Autor: Christian Guijosa
En Latinoamérica sólo la mitad de los estudiantes de entre 25 y 29 años termina sus estudios universitarios, según el Banco Mundial. Por si fuera poco, el 50% de estos abandonos sucede durante el primer año.
Una reciente encuesta, realizada por la consultora educativa Civitas Learning a 1500 universitarios, revela algunas de las razones por las que los estudiantes abandonan la titulación e identifica áreas de oportunidad poco abordadas.
¿Qué desalienta a los estudiantes?
Respecto a los principales retos para terminar los estudios universitarios, el 36% de los encuestados señaló que el problema es la gestión del tiempo, el 35% culpa a la ansiedad y el miedo al fracaso, el 31% al agobio ante las distintas responsabilidades, el 25% a la carencia de habilidades de aprendizaje y el 24% señala que se debe a la incapacidad de concentración.
Falta de apoyo y asesoría
El 74% de los encuestados se siente más seguro cuando toma decisiones escolares apoyado por asesores académicos. El 53% siente seguridad con el apoyo familiar, el 43% con el auxilio de amigos y el 37% prefiere la ayuda en línea.
El 70% de los universitarios desearía tener contacto con asesores académicos al menos una vez al mes. Sin embargo, sólo el 20% contacta a una figura escolar durante ese periodo y uno de cada tres no los ha contactado en los últimos seis meses.
El 44% de los alumnos señala que prefiere coaching o mentoreo cara a cara, mientras el 56% prefiere la retroalimentación por medios digitales (correo, mensaje de texto, videoconferencia, etcétera).
Como ejemplo, hasta el 2016 únicamente el 17% de los adultos de 25 a 64 años de edad en México había cursado educación superior, la proporción más baja entre los países de la OCDE (37%). La deserción que se da en este nivel educativo exacerba esta problemática.
Ante el abandono universitario hay respuestas simplistas como el excesivo costo de la educación o la falta de oportunidades. En la mayoría de los casos se pasan por alto temas críticos como la asesoría académica continúa, el desarrollo de habilidades de aprendizaje o el bienestar socioemocional de los alumnos.
Fuente: https://observatorio.itesm.mx/edu-news/el-reto-de-la-desercion-universitaria