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Argentina: De Mauricio Macri a Alberto Fernández, del oprobio a la esperanza

De Mauricio Macri a Alberto Fernández, del oprobio a la esperanza
El primer asunto que deberá atender el nuevo gobierno argentino encabezado por el abogado Alberto Fernández, de 60 años, es el de la gobernabilidad, el de la situación interna, condicionada por una monumental deuda externa y el crecimiento constante del hambre y la pobreza en los últimos cuatro años.Por eso, quizá su insistencia de la necesidad de un pacto social, que se espera que sirva para crear las condiciones del despegue y no causados por el miedo a lo que vendrá. A diferencia de su antecesor, el neoliberal Mauricio Macri, tendrá un país con paz social, el Congreso de su lado y también algo de tiempo antes de que se presenten los vencimientos de deuda.

Dónde está parado en América Latina

Poco antes de asumir, Fernández brindó su posición sobre lo que pasa en la región, en entrevista televisiva con el analista Pedro Brieger: “Para nosotros, Bolivia no tiene gobierno hasta que los bolivianos voten democráticamente. Un gobierno de facto no es un gobierno”, señaló. “Estoy muy seguro de que lo que está pasando en América latina y de cómo estamos parados. Y estoy muy tranquilo”, añadió.

“Nosotros no estamos solos en el continente: estamos más acompañados que nunca, porque la realidad es que lo que uno observa en Chile, Ecuador, Colombia, son movimientos populares que reclaman el fin de las políticas conservadoras y, por lo tanto, son pueblos que piensan como nosotros. Sí, chocan con gobiernos que piensan distinto a nosotros”, dijo Fernández.

“Pero los movimientos que uno ha visto en Chile, Colombia, Ecuador, son movimientos impresionantes, de gente que reclama que en esos países se den políticas como las que nosotros proponemos para la Argentina. No estamos solos en el continente. Los que están solos son esos gobiernos que no tienen el acompañamiento popular y entonces tienen las crisis”, aseguró.

Los nefastos números que deja Macri

Ha prometido «poner a Argentina de nuevo en pie» Fernández y trae como aval su experiencia como jefe de gabinete en el gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) y durante el primer año del de Cristina Kirchner (2008), quien esta vez será su vicepresidenta y encabezará el Senado.

Los números resumen la dimensión de la tragedia colectiva argentina: en estos cuatro años la inflación tuvo un acumulado superior al 300%; el valor del dólar creció seis veces. En materia económica el país se achicó un 7,4% y la clase media pasó del 30 al 25% del total de la población; la pobreza evolucionó desde una cifra próxima al 30%, cuando asumió, a más del 40% este año.

El promedio del salario real registra una pérdida de aproximadamente el 22% y si se lo mide en dólares la caída salarial es cercana al 50%. En materia de haber jubilatorio la baja promedio es del 18%. La economía cerrará este año con una caída de 3,1%, inflación en torno a 55%, pobreza cerca de 40%, desempleo de 10,4% y una depreciación monetaria de casi 40%.

La deuda externa creció en unos 143 mil millones de dólares, de los cuales más de 88 mil millones se fugaron en el mismo período. Fernández deberá renegociarla, tanto con el Fondo Monetario Internacional (44.000 millones de dólares recibidos desde 2018) como con bonistas. En total, la deuda externa argentina asciende a más de 315.000 millones de dólares, cerca de 100% del Producto Interno Bruto.

Para esa tarea, escogió a Martín Guzmán, un colaborador del Nobel de Economía Joseph Stiglitz que considera «imperioso» reperfilar los vencimientos de capital y de intereses.

Para las primeras semanas de gobierno, los analistas prevén el mantenimiento del control de cambio impuesto en octubre por el macrismo, ante la debacle producida por ellos, mientras se analiza una nueva ley de presupuesto que reasigne fondos para combatir la pobreza, para Fernández un «imperativo moral».

Atacar esta realidad será lo prioritario. Para asumir los temas de dimensión global y la situación regional, habrá tiempo. Es la primera vez desde 1946, que el peronismo encuentra las tres dimensiones en estado crítico.

La complejidad de los problemas económico-sociales es el principal problema de los argentinos en su vida cotidiana y también respecto a sus perspectivas. Los temas son variados y van desde de la estanflación que desde hace largos meses acompaña a la economía, la impagable deuda externa y el modo de inserción en la economía mundial (más allá del agroexportador), hasta el hambre diario que padecen millones de argentinos.

Para eso habrá que pensar en la ampliación del mercado interno, estrechar las relaciones con los mercados regionales y promover la expansión productiva de sectores hoy escasamente explotados de las economías regionales y también con el despliegue de nuevas tecnologías

Ya se anunció la implementación del Programa “Argentina sin Hambre”, reclamado desde 2002 por organizaciones sociales, de la Economía Social, Solidaria y Popular. Es interesante la puesta en marcha de una “Tarjeta de Alimentación” a través de la cual se acreditarían a nombre de los beneficiarios una cantidad de dinero destinada a la compra de alimentos.

La situación lo ha colocado a la izquierda respecto de los demás gobernantes de la región, lo que puede servir como un mecanismo para aislarlo, pero también para que la Argentina tenga una digna posición en la región. Ya se ha comprometido en instalar provisionalmente la secretaría de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) en Argentina, tras el desalojo ordenado por el presidente neoliberal ecuatoriano Lenín Moreno, de la sede en la mitad del mundo.

El gobierno, el poder

Uno de los problemas será evitar que el virus de la competencia de poder y las diferencias políticas se instale en la cúspide del gobierno. Si bien Alberto es el presidente, no se debe olvidar que Cristina Kirchner le cedió el lugar para asegurar el triunfo electoral, compartiéndolo con alguien más cercano al peronismo tradicional y a un número importante de dirigentes del Partido Justicialista, además de la mayoría de los gobernadores peronistas del interior.

Néstor Kirchner, en 2002, asumió la presidencia con el aliento del boom de los commodities y el momento del resurgimiento progresista en la región. Hoy, Alberto Fernández llega a la presidencia con una evidente urticaria mundial resultante de la disputa geoestratégica entre Estados Unidos y China, y una inestable y explosiva Latinoamérica en la que Washington impone sus criterios incluso mediante golpes, rompiendo todas las reglas de juego democráticas.

Hoy los gobiernos neoliberales y endeudadores de la región sufren estallidos sociales y viven nuevas etapas de ingobernabilidad (Chile, Ecuador, Colombia). Ante esta realidad, paso a paso Washington insiste en crear y sostener la interrupción abrupta y violenta (un golpe fascista, racista, genocida) de los procesos populares, progresistas, como el de Bolivia, con un éxito macroeconómico que mostraba que el socialismo del siglo XXI podía ser aplaudido incluso por organismos internacionales de crédito.

La revista Crisis habla del quinto peronismo, después de los dos de Juan Domingo Perón (1945-55 y su esposa Isabel 1974-76), Carlos Menem (1989-99) Néstor y Cristina Kirchner (2002-2015).

Uno de los principales recursos con que cuenta Alberto Fernández es su habilidad como componedor y su experiencia en el poder, como jefe de gabinete de Kirchner, necesarios para liderar los distintos y disímiles estilos, ideologías, procedencias de quienes conforman no solo el Frente de Todxs, sino también su gabinete.

Repitiera Perón a Sócrates: la única verdad es la realidad. Fernández tendrá el acompañamiento expectante de la calle, en un momento histórico poco alentador de la Argentina.

Y enfrente, tendrá una derecha que tuvo un monumental fracaso en la gestión macrista, fortalecida a su paso por un Estado al que ordeñó, preparada para una resistencia activa, dogmática. Y dispuesta de ser posible y las circunstancias lo permitan, a sacar su as de espadas: la violencia, en una región donde nuevamente se oyen ruidos de botas. 

Se va Macri, persiste el odio

A pesar del gigantesco mal producido, Macri se retira habiéndose permitido una movilización para despedirlo y con un 40% del electorado votando sus políticas, todo lo cual ayuda a quienes preparan futuras conspiraciones.

Entre expresiones de odio y violencia contra periodistas, transcurrió el sábado 7 el acto de despedida del presidente Mauricio Macri. Canales de televisión afines al macrismo no tuvieron pudor al transmitir los gritos de una mujer que pedía que mataran a la ex presidenta Cristina Fernández. Otros agitaban banderas argentinas y carteles donde se leía: “Esto recién empieza o Somos los que queremos un país normal”. No faltaron las descalificaciones para los peronistas: Negros de mierda, delincuentes, borrachos.

Expectativas

La búsqueda de equilibrio para mantener la unidad de la alianza le ha dictado su estilo sin estridencias y lo llevó a conformar un gabinete en el que están representadas todas las tendencias. «Quise que la unidad se refleje en el gobierno», dijo.

Los designados para ocupar los 21 ministerios evidencian. 1) el carácter “progresista” de su composición; 2) la baja cantidad de cargos ocupados por dirigentes provinciales, 3) la nula influencia de los gobernadores no kirchneristas, 4) es llamativo el escaso número de mujeres (4 de 21).

Asesores y miembros del futuro gobierno confían en que el dinero que van a insuflar en los primeros meses a la economía (vía “maquinita”) permitirá volver a poner en marcha al estancado aparato productivo, mejore el consumo y las expectativas del pueblo, sin que desborde la ya grave situación inflacionaria.

Esto debiera complementarse con un principio de acuerdo por la deuda externa (de los pagos previstos para marzo), que evite el default.

La cifra de 21 ministros se eleva a una treintena, con la incorporación de secretarías y organismos de primera línea, donde crece la presencia “albertista” para proteger y ampliar las decisiones y el marco de alianzas pretendido por el Presidente… y los consejos de Cristina, en especial en los sectores sociales críticos como Seguridad y Agricultura.

La presencia de Guillermo Nielsen al frente de la estatal petrolera YPF define un objetivo muy claro: los yacimientos de Vaca Muerta deben cumplir el mismo rol que tuvo la soja en los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, “salvar” la economía, otogando muchos beneficios estatales, ventajas y seguridad para las inversiones extranjeras.

En el Poder Legislativo, el oficialismo está absolutamente hegemonizado por el cristinismo: tiene la primera minoría en Diputados (121 sobre los 129 necesarios para el quórum) y mayoría propia en el Senado (42 senadores para una mayoría propia de 37). En el caso del Poder Judicial éste arrastra sus propias reglas de juego, en un marco de deterioro, lawfare y descrédito que le hará muy difícil dictar justicia de un modo creíble.

Renace la esperanza en Argentina. Esperanza en romper las desigualdades, en recuperar la justicia, el respeto por el derecho de todos y todas. Esperanza en poder sonreir nuevamente y sentirse parte de la reconstrucción. La gente llena las plazas y festeja el fin del oprobio macrista.

Dicen que los nuevos gobernantes tienen 100 días de luna de miel con sus votantes. En Argentina, la realidad hace que los cambios deban producirse antes de ese centenar de días, aún cuando haya comenzado el verano, las vacaciones, el fin de año…

Aram Aharonian, Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige surysurtv.net y el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

Autor: Aram Aharonian

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¿El G-7 aprovecha los incendios para intentar la internacionalización de la Amazonia?

Por: Aram Aharonian
Los feroces incendios que ya devastaron casi medio millón de hectáreas de la selva amazónica en Brasil prendieron fuego también a la reunión del Grupo de los Siete en Francia y chamuscaron y dejaron en estado crítico el tratado de libre comercio firmado recientemente entre la Unión Europea y el Mercosur.

Paradojalmente, el entreguismo de los gobiernos neoliberales del Mercosur salvó la reunión de los siete países capitalistas más industrializados (Estados Unidos, Canadá, Francia, Italia, Alemania, Gran Bretaña y Japón) y le dio un espaldarazo al presidente francés Emmanuel Macron para relanzarse como una figura internacional defensora del medio ambiente.

Pero lo más destacable es que en el imaginario colectivo internacional dejó a los países del Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay) como incompetentes subdesarrollados que necesitan de la tutela del mundo “civilizado” para sobrevivir, porque si se los deja solos destrozan el planeta.

Los incendios amazónicos se extendieron con inesperada rispidez al terreno de la diplomacia europea, cuando el presidente francés Emmanuel Macron , acusó a su par brasileño, Jair Bolsonaro , de haberle mentido sobre sus compromisos en favor del medio ambiente y anunció su decisión de oponerse al TLC entre la UE y el Mercosur.

Macron aprovechó el enorme incendio de la Amazonia, las provocativas palabras de Bolsonaro y, sobre todo, la ausencia de reacción inteligente y soberana de los otros tres países del Mercosur (Argentina, Paraguay y Uruguay), no solo para atacar el acuerdo secreto suscrito recientemente sino para abrir la puerta de la ofensiva del G-7 para la internacionalización de la Amazonia, el pulmón del planeta (y, claro, sus recursos).

La minicrisis diplomática se expandió al resto de Europa, y la decisión de Macron fue apoyada por Irlanda. Alemania y Canadá también urgieron hablar sobre el tema de la Amazonia. Macron, en un discurso calificado de maniqueísta, señaló que por culpa de Bolsonaro y su política en el Amazonas se opondrá al acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, lo que sirvió para esconder una vez más las responsabilidades de las siete potencias en los dramas actuales, entre ellos la desigualdad mundial que promueven.

Según documentos publicados esta semana por un sitio británico, Bolsonaro y su gabinete inundado de militares tendrían un plan bien preciso para la Amazonia: construir una autopista y una central hidráulica en el corazón de la selva, un proyecto que data de la época de la dictadura militar brasileña (1964-1983).

La reacción del gobierno francés fue tomada con cautela por el gobierno argentino, que había celebrado con bombos y platillos el desigual el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la UE, sellado en junio tras 20 años de negociaciones. Pero el gobierno neoliberal de Mauricio Macri está de salida, lo que pone en duda de que este TLC sea aprobado en el Congreso, habida cuenta de la oposición sindical, empresarial y, sobre todo, del sector productivo.

Macron no habló –claro está- de Japón y su depredadora pesca de ballenas, Alemania y su multinacional Bayer, propietaria de la ecoterrorista Monsanto, Italia y su desprecio por la condición humana ante la crisis de los migrantes en el Mediterráneo, y todos como promotores y suministradores de armas que alimentan conflictos como el de Yemen, respaldan a dictaduras y hacen trizas la región del Medio Oriente.

En un discurso más mediático que político, Macron interpeló a los ciudadanos a “responder al llamado de los océanos y de la selva que se está quemando”, sin olvidar que por su política colonial aún vigente, Francia también se sitúa como país amazónico (por la Guayana Francesa). “Vamos a lanzar no un simple llamado sino una movilización de todas las potencias” reunidas en Biarritz, y ello “en asociación con los países del Amazonas para luchar contra el fuego e invertir en la reforestación”, dijo.

También el aún presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk puso en duda la ratificación del acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur si el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro , no combate los fuegos en la Amazonía brasileña. De igual modo, Tusk avisó que «no facilitará» a Reino Unido que pueda abandonar la UE sin acuerdo previo

Mientras Francia e Irlanda amenazaron con  no aprobar este acuerdo, Finlandia, que preside actualmente la Unión Europea, propuso imponer restricciones a las importaciones de carne de Brasil, el segundo abastecedor cárnico mundial, como forma de presionar al país a preservar la Amazonía. «No hay posibilidad de que Irlanda vote en favor del acuerdo si Brasil no respeta sus compromisos medioambientales», previno el premier irlandés Leo Varadkar.

La reacción de Macron se produjo en medio de una extrema tensión entre ambos países, un día después de que Bolsonaro lo acusara por tuit de «tener una mentalidad colonialista», que «instrumentaliza una cuestión interior de Brasil y otros países amazónicos» con «un tono sensacionalista que no contribuye para nada a resolver el problema».

Firmado a fines de junio, el acuerdo UE-Mercosur, que crearía un mercado de 780 millones de consumidores, es criticado no sólo en los países del Mercosur, sino también en Europa por el sector agrícola de varios países, pero también por ecologistas y ONG. Parlamentarios europeos –al margen de la cumbre del G-7- habían alertado sobre la amenaza de Bolsonaro de «dejar el Mercosur» si la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner ganara las elecciones en la Argentina en octubre próximo.

Algunos analistas europeos prefieren interpretar la crisis entre Brasil y algunos países europeos como un triunfo de Donald Trump, aliado de Bolsonaro y escéptico del cambio climático (como su imitador brasileño), enemigo del multilateralismo, de la UE y del acuerdo UE-Mercosur.

Pero, más allá del desigual tratado de libre comercio, los sudamericanos deben tener en claro que detrás de los discursos de protección ambiental, en la mente de los dirigentes de los siete principales países capitalistas está el apoderarse del pulmón del planeta y de sus enormes riquezas.

*Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=259800

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.La revolución 5G, ¿la vigilancia de los humanos y las cosas?

Por: Aram Aharonian

La nueva generación de comunicación móvil 5G significa una profunda transformación tecnológica con importantes consecuencias empresariales, sociales y geopolíticas, desde el momento en que los investigadores y las empresas chinas tomaron la delantera, despertando la paranoia de los estrategas y el gobierno estadounidenses, teniendo en cuenta las consecuencias geopolíticas e incluso militares de la misma.En 2017 la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) dispuso algunas especificaciones para el 5G, como una velocidad mínima de descarga de 20 Gigabits por segundo (Gbps) y una mínima de subida de 10 Gbps.

El internet de las cosas (IOT por sus siglas en inglés) que se avizora, donde se propone un mundo en el que todos los objetos estén conectados a la “red de redes” e interconectados, requiere de altas velocidades, de convergencia en los accesos y de baja latencia. Sin duda esta quinta generación de tecnologías de telefonía móvil será hacia donde miren los proveedores de servicios para poder cumplir con la enorme demanda de acceso e interconexión de dispositivos en el mundo entero.

Como todo en tecnología, el 5G levanta voces adversas y despierta humanas alertas y temores sobre lo que vendrá, alertas que debieran enfocarse a pensar sobre el impacto político y social de la introducción de estas nuevas tecnologías y de millones de dispositivos aportando al gran panóptico tecnológico. ¿Podemos estar al margen del inmenso control global al que ya nos sometemos casi sin notarlo?

Algo sigue siendo claro: la tecnología por sí misma es inocua y por lo tanto dependerá de quién la domine, alerta el experto uruguayo Enrique Amestoy.

Para que quede claro, esta tecnología será 40 veces más rápida que la del 4G actual con un significativo aumento del volumen de datos comunicados y por ello el gobierno estadounidense está sumamente preocupado por la participación de la china Huawei en el diseño y construcción de la red (y trata de impedirla).

Pero hete aquí que es la que tiene la tecnología de diseño y fabricación más avanzada del mundo en las redes de telecomunicación 5G. Hay pánico en Washington y muchos nerviosismo en las megaempresas que hasta ahora se habían apoderado de los sistemas de comunicación e información, y vendían sus datos a quien los pagara, fueran gobiernos o no.

Los prepotentes (y a veces hasta ignorantes) estrategas de Sillicon Valley y de Washington decidieron que la ventaja de la empresa china Huawei sólo podía provenir del espionaje industrial y ante esta premisa no encontraron nada mejor que arrestar y procesar a la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, hija del fundador de la empresa, por portación de un iPhone y un iPad.

Si bien la acusación fue que Huawei es una empresa estatal (lo que es falso, ya que es privada, como lo es Alibaba, la mayor empresa de e-commerce del mundo) lo cierto es que China está introduciendo un acceso de “puerta trasera” en la red mediante el cual se puede espiar a todo el mundo, incluso a los espías.

EEUU, basado en su complejo de superioridad e ignorancia, se aferraba a que la ventaja competitiva china en los mercados estaba en copiar, clonar y fabricar más baratos que las empresas occidentales, explotando su mano de obra. Pero la realidad es que Huawei está entre las primeras cinco empresas del mundo en gasto en I+D, tiene decenas de miles de investigadores en centros de todo el mundo, hasta en Silicon Valley.

Y, silenciosamente, China lanzó su iniciativa de construcción de infraestructuras de transporte y comunicaciones en Europa y Asia (la llamada nueva ruta de la seda) en colaboración con diez países europeos, incluida Italia. Obviamente, algunos interpretararán que el 5G es un proyecto de dominación china sobre Occidente.

Un mundo para muy pocos ¿Cuántas de las profesiones que conocemos hoy en día seguirán existiendo en el futuro? ¿Qué actividades humanas pueden verse completamente automatizadas por máquinas o sistemas de machine learning? ¿Qué labores nos quedarán a los humanos? Son todas preguntas que surgen de las nuevas realidades, cuando algunos proyectan un mundo para mil millones de personas, o sea seis mil quinientos millones menos que la población mundial actual. ¿Un mundo sólo para el 1% de la población billonaria, dejando fuera al 99% restante? El Centro de Investigación de Futuro e Innovación de la South Wales Business School, proyectó que en los próximos 15 años el impacto de las nuevas tecnologías llevará a que al menos 30% de los empleos sean automatizados, desplazando del mercado laboral a los humanos. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el principal problema de hoy de los mercados de trabajo en el mundo es el empleo de mala calidad: 700 millones de personas, obligadas a aceptar condiciones de trabajo deficientes viven en situación de pobreza o pobreza extrema en el mundo. La mayoría de los 3300 millones de personas empleadas en el mundo no goza de un nivel suficiente de seguridad económica, bienestar material e igualdad de oportunidades.Se corre el riesgo de que algunos de los nuevos modelos empresariales propiciados por nuevas tecnologías, socaven los logros conseguidos en el mercado laboral, por ejemplo los relativos a formalidad laboral y seguridad en el empleo, protección social y normas del trabajo, que ya sufre el 61% (dos mil millones de trabajadores) sobreviven en la economía informal. Hoy, más de una de cada cinco jóvenes (menores de 25 años) no trabaja, ni estudia, ni recibe formación, por lo que sus perspectivas de trabajo se ven comprometidas.

Uruguay pica en punta

Con el apoyo de la finlandesa Nokia, el ente estatal uruguayo de telecomunicaciones Antel ha logrado completar con éxito la instalación en America Latina de la primer red comercial de quinta generación (5G). Las primeras radiobases se han desplegado en el departamento de Maldonado y se encuentran operativas y listas para brindar servicio.

La nueva tecnología 5G permite tener una capacidad conexión de hasta un millón de dispositivos por km2, navegar a velocidades mayores a 1 Gbps, con una respuesta de red inmediata, señaló Antel.

Internet de las personas y las cosas

La importancia de la nueva tecnología es que constituye la infraestructura necesaria para el funcionamiento de la nueva sociedad en red, incluyendo la nueva economía, que se basa en la co­nexión de grandes bases de datos (big data), del despliegue de las aplicaciones de inteligencia artificial (y de la robótica avanzada, las máquinas capaces de aprender) y, sobre todo, de la llamada internet de las cosas, señala Manuel Castells..

No se trata solo de la mutiplicidad de conexiones ultrarrápidas de internet entre humanos y sus organizaciones, sino también entre objetos de todo tipo: en el ámbito doméstico, el dinero móvil, el automóvil sin conductor, la cirugía a ­distancia, la enseñanza virtual o las guerras de drones. No se trata de ciencia ficción, sino de una tecnología que ya está operativa

La estrella del congreso Mobile World (en febrero último en Barcelona, España) fue el modelo Mate X de la empresa china Huawei. Por ahora hablamos de un prototipo, ya que el celular no sirve de mucho mientras no se despliegue la red por la que circularán las señales, lo cual está previsto para el año próximo en China, ­Europa y Estados Unidos.

Si en el 2014 había unos mil 600 millones de objetos/máquinas conectados, para 2020 se espera que sean unos 20 mil millones, para lo que se requiere una red con las características del 5G.

Después de la sorpresa, llega la evaluación de riesgos, entre ellos el de la ciberseguridad, con las interferencias, espionajes y vigilancias de todo tipo; los peligros po­tenciales para la salud aún poco evaluados, ya que la red se desarrolla sobre una densidad de miniantenas (se calcula que una por manzana en los centros urbanos) que, mediante su cobertura coordinada del espectro, obtener una comunicación ubicua de cualquier punto de la red a cualquier otro en el mundo.

Por eso se vuelve ­urgente analizar los impactos de ­estos múltiples campos electromagnéticos sobre la salud y encontrar soluciones técnicas para prevenir el daño potencial. ¿La 5G conduce al aumento masivo de la exposición obligatoria a la radiación inalámbrica?, se pregunta el experto uruguayo Julio González.

Según González se triplicarán los riesgos para la salud con el despliegue de la 5G, que conduce al aumento masivo de la exposición obligatoria a la radiación inalámbrica. Es efectiva sólo a muy corta distancia y por ende se requerirán muchas antenas nuevas y la implementación de esta tecnología a gran escala resultará en antenas promedio, cada manzana en áreas urbanas, aumentando masivamente la exposición obligatoria.

Con el mayor número de transmisores 5G (incluso dentro de las viviendas, escuelas, plazas, tiendas y hospitales, etc.) y los accesorios como refrigeradores, lavadoras, persianas, cámaras de vigilancia, las llamadas “casas inteligentes”, los autos y autobuses que conducen por sí mismos, etc.) serán parte de la Internet de las Cosas.

Numerosas publicaciones científicas han demostrado que los Campo Electro Magnéticos-CEM afectan a los organismos vivos (no solo a los humanos) en niveles muy por debajo de la mayoría de las directrices internacionales y nacionales, cuyos efectos incluyen mayor riesgo de cáncer, estrés celular, aumento de radicales libres dañinos, daños genéticos, cambios estructurales y funcionales del sistema reproductivo, déficit de aprendizaje y memoria, trastornos neurológicos e impactos negativos en el bienestar general de los seres humanos.

Estudios realizados por un equipo ruso de investigadores también mostraron que los CEM de los teléfonos celulares causan a largo plazo un significativo deterioro cognitivo en los niños. Quizá sea el momento para los padres determinar si los niños deberían utilizar estos dispositivos en sus cuerpos en crecimiento y su cerebro en desarrollo.

El desarrollo de la tecnología no está sirviendo para multiplicar el tiempo de ocio y los espacios de libertad, sino que está multiplicando la desocupación y está sembrando el miedo.

Aram Aharonian: Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la ). Autor de Vernos con nuestros propios ojos, La internacional del terror mediático y El asesinato de la verdad.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons , respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Autor: Aram Aharonian

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=255907&titular=la-revoluci%F3n-5g-%BFla-vigilancia-de-los-humanos-y-las-cosas?-

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La revolución 5G, ¿la vigilancia de los humanos y las cosas?

Por: Aram Aharonian

La nueva generación de comunicación móvil 5G significa una profunda transformación tecnológica con importantes consecuencias empresariales, sociales y geopolíticas, desde el momento en que los investigadores y las empresas chinas tomaron la delantera, despertando la paranoia de los estrategas y el gobierno estadounidenses, teniendo en cuenta las consecuencias geopolíticas e incluso militares de la misma.

En 2017 la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) dispuso algunas especificaciones para el 5G, como una velocidad mínima de descarga de 20 Gigabits por segundo (Gbps) y una mínima de subida de 10 Gbps.

El internet de las cosas (IOT por sus siglas en inglés) que se avizora, donde se propone un mundo en el que todos los objetos estén conectados a la “red de redes” e interconectados, requiere de altas velocidades, de convergencia en los accesos y de baja latencia. Sin duda esta quinta generación de tecnologías de telefonía móvil será hacia donde miren los proveedores de servicios para poder cumplir con la enorme demanda de acceso e interconexión de dispositivos en el mundo entero.

Como todo en tecnología, el 5G levanta voces adversas y despierta humanas alertas y temores sobre lo que vendrá, alertas que debieran enfocarse a pensar sobre el impacto político y social de la introducción de estas nuevas tecnologías y de millones de dispositivos aportando al gran panóptico tecnológico. ¿Podemos estar al margen del inmenso control global al que ya nos sometemos casi sin notarlo?

Algo sigue siendo claro: la tecnología por sí misma es inocua y por lo tanto dependerá de quién la domine, alerta el experto uruguayo Enrique Amestoy.

Para que quede claro, esta tecnología será 40 veces más rápida que la del 4G actual con un significativo aumento del volumen de datos comunicados y por ello el gobierno estadounidense está sumamente preocupado por la participación de la china Huawei en el diseño y construcción de la red (y trata de impedirla).

Pero hete aquí que es la que tiene la tecnología de diseño y fabricación más avanzada del mundo en las redes de telecomunicación 5G. Hay pánico en Washington y muchos nerviosismo en las megaempresas que hasta ahora se habían apoderado de los sistemas de comunicación e información, y vendían sus datos a quien los pagara, fueran gobiernos o no.

Los prepotentes (y a veces hasta ignorantes) estrategas de Sillicon Valley y de Washington decidieron que la ventaja de la empresa china Huawei sólo podía provenir del espionaje industrial y ante esta premisa no encontraron nada mejor que arrestar y procesar a la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, hija del fundador de la empresa, por portación de un iPhone y un iPad.

Si bien la acusación fue que Huawei es una empresa estatal (lo que es falso, ya que es privada, como lo es Alibaba, la mayor empresa de e-commerce del mundo) lo cierto es que China está introduciendo un acceso de “puerta trasera” en la red mediante el cual se puede espiar a todo el mundo, incluso a los espías.

EEUU, basado en su complejo de superioridad e ignorancia, se aferraba a que la ventaja competitiva china en los mercados estaba en copiar, clonar y fabricar más baratos que las empresas occidentales, explotando su mano de obra. Pero la realidad es que Huawei está entre las primeras cinco empresas del mundo en gasto en I+D, tiene decenas de miles de investigadores en centros de todo el mundo, hasta en Silicon Valley.

Y, silenciosamente, China lanzó su iniciativa de construcción de infraestructuras de transporte y comunicaciones en Europa y Asia (la llamada nueva ruta de la seda) en colaboración con diez países europeos, incluida Italia. Obviamente, algunos interpretararán que el 5G es un proyecto de dominación china sobre Occidente.

Un mundo para muy pocos ¿Cuántas de las profesiones que conocemos hoy en día seguirán existiendo en el futuro? ¿Qué actividades humanas pueden verse completamente automatizadas por máquinas o sistemas de machine learning? ¿Qué labores nos quedarán a los humanos? Son todas preguntas que surgen de las nuevas realidades, cuando algunos proyectan un mundo para mil millones de personas, o sea seis mil quinientos millones menos que la población mundial actual. ¿Un mundo sólo para el 1% de la población billonaria, dejando fuera al 99% restante? El Centro de Investigación de Futuro e Innovación de la South Wales Business School, proyectó que en los próximos 15 años el impacto de las nuevas tecnologías llevará a que al menos 30% de los empleos sean automatizados, desplazando del mercado laboral a los humanos. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el principal problema de hoy de los mercados de trabajo en el mundo es el empleo de mala calidad: 700 millones de personas, obligadas a aceptar condiciones de trabajo deficientes viven en situación de pobreza o pobreza extrema en el mundo. La mayoría de los 3300 millones de personas empleadas en el mundo no goza de un nivel suficiente de seguridad económica, bienestar material e igualdad de oportunidades.Se corre el riesgo de que algunos de los nuevos modelos empresariales propiciados por nuevas tecnologías, socaven los logros conseguidos en el mercado laboral, por ejemplo los relativos a formalidad laboral y seguridad en el empleo, protección social y normas del trabajo, que ya sufre el 61% (dos mil millones de trabajadores) sobreviven en la economía informal. Hoy, más de una de cada cinco jóvenes (menores de 25 años) no trabaja, ni estudia, ni recibe formación, por lo que sus perspectivas de trabajo se ven comprometidas.

Uruguay pica en punta

Con el apoyo de la finlandesa Nokia, el ente estatal uruguayo de telecomunicaciones Antel ha logrado completar con éxito la instalación en America Latina de la primer red comercial de quinta generación (5G). Las primeras radiobases se han desplegado en el departamento de Maldonado y se encuentran operativas y listas para brindar servicio.

La nueva tecnología 5G permite tener una capacidad conexión de hasta un millón de dispositivos por km2, navegar a velocidades mayores a 1 Gbps, con una respuesta de red inmediata, señaló Antel.

Internet de las personas y las cosas

La importancia de la nueva tecnología es que constituye la infraestructura necesaria para el funcionamiento de la nueva sociedad en red, incluyendo la nueva economía, que se basa en la co­nexión de grandes bases de datos (big data), del despliegue de las aplicaciones de inteligencia artificial (y de la robótica avanzada, las máquinas capaces de aprender) y, sobre todo, de la llamada internet de las cosas, señala Manuel Castells..

No se trata solo de la mutiplicidad de conexiones ultrarrápidas de internet entre humanos y sus organizaciones, sino también entre objetos de todo tipo: en el ámbito doméstico, el dinero móvil, el automóvil sin conductor, la cirugía a ­distancia, la enseñanza virtual o las guerras de drones. No se trata de ciencia ficción, sino de una tecnología que ya está operativa

La estrella del congreso Mobile World (en febrero último en Barcelona, España) fue el modelo Mate X de la empresa china Huawei. Por ahora hablamos de un prototipo, ya que el celular no sirve de mucho mientras no se despliegue la red por la que circularán las señales, lo cual está previsto para el año próximo en China, ­Europa y Estados Unidos.

Si en el 2014 había unos mil 600 millones de objetos/máquinas conectados, para 2020 se espera que sean unos 20 mil millones, para lo que se requiere una red con las características del 5G.

Después de la sorpresa, llega la evaluación de riesgos, entre ellos el de la ciberseguridad, con las interferencias, espionajes y vigilancias de todo tipo; los peligros po­tenciales para la salud aún poco evaluados, ya que la red se desarrolla sobre una densidad de miniantenas (se calcula que una por manzana en los centros urbanos) que, mediante su cobertura coordinada del espectro, obtener una comunicación ubicua de cualquier punto de la red a cualquier otro en el mundo.

Por eso se vuelve ­urgente analizar los impactos de ­estos múltiples campos electromagnéticos sobre la salud y encontrar soluciones técnicas para prevenir el daño potencial. ¿La 5G conduce al aumento masivo de la exposición obligatoria a la radiación inalámbrica?, se pregunta el experto uruguayo Julio González.

Según González se triplicarán los riesgos para la salud con el despliegue de la 5G, que conduce al aumento masivo de la exposición obligatoria a la radiación inalámbrica. Es efectiva sólo a muy corta distancia y por ende se requerirán muchas antenas nuevas y la implementación de esta tecnología a gran escala resultará en antenas promedio, cada manzana en áreas urbanas, aumentando masivamente la exposición obligatoria.

Con el mayor número de transmisores 5G (incluso dentro de las viviendas, escuelas, plazas, tiendas y hospitales, etc.) y los accesorios como refrigeradores, lavadoras, persianas, cámaras de vigilancia, las llamadas “casas inteligentes”, los autos y autobuses que conducen por sí mismos, etc.) serán parte de la Internet de las Cosas.

Numerosas publicaciones científicas han demostrado que los Campo Electro Magnéticos-CEM afectan a los organismos vivos (no solo a los humanos) en niveles muy por debajo de la mayoría de las directrices internacionales y nacionales, cuyos efectos incluyen mayor riesgo de cáncer, estrés celular, aumento de radicales libres dañinos, daños genéticos, cambios estructurales y funcionales del sistema reproductivo, déficit de aprendizaje y memoria, trastornos neurológicos e impactos negativos en el bienestar general de los seres humanos.

Estudios realizados por un equipo ruso de investigadores también mostraron que los CEM de los teléfonos celulares causan a largo plazo un significativo deterioro cognitivo en los niños. Quizá sea el momento para los padres determinar si los niños deberían utilizar estos dispositivos en sus cuerpos en crecimiento y su cerebro en desarrollo.

El desarrollo de la tecnología no está sirviendo para multiplicar el tiempo de ocio y los espacios de libertad, sino que está multiplicando la desocupación y está sembrando el miedo.

Aram Aharonian: Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la ). Autor de Vernos con nuestros propios ojos, La internacional del terror mediático y El asesinato de la verdad.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons , respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Fuente de la información:http://www.rebelion.org/noticia.php?id=255907&titular=la-revoluci%F3n-5g-%BFla-vigilancia-de-los-humanos-y-las-cosas?-

 

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Washington quiere haitinizar la región, tras los fracasos de su estrategia… y de Guaidó

Por: 

En unas declaraciones hechas desde el sector más proestadounidense de la derecha venezolana, Julio Borges señaló que “los miembros de la oposición sabemos que ninguna salida que propongamos a Maduro será viable mientras no recuperemos la libertad de Cuba”, en un intento de regionalizar el conflicto, “haitinizar” la región, que es lo que, en definitiva, quiere Washington.

Borges fue quien, por órdenes de EEUU, se negó a firmar un acuerdo entre la oposición y el gobierno, en Santo Domingo, en 2017, y sigue a pie juntilla el libreto escrito en Washington.

Este sábado 23 de marzo, se cumplieron dos meses de la autoproclamación como presidente interino de Venezuela del diputado a la Asamblea Nacional en desacato, Juan Guaidó, y ante el fracaso de esta jugada pergeñada por la diplomacia estadounidense, ahora sus partidarios buscan convertirlo en mártir.

Cuatro días antes, el dirigente de Voluntad Popular (al que pertenece Guaidó), Carlos Vecchio, afirmó durante la toma forzada (asalto) de una sede diplomática venezolana en Nueva York que una eventual detención de Juan Guaidó tendría “un impacto positivo” y “aceleraría” un cambio de gobierno en la República Bolivariana.

Mientras, el abogado Roberto Eugenio Marrero, jefe de despacho de Guaidó, fue detenido la madrugada del jueves 21 por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) acusado de integrar una “célula terrorista” que planeaba ataques en el país con la intención de “crear caos”:.

El ministro del Interior, Néstor Reverol, lo acusó de ser responsable directo de este grupo criminal, al que se le incautó un lote de armas de guerra y dinero en efectivo de divisas extranjeras. Según Reverol, el grupo había contratado a mercenarios colombianos y centroamericanos para atentar contra la vida de líderes políticos, militares, magistrados y efectuar actos de sabotaje a los servicios públicos.

Mike Pompeo, secretario estadounidense de Estado, condenó en Twitter la detención y exigió la “liberación inmediata” del abogado. En declaraciones a la cadena Fox News, aseguró: “Haremos todo lo posible para sancionar a quienes dirigieron y ordenaron el operativo”. ¿Una forma de responsabilizarse como autor intelectual?

Es obvio ya que la capacidad de Guaidó para dividir a las fuerzas armadas y producir un golpe militar, una invasión de sus vecinos o un levantamiento de masas en Venezuela no ha pasado del nivel de intento. Según la constitución venezolana un “presidente encargado” solo tiene como función convocar a elecciones en un plazo de 30 días, y él ya lleva 60 días desde que se autojuramentó. Ningún cuartel o juzgado lo ha reconocido,  no tiene capacidad administrativa alguna y ni siquiera tiene gabinete.

Distintos sectores de la variopinta oposición discuten sobre la estrategia dirigida al cambio de gobierno. La mayoría piensa que el intento realizado con la creación de una imagen de poder dual y la presión sobre los militares para que procedieran a una sublevación, una rebelión o un golpe ya fracasó. Y proponen otras opciones, que apuntan hacia un corto o un mediano plazo.

El Comandante General del Ejército ruso, General Vasily Tonkoshkurov, arribó al Aeropuerto de Maiquetía con una comitiva de 99 efectivos militares. Adicionalmente aterrizó en Maiquetía otro avión de la fuerza aérea rusa, de carga, siglas AH-124-100, con 35 toneladas de carga para la delegación rusa. Una advertencia a los halcones de Washington.

Mientras, surgió una disputa paralela por el control de las embajadas en los países que reconocen a Guaidó como presidente interino. Lo cierto es que Estados Unidos es el único país en el que controlan un edificio consular. En las demás naciones, los enviados de Guaidó no pueden desempeñar tareas básicas como emitir un pasaporte ya que el Registro Civil de Venezuela sigue bajo el control de las autoridades constitucionales.

Dentro de este panorama, pese a la histórica victoria ante Argentina en Madrid, el entrenador de la selección venezolana de fútbol, Rafael Dudamel anunció que ponía su cargo a disposición. “Hemos recibido la visita de un “embajador” de Juan Guaidó en España (Antonio Ecarri Bolívar). Han utilizado de manera muy pobre esa visita, la han politizado”, denunció.

La presión contra el país sigue siendo fuerte, dadas las amenazas de una intervención de fuerzas extranjeras y las sanciones que se han elevado al grado de embargo petrolero que busca cortar, junto con el bloqueo financiero y bancario, el aprovisionamiento del país en alimentos y medicinas y privar al aparato productivo de los insumos para su funcionamiento.

Sus concentraciones tienen cada vez menos concurrencia. La del jueves 21, que pedía la “inmediata liberación” de su brazo derecho, fue “escuálida”, al decir de Hugo Chávez. Su llamado al paro nacional y su intención de tomar el Palacio de Miraflores no tiene asidero en su capacidad de convocatoria, mientras su credibilidad sigue en descenso.

El problema es seguir guiones mal traducidos del inglés. Que lo han llevado por el camino de la autodestrucción al proponer más sanciones contra el pueblo venezolano e insistiendo en una invasión de EEUU o en su defecto de Colombia, su vecino del sur. Brasil, con temor a crear un caos regional, ha negado la participación de sus militares, el Grupo de Lima mira para otro lado tras el fracaso de la Operación Cúcuta.

Donald Trump sigue en su escalada de agresiones económicas, ocupando, secuestrando, pirateando los bienes de Venezuela en EEUU y adelanta sanciones a bancos  y empresas que comercien con Caracas.

La jugada de imponer en Venezuela un gobierno paralelo, y derrocar al legítimo mandatario, no dio los resultados esperados y mostró su fracaso estrepitoso con la Operación Cúcuta, con la que se intentó introducir por la fuerza “ayuda humanitaria” estadounidense (que nadie solicitó), en una operación conjunta con la presidencia de Colombia y el aval de otros presidentes, como Sebastián Piñera y Mario Abdo.

Sin embargo, ese intento de imponer un jefe paralelo de Estado, auspiciando simultánemente el desconocimiento de la práctica diplomática oficial, y violando los parámetros legales establecidos en el derecho internacional, no ha dado sus frutos, pese a que Guaidó vocifera que tiene el apoyo y reconocimiento de la comunidad internacional reducida a los cómplices de las políticas de Washington.

El respaldo de esa “comunidad” se reduce a un reconocimiento más político que jurídico a 43 gobiernos, de los cuales 14 son países de América, 28 son de la Unión Europea (no todos están de acuerdo con la decisión oficial), el 22,16% de los 194 estados nación que conforman la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Alemania, Francia y España, dejaron en claro que el liderazgo de Guiadó no termina de convencer a sus aliados. Los “embajadores” nombrados por él  no son reconocidos oficialmente, sino apenas como representantes del autoproclamado.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), conducido por el neoliberal colombiano  Ocampo anunció que el delegado nombrado por Guaidó, el economista Ricardo Hausman, representará a Venezuela en la asamblea anual del organismo la próxima semana en China. Pero debió suspender la asamblea tras la negativa de Pekín a otorgar una visa a Husman.

Pese al inusitado paso intentado por el BID, el Fondo Monetario Internacional (FMI) reconoció el jueves 21 de marzo que “aún no hay claridad” entre sus países miembros acerca del posible reconocimiento de Juan Guaidó como presidente de Venezuela y señaló que no hay un voto previsto sobre la cuestión en el Directorio Ejecutivo.

Mientras, Citigroup anunció que depositará poco más de 200 millones de dólares de Venezuela en una cuenta de Estados Unidos, monto que representa el excedente de un crédito otorgado al Banco Central de ese país en 2015

En Ginebra el Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó por amplia mayoría una  resolución presentada por Venezuela en nombre del Movimiento de No Alineados sobre efectos negativos de las medidas coercitivas unilaterales (sanciones) en los DDHH.

En buena parte de la población se han instalado y fortalecido pasiones de odio, muerte y destrucción; una poderosa emocionalidad  ha invadido todas las esferas de la vida, ante la pasividad individual, social y cultural.  Papel primordial juega el poder transmedia, suerte de “maquina discursiva”, que intencionalmente alimenta tal subjetividad política, que desatan el miedo, el dolor, la insolidaridad, el odio, la envidia, el resentimiento, la venganza, la crueldad y la muerte.

Desde esa plataforma subjetiva, lanza Guaidó y la oposición su arenga sobre el costo político cuando, enfático, afirma “para nosotros no es costo (…) es inversión en futuro”.

Y, apelando  a las pasiones tristes, remata con una suerte de amenaza: “estamos dispuestos a hacer lo que sea necesario por la libertad (…) No hay miedo”. En ese contexto, ¿Cómo derrotar la lógica de la guerra, cómo apartarnos de las prácticas violentas de representación y participación?  ¿Cómo reconstruir el tejido social?  ¿Cómo abrirse a nuevas miradas sobre la convivencia, el dialogo, la concertación?, se pregunta la socióloga Maryclén Stelling.

Fuente del artículo: https://www.politika.cl/2019/03/24/washington-quiere-haitinizar-la-region-tras-los-fracasos-de-su-estrategia-y-de-guaido/

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Venezuela: Negociación, invasión, invisibilización y nueva fecha clave, 10 de enero

Por: Aram Aharonian
Fracasados los intentos sucesivos de dirigentes opositores y los gobiernos de Washington y Bogotá –con la ayuda de sus “amigos”- de derrocar al gobierno bolivariano, y de imponer una matriz mediática sobre la necesidad de una intervención extranjera por razones “humanitarias”, la estrategia parece haber cambiado al silencio sobre Venezuela, la invisibilización.

Extraño: más allá de alguna desaforada intervención antibolivariana en el congreso del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso), los dirigentes socialdemócratas de la institución impusieron no solo una desvenezolanización, sino también la omisión (aún adversa) a cualquier referencia del aporte chavista al pensamiento crítico, que en Buenos Aires se esforzaron en que fuera mucho más transgénico que crítico.

Las “recomendaciones” de los intelectuales europeos y la estigmatización mediático-hegemónica hicieron su trabajo, convirtiendo a Venezuela (tal como lo quiere Washington y la OEA) en los parias de la región. Ya los intelectuales de Clacso no se pasean con remeras (franelas, chombas) con la figura de Chávez.

Nada pone en duda que Venezuela -que tiene las reservas de petróleo certificadas más grandes del mundo y apetecidas no solo por EEUU, sumadas a las grandes reservas de oro o coltán y un sólido vínculo con China y Rusia- transita una grave crisis económica y social. El terrorismo mediático habla de éxodo masivo y crisis humanitaria, seguramente para desviar la atención con lo que sucede con la millonaria caravana de pobres y hambrientos centroamericanos buscando mejores horizontes en el norte,

Mientras, la inminente visita de Nicolás Maduro a México para asistir a la toma de posesión de Andrés Manuel Lópeez Obrador, ha despertado indignación (al menos mediática) en la derecha e incluso en algunos sectores de Morena.

Quizá la visita sirva para debatir no solo lo que pasa en Venezuela sino en la región, abordando los temas claves como cadenas productivas, tratados de libre comercio, cambio climático, integración, migraciones, energía, crisis capitalista, mercantilización del conocimiento, futuro del trabajo, zona de paz… Pero seguramente todo esto tratará de ser invisibilizado por los medios hegemónicos.

La nueva fecha es el 10 de enero

Para algunos, desde una visión legalista, el 10 de enero de 2019 se producirá la ausencia absoluta del Presidente porque el mismo no fue reelecto el 20 de mayo pasado debido a que esos comicios fueron convocados inconstitucionalmente por la Asamblea Constituyente y no por el Consejo Nacional Electoral, el órgano para tal convocatoria.

Si el punto de vista fuera válido legalmente, políticamente la realidad es otra. Nicolás Maduro tiene el apoyo militar, fue electo por mayoría de votos porque la oposición demostró que no tiene el poder para presionar ni tiene un solo candidato que ofrecer.

Pero sectores de la oposición intentan construir un discurso para deslegitimar al Presidente y fijan el 10 de enero como nuevo «Día D», sobre el cual ya dicen tener el concierto de otras naciones y algunas estructuras internacionales que han declarado desconocer a la Asamblea Nacional Constituyente. El influyente periodista -ahora opositor- Vladimir Villegas enfatizó que “el que crea que el 10 de enero se va a producir un quiebre en Venezuela, está totalmente equivocado”.

La Asamblea Nacional –con mayoría opositora- se encuentra en una situación jurídica anómala, pues sus actos son nulos por disposición de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, que ha castigado el desacato de dicha autoridad a las órdenes emanadas de la Sala Electoral. Si la Asamblea Nacional cambiara de estrategia y se pusiera a derecho (saliendo del desacato), puede intentar declarar una vacante absoluta en la presidencia, como lo viene insinuando y avanzar en su agendas desestabilizadora.

La Constitución de 1999 divide los efectos de la vacante del Presidente en función del momento del período constitucional en el que ocurre. Nicolás Maduro está finalizando su primer período constitucional, y el 10 de enero inicia su segundo mandato y si se produce su ausencia, ésta debe ser compensada por la Asamblea Nacional

Ideas, se buscan: conciliación o invasión

Producto del proceso hiperinflacionario que vive Venezuela hasta se ha desdibujado la tradicional clasificación de las clases sociales que servía de referencia para cualquier tipo de estadística, y ya no tiene sentido hablar de las clases A, B, C, D, ya que hoy la gran división está marcada por la tenencia o no de la divisa estadounidense. La hiperinflación, la prolongada recesión y la migración ha cambiado la clasificación de los ingresos familiares.

El incremento vertiginoso de los precios afectó la visión positiva que se tenía sobre las medidas económicas anunciadas en agosto por Maduro: la evaluación del presidente cayó siete puntos y la leve recuperación ante la opinión pública que había obtenido el gobierno en octubre, se revirtió para noviembre cuando volvió a caer. Pero la escasez más relevante y peligrosa para Venezuela no es la de alimentos o medicinas, sino la de liderazgo político. 

El jesuita Luis Ugalde, exrector de la Universidad Católica, siguió dándole letra a la oposición: “Necesitamos concentrarnos en dos o tres razones que expresen el sentir profundo de los venezolanos, unirnos y movilizarnos para producir la salida del régimen e impedir su continuidad con otro período presidencial ilegítimo. Movilizados con la esperanza activa de vida libre, justa y democrática en Venezuela”. El cambio no vendrá ni de la pasividad ni de grupos y grupitos de pequeños intereses que acentúan sus diferencias del resto y –para regocijo del gobierno– “impiden una unidad superior indispensable para salvar a esta Venezuela que se nos muere”, añadió

Obviamente no ha sido Rodríguez Zapatero, el expresidente del gobierno español, quien ha dividido a la oposición venezolana, sino que esa fragmentación viene desde hace ya un tiempo por diferencias sobre la línea política y en particular sobre las vías para acceder al poder. Unos son partidarios de la promoción de un levantamiento militar o de una intervención armada extranjera y otros, con distintos matices, se inclina hacia los mecanismos institucionales y la negociación.

Lo que se buscaba con la descalificación de Rodríguez Zapatero (“persona no grata” para parte de la oposición) era lograr el respaldo de las bases más radicalizadas, y herir toda posibilidad de que se abrieran caminos políticos para abordar los problemas de carácter nacional e internacional que están planteados, evitando que pudiera surgir otra iniciativa de facilitación de encuentros., entre ellas las del ex senador estadounidense Bob Corker y del ministro de asuntos exteriores de España, Josep Borrell, añade

Parte de los dirigentes opositores se alzaron contra Luis Vicente León, director de Datanálisis, quien fue por mucho tiempo uno de sus guionistas, y ahora se atrevió a señalar que no habría en Venezuela una acción militar extranjera para provocar los cambios, ni a corto, ni a mediano plazo, bajo ninguna excusa, cierta o artificial, más allá de un comentario el presidente Donald Trump. Según León, la realidad es que 75% de los venezolanos quiere cambio, 68% quiere negociación y 87% quiere paz.

No habrá ninguna intervención que ponga en peligro una gota de sangre estadounidense. No puede haber ninguna acción militar extranjera, ni siquiera justificada en acciones humanitarias, que no tenga una contraparte local estructurada, sólida y con un liderazgo identificable y respaldado por la población interna, que pudiera asumir el reto posterior de reestabilizar el país, añade León.

León lee la realidad: las declaraciones explícitas y claras de la Comunidad Europea, rechazando cualquier acción militar en Venezuela, la posición homogénea y clara del Grupo de Lima en contra de la intervención militar, bajo cualquier argumento político o social e incluso las declaraciones del embajador colombiano, quien rechazó una acción de ese tipo y explicitó el drama de pulverización de la oposición interna.

Nada es pacífico dentro de la oposición: El dos veces candidato presidencial Henrique Capriles Radonsky señaló que algunos dirigentes opositores son unos “Rambos” por las redes, y que hoy muchos han decidido voltear el asunto y hacerle creer a la gente que está luchando en las calles que la realidad es lo que aparece y hace bulla en las redes sociales, ignorando las realidades sociales y políticas.

“Hostigamiento digital, ejércitos de teclado, insultos infantiles, polémicas infértiles, dimes y diretes cuyo único objetivo es alimentar listas de seguidores y jugar a una batalla digital, mientras en la calle la gente no tiene cómo resolver la comida de sus hijos”, indicó Capriles, y agregó que “hay mucho farsante que hace cosas pensando en cómo se verán en Instagram o qué debe decirle a sus seguidores de Twitter. Y quien confunde popularidad con eficacia no está haciendo política, sino show y politiquería”.

Entre el 11 y 22 de octubre, la encuestadora Pronóstico realizó por vía telefónica diversas preguntas sobre la situación del país, donde reveló que el 66,1 % calificó la gestión del presidente Nicolás Maduro como negativa a pesar de los bonos y aumentos salariales, así como 3 de cada 4 venezolanos lo consideran culpable a él y a su gobierno de la crisis. Esta encuesta añadió que 7 de cada 10 venezolanos no se identifica con ningún partido político.

Como si faltaran opinantes, el diputado federal Eduardo Bolsonaro, hijo del próximo presidente Jair, consideró que “no quedaría sorprendido si existiese un juego de cartas marcadas, pues la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) es una falsa oposición” y le demandó un cambio “inmediato”, porque no hace nada para lograr el objetivo que le plantearon al pueblo venezolano de un principio.

Por su parte, el vicepresidente nacional de Acción Democrática, Antonio Ecarri Bolívar afirmó que “la casi unanimidad de los países del mundo quieren ayudarnos; solo falta que los venezolanos se pongan de acuerdo”.

Frente militar

La fuerza con que el gobierno de EEUU sigue promoviendo diversas y múltiples ataques contra Venezuela no discrimina ninguna arma. La ofensiva de sectores de inteligencia estadounidenses ha sido, en los últimos meses, sobre militares en situación de retiro, pero también en actividad, con algunos de los cuales ha mantenido reuniones en Washington y Miami. Ante esta ofensiva, el gobierno dispuso que los militares sólo podrán salir del país previa autorización del gobierno.

Tras tres semanas de silencio (censura, autocensura, sigilo, temor o cuidado por parte de los medios y de los mismos voceros oficiales), se supo de la abrupta salida del director del Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia), Gustavo González López, tras la “detención o retención” de la caravana presidencial -con Maduro a bordo- en una vía rápida de Caracas, Ahora dirige el organismo, el general Manuel Ricardo Cristopher Figuera, exjefe del Centro Estratégico de Seguridad y Protección de la Patria (Cesspa).

Frente externo

 Guyana entregó y una memoria ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) a la que pide que se declare competente para resolver el litigio fronterizo con Venezuela por la región del Esequibo, quiere que valide el Laudo Arbitral de París emitido en 1899, que trazó la frontera entre ambos países, y que fue denunciado por Caracas ante la ONU en 1962 por no ajustarse a derecho.

 Para Guyana el laudo sigue siendo válido y debe ser confirmado por la CIJ, mientras que Venezuela rechaza la intervención de la Corte y defiende que la disputa sea resuelta bilateralmente. La región de Esequibo está bajo mediación de la ONU desde la firma del Acuerdo de Ginebra, en 1966, pero las diferencias entre Guyana y Venezuela se han agudizado en los últimos años tras el descubrimiento por parte de Exxon Mobil de yacimientos de petróleo en aguas adyacentes.

 El pasado enero, el secretario general de la ONU, António Guterres, recomendó remitir la disputa a la CIJ al considerar que esta vía era la mejor para los dos países. Guyana entregó en marzo una solicitud al tribunal para que aceptase el caso, pero Venezuela dijo que no participaría en el procedimiento “por carecer la Corte manifiestamente de jurisdicción sobre una acción planteada unilateralmente por el país vecino”. No obstante, la CIJ le ha dado a Venezuela hasta el 18 de abril de 2019 para que entregue una memoria en la que justifique sus argumentos.

 La región en disputa abarca un área de unos 160.000 kilómetros cuadrados, lo que es la zona de reclamación venezolana, supone las tres cuartas partes del territorio de Guyana.

Mientras, el gobierno de EEUU se prepara para agregar a Venezuela a la lista de países patrocinadores del terrorismo, informó The Washington Post. La idea fue propuesta por congresistas republicanos encabezados por el senador Marco Rubio, citando presuntos vínculos de Caracas con la milicia libanesa Hezbolá, las FARC, de Colombia, y otros grupos.

 La semana pasada dos entes “especializados” estadounidenses publicaron sendos informes. Uno, titulado “Proveyendo una defensa común”, alerta que “la seguridad nacional de EEUU está ahora en mayor peligro que en ningún otro momento de las pasadas décadas”. Es el resultado del trabajo de un panel de doce expertos en seguridad nacional (seis del Partido Republicano y seis del Demócrata).

El otro, de título más elíptico – “Sonando la alarma sobre los préstamos apalancados”- es del Fondo Monetario Internacional (FMI), e indica que “los excesos especulativos en ciertos mercados financieros pueden estar alcanzando un nivel que amenaza la estabilidad económica mundial”.

Tampoco sorprendió la provocación de Hans Dietrich, un sociólogo alemán radicado en México, quien dijo que e s inevitable que ocurra en Venezuela un levantamiento generalizado comandado por el “General Hambre”. Aseguró que “Rusia y China no son los que sostienen a Maduro” en el poder, sino una “trinidad no muy santa”: dólares, mentiras y bayonetas.

Aram Aharonian: Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la )

*Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=249462&titular=venezuela:-negociaci%F3n-invasi%F3n-invisibilizaci%F3n-y-nueva-fecha-clave-10-de-enero-

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En busca del pensamiento crítico perdido

Por: Aram Aharonian

En los últimos años, América Latina y el Caribe ha sido una región con enorme dinamismo, originalidad  en bregar contra políticas neoliberales y ajustes políticos y sociales regresivos, aun en un mundo con notorios retrocesos globalizadores, y sufriendo la negativa y desmoralizadora influencia de radicalismos superficiales enunciativos que, al frustrase, configuran un escenario sin salida, sin otra alternativa que resignarse.

No cabe duda que lo ha hecho con vaivenes y, en gran medida no solo  debido a que se generaron cambios de escenarios y posicionamientos  con fuertes polarizaciones. Los procesos populares no fueron acompasados – como sí ocurrió en otras épocas en la región- por imprescindibles  análisis de  fondo y debates críticos originales  y propuestas firmes y consistentes, no repetitivas, y por supuesto no basados en recetas  dogmáticas envasadas. Hubo una llamativa distancia entre los enunciados y las acciones concretas.

Fue a partir de 1492 cuando Europa logra ponerse como centro y constituir discursivamente a las demás culturas como periferias, y usó la conquista de Latinoamérica y el Caribe para sacar una ventaja comparativa determinante con respecto a sus antiguas culturas antagónicas (turco-musulmana).

Hoy siguen, en muchos casos, condicionando el desarrollo de las políticas de reformas estructurales en nuestros países, a veces con buena intención, otras representando a sus patrocinadores, entre ellos bancos, trasnacionales financieras, calificadoras de riesgo, partidos políticos del establishment y, sobre todo, paralizando progresos impensables en la realidad de países centrales.

El pensamiento crítico quedó atrapado en la disyuntiva de dar su apoyo a los gobiernos progresistas por sus logros en materia social o señalar las contradicciones y límites de su proyecto, contradicciones manifiestas en la peculiar forma que adopta la dominación, señala el uruguayo Raúl Zibechi. Debe señalarse que muy a menudo los nuevos temas no llegaron de la mano del aporte de pensadores ya reconocidos e institucionalizados, sino que provienen de pensadores/activistas o investigadores/militantes, añade.

En el congreso del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) en Bogotá. la socióloga mexicana Beatriz Stolocwicz señaló que el desconcierto que se observa actualmente entre los científicos sociales de la región es, en buena medida, resultado de que durante varios años los análisis serios fueron desplazados u opacados por la propaganda.

Añadió que el “mainstream de izquierda” en las ciencias sociales opera como una zona de confort, con algunas ideas de las que se echa mano para todo, usadas casi como consigna, lo que es  cómodo para mantenerse en el candelero de la opiniología, pero no explica adecuadamente la realidad, y tampoco las importantes transformaciones ocurridas en este nuevo siglo en la reproducción del capitalismo en América Latina.

Hay que tener una mirada más larga que capte las lógicas de la estrategia dominante y sus adecuaciones tácticas en las últimas cuatro décadas. El humanistas Javier Tolcachier plantea una autocrítica política, ya que en la división internacional y nacional del trabajo, a algunos, por tradición y acumulación histórica, les toca pensar y a la inmensa mayoría no.

El diálogo, la democratización del debate significa sobrepasar los límites de la academia o de los ilustrados, para anclarse en la realidad y en las vivencias, en las opiniones diversas de quienes hablan de otras cosas y de modos diferentes a los de la academia.

El subcomandante insurgente Moisés, del Frente Zapatista de Liberación Nacional, señaló este primero de enero, al cumplirse 24 años su lucha: (…).vamos a ver si se puede vivir con dignidad sin malos gobiernos, sin dirigentes y sin líderes y sin vanguardias que mucho Lenin y mucho Marx y mucho trago, pero nada de estar con nosotros. Mucho hablar de lo que debemos o no hacer, y nada de práctica. Que la vanguardia, que el proletariado, que el partido, que la revolución, que échate una cervecita, un vinito, un asado con la familia”.

“Pues ni modos, pensamos, creo que la vanguardia revolucionaria está ocupada en probarse trajes y palabras para el triunfo, así que tenemos que darle según nuestro modo, como indígenas zapatistas (…) Falta saber qué vas a hacer”.

Para crear o remodelar el nuevo instrumento político hay que cambiar primero la cultura política de la izquierda y su visión de la política, que no puede reducirse sólo a discursos, consignas, a las disputas políticas institucionales por el control del parlamento, por ganar un proyecto de ley o unas elecciones, peleas donde los sectores populares y sus luchas son los grandes ignorados.

La política no puede limitarse al arte de lo posible, debe convertirse en el arte de hacer lo “imposible” –que es factible e imprescindible–, construir fuerza social y política capaz de cambiar la correlación de fuerzas a favor del movimiento popular. Y para eso se necesita una hoja de ruta basada en n pensamiento crítico renovado, acorde con nuestras realidades.

¿Una nueva teoría crítica?

Los análisis sobre la teoría crítica latinoamericana comparten un núcleo de interrogantes que van definiendo la naturaleza de la teoría. ¿Qué tipo de transformaciones necesita el proyecto de la “teoría crítica” para posicionar temas como el género, la raza y la naturaleza en un escenario conceptual y político? ¿Cómo puede ser asimilada la “teoría crítica” en el proyecto latinoamericano de modernidad/colonialidad, liberado del discurso academicista y eurocéntrico.

Según Enrique Dussel, Europa se autoproclama desde 1492 “centro” de la Historia Mundial, constituye de ese modo, por primera vez en la historia, a todas las otras culturas como su “periferia”, y torna a la modernidad una justificación de una praxis irracional de violencia sobre la periferia, ya que su autoproclamación como “centro” está basada en varias premisas que componen, precisamente, el “mito de la modernidad”:

Entre ellas, Dussel señala que la civilización moderna se autocomprende como más desarrollada, superior (lo que significará sostener sin conciencia una posición ideológicamente eurocéntrica), que la superioridad obliga a desarrollar a los más primitivos, rudos, bárbaros, como exigencia moral. El proceso propuesto por Europa es unilineal, lo que determina una falacia desarrollista, indica.

Todo por fuera del modelo de civilización de Europa es considerado bárbaro, por ello, en último caso se habla de una guerra justa colonial donde se legitima la violencia si fuera necesaria, para destruir los obstáculos de la tal modernización y, al estar basada en la alteridad, esta visión produce víctimas y victimarios, colonizados y colonizadores; donde el héroe civilizador inviste a sus mismas víctimas del carácter de un sacrificio salvador (el indio colonizado, el esclavo africano, la mujer, la destrucción ecológica de la tierra, etcétera).

El debate crítico de las ciencias sociales, supera las áreas de economía, sociología, historia para alcanzar las relaciones internacionales, y hoy se hace necesaria la configuración desde Latinoamérica de otro conocimiento, de un pensamiento postcolonial, que debe incorporar no solo lo producido académicamente sino nutrido de las experiencias de resistencia, lucha y construcción de nuestros pueblos.

Aníbal Quijano señala que el pensamiento decolonial tiene como razón de ser y objetivo la decolonialidad del poder, es decir, de la matriz colonial de poder: Pues nada menos racional finalmente, que la pretensión de que la específica cosmovisión de una etnia particular sea impuesta como la racionalidad universal, aunque tal etnia se llama Europa occidental.

Para lograr una perspectiva latinoamericana se debe pensar por un momento desde el otro lado de las carabelas de Colón: ¿qué implicó la modernidad para aquellos que ya habitaban el territorio de la actual América Latina? La llegada de la modernidad a América Latina, lejos de reconocernos como un otro, implicó la imposición de una ideología eurocéntrica legitimadora de las prácticas político-sociales y económicas que se dieron posteriormente.

El portugués Boaventura de Sousa Santos admite que las ciencias sociales atraviesan un momento de crisis reflejada en la renovación y expansión con respecto a la visión eurocéntrica o de cualquier centro de poder hegemónico, crisis que se ha hecho posible gracias a las luchas sociales de los últimos treinta o cuarenta años en varios continentes (campesinos, feministas, indígenas, afrodescendientes, trabajadores urbanos, pequeños productores, ecologistas, de derechos humanos, contra el racismo y la homofobia, etc.), en muchos casos con demandas fundadas en universos culturales no occidentales.

El nuevo pensamiento crítico debe surgir desde la diversidad (étnica, cultural) y de las historias locales que por más de cinco siglos se enfrentaron con la visión eurocéntrica como la única manera de leer la realidad.

Es comenzar a vernos con nuestros propios ojos, para superar los estrechos márgenes impuestos por la visión totalizadora de la modernidad excluyente, para indagar en otros saberes, otras prácticas, otros sujetos, otros alternativos a este orden. Latinoamérica ha demostrado que tiene la capacidad ética, política, intelectual, de responder al reto de contribuir con sus saberes y sus prácticas a una sociedad equitativa, incluyente y democrática, y a un modelo de vida sostenible para la mayoría de los presentes y futuros habitantes del planeta.

El pensamiento crítico latinoamericano es, a pesar de sus críticas al eurocentrismo, muy eurocéntrico y monocultural. La riqueza del pensamiento popular, campesino e indígena ha sido reiteradamente desperdiciada. No se trata solamente de un nuevo pensamiento crítico, se trata de una manera diferente de producir pensamiento crítico.

El pensamiento crítico no ha sabido hasta hoy teorizar las posibilidades de superar las contradicciones, las separaciones, las tensiones entre las subjetividades de ciudadanos organizados, mujeres, indígenas, migrantes, campesinos, afrodescendientes, y promover alianzas estratégicas y sustentables entre estos movimientos, esto es, alianzas que no escondan la exclusión de algunas subjetividades bajo la apariencia de su inclusión.

En nuestra región, muchos de los movimientos que luchan contra la injusticia social no se consideran ni en el capitalismo ni en las versiones conocidas del socialismo.  Se debe pensar también en estas concepciones contrahegemónicas de democracia y de derechos humanos más allá del modelo liberal y occidental.

Se debe pensar la democracia como la transformación de todas las relaciones de poder (explotación, patriarcado, diferenciación étnico-racial, fetichismo de las mercancías, comunitarismo excluyente, dominación cultural y política, intercambio desigual entre países) en relaciones de autoridad compartida, teniendo en cuenta el cuadro de situación: navegamos en las aguas de la crisis del capitalismo como sistema histórico, primordialmente especulativo, rentista y expropiador, que sólo puede reproducirse agudizando contradicciones incurables.

Los éxitos que ya ha tenido el neoliberlismo es una medida de los problemas en el pensamiento de la izquierda, tanto para pensarse a sí misma como para pensar a los dominantes. Una izquierda o un progresismo que además de vaciamiento teórico muestra un insuficiente conocimiento histórico, lo que la lleva a enredarse en los discursos doctrinarios que dan forma y encubren los objetivos capitalistas; y que tiene déficit investigativos que le dificultan distinguir entre discurso y proyecto dominantes, señala la mexicana Stolowicz.

La estrategia capitalista tiene como uno de sus ejes la seguridad para el capital sobre la propiedad: sí garantiza las condiciones de su reproducción basadas en formas de acumulación originaria (expropiación, saqueo, control territorial directo sobre las materias primas y los recursos energéticos, el agua, la biodiversidad, además de imponerle a las regiones más débiles sus desechos tóxicos).

Otro de los ejes es la seguridad frente a la pérdida irremediable de la cohesión social, lo que implica domesticar a los oprimidos, proclives cada vez más a la protesta y la rebeldía.

Lo opuesto del pensamiento crítico es el conformismo, cínico o resignado. La conciencia social latinoamericana respalda una voluntad del cambio social, con una crítica al orden capitalista que abre posibilidades para una superación de las relaciones de explotación y subalternidad.  Los que están en deuda son la academia y la llamado intelectualidad, anclados en el pasado, sordos a la realidad de nuestros pueblos, muchas veces funcionales a gobiernos pero no a proceso emancipadores y populares .

*Fuente: http://estrategia.la/2018/01/05/en-busca-del-pensamiento-critico-perdido/

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