Por: Paulo Alvarado.
Uno de los acontecimientos más relevantes para nuestro país, siempre por esta época del año, ha tenido lugar desde el principio del presente milenio. Es la Feria Internacional del Libro, la FILGUA, que ahora alcanza su decimocuarta edición, en este caso con dedicación a Margarita Carrera, a la Editorial Piedra Santa y, como es de esperar, en conmemoración del medio siglo de otorgamiento del Premio Nobel de literatura a Miguel Ángel Asturias. Un esfuerzo extraordinario de la Asociación Gremial de Editores de Guatemala y varios auspiciadores y participantes, quienes creen más en el derecho a la educación, la lectura, las bibliotecas públicas y el acceso a todas las expresiones culturales, que a las idioteces de una supuesta seguridad, la inescrupulosa vigilancia del vecino y tantos otros desatinos nacidos de gente miedosa y poco noble.
Con el muy importante y significativo aporte financiero del Ministerio de Cultura, así como múltiples escritores y escritoras, se sigue buscando el acercamiento de una población alejada de un hábito fundamental para el avance de toda sociedad, el hábito de la lectura. Se busca también llegar a esa población que constituye nuestro futuro, la niñez, por medio de recopilaciones de cuentos, folletos y actividades que involucren a las chicas y a los chicos, donde no baste apretar botones en un aparato electrónico para distraerse de manera inconsciente. De hecho, éste debería ser uno de los componentes indispensables del perfil de un graduado de la escuela primaria: demostrar que domina completamente la lecto-escritura comprensiva de un texto adecuado a su edad.
Se incluyen conferencias, cine, teatro y un pabellón especial que intenta acercar la obra de Asturias a todos y a todas, el lunes 17 y el martes 18. Se dará una reunión de escritores centroamericanos e invitados de México, Colombia, Puerto Rico, Chile, Francia y Estados Unidos. Adicionalmente se inicia el reconocimiento de figuras de la cultura y las letras nacionales, como ya se ha señalado. Se llevará a cabo el VII Concurso interescolar de lectura, en que se convoca a numerosos establecimientos educativos, con vales canjeables por libros en la feria; el II Concurso nacional de bibliotecas públicas, con premios por un total de Q13 mil quinientos; conversatorios; visitas guiadas; jornadas de literatura infantil y juvenil; y un taller de profesionalización en la especialidad de bibliotecología, con expositores latinoamericanos, norteamericanos y europeos. Este taller se realizará también los días 17 y 18. Habrá igualmente un taller que promueve el trabajo de libreros y dedicatorias especiales a los países amigos de la FILGUA, tales Francia y México, además del “Día de las Mujeres”, en la fecha de cierre de la feria, con una franja musical a la que desde ya me permito invitar a nuestras lectoras y nuestros lectores. Y, por supuesto, la muestra y venta de libros con casi un centenar y medio de expositores de nueve países. En todo esto es de resaltar el afán del editor Raúl Figueroa Sarti, incansable impulsor de esta feria.
Fuente: http://www.prensalibre.com/opinion/opinion/xiv-feria-del-libro-en-guatemala
Imagen: http://radiotgw.gob.gt/wp-content/uploads/2017/06/IMG_20170609_1101361-1024×768.jpg