habría anunciado la salida del sistema financiero ruso.

Precio del petróleo retrocede: estaría alcanzando niveles inferiores al conflicto en Ucrania.

Indicadores más relevantes
Þ Futuros de crudo: inicia la semana con una caída del 0,5% ubicándose
alrededor de los 88 dólares.

Calendario económico semanal
10-08-2022: Inflación EEUU / Inventarios del Petróleo

Documento descargable en formato PDF: EEIOVE-08082022

Comparte este contenido:
Page 4 of 81
1 2 3 4 5 6 81