Saltar al contenido principal
Page 45 of 86
1 43 44 45 46 47 86

La educación superior: entre la droga y la violencia

Por: José Alejandro Cheyne

Resulta paradójico que en las regiones colombianas cuya riqueza natural y posición estratégica son una ventaja comparativa para el desarrollo, sea precisamente donde el flagelo de la producción y comercialización de coca se ha convertido en el principal enemigo de la comunidad para avanzar en su agenda de bienestar.

Resulta paradójico que en las regiones colombianas cuya riqueza natural y posición estratégica son una ventaja comparativa para el desarrollo, sea precisamente donde el flagelo de la producción y comercialización de coca se ha convertido en el principal enemigo de la comunidad para avanzar en su agenda de bienestar.

En el mes de agosto el presidente Iván Duque lanzó el programa Zonas Futuro, como estrategia para la recuperación de la presencia institucional en territorios caracterizados por la ilegalidad, pobreza, inequidad e injusticia, como el Pacífico sur (Nariño), Catatumbo (Norte de Santander), Arauca, Bajo Cauca (norte de Antioquia) y el Parque Nacional Chiribiquete (Guaviare y Caquetá) y sus alrededores.

El lanzamiento de este programa se realizó en Tumaco, lugar en el que sus habitantes han buscado estrategias para disminuir los cultivos de coca y eliminar el estigma de ser el principal productor en el mundo.  Según datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc), en el 2018 Tumaco hizo parte de los 10 municipios que representaron el 44% del total de cultivos de coca del país.

Entre los esfuerzos realizados, se encuentra la sustitución de siembra de productos como el cacao y el plátano, la producción de camarón y frutales, la renovación de la palma, y el turismo. Quienes realizan estas actividades, desafortunadamente, reciben amenazas tanto de la resiembra de coca como de la violencia, por oponerse a los intereses del narcotráfico ante la falta de presencia integral del Estado colombiano.

Sin embargo, aun cuando esta realidad podría parecer bastante pesimista, existe un factor determinante que está dispuesto a cambiar el futuro. Según el Dane, en 2018 el 25,9% de la población colombiana se encontraba en edades jóvenes (entre 15 y 29 años), estando los departamentos de las Zonas Futuro, por encima del promedio nacional en población juvenil: Guaviare (28,5%), Arauca (28,2%), Caquetá (28,1%), Nariño (26,6%), Norte de Santander (26,5%) y Antioquia (26,1%).

Lo anterior es fundamental, teniendo en cuenta que son precisamente los jóvenes la mayor ventaja competitiva de estas regiones y quienes con su talento diverso y emprendedor, y su capacidad de resiliencia, están dispuestos a encontrar nuevas alternativas para sus comunidades afectadas por el narcotráfico. Sin embargo, para cumplir este propósito, requieren de nuevos espacios de educación, en particular de educación superior, necesarios para disminuir su vulnerabilidad y desarrollar sus competencias de acuerdo con las apuestas productivas de las regiones. Entendiendo que la educación es el único camino para una transformación social, se deben enfrentar las siguientes restricciones:

  1. Los jóvenes no cuentan con los recursos económicos para financiar su matrícula ni para su manutención durante el tiempo que están invirtiendo en educación, aun más cuando el 57% de los hogares en zonas cocaleras viven en medio de la pobreza, de acuerdo con la caracterización hecha por la Unodc. No podemos olvidar el costo de oportunidad o costo de renuncia para los jóvenes, como resultado de las tentaciones a trabajar en actividades ilícitas.
  1. Desafortunadamente, algunos jóvenes que desean ingresar a la educación superior tienen restricciones pedagógicas, fruto de las debilidades durante su proceso de formación básica y media, razón por la cual es muy importante establecer estrategias de acompañamiento psicopedagógico que les permita cerrar las brechas y desarrollar su proyecto de vida en su dimensión académica, física y espiritual. Un testimonio interesante en Tumaco es cómo a través del desarrollo de diferentes expresiones artísticas, los jóvenes encuentran una pedagogía diferente para desarrollar competencias.
  1. Una oferta de educación superior insuficiente para las necesidades de estas regiones, como es el caso de Tumaco que tiene apenas cuatro Instituciones de Educación Superior (IES) que ofrecen programas presenciales. Adicionalmente, los recursos financieros, de infraestructura e infoestructura, entre otros, son escasos para cumplir adecuadamente con los procesos de enseñanza-aprendizaje adecuados, así como la capacidad para desplazar la frontera de conocimientos con procesos de investigación pertinentes para la región.
  2. La oferta laboral en estas regiones no siempre garantiza el retorno de la inversión en educación a los jóvenes. Por esta razón, se debe asegurar que no se dé una migración por búsqueda de mejores alternativas laborales, haciendo que el esfuerzo de educación en la región sea en vano.

Este desafío educativo en las regiones permeadas por el narcotráfico requiere del aporte de todos los actores (alcaldía, gobernación, líderes sociales, empresarios, fuerzas armadas, autoridades espirituales, entre otros) para articular esfuerzos, aprovechar los recursos limitados y generar un consenso sobre las apuestas educativas de la región.

Sin embargo, este esfuerzo requiere también del aporte y solidaridad de las universidades colombianas, muy especialmente de aquellas acreditadas en alta calidad, que generalmente cuentan con mayores recursos y con estándares internacionales para apadrinar la educación en las Zonas Futuro y, de esta manera, construir una agenda de competitividad con las regiones.

Fuente: https://www.semana.com/opinion/articulo/la-educacion-superior-entre-la-droga-y-la-violencia-columna-de-jose-alejandro-cheyne/632387

Comparte este contenido:

“Invertir en la educación en Colombia no genera réditos políticos”: Maurice Armitage

Redacción: El Espectador

El alcalde de Cali señaló que gastó más $500.000 millones en un programa de educación que impactó a casi 200.000 estudiantes, redujo problemas de hambre en la primera infancia y creó una cultura del deporte.

A un poco más de 100 días de salir de la Alcaldía de Cali, en medio de críticas por problemas de movilidad y seguridad, Maurice Armitage le dio una entrevista a El Espectador en la que dejó claro que su legado para la ciudad es la educación. Un aspecto que, según él, no deja réditos políticos ni permite presentar resultados inmediatos. Mientras sus contradictores lo tachan de ser un administrador al que lo sobrepasó el problema de la criminalidad, Armitage responde que la seguridad no es un tema solo policivo, sino social, por lo que su labor se reconocerá por trabajar en la inclusión social y la educación.

Porque una ciudad con muchas dificultades, tanto económicas como sociales, se la está jugando por la educación con el programa “Mi comunidad es escuela”. Es una propuesta que no nos produce réditos políticos, porque invertir en la educación en Colombia nadie lo ve como un trampolín para ser un alcalde reconocido. Lo que más importa en la administración de una Alcaldía es que estén bien la movilidad, la seguridad y otros aspectos, menos la educación.

A casi 100 días de acabar su mandato, ¿es la educación su legado y la bandera insignia de la administración?

Lo digo con orgullo y tranquilidad. El solo hecho de que la Unesco escogiera a Cali para ser sede del Foro Internacional sobre Inclusión y Equidad en la Educación (realizado la semana pasada) es producto del trabajo que hemos hecho desde hace tres años y nueve meses.

¿Qué han hecho en ese tiempo?

Ya hemos invertido casi el 80 % del presupuesto que destinamos para educación para el cuatrienio: $500.000 millones, que es el 60 % de la capacidad de inversión del municipio en toda la administración. Acabamos de entregar 135 colegios totalmente reconstruidos. Entre noviembre y diciembre vamos a dejarle a la ciudad 18 nuevos “megacolegios”. También estamos formando a 4.500 profesores para mejorar la calidad educativa. Estamos haciendo siete centros de desarrollo infantil. La idea es construir colegios en los que el niño o la niña entran gateando y salen bachilleres.

Es un colegio de 1.500 estudiantes que tienen un Centro de Desarrollo Infantil (CDI). Un niño puede llegar de dos meses, lo alimentamos bien, lo tenemos hasta los cinco años y de ahí pasa al colegio. No lo dejamos en la calle y evitamos que se frustre el proceso de cinco años en el que le dimos buena comida y manutención. No es posible que no siga estudiando. Tiene que existir una continuidad.

Usted hizo referencia a un programa de alimentación para niños y niñas. El hambre y la educación están ligados. ¿Cuál es la iniciativa?

El Programa de Alimentación Escolar (PAE) de Cali, que, valga decir, el anterior Gobierno Nacional no nos dio un solo peso sino que fue asumido en su totalidad por la Alcaldía, es el mejor del país. No hay problemas de corrupción. La reforma administrativa que hizo el municipio logró que la corrupción sea cero. Tenemos buena calidad alimenticia y hemos llegado a todos los colegios para darles productos de calidad a los muchachos.

Y fuera de los estudiantes, ¿cómo están apoyando a otros sectores de la ciudad?

Estamos haciendo un trabajo más grande con la comunidad: pasamos de dar 4.000 raciones diarias a alrededor de 50.000 raciones, quitándole el hambre a un sector con muchos problemas en la ciudad. Darles comida a 50.000 personas a través de los comedores comunitarios es una revolución social. Esto nos ha permitido que los padres de familia puedan buscar empleo y conseguir recursos mientras nosotros cuidamos a sus hijos.

Pero ¿por qué dice que esto no genera réditos políticos si está impactando a 50.000 familias?

Las críticas a su gestión se han centrado en temas de movilidad y seguridad. ¿Qué pasó con estos sectores?

Esto no quiere decir que yo haya abandonado la seguridad ni la movilidad. Por ejemplo, en la movilidad hemos rescatado al MIO, estamos haciendo ciclovías y construyendo otras avenidas para descongestionar determinados sectores, como el sur de la ciudad. En cuanto a la seguridad, yo la entiendo desde el punto de vista social. No es solo policiva y militar. La seguridad debe ser inclusión social y educación. Y en eso es lo que hemos trabajado estos años.

¿Cuántas personas han impactado con el programa de educación?

Estamos impactando más de 200.000 niños con la educación. Entiendo que tenemos 170.000 en colegios públicos y 60.000 en privados. Lo más importante es que no estamos involucrando solo a los niños sino también a los padres de familia. Así como en una época la Iglesia fue el centro de la sociedad, hoy el núcleo de una comunidad debe ser la escuela, que reúne la cultura y el deporte. Es más, nunca antes se había hecho tanto deporte en Cali como se está haciendo en esta administración. Hemos logrado que casi un millón de personas hagan cualquier actividad física una vez a la semana.

¿Cuáles son los programas ligados al programa de educación?

¿Qué le diría al siguiente alcalde?

Que tiene que seguir con esto. No podemos echar reversa. En el índice de competitividad de Colombia, Cali ya está en el cuarto puesto. Preguntaba por qué Bucaramanga está por encima y me dijeron que fue una ciudad que pensó muy bien hace 20 años e invirtió mucho en educación. Hoy se están viendo los réditos. Eso le tiene que pasar a Cali en los próximos 10 años.

¿Quiénes están por encima?

Están Bogotá, Medellín y Bucaramanga.

¿Qué lecciones le quedan por aprender frente a esos ejemplos?

Me queda por aprender y estar plenamente convencido de que sin educación no hay nada. Yo decía: países como Alemania e Inglaterra después de la Segunda Guerra Mundial quedaron totalmente destruidos. ¿Por qué se recuperaron y siguen siendo potencias mundiales? Porque tiene un pueblo educado. Si usted tiene un pueblo educado, así le pasen las guerras.

¿Cuál es la cosa que más se arrepiente de no haber hecho?

Haberle podido meter mucho más a la educación, en el aspecto económico. Con todo el esfuerzo que hemos hecho, apenas estamos influyendo en el 50 % del problema educativo de Cali. Nos falta la otra mitad. Por eso el próximo alcalde tiene que seguir, porque Cali está muy atrasada en estos términos y nunca será una ciudad viable si no tenemos una comunidad educada.

La cultura ciudadana, el sentido de pertenencia a la ciudad. Los caleños estamos muy mal en eso. Lucho todo el día con un cuento popular que tenemos, y es verdad: “caleño come caleño”. Tenemos que revertir eso: “caleño defiende caleño”. Esa es una de las cosas que más nos afectan, a diferencia de otras ciudades del país, que se sienten orgullosas de su ciudad. Los caleños somos autodestructivos.

¿Cree que Cali está en la capacidad de sobrepasar esa barrera de violencia e inseguridad a través de la educación?

Por supuesto. Es que si no lo hace a través de la educación, no sale adelante. Diría que si los dos próximos alcaldes le seguimos dando a esta cosa, no queda reversa y se impone el cambio en la ciudad.

Fuente: https://www.elespectador.com/noticias/nacional/invertir-en-la-educacion-en-colombia-no-genera-reditos-politicos-maurice-armitage-articulo-881386

Comparte este contenido:

El riesgo autoritario del discurso de odio

Por: Arturo Zamora

El discurso de odio y las prácticas de violencia y discriminación racial, de género y religiosa proliferan con distintos matices en diversas latitudes del planeta. Tan es así que, António Guterres, secretario general de la ONU anunció una estrategia de acción sobre el discurso de odio, consciente de que en la historia de la humanidad esta retórica conlleva exterminios, una lección que no debemos olvidar.

Entre las explicaciones de estas tendencias contemporáneas, de las cuales México no está exento, se encuentra una de índole económico ante los cambios en la estructura del capitalismo global de las décadas recientes y el atraso de las políticas públicas para regular y modular sus efectos.

Esto explica el incremento en los índices de desigualdad social y en el ingreso, el desempleo generacional y la reducción en la movilidad social ascendente, así como la profundización de las brechas sociales por las diferencias en el nivel educativo de la fuerza laboral o en el acceso a las tecnologías digitales.

En el plano político, el impacto de estos cambios sociales y económicos se expresa en el surgimiento de movimientos y gobiernos populistas, de izquierda y de derecha, y el ascenso del nacionalismo autoritario. Rusia, Turquía, Polonia y Hungría expresan esta tendencia contemporánea, como también lo hace el Brexit y, desde luego, Estados Unidos y México.

En el ámbito social, un efecto de estas mutaciones es el rechazo a los agravios contra las mujeres de movimientos como el #MeToo en EU y, recientemente, en México (#YoSíTeCreo), contra la violencia y la discriminación de género.

El tema de fondo es que el discurso de odio y la discriminación están siendo acompañados por mayorías y medidas populistas que ponen en riesgo las libertades civiles y los derechos de las minorías, así como las instituciones de la democracia liberal como las cortes constitucionales, los órganos autónomos, la prensa libre y las organizaciones de la sociedad civil.

En otras palabras, el discurso de odio y la discriminación, en sus diversos matices raciales, clasistas, de género y religiosos, alimentan la implantación de regímenes populistas y autoritarios, y la opresión del pluralismo político y la diversidad social.

Todo lo anterior subraya la relevancia de reformas y políticas públicas que reviertan el impacto social de las tendencias económicas y tecnológicas contemporáneas, igual que la polarización política.

Elevar los índices educativos y de acceso digital, ampliar las opciones de reentrenamiento laboral, universalizar los servicios de salud de calidad, regular las plataformas digitales y multiplicar los espacios de encuentro social son algunas medidas que deberíamos discutir e instrumentar para eliminar las raíces del discurso de odio y la discriminación, así como preservar las libertades y derechos civiles.

A la vista de esta agenda, cabe evaluar la viabilidad y consistencia de reformas que en México buscan la masificación y gratuidad educativa, pero rehúyen a la calidad y el mérito individual; la supresión del Seguro Popular y de las estancias infantiles sin alternativas de calidad y acceso universal; y aprovechan la desregulación para intentar manipular las redes sociales y desarticular el diálogo social. Tampoco es con foros y audiencias a modo como se desactiva la ira social contra el discurso de odio y la violencia de género.

El riesgo autoritario que conllevan el odio, la discriminación y la violencia no puede soslayarse y las medidas para evitarlo deben estar a la altura de un problema que nos concierne a todos.

Fuente: https://www.excelsior.com.mx/opinion/arturo-zamora/el-riesgo-autoritario-del-discurso-de-odio/1332736

Comparte este contenido:

Documental: Los guardianes del Amazonas

Redacción: BBC Mundo

Desde que Jair Bolsonaro asumió la presidencia de Brasil, el ritmo de deforestación de la selva amazónica aumentó más del 50%.

Muchos de los indígenas que viven en el bosque tropical más grande del mundo creen que el discurso del mandatario «respalda» la actividad de los madereros ilegales, con quienes desde hace años mantienen un enfrentamiento por las riquezas naturales del Amazonas.

«Tenemos que luchar por nuestra tierra», dice Laercio Guajajara, un indígena de la zona de Araribóia, en el estado brasileño de Maranhao, «no hay otra opción».

Él es uno de los guardianes de la selva amazónica que desde hace unos 6 años patrullan su territorio en busca de madereros ilegales.

Pero a veces los maderos se niegan a abandonar el lugar y los conflictos se vuelven violentos.

Fuente: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-49375536
Comparte este contenido:

La violencia expulsa del colegio a casi dos millones de niños en África en dos años

Por: Patricia Peiró

Los conflictos han provocado el cierre de más de 9.000 escuelas en ocho países de la región en la que ya hay 40 millones de pequeños fuera del sistema educativo

Los colegios son muchas veces un caramelo para los soldados y las milicias. Suelen contar con buenas infraestructuras, estar bien conectados y normalmente cuentan con un patio útil para almacenar armamento, por ejemplo. Un caramelo que los militares arrebatan a los niños y adolescentes que ven que, cuando ellos entran por la puerta, sus posibilidades de seguir estudiando se esfuman. Unicef calcula que casi dos millones de alumnos han sido expulsados de sus pupitres desde 2017 hasta ahora en ocho países de África por culpa de la violencia, según un informe publicado este viernes.

Para hacerse una idea del volumen, hasta junio de 2019 se habían cerrado 9.272 escuelas, el triple que a finales de 2017. El estudio se ha centrado en Burkina Faso, Camerún, Chad, Malí, Níger, Nigeria, República Centroafricana y República Democrática del Congo. «Es un aumento significativo y estamos preocupados porque esto perpetúa el círculo de pobreza en estas zonas. La educación aquí es una cuestión de supervivencia, no solo una transmisión de conocimientos», recalca Lorena Cobas, responsable de emergencias de Unicef España. Estos 1,9 millones de estudiantes privados de su derecho a formarse, se suman a los 40 millones en aquellos países que no estaban escolarizados. Una cantidad significativa del total de menores de 15 años que hay en esas naciones: 157 millones. En resumen, hay pocas escuelas y las que hay son objeto de ataques y usurpaciones por parte de los combatientes.

Estas cifras tienen nombres y apellidos. Hussaini, de 14 años y de Burkina Faso, relata: «Me encantaba ir al colegio, leer, contar y jugar en el recreo». El joven recuerda cómo empezó a oír disparos mientras estaba en clase, hubo muertos y la milicia acabó quemando su colegio. Porque a veces la escuela es el propio objetivo. Algunas milicias armadas están en contra de lo que conocen como educación occidental y más en el caso de las niñas.

Los lugares en los que más se ha recrudecido la situación son Burkina Faso, Malí y Níger. En estos países había 512 colegios clausurados y ocupados en abril de 2017 y ahora hay 3.005. En Camerún, Chad y Nigeria no ha habido mucha variación porque eran zonas que ya en 2017 estaban muy afectadas. Han pasado de 981 a 1054 cierres en estos dos años. «En los últimos años los conflictos en esta zona del mundo han aumentado en duración y en intensidad. Cuando dañas un colegio, estás dañando a toda la comunidad, al futuro. Muchas veces vemos que las escuelas se cierran antes siquiera de ser atacadas, por miedo», explica Cobas.

La violencia que sacude a esta región procede de tantos frentes que es extremadamente complejo atajarla y, por tanto, establecer una estrategia clara para defender las escuelas. Entre Malí, Burkina Faso y Níger operan la coalición terrorista JNIM vinculada a Al Qaeda, el Estado Islámico del Gran Sahara ligado al ISIS, y un grupo local Ansarul Islam, creado en 2016 por el popular predicador Malam Dicko. Todo esto se suma a las operaciones de los Ejércitos regulares, que se ven desbordados ante la inestabilidad y la falta de recursos.

La situación también afecta a los docentes, que son reclutados, expulsados o asesinados. Más de 44.000 han sufrido las consecuencias de los ataques. En mayo, Palma de Mallorca acogió la Conferencia Internacional sobre Escuelas Seguras. El profesor nigeriano Maidugu Magaji relató ante una audiencia sobrecogida que, cuando comenzó la violencia de la milicia islámica Boko Haram, más de 2.900 profesores fueron asesinados y otros 1.900 tuvieron que irse a otras partes del país.

Para contrarrestar la falta de infraestructuras, Unicef enumera en su informe algunas soluciones que se están aplicando en los territorios. Una de ellas con las lecciones a través de la radio, el único medio al que la mayoría de las comunidades tienen acceso en muchos casos. También existen programas para que grupos de docentes se desplacen regularmente a las comunidades para ayudarles a hacer los deberes o solucionar dudas y, en ocasiones, es posible llegar a habilitar pequeños centros en las aldeas a los que los niños pueden acudir y recibir educación básica. «Estamos ante una emergencia de educación por eso tratamos de trabajar siempre con las autoridades locales. Son los Gobiernos los que tienen que garantizar este derecho y adquirir este compromiso político», remata Cobas.

Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/08/22/planeta_futuro/1566485798_290878.html

Comparte este contenido:

Millones de niños sin educación en Africa, segun Unicef

Redacción: Prensa Latina

Cerca de dos millones de niños carecen de educación en comunidades afectadas por conflictos armados en las regiones de África Occidental y Central, advirtió hoy en un informe difundido aquí por Unicef.

 

Tal situación se deriva de que el número de centros escolares cerrados en esa parte del continente hasta junio de este año es de más de nueve mil 200, cifra que triplica las instituciones de ese tipo clausuradas a fines de 2017, precisó el reporte.

Acorde con el texto, los países más afectados por la violencia e inseguridad en las escuelas son Burkina Faso, Camerún, Chad, Malí, Níger, Nigeria, República Centroafricana y República Democrática del Congo.

De cara a esa realidad, Unicef valoró que las amenazas y los ataques contra estudiantes y maestros en tales áreas geográficas crean un sentimiento de aprensión entre los niños, sus familias, comunidades y la sociedad en general.

Más delante refiere que en numerosas zonas de África Occidental y Central, ‘está surgiendo una creciente hostilidad hacia la educación por parte de facciones beligerantes’.

Demuestra tal afirmación el que más de una cuarta parte de los 742 ataques verificados contra escuelas en todo el mundo en 2018 tuvieron lugar en cinco países de África Occidental y Central, ejemplifica.

En reiteradas ocasiones, agencias de Naciones Unidas, como Unicef, llamaron a los gobiernos de países africanos, afectados por conflictos armados, a adoptar medidas de emergencia para evitar que miles de niños se queden sin recibir clases en escuelas, lo cual entorpece su normal desarrollo intelectual.

También exigieron a la comunidad internacional que aporte necesarios recursos financieros para el impulso de la educación en estados de África Central y del oeste.

Fuente: https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=300340&SEO=millones-de-ninos-sin-educacion-en-africa-segun-unicef
Comparte este contenido:

Perú se prepara para la marcha ‘Ni una Menos’ con la mayor cifra histórica de feminicidios

América del Sur/ Perú/ 18.08.2019/ Fuente: /www.publico.es.

La marcha ‘Ni Una Menos’, la mayor manifestación contra la violencia de género en el país, se celebrará este sábado en Perú, con el lastre de haber alcanzado la mayor cifra histórica de feminicidios en los primeros siete meses del año.

Perú celebrará este sábado la marcha Ni Una Menos, la mayor manifestación contra la violencia de género en el país, con el lastre de haber alcanzado la mayor cifra histórica de feminicidios en los primeros siete meses del año.

El Ministerio de la Mujer de Perú contabiliza cien feminicidios cometidos en lo que va de año en el país, una cifra que, según señaló a Efe la abogada Lisbeth Guillén, representante de la ONG feminista Manuela Ramos, «desbarata, lamentablemente, la meta que tenía el Plan de Acción Conjunta de lograr reducir los feminicidios este año a menos de 100 casos«.

Para Guillén, la amplia diferencia entre la realidad y el objetivo, revela que los esfuerzos desde el Estado, no están siendo suficientes y que «se requiere de otro tipo de acciones, con medios de comunicación, sociedad, para revertir la violencia extrema de los feminicidios».

Según la estadística que recoge el Ministerio de la Mujer desde el 2009, año en que se instauran las primeras políticas públicas para prevenir la violencia de género en Perú, de enero a julio de este año hubo un 21,9% más de feminicidios que en 2018 y un 40,8% más que en 2017.

Una coyuntura que, pese a los avances logrados desde agosto de 2016 cuando se realizó la primera y multitudinaria marcha Ni Una Menos en el céntrico parque Campo de Marte, enfrenta al país con el drama de su machismo estructural, que en 2018 se cobró la vida de 149 mujeres.

Las posibles causas: «el mayor empoderamiento de las mujeres, un ejercicio de autonomía y libertad»

Para la abogada, no existe una sola explicación al aumento de la cifra, aunque señaló entre ellas a «el mayor empoderamiento de las mujeres, un ejercicio de autonomía y libertad al que el patriarcado responde con violencia extrema». Por ello, precisó que ahora se hace más urgente «concretar la igualdad de género en las políticas educativas, para que se eduque con respeto a las diferencias y con derechos».

Los colectivos han realizado avances importantes

Enorme tarea por la que luchan desde diversos ámbitos los movimientos y colectivos feministas que en los últimos años también han alcanzado avances e hitos importantes, «aún en un contexto donde sectores conservadores rechazan la igualdad de género en políticas públicas de Educación».

Entre estos hitos importantes, Guillén resaltó que ahora existe un poco más de «conciencia de rechazo a la violencia en la ciudadanía y un poco más de solidaridad».

Además de otros logros relevantes alcanzados este 2019, como el de la abogada y activista Arlette Contreras, quien tras cerca de cuatro años de lucha en el Poder Judicial consiguió que su agresor y expareja Adriano Pozo fuera condenado por tentativa de feminicidio, aunque no por tentativa de violación sexual.

El caso de Contreras «es muy importante porque genera el mensaje de que no podemos dejar pasar estas situaciones de agresión»

Precisamente el caso de Contreras se convirtió en el símbolo de la primera marcha Ni Una Menos Perú, llevada a cabo en agosto de 2016, ante la indignación de que en julio de 2016 la Corte Superior de Justicia de Ayacucho sentenció a Pozo a un año de prisión suspendida por el delito de lesiones leves. «Consideramos que es un hecho muy importante porque genera hacia la ciudadanía el mensaje de que no podemos dejar pasar estas situaciones de agresión», apuntó la abogada.

Otros logro obtenido este año para Guillén ha sido el de la aprobación en el Congreso del dictamen de paridad y alternancia planteado por el Ejecutivo, el mismo que fue impulsado por los movimientos feministas con el apoyo de congresistas aliadas.

«En la próxima elección se aplicará que como mínimo esté conformada por el 40% de mujeres, en las siguientes elecciones por un mínimo de 45% y luego en un 50%», apuntó Guillén.

A este recuento de avances se suman los gestos y proyectos dados desde el Gobierno de Martín Vizcarra, como el Gabinete paritario conformado en marzo pasado, así como el anuncio de un programa inicial de atención a niños y niñas cuyas madres fueron víctimas de los feminicidio para garantizar su derecho a la educación.

Fuente de la noticia: https://www.publico.es/internacional/violencia-machsista-peru-prepara-marcha-mayor-cifra-historica-feminicidios.html

Comparte este contenido:
Page 45 of 86
1 43 44 45 46 47 86
OtrasVocesenEducacion.org