Por: ABC
Enrique Escandón, director de de Alameda International School —recientemente ganador de los Premios IE de Innovación Educativa— explica a ABC en el siguiente artículo de que manera potenciar el talento de los estudiantes.
Hoy en día escuchamos frecuentemente frases en las que el talento es ese ingrediente de moda que adereza nuestras salsas. Retener talento, atraer talento, descubrir talento, pero realmente sabemos qué es el talento y, sobre todo, ¿cómo se puede trabajar desde las etapas más tiernas de la educación?
Si me preguntan qué es, diría que saber hacerse las preguntas adecuadas, porque ya nos pasó en el siglo pasado, como nos dijo Benedetti, que cuando sabíamos todas las respuestas nos cambiaron las preguntas.
Es por ello que desde las etapas iniciales del aprendizaje debemos poder hacer que el alumno vaya conociendo su potencialidad, de forma que trabajemos sus puntos fuertes y fomentemos el desarrollo en torno a ellos de sus áreas de mejora.
Pero no al revés.
Recuerdo que no era capaz de comprender las matemáticas y, por ello, tuve un profesor particular toda mi vida escolar; esos veranos interminables donde toda la mañana en casa no olía a cocido, yo olía a matemáticas…, y un sinfín interminable de horas que le dediqué para algo que no me motivaba lo más mínimo, creando en mí una sensación de inseguridad tremenda en los exámenes de BUP que frecuentemente me llevaba a final en junio por no haber superado algún objetivo.
Ahí ya tenemos cuadros que desde luego resaltan la falta de confianza en uno mismo, inseguridades, y ya, por qué no decirlo, ansiedad y estrés producido por algo que era consciente que tenía que superar pero no sabía cómo.
Ahora de adulto me pregunto, ¿y si esas horas las hubiera usado en parte para potenciar en lo que yo podía ser bueno en un futuro?, ¿y si le hubiéramos dedicado tiempo a conocer a ese alumno para ver en qué áreas iba a poder destacar y dedicarle tiempo en ampliar sus miras para que aprendiera más que lo que el currículo cerrado de entonces y ahora decía?
Para eso necesitamos un toque de autonomía en los claustros, una pizca de iniciativa docente, 100 gramos de pasión y formación y una cucharada de café para dejar al alumno elegir ofreciéndole una carta de platos motivadores que pueda probar.
Quiero decir que si todos nuestros alumnos tienen que seguir el mismo itinerario, elegir las mismas asignaturas y seguimos haciéndoles resolver problemas de matemáticas donde sólo hay una forma de resolver, tenemos por delante un escenario muy poco talentoso. Pero si, además, el proceso no importa, porque sólo supervisamos si el resultado es correcto, el proyecto creativo muere pronto, desde luego.
Descubrir alternativas
Talento es descubrir alternativas en los alumnos, es ver cómo se desenvuelven en áreas creativas, disruptivas, que hagan que salga de ellos esa parte que no habría salido en un pupitre sentados. En definitiva, creo que para potenciarlo hace falta trabajar la creatividad como un medio en el sistema educativo para llegar a nuestros objetivos, y no como un fin educativo en sí mismo.
Esto que planteo no es sencillo, pero ya es una realidad en el Proyecto CAOS de Alameda International School, recientemente ganador de los Premios IE de Innovación Educativa, con Amaia Pérez al frente y con un equipazo de talento docente extraordinario.
El alumno se enfrenta al desarrollo STEAM en su proceso de aprendizaje, tan necesario para la vida profesional actualmente, pero no olvidemos en este proceso la A de ARTS, que frecuentemente es denostada, porque no sabemos cómo encajar en el sistema educativo salvo por las áreas tradicionales de música y educación artística, que en algunos casos son optativas.
Nuestro modelo educativo CAOS es un proyecto en el que se integran el 100% de los alumnos a lo largo de, al menos, 10 cursos. ¿Dónde está la magia? En la elección por parte del alumno de qué rama quiere trabajar: proyecto orquesta eligiendo entre los instrumentos que proporciona el colegio (trombón, saxofón, clarinete, trompeta, violín, viola y violonchelo), potenciando la dramatización, el canto o la escenografía, de forma que todos los alumnos de quinto de Primaria van a trabajar una performance operística, donde en 50 minutos de escena a final de curso, saquemos todo ese talento que tenemos dentro.
A lo largo del curso trabajaremos una ópera conocida, para que el texto sea una base de contenidos elegidos por los alumnos, siempre trabajados en inglés, de forma que adaptamos letra y música para integrarlo todo en el mismo formato que una ópera pero de 50 minutos.
Otro equipo trabajará el contenido del libreto, el texto de la ópera performance de forma que el contenido elegido sea trabajado a fondo. Este curso nuestros alumnos de quinto han investigado las emociones, de forma que hemos realizado un trabajo de indagación muy profundo sobre ese tema.
Además, en escena había actores y cantantes, dos ramas muy singulares, ya que además de la parte puramente artística, aquí hay que trabajar muchos de los miedos e inseguridades que se sufren al subir a un escenario con más de quinientas personas delante, al igual que nos ocurre en la vida profesional en una reunión de trabajo o una conferencia.
Lo bonito del proceso es que nuestro proyecto de Alameda Acompaña integra a nuestras psicólogas en el proceso para realizar ese acompañamiento en el proyecto. Y por último, pero no menos importante, se trabaja la escenografía, el vestuario, el maquillaje, el libreto digital, las luces, sonido… En fin, ese trabajo invisible del que depende el exito del momento.
Aquí vemos, en un entorno ciertamente disruptivo donde el yo de cada alumno brilla, donde surgen sus miedos a trabajar, pero donde de verdad ponen encima de la mesa sus pasiones que nos ayudan a despertar el talento interno y potenciar el desarrollo de cada uno para que puedan realmente llegar a lo que quieran ser.
Este modelo de aprendizaje transdisciplinar, que desde que hemos integrado al colegio en la filosofía del Bachillerato internacional, nos ha ayudado muchísimo más hace que el alumno desarrolle todas las áreas, no sólo las artísticas, de forma mucho más creativa, porque realmente potencia su aprendizaje de una forma más crítica, y autónoma.
Hoy en día hablamos mucho de talento, pero no se me ocurrió mejor forma de hacerlo realidad que con un ejemplo con el que convivo a diario en Alameda International School.
Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-logra-fomentar-talento-alumnos-202206020238_noticia.html