Europa/Italia/06 Enero 2017/Fuente: Prensa Latina
Por géneros, el 47,1 por ciento de las mujeres entrevistadas se declararon lectoras de libros, en comparación con 33,5 los hombres, en tanto el grupo etario donde se concentra la mayor cantidad de aficionados a la lectura es el de 11 a 14 años.
Según el informe publicado por el Istat, existe una relación directamente proporcional entre el nivel educacional y el hábito de lectura, pues si bien el 73,6 por ciento de los graduados universitarios son lectores asiduos, esa cifra se reduce a 48,9 entre los que vencieron cuando más la educación media superior.
La investigación comprobó que en el 9,1 por ciento de los hogares italianos no hay libros y en un 64,4 existen cien como máximo.
Constató además que donde los padres son ambos lectores, el 66,8 por ciento de los hijos entre seis y 18 años lo son también, en comparación con sólo el 30,9 por ciento en los ambientes familiares donde los progenitores no leen libros.
Las regiones del sur registran los más bajos índices con 27,5 por ciento, frente a 48,7 por ciento las del nordeste, mientras que el 39,7 por ciento de los entrevistados atribuyó la escasa inclinación a la lectura al bajo nivel cultural de la población y el 37,7 a deficiencias en las políticas educacionales para estimular la afición por ella.