Mar Romera: «En temas de educación no hay que mirar tanto a Finlandia»

Por: Amaya Garcías/06-02-2019

«La escuela debe preparar a los niños para el cambio», explica la profesora

«Normalmente los padres pensamos en sobreprotegerles y en estimularles»

«La calidad de una escuela la hacen las personas no los recursos», defiende

Acaba de publicar ‘La escuela que quiero (Destino), una guía cargada de sentido común

La elección del colegio de los hijos se ha convertido casi en cuestión de estado en muchas casas. Hay incluso quien empieza la búsqueda del ‘centro perfecto’ cuando el retoño aún no ha empezado a gatear. «Todo lo que hacen los padres es con la mejor de las intenciones», explica Mar Romera (Heidenheim, Alemania, 1967) , maestra y pedagoga que acaba de publicar el libro ‘La escuela que quiero’ (Destino), un manual cargado de sentido común sobre este tema. «Normalmente pensamos en sobreproteger y en sobreestimular y quizá deberíamos centrarnos en las potencialidades de ese niño y en la capacidad para que gane autonomía».

A juicio de Romera, «no hay que mirar tanto a Finlandia» -siempre referente en los informes PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos)- en temas educativos. «Hay cosas que podemos aprender de ellos, por ejemplo, en lo que respecta a la formación del profesorado, pero en el método no están tan avanzados. Además, tienen menos horas de clase que nosotros, menos días lectivos y menos asignaturas, algo que quizá debería hacernos reflexionar. Pero aquí sólo oímos hablar de resultados«. Y estos «siempre son relativos». A veces olvidamos que cada niño es un mundo y que la generalización suele salir cara. «En educación no hay una comparativa objetiva en datos».

Los problemas de la educación en nuestro país los centra Romera en dos puntos principalmente: «la burocratización y la politización»: «No se hace escuela de calidad cambiando de modelo cada cuatro años», explica. Defiende que «la calidad de una escuela no la hacen los recursos sino las personas». Y pone en valor la figura del profesor, no siempre valorado como se espera: «Si la familia no confía en el docente, los alumnos tampoco».

La pedagogía del siglo XXI tiene que buscar nuevos enfoques. Se habla mucho de innovación en las aulas, pero conviene acotar un término tan amplio. «La escuela innovadora será aquella capaz de mirar con ojos de niño. No son consumidores de escuela; son protagonistas de lo que pasa en ella». En este sentido, la escuela que pretenda ser innovadora tendrá «que empoderar a los alumnos y también a los profesores».

En ese discurso por hacer una escuela acorde a los tiempos, aboga por centrarse más en el «ser» y no tanto en el «saber». «Hay que ajustar el sistema a los niños; y convendría dejar de meter cosas en él: que si robótica, ajedrez… No tendremos éxito si seguimos cargando el sistema». El ‘cuanto más mejor’ quizá deba dar paso al ‘menos es más’. Muchas veces los niños van «como autómatas: Estamos construyendo TDtodo», concluye. La paciencia y el saber escuchar son herramientas más útiles para construir esa escuela ‘ideal’.

Y aquí la palabra cambio es clave, tal y como explica en el libro. «La escuela debe preparar a los niños para el cambio, debe enseñarles a tomar decisiones, a conquistar esa autonomía mientras deciden». Y dentro de esto hay que enseñar a gestionar el miedo, pero también el amor.

Volviendo de nuevo a los rankigs y las comparativas que tanto gustan, Romera asegura que «probablemente ningún chaval del Norte de Europa aprobaría nuestra Selectividad. Tampoco de EEUU». Insiste en la idea de que un niño es comparable sólo consigo mismo. «Igual que un colegio. No puedo comparar un centro del Pozo del Tío Raimundo y uno de La Moraleja».

El tirón de orejas final lo reserva para la «falta de corresponsabilidad de toda la comunidad para con la infancia». Vivimos una época en la que «una ‘influencer’ tiene más influencia que 50 horas de una asignatura». Frente a esto sólo ve una solución: «Remar en una dirección y ganar conciencia

Fuente: https://www.elmundo.es/vida-sana/familia-y-co/2019/01/24/5c45ade0fc6c83560a8b469e.html

Comparte este contenido:

Irina Bokova: «La Unesco está muy politizada»

UNESCO / www.wradio.com.co / 11 de Octubre de 2017

La búlgara Irina Bokova, directora general de la Unesco desde 2009 y primera mujer al mando en la historia del organismo, admite en entrevista con Efe, cuando está a punto de dejar el cargo, que la organización está «muy politizada» y debe mantenerse alerta para responder a los nuevos desafíos.

París, 10 oct (EFE).- La búlgara Irina Bokova, directora general de la Unesco desde 2009 y primera mujer al mando en la historia del organismo, admite en entrevista con Efe, cuando está a punto de dejar el cargo, que la organización está «muy politizada» y debe mantenerse alerta para responder a los nuevos desafíos.

«La Unesco es en este momento una organización muy politizada. Creo que reflejamos lo que pasa en el mundo, la geopolítica cambia», indica en la misma semana en la que su Consejo Ejecutivo elige entre ocho candidatos a su sustituto.

La admisión de Palestina como miembro de pleno derecho en 2011, que provocó la retirada de la financiación de EEUU y la congelación de los fondos de Israel, es reflejo de la permeabilidad en el organismo de cuestiones ajenas a su misión, criticada por alguno de sus posibles sucesores.

EEUU aportaba el 22 % de su presupuesto, lo que hacía de él el primer contribuyente, y obligó a reducir los gastos administrativos y a suprimir algunos programas.

Bokova (Sofía, 1952) es consciente de que el legado que deja es delicado: «Cuando fui elegida no imaginaba que iba a afrontar una situación de crisis financiera o de destrucción del patrimonio y emergencia del extremismo violento. La atmósfera era muy diferente y el nuevo director debe siempre ser vigilante a lo que pase en el mundo, para adoptar respuestas adecuadas».

Al mismo, tiempo, reivindica que la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) sigue siendo una entidad pertinente en el mundo e importante para sus 195 países miembros y 10 asociados.

La mejor receta para superar los sucesivos baches, sostiene Bokova, es el diálogo, «reunirse alrededor de un consenso» y «trabajar más por el bien común, por los intereses comunes del multilateralismo».

Ese es el consejo lanzado a la francesa Audrey Azoulay, la libanesa Vera El Khoury Lacoeuilhe, el iraquí Saleh Al Hasnawi, el chino Qian Tang, el catarí Hamad bin Abdulaziz Al Kawari, la egipcia Moushira Khattab, el vietnamita Pham Sanh Chau y el azerí Polad Bülbüloglu,los ocho aspirantes a reemplazarla a partir de este próximo 15 de noviembre.

Bokova cerrará en esa fecha dos mandatos tras los que reconoce que todavía debe trabajarse más «con gobiernos y líderes políticos para que la cultura en toda su complejidad sea reconocida como vehículo de desarrollo e inclusión social».

Licenciada en Relaciones Internacionales, se congratula en este tiempo de haber tenido en la defensa del patrimonio histórico, la libertad de prensa y la igualdad de género algunos de sus principales campos de batalla, en los que reivindica buenos resultados.

«Fuimos los primeros en poner de relieve el vínculo problemático entre internet y la radicalización de los jóvenes», señala en castellano Bokova, que recuerda que la Unesco fue creada en 1945 «para prevenir nuevas guerras y conflictos a través de la educación, la cultura, la ciencia, la comunicación».

A punto de cerrar su etapa, la directora general subraya que han sido «ocho años extraordinarios», en los que para ella era importante «hacer algunos cambios y orientar la organización de una manera irreversible» hacia la seguridad de los periodistas y los otros temas citados.

Lo dice «convencida» de que hoy día, con los conflictos actuales, el extremismo y las transformaciones sociales, la Unesco, que «ha puesto la educación en el centro del debate público mundial», tiene los instrumentos para esa inclusión social que es tan necesaria».

A la espera de conocer quién proseguirá esa labor, Bokova tiene claro su futuro: «Quisiera luchar por causas. Hay muchas (como la lucha contra el extremismo o la igualdad de género) que necesitan el compromiso de la gente. Me parece que mi experiencia puede apoyarlas», concluye. EFE

Fuente: http://www.wradio.com.co/noticias/sociedad/irina-bokova-quotla-unesco-esta-muy-politizadaquot/20171010/nota/3603733.aspx

Comparte este contenido:

Puerto Rico: ¿Qué está detrás de no escoger un boricua para dirigir la educación del país?

Centroamérica/Puerto Rico, 31 de Diciembre de 2016. Fuente: Tribuna invitada / Autor: Emilio Nieves

La designación de la Secretaria de Educación, Julia Keleher sorprendió a todo el país provocando la reacción inmediata de preguntarnos: ¿el gobernador electo no encontró a un o una boricua para dirigir el Departamento de Educación (DE)? Esta pregunta no se basa en criterios xenofóbicos, sino en el reconocimiento de que en Puerto Rico tenemos personas competentes para ocupar cualquier posición en el gobierno.

¿Por qué no se designó a un puertorriqueño que se haya formado en las escuelas y universidades de Puerto Rico? ¿Acaso la agenda asignada por el nuevo gobierno para implantarse en el DE fue rechazada por otros candidatos? ¿La prioridad es federalizar más al sistema educativo y desplazar la implantación de un proyecto educativo puertorriqueño que responda a nuestra realidad cultural y a la necesidad de forjar nuestro desarrollo económico? ¿Prevalecerá la visión empresarial de que aumenten las compañías privadas que buscan contratos en el DE para administrar fondos federales? ¿Los fondos federales determinarán la filosofía, la visión y las metas del departamento? ¿La designación responde a una imposición de la Junta de Control Fiscal? ¿Se pretende imponer una persona que esté en sintonía con la secretaria de educación federal designada por Donald Trump, la cual es una promotora de las escuelas chárter? Estas son preguntas básicas que provoca este nombramiento.

Sobre la designada, es evidente su simpatía y deseo de servir. Sin embargo, no es lo mismo dirigir una empresa privada de consultoría que dirigir una agencia con diversas situaciones y necesidades en las escuelas que tienen particularidades sociales, económicas, laborales, comunitarias, entre otras.

Una de las situaciones principales que hay que superar en el DE es la política partidista. Existe duda razonable de que la designada pueda enfrentar la estructura política partidista del Departamento de Educación. Su principal reto es no permitir que alcaldes y legisladores le impongan funcionarios en las diversas oficinas centrales, regionales y distritales. Aunque me temo que ya esos puestos están repartidos.

Por otro lado, es preocupante que el saliente Secretario de Educación aplauda esta designación, lo cual se interpreta como la continuidad de lo que debe cambiar: cierre indiscriminado de escuelas, reducción de la oferta académica, evaluación punitiva, burocracia y politización.

Exhorto a Julia Keheler a que atienda estas preocupaciones mediante reuniones iniciales con las organizaciones magisteriales, organizaciones estudiantiles, comités de madres y padres, entre otros sectores que son esenciales para impulsar, mediante el diálogo y la transparencia, los cambios que necesita el Departamento de Educación.

Fuente Noticia: http://www.elnuevodia.com/opinion/columnas/nohayboricuaparadirigireducacion-columna-2276614/

Fuente imagen: http://noticias.universia.pr/en-portada/noticia/

 

Comparte este contenido: