Redacción: Itongadol
El investigador de la Universidad de Tel Aviv, Dan Ben-David, advierte que las trayectorias de población de Israel son insostenibles.
La salud y el futuro de la economía israelí mantienen despierto al Prof. Dan Ben-David, investigador de la Universidad de Tel Aviv.
«Las trayectorias de largo alcance son insostenibles», advierte Ben-David, profesor del departamento de políticas públicas de la Universidad de Tel Aviv y presidente y fundador de la Institución Shoresh para la Investigación Socioeconómica.
Ben-David, que se especializa en tendencias económicas a largo plazo, dice que ha mostrado su investigación a todos los primeros ministros desde Ehud Barak, así como una larga lista de ministros de finanzas, ministros de educación y altos responsables políticos.
«La trayectoria de largo alcance tiene implicaciones existenciales para un país ubicado donde estamos. Todo se debe a la política”.
El problema principal, explica Ben-David, es que la mitad de los niños de Israel, en particular los que pertenecen a los grupos de población de más rápido crecimiento, reciben una ‘educación del tercer mundo’. Cuando crezcan «solo serán capaces de mantener una economía del tercer mundo».
En 2015, el 19 por ciento de los niños israelíes menores de 14 años eran judíos ultraortodoxos, otro 25 por ciento eran árabes israelíes y el 56 por ciento eran judíos no ultraortodoxos. Para 2065, las estimaciones sugieren que el 49 por ciento de los niños menores de 14 años serán judíos ultraortodoxos, el 15 por ciento serán árabes israelíes y el 35 por ciento serán de otros grupos de población.
“Una economía del tercer mundo no puede mantener un ejército del primer mundo. Vivimos en la región más peligrosa del planeta. Si no tenemos la capacidad de defendernos, es un problema existencial», explicó.