Page 2 of 29
1 2 3 4 29

Chile: A 76 años de la Nakba, en medio de la intifada universitaria global contra el genocidio

A 76 años de la Nakba, en medio de la intifada universitaria global contra el genocidio

La Universidad de Chile ha sido durante años un espacio de activismo palestino, y se han denunciado muchas veces sus persistentes vínculos con las universidades del Estado genocida. Pero para sus autoridades, hacer tratos con criminales de lesa humanidad no parece ser violento.

«La clausura de la libertad académica empequeñece a las universidades y las despoja de su valor esencial». Así termina la carta de la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, en respuesta a la pacífica movilización estudiantil en contra del genocidio del pueblo palestino.

Quisiéramos que esas palabras estuviesen dedicadas a la memoria de lxs académicxs asesinadxs por el ejército israelí o en condena a la destrucción de las casas de estudio por sus bombardeos. Quisiéramos que, junto con ello, hiciera referencia a las expulsiones, despidos y represión policial que rectores autoritarios han ejercido sobre estudiantes judíxs y palestinxs en universidades de todo el mundo.

Ojalá fueran palabras dedicadas a criticar las vinculaciones con universidades de un Estado ocupante como Israel.

Todo lo anterior clausura la libertad académica porque la vuelve imposible. Pero la Rectora prefiere que sus palabras de mayor condena vayan dirigidas a estudiantes, académicxs y funcionarixs de su universidad que se manifiestan por la paz, la libertad y la justicia en Palestina. No dice nada respecto de los convenios y colaboración que mantiene la Universidad con universidades que trabajan para la Ocupación. Y prefiere comparar la violencia genocida de Israel con la movilización universitaria, haciéndose eco de una retórica criminalizadora e inmoral.

El miércoles 15 de mayo de 2024, a 76 años de la Nakba («catástrofe»), es decir, del inicio de la cruel limpieza étnica perpetrada por Israel contra el pueblo palestino, estudiantes de la Universidad de Chile, articuladxs en su Federación y su Comité de Solidaridad por Palestina, realizaron una manifestación pacífica en el frontis de la Casa Central. Allí se reunieron cientos de estudiantes, con la compañía de estudiantes de otras universidades, para denunciar el genocidio en Palestina y exigir que la Universidad de Chile ponga término a tres convenios con universidades israelíes.

En el marco de esa movilización, se dio inicio a una acampada pacífica en uno de los patios de la Casa Central, sumándose a las acampadas universitarias por Palestina que ya se han levantado en todo el mundo.

Negamos rotundamente que dichas acciones hayan tenido un carácter violento, porque la libertad de expresión y de manifestación en una universidad pública no tienen nada de violento, sino que son la garantía misma de los valores universitarios. Condenamos que la Rectora se refiera a la acción de «grupos externos», porque con eso se opone al sentido de la universidad pública, en la que hay lugar para toda la comunidad, no solo para sus miembros exclusivos. Solo eso define su carácter público y nacional, y esa es su principal riqueza.

La Universidad de Chile ha sido durante años un espacio de activismo palestino, y se han denunciado muchas veces sus persistentes vínculos con las universidades del Estado genocida. Pero para sus autoridades, hacer tratos con criminales de lesa humanidad no parece ser violento.

Lxs estudiantes de Chile siempre han estado del lado correcto de la historia. Saben que no hay neutralidad cuando se trata de un genocidio, saben que no hay neutralidad posible si se trata de la ocupación de Palestina por parte de Israel. En esto, le están dando una gran lección a su Rectora y al Senado Universitario, que han querido mantener la falsa neutralidad que siempre favorece al agresor.

La Coordinadora por Palestina es una coalición de más de 140 organizaciones, entre las que se encuentran organizaciones estudiantiles y comités universitarios de solidaridad con Palestina.

Invitamos a todxs lxs estudiantes, funcionarixs y académicxs a sumarse a la Coordinadora para seguir trabajando por universidades libres de apartheid, verdaderamente democráticas, comprometidas con los derechos humanos y con el pluralismo, y no solamente con mantener el orden en sus pasillos.

Invitamos a la Rectora y a la comunidad de la Universidad de Chile a revisar de manera exhaustiva las credenciales humanitarias y ambientales de las instituciones con las que desarrollan alianzas y proyectos conjuntos, y poner a la universidad a la altura de los estándares internacionales en derechos humanos y sostenibilidad ambiental.

Solidarizamos con académicxs, funcionarixs y estudiantes de Chile y del mundo que ya han comenzado a recibir presiones censuradoras y medidas represivas. Eso es lo que pasa cuando las autoridades están más comprometidas con darle espacio al sionismo que con garantizar las libertades democráticas.

Celebramos la valentía estudiantil y saludamos la intifada universitaria global.

¡Viva Palestina libre! ¡Fin al genocidio y a la ocupación!

Coordinadora por Palestina

Fuente de la Información: https://rebelion.org/a-76-anos-de-la-nakba-en-medio-de-la-intifada-universitaria-global-contra-el-genocidio/

 

Comparte este contenido:

Argentina ¿Tiene futuro la democracia?

¿Tiene futuro la democracia?

Ángel B. Gómez Puerto

Recientemente he participado como ponente en un coloquio para abordar un asunto amplio, complejo, poliédrico, en permanente revisión y debate, la democracia. El oportuno evento ha estado organizado y moderado por el Aula de Oratoria y Debate de la Universidad de Córdoba y tuvo lugar en el Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras de Córdoba. En el mismo hemos participado docentes universitarios de Historia, Sociología y Derecho. El coloquio fue abierto por el Presidente del Consejo Social y por el Director General de Estudiantes de la Universidad de Córdoba

Pretendo expresar en este texto las respuestas a las preguntas formuladas y las conclusiones que expresé para mejorar nuestro actual Estado democrático.

En el debate se planteó, en primer lugar, la cuestión de qué es la democracia del siglo XXI, cuáles son sus actuales características identitarias y si cabe democracia sin la conocida separación o división de poderes del Estado. En este momento histórico, el reto democrático debería ser la ampliación de las posibilidades de participación política de la población y la mejora en la conexión pueblo-representantes políticos. A este respecto, considero que el principio democrático ha de estar presente en los tres poderes, Legislativo, Ejecutivo y Judicial. La separación de poderes es una de las características del Estado de derecho, el primer estadio de la organización racional del poder que conocemos como Estado, que tiene su origen en las revoluciones liberales de final del XVIII y el XIX. Luego vendrían el Estado democrático, acceso paulatino de la población al poder con el sufragio censitario (y capacitario), sufragio masculino, y sufragio universal, con la consecución, que no fue sencilla, del sufragio activo y pasivo femenino; y por último, el Estado social, con un componente activo para mejorar las condiciones materiales de la vida de la población, la felicidad. Estas dos dimensiones del Estado, democrática y social, son la clave para una conexión estrecha poder-pueblo.

En segundo lugar, se planteó también si es una utopía el sufragio universal y si existen sistemas alternativos de elección de los gobernantes como puede ser la lotocracia. Mi respuesta fue clara, el sufragio universal no es una utopía, es una condición básica, mínimo, para que podamos hablar de un Estado democrático. No creo que lotocracia, elección por sorteo de los representantes políticos, deba ser un sistema completamente alternativo, podría ser objeto de experimentación en comunidades pequeñas. Soy más partidario que las personas que quieran presentarse a unas elecciones lo puedan hacer como una candidatura uninominal y que se garantice igualdad de armas con los partidos políticos. Lo que creo que hay que revisar y reforma es el actual Estado de partidos, un régimen constitucional cuasi monopolístico para los partidos políticos fruto de un pacto entre partidos políticos (transición) tras 40 años sin partidos políticos.

En tercer lugar, se abordó el sistema de participación política y las implicaciones que presenta la democracia participativa. Afirmé en el coloquio que vivimos en una democracia típicamente representativa, democracia liberal, con algunas correcciones de democracia directa como el referéndum y la iniciativa legislativa popular (ILP). Pero, lamentablemente, el referéndum prácticamente no se ha utilizado en 45 años (1986, en el referéndum sobre la OTAN; y en 2005, Tratado de la Constitución Europea). Y el instrumento de la ILP, tiene demasiadas exigencias y con materias vedadas. Creo que hay que reformar ambos instrumentos de participación directa: el referéndum debería poder pedirse por una parte de la población (con firmas) y debería ser vinculante su resultado (actualmente consultivo), y deberían suavizarse las exigencias para la ILP (en estos 45 años se han presentado 60 y solo 2 la Mesa del Congreso autorizó pasarlas a debate).

En cuarto lugar, se nos preguntaba si España es una sociedad democrática avanzada, tal como establece el Preámbulo de nuestra Constitución de 1978. Considero que España sí es una democracia representativa clásica, pero no una sociedad democrática avanzada: no se ha dado opción al pueblo de participar en referéndum salvo en dos ocasiones excepcionales, en las escasas reformas constitucionales que ha habido (el artículo 13.2 en 1992 y el 135 en 2011, o la reciente reforma del artículo 49) no se consultó en referéndum al pueblo (es cierto que por el sistema de reforma constitucional no era preceptivo, pero los partidos proponentes podrían haber consultado, ni hubo un 10% de los diputados que lo pidieran).

Para ser una sociedad democrática avanzada no basta solo con votar. Además, uno de los tres poderes, el Judicial, no está realmente democratizado. Me explico, el poder judicial en España lo conforman los 5.500 jueces que juzgan y hacen ejecutar lo juzgado. Y su órgano de gobierno, el CGPJ, lleva 5 años fuera de la Constitución, con su mandato caducado. Yo propongo la elección popular de dicho CGPJ, de entre personas juristas de reconocida competencia que decidan presentarse a dicha elección.

Por último, se nos planteó qué limitaciones o déficit democrático presenta el actual funcionamiento del Estado constitucional y qué reformas podrían presentarse para conseguir un Estado más democrático. Expresé que es la poca participación de la población en la toma de decisiones relevantes, y el hecho de que los partidos políticos (o sus cúpulas) tengan actualmente mediatizado las posibilidades de participación política o la renovación parlamentaria de órganos constitucionales clave como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) o el Tribunal Constitucional (TC).

Estas son las propuestas que formulé, que de manera extensa se recogen en mi reciente ensayo “Los partidos políticos en la Constitución, las entrañas de la democracia (Dykinson, 2024 ): listas abiertas en todos los procesos electorales, eliminar las actuales listas cerradas y bloqueadas, que producen que las cúpulas de los partidos políticos sean, de facto, la dirección del Estado; primarias abiertas obligatorias para la elección de las candidaturas electorales; posibilidad de referéndum a petición del pueblo y que sea vinculante el resultado; posibilidad de candidaturas ciudadanas uninominales; que las promesas electorales tengan que registrarse en un registro público y que tenga consecuencias su incumplimiento injustificado (revocación del cargo, no pueda volver a ser candidato…); elección popular, de entre juristas, del CGPJ y del TC, o la elección popular abierta de la persona titular de la institución del Defensor del Pueblo.

Reflexiones finales que expresé en el coloquio

Democracia es poder del pueblo. Un Estado será democrático si se relacionan de manera efectiva, dinámica y participativa dos de los elementos esenciales de todo Estado: poder y pueblo, en el sentido de que el poder sea ejercido, al menos de manera indirecta, por la población mayor de edad de un territorio (tercer elemento).

Democracia no solo es votar de manera periódica para elegir a nuestra representación política. Este es el mínimo contenido para considerar que un Estado es democrático, en el sentido de democracia representativa liberal.

Para que podamos considerar que vivimos en una sociedad democrática avanzada se ha de contar con la voluntad del pueblo de manera permanente, o lo más constante posible: referéndum, ILP, órganos administrativos de participación, etc. La digitalización posibilita la implementación de herramientas de participación política.

Asunto clave también para que podamos disfrutar de una sociedad democrática avanzada es la educación / formación sobre la democracia, sobre la importancia de participar en la vida pública, política, en el cuidado del bien común, que también es contar con una democracia. Esto es clave para evitar futuros colapsos democráticos ante tentativas autoritarias.

En España, creo que es necesario que un nuevo poder constituyente ejerza sus facultades para una nueva Constitución. La inmensa mayoría de la actual población no pudimos votar, por razones naturales, la actual Constitución. Creo que esto dinamizaría nuestra democracia e implicaría a la población joven en el proceso democrático.

Realmente, este coloquio-debate sobre Democracia del pasado 13 de marzo (2024), resultó un espacio de libertad de expresión y reflexión muy interesante, con amplia participación del público en la fase de coloquio posterior a la intervención de las personas que tuvimos la oportunidad (y privilegio) de poder exponer nuestras consideraciones y propuestas.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

 

Fuente de la Información: https://rebelion.org/tiene-futuro-la-democracia/

 

 

Comparte este contenido:

Ecología Social – Día de la Tierra: un planeta más caliente, desertificado y cubierto de plásticos

Día de la Tierra: un planeta más caliente, desertificado y cubierto de plásticos

“Planeta versus plásticos” es el lema elegido por la ONU para la conmemoración anual, a la espera de un demorado acuerdo global que frene la contaminación generada por el uso efímero y desmedido de ese material. En paralelo, causas como la desertificación y la pérdida de biodiversidad en los suelos no se detiene y se pronostican nuevos récords de temperaturas.

La conmemoración del Día de la Tierra surgió con el objetivo concientizar a nivel global sobre las problemáticas que afectan al planeta por la acción humana y la consecuente crisis climática. Este 2024 se espera que sea el año con las mayores temperaturas registradas de la historia. Por otro lado, muchas de las causas siguen sin modificarse: avanza la desertificación de los suelos y el desmonte como consecuencia del agronegocio. Mientras tanto, los gobiernos, convocados por los organismos internacionales, siguen sin alcanzar un acuerdo que limite la contaminación por plásticos. A la espera de las negociaciones que deberían cerrarse a fines de este año, la ONU eligió como lema “Planeta versus plásticos”.

Los orígenes del Día de la Tierra se remontan a 1970, cuando más de 20 millones de personas participaron en una movilización masiva en Estados Unidos para crear conciencia sobre la vulnerabilidad del planeta. Dos años más tarde, en 1972, tuvo lugar la primera conferencia internacional sobre medio ambiente, conocida como la Cumbre de la Tierra, que se realizó en Estocolmo. Ese mismo año se presentó el informe «Los límites del crecimiento», el ya clásico estudio encabezado por la biofísica Donella Meadows, que ya entonces marcaba la imposibilidad del crecimiento infinito.

Enfocada en las negociaciones internacionales por un acuerdo para revertir la contaminación por plásticos, la Organización de las Naciones Unidas informó que, actualmente, se producen 380 millones de toneladas de plástico por año y solo el 9 por ciento de lo producido hasta ahora se ha reciclado. Dos tercios de los plásticos son para usos efímeros y, en un tiempo breve, se convierten en residuos: envoltorios y bolsas, por ejemplo. Desde el organismo advierten que, si se mantiene la tendencia actual, la producción de plástico se triplicará de aquí a 2060.

La ONU también informa que hay más de 16.000 sustancias químicas asociadas a los plásticos, muchas de ellas fuente de preocupación dada su elevada toxicidad, que puede repercutir en la salud humana y en la naturaleza. «Algunas de esas sustancias químicas se pueden lixiviar a lo largo del ciclo de vida completo del plástico y aparecer en el aire, el agua y el suelo. Las mujeres y los infantes son especialmente vulnerables a esas sustancias tóxicas, pudiendo la exposición tener efectos de larga duración en la salud», alertan.

En marzo de 2022, en la quinta sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA), se acordó formular un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos, incluso en el contexto marino. La resolución se titula «Fin de la contaminación por plásticos: hacia un instrumento internacional jurídicamente vinculante» y establece que el tratado debe abordar el ciclo de vida completo de los plásticos y planteó la aspiración de concluir las negociaciones para finales de este año.

Aunque la contaminación por plásticos se abordaba con frecuencia como un problema de gestión de residuos, el concepto de contaminación por plásticos abarca todos los efectos nocivos y las emisiones resultantes de la producción y el consumo de materiales y productos plásticos a lo largo de todo su ciclo de vida. En Argentina, una país con importación de basura para su uso industrial, el gobierno de Alberto Fernández promovió una Ley de Envases que naufragó en el Congreso.

Producir alimentos en tierra arrasada 

Para cultivar alimentos se requieren suelos sanos y con biodiversidad, ya que contienen una gran cantidad de organismos de gran valor que contribuyen a producir plantas sanas. Según la FAO, cerca del 95 por ciento de nuestros alimentos se producen sobre los suelos.

“Labrar el suelo puede provocar su compactación, una disminución de la absorción de agua y una reducción de la materia orgánica. El uso excesivo o inadecuado de fertilizantes, la maquinaria pesada y el agua de riego de baja calidad pueden provocar la degradación del suelo y sus propiedades”, advierten desde el organismo.

Cada año se pierden al menos 100 millones de hectáreas de tierras sanas y las mismas «se están degradando más rápido de lo que podemos restaurarlas». Esa es la conclusión del estudio publicado por la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD).

Entre 2015 y 2019, según los datos de la CNULD, el mundo perdió al menos 100 millones de hectáreas de tierras sanas y productivas cada año, lo que equivale a dos veces el tamaño de Groenlandia. El informe indica además que la degradación de tierras se acelera en África, Asia y América Latina. En África subsahariana y en América Latina y el Caribe, 163 millones de hectáreas y 108 millones de hectáreas, respectivamente, han sucumbido a la degradación de tierras desde 2015.

Mientras tanto, el número de personas que padecen inseguridad alimentaria aguda en el mundo se duplicó. La cifra se incrementó de 149 millones, antes de la pandemia Covid-19, a 333 millones en 2023, según datos del Programa Mundial de Alimentos (PMA).

Por otro lado, en 2021 la FAO precisó que la expansión agrícola es la causa de casi el 90 por ciento del desmonte mundial. Desde 1990 se arrasaron 420 millones de hectáreas de bosque. Las zonas más afectadas fueron Sudamérica, África y Asia (sur y sudeste).

Cada vez más calor

El año 2023 fue el más caluroso con récords en niveles de emisión de gases de efecto invernadero, calor y acidificación de los océanos, lo que aumentó el nivel del mar y afectó a los glaciares. Así lo mostró un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), entidad portavoz autorizada de las Naciones Unidas sobre el clima y el agua. El año pasado, la temperatura promedio global de la superficie terrestre superó 1,45 grados centígrados por encima de la línea de base preindustrial.

Se estima que las concentraciones de dióxido de carbono (CO2), metano y óxido nitroso, alcanzaron niveles récord en 2022 y continuaron aumentando en 2023. En un día normal de 2023, casi un tercio de la superficie del océano se vio afectada por una ola de calor marina, que dañó ecosistemas y sistemas alimentarios vitales. Asimismo, las temperaturas de la superficie marina en el golfo de México y en el Caribe, y la marca del fenómeno El Niño produjo alteraciones en los regímenes de lluvias y sequías en la región. En tanto, los glaciares sufrieron la mayor pérdida de hielo registrada desde 1950, con un derretimiento extremo tanto en el oeste de América del Norte como en Europa.

Entre las zonas de sequía más significativas estuvieron algunas regiones de Brasil, Argentina y Uruguay, lo que afectó el abastecimiento de agua en ciudades como MontevideoSe espera que el 2024 sea el año más caluroso jamás registrado, con una temperatura media anual mundial que supere el umbral de 1,5ºC, respecto a los niveles preindustriales, un parámetro de alerta fijado por el Acuerdo de París. Los datos fueron confirmados por el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S), implementado por el Centro Europeo de Predicción Meteorológica a Medio Plazo (ECMWF).

Fuente: https://agenciatierraviva.com.ar/dia-de-la-tierra-un-planeta-mas-caliente-desertificado-y-cubierto-de-plasticos/

 

Fuente de la Información: https://rebelion.org/dia-de-la-tierra-un-planeta-mas-caliente-desertificado-y-cubierto-de-plasticos/

Comparte este contenido:

Las tareas pendientes con la educación comprometen el futuro de Brasil

Las tareas pendientes con la educación comprometen el futuro de Brasil

Fernando de la Cuadra

En el contexto actual, en el que se está debatiendo el presupuesto nacional (hecho que motivó una huelga de los y las docentes de Brasil), el autor analiza en este artículo el papel de la educación en la transformación social.


La crisis de la educación en Brasil, no es una crisis, es un proyecto.

Darcy Ribeiro

La educación en Brasil está pasando por una etapa de estagnación, sin que las nuevas autoridades asuman responsablemente dar un giro con respecto a la situación heredada de los dos gobiernos anteriores, de Michel Temer y Jair Bolsonaro. Como nos advierte Darcy Ribeiro, parece que históricamente la función de la educación en Brasil ha sido la de profundizar las diferencias entre una elite culta, letrada y hasta erudita y una gran masa de analfabetos destinados a cumplir el papel de fuerza de trabajo barata y dócil. Los avances realizados en el campo pedagógico –como los realizados por Paulo Freire a comienzos de los años sesenta– siempre tuvieron que enfrentarse con la férrea oposición de quienes rechazaban los avances civilizatorios que la educación podría representar para el país, alfabetizando y dando carta de ciudadanía a los grupos más pobres y excluidos de la población.

En ese sentido, Paulo Freire era considerado un subversivo, pues su discurso lúcido y movilizador estaba impregnado de un espíritu libertario y democrático. Así, como apuntaba acertadamente en una de sus memorables páginas de La educación como práctica de la libertad: “La salud para esta extraña democracia es el silencio del pueblo, su quietud. Es la sociedad cerrada, es la inmovilidad. De ahí que los defensores de este tipo de democracia postulen la necesidad de preservar al pueblo de lo que llaman ‘ideas exóticas’, en último análisis: todo lo que pueda contribuir a la presencia activa del pueblo en su proceso histórico”.

De esta manera, el proyecto de llevar adelante el método freiriano de educación de adultos[1], fue dramáticamente interrumpido por el golpe de Estado civil-militar-empresarial de 1964 y desde entonces el camino hacia la universalización de la educación en Brasil ha sido largo, tortuoso y descontinuado. Uno de los infaustos legados que dejó la dictadura fue la de concebir que una educación pública, gratuita, universal y de calidad es un proyecto grandioso para el cual el Estado no tiene condiciones de financiamiento.

Independiente de la capacidad de gestión de ciertos gobiernos por llevar adelante un plan que asegure una educación como un derecho fundamental para toda la población, lo que sugiere la experiencia brasileña es que, en la disputa entre un proyecto de sociedad más inclusivo, participativo y pluralista contra otro más elitista, excluyente y estratificado, esta última visión ha salido victoriosa hasta el momento. A la estructura de resabios coloniales en que funciona el país habría que sumarle un Congreso reaccionario que pone innumerables obstáculos a cualquier medida orientada a mejorar la calidad de vida de los sectores más carentes.

El gobierno Lula les prometió a los brasileños un periodo de bienestar y prosperidad, pero a las ilusiones y expectativas de los primeros meses le han seguido las indicaciones de que el Ejecutivo se encuentra más preocupado con la austeridad fiscal que con mejorar las condiciones concretas de vida de la mayoría de la población. Quienes se sienten desilusionados con los escuálidos avances de un gobierno que se autoproclamaba popular, pueden ser confundidos y cooptados por las falsas promesas del bolsonarismo y la extrema derecha. La disminución del presupuesto para salud y educación contrasta con los fondos destinados para la compra de armamentos y suministros para las Fuerzas Armadas[2]. Por su parte, los salarios de los profesores -en todos los niveles del sistema educacional- difieren escandalosamente con las exorbitantes remuneraciones que reciben los oficiales de las tres ramas y con los sueldos recibidos por miembros de poder judicial.

Un profesor universitario en la cúspide de su carrera y con dedicación exclusiva, recibe en media, tres veces menos que un teniente coronel del ejército o un juez federal, sin considerar los beneficios y ayudas suplementarias que aumentan aún más los ingresos de estas categorías.

Por eso mismo, profesores y servidores de universidades federales, centro de educación tecnológica e institutos federales se encuentran en este momento en huelga a través de todo el país, teniendo el aumento salarial como principal reivindicación. Ellos solicitan un reajuste del 22 por ciento dividido en tres años, con inicio en mayo de 2024. Dicha reposición salarial cubriría apenas las perdidas inflacionarias acumuladas por los dos gobiernos anteriores. Diferentemente, el gobierno sólo ofrece un 9 por ciento dividido en 2 años y a partir del 2025. Este movimiento también ha recibido la solidaridad de técnicos administrativos y estudiantes, que reivindican conjuntamente la construcción de una universidad pública gratuita, de calidad y valorizada.

El Sindicado Nacional de Docentes de las Instituciones de Enseñanza Superior (ANDES) sostiene que además de la recomposición salarial, existe una necesidad urgente de reestructurar la carrera docente, junto con mejorar las condiciones de trabajo y la dignidad de los profesores. Asimismo, demandan la realización de un importante volumen de inversiones públicas en las instituciones federales de educación, visto el alto grado de deterioro y abandono de la infraestructura y de los servicios resultante de la nefasta administración de los gobiernos precedentes.

De hecho, la situación de la educación superior en Brasil se ha resentido enormemente en los últimos 8 años, desde que fue destituida a través de un golpe blando la ex Presidenta Dilma Rousseff. Pero no solamente la educación superior sufre los rigores de los recortes presupuestarios iniciados en el gobierno Temer con las medidas del llamado “techo de gastos”.

El país ocupa actualmente un preocupante lugar en el Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (PISA)[3]. En matemáticas y ciencias menos de la mitad de los estudiantes de 15 años consiguió alcanzar un nivel mínimo de aprendizaje, siendo que Brasil ocupó la 65° y la 61° posición en esas materias, respectivamente. Específicamente, en matemáticas, un 73 por ciento de los estudiantes no alcanzaron el nivel básico considerado por la OCDE para garantizar que los jóvenes puedan ejercer plenamente su ciudadanía. Ello se expresa concretamente en que 7 de cada 10 de estos jóvenes con 15 años no saben resolver problemas básicos como convertir el valor de dos dólares para su equivalente en moneda nacional (Real) o calcular el porcentaje de ingredientes necesarios para preparar una comida.

Según los datos del Instituto Todos por la Educación, el analfabetismo funcional de personas entre los 15 y los 64 años es de aproximadamente un treinta por ciento, donde un tercio de los alumnos que llegan al quinto año de escolaridad apenas consiguen leer y un veinte por ciento de los jóvenes que concluyen la enseñanza fundamental (hasta noveno año) no dominan el uso de la lectura y la escritura.

La situación del Magisterio es deplorable, pues junto con toda la carga horaria extenuante, los profesores reciben salarios que les imposibilitan llevar una vida digna y muchos de ellos deben buscar otras fuentes de renta fuera de sus actividades docentes.

En suma, una situación catastrófica que el actual gobierno no ha tenido la voluntad de alterar, inventando excusas y refugiándose en el argumento de que el país no puede invertir más en políticas sociales debido a sus compromisos con la responsabilidad fiscal y el ajuste presupuestario. Queda por lo tanto el triste recuerdo del gobierno de João Goulart que, con mucho menos presupuesto se lanzó decididamente a terminar con el analfabetismo y de mejorar sustantivamente la calidad de educación brasileña, con Paulo Freire liderando ese proceso.

Si los tecnócratas de plantón no recapacitan y no recuperan el legado pedagógico y transformador del patrono de la educación brasileña, este país condenará a las futuras generaciones a seguir siendo explotadas y despreciadas por las elites cavernarias y, en esa medida, se condenará a sí mismo.


Notas

[1] Con este método Paulo Freire lograba alfabetizar a personas adultas en solamente 45 días, como quedó demostrado en algunas experiencias realizadas por Freire a comienzos de la década del sesenta en Pernambuco y Rio Grande do Norte, para luego ser replicadas a nivel nacional durante el gobierno de João Goulart, en el marco del Plan Nacional de Alfabetización iniciado en enero de 1964.

[2] Solamente en el caso de la Marina, el gobierno está invirtiendo 100 millones de euros en cuatro submarinos convencionales (propulsión diésel-eléctrica) y otros 100 millones de euros en un submarino nuclear.

[3] Pisa es el principal examen internacional en educación que mide cada tres años el desempeño de estudiantes entre 15 y 16 años de edad (final del ciclo básico). Se realiza por medio de un test computarizado que dura dos horas en la cual se mide el desempeño en lectura, matemáticas y ciencia. El último Pisa (2022) fue realizado en 81 países, entre miembros y socios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Fernando de la Cuadra es doctor en Ciencias Sociales, editor del blog Socialismo y Democracia y autor del libro De Dilma a Bolsonaro: itinerario de la tragedia sociopolítica brasileña (editorial RIL, 2021).

Fuente: https://fmdelacuadra.blogspot.com/2024/04/las-tareas-pendientes-con-la-educacion.html

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Fuente de la Información: https://rebelion.org/las-tareas-pendientes-con-la-educacion-comprometen-el-futuro-de-brasil/

Comparte este contenido:

Chile – Por el derecho a la educación de las y los niños: No al proyecto de ley Sala Cuna Universal

Por el derecho a la educación de las y los niños: No al proyecto de ley Sala Cuna Universal

La educación a manos de privados favorece el lucro, reproduce la segregación socioeconómica y precariza la educación pública.

El Movimiento de Mujeres de Clase emitió un comunicado público respecto de uno de los proyectos de ley que afecta negativamente al conjunto de la sociedad del país: El proyecto de Ley de Sala Cuna Universal:

«Bajo el pretexto de favorecer la inserción laboral femenina, en los últimos días se aprobó en el senado el Proyecto de Ley Sala Cuna Universal. Este proyecto presentado, en primera instancia, bajo la administración de Piñera busca ampliar la lógica del voucher en la educación parvularia, promoviendo la entrega de subsidios a las mujeres trabajadoras formales y trabajadoras informales que cotizan en AFP. Este proyecto incentiva el mercado, la privatización y el lucro en la educación inicial, entregando fondos a las familias y debiendo las instituciones públicas y privadas competir por estos recursos.

Este proyecto de ley no incentiva el fortalecimiento de una educación inicial pública y de calidad, que permita el acceso universal de los niños y niñas. Excluye a los hijos e hijas de mujeres trabajadoras informales no cotizantes, estudiantes y dueñas de casa. Desconoce la necesidad educativa de los hijos e hijas de nuestra clase, promoviendo además, la aparición de guarderías privadas sin que exista regulación, y asumiendo como equivalentes la educación inicial con el cuidado domiciliario.

Este proyecto permite la remuneración de las labores de cuidado sin garantizar la preparación teórica y técnica necesaria, sin entregar condiciones de trabajo dignas, buscando perpetuar el confinamiento de las mujeres, impidiendo avanzar hacia una real socialización del trabajo doméstico, donde sea la sociedad y comunidades quienes se responsabilicen de las tareas cuidado y educación.

Desde el Movimiento de Mujeres Clasicas luchamos por salas cunas y jardines infantiles para todos nuestros niños y niñas. Luchamos por el derecho a la educación pública y de calidad desde la primera infancia. Luchamos también por contar con condiciones sociales que permitan a las mujeres y hombres de nuestra clase insertarse laboralmente, mientras los niños son cuidados y educados de forma digna e integral.

Por esta razón denunciamos lo nefasto de este proyecto de ley, que una vez más protege solo los intereses de quienes buscan generar riquezas. La educación a manos de privados favorece el lucro, reproduce la segregación socioeconómica y precariza la educación pública.

Salas cunas y jardines infantiles públicos, gratuitos y de calidad para los hijos e hijas de nuestra clase.

Fin a la privatización y a la educación de mercado.

Protección a la maternidad y paternidad en todos los centros labores y de estudios.

Avanzar a la socialización del trabajo doméstico y de cuidado»

Por su parte, la presidenta nacional de Aprojunji, Katherine Valle, explicó que “Aprojunji protesta ante un proyecto nefasto que se ha estado discutiendo por más de seis años. Estamos desde el inicio de esta discusión apoyando la idea de que los parlamentarios comprendan la importancia de cuidar la educación de los niños en su etapa inicial”.

Y añadió que “el corazón de este proyecto es la privatización. Se va a crear un sistema de voucher, con una plata que se le va a entregar a la mujer trabajadora que tendrá que buscar una persona que cuide a su hijo. Harán un sistema nacional de mujeres cuidadoras, donde una mujer en su casa podrá cuidar de tres a cuatro niños y a ellas le van a pagar. No se pensó en la educación de los niños, ya que será como una guardería, donde no tendrán supervisión de sus aprendizajes, ni menos habrá exigencia en su formación del día a día”.

En tanto, la directora nacional de Aprojunji, Silvia Céspedes, subrayó que “no vamos a dejar que este proyecto continúe y pondremos toda nuestra capacidad de organización para movilizarnos todos quienes defendemos los derechos de las trabajadoras/ trabajadores, pero especialmente de la educación de los niños y niñas de Chile”.

Fuente de la Información: https://rebelion.org/por-el-derecho-a-la-educacion-de-las-y-los-ninos-no-al-proyecto-de-ley-sala-cuna-universal/

 

Comparte este contenido:

Chile – Movimiento Social: sin amor y sin odio

Movimiento Social: sin amor y sin odio

A modo de ejemplo, digamos que la última movilización popular fue en contra de la dictadura. La penúltima, fue el proceso que llevó a Salvador Allende al gobierno popular. Que ambos procesos fueron traicionados, es harina de otro saco.

Durante años se ha dicho y escrito acerca de los movimientos sociales para referirse a una indeterminada cantidad de organizaciones con diversos rasgos y propósitos, que reúnen a personas de buena voluntad, más o menos enojados con el sistema y con el desconcierto a flor de piel, que intentan reunir a cuanta gente tenga algo en común para de vez en cuando salir a las calles a protestar y exigir derechos.

Es gente buena, muchas con historias, casi todos maltratados por el paso del tiempo, los bajos sueldos, los políticos malditos o las policías.

Pero, en rigor, en Chile no existe un Movimiento Social.

Esta afirmación de tono radical podría contradecir lo que durante decenios se ha visto en las calles: centenares de miles de mujeres y hombres, millones en otras veces, exigiendo justicia, democracia y derechos sociales conculcados puntualmente por los gobiernos que sucedieron a la dictadura.

Pero al otro día el mundo ha seguido girando sin inmutarse.

Sucede que desde hace mucho se confunden los desfiles callejeros, las marchas y protestas con un concepto mucho más complejo e interesante que es de la movilización. Como se ha visto y vuelto a ver, esos desfiles con batucadas y permisos de la gobernación, lo único que han logrado cambiar ha sido el sentido del tránsito. Y por algunas horas. Al otro día el neoliberalismo sigue anclado en lo más profundo de la cultura chilensis.

La movilización popular, es decir, el pueblo movilizado, hace referencia a una acción continua, masiva, que utiliza diversos e imaginativos mecanismos y formas de lucha, que despliega una política clara, goza de dirigentes prestigiados y se ordena por una estrategia sólida y construida por muchos, por todos o casi.

Pero, por sobre todo, el pueblo movilizado debe ser el portador/creador de una mística de tal envergadura humana, de tal profundidad legitimadora y de tal calado emocional, que seduzca en lo de muy adentro a la gente víctima del sistema, al extremo de decidirse por hacer los mayores esfuerzos y sacrificios por el triunfo.

La movilización popular es un proceso, un movimiento incesante que va, viene y vuelve a venir, que se articula con otros, que se propone metas y desafíos, que es capaz de generar una mística y que pone en el centro la lucha por los derechos de las personas, impulsado por un Movimiento Social asentado en una legitimidad capaz de vencer hasta el más incrédulo. Y al más sectario.

A modo de ejemplo, digamos que la última movilización popular fue en contra de la dictadura. La penúltima, fue el proceso que llevó a Salvador Allende al gobierno popular. Que ambos procesos fueron traicionados, es harina de otro saco.

Digámoslo: un Movimiento Social es ante todo un movimiento político que se propone una resistencia transformadora, contrario a la hegemonía; que se articula a partir de sus propias experiencias, aprendizajes y errores; su estrategia es superar el orden dominante con el protagonismo inevitable del pueblo, el que, desde abajo y horizontalmente, debe ser capaz de gestar un pensamiento y una acción, una acción y un pensamiento, que proponga una nueva manera de vivir. Otro país. Otro mundo.

En pocas palabras, se trata de incursionar en la política, el dominio en donde las cosas concretan el cambio, con una estrategia que ordene, proponga el paso y ritmo, pensando con propia cabeza y caminando por propio pie, superando las formas tradicionales de hacer política.

Un Movimiento Social es ante todo una expresión política transformadora a partir de asumirse como sujetos de la transformación y no como simples herramientas de otros, para abrir camino hacia una sociedad que descarte al capitalismo y sus lacras inhumanas. Ya vemos que el fracaso de este orden es el que tiene a la humanidad al borde de la locura y de la muerte porque para intentar sobrevivir aumenta la rapiña, el genocidio y la depredación.

En nuestro país esta mecánica necesaria de los pueblos, no se ha visto ni por asomo. Quizás en algunos colectivos, marginales aun cuando valiosos y empeñosos, que hacen esfuerzos por mostrar caminos novedosos, pero, en general, ha dominado el egoísmo y el interés de grupos que no quieren perder sus prerrogativas.

Prácticamente todas las organizaciones gremiales, sindicales, estudiantiles, campesinas, obreras y de cualquier otra índole u origen, han sido puntual y metódicamente arrasadas por la políticas neoliberales sin que sus dirigentes hubiesen tomado debida cuenta del suceso.

Y, en muchos casos, se puede sospechar que esta debacle generalizada ha sido con su anuencia.

Desde que el tiempo es tiempo, se ha entendido que los llamados a hacer política son los partidos y que los sindicatos, gremios u otras agrupaciones de trabajadores y del pueblo llano, solo deben confiar en el cometido de sus representantes en el gobierno, Congreso y todo lo demás.

Pero un genuino movimiento social, empoderado con la fuerza del pueblo organizado, con todas las razones de la moral y la historia, con una propuesta que seduzca, tiene el derecho y la obligación de asumirse como sujeto del cambio y no como un grupo de personas sometidas a la buena voluntad de los partidos, por muy populares que sean o que hayan sido.

El movimiento social debe poner en juego la cuestión del poder, es decir, debe llevar su gestión mucho más allá de lo meramente reivindicativo, y trazar sus propia estrategia y formas de lucha, armados con la fuerza de una articulación tejida horizontalmente, de abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo y de un lado hacia el otro.

A esta mecánica democrática y democratizadora, se han opuesto sistemáticamente los partidos de izquierda al mismo tiempo que sus orgánicas han tendido a desparecer. Su influencia en el mundo popular ha ido menguando en proporción directa al grado de institucionalización que han aceptado en un orden que ha perfeccionado y profundizado el neoliberalismo.

A las organizaciones de trabajadores, pobladores, campesinos, Centrales, Confederaciones, federaciones, sindicatos nacionales y gremios, el sistema les quitó el oxígeno asfixiándolas, sin prisa, pero sin pausa, mediante leyes con ocultos incisos contrainsurgentes.

Un día despertamos y esas otrora grandes organizaciones de trabajadores ya no tienen ninguna importancia. Para qué decir la CUT. Se quedaron en alguna parte inofensiva de la historia, al amparo del poder.

Lo que ha faltado para resolver la contradicción entre neoliberalismo y democracia ha sido, precisamente, la irrupción de un vasto Movimiento Social que se proponga disputar el poder en cada uno de los espacios en que este se expresa, poniendo sobre la mesa su propio proyecto de economía, educación, cultura, municipio, región y lo que sea.

Resulta alarmante y vergonzoso que la gente víctima de la economía, de la represión, que ha puesto el pecho a las balas y el lomo al apaleo, que ha sido perseguida, maltratada, ninguneada, despreciada, no tenga nada qué decir, ni sepa cómo hacerlo si tuviera, cuando arrecia en su expresión más descarnada e infame un orden corrupto, ladrón y homicida.

Los sucesos del octubre de 2019 dejaron muy claro que lo que faltó fue, precisamente, esa construcción hecha por la gente, esa cercanía que desordene ordenadamente, una inteligencia colectiva que se proponga metas de rango estratégico, una decisión que tercie en la política y dispute el poder allí donde les duele a los dueños de todo.

Por sobre todo, que sea capaz de seducir al pueblo y le dé una razón profunda para desplegar su amor y su odio.

Fuente de la Información: https://rebelion.org/movimiento-social-sin-amor-y-sin-odio/

Comparte este contenido:

Qué Día de la Tierra Palestina, qué día antineocolonialista

Qué Día de la Tierra Palestina, qué día antineocolonialista

 Ramón Pedregal Casanova

“Después de los dramáticos sucesos del Día de la Tierra se produjo una breve reconciliación y se interrumpió la campaña de confiscación de tierra a gran escala -aunque por poco tiempo- . La región de Galilea no estaba totalmente judaizada, y se mantenía la tensión en las relaciones entre judíos y palestinos. En noviembre de 1978, los jefes de los consejos locales judíos de Galilea se reunieron con algunos funcionarios y ministros del gobierno en la ciudad de Carmiel, que se acababa de ampliar ocupando territorios árabes. A pesar de las protestas y los sacrificios de la comunidad local, Carmiel se extendía ahora sobre tierras expropiadas.”

Párrafo del capítulo titulado “Desde el Día de la Tierra a la Primera Intifada, 1976-1987, pertenece al libro “Los palestinos olvidados”. Es autor el historiador Ilan Pappé.

El Día de la Tierra Palestina es de recuerdo y de lucha, desde aquel 30 de marzo de 1976 en que una huelga general del pueblo de Palestina contra el robo de tierras por los sionazis, la colonización no se ha detenido. Si aquel día el ejército ocupante asesinaron a 7 palestinos, ¿qué diríamos de cuántos han sumado hasta el día 30 de marzo de 2024? Los invasores, ejército creado sobre bandas terroristas y alimentado por los regímenes europeos y EEUU – Inglaterra, está encargado de llevar adelante el genocidio en el que todos sus padrinos basan sus esperanzas de ganancia y hacer así más y más profundas las diferencias con los pueblos a los que han tenido colonizados y esperan volver a tenerlos. La conquista de Palestina es la puerta desde la que hacen cuentas de una guerra general que desarrolle su entidad ocupante.

Revisando trabajos sobre éste día tan significativo he encontrado el que les invito a leer a continuación, https://info.nodo50.org/Dia-de-la-Tierra-Palestina-patria.html, ahí podrán ver de cómo el sionazismo se había dedicado, además de ejercer de genocida, a tratar de despoblar de vegetación autóctona a Palestina, una de las formas de imposibilitar a los habitantes que puedan sobrevivir. Y si esa deforestación se contaba hasta 2016, ¿qué sabemos de lo que hacen hoy en Gaza y en Cisjordania? Además de los muchos más de los 32.000 palestinos asesinados y los 75.000 heridos, de las 6.000 bombas que diariamente tiran sobre Gaza, además de provocar la muerte por hambre y sed e infecciones de la población, la franja que la misma ONU ya declaraba en 2020 como territorio en que no se podría vivir, ¿qué hacemos hoy mirando los teléfonos, las televisiones, … todos esos medios y cadenas sionazis? Pues, si desde 1948 ningún órgano internacional ha puesto remedio, ¿creemos, podemos esperar, que la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que ha conminado a la entidad colonial a detener su genocidio, ustedes creen que se va a hacer cumplir el mandato? Por lo pronto los representantes del establecimiento que se sitúa fuera de toda ley han declarado que eso no les va a parar y han intensificado su matanza. ¿Seguimos mirando, seguimos dándonos golpes de pecho? ¿Seguimos dejando que los gobernantes prohíban defender a Palestina, perseguir a los que protestan por el genocidio, aguantamos a los regímenes y gobiernos que dicen que lamentan lo que “ocurre”, pero siguen poniendo armas en manos de los asesinos? ¿Seguimos viendo con indiferencia el que los traten con familiaridad, de asesinos porque tienen responsabilidad, familiaridad entre criminales, y nos hagamos los asombrados por la barbarie, eso si es que nos interesamos por saber y no creer sus mentiras?

No, la guerra ha dado un giro que apunta a enterrar la empatía, la solidaridad, la denuncia y la lucha que busca un mundo más justo, ¿no es hora de sumarse y hacer que caigan esos que quieren integrarnos en la mente su desprecio de los Derechos de los Pueblos? ¿No vemos cómo todos ellos desprecian las resoluciones de la ONU, hasta la última del Consejo de Seguridad? ¿Gentes de EEUU, de Inglaterra, de Europa -España, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, … creéis que es bueno que os dejéis conducir en medio del genocidio palestino? Pues preparaos, os quieren deshumanizados para emplearos en la guerra que buscan extender. Ni ellos, ni sus hijos van a caer bajo las bombas, vosotros sí. Apresuraros a defender a Palestina Gaza. El Día de la Tierra Palestina es un día ejemplar como punto de arranque para la Responsabilidad y Lucha por los Derechos de los Pueblos frente al neocolonialismo y el imperialismo.

Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Miembro de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN. Colaborador del canal Antiimperialistas.com, de la Red en Defensa de la Humanidad.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

 

Fuente de la Información: https://rebelion.org/que-dia-de-la-tierra-palestina-que-dia-anti-neocolonialista/

Comparte este contenido:
Page 2 of 29
1 2 3 4 29