Redacción: Forbes
El reciente estudio de la organización humanitaria internacional World Vision alerta que 30 millones de niños y niñas están en riesgo debido a los impactos secundarios del COVID-19.
El documento “Las Réplicas del COVID-19” revela que millones de niños están en riesgo debido a otras enfermedades y la inseguridad alimentaria que causará la pandemia. Los sistemas de salud saturados, al tiempo que importantes contingentes de la población caerán en la extrema pobreza que agravará el panorama para la niñez.
El reporte analizó los devastadores impactos secundarios sobre la niñez del contagio del Ebola, entre el 2014 y 2016, y a partir de allı́ genera un modelo que proyecta qué sucederíá en la crisis sanitaria actual.
Los impactos secundarios amenazarán a muchos más niños y niñas que el virus mismo del COVID-19. Actualmente, los fallecimientos de niños son bajos, porque las infecciones severas del nuevo coronavirus son raras entre la población infantil.
El informe se enfoca en las consecuencias previstas en las 24 naciones más frágiles incluidas en la respuesta humanitaria de Naciones Unidas ante el COVID-19. Analizó varios impactos incluyendo el acceso limitado a cuidados médicos, deterioro de los esquemas de inmunización y un incremento de la desnutrición.
Más de 26 millones de niños y niñas en riesgo ante la ausencia de vacunas para enfermedades letales.
Más de 5 millones de niños y niñas podrían sufrir desnutrición. El deterioro de las condiciones actuales incrementaría en 40% los niveles presentes de mal nutrición.
Más de 100,000 niños y niñas podrıán morir de malaria y los niveles actuales de esa enfermedad podrıán aumentar en un 50%.
Andrew Morley, presidente y CEO de World Vision Internacional afirmó que “estamos equivocados si creemos que ésta no es una enfermedad que afecta a la niñez. La experiencia nos dice, que, cuando una epidemia satura los sistemas de salud, el impacto sobre los niños y niñas es letal. La niñez es el segmento más vulnerable de la población ante la desatención inducida de otras enfermedades o de la desnutrición. COVID-19 se ha convertido en una pandemia devastadora, pero sus efectos secundarios impactaran aún más a los niños y niñas en los contextos más frágiles. Es necesario actuar ya”, afirmó.
El reporte demuestra que la combinación de debilidades preexistentes en los sistemas de salud, altas demandas de atención de la población y la pandemia pueden con llevar a niveles catastróficos de mortalidad para la niñez.
Llaman a prevenir consecuencias en salud de niños por COVID-19
Por su parte el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), llamaron a los gobiernos a prevenir las consecuencias para la alimentación y la salud de 370 millones de niños sin acceso a comidas escolares, debido al cierre de escuelas por COVID-19.
“Sin ella, pasan hambre, corren el riesgo de enfermarse, abandonar la escuela y pierden su mejor oportunidad de escapar de la pobreza. Debemos actuar ahora para evitar que la pandemia sanitaria se convierte en una tragedia alimentaria”, dijo el director ejecutivo del Programa, David Beasley.
Durante esta situación, los países de escasos recursos, al no acudir a las escuelas, también pierden la atención sanitaria en forma de vacunas y eliminación de parásitos.
Es por ello que ambos organismos colaboran con los gobiernos de sesenta y ocho países, transportando las raciones escolares a los domicilios de los alumnos, o, de modo alternativo, proporcionan vales o transferencias en efectivo a las familias de los menores.
De la misma manera, se han comprometido a ayudar a retomar los programas de alimentación escolar y sanitarios cuando las escuelas vuelvan a funcionar con normalidad durante los próximos meses.
“Para muchos niños representa su salvación en materia de seguridad, y en los servicios de salud y nutrición. A menos que actuemos de inmediato, aumentando los servicios que salvan las vidas de los niños y niñas más vulnerables, las devastadoras consecuencias del COVID-19 se dejarán sentir durante las próximas décadas”, señaló Henrietta Fore, directora ejecutiva de Unicef.
Isabel Gómez, Directora Global de Operaciones Humanitarias de World Vision afirma que “el Coronavirus está teniendo un impacto devastador sobre la población en todo el planeta, pero puede ser catastrófico para familias que viven en condiciones de pobreza y para aquellas desplazadas por conflictos. Los niños y niñas que viven en esos lugares pagarán el precio más alto en esta crisis”, explicó.
El reporte se presenta tras el lanzamiento de la respuesta global de World Vision a la pandemia, que dedicará 80 millones de dólares. En América Latina y el Caribe, la inversión estimada en 15 país es para detener el avance del contagio y fortalecer los sistemas institucionales de salud será de 24 millones de dólares.
Milán Italia. Un niño dibuja el coronavirus durante las medidas de cuarentena en medio de la nueva pandemia del coronavirus COVID-19 el 13 de marzo de 2020. Foto de Pietro D’Aprano / Getty Images
World Vision asignará a sus 37.000 funcionarios a la labor a nivel local. Desde enero, la organización ha estado abocada a la respuesta al contagio inicial en Asia y el plan de respuesta global pretende alcanzar a 22,5 millones de personas en 17 naciones priorizadas.
Consulta el informe: https://www.wvi.org/publications/covid-19-aftershocks-secondary-impacts-threaten-more-childrens-lives-disease-itself
World Vision es una organización cristiana y humanitaria dedicada al trabajo con niños, niñas, familias y comunidades para alcanzar su pleno potencial, con el fin de atender las raíces causa de la pobreza y la injusticia.
Los principales puntos de la respuesta que World Vision enumera ante la emergencia del COVID-19 en contribución con los objetivos de Naciones Unidas ante la pandemia son:
• Reasignación de sus programas, staff y recursos financieros para implementar intervenciones de emergencia orientadas a alcanzar a 22,5 millones de personas, de los cuales la mayoría son niños y niñas.
• Movilización de una amplia red de 220.000 servidores comunitarios de la salud, miles de pastores cristianos y líderes de distintas denominaciones, además de personal en las comunidades para diseminar las medidas de prevención y apoyar servicios de salud.
• Realización de capacitaciones en salud vía WhatsApp y WeChat, plataformas móviles y campañas radiofónicas dirigidas a poblaciones en cuarentena.
• Envío de equipos móviles de salud en Afganistán, instalación de puntos de lavado de manos y saneamiento en campos de refugiados en Jordania y Bangladesh. Y mediante la distribución de alimentos, jabón, guantes máscaras y otro material de bioseguridad en país es alrededor del mundo.
Consulta: https://www.wvi.org/publications/covid-19-emergency-response-plan
Fuente: https://www.forbes.com.mx/noticias-fotogaleria-30-millones-de-ninos-y-ninas-en-riesgo-de-sufrir-impactos-secundarios-del-coronavirus/