A este respecto, Meira añade: «Si no encuentras tiempo para leer o no disfrutas con ello, ¿por qué debería hacerlo el pequeño? Los niños observan a los mayores y valoran todo lo que ellos hacen porque quieren parecerse a sus referentes. Así, una de las formas más eficaces para que un niño lea es ver leer».
Asignar un tiempo específico
Hoy en día hay muchas cosas que compiten por la atención de un niño y la organización de su tiempo se convierte en un quebradero de cabeza. Por este motivo, establecer una rutina de lectura regular a través de la sugestión y no la obligación, es muy positivo. Por ejemplo, el pequeño puede elegir el cuento que quiere leer antes de acostarse, en el que se alterne la lectura de páginas entre los padres y madres y los niños.
1 Estudio Internacional del Progreso en Comprensión Lectora a alumnos españoles de 4º de primaria realizada por la Asociación Internacional para la Evaluación del rendimiento Educativo (IEA). El informe internacional se publicó el 16 de mayo de 2023 y el nacional el 29 de mayo de 2023.
Asimismo, expertos de Kahoot! indican que «se pueden demostrar las posibilidades lúdicas que ofrece esta actividad con dramatizaciones alrededor de la lectura y establecer vínculos emocionales entre los participantes, ya sean familiares, amigos o incluso desconocidos». Así, el niño comprenderá que la lectura no solamente es algo que sirve para aprender, sino que es una forma de pasar un buen rato con otras personas.
Si por el contrario a un niño le pone nervioso leer en voz alta porque teme ser demasiado lento o cometer errores, puede leerle a una mascota de la familia o a un osito de peluche. Esto puede aliviar la presión y permitir al niño practicar la lectura a su aire.
Libros divertidos y variados
Aunque aprender a leer mecánicamente es un aspecto, el objetivo final es leer con precisión, fluidez y una comprensión profunda del contenido del texto. Esta habilidad mejora cuando se leen distintos tipos de textos y nos enfrentamos al reto de reflexionar sobre ellos.
Para conseguirlo, la lectura debe ser divertida, por eso es importante elegir el libro adecuado. Hay que animar a los niños a que se apropien de sus elecciones de lectura, explorando una variedad de géneros y estilos para encontrar una historia o un estilo de escritura que resuene con ellos.
En contraposición, si es algo que estresa y angustia al niño, conviene dar un paso atrás, sin presionar demasiado pronto. «En su lugar, hay que crear una rutina diaria que le permita compartir el placer de la lectura, explorando juntos el libro, haciendo predicciones sobre el contenido basándose en la portada o el título e, incluso, es necesario escuchar al niño para dar con el género que le enganche», asegura Meira.
Las tecnologías como aliadas
Por desgracia, la lectura se enfrenta a un declive global. Una tendencia notable es la disminución de la capacidad de atención: las redes sociales y los teléfonos quitan mucho más tiempo que antes, según el estudio anual de Qustodio, el cual revela que los menores españoles pasan una media de cuatro horas diarias fuera del aula conectados a una pantalla.
«Aunque es cierto que los teléfonos pueden restar tiempo a otras actividades, no es necesariamente una situación de o lo uno o lo otro», apunta Meira. Se pueden leer libros en los teléfonos, escuchar audiolibros o conectarse a tu comunidad de lectores en línea para debatir y recibir recomendaciones. En un mundo en el que los más pequeños son nativos digitales, se deben aprovechar los recursos didácticos existentes en torno a las nuevas tecnologías que conviertan el proceso de aprendizaje en un juego en el que pueden sentir curiosidad y explorar, mientras disfrutan.
Aplicaciones como POIO, del grupo de la plataforma de gamificación y aprendizaje Kahoot!, pueden ayudar a aprender a leer y guiarlos en sus primeras experiencias lectoras, proporcionándoles un trampolín hacia un hábito de lectura para toda la vida. Al final del juego, los pequeños han leído un libro entero por sí solos, lo que es un momento de gran orgullo para los jóvenes lectores.
Fuente e Imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/cuatro-consejos-fomentar-lectura-pequenos-20231125145432-nt.html