Saltar al contenido principal
Page 29 of 657
1 27 28 29 30 31 657

Libro (PDF): Niñez en movimiento: del adultocentrismo a la emancipación

Por: Santiago Morales Y Gabriela Magistris

 

“Este libro es un desafío que obliga a sentir pensando y a pensar sintiendo, a mirar al mundo con la sorpresa y el espanto de quienes llegan recientemente a sus laberintos y encrucijadas, pero también desde una apuesta de vida”, afirma Claudia Korol en el prólogo de esta segunda edición. Nuestros sueños se actualizan, como una soberbia mariposa de alas anchas, cada vez que compañeras de su talla nos interpelan a seguir por el camino de revolucionar las revoluciones.

Descárgalo aquí:

Fuente de la información e imagen:  https://desinformemonos.org

Comparte este contenido:

“Soy porque somos un grito de lucha y de paz”: entrevista a Francia Márquez

Por: Verónica Gago/lobosuelto

Proyecto Ballena, el área del Centro Cultural Kirchner dedicado a producir imaginaciones y pensamientos para un presente mejor, este año propone analizar, discutir y desacordar sobre el sentido actual de la palabra LIBERTAD. Libertad como promesa incumplida, lucha revolucionaria y también señuelo para propuestas conservadoras. En este marco PROYECTO BALLENA recibe la visita de Francia Márquez, a pocos días de asumir como vicepresidenta de Colombia.

VERONICA GAGO: Buenas tardes. Muchísimas gracias por la espera, por el agite. Estamos felices de recibir hoy aquí a Francia Márquez Mina, vicepresidenta electa de Colombia. Como vemos, en Argentina su presencia ha generado un increíble furor, admiración, cariño. Y queremos agradecerle, una vez más, que comparta esta conversación hoy aquí, en el Centro Cultural Kirchner. Le hemos puesto de título sus palabras: “Soy porque somos un grito de lucha y de paz”. Esta conversación que tendremos en breve se da en el marco del Proyecto Ballena y, antes que nada, quiero invitar a Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz de Argentina. Él ha venido especialmente. Un fuerte aplauso.

ADOLFO PEREZ ESQUIVEL: Hola. Buenas tardes a todos y todas. Yo voy a pedir algo. ¿Me permiten? Ustedes nos ven a nosotros, pero nosotros no los vemos a ustedes y queremos verles los rostros, la sonrisa, la mirada. Por favor, enciendan las luces. Los pueblos no tenemos que esconder el rostro, tenemos que abrir la mente y el corazón para mirarnos y ser solidarios con el pueblo hermano de Colombia y con todos los pueblos de esta América que nos convoca y nos desafía en construir una nueva sociedad. Yo, aquí, tengo el honor de presentar a la hermana, a la amiga, vicepresidenta de Colombia, que después de largas luchas… Francia Márquez. Ustedes la conocen. Y tenemos que cambiar el rostro, las miradas de todo el continente latinoamericano, ser pueblos libres y, para eso, necesitamos de las luchas, de las experiencias, de la solidaridad. Y hoy, en este desafío que tienen en Colombia, es una lucha que continúa y es cambiar, también, superar las muertes, las violaciones de los derechos humanos, la situación tan trágica que vive el pueblo colombiano. El derecho de hombres y mujeres en su diferencia, pero también en la igualdad de derechos. Esto es importante.

No me puedo quedar mucho tiempo, quiero presentar aquí a nuestra hermana Francia, pero después los dejó por un problema de salud simplemente. Pero no quería faltar en este momento tan importante para todos.

Permítame señalar una cosa. Aquí hay muchos compañeros, compañeras, hermanos, luchadores y luchadoras por el pueblo, la dignidad de la persona. Está Norita Cortiñas. También una madre que no está presente físicamente, pero sí está en la mente y el corazón, Mirta Baravalle, que viajaba a Colombia permanentemente para llevar la solidaridad, el amor, la fuerza, la lucha del pueblo colombiano.

Así que, simplemente, acompañarte. Van a traer muchas dificultades, pero sabes que cuentas con el pueblo argentino y que vamos a seguir juntos y juntas. Verónica es la periodista que va a conversar junto con ustedes. Aquí está el ministro Tristán Bauer, compañero de lucha. Y muchos otros y otras. Así que los dejo con ellas. Mucha fuerza y esperanza y hasta la victoria, siempre.

AUDIO EDUARDO GALEANO:

Los nadies: los dueños de nada,

los hijos de nadie,

los ningunos, los ninguneados.

Que no son, aunque sean.

Que no hablan idiomas, sino dialectos.

Que no profesan religiones,

sino supersticiones.

Que no hacen arte, sino artesanía.

Que no tienen cultura, sino a lo sumo folklore.

Que no son seres humanos,

sino recursos humanos.

Que no tienen nombre, sino número.

Que no figuran en la historia universal,

sino en la crónica roja de la prensa local.

Los nadies,

que cuestan menos

que la bala que los mata.

V.G.: Bueno, muchísimas gracias. Acabamos de escuchar un documento histórico porque es en la voz de Eduardo Galeano, este poema: “Los nadies”. Por supuesto que no es casual que elegimos este poema. Vos hablaste, Francia, en tu campaña a los nadies y a las nadies. Dijiste: aquellos y aquellas que habitan en la sierra, en las montañas, en los barrios. Y estamos acá, también, para darte la bienvenida con este poema y decir, también, que nos parece que estas palabras poéticas de Eduardo Galeano vos las convertiste en un programa político. Y es un momento para celebrar, porque sabemos además que estas elecciones que les dieron el triunfo a vos y a Gustavo Petro son las elecciones con menos abstención de las últimas décadas. O sea que hubo una convocatoria a votar que fue impresionante. Este triunfo también abrió un viento de cambio para la región y también una época nueva. Hoy se dice en Colombia: ganó la izquierda con un programa feminista, antirracista y ambientalista. Y eso es un montón.

En una semana vas a estar asumiendo y tenemos el enorme honor de tenerte acá, en esta gira sudamericana que hemos visto que está produciendo un montón de imágenes muy potentes de tus encuentros con distintos líderes y lideresas políticos populares, con distintas organizaciones, movimientos. Este encuentro acá es uno más de muchos que sabemos que estás teniendo y, de nuevo, te queremos agradecer porque nos sentimos muy honradas de poder, en el Proyecto Ballena, tenerte.

La cuestión que queremos preguntarte es, en primer lugar, también en palabras de Galeano, porque él, después de escribir los nadies, dijo estas preguntas: ¿es América Latina una región del mundo condenada a la humillación y a la pobreza? ¿Condenada por quién?, se preguntaba. ¿No será la desgracia un producto de la historia hecha por los hombres y que por los hombres puede ser deshecha? Tu voz les habla a todas, a todos y a todes, ya no solo a la figura del hombre universal y pone una esperanza, que es una esperanza radical para nuestro continente. Entonces, la primera pregunta que te quiero hacer es justamente esta: ¿es América Latina una región condenada a la humillación? ¿O, cómo podemos deshacer esta condena?

FRANCIA MÁRQUEZ: Buenas noches, Argentina. Quiero, en primer lugar, extender un saludo a todas las personas que, desde acá, vibraron con nosotros para que llegara un cambio para Colombia, que es un cambio para la región. Les extiendo un saludo de parte de nuestro presidente, Gustavo Petro Urrego. Por supuesto, un saludo a toda Colombia. Saludo a los colombianos y colombianas migrantes aquí, en la Argentina. Saludo a los pueblos originarios de la Argentina, los pueblos indígenas. Saludo al pueblo negro, afrodescendiente de Argentina. Saludamos, por supuesto, a la comunidad diversa LGBTIQ+. Saludo a las mujeres, a los niños, niñas que están aquí. Y, por supuesto, a todo el liderazgo social y político de Argentina, que ha mantenido un gobierno en resistencia. Agradecemos al Gobierno de Argentina por recibirnos con beneplácito, con mucho amor. Muchas gracias al presidente y, por supuesto, a la Vicepresidenta con quien, durante estos días, hemos tenido reuniones muy importantes para hablar de justicia, de paz, de lucha antirracista, de cambio climático y para hablar de muchos temas que ahora nos competen en el gobierno de Colombia, pero sobre todo a Latinoamérica.

Entonces, para dar un poco de respuesta a la pregunta, creo que cuando Eduardo Galeano, que bien supo describir a los nadies y a las nadies, que lo usamos, usamos su poema en campaña, precisamente para definir quiénes éramos los nadies. Para el caso de Colombia son los pueblos étnicos, indígenas, afrodescendientes, raizales, palenqueros. Para el caso de Colombia, son las mujeres que tienen que soportar el asesinato y las violencias sexuales y de género. Es la comunidad diversa, las mujeres trans que todos los días tienen que soportar sistemáticas violencias. Es el pueblo campesino a quien todos los días le despojan la tierra. Son los niños y niñas que mueren de hambre en un país que tiene tanta biodiversidad, pero que no les ofrece un plato de comida. Son los jóvenes que salen a las calles a marchar y les sacan los ojos para que no puedan ver el futuro, pero también los asesinan como una forma de expresión para silenciarles. Son todos aquellos hombres y mujeres que, en nuestras diversidades, hemos tenido que ver cómo una política neoliberal en nuestra región ha ido poniendo en riesgo todos los días la vida humana, pero que hoy ese aniquilamiento, esa extinción de la vida trasciende al ser humano y afecta nuestra casa grande, nuestro útero mayor, la Madre Tierra. Los nadies, los trabajadores y trabajadoras que resisten, que a pesar de que trabajan duramente, su salario no es compensatorio a todo el esfuerzo, a toda la mano de obra, todo el trabajo que realiza. Y que esa explotación se traduce en acumulación y acumulación de capital en manos de unos pocos, mientras los trabajadores y trabajadoras no tienen una vida digna. Desde ese lugar nos paramos y desde ese lugar enunciamos nuestra campaña, porque de allá yo vengo, de allá soy, de esos tirapiedras, como nos decían, o de los mamertos, como nos señala la ultraderecha para no reconocer nuestra humanidad, para no reconocer nuestra voz, o para seguir estereotipando o negando la lucha de los movimientos sociales en América Latina y en la región. Pues hoy esos tirapiedras, esos nadies, hemos llegado para el caso de Colombia, a ocupar el Estado, a ocupar el poder del Estado para gobernar en favor de los nadies y de las nadies, en favor de todos los colombianos y colombianas. Y para tejer una agenda de construcción de región que nos permita afrontar de manera colectiva los desafíos que tiene nuestra América, que tiene nuestra casa grande, que tiene la Abya Yala. Ese es el desafío que tenemos. Eduardo Galeano nos indagaba porque siempre hubo avances significativos importantes en otras naciones, mientras que Colombia apenas acaba de dar ese paso. Y no porque no haya habido resistencia. La resistencia siempre ha estado ahí. Yo crecí en medio de la resistencia. Una resistencia que no empezó conmigo, que empezó con pueblos traídos en condición de esclavitud a toda América, que fueron desarraigados de su condición humana y sometidos a condición de animales salvajes y que hoy los descendientes de esos hombres y mujeres seguimos haciendo un esfuerzo por dignificar nuestra. Mi presencia aquí no es la presencia de, simplemente, Francia Márquez. Soy muy consciente de que mi presencia es la representación de pueblos históricamente excluidos, marginados, racializados y olvidados. Por tanto, yo creo que esa pregunta de Eduardo Galeano era una incitación a seguir buscando caminos y horizontes, como naciones que nos permitan vivir en paz, vivir en dignidad, vivir con justicia social. Yo creo que no estamos condenados. Creo que el pueblo toma decisiones en los momentos en que debe tomarlas. Tristemente, nosotros nos tardamos bastante en Colombia para tomar una decisión del cambio. Esa tardanza nos ha costado muchas vidas, han sido muchas personas, muchos millones de seres humanos, que han sido afectados por la política neoliberal que hemos tenido en nuestro país. Así que el desafío, ahora, que asume Gustavo Petro, Francia Márquez, pero que asume el pueblo colombiano, es un cambio en favor de la paz, en favor de la justicia social, de la justicia racial, de la justicia de género, en favor de la dignidad, en favor del cuidado de la casa grande y ese desafío, por supuesto, lo asumimos con responsabilidad, con los pies colocados sobre la tierra y con todo el amor y el compromiso que ello implica.

V.G.: Es para aplaudir todo el tiempo. Ya se me cayeron todos los papeles por aplaudir. La impronta feminista antirracista en tu campaña, en tu discurso, fue muy fuerte. lo que queríamos preguntarte era de quiénes aprendiste. En tu infancia, para vos, quiénes fueron personajes, personas, afectos importantes en este aprendizaje.

F.M.: Bueno, aprendí de muchas mujeres. La primera enseñanza de la resistencia la aprendí en mi casa, con mi abuela, con mi mamá. Mi abuela que, aunque no supo leer y escribir, supo el valor de la vida. La aprendí de Paulina Balanta, otra mujer de mi comunidad que no sabe leer y escribir, pero ayer nos recordaba Carlos Rosero que está aquí, que ella nos decía que quien no lucha, no va al cielo. Lo aprendí de mujeres de aquí, de Argentina. Y aquí tenemos una matrona, que es una insignia de la resistencia y de la lucha de las Madres de Plaza de Mayo, de ahí aprendimos la resistencia. He aprendido de tantas mujeres que, aún sin tener nada, hacen lo que sea por sacar a sus hijos adelante, porque sus hijos se acuesten con el estómago vacío, porque sus hijos tengan una oportunidad de ir a la escuela, porque sus hijos no vayan con los zapatos rotos a la escuela, porque sus hijos, como lo son las mujeres del Pacífico colombiano, no sean arrebatados por la violencia, por los actores armados, por el conflicto armado. Ahí yo he aprendido la resistencia y, por supuesto, ahí, siendo una mujer negra, he aprendido a diferenciar los impactos del modelo económico de desarrollo, los impactos del patriarcado, las violencias de género. Y he aprendido ahí la interseccionalidad de raza, clase y género que, al principio, no lo teorizaba, pero después conocí a Ángela Davis y aprendí. No leyendo sus libros, sino escuchando de su propia voz las historias de lo que significó para ella, una mujer afrodescendiente negra, resistir frente al apartheid, frente a todas las políticas raciales de los Estados Unidos. De ella aprendí que las mujeres negras no están haciendo la lucha para romper el techo de cristal, sino que están haciendo la lucha para ponerse de pie y caminar con sus hermanas, igual que las mujeres indígenas, porque ellas siempre han estado de rodillas. O como lo dice Sojourner Truth, que pregunta ¿acaso no soy una mujer?, en pleno tiempo de discusión de la lucha feminista.  Porque mientras unas mujeres van adelante en una lucha, pues otras mujeres van atrás. Entonces el gran desafío que tenemos es ponernos y cogernos de la mano con las que apenas se están poniendo de pie para empujar sus propias reivindicaciones. La forma en cómo Angela Davis lo dice es: yo no estoy aquí para poderme de la mano con Hillary Clinton que está a punto de romper el techo de cristal, yo estoy aquí para cogerme de las manos con las mujeres negras del Bronx o, en el caso de Colombia, del distrito de Agua Blanca o del Cauca. Porque ahí están las verdaderas luchas de las mujeres que no se reclaman a sí mismas feministas, pero que lo son.

V.G.: Te quería preguntar sobre eso, porque tu militancia empieza de adolescente casi, en la región del Cauca, contra los megaproyectos extractivistas. Eran los años ’90, donde esas luchas tampoco tenían, tal vez, la difusión que tienen hoy o la popularidad que tienen hoy. Entonces, contanos para quienes no sabemos qué significa la región del Cauca y qué significaba para vos, como adolescente, esa militancia.

F.M.: Yo creo que las mujeres siempre han estado en la lucha, otra cosa es que esas luchas han sido invisibilizadas. Para el caso del norte del Cauca, pues la experiencia de la comunidad y de las mujeres primero es que esta es una región que vivió la esclavitud. Si ustedes van a esa región, que está al suroccidente de Colombia, todavía están las casas esclavistas. Popayán, que es nuestra capital, fue la casa de la Corona española. Y aún se llama la Ciudad Blanca. Y no es simplemente la Ciudad Blanca porque tiene las paredes pintadas de blanco, sino que hay un pensamiento colonial de ciudad blanca en términos de que los que habitan la ciudad son herederos de la Corona española. Mi abuelo me contó que cuando él iba a Popayán la gente le tocaba la piel para ver si su piel desteñía. De ese tamaño es el racismo. Pero también de ese tamaño es el racismo de la negación, que sé que lo vive aquí, en Argentina, la gente afroargentina. No hay un país, por lo menos de América Latina, que pueda negar la colonización y la esclavitud. Y si no hay un país de esta región que pueda negar eso, entonces tampoco puede negar la presencia de los pueblos originarios indígenas y tampoco puede negar la presencia de los pueblos negros o afrodescendientes. Desde ahí partimos. El norte del Cauca permanentemente ha sido un territorio en disputa, desde el tiempo de esclavitud hasta hoy. Entonces, yo aprendí con mi abuela que el territorio donde nosotros vivíamos no fue un regalo. Después de la abolición de la esclavitud, en ese territorio a la gente le tocó luchar para tener la tierra que nosotros habitamos. Entonces, mi abuela decía: a mis abuelos les tocó luchar y a ellas, que eran mineras artesanales, les tocó trabajar en las minas para ir juntando lo poquito de oro y sacar a sus maridos de la cárcel, que estaban luchando por la tierra frente a terrateniente. Entonces, mi comunidad tiene una conciencia clara de la importancia del territorio como un espacio de vida. La gente negra en el norte del Cauca aprendió que sin territorio no hay libertad. Y sin territorio no hay autonomía. Y esto no es solo la gente negra del norte del Cauca, sino que el campesinado colombiano también sabe eso. Sabe que la autodeterminación de los pueblos está arraigada a un territorio. A un territorio que, para muchos, es un espacio para obtener riqueza acumulativa, pero para otros es un espacio donde se reproduce la vida. Y eso es el norte del Cauca, eso es el Pacífico colombiano, eso es gran parte de Colombia. Así nos concebimos como pueblos. Así se concibe el pueblo indígena. No se conciben pueblo sin su arraigo cultural, y el arraigo cultural y espiritual está anclado al territorio. Nosotros tenemos una práctica ancestral que es de todo el Pacífico que la hacen las parteras. Las parteras son las mujeres que ayudan a una mujer a dar a luz en lugares donde la salud no llega, donde un médico no está, son estas mujeres que, con su sabiduría, ayudan a mujeres a dar a luz cuando van a parir. Mi mamá era partera. Y parte de lo que hacen es el ombligamiento, que consiste en enterrar el ombligo, enterrar las placentas, que arraigan a las personas. Nosotros decimos “nos sembraron el ombligo”. Y es que esa práctica, que parece una cosa antigua, pues para nosotros es el arraigo y el vínculo con nuestros territorios. De esa magnitud es el amor por la tierra, es la ancestralidad por la tierra. Y bueno, por eso nos hemos enfrentado a proyectos mineros, energéticos, que ahora que soy gobierno me toca mirar cómo es que vamos a hacer. Pero que, sin duda, son proyectos que se ven como el desarrollo, sin embargo, no generan bienestar. Del norte del Cauca hay una represa salvajina que dicen los viejos “esto es la salvajada”. Y es porque es un proyecto de de una gran represa energética. Tiene agua acumulada ahí, pero mi propia comunidad no tiene agua potable. Produce millones de megavatios de energía y la misma comunidad no tiene una electrificación adecuada. Entonces, la gente dice: bueno, de qué desarrollo estamos hablando. Y eso es parte de los desafíos que ahora tiene nuestro Gobierno. Es pensar realmente un desarrollo para el bienestar de la gente. De ese territorio vengo. El Cauca ha sido un territorio que ha padecido el conflicto armado. Pero en Colombia yo me siento orgullosa de ser caucana, porque allá ha nacido la resistencia también.

V.G.: O sea que la consigna “soy porque somos”, que es también el nombre de tu movimiento, tiene estos cuerpos, esta historia y este territorio detrás, ¿verdad? No es una consigna, como muchas veces se usa, solamente de marketing, sino con una densidad histórica muy importante.

F.M.: Bueno, nada de lo que hicimos en campaña fue simplemente marketing. Nosotros, al contrario, transgredimos el marketing político ya establecido. Todo el tiempo estuve discutiendo incluso sobre qué me colocaba sobre mi cabello, sobre cómo lo usaba, porque para mí eso es parte de una representación. Como dicen las mujeres brasileñas: aquí se trata de cambiar el color en las fotos de la representación del poder, el color y las imágenes. Pues nada fue solo marketing. Creo que hicimos una campaña muy desde el corazón, desde nuestras propias vivencias y desde la realidad. Por eso, los jóvenes escucharon. Por eso, las mujeres nos escucharon. Por eso, los campesinos nos escucharon. Por eso, mi pueblo que, aunque se decía que estaba dividido el pueblo negro, raizal y palenquero, masivamente votó por Gustavo Petro – Francia Márquez. Una campaña hermosa. No teníamos recursos ni las estructuras que se usan en campaña, pero estaban los jóvenes con toda su energía, estaban los artistas con toda su creatividad. Entonces “Soy porque somos”, como bien se conoce, es la filosofía Ubuntu. Este es una herencia africana. Una filosofía africana que, por supuesto, la hemos heredado y que para nosotros significa que yo soy, si ustedes son, que nosotros somos, si la casa grande es. No hay posibilidad de existencia de la vida humana sin la vida de la naturaleza. Y eso nos implica y nos obliga a nosotros a replantearnos cómo conservar la vida significa “soy porque somos”, que esto no es una apuesta individual, que es una apuesta colectiva. Implica mirarnos como familia extensa, como familia que va más allá de los lazos sanguíneos. Para nosotros eso no es un problema porque lo hemos hecho como pueblo afrodescendiente. Ha sido el pensarnos colectivamente que nos ha permitido resistir en el Pacífico colombiano, en el Caribe, a tantos años de barbarie, a tantos años de dolor, a tantos años de sufrimiento, de lo que ha sido la guerra, de lo que ha sido la exclusión, de lo que ha sido el racismo estructural. Entonces, “soy porque somos” hoy lo colocamos a toda la América a pensarse desde el Ubuntu. Y es una consigna que nos invita, como humanidad, a pensarnos desde otra lógica. Y es la lógica del cuidado de la vida desde lo colectivo. Por eso, apostamos a que Colombia sea una potencia mundial de la vida y es usando esa forma colectiva de vernos, de enunciarnos, de sentirnos, para el buen vivir, para el vivir sabroso, como hemos dicho, porque no hay otra forma. Hoy, como humanidad, tenemos un desafío enorme y es el desafío de enfrentar el cambio climático, la crisis ambiental y esto no va a pasar si no es que cada ser humano nos hacemos conscientes, si no es que los gobiernos nos hacemos conscientes de que estamos en un camino sin regreso del exterminio de la civilización humana. Entonces “soy porque somos” tiene ese sentido del sentipensar, como dice Arturo Escobar, de pensarnos desde lo colectivo.

V.G.: Nombrabas ese desafío de ahora pasar a ser Gobierno. Ahora en Chile dijiste: “soy tirapiedras y ahora me toca gobernar”. Ese es un enorme desafío y, además, el programa político del pacto histórico se propone estas grandes cuestiones como las que venís enunciando. Sabemos que hay una carga enorme de expectativas, no sólo de Colombia, sino de toda la región. ¿Cómo te preparas para esas expectativas, para este proyecto? Sabemos que va a haber ataques, ataques de la derecha, de los núcleos concentrados del poder empresarial colonial, que ya fueron agresivos en campaña, y sabemos que ahora van a venir con todo.

F.M.: Bueno, un país no se gobierna solo. Gustavo Petro y Francia Márquez creemos que tenemos toda la capacidad para liderar un nuevo proyecto de nación. Un proyecto de nación que se piensa desde abajo, desde la raíz, desde la periferia, para la justicia social, como ya lo he dicho. El mayor desafío que tenemos es el logro de la paz. Yo creo que el principal reto es lograr silenciar los fusiles en nuestro país. Pero la paz no es sólo el silenciamiento de los fusiles, sino atacar las causas que generaron la violencia, el conflicto armado. Y esas causas tienen que ver con el hambre. Esas causas tienen que ver con la falta de garantía de derechos. Esas causas tienen que ver con el abandono del Estado. Esas causas tienen que ver con el racismo. Nosotros ya hemos dicho que vamos a retomar el avance hacia la paz que implica la implementación de los acuerdos firmados entre las FARC y el Estado colombiano sin dilaciones. Nosotros no vamos a seguir haciendo trizas la paz, lo que tenemos que hacer trizas es la guerra. Tenemos que acabar la guerra en nuestro país. Y para ello se va a restablecer la mesa de diálogo con el ELN. Para eso hay una política de sometimiento, también, que se va a desarrollar frente a los otros actores armados. Eso fue parte de lo que quedó en el programa de gobierno que le presentamos a Colombia, Gustavo Petro, nuestro líder, y Francia Márquez, que fue por lo cual votaron los colombianos y colombianas. Para eso es necesario discutir la política de drogas que por muchos años ha sido ineficaz, ha servido para dejar la plata en los bancos y los muertos en los territorios. Yo creo que enfrentar la discusión, y por eso decidimos hacer esta gira, implica que Colombia lidere, pero es un debate de la región, el camino de la legalización de las drogas usando varias perspectivas:

Uno, es el cambio del uso de la hoja de la coca y de la marihuana. Creo que ahí se puede generar toda una industria económica en términos farmacéuticos, en términos alimenticios, en términos de industria textil, que les genere oportunidad a las mismas comunidades que han sido víctimas tanto del narcotráfico como de la política de drogas.

Dos, un enfoque de atención del consumo problemático como un problema de salud pública y no como un problema de criminalidad, entendiendo que el enfoque de criminalidad que se le ha dado a esta política ha sido un enfoque que ha impactado de manera negativa sobre los derechos y libertades de todas las poblaciones empobrecidas y racionalizadas. Las mujeres, los jóvenes, los pueblos étnicos son los que han vivido un impacto desproporcionado de estas políticas. Y en ese sentido, yo creo que resarcir esos efectos implica un nuevo paradigma de cómo atender eso. La política de cero tolerancia ha servido para profundizar la corrupción, que no ataca todo el eslabón de la cadena de lo que es el narcotráfico, sino que la droga sale del país y sale con la complacencia de muchos corruptos, incluso que han estado en las instituciones del mismo Estado colombiano.

Atender el tema del hambre significa que ningún niño o niña tenga que seguir muriendo de hambre y desnutrición, y esto implica una política de atención al campo colombiano que por muchos años se dejó olvidado y que, por eso, avanzó la criminalidad, por eso avanzó el narcotráfico, por eso avanzaron estas economías ilícitas que han puesto en riesgo la vida de las comunidades. Tener un enfoque de Derechos Humanos en todas estas políticas es una necesidad, pues los líderes y lideresas que han levantado la voz y que han puesto estos temas sobre la mesa, pues les ha costado la vida. Colombia es de los países en los que más líderes sociales y ambientales se asesinan en la región, así que es un desafío colocar el enfoque de Derechos Humanos en estas políticas que vamos a desarrollar. Desarrollar el campo colombiano necesitará tecnología, investigación, ciencia. Por eso, nuestro presidente y por supuesto nosotros le acompañamos en la propuesta de la educación gratuita y de calidad, como parte esencial para los cambios que requiere nuestro país.

Son muchos otros temas, pero de manera específica quiero decir que, en mi caso, mi tarea será liderar el Ministerio de la Igualdad que vamos a constituir. Esperamos que el 7 de agosto nuestro Gobierno esté presentando al Congreso ese proyecto de creación del Ministerio de la Igualdad para trabajar por los derechos de las mujeres, de las poblaciones diversas, de los pueblos étnicos, de la juventud y de las regiones históricamente olvidadas y excluidas, que son los que están en esos niveles de inequidad y desigualdad tan grande. Por supuesto, las personas con discapacidades o diversidades, es una necesidad trabajar con ellos y ellas también. Y bueno, eso es lo que yo voy a hacer: trabajar por la igualdad. En términos de Colombia sabemos que somos de los países más desiguales de la región y esto será un desafío. Mi experiencia es desde lo social, es desde lo comunitario, es desde la defensa de los derechos ambientales, es desde la lucha por los derechos de las mujeres y la lucha antirracista, y eso estará ahí, como parte de esa apuesta de gobierno.

V.G.: Hay una palabra que aparece mucho en el programa de gobierno que, insisto, tiene ese nombre tan lindo, “Colombia, potencia mundial de la vida”, y es una palabra olvidada que es la de transición. Ustedes apuestan a una transición y cuando se habla de transición es porque hay un proyecto, porque hay una perspectiva de futuro. Hablan de una transición energética, de una transición alimentaria, también de la tierra. Hablan de una reforma en los impuestos, es decir, a quiénes se van a cobrar impuestos y hablan de una reforma de salud. Son cuatro temas muy importantes para toda América Latina, muy importantes para Argentina y me gustaría si pudieras puntualizar en algunas de esas perspectivas de la transición, porque son maneras de hacerse cargo de la crisis planetaria, como decías antes, pero además tomar los temas de fondo que hacen a un modelo depredador, neoliberal y completamente destructivo.

F.M.: Lo de transición energética fue un tema con el que nos dieron palo. Casi que perdemos la elección, porque empezaron a decirles a los empresarios y a todo el mundo que era una apuesta al castrochavismo, que si llegábamos el 7 de agosto a la presidencia y a la vicepresidencia ese mismo día íbamos a cortar el chorro de la explotación del petróleo y del carbón. Y pues eso nunca se dijo y eso no es parte del programa. Lo que se dijo es que hay que hacer un tránsito. Y un tránsito implica un proceso. Un proceso de adecuación institucional, de adecuación en términos de infraestructura que implica investigación, que implica ciencia, desarrollo tecnológico, para poder hacer todo ese tránsito de la economía extractivista hacia una economía sustentable. Y pues eso fue lo que planteamos en el programa de Gobierno que pasa por la voluntad política. Y creo que nuestro presidente la tiene y pues yo mucho más. Porque tanto el presidente Gustavo Petro, un hombre con una sensibilidad humana impresionante y con un don de gente, como decía mi abuela, siempre está poniendo los valores sobre la vida en la mesa y yo creo que es eso: es una responsabilidad humana. Es el desafío que tenemos como humanidad, no tenemos otra alternativa. O cuestionamos nuestros privilegios y toda la cultura de lo que ha sido nuestra cultura de consumo, porque eso no es solamente la voluntad del Gobierno, las políticas de gobierno, sino que pasa por una transformación cultural. Es como sociedad que tenemos que empezar a reeducarnos sobre los desafíos que hoy tenemos en términos del cambio climático. Es una parte del Gobierno, pero otra parte es la responsabilidad que tiene que asumir la sociedad, que tenemos que asumir como humanidad. Y ahí yo creo que podemos ir haciendo los cambios. Entonces, es un proceso que se va a dar, que implica todo un ajuste tecnológico, de ciencia, de tecnología, de investigación, de adecuación institucional, de adecuación legislativa. Por eso, tener el Congreso mayoritariamente hoy, una buena bancada del Congreso, que nos alegra que la mitad de la bancada, por lo menos del pacto histórico, son mujeres y la mitad son hombres, eso es muy importante para todo el desafío que tenemos.

Frente a lo de la reforma tributaria, pues los principios que colocamos fueron los principios de Justicia tributaria. Es decir, quienes más tienen utilidades, pues tienen que aportar más en términos de la responsabilidad solidaria. Porque uno puede hablar bonito, pero es con plata que se pueden hacer las transformaciones. Y se requieren los recursos. La pirámide ha estado colocada en que quienes menos tienen son quienes más pagan en Colombia. Las exenciones tributarias se han colocado a los sectores más poderosos que efectivamente pueden pagar mayores impuestos, porque tienen una mayor utilidad. Pero, en realidad, quienes menos tienen son los que más aportan o, en muchos casos, aportan de manera igualitaria. Ahí no hay una justicia en términos tributarios. Invertir la pirámide será parte del desafío. Lo primero va a ser una un proyecto de reforma agraria que se va a elaborar para poder asumir los desafíos que implica el programa de gobierno.

V.G.: La fuerza de los paros en Colombia en el 2019, en el 2021, la lucha por el aborto victoriosa. ¿Pensás que son procesos políticos que también intervinieron en la victoria electoral?

F.M.: Sin dudas, sin dudas. Por lo menos en mí, sí. Y me motivaron mucho para decir sí tenemos que disputarnos el poder. Ver a tantos jóvenes en la calle, ver a tantas mamás en las calles, para mí fue realmente conmovedor. Y no eran los jóvenes universitarios que están acostumbrados al movimiento estudiantil que sale a la calle. No. Eran los jóvenes que no han pisado las puertas de una Universidad, los jóvenes que no han pisado las puertas de un colegio. Jóvenes que en el caso de Cali nos decían: hace muchos años no comía tan sabroso como comían en las ollas comunitarias que hacían las mujeres. Eran esos jóvenes que sentían que les han quitado todo, eran los nadies y las nadie que estaban en la calle. Por eso, también los señalamientos de terroristas, vándalos y criminales. Y por eso, no le tembló la mano al Gobierno para ordenar el asesinato de tantos jóvenes que perdieron la vida. A tantos que le sacaron los ojos. Tantas jóvenes mujeres que fueron violadas durante el paro. Pues todos ellos, con mayor razón, me movieron a decir: esto tiene que cambiar. Y bueno, aquí está el Senador Alexander López Maya que me acompañó en todo esto. Y tengo que confesar que una campaña de año y medio, a veces, sentíamos que ya no teníamos energía ni fuerza, pero nos levantábamos todos los días a las 3 para irnos porque decíamos entre nosotros: el desafío es muy grande, tenemos que responderles a esos muchachos, tenemos que honrar la memoria de todos esos muchachos y pues gracias a ellos, por lo menos yo siento que estoy aquí. Ellos se pusieron en primera línea en la calle en el paro, ahora yo me pongo en primera línea en el Gobierno para defender sus derechos. No nos olvidamos, están presentes. Por lo menos de parte mía, yo ya convoqué a varios abogados para que se pusieran ahí en primera línea a defenderles, porque creo que es injusto que a estos muchachos que buscan oportunidades, les hayan criminalizado sin ninguna respuesta a sus demandas. Ahí vamos a estar. Yo no soy el Poder Judicial para decir que ya los voy a sacar, pero sí por lo menos, a garantizar que se cumpla el debido proceso y que se le garanticen sus derechos en esos procesos.

V.G.: Para ir terminando esta conversación, quería ir a esa frase que algunos analistas dicen que cambió el estado anímico de Colombia, que es el de vivir sabroso. Y de alguna manera, también es la consigna que más polémica genera. Hemos leído que también se ha dicho si se puede pensar en vivir sabroso a la hora de pensar el conocimiento, la Universidad, las reformas técnicas de las que hablabas, como que genera una reacción clasista y racista muy fuerte esa consigna. Y a la vez, es la que más impacta. Y entonces quería que nos cuentes y que nos compartas por qué ha molestado, pero también su fuerza, su capacidad de este cambio anímico y afectivo en el país.

F.M.: Bueno, siempre que los conceptos salen del poder popular se cuestionan o se tergiversan. Y eso a mí no me preocupa. A mí no me preocupa que distintos medios de comunicación hayan intentado tergiversar el concepto del vivir sabroso. Y no me preocupa porque yo sé que mi pueblo sabe muy bien lo que eso significa. Y el pueblo colombiano y el pueblo afrodescendiente que usa como parte de su lenguaje popular y cotidiano el vivir sabroso, sabe que vivir sabroso es vivir en alegría, es vivir sin miedo, es vivir en paz, es vivir con derechos, es vivir con amor y eso, aunque intenten tergiversarlo, no nos los van a quitar, porque ese es un derecho. Tenemos derecho a vivir sin miedo. Tenemos derecho a vivir con alegría. Y la forma en que yo puedo expresar esto es que, en el Pacífico colombiano, en medio del conflicto armado, en medio de la escasez y en medio de las violencias, nosotros podemos decir: vivimos sabroso cuando nos juntamos a compartir un plato de comida; vimos sabroso cuando cogemos la marimba y entre todos nos reunimos para cantar la música tradicional nuestra del Pacífico colombiano o del Cauca. Nosotros vivimos sabroso cuando el 24 de diciembre en mi pueblo, mientras cada familia en la cotidianidad se va papá, mamá e hijo a pasar el 24 de diciembre en su casa, nosotros el 24 de diciembre nos juntamos toda la comunidad en una sola casa, donde celebramos el nacimiento del niño Dios y eso para nosotros es vivir sabroso. Vivir sabroso significa lo que hace mi mamá: que cuando no hay salud y una mujer va a parir, ellas ponen toda su sabiduría, todas esas mujeres se juntan para acompañar a esa mujer en ese momento, en el momento de la reproducción de la vida. Esos para nosotros son los valores tradicionales y ancestrales que aprendimos en nuestra comunidad, que los aprendimos como humanidad, pero que el modelo civilizatorio que hemos tenido nos hizo olvidar de esas prácticas, nos hizo creer que eran prácticas chapadas a la antigua o retrógradas, en vez de pensar que eran prácticas que nos permitían vivir como humanidad. Cuando yo escucho a la maestra Nidia de Timbiquí diciendo: “cuando aquí han venido los actores armados a silenciarnos, nosotros hemos seguido tocando el bombo y la marimba, y hemos logrado con nuestros instrumentos y con nuestra voz, con nuestros cantos tradicionales, silenciar la guerra”, para mí eso es vivir sabroso. Y nadie nos va a quitar eso. Por eso, nosotros invitamos al pueblo colombiano a apostarle al vivir sabroso. Claro que cuando terminamos la campaña yo dije hay que trabajar para vivir sabroso. Y me dijeron que ese no era el acuerdo. Pero claro que sí. Ese es el acuerdo, porque tenemos que devolverle la tranquilidad a nuestro país. Colombia es un país maravilloso. Latinoamérica es una región maravillosa. Y nosotros podemos vivir bien, podemos vivir en paz, podemos vivir en dignidad y sólo requiere del compromiso de cada uno y de cada una reconociéndonos en nuestra diferencia. En nuestro país, tristemente, la diferencia se convirtió en una razón para exterminar al otro, para asesinar al otro, para desaparecer al otro. Pues hoy, este este proyecto político le está devolviendo la posibilidad al pueblo colombiano y al pueblo latinoamericano de construir en nuestras diferencias. Son las diferencias que hacen de nosotros una región rica. Son las diferencias que hacen de nosotros una región poderosa. Y estoy segura de que ahí vamos a encontrar un mejor estar, un mejor vivir y un verdadero desarrollo humano, un verdadero desarrollo social, un verdadero desarrollo económico.

V.G.: Para seguir con tus palabras sobre vivir sabroso queremos invitar a la artista Beatriz Pichi Malen y a su músico Miguel Cruz que nos van a honrar y sumar la voz mapuche a esta conversación.

F.M.: Un aplauso.

CANTA BEATRIZ PICHI MALEN

BEATRIZ PICHI MALEN: Buenas noches a todos y todas. Bienvenida, hermana Francia, vicepresidenta de la República hermana de Colombia. Quisimos comenzar con este canto del viento porque, así como en su indómita actitud del viento se traslada por toda la tierra, nosotros, nosotras, los pueblos antiguos originarios del territorio y aquellos que fueron traídos, como los afrodescendientes, también somos libres a pesar de todo y de tanto, porque la tierra es una sola alma y migrar es un derecho.

CANTO A LAS BALLENAS POR BEATRIZ PICHI MALEN

V.G.: Muchísimas gracias, Beatriz Pichi Malen, Miguel Cruz.

F.M.: Ahora quiero, en este intercambio cultural, invitar a María Elvira Solís, una mujer del Pacífico colombiano, una mayora. También nos va a cantar una canción que es de la música tradicional del pueblo afrocolombiano del Pacífico colombiano. Gracias.

MARÍA ELVIRA SOLÍS: Muy buenas noches para todas y todos. Soy la mayora, como lo dice aquí la hermana Francia Márquez. Tengo varias canciones, pero vamos a cantar en este momento algo que tenga que ver mucho con la región pacífica, es la música sanadora de nosotros, de los pueblos negros, es nuestra herencia africana y es la música sanadora para nosotras, mujeres negras del Pacífico. Esta canción nace porque yo salí de mi territorio muy niña y no me acordaba que tenía una cultura, una herencia. Cuando retomo mi herencia, mi ancestralidad, entonces dije: bueno, yo hago parte también de allí, por qué canto otro tipo de música y no canto la que me pertenece.

CANTA MARÍA ELVIRA SOLÍS

V.G.: Hay una placa de reconocimiento también entregada en este momento. Por su lucha contra el racismo, por este feminismo antirracista que también nos comentó y nos contó hoy. Gracias, Francia.

F.M.: Bueno, muchas gracias a todo el pueblo argentino, al pueblo colombiano, al pueblo afroargentino, al pueblo indígena, a las mujeres, a los jóvenes, a los niños. Gracias a todas, a todos, a todes por este momento. Gracias y esperamos que, en cuatro años, cuando terminemos el Gobierno de Gustavo Petro – Francia Márquez, el Gobierno de Colombia, podamos seguirnos mirando a la cara con dignidad, con respeto. Y espero que en cuatro años mi corazón aún siga estando bien puesto. Muchas gracias.

Proyecto Ballena, el área del Centro Cultural Kirchner dedicado a producir imaginaciones y pensamientos para un presente mejor, este año propone analizar, discutir y desacordar sobre el sentido actual de la palabra LIBERTAD. Libertad como promesa incumplida, lucha revolucionaria y también señuelo para propuestas conservadoras. En este marco PROYECTO BALLENA recibe la visita de Francia Marquez, a pocos días de asumir como vicepresidenta de Colombia.

Entrevista a Francia Márquez

VERONICA GAGO: Buenas tardes. Muchísimas gracias por la espera, por el agite. Estamos felices de recibir hoy aquí a Francia Márquez Mina, vicepresidenta electa de Colombia. Como vemos, en Argentina su presencia ha generado un increíble furor, admiración, cariño. Y queremos agradecerle, una vez más, que comparta esta conversación hoy aquí, en el Centro Cultural Kirchner. Le hemos puesto de título sus palabras: “Soy porque somos un grito de lucha y de paz”. Esta conversación que tendremos en breve se da en el marco del Proyecto Ballena y, antes que nada, quiero invitar a Adolfo Pérez Esquivel, Premio Nobel de la Paz de Argentina. Él ha venido especialmente. Un fuerte aplauso.

ADOLFO PEREZ ESQUIVEL: Hola. Buenas tardes a todos y todas. Yo voy a pedir algo. ¿Me permiten? Ustedes nos ven a nosotros, pero nosotros no los vemos a ustedes y queremos verles los rostros, la sonrisa, la mirada. Por favor, enciendan las luces. Los pueblos no tenemos que esconder el rostro, tenemos que abrir la mente y el corazón para mirarnos y ser solidarios con el pueblo hermano de Colombia y con todos los pueblos de esta América que nos convoca y nos desafía en construir una nueva sociedad. Yo, aquí, tengo el honor de presentar a la hermana, a la amiga, vicepresidenta de Colombia, que después de largas luchas… Francia Márquez. Ustedes la conocen. Y tenemos que cambiar el rostro, las miradas de todo el continente latinoamericano, ser pueblos libres y, para eso, necesitamos de las luchas, de las experiencias, de la solidaridad. Y hoy, en este desafío que tienen en Colombia, es una lucha que continúa y es cambiar, también, superar las muertes, las violaciones de los derechos humanos, la situación tan trágica que vive el pueblo colombiano. El derecho de hombres y mujeres en su diferencia, pero también en la igualdad de derechos. Esto es importante.

No me puedo quedar mucho tiempo, quiero presentar aquí a nuestra hermana Francia, pero después los dejó por un problema de salud simplemente. Pero no quería faltar en este momento tan importante para todos.

Permítame señalar una cosa. Aquí hay muchos compañeros, compañeras, hermanos, luchadores y luchadoras por el pueblo, la dignidad de la persona. Está Norita Cortiñas. También una madre que no está presente físicamente, pero sí está en la mente y el corazón, Mirta Baravalle, que viajaba a Colombia permanentemente para llevar la solidaridad, el amor, la fuerza, la lucha del pueblo colombiano.

Así que, simplemente, acompañarte. Van a traer muchas dificultades, pero sabes que cuentas con el pueblo argentino y que vamos a seguir juntos y juntas. Verónica es la periodista que va a conversar junto con ustedes. Aquí está el ministro Tristán Bauer, compañero de lucha. Y muchos otros y otras. Así que los dejo con ellas. Mucha fuerza y esperanza y hasta la victoria, siempre.

AUDIO EDUARDO GALEANO:

Los nadies: los dueños de nada,

los hijos de nadie,

los ningunos, los ninguneados.

Que no son, aunque sean.

Que no hablan idiomas, sino dialectos.

Que no profesan religiones,

sino supersticiones.

Que no hacen arte, sino artesanía.

Que no tienen cultura, sino a lo sumo folklore.

Que no son seres humanos,

sino recursos humanos.

Que no tienen nombre, sino número.

Que no figuran en la historia universal,

sino en la crónica roja de la prensa local.

Los nadies,

que cuestan menos

que la bala que los mata.

V.G.: Bueno, muchísimas gracias. Acabamos de escuchar un documento histórico porque es en la voz de Eduardo Galeano, este poema: “Los nadies”. Por supuesto que no es casual que elegimos este poema. Vos hablaste, Francia, en tu campaña a los nadies y a las nadies. Dijiste: aquellos y aquellas que habitan en la sierra, en las montañas, en los barrios. Y estamos acá, también, para darte la bienvenida con este poema y decir, también, que nos parece que estas palabras poéticas de Eduardo Galeano vos las convertiste en un programa político. Y es un momento para celebrar, porque sabemos además que estas elecciones que les dieron el triunfo a vos y a Gustavo Petro son las elecciones con menos abstención de las últimas décadas. O sea que hubo una convocatoria a votar que fue impresionante. Este triunfo también abrió un viento de cambio para la región y también una época nueva. Hoy se dice en Colombia: ganó la izquierda con un programa feminista, antirracista y ambientalista. Y eso es un montón.

En una semana vas a estar asumiendo y tenemos el enorme honor de tenerte acá, en esta gira sudamericana que hemos visto que está produciendo un montón de imágenes muy potentes de tus encuentros con distintos líderes y lideresas políticos populares, con distintas organizaciones, movimientos. Este encuentro acá es uno más de muchos que sabemos que estás teniendo y, de nuevo, te queremos agradecer porque nos sentimos muy honradas de poder, en el Proyecto Ballena, tenerte.

La cuestión que queremos preguntarte es, en primer lugar, también en palabras de Galeano, porque él, después de escribir los nadies, dijo estas preguntas: ¿es América Latina una región del mundo condenada a la humillación y a la pobreza? ¿Condenada por quién?, se preguntaba. ¿No será la desgracia un producto de la historia hecha por los hombres y que por los hombres puede ser deshecha? Tu voz les habla a todas, a todos y a todes, ya no solo a la figura del hombre universal y pone una esperanza, que es una esperanza radical para nuestro continente. Entonces, la primera pregunta que te quiero hacer es justamente esta: ¿es América Latina una región condenada a la humillación? ¿O, cómo podemos deshacer esta condena?

FRANCIA MÁRQUEZ: Buenas noches, Argentina. Quiero, en primer lugar, extender un saludo a todas las personas que, desde acá, vibraron con nosotros para que llegara un cambio para Colombia, que es un cambio para la región. Les extiendo un saludo de parte de nuestro presidente, Gustavo Petro Urrego. Por supuesto, un saludo a toda Colombia. Saludo a los colombianos y colombianas migrantes aquí, en la Argentina. Saludo a los pueblos originarios de la Argentina, los pueblos indígenas. Saludo al pueblo negro, afrodescendiente de Argentina. Saludamos, por supuesto, a la comunidad diversa LGBTIQ+. Saludo a las mujeres, a los niños, niñas que están aquí. Y, por supuesto, a todo el liderazgo social y político de Argentina, que ha mantenido un gobierno en resistencia. Agradecemos al Gobierno de Argentina por recibirnos con beneplácito, con mucho amor. Muchas gracias al presidente y, por supuesto, a la Vicepresidenta con quien, durante estos días, hemos tenido reuniones muy importantes para hablar de justicia, de paz, de lucha antirracista, de cambio climático y para hablar de muchos temas que ahora nos competen en el gobierno de Colombia, pero sobre todo a Latinoamérica.

Entonces, para dar un poco de respuesta a la pregunta, creo que cuando Eduardo Galeano, que bien supo describir a los nadies y a las nadies, que lo usamos, usamos su poema en campaña, precisamente para definir quiénes éramos los nadies. Para el caso de Colombia son los pueblos étnicos, indígenas, afrodescendientes, raizales, palenqueros. Para el caso de Colombia, son las mujeres que tienen que soportar el asesinato y las violencias sexuales y de género. Es la comunidad diversa, las mujeres trans que todos los días tienen que soportar sistemáticas violencias. Es el pueblo campesino a quien todos los días le despojan la tierra. Son los niños y niñas que mueren de hambre en un país que tiene tanta biodiversidad, pero que no les ofrece un plato de comida. Son los jóvenes que salen a las calles a marchar y les sacan los ojos para que no puedan ver el futuro, pero también los asesinan como una forma de expresión para silenciarles. Son todos aquellos hombres y mujeres que, en nuestras diversidades, hemos tenido que ver cómo una política neoliberal en nuestra región ha ido poniendo en riesgo todos los días la vida humana, pero que hoy ese aniquilamiento, esa extinción de la vida trasciende al ser humano y afecta nuestra casa grande, nuestro útero mayor, la Madre Tierra. Los nadies, los trabajadores y trabajadoras que resisten, que a pesar de que trabajan duramente, su salario no es compensatorio a todo el esfuerzo, a toda la mano de obra, todo el trabajo que realiza. Y que esa explotación se traduce en acumulación y acumulación de capital en manos de unos pocos, mientras los trabajadores y trabajadoras no tienen una vida digna. Desde ese lugar nos paramos y desde ese lugar enunciamos nuestra campaña, porque de allá yo vengo, de allá soy, de esos tirapiedras, como nos decían, o de los mamertos, como nos señala la ultraderecha para no reconocer nuestra humanidad, para no reconocer nuestra voz, o para seguir estereotipando o negando la lucha de los movimientos sociales en América Latina y en la región. Pues hoy esos tirapiedras, esos nadies, hemos llegado para el caso de Colombia, a ocupar el Estado, a ocupar el poder del Estado para gobernar en favor de los nadies y de las nadies, en favor de todos los colombianos y colombianas. Y para tejer una agenda de construcción de región que nos permita afrontar de manera colectiva los desafíos que tiene nuestra América, que tiene nuestra casa grande, que tiene la Abya Yala. Ese es el desafío que tenemos. Eduardo Galeano nos indagaba porque siempre hubo avances significativos importantes en otras naciones, mientras que Colombia apenas acaba de dar ese paso. Y no porque no haya habido resistencia. La resistencia siempre ha estado ahí. Yo crecí en medio de la resistencia. Una resistencia que no empezó conmigo, que empezó con pueblos traídos en condición de esclavitud a toda América, que fueron desarraigados de su condición humana y sometidos a condición de animales salvajes y que hoy los descendientes de esos hombres y mujeres seguimos haciendo un esfuerzo por dignificar nuestra. Mi presencia aquí no es la presencia de, simplemente, Francia Márquez. Soy muy consciente de que mi presencia es la representación de pueblos históricamente excluidos, marginados, racializados y olvidados. Por tanto, yo creo que esa pregunta de Eduardo Galeano era una incitación a seguir buscando caminos y horizontes, como naciones que nos permitan vivir en paz, vivir en dignidad, vivir con justicia social. Yo creo que no estamos condenados. Creo que el pueblo toma decisiones en los momentos en que debe tomarlas. Tristemente, nosotros nos tardamos bastante en Colombia para tomar una decisión del cambio. Esa tardanza nos ha costado muchas vidas, han sido muchas personas, muchos millones de seres humanos, que han sido afectados por la política neoliberal que hemos tenido en nuestro país. Así que el desafío, ahora, que asume Gustavo Petro, Francia Márquez, pero que asume el pueblo colombiano, es un cambio en favor de la paz, en favor de la justicia social, de la justicia racial, de la justicia de género, en favor de la dignidad, en favor del cuidado de la casa grande y ese desafío, por supuesto, lo asumimos con responsabilidad, con los pies colocados sobre la tierra y con todo el amor y el compromiso que ello implica.

V.G.: Es para aplaudir todo el tiempo. Ya se me cayeron todos los papeles por aplaudir. La impronta feminista antirracista en tu campaña, en tu discurso, fue muy fuerte. lo que queríamos preguntarte era de quiénes aprendiste. En tu infancia, para vos, quiénes fueron personajes, personas, afectos importantes en este aprendizaje.

F.M.: Bueno, aprendí de muchas mujeres. La primera enseñanza de la resistencia la aprendí en mi casa, con mi abuela, con mi mamá. Mi abuela que, aunque no supo leer y escribir, supo el valor de la vida. La aprendí de Paulina Balanta, otra mujer de mi comunidad que no sabe leer y escribir, pero ayer nos recordaba Carlos Rosero que está aquí, que ella nos decía que quien no lucha, no va al cielo. Lo aprendí de mujeres de aquí, de Argentina. Y aquí tenemos una matrona, que es una insignia de la resistencia y de la lucha de las Madres de Plaza de Mayo, de ahí aprendimos la resistencia. He aprendido de tantas mujeres que, aún sin tener nada, hacen lo que sea por sacar a sus hijos adelante, porque sus hijos se acuesten con el estómago vacío, porque sus hijos tengan una oportunidad de ir a la escuela, porque sus hijos no vayan con los zapatos rotos a la escuela, porque sus hijos, como lo son las mujeres del Pacífico colombiano, no sean arrebatados por la violencia, por los actores armados, por el conflicto armado. Ahí yo he aprendido la resistencia y, por supuesto, ahí, siendo una mujer negra, he aprendido a diferenciar los impactos del modelo económico de desarrollo, los impactos del patriarcado, las violencias de género. Y he aprendido ahí la interseccionalidad de raza, clase y género que, al principio, no lo teorizaba, pero después conocí a Ángela Davis y aprendí. No leyendo sus libros, sino escuchando de su propia voz las historias de lo que significó para ella, una mujer afrodescendiente negra, resistir frente al apartheid, frente a todas las políticas raciales de los Estados Unidos. De ella aprendí que las mujeres negras no están haciendo la lucha para romper el techo de cristal, sino que están haciendo la lucha para ponerse de pie y caminar con sus hermanas, igual que las mujeres indígenas, porque ellas siempre han estado de rodillas. O como lo dice Sojourner Truth, que pregunta ¿acaso no soy una mujer?, en pleno tiempo de discusión de la lucha feminista.  Porque mientras unas mujeres van adelante en una lucha, pues otras mujeres van atrás. Entonces el gran desafío que tenemos es ponernos y cogernos de la mano con las que apenas se están poniendo de pie para empujar sus propias reivindicaciones. La forma en cómo Angela Davis lo dice es: yo no estoy aquí para poderme de la mano con Hillary Clinton que está a punto de romper el techo de cristal, yo estoy aquí para cogerme de las manos con las mujeres negras del Bronx o, en el caso de Colombia, del distrito de Agua Blanca o del Cauca. Porque ahí están las verdaderas luchas de las mujeres que no se reclaman a sí mismas feministas, pero que lo son.

V.G.: Te quería preguntar sobre eso, porque tu militancia empieza de adolescente casi, en la región del Cauca, contra los megaproyectos extractivistas. Eran los años ’90, donde esas luchas tampoco tenían, tal vez, la difusión que tienen hoy o la popularidad que tienen hoy. Entonces, contanos para quienes no sabemos qué significa la región del Cauca y qué significaba para vos, como adolescente, esa militancia.

F.M.: Yo creo que las mujeres siempre han estado en la lucha, otra cosa es que esas luchas han sido invisibilizadas. Para el caso del norte del Cauca, pues la experiencia de la comunidad y de las mujeres primero es que esta es una región que vivió la esclavitud. Si ustedes van a esa región, que está al suroccidente de Colombia, todavía están las casas esclavistas. Popayán, que es nuestra capital, fue la casa de la Corona española. Y aún se llama la Ciudad Blanca. Y no es simplemente la Ciudad Blanca porque tiene las paredes pintadas de blanco, sino que hay un pensamiento colonial de ciudad blanca en términos de que los que habitan la ciudad son herederos de la Corona española. Mi abuelo me contó que cuando él iba a Popayán la gente le tocaba la piel para ver si su piel desteñía. De ese tamaño es el racismo. Pero también de ese tamaño es el racismo de la negación, que sé que lo vive aquí, en Argentina, la gente afroargentina. No hay un país, por lo menos de América Latina, que pueda negar la colonización y la esclavitud. Y si no hay un país de esta región que pueda negar eso, entonces tampoco puede negar la presencia de los pueblos originarios indígenas y tampoco puede negar la presencia de los pueblos negros o afrodescendientes. Desde ahí partimos. El norte del Cauca permanentemente ha sido un territorio en disputa, desde el tiempo de esclavitud hasta hoy. Entonces, yo aprendí con mi abuela que el territorio donde nosotros vivíamos no fue un regalo. Después de la abolición de la esclavitud, en ese territorio a la gente le tocó luchar para tener la tierra que nosotros habitamos. Entonces, mi abuela decía: a mis abuelos les tocó luchar y a ellas, que eran mineras artesanales, les tocó trabajar en las minas para ir juntando lo poquito de oro y sacar a sus maridos de la cárcel, que estaban luchando por la tierra frente a terrateniente. Entonces, mi comunidad tiene una conciencia clara de la importancia del territorio como un espacio de vida. La gente negra en el norte del Cauca aprendió que sin territorio no hay libertad. Y sin territorio no hay autonomía. Y esto no es solo la gente negra del norte del Cauca, sino que el campesinado colombiano también sabe eso. Sabe que la autodeterminación de los pueblos está arraigada a un territorio. A un territorio que, para muchos, es un espacio para obtener riqueza acumulativa, pero para otros es un espacio donde se reproduce la vida. Y eso es el norte del Cauca, eso es el Pacífico colombiano, eso es gran parte de Colombia. Así nos concebimos como pueblos. Así se concibe el pueblo indígena. No se conciben pueblo sin su arraigo cultural, y el arraigo cultural y espiritual está anclado al territorio. Nosotros tenemos una práctica ancestral que es de todo el Pacífico que la hacen las parteras. Las parteras son las mujeres que ayudan a una mujer a dar a luz en lugares donde la salud no llega, donde un médico no está, son estas mujeres que, con su sabiduría, ayudan a mujeres a dar a luz cuando van a parir. Mi mamá era partera. Y parte de lo que hacen es el ombligamiento, que consiste en enterrar el ombligo, enterrar las placentas, que arraigan a las personas. Nosotros decimos “nos sembraron el ombligo”. Y es que esa práctica, que parece una cosa antigua, pues para nosotros es el arraigo y el vínculo con nuestros territorios. De esa magnitud es el amor por la tierra, es la ancestralidad por la tierra. Y bueno, por eso nos hemos enfrentado a proyectos mineros, energéticos, que ahora que soy gobierno me toca mirar cómo es que vamos a hacer. Pero que, sin duda, son proyectos que se ven como el desarrollo, sin embargo, no generan bienestar. Del norte del Cauca hay una represa salvajina que dicen los viejos “esto es la salvajada”. Y es porque es un proyecto de de una gran represa energética. Tiene agua acumulada ahí, pero mi propia comunidad no tiene agua potable. Produce millones de megavatios de energía y la misma comunidad no tiene una electrificación adecuada. Entonces, la gente dice: bueno, de qué desarrollo estamos hablando. Y eso es parte de los desafíos que ahora tiene nuestro Gobierno. Es pensar realmente un desarrollo para el bienestar de la gente. De ese territorio vengo. El Cauca ha sido un territorio que ha padecido el conflicto armado. Pero en Colombia yo me siento orgullosa de ser caucana, porque allá ha nacido la resistencia también.

V.G.: O sea que la consigna “soy porque somos”, que es también el nombre de tu movimiento, tiene estos cuerpos, esta historia y este territorio detrás, ¿verdad? No es una consigna, como muchas veces se usa, solamente de marketing, sino con una densidad histórica muy importante.

F.M.: Bueno, nada de lo que hicimos en campaña fue simplemente marketing. Nosotros, al contrario, transgredimos el marketing político ya establecido. Todo el tiempo estuve discutiendo incluso sobre qué me colocaba sobre mi cabello, sobre cómo lo usaba, porque para mí eso es parte de una representación. Como dicen las mujeres brasileñas: aquí se trata de cambiar el color en las fotos de la representación del poder, el color y las imágenes. Pues nada fue solo marketing. Creo que hicimos una campaña muy desde el corazón, desde nuestras propias vivencias y desde la realidad. Por eso, los jóvenes escucharon. Por eso, las mujeres nos escucharon. Por eso, los campesinos nos escucharon. Por eso, mi pueblo que, aunque se decía que estaba dividido el pueblo negro, raizal y palenquero, masivamente votó por Gustavo Petro – Francia Márquez. Una campaña hermosa. No teníamos recursos ni las estructuras que se usan en campaña, pero estaban los jóvenes con toda su energía, estaban los artistas con toda su creatividad. Entonces “Soy porque somos”, como bien se conoce, es la filosofía Ubuntu. Este es una herencia africana. Una filosofía africana que, por supuesto, la hemos heredado y que para nosotros significa que yo soy, si ustedes son, que nosotros somos, si la casa grande es. No hay posibilidad de existencia de la vida humana sin la vida de la naturaleza. Y eso nos implica y nos obliga a nosotros a replantearnos cómo conservar la vida significa “soy porque somos”, que esto no es una apuesta individual, que es una apuesta colectiva. Implica mirarnos como familia extensa, como familia que va más allá de los lazos sanguíneos. Para nosotros eso no es un problema porque lo hemos hecho como pueblo afrodescendiente. Ha sido el pensarnos colectivamente que nos ha permitido resistir en el Pacífico colombiano, en el Caribe, a tantos años de barbarie, a tantos años de dolor, a tantos años de sufrimiento, de lo que ha sido la guerra, de lo que ha sido la exclusión, de lo que ha sido el racismo estructural. Entonces, “soy porque somos” hoy lo colocamos a toda la América a pensarse desde el Ubuntu. Y es una consigna que nos invita, como humanidad, a pensarnos desde otra lógica. Y es la lógica del cuidado de la vida desde lo colectivo. Por eso, apostamos a que Colombia sea una potencia mundial de la vida y es usando esa forma colectiva de vernos, de enunciarnos, de sentirnos, para el buen vivir, para el vivir sabroso, como hemos dicho, porque no hay otra forma. Hoy, como humanidad, tenemos un desafío enorme y es el desafío de enfrentar el cambio climático, la crisis ambiental y esto no va a pasar si no es que cada ser humano nos hacemos conscientes, si no es que los gobiernos nos hacemos conscientes de que estamos en un camino sin regreso del exterminio de la civilización humana. Entonces “soy porque somos” tiene ese sentido del sentipensar, como dice Arturo Escobar, de pensarnos desde lo colectivo.

V.G.: Nombrabas ese desafío de ahora pasar a ser Gobierno. Ahora en Chile dijiste: “soy tirapiedras y ahora me toca gobernar”. Ese es un enorme desafío y, además, el programa político del pacto histórico se propone estas grandes cuestiones como las que venís enunciando. Sabemos que hay una carga enorme de expectativas, no sólo de Colombia, sino de toda la región. ¿Cómo te preparas para esas expectativas, para este proyecto? Sabemos que va a haber ataques, ataques de la derecha, de los núcleos concentrados del poder empresarial colonial, que ya fueron agresivos en campaña, y sabemos que ahora van a venir con todo.

F.M.: Bueno, un país no se gobierna solo. Gustavo Petro y Francia Márquez creemos que tenemos toda la capacidad para liderar un nuevo proyecto de nación. Un proyecto de nación que se piensa desde abajo, desde la raíz, desde la periferia, para la justicia social, como ya lo he dicho. El mayor desafío que tenemos es el logro de la paz. Yo creo que el principal reto es lograr silenciar los fusiles en nuestro país. Pero la paz no es sólo el silenciamiento de los fusiles, sino atacar las causas que generaron la violencia, el conflicto armado. Y esas causas tienen que ver con el hambre. Esas causas tienen que ver con la falta de garantía de derechos. Esas causas tienen que ver con el abandono del Estado. Esas causas tienen que ver con el racismo. Nosotros ya hemos dicho que vamos a retomar el avance hacia la paz que implica la implementación de los acuerdos firmados entre las FARC y el Estado colombiano sin dilaciones. Nosotros no vamos a seguir haciendo trizas la paz, lo que tenemos que hacer trizas es la guerra. Tenemos que acabar la guerra en nuestro país. Y para ello se va a restablecer la mesa de diálogo con el ELN. Para eso hay una política de sometimiento, también, que se va a desarrollar frente a los otros actores armados. Eso fue parte de lo que quedó en el programa de gobierno que le presentamos a Colombia, Gustavo Petro, nuestro líder, y Francia Márquez, que fue por lo cual votaron los colombianos y colombianas. Para eso es necesario discutir la política de drogas que por muchos años ha sido ineficaz, ha servido para dejar la plata en los bancos y los muertos en los territorios. Yo creo que enfrentar la discusión, y por eso decidimos hacer esta gira, implica que Colombia lidere, pero es un debate de la región, el camino de la legalización de las drogas usando varias perspectivas:

Uno, es el cambio del uso de la hoja de la coca y de la marihuana. Creo que ahí se puede generar toda una industria económica en términos farmacéuticos, en términos alimenticios, en términos de industria textil, que les genere oportunidad a las mismas comunidades que han sido víctimas tanto del narcotráfico como de la política de drogas.

Dos, un enfoque de atención del consumo problemático como un problema de salud pública y no como un problema de criminalidad, entendiendo que el enfoque de criminalidad que se le ha dado a esta política ha sido un enfoque que ha impactado de manera negativa sobre los derechos y libertades de todas las poblaciones empobrecidas y racionalizadas. Las mujeres, los jóvenes, los pueblos étnicos son los que han vivido un impacto desproporcionado de estas políticas. Y en ese sentido, yo creo que resarcir esos efectos implica un nuevo paradigma de cómo atender eso. La política de cero tolerancia ha servido para profundizar la corrupción, que no ataca todo el eslabón de la cadena de lo que es el narcotráfico, sino que la droga sale del país y sale con la complacencia de muchos corruptos, incluso que han estado en las instituciones del mismo Estado colombiano.

Atender el tema del hambre significa que ningún niño o niña tenga que seguir muriendo de hambre y desnutrición, y esto implica una política de atención al campo colombiano que por muchos años se dejó olvidado y que, por eso, avanzó la criminalidad, por eso avanzó el narcotráfico, por eso avanzaron estas economías ilícitas que han puesto en riesgo la vida de las comunidades. Tener un enfoque de Derechos Humanos en todas estas políticas es una necesidad, pues los líderes y lideresas que han levantado la voz y que han puesto estos temas sobre la mesa, pues les ha costado la vida. Colombia es de los países en los que más líderes sociales y ambientales se asesinan en la región, así que es un desafío colocar el enfoque de Derechos Humanos en estas políticas que vamos a desarrollar. Desarrollar el campo colombiano necesitará tecnología, investigación, ciencia. Por eso, nuestro presidente y por supuesto nosotros le acompañamos en la propuesta de la educación gratuita y de calidad, como parte esencial para los cambios que requiere nuestro país.

Son muchos otros temas, pero de manera específica quiero decir que, en mi caso, mi tarea será liderar el Ministerio de la Igualdad que vamos a constituir. Esperamos que el 7 de agosto nuestro Gobierno esté presentando al Congreso ese proyecto de creación del Ministerio de la Igualdad para trabajar por los derechos de las mujeres, de las poblaciones diversas, de los pueblos étnicos, de la juventud y de las regiones históricamente olvidadas y excluidas, que son los que están en esos niveles de inequidad y desigualdad tan grande. Por supuesto, las personas con discapacidades o diversidades, es una necesidad trabajar con ellos y ellas también. Y bueno, eso es lo que yo voy a hacer: trabajar por la igualdad. En términos de Colombia sabemos que somos de los países más desiguales de la región y esto será un desafío. Mi experiencia es desde lo social, es desde lo comunitario, es desde la defensa de los derechos ambientales, es desde la lucha por los derechos de las mujeres y la lucha antirracista, y eso estará ahí, como parte de esa apuesta de gobierno.

V.G.: Hay una palabra que aparece mucho en el programa de gobierno que, insisto, tiene ese nombre tan lindo, “Colombia, potencia mundial de la vida”, y es una palabra olvidada que es la de transición. Ustedes apuestan a una transición y cuando se habla de transición es porque hay un proyecto, porque hay una perspectiva de futuro. Hablan de una transición energética, de una transición alimentaria, también de la tierra. Hablan de una reforma en los impuestos, es decir, a quiénes se van a cobrar impuestos y hablan de una reforma de salud. Son cuatro temas muy importantes para toda América Latina, muy importantes para Argentina y me gustaría si pudieras puntualizar en algunas de esas perspectivas de la transición, porque son maneras de hacerse cargo de la crisis planetaria, como decías antes, pero además tomar los temas de fondo que hacen a un modelo depredador, neoliberal y completamente destructivo.

F.M.: Lo de transición energética fue un tema con el que nos dieron palo. Casi que perdemos la elección, porque empezaron a decirles a los empresarios y a todo el mundo que era una apuesta al castrochavismo, que si llegábamos el 7 de agosto a la presidencia y a la vicepresidencia ese mismo día íbamos a cortar el chorro de la explotación del petróleo y del carbón. Y pues eso nunca se dijo y eso no es parte del programa. Lo que se dijo es que hay que hacer un tránsito. Y un tránsito implica un proceso. Un proceso de adecuación institucional, de adecuación en términos de infraestructura que implica investigación, que implica ciencia, desarrollo tecnológico, para poder hacer todo ese tránsito de la economía extractivista hacia una economía sustentable. Y pues eso fue lo que planteamos en el programa de Gobierno que pasa por la voluntad política. Y creo que nuestro presidente la tiene y pues yo mucho más. Porque tanto el presidente Gustavo Petro, un hombre con una sensibilidad humana impresionante y con un don de gente, como decía mi abuela, siempre está poniendo los valores sobre la vida en la mesa y yo creo que es eso: es una responsabilidad humana. Es el desafío que tenemos como humanidad, no tenemos otra alternativa. O cuestionamos nuestros privilegios y toda la cultura de lo que ha sido nuestra cultura de consumo, porque eso no es solamente la voluntad del Gobierno, las políticas de gobierno, sino que pasa por una transformación cultural. Es como sociedad que tenemos que empezar a reeducarnos sobre los desafíos que hoy tenemos en términos del cambio climático. Es una parte del Gobierno, pero otra parte es la responsabilidad que tiene que asumir la sociedad, que tenemos que asumir como humanidad. Y ahí yo creo que podemos ir haciendo los cambios. Entonces, es un proceso que se va a dar, que implica todo un ajuste tecnológico, de ciencia, de tecnología, de investigación, de adecuación institucional, de adecuación legislativa. Por eso, tener el Congreso mayoritariamente hoy, una buena bancada del Congreso, que nos alegra que la mitad de la bancada, por lo menos del pacto histórico, son mujeres y la mitad son hombres, eso es muy importante para todo el desafío que tenemos.

Frente a lo de la reforma tributaria, pues los principios que colocamos fueron los principios de Justicia tributaria. Es decir, quienes más tienen utilidades, pues tienen que aportar más en términos de la responsabilidad solidaria. Porque uno puede hablar bonito, pero es con plata que se pueden hacer las transformaciones. Y se requieren los recursos. La pirámide ha estado colocada en que quienes menos tienen son quienes más pagan en Colombia. Las exenciones tributarias se han colocado a los sectores más poderosos que efectivamente pueden pagar mayores impuestos, porque tienen una mayor utilidad. Pero, en realidad, quienes menos tienen son los que más aportan o, en muchos casos, aportan de manera igualitaria. Ahí no hay una justicia en términos tributarios. Invertir la pirámide será parte del desafío. Lo primero va a ser una un proyecto de reforma agraria que se va a elaborar para poder asumir los desafíos que implica el programa de gobierno.

V.G.: La fuerza de los paros en Colombia en el 2019, en el 2021, la lucha por el aborto victoriosa. ¿Pensás que son procesos políticos que también intervinieron en la victoria electoral?

F.M.: Sin dudas, sin dudas. Por lo menos en mí, sí. Y me motivaron mucho para decir sí tenemos que disputarnos el poder. Ver a tantos jóvenes en la calle, ver a tantas mamás en las calles, para mí fue realmente conmovedor. Y no eran los jóvenes universitarios que están acostumbrados al movimiento estudiantil que sale a la calle. No. Eran los jóvenes que no han pisado las puertas de una Universidad, los jóvenes que no han pisado las puertas de un colegio. Jóvenes que en el caso de Cali nos decían: hace muchos años no comía tan sabroso como comían en las ollas comunitarias que hacían las mujeres. Eran esos jóvenes que sentían que les han quitado todo, eran los nadies y las nadie que estaban en la calle. Por eso, también los señalamientos de terroristas, vándalos y criminales. Y por eso, no le tembló la mano al Gobierno para ordenar el asesinato de tantos jóvenes que perdieron la vida. A tantos que le sacaron los ojos. Tantas jóvenes mujeres que fueron violadas durante el paro. Pues todos ellos, con mayor razón, me movieron a decir: esto tiene que cambiar. Y bueno, aquí está el Senador Alexander López Maya que me acompañó en todo esto. Y tengo que confesar que una campaña de año y medio, a veces, sentíamos que ya no teníamos energía ni fuerza, pero nos levantábamos todos los días a las 3 para irnos porque decíamos entre nosotros: el desafío es muy grande, tenemos que responderles a esos muchachos, tenemos que honrar la memoria de todos esos muchachos y pues gracias a ellos, por lo menos yo siento que estoy aquí. Ellos se pusieron en primera línea en la calle en el paro, ahora yo me pongo en primera línea en el Gobierno para defender sus derechos. No nos olvidamos, están presentes. Por lo menos de parte mía, yo ya convoqué a varios abogados para que se pusieran ahí en primera línea a defenderles, porque creo que es injusto que a estos muchachos que buscan oportunidades, les hayan criminalizado sin ninguna respuesta a sus demandas. Ahí vamos a estar. Yo no soy el Poder Judicial para decir que ya los voy a sacar, pero sí por lo menos, a garantizar que se cumpla el debido proceso y que se le garanticen sus derechos en esos procesos.

V.G.: Para ir terminando esta conversación, quería ir a esa frase que algunos analistas dicen que cambió el estado anímico de Colombia, que es el de vivir sabroso. Y de alguna manera, también es la consigna que más polémica genera. Hemos leído que también se ha dicho si se puede pensar en vivir sabroso a la hora de pensar el conocimiento, la Universidad, las reformas técnicas de las que hablabas, como que genera una reacción clasista y racista muy fuerte esa consigna. Y a la vez, es la que más impacta. Y entonces quería que nos cuentes y que nos compartas por qué ha molestado, pero también su fuerza, su capacidad de este cambio anímico y afectivo en el país.

F.M.: Bueno, siempre que los conceptos salen del poder popular se cuestionan o se tergiversan. Y eso a mí no me preocupa. A mí no me preocupa que distintos medios de comunicación hayan intentado tergiversar el concepto del vivir sabroso. Y no me preocupa porque yo sé que mi pueblo sabe muy bien lo que eso significa. Y el pueblo colombiano y el pueblo afrodescendiente que usa como parte de su lenguaje popular y cotidiano el vivir sabroso, sabe que vivir sabroso es vivir en alegría, es vivir sin miedo, es vivir en paz, es vivir con derechos, es vivir con amor y eso, aunque intenten tergiversarlo, no nos los van a quitar, porque ese es un derecho. Tenemos derecho a vivir sin miedo. Tenemos derecho a vivir con alegría. Y la forma en que yo puedo expresar esto es que, en el Pacífico colombiano, en medio del conflicto armado, en medio de la escasez y en medio de las violencias, nosotros podemos decir: vivimos sabroso cuando nos juntamos a compartir un plato de comida; vimos sabroso cuando cogemos la marimba y entre todos nos reunimos para cantar la música tradicional nuestra del Pacífico colombiano o del Cauca. Nosotros vivimos sabroso cuando el 24 de diciembre en mi pueblo, mientras cada familia en la cotidianidad se va papá, mamá e hijo a pasar el 24 de diciembre en su casa, nosotros el 24 de diciembre nos juntamos toda la comunidad en una sola casa, donde celebramos el nacimiento del niño Dios y eso para nosotros es vivir sabroso. Vivir sabroso significa lo que hace mi mamá: que cuando no hay salud y una mujer va a parir, ellas ponen toda su sabiduría, todas esas mujeres se juntan para acompañar a esa mujer en ese momento, en el momento de la reproducción de la vida. Esos para nosotros son los valores tradicionales y ancestrales que aprendimos en nuestra comunidad, que los aprendimos como humanidad, pero que el modelo civilizatorio que hemos tenido nos hizo olvidar de esas prácticas, nos hizo creer que eran prácticas chapadas a la antigua o retrógradas, en vez de pensar que eran prácticas que nos permitían vivir como humanidad. Cuando yo escucho a la maestra Nidia de Timbiquí diciendo: “cuando aquí han venido los actores armados a silenciarnos, nosotros hemos seguido tocando el bombo y la marimba, y hemos logrado con nuestros instrumentos y con nuestra voz, con nuestros cantos tradicionales, silenciar la guerra”, para mí eso es vivir sabroso. Y nadie nos va a quitar eso. Por eso, nosotros invitamos al pueblo colombiano a apostarle al vivir sabroso. Claro que cuando terminamos la campaña yo dije hay que trabajar para vivir sabroso. Y me dijeron que ese no era el acuerdo. Pero claro que sí. Ese es el acuerdo, porque tenemos que devolverle la tranquilidad a nuestro país. Colombia es un país maravilloso. Latinoamérica es una región maravillosa. Y nosotros podemos vivir bien, podemos vivir en paz, podemos vivir en dignidad y sólo requiere del compromiso de cada uno y de cada una reconociéndonos en nuestra diferencia. En nuestro país, tristemente, la diferencia se convirtió en una razón para exterminar al otro, para asesinar al otro, para desaparecer al otro. Pues hoy, este este proyecto político le está devolviendo la posibilidad al pueblo colombiano y al pueblo latinoamericano de construir en nuestras diferencias. Son las diferencias que hacen de nosotros una región rica. Son las diferencias que hacen de nosotros una región poderosa. Y estoy segura de que ahí vamos a encontrar un mejor estar, un mejor vivir y un verdadero desarrollo humano, un verdadero desarrollo social, un verdadero desarrollo económico.

V.G.: Para seguir con tus palabras sobre vivir sabroso queremos invitar a la artista Beatriz Pichi Malen y a su músico Miguel Cruz que nos van a honrar y sumar la voz mapuche a esta conversación.

F.M.: Un aplauso.

CANTA BEATRIZ PICHI MALEN

BEATRIZ PICHI MALEN: Buenas noches a todos y todas. Bienvenida, hermana Francia, vicepresidenta de la República hermana de Colombia. Quisimos comenzar con este canto del viento porque, así como en su indómita actitud del viento se traslada por toda la tierra, nosotros, nosotras, los pueblos antiguos originarios del territorio y aquellos que fueron traídos, como los afrodescendientes, también somos libres a pesar de todo y de tanto, porque la tierra es una sola alma y migrar es un derecho.

CANTO A LAS BALLENAS POR BEATRIZ PICHI MALEN

V.G.: Muchísimas gracias, Beatriz Pichi Malen, Miguel Cruz.

F.M.: Ahora quiero, en este intercambio cultural, invitar a María Elvira Solís, una mujer del Pacífico colombiano, una mayora. También nos va a cantar una canción que es de la música tradicional del pueblo afrocolombiano del Pacífico colombiano. Gracias.

MARÍA ELVIRA SOLÍS: Muy buenas noches para todas y todos. Soy la mayora, como lo dice aquí la hermana Francia Márquez. Tengo varias canciones, pero vamos a cantar en este momento algo que tenga que ver mucho con la región pacífica, es la música sanadora de nosotros, de los pueblos negros, es nuestra herencia africana y es la música sanadora para nosotras, mujeres negras del Pacífico. Esta canción nace porque yo salí de mi territorio muy niña y no me acordaba que tenía una cultura, una herencia. Cuando retomo mi herencia, mi ancestralidad, entonces dije: bueno, yo hago parte también de allí, por qué canto otro tipo de música y no canto la que me pertenece.

CANTA MARÍA ELVIRA SOLÍS

V.G.: Hay una placa de reconocimiento también entregada en este momento. Por su lucha contra el racismo, por este feminismo antirracista que también nos comentó y nos contó hoy. Gracias, Francia.

F.M.: Bueno, muchas gracias a todo el pueblo argentino, al pueblo colombiano, al pueblo afroargentino, al pueblo indígena, a las mujeres, a los jóvenes, a los niños. Gracias a todas, a todos, a todes por este momento. Gracias y esperamos que, en cuatro años, cuando terminemos el Gobierno de Gustavo Petro – Francia Márquez, el Gobierno de Colombia, podamos seguirnos mirando a la cara con dignidad, con respeto. Y espero que en cuatro años mi corazón aún siga estando bien puesto. Muchas gracias.

Fuente de la información e imagen: https://lobosuelto.com

Comparte este contenido:

Latinoamérica: La comunidad universitaria de siete países de la región se une para erradicar el racismo

La comunidad universitaria de siete países de la región se une para erradicar el racismo

La comunidad académica de siete países se une para erradicar el racismo

Representantes de universidades e institutos de educación superior de Argentina, Chile, Brasil, Colombia, Cuba, Ecuador y México denunciaron que el racismo y la discriminación son prácticas vigentes en este nivel educativo en toda Latinoamérica. Esto provoca inequidades en el acceso a la formación y afecta, principalmente, a comunidades indígenas y afrodescendientes. Por ello, es necesario visibilizar, denunciar y emprender transformaciones institucionales y acciones pedagógicas no solo para incluir a integrantes de estos pueblos en la educación superior sino, también, para integrar sus visiones de mundo, valores, conocimientos, modos de aprendizaje y propuestas de futuro en los planes de estudio.

En mayo de este año, la Cátedra UNESCO Educación Superior y Pueblos Indígenas y Afrodescendientes en América Latina del Centro Interdisciplinario de Estudios Avanzados (CIEA) de la UNTREF lanzó la convocatoria de su 3Campaña para la Erradicación del Racismo en la Educación Superior. Mediante la misma, invitó a la presentación de proyectos grupales de acciones que promuevan el debate y la reflexión acerca de las múltiples formas de racismo y discriminación que persisten en la educación superior.

A través de esta llamada, fueron seleccionados 20 equipos de siete países, cuyas propuestas abarcaron seminarios, encuestas, talleres y cursos virtuales, conversatorios, foros, producciones audiovisuales y campañas de sensibilización que fueron exhibidas durante cuatro encuentros virtuales que se transmitieron por el Canal de YouTube de la UNTREF. Vale aclarar que a estos equipos se sumaron otros seis grupos que iniciaron sus acciones en el marco de la campaña realizada el año pasado y que decidieron continuar trabajando durante este 2022.

“Lamentablemente debemos admitir que no nos sorprende el racismo vigente en Latinoamérica, así como tampoco la represión que sufren algunos pueblos, como el mapuche en países como Chile y Argentina, entre otras comunidades en diversos lugares del mundo. No nos sorprende, pero nos indigna. Estos problemas expresan la continuidad de una larga y vergonzante historia a lo largo de la cual las instituciones de educación superior jugaron un papel muy importante para reproducir y naturalizar el racismo y la discriminación en nuestras sociedades. Pero también sabemos que pueden jugar un rol fundamental para erradicar estas prácticas porque en la educación superior se forman profesionales y técnicos que toman decisiones significativas en las respectivas sociedades, así como las y los docentes de todo el sistema educativo y diversos formadores de opinión pública”, dijo el director de la Cátedra UNESCO Educación Superior y Pueblos Indígenas y Afrodescendientes en América Latina, Daniel Mato. Asimismo, el investigador de la UNTREF elogió los trabajos presentados en esta convocatoria y consideró “indispensable mantener los vínculos y trabajar en red en la búsqueda de la construcción de sociedades más justas y democráticas”.

En las jornadas, los disertantes coincidieron en que la falta de información sobre la existencia de prácticas discriminatorias y racistas debe ser una de las primeras cuestiones a trabajar. En este sentido, destacaron que la visibilización de las mismas juega un rol central para desterrar estas acciones. Tal como expresaron los miembros de la Universidad del Magdalena, Colombia: “El conocimiento es la clave para vencer al racismo porque no basta con ser anti-racista, hay que denunciar aquellas prácticas cotidianas que parecen inofensivas pero no lo son”. Con un taller y dos conversatorios para más de 120 asistentes, reivindicaron a los pueblos kogui e iku y a las comunidades afrocolombianas y llamaron a “desafiar el racismo en lo cotidiano”.

Tal como mencionaba Mato, uno de los pueblos que sufre mayor discriminación y violencia institucional es el mapuche. En este sentido, integrantes de la Universidad Nacional de Río Negro; de la Universidad de Flores, sede Comahue; y de la Universidad Nacional del Comahue presentaron el trabajo ¿Qué universidad para los habitantes de Wajmapu en el siglo XXI? Los expositores, para denunciar un colonialismo histórico hacia la nación mapuche en el sistema educativo, organizaron un seminario para más de 80 personas en el que difundieron la historia, la lengua y el territorio de este pueblo. Además, plantearon un futuro en el que el idioma mapuche (mapuzugun) sea una lengua oficial y propusieron que su bandera sea izada en los establecimientos educativos de la región.

Por su parte, los expositores de la Universidad Nacional del Chimborazo, Ecuador, continuaron sus acciones que se iniciaron en la 2Campaña y desarrollaron el Programa de Acción Integral contra el Racismo. Definiendo su institución como una universidad “plural e intercultural”, organizaron talleres, videos, infografías para redes sociales y grupos focales para dar cuenta de la discriminación que viven los estudiantes de grupos minoritarios. Tan importantes son las acciones que efectúan que el Consejo Universitario reconoció a la institución como una universidad en permanente lucha contra el racismo y la discriminación. “A partir de prácticas transdisciplinarias, buscamos construir un ambiente de equidad y seguridad para conformar una sociedad sin exclusión”, destacaron los miembros de esta casa de altos estudios.

La importancia de la unión entre instituciones fue explícita en el trabajo realizado conjuntamente por la Universidad Veracruzana, la Universidad Intercultural de Chiapas y la Universidad Intercultural del Estado de México, a través de un seminario interinstitucional para 280 personas. En modalidad virtual entre las universidades pero presencial en cada una de ellas, se desarrollaron cinco sesiones en las que se generó un espacio de intercambio dialógico sobre el racismo en el contexto universitario desde los enfoques de equidad, derechos humanos y educación para la paz.  Este proyecto les permitió analizar cómo el racismo no solo afecta a la educación superior sino, también, a los niveles educativos precedentes.

Una de las características de esta Campaña es que las acciones emprendidas no solo fueron dirigidas a estudiantes y docentes, además se orientaron a los no docentes de las instituciones y a estudiantes secundarios. En tal sentido, el equipo de la Universidad Nacional de Cuyo presentó su proyecto para erradicar la discriminación en el ámbito educativo de Mendoza. A partir de cursos sincrónicos y asincrónicos para el claustro no docente, identificaron las prácticas discriminatorias en 12 dependencias de la universidad y mediante un taller y un libro de producciones se preguntaron qué piensan, sienten y dicen los adolescentes sobre el racismo. En este último proyecto participaron casi 300 estudiantes de entre 13 y 15 años.

Lo que se comenzó a sembrar gracias a los trabajos realizados en la 2a Campaña puede cosecharse en esta 3a edición y esto quedó claro en las palabras de Gabriela Czarny de la Universidad Pedagógica Nacional de México. “No es fácil hablar del tema, por eso pedimos ´hablemos sobre el racismo´ para empezar a entenderlo entre todos. Por ello es necesario intervenir desde diversas dimensiones, desde lo académico, desde el activismo, desde el arte. Tras el trabajo en la campaña anterior, nuestro objetivo ahora es que este tema se introduzca en todos los programas educativos que existen en nuestra institución”, manifestó.

Por último, los representantes de la Universidad del Estado de Santa Catarina, Brasil, pusieron especial énfasis en que la denuncia y erradicación del racismo no quede únicamente en manos de docentes y estudiantes sino que las autoridades y gestores de las instituciones se comprometan a aplicar políticas anti-racistas en el interior de cada universidad. A su vez, remarcaron la importancia de este tipo de campañas para la construcción de alianzas y redes entre casas de altos estudios de diversos países y regiones.

Precisamente, Daniel Mato invitó a los equipos a sumarse a la Red ESIAL, orientada a documentar y analizar experiencias de universidades y otros tipos de instituciones de educación superior de América Latina dedicadas a responder a necesidades, demandas y propuestas de pueblos indígenas y afrodescendientes, así como a sentar bases para recomendaciones de políticas en la materia, a desarrollar mecanismos sostenibles de colaboración con y entre las instituciones estudiadas y otras con intereses afines y a facilitar la formación de investigadores y gestores en este campo. “Debemos fomentar relaciones duraderas y trabajar en conjunto”, concluyó.

Universidad Nacional de Tres de Febrero

 

Fuente de la Información: https://www.nodal.am/2022/12/la-comunidad-universitaria-de-siete-paises-de-la-region-se-une-para-erradicar-el-racismo/

Comparte este contenido:

Son tan fáciles los jóvenes cuando son pobres

Por: Silvana Melo

ACUSADOS ERRÓNEAMENTE DE MATAR A SU BEBA

Leer un cuerpito sin vida. Leerlo mal. Y bajar la guillotina en el cuello de dos jóvenes de La Matanza –condenados por origen- para la paliza inaugural y todo lo que vendrá. Antes de una autopsia. Que certificó su inocencia.

Todavía los portales sostienen la foto de los dos. Rostros demudados con fondo de una comisaría de La Matanza. Es que son tan fáciles los jóvenes cuando además son pobres. Son de tan sencilla deglución, los jóvenes cuando además son pobres, para la maquinaria soez del estado, para la picadora de carnes mediática, para la levedad que tiene la vida en las redes.

Nadie les puede retroceder las horas hasta antes de la paliza en la comisaría. Del ojo morado de ella, de los y las veinte que les dieron la primera noción de lo que sería la justicia para ellos: golpe, insulto e inanición aun sin las evidencias necesarias para determinar sus culpabilidades. Porque para los jóvenes, y si son pobres peor, el primer capítulo de la justicia es ése. El de la venganza feroz que practica la sociedad avalando que la policía arroje a los supuestos victimarios a su jaula propia de leones. Por una vez ladrones, asesinos, violadores, juntos en un calabozo, son los vengadores sistémicos, sociales. Por una vez la sociedad los aplaude y son cinco minutos de gloria hasta que se eleve otra vez el reclamo coral de pena de muerte y cadena perpetua para todos juntos. Una vez que fueron asimilados a los golpes.

Ella lo sufrió en el cuerpo y en el alma. Acababa de perder a su bebita de 21 días mientras la amamantaba. Una cardiopatía, dicen ahora. La dejó sin aire y se ahogó con el alimento materno. Eso dijeron ellos en el Hospital. Hasta que los informes médicos hablaron de signos de abuso sexual y de violencia en su cuerpito. La violaron. La asesinaron. Lacras. Salvajes. Basura, les dijeron. El informe policial se disparó hacia la fiscalía y los medios. Y los jóvenes son tan fáciles cuando además son pobres. Quién va a dudar de que la juventud y la pobreza unidas producen seres detestables, dignos de que se les aplique la justicia mediática, la venganza social y los correctivos carcelarios antes de que haya una sentencia. Que a esta altura es apenas un detalle ilustrativo.

Leer un cuerpito sin vida. Leerlo mal. Y bajar la guillotina en el cuello de dos jóvenes de La Matanza –condenados por origen- para la paliza inaugural y todo lo que vendrá. Antes de una autopsia.

Antes de una autopsia.

Que determinó científicamente que no hubo abuso. Que no hubo golpes. Y que la nena murió mientras era amamantada. Se asfixió con el alimento materno. Que era lo que angustiaba tanto a su madre. Que era lo que dijeron en el Hospital Balestrini de Matanza.

Pero no les creyeron. Porque son jóvenes –ella tiene 26 y él 24 años- y son pobres y a ellos se los puede arrastrar desde el hospital hasta la comisaría sin darles una mínima explicación. Negándoles el agua con 40 grados de calor y mostrándoles una botellita de lejos, a pura risa.

Aunque hace diez años que están juntos. Y la chiquita era su cuarto hijo. Mientras los tres restantes, de 8, 7 y 5 años quién sabe qué historia habrán escuchado. Quién sabe qué clase de monstruos habrán oído que eran sus padres.

Ahora que ya están libres. Y pueden llorar a su hija en un duelo que nunca pudieron hacer. Ahora que no son culpables pero sus fotos siguen en los portales, sus nombres en las noticias, los adjetivos y las condenas puestas en las cocardas de la duda, sus rostros de profunda tristeza con fondo de comisaría continúan exhibidos en los diarios que ahora dicen que no son culpables.

Y ahora tendrán que seguir viviendo. Aunque nunca nada volverá a ser lo mismo. Aunque sean la misma su juventud y su pobreza.

Y su fragilidad extrema ante las fieras sistémicas.

Ahora sin niña que amamantar.

Fuente de la información e imagen:  Pelota de Trapo

 

Comparte este contenido:

La docencia comienza a calentar motores

El ministerio de Educación convocó para el jueves a la primera audiencia a los cinco gremios con representación nacional (CTERA, UDA, SADOP, CEA y AMET) para empezar a discutir el salario mínimo garantizado que luego deben replicar las provincias.

Mientras el gobierno intentará encauzar las paritarias del sector público en el tope del 60% que impulsa el ministro de Economía, Sergio Massa, la conducción de CETERA anticipó que irá a la negociación con el reclamo de recomposición por encima de la inflación. “Vamos a solicitar un aumento de salario que supere la inflación, con revisión permanente”, advirtió la entidad sindical, además de plantear la modificación del Impuesto a las Ganancias para exceptuar los salarios docentes y acelerar la discusión por la elaboración del Convenio colectivo de la actividad.

Las administraciones provinciales aguardarán la definición a nivel nacional para encarar las negociaciones en sus respectivos distritos, aunque ya iniciaron los primeros contactos Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y CABA, de manera de evitar poner en riesgo el inicio de las clases para el lunes 27 de febrero en la mitad de las jurisdicciones y para el miércoles 1º de marzo en el resto.

Desde febrero el salario mínimo garantizado docente alcanza $ 90.338, a los que se suma el suplemento del FONID que en enero y febrero fue de $ 12.000. En diciembre el sueldo garantizado fue de $ 81.324 y en enero de $ 84.500, alcanzando el incremento interanual el114%.

Provincia de Buenos Aires: primera reunión paritaria sin oferta del gobierno  

El martes 31 de enero las conducciones de los sindicatos docentes se reunieron con el Gobierno bonaerense, en el marco de las paritarias salariales.

En la reunión paritaria no hubo ningún ofrecimiento concreto por parte del gobierno. Según el comunicado del FUD (integrado por , , ,  y ) “La representación del Frente de Unidad Docente Bonaerense expresó la demanda de aumento y actualización salarial por medio de la cláusula de monitoreo y recuperación, de modo que el salario quede siempre por encima de la inflación”.

En el mismo comunicado se expresa que: “La representación del Gobierno Provincial se comprometió a darle continuidad y avanzar en resolver la agenda planteada en lo salarial y laboral. De igual forma, el Gobierno se comprometió a una nueva convocatoria inmediata, para que se puedan garantizar las Asambleas y/o Congresos con participación democrática de Docentes afiliados/as a las diferentes Organizaciones Sindicales”.

A nivel nacional, mediante una decisión administrativa, el Ejecutivo dejó sin efecto la ampliación del gasto en programas que afectan directamente a la educación y el salario docente. Como detalla el informe realizado por la Oficina de Presupuesto del Congreso, en Políticas Alimentarias la baja en los fondos será superior a los $ 100.000 millones, en Asignaciones Familiares $ 90.000 millones, en el caso de las becas estudiantiles casi $ 60.000 millones y más de $ 30.000 millones no serán asignados para el Fondo Nacional de Incentivo Docente.

La masividad de los paros docentes del 2022 impulsados por la opositora lista Multicolor expresaron el descontento de miles de trabajadores de la educación en la Provincia. Hoy es necesario exigir e impulsar asambleas en las escuelas y de cada seccional, incluso ante las decisiones arbitrarias de inspectores que buscan imponer un retorno a los lugares de trabajo sin que haya sido convocado por el nivel central.

Río Negro: “sin respuestas no habrá inicio” 

El jueves 2 abrieron nuevamente las escuelas en Río Negro para reincorporar a les docentes de todos los niveles; aunque el inicio de clases en las aulas con estudiantes será recién a fines de febrero. La jornada comenzó con conflicto. Es que el gobierno provincial había convocado a una reunión paritaria el 20 de enero, pero luego no se presentó, pasando la misma al 23 de ese mismo mes. En esta reunión, sí se presentaron, pero no hubo oferta salarial. La paritaria pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes 6 de febrero.

Es necesario destacar que el sector docente, al igual que estatales de la provincia, cerraron el 2022 con conflicto: el gobierno de Carreras hizo descuentos de cifras que alcanzaron los $15.000 en el sueldo de diciembre y no se hizo efectivo un acuerdo en relación a la paritaria del 3er. trimestre.

Es por esto que la docencia realizó una medida de fuerza que consistió en el retiro de las escuelas entre las 10:00 y las 15:00, acompañado de importantes movilizaciones. En Cipolletti se convocó una radio abierta y volanteada en las puertas del IPROSS en reclamo de una recomposición salarial y por las condiciones de las escuelas. En la capital rionegrina los docentes marcharon por las calles hacia el ministerio de Educación, diciendo que “sin respuestas no habrá inicio”.

En Bariloche, se definió una conferencia de prensa y luego movilización. La conferencia se realizó en la Escuela Laboral Nº 6 con la presencia de decenas de docentes, en particular de la rama de educación especial. El principal reclamo es por el edificio propio, que tiene años sin respuestas.

Funciona en una casa alquilada y este año recibirá 107 chicos y chicas. Sus docentes y trabajadores reclaman garantías para poder llevar adelante los talleres con los 7 grupos inscriptos: la escuela no tiene edificio, sus instalaciones no están adaptadas para estudiantes con discapacidad, está sin agua potable, no funcionan correctamente los baños, no es factible trabajar adecuadamente en las aulas divididas con durlock, y más aún: no está preparado el espacio para que entre, por ejemplo, una ambulancia frente a una emergencia.

Luego de la conferencia de prensa, les docentes se movilizaron hacia Onelli y Mascardi para realizar una volanteada, difundiendo los motivos del reclamo con la comunidad.

El lunes 6 habrá reunión paritaria en la que se espera una nueva oferta salarial y respuestas a los diversos reclamos del gremio docente. Arabela Carreras anunció la inversión de $7.300 millones para alimentos y mantenimiento edilicio. Les trabajadores de la educación, saben que ese dinero no llegó a ningún establecimiento, es por eso que UNTER tendrá un nuevo Congreso el 10/02 para definir las medidas a seguir.

Tucumán: «Necesitamos un aumento salarial ya» 

Durante el enero miles de docentes comenzaron a organizarse en grupos de WhatsApp independientes para debatir cómo pelear por aumento de salario. El miércoles 1º realizaron la primera concentración, que contó con cientos de docentes.

En la concentración se denunció que la inflación está comiéndose los míseros aumentos salariales del año pasado, que la situación de los docentes tucumanos es de emergencia. «Necesitamos un aumento salarial ya».

Juan Luis Véliz, de la Agrupación Marrón Docente, planteó: “Hay muchos reclamos que nos nuclean, el principal es que la inflación del 100% está comiéndose nuestro salario. El salario inicial de un docente en la provincia está por debajo de la línea de pobreza. Necesitamos unirnos con nuestros alumnos, con sus familias porque hay que unir reclamos que nos están afectando a todos, como el recorte a los comedores y las malas condiciones en las que se encuentran las escuelas».

Las conducciones sindicales estuvieron ausentes. A esto se suma que continúa la puja por la fraudulenta elección de ATEP.

Los docentes organizan una Asamblea masiva para el lunes 6 de febrero en Plaza Independencia para definir pliego de reclamos y medidas de fuerza.

Jujuy: se eligió la nueva Junta Electoral de Cedems

El sábado 28 de enero se realizó la Asamblea General Extraordinaria en la que se eligió Junta Electoral para las elecciones del 31 de marzo.

Andrés García, referente de la Agrupación 9 de abril-Bordó señaló que «el sábado se dio un paso importante al ganar la Junta Electoral en el camino de recuperar el sindicato para la lucha de toda la docencia. En una fecha muy complicada puesta por el ministerio de Trabajo en el marco de las vacaciones, la oposición combativa conquistó la mayoría de la Junta Electoral. Del otro lado, se unieron la mayoría de las listas que promovieron a Montero durante años y años de pérdidas. Hay que fortalecer esa oposición de lucha, democrática e independiente de los gobiernos nacional y provincial de cara a recuperar el sindicato para la pelea del conjunto de la docencia en unidad y coordinación con el resto de la clase trabajadora».

Se presentaron dos opciones: una en la que confluyeron la Violeta, Celeste y Blanca y Naranja, apoyada por sectores de la Multicolor de Montero; y la presentada por la Lista Morena (Corriente Marina Vilte, Agrupación 9 de abril Bordó, Corriente Conti Santoro y delegados y docentes independientes). La propuesta de la Lista Morena ganó por 60 votos contra 51.

“En el marco de una asamblea que pudo desarrollarse de forma democrática y contra una convergencia de listas que seguramente cuenten con el beneplácito del gobierno provincial y sus socios, se impuso una Junta Electoral de quiénes venimos luchando en unidad y con persistencia contra el fraude de Montero y por la recuperación de nuestro gremio.

Así y todo, y sabiendo que los números nos eran favorables para ganar la Junta completa, mocionamos que la minoría también esté representada en la Junta Electoral. Dando un ejemplo democrático, porque así es el gremio que queremos: un gremio que impulse la unidad y coordinación en la lucha colectiva y no la conveniencia particular, independiente de los gobiernos, democrático y al servicio del conjunto de la docencia. Una práctica muy distinta a quienes dirigieron el gremio los últimos años”, señalan los ganadores en un comunicado.

CABA: el gobierno porteño cierra el ingreso a carreras de profesorados 

A horas de finalizar el ciclo lectivo, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires notificó a los Institutos de Formación Docente que cerrará el primer año de las carreras de Lengua y Literatura y Física de los Profesorados Mariano Acosta y Alicia M. de Justo, respectivamente. Además, le negó el ingreso a la carrera de Psicopedagogía a 400 de los 700 estudiantes que se inscribieron en tiempo y forma.

“Este nuevo atropello, evidencia el plan que Emmanuel Lista, director de la Unidad de Coordinación del Sistema de Formación Docente, y la ministra de Educación, Soledad Acuña, tienen para los Profesorados. Plan que ya denunciamos en abril del 2022, cuando nos negaron nuestro derecho a la estabilidad laboral, excluyéndonos de la titularización. Aunque se la pasen hablando de los preocupados que están por la formación docente, lo que buscan es achicar la oferta académica para reducir el ‘gasto’ educativo. Sino no se explica por qué cierran profesorados de materias que están en emergencia por falta de docentes o limitan el acceso a casi el 60% de lxs ingresantes a la única carrera pública (y gratuita) de psicopedagogía. Todo esto sin siquiera dar explicaciones de qué pasará con los más de 130 puestos de trabajo docente que quedan en riesgo al cerrarse el ingreso a estas carreras”, expresaron desde el gremio de Ademys

En este sentido, y como graduadxs de la formación docente, se declaran en estado de alerta, acompañando a las comunidades educativas, y reclaman la inmediata reapertura de los Profesorados de Física y Lengua y Literatura de los Institutos de Formación Docente Alicia M. de Justo y Mariano Acosta; que se garantice el ingreso a lxs más de 700 inscriptos a la carrera de Psicopedagogía; apertura para todas las carreras de la inscripción complementaria en febrero 2023; titularización inmediata para lxs docentes del nivel Superior; y una campaña de Incentivo y difusión de las carreras de formación docente.

Desde los gremios docentes de Ademys y UTE-Ctera convocaron a un abrazo y conferencia de prensa el jueves 29 de diciembre en la puerta del IES N°1 Alicia Moreau de Justo, ubicado en Córdoba y Ayacucho de la Ciudad de Buenos Aires, tras el anuncio por parte del gobierno porteño.

Soledad Acuña terminó 2022 como arrancó: atacando a la comunidad educativa

Por Martín Suárez

Familias, docentes y alumnos marcharon contra el cierre de profesorados, que decidió Ciudad el 23 de diciembre. Otro hecho que marca un año signado por la “derechización” y la desinversión: desde la prohibición del lenguaje inclusivo hasta la falta de vacantes o las denuncias a familias por las tomas de colegios. 

Mientras Horacio Rodríguez Larreta busca instalarse como el candidato de Juntos por el Cambio a la presidencia, ayudado ahora con la coparticipación, la política educativa de la Ciudad puede ser un anticipo de lo que se proyectaría a nivel nacional. En ese sentido, el 2022 termina como arrancó: con ataques a la comunidad educativa, cierres de carreras y marchas de docentes, alumnos y familias.

Camino a sus ocho años de gestión, Larreta y su ministra de Educación, Soledad Acuña, no solo dejan a CABA con el presupuesto educativo más bajo de toda su historia (poco menos del 17% del total, diez puntos menos que hace 15 años) sino que además este año fue el área predilecta de los ataques oficiales. La última novedad es el anuncio del cierre de históricos profesorados en favor de la UniCABA, lo que motivó una masiva movilización el jueves, reclamando por “el derecho a la educación superior”.

La lista de hechos es larga. Recorte a la educación especial; eliminación de materias de terciarios, la interrupción del proceso de inscripción a carreras; al menos 13 escuelas sin clases por roedores; la persecución a maestros, familias y estudiantes que terminaron tomando colegios en reclamo por mejoras edilicias, por el mal estado de las viandas y en oposición al trabajo gratuito de las pasantías laborales.

A esto se suma la carencia de docentes que generó decenas de miles de horas sin clase, el robo de más de mil computadoras en menos de un año y el pase compulsivo a jornada extendida de decenas de establecimientos que obligó a modificar las rutinas familiares. Pero el origen de todo es la falta de inversión, sobre todo en infraestructura. A principios de año se conoció la falta de más de 56.000 vacantes en el sistema público, número récord para la Capital Federal. En los últimos 9 años, el PRO creó apenas 4.816 vacantes en nivel inicial: 535 por año. Una cifra escasa que solo cubre el 21% de quienes quedaron excluidos este año en ese sector.

Derechización de la política educativa

El 2022 también fue el año de la “derechización” de la educación porteña, en el marco de ambiciones personales de Soledad Acuña para candidatearse a jefa de Gobierno, intentando captar el voto libertario y del ala dura de JxC. “La ministra se esfuerza por mostrar públicamente una postura de dureza e inflexión. En nombre de la ‘calidad educativa’ prohibió, por ejemplo, el lenguaje inclusivo en las aulas, argumentando que atenta contra el aprendizaje de las habilidades de lectura y escritura, lo cual nunca pudo mostrar con ningún estudio”, señala a Tiempo la legisladora porteña Maru Bielli (FdT).

Para la presidenta de la comisión de Educación en la Legislatura, otro ejemplo fue el abordaje de las tomas de escuelas: “La Ciudad optó por negar canales de diálogo ante las demandas legítimas de las y los estudiantes que pedían comer bien, discutir en qué condiciones realizarán las prácticas profesionalizantes el último año de su secundario y estudiar en condiciones dignas”. Y acota: “Pero tal vez la mayor expresión de este desgobierno como práctica sistemática es la caída de 10 puntos del presupuesto educativo desde que el PRO gobierna la Ciudad”.

En octubre, Bielli propuso la creación de un contador de horas oficiales sin clase por falta de docentes en CABA. En apenas dos semanas, a partir de datos oficiales de Actos Públicos de la Ciudad, contabilizó 20.235 en el secundario y un promedio diario de casi 200 cargos docentes sin cubrir en primaria.

La mala alimentación

Lo (mal) que se come en los establecimientos educativos es otro signo de la gestión, que sigue “premiando” a las empresas que dan el servicio. En abril, la Ciudad publicó que pagará 12.000 millones de pesos a las firmas concesionarias de las viandas en las escuelas, algunas aportantes del PRO y muchas denunciadas por intoxicaciones.

En mayo comenzaron las acciones estudiantiles contra las pasantías laborales gratuitas, algunas de ellas en las propias empresas que dan las viandas o en lugares tan disímiles como hoteles cinco estrellas donde tenían que comprarse la ropa de mucamas. En septiembre, tras cinco meses de falta de diálogo, apelaron a la toma de escuelas. Reclamaban mejoras edilicias, por el estado de la comida y por las pasantías.

“Si bien lo peor que le ocurre a la educación porteña es la propia ministra Acuña, este 2022 la situación más grave fue la persecución a estudiantes secundarios que reclamaban por sus derechos”, lanza la legisladora porteña Amanda Martin (FIT), secretaria adjunta del gremio docente Ademys, en referencia a las tomas de septiembre. ”La persecución vino acompañada con notificaciones a los domicilios de las familias de estudiantes. También a docentes. Ademys lo sufre en carne propia con sumarios y desafueros como ocurre con Jorge Adaro. Todo aquel que cuestione la política educativa es objeto de persecución y sanciones”.

Eduardo López, secretario adjunto de UTE–CTERA, coincide en que uno de los hechos más graves de 2022 fue la persecución a estudiantes y familias, “pero también el intento de extender la jornada escolar a los sábados. La ministra dijo que era obligatorio ir a capacitarse esos días, cuando históricamente desde 1958 la realizamos durante la semana. Por eso la docencia no asistió a ninguna jornada”. López asegura que ese intento fue “un fracaso total. Cuando la ministra vio que no iba nadie, cambió el discurso y dijo que era optativo y que a los que fueran le daban 8.000 pesos: asistió menos del 1%. Ni siquiera el propio electorado docente del PRO participó de esa barbaridad porque hay una conciencia de los derechos laborales. Hay una imagen que es muy fuerte, en la primera jornada de los sábados, la Ciudad alquiló el aula magna de la Facultad de Derecho donde entran 1.000 personas y apenas fueron 20”.

Durante 2022, la educación superior fue la que sufrió mayores ataques. En junio Acuña anunció el recorte de 24 materias y la quita de 400 horas de estudios en profesorados. A mediados de este mes publicó el remate del edificio donde funciona la UniCABA (Paseo Colón 255) y la fusión de esa universidad con los institutos Romero Brest y Federico Dickens.

El viernes 23 de diciembre, horas antes de Noche Buena, los institutos de formación docente Alicia Moreau de Justo y el Mariano Acosta, fueron notificados del cierre de la inscripción 2023 para los profesorados en Física y Lengua y Literatura. Beatriz Frenkel, rectora del Alicia Moreau de Justo, aseguró a Tiempo que “el cierre de la cohorte 2023 del profesorado en Física, es el paso previo al cierre de la carrera. Desde el Ministerio de Educación, argumentaron que se debe a que hay pocos inscriptos en el instituto y que los derivarán hacia otros profesorados”. La comunidad educativa se movilizó este jueves y planean judicializar la medida.

Cierre de carreras y de edificios

En marzo, Soledad Acuña confirmó que iba a dejar de dar clases a estudiantes con discapacidad mayores de 22 años en las escuelas especiales que ofrecen formación laboral e integral. Se sumó a la quita del Palacio Ceci a la comunidad sorda de la Escuela N° 28 Bartolomé Ayrolo de Devoto, que lo usaba desde hacía 84 años. Ahora será transformado para fines turísticos.

En noviembre, la Ciudad eliminó cinco carreras técnicas de los institutos de formación superior, sobre todo con tendencia a sociales y derechos humanos, y la carrera en Ceremonial y Protocolo. Según el director de Gestión de Aprendizaje a lo largo de la Vida del gobierno porteño, Juan Pablo Becerra, el argumento para cerrarlas fue que “se ha contemplado el contexto coyuntural imperante a fin de definir la oferta estratégica para la Ciudad, priorizando aquella con mayor requerimiento del sector socio-productivo”.

Ratas

En noviembre de este año, Tiempo realizó un relevamiento sobre la presencia de roedores en escuelas porteñas. En apenas dos meses, fueron 13 los establecimientos educativos que denunciaron la aparición de ratas, aunque familias y directivos de escuelas aseguran que son muchas más pero que, por diferentes presiones, muy pocas hacen público el tema. En el mismo sentido, la Defensoría del Pueblo porteña registró este año una docena de denuncias formales por presencia de roedores en diferentes escuelas porteñas, y exigió al Gobierno porteño que “avancen de forma urgente con las tareas de desratización, desinsectación e higiene de la vía pública en los alrededores de los establecimientos escolares”, destacó el organismo. Durante el ciclo lectivo, muchas familias decidieron dejar de enviar a sus hijos a la escuela dado que las ratas deambulaban en las aulas, en el patio y en el comedor.

“A Larreta y Acuña les digo: en el 2023 seremos su pesadilla” 

Angélica Graciano, secretaria general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), salió a marcarle la cancha al jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La referente de los educadores porteños ni bien comenzado el 2023 estableció algunos de los puntos fundamentales por los que van a luchar desde el gremio.

En este contexto, la titular de UTE avisó: “Te digo Larreta: vamos por la titularización de todos compañeros y compañeras; vamos por la reapertura de la reinscripción de todas las carreras de Norte a Sur de la Ciudad de Buenos Aires; vamos por una mesa de trabajo intersectorial con estudiantes, docentes, familias, para discutir qué queremos enseñar en los Profesorados.”

En esta misma línea también les advirtió tanto a Horacio Rodríguez Larreta como a Soledad Acuña, la ministra de Educación de la CABA que “en el 2023 maestras, maestros, estudiantes y familias seremos su pesadilla. Porque si no nos dejan soñar, no los dejaremos dormir. Seguiremos luchando cada día en defensa de nuestros derechos”, concluyó.

Ni CFK, ni Macri ni Alberto cumplieron con la ley de financiamiento educativo

Por Virginia Pescarmona y María Díaz Reck

En los últimos 15 años casi no se cumplió con la Ley de Financiamiento Educativo que obliga a destinar el 6% del PBI en educación. Queda claro que, más allá de los encendidos discursos, ya de campaña, no hay grieta a la hora de las prioridades: tanto el Frente de Todos como Juntos por el Cambio son responsables del ajuste educativo. 

A pocos días de comenzar un nuevo ciclo lectivo, volvió el debate sobre el financiamiento de la educación pública. Esto despierta un interés en las familias trabajadoras que ven a sus hijos asistir a escuelas desfinanciadas, docentes sobrecargados para llegar a fin de mes y una canasta escolar inalcanzable por la inflación que no para de subir.

El observatorio Argentinos por la Educación publicó un informe donde analiza y compara el presupuesto educativo en los últimos años. Informe que fue replicado por los principales diarios del país. Por su lado, Alejandro Bercovich, periodista de Radio con Vos y C5N, también se refirió a este tema en una de sus editoriales radiales. Incluso el ministro Jaime Perczyk salió al cruce aduciendo que en la gestión del Frente de Todos hay inversión y en la de Juntos por el Cambio, ajuste. Insostenible. Ajustar, ajustaron todos: porque se ha achicado el PBI, entonces porcentualmente hay ajuste, por recortes directos, vía inflación, vía bajos salarios o desinversión.

Un debate sobre prioridades: deuda millonaria del Estado con la educación

Desde 2006 cuando fue sancionada la Ley de Financiamiento Educativo hasta 2020 (último año con estadísticas), solo en tres años se cumplió con la meta que llevaba a invertir 6% del PBI: 2009, 2013 y 2015.

En el resto de los años las metas no se cumplieron y el 68,4% de la desinversión ocurrió en cuatro años: en 2010 y entre 2018 y 2020. En 2019 se dejó de invertir 841.000 millones de pesos, actualizados a 2022 (el 22,6% del total de la deuda). En 2018, 751.000 millones (el 20,1%); y en 2020, 570.000 millones.

Cuando fue sancionada esta ley, desde la izquierda y sectores antiburocráticos, advertimos que se trataba de un parche que no iba a resolver la crisis educativa y que por el contrario habilitaba todo tipo de financiamiento por parte de empresas y ONG. Pero, y sobre todo, mantenía la lógica neoliberal de la descentralización, la gran política neoliberal desde la dictadura, o incluso antes, para desentender al Estado nacional de la educación pública.

Esta ley fue acompañada de una nueva Ley Nacional de Educación que lejos de revertir todos los avances del neoliberalismo en la educación, los reforzó parándose sobre ellos.

La ley Nacional de educación (26.206) mantuvo el sistema fragmentado. El Estado nacional sólo garantiza un piso salarial muy bajo y se desentendió del financiamiento de la educación pública, que sigue en manos de las provincias tal cual lo definió Menem en 1993 con la Ley Federal y la descentralización educativa (24.049), de 1991 con la transferencia de servicios a partir del 92.

El desentendimiento sobre el financiamiento se traduce hoy, en que a lo largo de estos 15 años se fue acumulando una deuda del Estado con la educación que asciende al equivalente al 5% del PBI de 2020. Si se quisiera, señala el informe, el Estado debería invertir 11% del PBI en educación este año (5% que deben más 6% que corresponde). Casi dos presupuestos educativos juntos (15,3%). Algo que está muy lejos de las decisiones que viene tomando el FDT en el gobierno con Massa a la cabeza y con el apoyo de la oposición de derecha.

Para los gobiernos la prioridad viene siendo cumplir las metas del FMI, y esto es a costa de la salud, educación y beneficiando con subsidios a los grandes empresarios.

En 2022 a Massa no le tembló el pulso para sacar de un plumazo 50.000 millones del presupuesto, que iban a ser destinados, entre otras cosas, al Plan Conectar Igualdad y al programa “Fortalecimiento Edilicio de Jardines Infantiles”. Nada que envidiar a otras “falsas promesas”, como la del ex presidente Macri, cuando en 2017 anunció la construcción de 3.000 jardines. Meses más tarde el ex ministro Finocchiaro anunciaba “ que no se podían construir por falta de terrenos”.

La desinversión educativa es una triste realidad a la vista: escuelas destruidas, cursos superpoblados, servicios alimentarios escolares insuficientes y poco nutritivos, becas insuficientes, falta de material didáctico y libros, personal insuficiente y de equipos interdisciplinarios que son vitales en las escuelas. Salarios de pobreza y precarización laboral completan un cuadro que miles de docentes y estudiantes a lo largo y a lo ancho del país vienen denunciando y peleando para transformarlo, como mostraron las decenas de huelgas y luchas en 2022.

El ajuste en educación se profundiza en un marco de profunda crisis social, donde más del 50 % de les niñes y adolescentes de este país son pobres.

La pandemia profundizó y expuso aún más la crisis educativaComo es sabido, ni el gobierno nacional ni los gobiernos provinciales garantizaron el acceso universal a internet ni dispositivos para que lxs estudiantes pudieran aprender. Si analizamos los números del presupuesto educativo en el 2020 fue uno de los años donde se estuvo más lejos de cumplir la Ley de financiamiento.

Desfinanciamiento, descentralización y ajuste educativo: ¿y los sindicatos?

La Ctera es la confederación sindical más numerosa del país y es la que viene dejando pasar todos los ajustes y ataques de todos los gobiernos a la educación pública. Achiques, reformas sin debate, bajos salarios, privatización creciente de áreas y sectores, precarización laboral, calendario escolar de 190 días, etc. La novedad es la extensión horaria que, sin debate ni consenso, se empezó a aplicar de hecho.

Hoy, su conducción profundiza la integración al Frente de Todos, como lo viene expresando Roberto Baradel en su campaña por la reelección de Axel Kicillof como gobernador de la Provincia de Buenos Aires. Pero no es tal o cual dirigente. Es su política y en cada provincia adopta posturas más o menos similares, acorde a la línea política del Frente de Todos en cada una: más o menos oficialista, más o menos es parte del cogobierno con Juntos por el Cambio.

En abril de 2021 las conducciones sindicales acompañaron la presentación de un proyecto de una nueva ley de financiamiento educativo, que entre otros puntos planteaba llevar del 6% al 8 % del PBI lo destinado al presupuesto para educación. Más de lo mismo, para que nada cambie.

En 1991, bajo el auge del neoliberalismo, se sancionó la Ley 24.049 de Transferencia de los servicios de la Educación de Nación a las provincias. Así se concretaba la descentralización del Gasto en Educación. Ningún gobierno puso esto en cuestión. La Ley de Financiamiento no revirtió esta avanzada, sino que puso un parche, que ni siquiera, como se ve en los números y realidad de las escuelas, termina siendo tal.

Esto tuvo como efecto que el gasto para educación se financiara con las cajas provinciales, dispares entre sí, siendo los salarios docentes un 80 % del destino del gasto en educación en la mayoría de las provincias. Este proceso de descentralización del gasto que se corona bajo el menemismo tuvo varios intentos y antecedentes durante la dictadura militar. Desde entonces no se ha cuestionado esta lógica neoliberal ni por parte de los gobiernos peronistas, radicales, PRO, y menos aún por los liberales/libertarios que opinan que el Estado ni siquiera debería poner un peso en la educación pública.

Luego de las jornadas revolucionarias de 2001 y en los comienzos de una recuperación de la economía nacional, con viento de cola internacional a favor principalmente por el precio de las materias primas, el kirchnerismo sancionó en 2006 la Ley de Financiamiento Educativo (LFE), que entre otras cosas “establece un aumento gradual y progresivo del gasto en Educación, Ciencia y Tecnología durante el período 2006-2010, hasta alcanzar el 6% del PIB. Tanto el Gobierno Nacional como los Gobiernos Jurisdiccionales se han comprometido financieramente para alcanzar dicho objetivo.”

A 15 años de la sanción de la Ley, esta casi no se cumple y tampoco ningún gobierno cuestiona la herencia de las leyes de Menem con la descentralización por provincia.

Las distintas conducciones peronistas de la Ctera y los sindicatos de base provinciales solo se han adaptado, una y otra vez, a las reformas neoliberales y sus parches. Por eso, los salarios de los y las trabajadoras de la educación se discuten en cada provincia y la paritaria nacional solo fija un monto.

¡Plata para educación, NO para la deuda!

Como venimos planteando en todo el país desde la 9 de abril, Lista Marrón Nacional en el Frente de Izquierda Unidad, para empezar a revertir el atraso y la dependencia, en educación se debe volver a un sistema educativo nacional y que el Estado nacional no sea un “ministerio sin escuelas” y financie la educación de todo el país, con un salario único para las y los docentes de Ushuaia a la Quiaca y un presupuesto acorde a las necesidades, con una base del 10% del PBI.

Pero bien sabemos que es imposible revertir la decadencia, el atraso y los altos niveles de pobreza, invertir en educación, salud y trabajo, sin un desconocimiento soberano de una deuda ilegal e ilegítima y la ruptura con el FMI y sus planes de sometimiento.

Son indispensables medidas como la nacionalización de la banca, el comercio exterior o la expropiación de los grandes terratenientes y los servicios estratégicos, para poner los recursos en función de un plan que sea favorable a las grandes mayorías y no de la ganancia de unos pocos.

Es en las escuelas donde se concentra el conjunto de las penurias sociales. Las consecuencias de las políticas que dejan a las familias en la calle, el hambre, la desocupación en las familias o la desaparición de una joven, etc. Para la crisis educativa no alcanza con un reclamo parcial.

Sabemos que en esta pelea no sólo tenemos que enfrentar la política del gobierno nacional y de los gobernadores provinciales, sino también de los que se preparan para gobernar y aplicar con más crudeza el plan acordado con el FMI.

Hay que desarrollar y ampliar la unidad de la docencia con el resto de los trabajadores, para pelear juntos. Hay que unir lo que la burocracia sindical divide en realidades tan disímiles como Buenos Aires, Salta, Chubut o Mendoza. Tenemos que prepararnos para derrotar esta nueva ofensiva del gobierno nacional y la oposición patronal, que pretenden imponer ajuste y saqueo, como ya lo vemos en muchos puntos del continente.

Por eso, desde nuestras agrupaciones y desde las seccionales opositoras a las conducciones burocráticas de nuestros sindicatos de las que somos parte, peleamos en las escuelas para unir nuestras demandas a la comunidad educativa, a otros trabajadores y desde abajo imponer la lucha por una salida a la crisis en favor de las mayorías populares.

Empecemos por organizar asambleas en todas las escuelas, junto a la comunidad. Nuestra perspectiva es la construcción de un congreso educativo democrático, donde los verdaderos interesados en defender la escuela pública podamos discutir un verdadero plan, en base al aumento del presupuesto en forma inmediata y la pelea por la nacionalización del sistema educativo.

Un congreso construido desde abajo, que pueda no sólo llegar a una visión común sobre esta realidad, sino debatir y votar las medidas necesarias para luchar por transformarla a favor de las mayorías.

El Grupo de Filosofía de la Biología anunció que se queda en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA  

El jueves 22 de diciembre, el Grupo de Filosofía de la Biología, que funciona en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires, se anotició de que no podían seguir realizando su trabajo que hace más de 20 años desarrollan en el segundo piso del pabellón 2 de la Ciudad Universitaria de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA. Fue en una reunión con las autoridades de la institución en donde las mismas no argumentaron motivos concretos, más que el espacio físico debía ser cedido y ante esto no propusieron lugar alternativo y sugirieron al Grupo redireccionarse a otra institución.

El Grupo  está integrado por investigadores e investigadoras de Conicet, de las carreras de Biología, Filosofía, Historia, Antropología, en total  25 personas, con presencia en Córboba, Areco, Bariloche y Puerto Madryn. Su núcleo, 20 personas, están en Buenos Aires. Hace alrededor de dos décadas que trabajan problemáticas vinculadas a lo sociombiental, poniendo como eje lo ético y lo político de las intervenciones científicas en lo público.  Es un espacio interdisciplinario y de compromiso con las comunidades y la naturaleza. Para el Grupo estar en la Universidad no sólo es importante por el espacio físico de trabajo sino que significa además estar cerca donde se produce la ciencia que se pone en discusión.

Luego de la noticia, numerosas asambleas comunitarias, socioambientales y activistas expresaron su repudio a lo sucedido y apoyo al grupo.  Más de 5.000 firmas acompañaron un documento en donde se pedía a las autoridades la no expulsión y una solución institucional estable.

Luego de una reunión con autoridades, el GdFB anunció finalmente que gracias a todo el apoyo lograron que la institución siga garantizando el espacio físico, mientras se trate en paralelo la regularización del equipo en la Facultad.

El Grupo hace varios años que reclama regularizar su situación. Son muchos profesionales que entraron a carrera de Conicet por la Facultad de Filosofía pero que la misma nunca les dio espacio de trabajo como así lo hizo la Facultad de Exactas, pero manteniendo la irregularidad.

Finalmente, el equipo ratificó que seguirán ejerciendo su trabajo, activismo y ciencia pública como hace ya 20 años: “Ratificamos nuestro compromiso con la búsqueda del bienestar de las comunidades y la naturaleza, a la vez que reiteramos los agradecimientos, en particular a las diversas comunidades, movimientos y organizaciones que nos han acompañado. Confiamos plenamente en que la articulación entre éstas y las universidades es clave para el futuro de la ciencia y de la sociedad.”

Dependencia académica y económica en investigaciones del Conicet

Por Varios autores

Fuente: Agencia TierraViva

Una publicación académica confirma que la ciencia médica local está subordinada a la agenda de las empresas internacionales y de los países del Norte. Imponen una política que reduce la salud y la enfermedad a genes, moléculas y fármacos, y se dejan de lado los aspectos socioambientales. «Es imprescindible que se discuta ciencia para qué y para quién», proponen. 

El campo de las Ciencias Biomédicas (toda investigación básica y aplicada en salud) constituye un caso clásico de límites difusos entre la investigación académica y la investigación que busca maximizar ganancias en el mercado, por lo que representa un sistema ideal para analizar la influencia del interés corporativo en las agendas científicas. Nuestro reciente trabajo da cuenta de cómo las investigaciones del Conicet están alineadas con las agendas marcadas por las grandes corporaciones y por los países del norte global.

Se trata de un tema de interés público porque las asociaciones entre la industria y las instituciones públicas de investigación pueden sesgar y orientar las agendas públicas hacia los intereses privados. Es conocido que las grandes empresas farmacéuticas suelen patrocinar y establecer acuerdos con instituciones de investigación de países centrales. En la actualidad, este grupo de países dominantes (Estados Unidos, China, Reino Unido y Japón, entre otros) que se caracterizan por altos niveles de industrialización, urbanización y producción científica.

Los vínculos directos entre las corporaciones privadas y las instituciones de investigación están tan concentrados en esos países que las instituciones reconocidas del resto del mundo (consideradas periféricas), rara vez llaman la atención directa de las corporaciones. Dado que las empresas locales no suelen demandar investigación novedosa, que los contactos directos entre las instituciones de investigación locales y los líderes mundiales son escasos y que, si se producen, tienden a concentrarse en un pequeño grupo de equipos de investigación internacionalizados, podría concluirse precipitadamente que el sesgo de la agenda de investigación local hacia los intereses privados es insignificante.

Sin embargo, los contactos directos entre actores son una pero no la única forma en que las grandes empresas privadas pueden influir en las agendas públicas. De hecho, la influencia de las grandes empresas farmacéuticas moldea la agenda de investigación dominante en el campo de las Ciencias Biomédicas y de la Salud (CBMS), sin necesidad de contactos directos.

En la investigación «¿Sobre los hombros de quién se apoya la investigación en salud? Determinación de los actores y contenidos clave de la agenda de investigación biomédica imperante» realizamos un análisis de más de 95.000 artículos científicos publicados entre 1999 y 2018 en las revistas de mayor impacto dentro de las CBMS. Allí se demostró que la agenda de investigación predominante en ese campo es el resultado del entrelazamiento de las agendas de las principales instituciones académicas y las grandes farmacéuticas. Los temas de investigación predominantes a nivel internacional se inclinan más hacia los enfoques y metodologías de la biología molecular y la investigación relacionada con el cáncer. Además, prioriza las investigaciones sobre el descubrimiento y desarrollo de fármacos frente a la investigación sobre los factores ambientales y sociales que afectan a la aparición o progresión de la enfermedad.

La teoría de la dependencia académica sugiere que la investigación científica de los países de ingresos bajos y medios adopta la agenda predominante, y que los investigadores de esos países ocupan posiciones subordinadas en la división global del trabajo científico.

Del mismo modo, el sociólogo Edgardo Lander denominó «colonialidad del conocimiento» al complejo marco social y epistemológico que determina los modos de producción de la ciencia y la tecnología, incluyendo qué países centrales (en particular, qué instituciones de esos países) concentran el poder.

Sin embargo, otros autores y autoras —como María Fernanda Beigel, Jorge Gallardo y Fabiana Bekerman en su trabajo «Expansión institucional y desarrollo científico en la periferia: la heterogeneidad estructural del campo académico argentino«— ofrecen otros matices de la interacción entre las agendas de investigación internacionales y locales. Sostienen que la noción de dependencia académica está vinculada a una perspectiva simplificadora de la relación entre las agendas científicas internacionales y locales, ya que pasa por alto las complejas asimetrías que se dan en un campo entrelazado por diferentes circuitos de reconocimiento (local, regional e internacional). Particularmente, se ha señalado que los campos de investigación en las periferias son internamente heterogéneos. Ponen de manifiesto las limitaciones de considerar a los países como importadores pasivos de conocimiento. Desde ese punto de vista, Beigel concluye que la autonomía y la heteronomía científicas pueden coexistir en determinadas situaciones históricas.

El caso de las investigaciones en el Conicet

El Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) es una institución de investigación líder en América Latina, aunque también puede definirse como una institución «semiperiférica» porque no forma parte de las organizaciones líderes que determinan la agenda de investigación dominante en CBMS, pero aun así contribuye al campo con investigación de punta.

En nuestro último trabajo, titulado «Dependencia académica: la influencia de la agenda internacional de investigación biomédica imperante en el Conicet argentino«, nos propusimos examinar tres cuestiones: si la agenda de investigación en CBMS del Conicet privilegia el estudio de las mismas enfermedades que la agenda de investigación predominante, si favorece o descuida los mismos enfoques y metodologías, y —tercero— si la agenda de investigación del Conicet es internamente homogénea.

El objetivo fue explorar cuantitativamente si la agenda de investigación internacional predominante, establecida por las grandes empresas farmacéuticas y las principales instituciones académicas, influye indirectamente en la investigación académica de los países no centrales.

Nuestros resultados muestran que la agenda de investigación en Ciencias Biomédicas y de la Salud del Conicet, al igual que la agenda internacional de investigación CBMS dominante, privilegia las metodologías y enfoques de la biología molecular y descuida la investigación sobre los determinantes socioambientales de la enfermedad. Estos hallazgos se aplican a ambos períodos analizados (1999-2008 y 2009-2018), independientemente del aumento de casi tres veces en el número de artículos publicados sobre Ciencias Biomédicas y Salud en el segundo período analizado.

La gran mayoría de les investigadores del Conicet no publican en las revistas internacionales de mayor factor de impacto a partir de las cuales reconstruimos la agenda de investigación en CBMS dominante. Por lo tanto, el alineamiento entre la agenda predominante y la agencia científica nacional no se explica meramente por una conexión directa sino probablemente por la influencia indirecta que estas instituciones de elite y las revistas internacionales ejercen, más allá de los vínculos directos con las instituciones no centrales. Estos hallazgos son consistentes con la teoría de la dependencia académica y con el concepto de colonialidad del conocimiento.

Los resultados también muestran que la agenda de investigación en CBMS del Conicet es internamente heterogénea, introduciendo algunas diferencias específicas en relación con la agenda de investigación en CBMS predominante. Los términos asociados a categorías que incluyen «patógenos» y «enfermedades endémicas» están entre cinco y diez veces más representados que en la agenda internacional. Sin embargo, la biología molecular es el enfoque privilegiado en esta área, demostrando un abordaje que reduce la salud y la enfermedad a genes, moléculas y fármacos, en consonancia con nuestros resultados previos que reflejan que los determinantes socioambientales de la salud humana, así como otros enfoques metodológicos, quedan relegados.

Curiosamente, mientras que la agenda en Ciencias Biomédicas y de Salud del Conicet muestra sólo una presencia marginal de términos vinculados a la investigación médica a nivel clínico o humano, los términos asociados a otros niveles o modelos de organización (como animales, plantas, microbios o sistemas moleculares y celulares) están sobrerrepresentados en comparación con la agenda internacional de investigación.

Por ejemplo, los términos vinculados a la biología molecular y celular son aún más frecuentes en la agenda de investigación del Conicet que en la internacional (en la que ya están fuertemente enriquecidos). Lo mismo ocurre con los términos relacionados con modelos animales. Esto se explica por una división global del trabajo donde la investigación médica trasnacional, que es sofisticada y costosa, se realiza en países centrales. Allí, la cooperación entre las principales instituciones académicas y sanitarias es sólida y dinámica. Por el contrario, en las instituciones del resto del mundo quedan relegadas en su mayoría a proveedores de resultados experimentales básicos, que luego son explotados por las instituciones académicas líderes de los países centrales, así como por las grandes corporaciones farmacéuticas.

Estas diferencias, lejos de apuntar a una autonomía local, son consistentes con las teorías de colonialidad del conocimiento y la dependencia académica en relación con un modelo de extractivismo del conocimiento. A este último lo definimos como un proceso por el cual la ciencia y la tecnología producidas por instituciones públicas en las periferias (o semiperiferias) son monetizadas en los países centrales, generalmente por empresas que monopolizan el acceso al conocimiento.

Extractivismo de recursos y de conocimientos

Una forma de medir el extractivismo de conocimientos es la identificación de formas de transferencia ciega. Es decir, la cita de publicaciones científicas en patentes en las que los/las autores de las primeras no figuran entre los/las copropietarios de las mismas y a menudo ni siquiera son conscientes de su existencia.

Un ejemplo concreto de esta forma de extractivismo del conocimiento se puede observar en los artículos relacionados con Covid19. A pesar de que las grandes empresas farmacéuticas se han beneficiado enormemente de la pandemia, se ha demostrado recientemente que los artículos con autores provenientes de corporaciones privadas sólo representaron el dos por ciento de las publicaciones mundiales sobre el tema.

Retomando los resultados de nuestra última investigación, otra diferencia importante entre la agenda de investigación internacional predominante y la del Conicet es que en esta última aparecen términos asociados a la investigación vegetal, la agrobiotecnología y la industria alimentaria. Esto es consistente con el rol protagónico de la Argentina como productor de bienes derivados de la agrobiotecnología, a través de la consolidación de su agroindustria durante la década de 1990.

Del mismo modo, la sobre representación de términos asociados a categorías de microbiología aplicada e industria alimentaria en la agenda de investigación del Conicet es consistente con el rol de Argentina en la división internacional del trabajo como productor y exportador de commodities.

Nuestros resultados son coherentes con las teorías que sostienen la existencia de un modelo global donde las empresas de los países centrales capturan no sólo conocimiento sino también “recursos” naturales del resto del mundo, causando importantes daños ambientales y conflictos sociales.

Ciencia para qué y para quién

La agenda de investigación del Conicet en materia de Ciencias Biomédicas y de la Salud se alinea, en buena medida, con la agenda de investigación predominante a nivel internacional. Esta similitud, sin embargo, presenta importantes salvedades. La presencia de ciertos temas de investigación distintivos (agrobiotecnología, microbiología aplicada e industria alimentaria) que se encuentran en la agenda de investigación del Conicet puede explicarse por el lugar (dependiente) que ocupa Argentina en la división internacional del trabajo. En este sentido, la agenda de investigación del Conicet parece ser el resultado de una combinación de elementos que reflejan un grado de dependencia académica y económica.

Con respecto a esto último, los temas de investigación distintivos del Conicet podrían responder a la acción de empresas privadas y grupos de investigación que construyen una posición de poder local o regional que les permite disputar financiamiento y prestigio. Este ha sido el caso de las empresas de agrobiotecnología y alimentos. Estas empresas fomentaron un discurso sobre la necesidad de la innovación basada en la ciencia y la tecnología, del que se hizo eco parte de la comunidad científica, dando lugar a colaboraciones entre estas empresas y diversos organismos públicos de investigación.

Por ejemplo, Bioceres (la empresa de agrobiotecnología más grande de Argentina), el Conicet y la Universidad Nacional del Litoral han desarrollado un fuerte vínculo de investigación y desarrollo a largo plazo, que llevó a la co-titularidad de patentes internacionales para dos semillas genéticamente modificadas con la tecnología HB4. Otro ejemplo es el Instituto Nacional de Agrobiotecnología de Rosario (Indear), un emprendimiento de investigación conjunto entre Bioceres, la farmacéutica Biosidus y el Conicet.

Este contexto fortalece la integración de la ciencia y la agricultura más allá de las colaboraciones directas mediante la creación de marcos institucionales, normativos y de financiación en Argentina.

Los resultados de nuestro estudio mapean la red invisible de relaciones de poder que subyace a la agenda internacional de investigación de las Ciencias Biomédicas y de la Salud. Esa agenda influye indirectamente en las agendas de investigación del resto del mundo. Una contribución clave de nuestra más reciente publicación es arrojar luz sobre el modo en que las agendas de investigación internacionales predominantes subordinan la investigación pública de un país semiperiférico.

Esto es coherente con la aparición de lo que denominamos un discurso dominante científico. Este concepto puede definirse como un eje de referencia que asigna valor a los signos en una comunidad discursiva (en este caso, la comunidad de investigación en Ciencias Biomédicas y de la Salud), condicionando por tanto la circulación de cada producción (por ejemplo, artículos científicos) y la posición que ocupan determinados ítems en la agenda (temas y métodos de investigación).

La existencia de ese discurso dominante implica un papel disciplinador durante la producción científica, alineando así las agendas de investigación locales con la agenda internacional predominante. En consecuencia, regula la prevalencia (o marginación) de determinadas líneas de investigación. Si existen razones económicas para privilegiar determinados temas, enfoques, metodologías y subcampos dentro de un campo, es de esperar que se privilegien no sólo en términos de producción científica, sino también en lo que respecta a la financiación pública y, en particular, privada.

En el estudio de caso del Conicet coexisten la heteronomía y un cierto grado de autonomía académica. Sin embargo, el otro hallazgo crucial es que esta aparente autonomía parece ser mayormente la expresión de otra forma de dependencia, la dependencia económica argentina, que vincula la producción de conocimiento a una matriz productiva basada en la exportación de commodities.

En definitiva, no alcanza solo con invertir más en ciencia, sino que es imprescindible que se discuta el contenido de nuestra ciencia, ciencia para qué y para quién. De lo contrario, esa mayor inversión termina reproduciendo más cantidad de ciencia para el mercado, una ciencia orientada al servicio de ciertas empresas como las farmacéuticas, el agronegocio, la megaminería o algún otro negocio extractivista, pero que no necesariamente responde a una agenda preocupada por los determinantes sociales o ambientales de la salud y de la enfermedad.

Firman este artículo Mercedes García Carrillo, Federico Testoni, Marc-André Gagnon, Cecilia Rikap y Matías Blaustein. 

Fuente: https://rebelion.org/la-docencia-comienza-a-calentar-motores/

Comparte este contenido:

Argentina: Educación convocó a los gremios docentes a paritarias

América del Sur/Argentina/10-02-2023/Autor(a) y Fuente: www.diariodecuyo.com.ar

El primer encuentro será el 16 de este mes.

Los gremios docentes se sentarán el próximo 16 a comenzar a negociar un nuevo aumento salarial en la previa del inicio del ciclo lectivo 2023.

Los gremios docentes se sentarán el próximo 16 a comenzar a negociar un nuevo aumento salarial en la previa del inicio del ciclo lectivo 2023.

De acuerdo a la información oficial, la ministra realizó el llamado  para el 16 a las 9.50 en la sala del ministerio de Educación. Los secretarios generales de UDAP, Luis Lucero; de UDA, Lucio Vázquez y de AMET, Daniel Quiroga, serán parte del encuentro.

Será el primer encuentro de los representantes del sector, y como siempre los primeros gremios en sentarse a negociar.

El año pasado, después de una serie de manifestaciones y paros convocados por los autoconvocados, el gobierno Provincial terminó cerrando un  aumento del 100%, en varios tramos,  que abarcó a todos los empleados del estado.

Fuente e Imagen: https://www.diariodecuyo.com.ar/sanjuan/Educacion-convoco-a-los-gremios-docentes-a-paritarias-20230203-0005.html

Comparte este contenido:

Argentina: El asesinato de Fernando y una mirada desde la ESI

Por: Liliana Maltz/eldiarioar.com

El crimen de Fernando Báez Sosa y el juicio a los rugbiers, ocupa desde hace un tiempo, un lugar preponderante en la tapa de diarios y revistas, en los medios, en las redes. Ocupa nuestros pensamientos y nuestros sentires. Ocupa un espacio central en la charla entre personas amigas o en la mesa familiar. Y bienvenida esta ocupación, si no se transforma solo en pre-ocupación, sino también en un motor para pensar y revisar en qué mundo estamos. En qué mundo queremos vivir y cómo nos queremos vincular. Y, especialmente, si nos impulsa a actuar para modificar aquello que nos duele y molesta. Motor para encender hoy, pero especialmente cuando esta noticia deje de estar en primera plana.

Para encarar esta revisión, contamos con una herramienta muy potente: la Educación Sexual Integral, que por Ley Nacional 26150 del 2006 es obligatoria en todas las escuelas del país, en todos sus niveles y modalidades, tanto laicas como religiosas, públicas como privadas

Voy a enfocarme en sus aportes, reconociendo que es una mirada posible entre otras, desde donde analizar esta tragedia.

En tanto ley, es un derecho y una obligación. Pero también es una ética y una política de cuidados y especialmente, podemos pensarla como oportunidad.

Oportunidad para promover comunidades que alojen la diversidad en sus múltiples sentidos. La diversidad sexo-genérica, pero también cultural, de lenguas, de espacios de pertenencia y procedencia. Nos invita a celebrar que ese otro, esa otra esté ahí, pensando distinto para armar un buen lugar. Nos invita a desarmar y cuestionar las relaciones de poder por género, clase, raza o etnia, entre otras variables posibles. Relaciones de poder que tiñeron la escena del crimen a Fernando. Todavía resuena y nos duele ese “negro de mierda, me lo voy a llevar de trofeo.”

La diversidad es constitutiva de la vida en común y no característica de un grupo o de una persona. Las diferencias nos enriquecen y en un contexto epocal que promueve la exclusión del diferente y el individualismo exacerbado, en una sociedad que nos inunda con el discurso del odio, trabajar por el respeto y el cuidado colectivo, deviene una tarea urgente y central. 

Para lograrlo, no alcanza con enunciar “está mal” frente a un insulto o discriminación, necesitamos entender al servicio de qué o de quiénes está la búsqueda de un chivo expiatorio, al que solo se puede segregar y odiar. Necesitamos tener claves de lectura para comprender este fenómeno histórico que nos llevó a considerar, por ejemplo, que la blanca es una raza superior. Necesitamos, primero visibilizar cómo esta idea todavía impregna los vínculos, para poder barajar y dar de nuevo.

“La ESI abraza y valora las identidades históricamente vulneradas y discriminadas y al mismo tiempo ofrece la posibilidad de reflexionar y abrir preguntas tales como:  ¿qué nos distingue y qué nos iguala? ¿Cómo equilibrar la supervaloración de algunas identidades con la subvaloración social de otras? ”Encontrar las respuestas a estas preguntas no es algo sencillo, pero las articulamos con algunos principios como el respeto, el diálogo y la inclusión. De este modo, estaremos más cerca de encontrar un camino común, habitado por un gran nos-otrxs“. De: Identidades. Colección Derechos Humanos, Género y ESI en la escuela. M. de Educación Argentina (2021)

Por otro lado, es una oportunidad para interpelar lo que hasta ayer considerábamos como naturaleza, como algo inmodificable, para entenderlo como construcción y visibilizar las relaciones de poder ocultas. Ideas que fuimos mamando en esta cultura patriarcal, como por ejemplo, en todo lo referido al género.

La filósofa francesa Simone de Beauvoir, allá por el 1949 escribía “No se nace mujer, se llega a serlo” para explicar que lo que entendemos por mujer es una construcción social que fue variando a lo largo de la historia y que lo que nos hace mujeres no son las características biológicas, sino nuestras conductas, roles, atributos, expectativas que vamos aprendiendo en determinado contexto, en determinada cultura y época.

Pues bien, esto vale también para los varones. No se nace varón. Es decir: no se nace fuerte, valiente, agresivo, ni con el sello de ser el proveedor, procreador, y protector del “género débil.” Ni se nace con el deseo de adueñarse del cuerpo de alguien más débil ni con la necesidad de gratificarse ostentando frente a otros pares el uso y abuso de poder. No se nace con el deseo de patearle la cabeza a otro hasta matarlo: estas conductas se construyen. Nuevamente, el patriarcado hace lo suyo y con esto no minimizo ni saco responsabilidad a los asesinos ni al peso de la educación recibida en un marco familiar, educativo y deportivo. Y aclaro, además (no se ofendan los varones) que estoy realizando una generalización que puede resultar injusta a los efectos de simplificar y explicar estos conceptos.

Entonces, con la perspectiva de género como lente, podemos interpelar esta masculinidad hegemónica para promover y construir otros modelos, otras formas de ser varón, o mujer o ser por fuera de cualquier binomio.

Finalmente, el asesinato de Fernando está teñido de una crueldad que nos espanta. Fernando devenido en cosa, totalmente deshumanizado. ¿Y qué entendemos por crueldad?

La antropóloga Rita Segato nos recuerda que “La pedagogía de la crueldad es un conjunto de actos y prácticas que enseñan, habitúan y programan a los sujetos a transformar lo vivo en cosas”. ¿Y cómo se transforman en cosas? “Si retiro la ternura”. “El mundo de los dueños que habitamos necesita de personalidades no empáticas, de sujetos incapaces de ponerse en el lugar del otro”… (para)…“Matar sin que sea muerte, muerte humana” Y queremos, necesitamos, que la muerte de Fernando se humanice.

Por eso, deviene hoy como tarea central promover la ternura, la empatía, el cuidado y respeto por quienes nos rodean ya que, en la voz de Segato, “solo un mundo vincular y comunitario pone límites a la cosificación de la vida”. 

Nuestro desafío de cada día será trabajar para que en cada espacio la vida y la muerte sean vidas y muertes humanas. Para promover otros vínculos más solidarios, otras comunidades que alojen las diversidades en todos los sentidos y en las que circule el cuidado colectivo. Es cierto, es ir contra el discurso dominante, pero es por ahí y es con a ESI.

https://www.eldiarioar.com/opinion/asesinato-fernando-mirada-esi_129_9933572.html

Comparte este contenido:
Page 29 of 657
1 27 28 29 30 31 657
OtrasVocesenEducacion.org