Redacción: La Diaria
Se acordó que la población vulnerable serán los mayores de 65 años y los que tengan enfermedades previas.
El regreso a las clases presenciales es inminente y sobre eso hablará este jueves el presidente Luis Lacalle Pou en una conferencia de prensa. Mientras se esperan los anuncios, las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay firmaron este martes el protocolo de protección a los funcionarios de la ANEP en el marco de la propagación de covid-19, que había quedado preacordado la semana pasada.
El detalle por el que la CSEU pidió un cuarto intermedio era para discutir en sus bases a partir de qué edad se es población de riesgo, ya que en un primer momento se consideraba que era 60 años y luego la ANEP decidió elevarlo a los 65 años para alinearse con las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública (MSP), y eso fue lo que finalmente acordaron.
En el protocolo sólo se establecen condiciones de trabajo relacionadas a la salud, por lo que los detalles de cómo y cuándo vuelven los niños está todavía en manos del gobierno nacional en consulta con los asesores.
El protocolo indica que además de los mayores de 65 años, los funcionarios y los docentes que tengan comorbilidades dentro de la lista que elaboró el MSP entrarán en la categoría de población vulnerable, por lo que no deberán comenzar a trabajar de inmediato.
Los hisopados nasofaríngeos para comprobar la presencia de covid-19 se harán a los funcionarios docentes, de gestión y servicios que presenten síntomas o que hayan estado en contacto con personas diagnosticadas. En este punto se aclara que la ANEP facilitará la información, pero será la Administración de los Servicios de Salud del Estado la que se encargue de la gestión y realización de las pruebas.
En caso de que aparezcan síntomas, los funcionarios deben quedarse en su casa y consultar a su médico. Si se confirma la enfermedad, aquellos que hayan tenido un relacionamiento estrecho con el paciente deberán entrar en cuarentena y hacerse la prueba una semana después o cuando aparezcan síntomas, mientras que los que mantuvieron un relacionamiento casual deberán seguir trabajando y monitoreando sus síntomas, según lo indicado por el MSP.
El protocolo de la ANEP establece que para evitar aglomeraciones los centros deberán “considerar el uso escalonado de horarios, horas de descanso, usos de espacios comunes como comedores, vestuarios, respetando la distancia de 2 metros”. Además, los centros deberán “mantener e incrementar las medidas de limpieza y desinfección” de los locales, mantener la ventilación e incorporar una alfombra sanitaria.
Sobre la distancia entre las personas, los representantes sindicales y las autoridades concuerdan en la complejidad de llevarla a cabo. En el protocolo señalan que “las tareas y procesos laborales deben planificarse para mantener una distancia aconsejada”.
La preocupación por la salud mental también quedó de manifiesto en el protocolo, donde se acordó que los servicios de la ANEP especializados en esas áreas harán “un plan dirigido a funcionarios docentes y no docentes, desarrollando acciones que permitan apoyar a los que se reintegran, así como a aquellos que a la fecha desempeñan funciones a través de la virtualidad”.
Fuente: https://educacion.ladiaria.com.uy/articulo/2020/5/regreso-a-las-escuelas-se-firmo-protocolo-de-salud-para-trabajadores-de-la-educacion/