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Declaración conjunta de Uruguay y la Unión Europea acerca del Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela

América del Sur/ Uruguay/ 04.02.2019/ Fuente: www.presidencia.gub.uy.

«La República Oriental del Uruguay y la Unión Europea serán anfitriones el jueves 7 de febrero de la reunión inaugural del Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela. La reunión, que tendrá lugar en Montevideo, se realizará a nivel ministerial», indica la declaración conjunta emitida este domingo 3 de febrero.

Declaración conjunta de la Alta Representante / Vicepresidenta Federica Mogherini y el Presidente de la República Oriental del Uruguay, Tabaré Vázquez, sobre la reunión inaugural del Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela en Montevideo el 7 de febrero de 2019.

La República Oriental del Uruguay y la Unión Europea serán anfitriones el jueves 7 de febrero de la reunión inaugural del Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela. La reunión, que tendrá lugar en Montevideo, se realizará a nivel ministerial.

El 31 de enero, la Unión Europea decidió proceder, junto con algunos países de América Latina, con la creación de un Grupo de contacto internacional [(CIG) – Términos de referencia sobre Venezuela. El IGC tiene como objetivo contribuir a crear las condiciones para que surja un proceso político y pacífico, que permita a los venezolanos determinar su propio futuro, mediante la celebración de elecciones libres, transparentes y creíbles, en línea con la Constitución del país.

El Grupo de contacto reunirá a la Unión Europea y ocho de sus Estados miembros (Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, España, Suecia y el Reino Unido) y países de América Latina (Bolivia, Costa Rica, Ecuador, México y Uruguay).

Fuente de la noticia: https://www.presidencia.gub.uy/comunicacion/comunicacionnoticias/comunicado-conjunto-union-europea-uruguay

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Los países tienen mejor desempeño económico cuando invierten en la nutrición infantil

Por: Verushka Quispitongo.

En las últimas décadas se ha ido generando mayor evidencia sólida sobre el impacto de la inversión en la primera infancia en el desarrollo del capital humano. La salud y la nutrición son aspectos claves en esta etapa. El caso de Perú es considerado un ejemplo a nivel global al reducir la desnutrición crónica infantil en 50% durante una década.

Arlene Mitchell, directora ejecutiva de la Fundación Mundial de Nutrición Infantil, explicó a Perú21, cuál es el impacto del programa nacional de alimentación escolar en la nutrición infantil y el desarrollo del Perú.

¿Qué desarrolla el programa mundial de alimentos?
-El programa tiene como misión reducir el hambre a nivel mundial, sobre todo cuidar de la población que está más vulnerable. Desde los años 60, se ha estado laborando con el objetivo de ayudar a los niños a alimentarse mejor y reducir el hambre entre ellos. Es así que se ha trabajado con los gobiernos sobre cómo gestionar mejor estos programas.

¿Qué opina del programa de alimentación escolar en el Perú? 
-Es muy importante porque ayuda a que los niños no solo vayan a la escuela sino que también tengan la oportunidad de aprender y cuando tenemos un programa que está bien diseñado y manejado, no solo mejora la salud del niño sino que también se desarrolla a nivel de la sociedad local, en áreas como la agricultura, también se incrementan el nivel de empleabilidad, se fortalece otros sectores como la provisión de servicios es decir que todo un ecosistema es mejorado solamente con un pequeño programa.

¿Cómo se podría mejorar el programa de alimentación escolar? 
-Hay varias cosas que se pueden hacer para mejorar el programa. Por ejemplo, mejorar el tipo de conocimiento que se impacta a través del programa de Qali Warma y lo que se dicta en las escuelas, los chicos tiene que saber cómo los alimentos tienen una influencia en el proceso de aprendizaje y cuál es la relación que existe entre los alimentos y el desarrollo cognitivo. Otro punto interesante que debería ser considerado es ofrecer frutas y verduras frescas locales, no solo porque es bueno para la dieta sino también porque podemos ayudar al desarrollo de los agricultores, los cocineros y proveedores. Otra forma son los alimentos fortificados, sabemos que es un paso más que se debería incluir en el proceso y requiere un poco más de planificación pero la inversión no es tan alta como para no hacerlo.

¿Cuál es la relación entre alimentación y educación? 
-Este tipo de programas van a incentivar a los niños a ir a la escuela no solo para aprender sino para recibir alimentos. Cuando tienes un niño que no está bien alimentado vas a tener un estudiante que esta soñoliento, con mal comportamiento, y solamente con cambiar el alimento vas a experimentar cambios en el alumno. El niño incrementará la calidad de la atención, tendrá mejores notas en el colegio y un aumentará de su desempeño.

¿El programa debe enfocarse en los niños de etapa inicial, primaria o secundaria?  
-Existe un programa de los 1000 días que es muy importante para el desarrollo de los niños pero también es importante lo que sigue después para tener una buena comprensión. Hacer que los niños tengan una salud y una educación es muy importante porque a su vez, ellos se convertirán en padres y harán que sus hijos tengan una buena educación, una buena salud. Se debe atender ambos extremos, no solamente al niño que empieza el colegio o aquel adolescente que termina el colegio sino todo el proceso, y atender sobre todo a las niñas, si una niña adolescente está bien educada y alimentada será capaz de ser una madre que eduque y alimente debidamente a sus hijos, como lo dijo el Doctor Donald Bundy lo importante son no los 1000 días sino los 8000 días.

¿La nutrición se puede considerar un factor clave para el progreso de los países? 
-Absolutamente sí. Los países tienen un mejor desempeño económico y mejores indicadores porque han invertido en la nutrición de los niños, y cada vez más vemos que las personas entienden mejor el vínculo estrecho que existe entre el desarrollo del capital humano y un país estable económicamente. Países con ingresos medios como el Perú han estado aprendiendo las lecciones de otros países de ingresos altos e ingresos bajos y a partir de ello han sido capaces de hacer una mejor inversión en la nutrición.

«LA OBESIDAD ES MÁS DIFÍCIL DE TRABAJAR QUE LA ANEMIA»

La obesidad infantil en el Perú cada vez está en aumento. ¿Qué políticas se pueden aplicar ante ello?
-Creo que el Perú ya tiene políticas buenas implementadas. Por ejemplo, tener a las niñas adolescentes dentro del programa, la fortificación de alimentos, vincular a los agricultores al programa, esas son cosas que ya se ha hablado pero si hay algo que se necesitaría implementar es un mejor liderazgo en el alto nivel, uno que sea más robusto porque estos programas de alimentación escolar requieren de una participación multisectorial, en ese sentido tenemos que tener ministerios muy bien coordinados, trabajando de la mano con las municipalidades. El Perú tiene muy buenas políticas pero implementarlo es lo más importante.

Existe una creciente problemática por el aumento de la obesidad y anemia. ¿Cómo es que sucede esto? ¿Qué se puede hacer ante ello? 
-Creo que la obesidad es algo más difícil de trabajar que la anemia. Para esta última, se tiene diferentes soluciones, como los alimentos fortificados, una alimentación adecuada o  pastillas de hierro. Mientras que, la obesidad es mucho más compleja porque tenemos diferentes componentes como el  comportamiento y la cultura. La obesidad es muy difícil de enfrentar porque requiere un enfoque gradual prevenir es mucho más fácil que revertir la situación. La educación sobre alimentos y ejercicios en ese sentido es clave por eso es importante que no solamente las familias participen sino también la escuela, y la sociedad en general. Por ejemplo, el efecto que tiene la publicidad en la alimentación de las personas también afecta el desempeño. Por eso debemos hacer un gran esfuerzo con respecto al marketing de los alimentos.

La entrevista se realizó durante el foro internacional «Evidencias y Tendencias para Fortalecer las Políticas en Nutrición y Alimentación Escolar» organizado por el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) y el Programa Mundial de Alimentos (WFP, por sus siglas en inglés) en donde especialistas de todo el mundo discutieron acerca de la nutrición infantil.

Fuente de la reseña: https://peru21.pe/peru/paises-mejor-desempeno-economico-invierten-nutricion-infantil-456784

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¿Hacia donde se mueve la clase obrera?

Por: Luis Bonilla-Molina.

Ensayos sobre las izquierdas desde América Latina y el Caribe

  1. El portentoso trabajo de Marx

Cuando vemos con más de 150 años de distancia la obra de Carlos Marx (1818-1883) reconocemos el trabajo de un portento de las ciencias sociales, quien realizó uno de los más importantes esfuerzos por conocer y comunicar la dominación, la explotación del hombre por el hombre, la constitución del capitalismo y la conformación de las clases sociales en el nuevo periodo histórico en el que le correspondió vivir. Marx es un gigante de su tiempo cuya producción intelectual continúa contribuyendo al estudio de la lucha de clases.

Marx insistió siempre en la necesidad de vincular todo pensamiento a las relaciones de producción existentes en una sociedad, en un tiempo histórico. La mayor potencia de su trabajo está en la construcción de un método, un camino para comprender la dialéctica relación entre opresores y oprimidos. Acercarnos a la producción teórica de Marx como textos cerrados e inamovibles sería un insulto a su trabajo. Es urgente una aproximación al pensamiento de Marx como trabajo vivo, en permanente actualización.

Un aspecto central del trabajo de Marx es su definición de clase obrera y el rol protagónico de ésta en la transformación estructural de la sociedad capitalista de la primera y segunda revolución industrial. Marx trabajó y redimensionó el trabajo de Hegel (1770-1831) heredando de este su esperanza en el mañana. Marx valoró la voluntad para el cambio e insistió hasta la saciedad en la necesidad de vincular la voluntad con la conciencia y el pensamiento crítico.

Precisamente desde el pensamiento crítico es necesario y urgente, volver a estudiar no solo la estructura de clases existente en el capitalismo del siglo XXI, sino la fisonomía y características que ha adquirido la clase obrera en la actualidad, en el marco de la tercera revolución industrial y los prolegómenos del cuarto giro tecnológico en el modo de producción capitalista. Este no puede ser un esfuerzo ocioso, ni meramente académico, sino profundamente asociado al proyecto histórico de construcción de otro mundo posible.

  1. El concepto de clase. Clase en sí, Clase para sí

El primer dilema es ¿a cuál clase obrera se refería Marx?, si a la fabril e industrial o a todos los trabajadores que convierten su fuerza de trabajo en mercancía. Desde de mi punto de vista, Marx se refería a la clase obrera fabril, industrial, cuando hablaba del sujeto histórico de la revolución proletaria. La condición de asalariado o de trabajador (tipo individual, de servicios, empleados públicos, ocasionales) en el mejor de los casos logra hacer posible, desde el enfoque marxista, una toma de conciencia sobre su condición en sí, pero difícilmente lograrían tomar conciencia de “clase” para sí. El proceso de toma de conciencia para sí, no es un acto que se pueda simplificar con el estar juntos, sino todo un proceso de aprendizaje reflexivo que se genera alrededor de la organización en el mundo del trabajo en la fábrica, la industria. Los empleados de Microsoft, en las oficinas del Banco Mundial, la cadena de comida rápida o los supermercados, un Ministerio e incluso de la universidad, que realizan juntos su labor y se encuentran en el sitio de trabajo, no por ello adquieren una conciencia en sí de clase obrera que vende como mercancía su fuerza de trabajo. Marx elaboró su concepto de trabajo asalariado no solo en la producción, sino también en la distribución y venta de mercancías, pero considero que su noción de clase obrera como sujeto revolucionario central, era mucho más restringida al proceso productivo. El agruparse como masa, no es sinónimo de toma de conciencia. Respecto a la clase obrera Marx señalaba: “esta masa es ya una clase respecto al capital, pero aún no es una clase para sí”[i] debido a que “los diferentes individuos sólo forman una clase en cuanto se ven obligados a sostener una lucha común contra otra clase”[ii], “en la lucha […] esta masa se une, se constituye como clase para sí”[iii]. (p.34, )

Los procesos de conformación y constitución de las clases sociales son aplicables no solo a la clase obrera. Las incomprensiones al respecto llevaron por ejemplo en Venezuela, a generar reiterados y fallidos intentos por conformar a gran escala el campesinado como clase social, disminuida como había ocurrió en el último siglo producto del rentismo petrolero. Para ello se pensó que, con incentivos crediticios, dotación de tierras y conformación de asociaciones cooperativas sería suficiente para construir desde afuera a una renovada clase campesina. Ello se hizo obviando factores culturales de carácter histórico inherentes a un Estado que había anidado a la burguesía alrededor de la importancia de mercancías producidas ya y listas para el consumo. En esta realidad la mayoría de los ciudadanos a quienes se le pretendía inducir a convertirse en campesinos, valoraban mucho más las facilidades que giraban alrededor del consumo de lo importado que de lo sembrado. La relación de los hombres y mujeres que trabajan la tierra y se constituyen en campesinado demanda unas condiciones de trabajo material sustantivamente distintas a las citadinas. El campesinado que persiste y garantiza su aporte en volúmenes de comida al resto de la población, tiene un conjunto de comportamientos y prácticas asociadas a su relación productiva con la tierra, propios de una clase que no se adquirieron de la noche a la mañana. Estos campesinos cuando han ido tomando conciencia de clase, se han movilizado contra los agro tóxicos o contra la industrialización del agro que los haría desaparecer.

Algo parecido ocurrió con intentos por conformar una clase obrera para sí, de manera simplificada o fast track. Las empresas autogestionadas que fueron puestas en marcha y funcionaron fueron aquellas que venían de relación pre existente entre capital y trabajo que les había permitido a sus integrantes ser una clase en sí. Fue a partir de la toma de conciencia de su condición de clase para sí, en intentos por romper con la dominación contra la especulación y explotación del capital cuando se plantearon tomar el control de la producción. Es cuando inician enlazamientos con cadenas productivas y de circulación de mercancías que le permitieran apropiarse de todo el circuito de producción. Y entonces entendieron la necesidad de redistribuir socialmente el plusvalor de estas mercancías. No bastaba con dar la fábrica para que fuera conducida por hombres y mujeres trabajadoras que no se habían constituido aún como clase en sí. Esto viene a ser significativo para comprender dialécticamente los avances y retrocesos en la conformación de la cultura proletaria. La propia organización autogestionaria de los trabajadores en el marco de una sociedad capitalista les permitió entender a los trabajadores la relación entre Estado y supremacía de la ideología burguesa y saber que la contradicción también escala y hay que prepararse para ello.

Marx insistía que una clase social no está determinada mecánicamente por su lugar en la estructura social. Una clase social no es el resultado de una reingeniería social realizada desde un centro de poder por simple deseo, al mejor estilo de las ciencias sociales positivistas, sino la consecuencia de cómo se estructura el modo de producción dominante y las tensiones entre capital y trabajo. Las clases sociales desarrollan una cultura, un performance, unos rituales e imaginarios que demandan una temporalidad, es decir, no se hacen de la noche a la mañana. Esa incomprensión ontológica sobre el ser colectivo obrero, llevó incluso a organizaciones revolucionarias a considerar que si un profesional militante hacía unas “pasantías” en la fábrica se proletarizaba y se convertía en militante obrero mientras estuviera laborando junto a la clase. Esto generaría serias limitaciones epistemológicas para entender luego las transformaciones del sujeto revolucionario en el marco de la tercera revolución industrial.

En el tiempo de Marx era precario el desarrollo tecnológico, en comparación con la aceleración que ha adquirido la innovación en este campo en los últimos setenta años. La escala de innovaciones tecnológicas de la primera y segunda revolución industrial construyeron un imaginario de futuro en el cual era previsible la multiplicación de fábricas por doquier para poder cubrir las necesidades fundamentales y el consumo alienado que generaba el capitalismo. Este crecimiento exponencial de las fábricas e industrias situaría a la clase obrera en todos los lugares y territorios haciendo posible la revolución proletaria y la sociedad comunista. Pero ello no ocurrió así.

  1. La clase obrera

Al lograr constituirse el capitalismo avanzado a escala planetaria, el mundo se estructuró en a) lugares orientados a la extracción de materias primas; b) centros de transformación de las materias primas en insumos; c) sitios y cordones fabriles donde se producían las mercancías; d) un universo en expansión de servicios alrededor de la producción y el consumo. La clase obrera se convirtió en la fuerza de trabajo que producía las mercancías, generándose plusvalía y la espiral de expansión capitalista.

Como lo pensó Marx la clase obrera por un largo periodo, construiría una cultura propia que posibilitaba su toma de conciencia para auto convertirse en sujeto revolucionario. El partido revolucionario como lo haría la I y II Internacional y un periodo significativo de la III antes de su burocratización y liquidación cumpliría el papel de síntesis histórica para garantizar la transición revolucionaria entre períodos de repliegue de la lucha proletaria a situaciones revolucionarias. En muchos casos la “vanguardia” sería incapaz de acompañar el emerger de la propia revolución, pero ello no desmerita la importancia de su rol transicional. La cuarta internacional fundada por León Trotsky (1879-1940), solo dos años antes de su asesinato, aunque representa hoy el acumulado histórico de las luchas proletarias del siglo XX, no ha podido cumplir su rol de Internacional con influencia de masas.

La organización de las rutinas de la fábrica y la industria iban generó el agenciamiento del nuevo estrato, desterritorializando a los hombres y mujeres de la fábrica respecto a sus orígenes y creando un nuevo territorio donde se ejercía el trabajo. El trabajo material concreto requería la conformación de una máquina ideológica abstracta. Pero ese proceso construía como lo señaló Marx, una dinámica rizomática en el cual se constituía la clase obrera en sí. Cada cierto tiempo se quebraban los dispositivos de control cuando la clase adquiría conciencia para sí y, se daba inicio a formas diversas de acción revolucionaria.

¿Cuales eran estas rutinas que cohesionaban a la clase hasta hacerla tomar conciencia de sí? Cronos, el tiempo como organizador del espacio, del lugar. Para que el sistema funcionara había un tiempo para todo, para llegar a la fábrica, para saludarse y reconocerse desde la última presencia. Quien escapaba al rigor del tiempo ponía en peligro la eficacia, el cumplimiento de la tarea, la seguridad y hasta el salario del otro, de los otros. La precisión en la rutina, el adecuado manejo del fragmento que a cada uno le correspondía fusionaba al individuo con lo colectivo. El uso racional de los grados de libertad que cada uno conservaba como espejismo de libertad, los cuales se asumían sin que ello afectara a los demás. La anticipación del error posible, del fallo catastrófico que afectara el universo de cada uno. La normalización de los intervalos de trabajo, descanso, alimentación, higiene, diálogo, para disipar los privilegios entre iguales. La capacidad de actuar en dinámicas estandarizadas como un mecanismo sincronizado, que a su vez convertía a toda la clase en una maquinaria abstracta que trabajaba lo concreto. En ese sentido, el barrio obrero se convertía en una extensión de la fábrica con tiempos y rutinas cada vez más homologadas. Los problemas comunes abrían el espacio para compartir las soluciones. Los lazos de familia extendida se concretaban entre compañeros de trabajo. La vuelta a la fábrica cada día se convertía más en un nosotros que en un yo. Lo nuevo en la fábrica, en la industria demandaba la inteligencia colectiva, el aprender juntos para evitar que alguien quedara fuera del nuevo territorio. La hora de la comida, el encuentro en los baños, las conversas breves entre intervalos, se convertían en espacios para compartir angustias, para hablar de los problemas individuales que de alguna manera se asumían comunes. La opresión del trabajo alienante comienza a ser concienciado y expresado; la plusvalía se convierte en un detonador de aspiraciones para mejorar las precarias condiciones de vida. Resulta evidente que mientras los unos (ellos y ellas) trabajan, los otros viven del excedente de venta de las mercancías. Esto último posibilitó, la toma de conciencia sobre el poder de la acción colectiva. El sindicato surge como expresión organizativa, en el campo defensivo, pero también ofensivo. El estallido rizomático de la rebeldía, la huelga, el conflicto por mejores condiciones de vida a partir del trabajo que se realiza, permite lograr victorias que habrían resultado esquivas por otra vía; es el momento del inicio del movimiento de los engranajes de la conciencia en si en la conciencia para sí. El conflicto permite descubrir, producto de la solidaridad que generó, que hay quienes están inconformes con la situación en la que se trabaja y vive: otros trabajadores, estudiantes, profesoras, mujeres, sexo diversos, indígenas, afrodescendientes. El partido, los partidos revolucionarios se visibilizan y se tornan de carne y hueso cuando se encuentra que uno de los suyos es parte de esa organización. El acumulado, la experiencia históricaconfigura una cultura proletaria de importancia histórica singular. El proceso se repite una y otra vez, pero no termina de producirse la situación subjetiva revolucionaria que empalme con las condiciones objetivas para el cambio estructural; pero el pensamiento marxista seguía apostando y trabajando para ese momento de la revuelta proletaria. Para el marxismo la constitución de la clase como el sujeto revolucionario no deriva de un deseo, de ser un pueblo elegido, sino de las condiciones histórico materiales que crean las condiciones de posibilidad para que ello ocurra.

Una dosis de evolucionismo histórico se apoderó de una parte importante del pensamiento marxista. Esta dinámica se vigorizó con el triunfo de la revolución bolchevique y el ciclo de revoluciones en los países atrasados. Marx no previó, ni tenía por qué hacerlo, el surgimiento del estalinismo y con ello el inicio de procesos de restauración capitalista que durarían décadas en eclosionar, aunque aún sus variantes China, Coreana y Vietnamita mutan sin diluirse. El estalinismo quebró la noción lineal y la visión de la historia como un proceso de evolución irreversible; mostró que había “retrocesos” y evidenció a infalibilidad de lo cualitativo como superación de lo cuantitativo. Muchos marxistas consideran que la precaria comprensión de la relación entre medios de producción y tecnología aceleró la caída del socialismo real.

Katz, C (1997) a partir de los estudios de Aronowitz (1988) considera que las interpretaciones de Bernstein (1850-1932), Kaustky (1854-1938), Hilferding (1877-1941), Plejanov (1856-1918), Bauer (s/f) son mecanicistas respecto a papel dinamizador de lo tecnológico en el avance ininterrumpido del progreso. Considero que el marxismo de esa época era en gran medida determinista e histórico evolucionista por lo que era natural las derivaciones mecanicistas de algunas formulaciones. Sin embargo, ello no nos puede llevar a desestimar el trabajo de conjunto de estos revolucionarios. En el caso de Plejanov, es necesario retomar sus elaboraciones respecto a la concepción marxista de las fuerzas productivas como tecnología, porque las nuevas generaciones de marxistas lo han desestimado y ello resulta fundamental para entender la situación de la clase obrera en el siglo XXI.

La visión economicista que se hace respecto al trabajo de Marx desestima la importancia que este le otorgó en su pensamiento a la cultura, mucho más allá del campo de lo ideológico. Pero Marx fue un hombre de su tiempo histórico por lo tanto hay desarrollos tecno culturales que no conoció y por ende no incorporó en sus reflexiones. Marx fue un hombre del mundo de la prensa. El periódico y el libro impreso constituían el imaginario de última generación tecnológica en el campo de la reproducción cultural. Sus trabajos sobre la prensa obrera subrayaban la importancia de este medio para la difusión de las ideas y las experiencias proletarias. Marx no presenció el impacto en la cognición humana y de la clase obrera de la comunicación de masas centrada en lo visual-auditivo, la radio. Marx no conoció ni presenció el impacto ideológico de una innovación como la televisión que reproducía la ideología dominante las veinticuatro horas del día, mucho menos la revolución digital, la web y la virtualidad. Pero fundamentalmente como científico social no tenía posibilidades concretas de prever el impacto de estas innovaciones en el mundo del trabajo, en los medios de producción y la organización social. Lamentablemente buena parte de las nuevas generaciones de marxistas posteriores a su muerte, tuvieron una aproximación dogmática y cuasi teológica a su pensamiento, concentrada en la comprobación de sus hipótesisde trabajo más que en su actualización permanente.

  1. La noción de proletariado

Los orígenes italianos y reproducidos en el Derecho Romano del concepto de proletariado, para referirse a aquellos individuos que no poseen más propiedad que su fuerza de trabajo, es un término que ha generado discusiones e interpretaciones diversas en el campo del marxismo. Pareciera que en Marx la noción de proletariado es más totalizante y referida a todos los explotados por el capital en el mundo laboral quienes toman conciencia de su situación y deciden movilizarse en colectivo para cambiar la situación de injusticia y explotación.

La clase obrera industrial y fabril estaría en el corazón del proletariado y sería su motor para abrirle paso a la revolución socialista, al comunismo. De allí la frase del Manifiesto Comunista (1848) ¡¡Proletarios de todos los países uníos!! En este sentido, la condición proletaria se convierte en un referente estratégico en la labor del partido revolucionario, de la vanguardia, de los comunistas.

  1. El concepto abarcante de trabajador

El desarrollo científico y tecnológico comienza a vivir una aceleración históricamente inusual en el siglo XX, con redobladas expresiones en el periodo post guerras mundiales. Aunque es justo decirlo, la aceleración no disminuyó en los periodos de confrontación bélica, sino que su uso en la producción y el surgimiento de la cultura de masas fue limitado. La aceleración de la innovación científico tecnológica fue impactando de manera precisa al modo de producción y a la estructuración del trabajo fabril e industrial. La incorporación de las innovaciones científicos tecnológicas en la producción fabril e industrial aumentó la capacidad productiva de las mismas, eso sí, requiriendo menos mano de obra y quebrando la idea inicial de fábricas por doquier.

La nueva realidad del mundo productivo comienza la tendencia a acoplar al y la trabajadora mucho más a las tecnologías que al trabajo del otro y la otra. Este es un proceso gradual y casi imperceptible que genera nuevas resistencias fundamentadas en la memoria histórico-cultural acumulada por la clase obrera. Pero la rueda comienza a girar en la estructura del modo de producción y ello comienza a expresarse en el conjunto de la sociedad.

La organización del creciente número y formas de mercancías hace necesaria la creación del ciudadano consumidor para poder concretar el ciclo de apropiación del plusvalor. Mientras la clase obrera ve estancado y muchas veces disminuido su tamaño porcentual en la población, se multiplica la creación de nuevos empleos y puestos de trabajo en áreas de los servicios, la administración y el desarrollo de mercancías inmateriales.

El empleo y el trabajo que se expande contiene unas condiciones histórico materiales que promueven mucho más la competencia que la solidaridad, a pesar de ser parte estos trabajadores de quienes no tienen otra propiedad para vender que su fuerza de trabajo. La expansión de la cobertura educativa por parte de los sistemas escolares conforma un nuevo trabajador titulado que solo puede vender lo que sabe hacer para obtener capacidad de compra de alimentos, vivienda, transporte y ser el soporte económico de los más chicos.

El estancamiento y disminución numérica de la clase obrera respecto al universo del mundo del trabajo es nuevamente problematizado por el campo marxista. Pero además la clase obrera inicia un periodo de baja presencia política, en contraste con un creciente protagonismo de los estudiantes trabajadores, los maestros, enfermeras, médicos, pilotos, etc.

Esto se resuelve teóricamente de diversas maneras en el campo marxista. Mientras la mayoría de marxistas continúan desestimando el impacto de la innovación científico-tecnológica en la conformación de la clase obrera como clase en si y para sí, Daniel Bensaid (1946-2010), lo resuelve asumiendo el concepto de trabajador como abarcante a todas las formas de explotación y venta de la fuerza de trabajo como mercancía a los capitalistas y, Guy Standing (1948-   ) intenta explorar y actualizar el horizonte del marxismo hablando de precariado. Más recientemente ese debate se ha planteado en términos de posibilidad de disolución de la clase obrera o negación de este enunciado ante el avance de la robótica en el modo de producción capitalista, para lo cual marxistas como Harvey (1935-   ) han expresado su oposición a esta posibilidad.

En la década de los sesenta del siglo XX se inicia la tercera revolución industrial, con ciclos internos que se identifican a nivel de público con determinados productos, pero que tienen múltiples expresiones en el modo de producción. Hasta ahora las generaciones de la tercera revolución industrial se conocen a nivel del público como a) era de la super computadora; b) computadora en casa; c) computadora portátil; d) video juegos, internet, la web y el mundo digital en casa; e) redes sociales y capitalismo cognitivo y; e) realidad virtual, inteligencia artificial, nanotecnología y conexión 4G. Estas innovaciones están reconfigurando el mundo del trabajo como lo analizaremos en otro artículo con datos cruzados.

Lo cierto es que la mutación y multiplicación de las formas y expresiones de venta de la fuerza de trabajo como mercancía al capital, ha generado una expansión sin precedentes de la mentalidad, de la cultura de la clase media. El problema es que el marxismo ha construido una narrativa pequeño burguesa de la clase media que limita la comprensión de su desarrollo en el siglo XXI. Sobre ello volveremos de manera exclusiva en otro artículo.

Buena parte de la evidencia empírica muestra una intención de hegemonía de la lógica del consumo y bienestar de la clase media entre los trabajadores, no de condición proletaria. Los trabajadores comienzan a ver el estilo de vida de la clase media, el performance cultural de ésta como su ideal, muy alejado de las previsiones de un mundo altamente planificado y en asamblea permanente de reorganización social. El ocio creativo y la diversión ideológicamente pragmática se han instalado en los imaginarios de buena parte de la clase trabajadora (…. Continuará)

En los próximos artículos de esta serie trabajaremos: problemas y situaciones novedosas presentes en la fábrica de la tercera revolución industrial. La pérdida de protagonismo social de la clase obrera. Mutaciones en las narrativas de las izquierdas. La odiada clase media y el capitalismo cognitivo del siglo XXI. Los chalecos amarillos ¿un nuevo despertar de la clase para sí? ¿Qué es esa vaina de la Cuarta revolución industrial en el mundo del trabajo? Y que pasa si se cumplen los pronósticos sobre la curta revolución industrial. ¿Desaparece la idea socialista? Volver al método de Marx. ¿Es suficiente con rescatar el idealismo Hegeliano?

Lista de referencias

Barronco, Oriol (2006). ¿Todavía la clase obrera y la condición proletaria? En Revista Viento Sur, Nª 86, pag. 42-49

Claudio Katz: Discusiones Marxistas sobre tecnología, Teoría, en Razón y Revolución nro. 3, invierno de 1997, reedición electrónica. Disponible en http://www.razonyrevolucion.org/textos/revryr/prodetrab/ryr3Katztecnolo.pdf

Deleuze, Gilles y Guattari, Felix (1997). Mil Mesetas: capitalismo y Esquizofrenia. Ediciones Pre-Textos. Valencia. España.

Marx, Karl Miseria de la Filosofía, Buenos Aires, Siglo XXI, 1975, p. 158.

Marx, Karl El Capital, Libro 1, Cap. IV.

Fuente del artículo: https://luisbonillamolina.wordpress.com/2019/02/03/hacia-donde-se-mueve-la-clase-obrera/

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Bullying: estos son los números del «matoneo» escolar en Colombia

América del Sur/ Colombia/ 04.02.2019/ Fuente: www.colombia.com.

De acuerdo con la ONU, 3 de cada 10 estudiantes en el mundo sufren de bullying en sus colegios.

Hoy en día, hay una problemática que acoge cada vez más la atención de expertos y medios de comunicación, debido a la importancia e impacto infantil que tiene: el bullying. De acuerdo con las Pruebas Saber del Ministerio de Educación Nacional, en 2014, el 37% de niños de 5° de primaria dijeron ser víctimas de bullying o intimidación escolar alguna vez, en Colombia.

Así lo informó José Fernando Mejía, director del programa Aulas en Paz en Colombia, en una rueda de prensa organizada por la marca de morrales, ropa y accesorios, Totto, misma que ha creado la campaña “#NoMasBullying”. En esta, Mejía añadió que en el último curso de primaria, son 20 % los estudiantes que realizan el bullying, mientras que casi el 50 % son observadores de este tipo de matoneo infantil.

Ahora bien, estos índices van disminuyendo en los cursos superiores. Por ejemplo, en grado 9°, el 26 % de los estudiantes son víctimas de bullying, 11 % menos, en relación con los alumnos de grado quinto. Por su parte, los abusadores se mantienen en el 20 % de la población estudiantil, mientras que el 60 % participan por medio de la observación.

En consecuencia, el experto aseguró que aunque hay una disminución considerable en el número de víctimas en estudiantes adolescentes, los casos que se presentan son mucho más peligrosos que los que se dan entre los niños. “A mayor edad hay menos presencia de bullying en el ámbito físico, pero asciende en el psicológico”, dijo María Marta Durán, asesora académica de la Universidad Estatal a Distancia.

Por otro lado, en cuanto a “razones” que encuentran los menores de edad al momento de hacer bullying, Durán señaló que se destacan aspectos como la apariencia física y la identidad de género, esto según una investigación realizada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 96 países. En este estudio, también se supo que, a escala mundial, 3 de cada 10 estudiantes sufren de matoneo escolar.

¿Qué hacer?

Esta problemática aumenta con el tiempo, debido a que las víctimas no saben cómo salir del matoneo, mientras que los llamados ‘Bully’ (victimarios), sienten un espíritu de superioridad, status que no quieren perder.

Ante esto, los expertos dijeron que la tarea de contrarrestar este tipo de violencia escolar, muchas veces recae en las personas que observan los casos, pero que casi siempre deciden callar. “Los que observan tienen más poder de detener el bullying”, aseguró José Fernando Mejía.

En consecuencia, Carolina Piñeros Ospina, directora Ejecutiva de Red PaPaz invitó a reportar casos de intimidación escolar y ciberacoso que afecten a los menores de 18 años a través de la línea virtual www.teprotejo.org y el App Te Protejo. Según las cifras de 2018, Te Protejo procesó 12.060 reportes, de los cuales el 10% corresponden a situaciones de ciberacoso y 2% de intimidación escolar.

Igualmente, Piñeros recordó que Red PaPaz ofrece recursos de orientación para padres, madres y cuidadores en el Kit PaPaz para la prevención y manejo de la intimidación escolar y ciberacoso disponible en www.redpapaz.org/intimidacion.

Por último, la directora corporativa de marca de Totto, Marcela Pérez, manifestó que en compromiso con esta tarea, se están generando «espacios de conversación para que niños y jóvenes se expresen en contra del maltrato escolar».

Por esto, Pérez recordó que la marca creó «la miniserie web Anti-bullying School, presentada por los youtubers Sofia Castro y Javier Ramírez», con la que se pretende «proporcionar herramientas de expresión para que los niños y niñas puedan decir: No más bullying». 

Fuente de la noticia: https://www.colombia.com/actualidad/nacionales/bullying-estos-son-los-numeros-del-matoneo-escolar-en-colombia-217703
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Brasil: Ministro de Educación de Bolsonaro y Leonardo Boff se atacan en las redes

America del Sur/ Brasil/ 04.02.2019/ Fuente: www.lavanguardia.com.

El ministro de Educación de Brasil, el colombiano Ricardo Vélez, y el exfraile franciscano Leonardo Boff, uno de los principales ideólogos de la Teología de la Liberación, protagonizaron un intercambio de ataques en las redes sociales este jueves en el que mutuamente se desearon vivir lejos.

«Leonardo Boff regrese a Corea del Norte, que es el único lugar en que ese marxismo-leninismo de bar aún es consumido», afirmo Vélez, un académico nacido en Colombia y nacionalizado brasileño que fue nombrado como ministro de Educación por del presidente brasileño, el ultraderechista Jair Bolsonaro, en respuesta a una serie de críticas de Boff a los proyectos del Gobierno.

«Ricardo Vélez su trabajo es desmontar la educación con proyectos absurdos y negando toda nuestra tradición. Debería regresar a Colombia. El señor no es un conservador; es un atrasado. Nuestros alumnos no merecen ese castigo», respondió inmediatamente el exfraile.

Boff, un teólogo y escritor, es un activo interlocutor en las redes sociales, con decenas de publicaciones diarias, en las que se muestra muy crítico con el Gobierno de Bolsonaro e intenso defensor del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, que este jueves completó 300 días preso tras ser condenado por corrupción.

En diferentes publicaciones en los últimos días, Boff ha criticado los proyectos del Ministerio de Educación; citado supuestas censuras en los organismos vinculados a la cartera y denunciado que el organismo fue tomado por fuerzas ultraconservadoras.

El principal blanco del teólogo son las críticas del nuevo Gobierno al modelo de alfabetización de adultos desarrollado en la década de 1960 por el pedagogo brasileño Paulo Freire y que miembros de la administración Bolsonaro consideran un método de adoctrinamiento marxista.

Boff también critica duramente los vínculos de Vélez con el filósofo brasileño Olavo de Monteiro, el principal ideólogo de la ultraderecha en Brasil y que tiene gran influencia en el Gobierno de Bolsonaro.

Fuente de la noticia: https://www.lavanguardia.com/politica/20190131/46133908610/ministro-de-educacion-de-bolsonaro-y-leonardo-boff-se-atacan-en-las-redes.html

 

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César Bona: “Todos los caminos para cambiar la educación pasan por escuchar a los niños y jóvenes”

Por: Leticia Castro. 

Maestro español ganador del Global Teacher Prize.

Desde que en 2015 quedó seleccionado entre los mejores 50 maestros a nivel mundial en el concurso Global Teacher Prize, la popularidad del español César Bona no ha dejado de crecer. Por el momento, dejó su trabajo en el aula –que, asegura, retomará en un tiempo– para dedicarse a escribir libros que reflexionan sobre la profesión docente. También ha viajado por el mundo, lo que le ha permitido conocer distintas prácticas educativas e impulsar el trabajo colectivo con sus colegas. Estuvo en Uruguay para participar en el ciclo 2018 de conferencias de Plan Ceibal, Repensar la educación para un futuro en construcción, y en esa oportunidad conversó con la diaria sobre su vista a estudiantes de magisterio de Montevideo, su visión del rol docente, su paso por las escuelas rurales y los cambios necesarios para impulsar un nuevo tipo de educación.

En sus conferencias, Bona habla de la situación de muchos de los países que ha visitado en el último tiempo, y hay ciertos nudos que se repiten en todos los lugares por los que pasa: “Muchas veces, el problema es la falta de diálogo entre administraciones y docentes, entre familias y docentes, entre docentes y docentes”, señaló. Por su parte, planteó que “también hay una falta de escucha”. “Hay decisiones que se toman, pero para tomarlas bien es clave entender muy bien a los niños, niñas y adolescentes, para eso hay que escucharlos. Todos los caminos para cambiar la educación pasan por escuchar a los niños y jóvenes. Los chicos son los grandes protagonistas, y en muchos casos son los grandes olvidados”, agregó.

Para recuperar ese diálogo perdido Bona propone “parar y reflexionar”. A su entender, todos los educadores deberían pensar cuál es su fin y remarcó que, muchas veces, la diferencia está entre enseñar contenidos y “darles las herramientas para que tengan una vida lo mejor posible”, cuando en realidad ambos deberían ser objetivos de los docentes.

Para él es importante que los maestros comiencen a reflexionar sobre la práctica antes de llegar a las aulas, por eso insiste en trabajar en la formación docente. En su paso por Montevideo visitó a estudiantes de magisterio en los Institutos Normales. Según contó, fue una “muy linda” experiencia, en la que ellas le preguntaron sobre su trayectoria en distintas escuelas españolas y pudieron conversar sobre la ética de los maestros.

Sobre la formación docente, desde su experiencia en España opinó: “Cuando estudiamos para ser maestros hablamos mucho de contenidos. Sin dudas, eso es importante, el rigor es fundamental, pero también notamos la falta de ciertas herramientas, como la psicología social. Necesitamos más herramientas para gestionar nuestras propias emociones y después poder darles esas herramientas a los niños. Es necesario hacer mayor énfasis en el compromiso social y el compromiso con la naturaleza: la escuela no puede ser una burbuja”.

En suma, Bona aseguró que hubiera querido tener alguna formación sobre las emociones para poder transmitirlas a los niños: “Yo no estoy preparado para dar esas herramientas porque a mí nadie me las dio, nadie me enseñó nada sobre las diferencias, sobre la diversidad ni sobre igualdad de género o el cuidado en las redes sociales, por decir algunos temas de los que deberíamos saber más”. No obstante, destacó que en la actualidad “hay miles de docentes que desean formarse, y la formación va encaminada a darnos esas herramientas que tenemos que darles a los niños”.

Si bien ya no está en las aulas españolas, recuerda que cuando trabajaba todos los días con niños intentaba enseñar tanto sobre el programa como acerca de las emociones. “Tenía muy claro que el centro no es el currículum, y si no terminaba una parte del programa porque me parecía más interesante cultivar las relaciones humanas entre niños y niñas, no me causaba ningún desasosiego, ninguna presión. No podemos intentar que aprendan matemática si ellos no se llevan bien, por ejemplo, ahí algo está fallando”, sentenció.

¿Cómo se evalúa el amor?

Si bien la evaluación en las escuelas es uno de los puntos que más se critican, se mantiene desde hace décadas. Para el maestro español, el problema está en confundir los significados de los verbos: “Pareciera que evaluar pasó a ser examinar, y ahí se pierde calidad educativa”, definió. A su vez, opinó que en la actualidad, con la examinación se desmotiva al estudiante a seguir su curiosidad, cuando en realidad eso es algo innato en todos los seres humanos. El educador considera que todo está conectado y cuestionó que el foco esté puesto en el currículum y de esta forma se le saque tiempo a lo que importa, que es “impulsar la esencia de los niños”. “Así es que la educación se convirtió en lo que es ahora: niños sentados durante horas volcando lo aprendido en el papel, cuando en realidad podría ser algo mucho más bonito, porque por naturaleza el ser humano es curioso y quiere aprender”.

Más allá de los contenidos, que son importantes, Bona invita a los docentes a trabajar la relación del ser humano con otros y con él mismo. “Nuestras relaciones son con los demás, necesitamos trabajar sobre eso, pero [ello] no está en la escuela porque no se puede calificar. ¿Cómo se evalúa la empatía? ¿Cómo se evalúa el amor?, si no tienen un número, ¿significa que no existen? Hay cosas que no llevan evaluación y que tenemos que educar en las escuelas, porque al final todo parece que tienda a un número, pero la educación sirve para mejorar como personas, no para llegar a un número”, reflexionó.

Sobre los currículums, remarcó que “si alguien los toca, debería ser para achicarlos”. El maestro es de la idea de que “no se puede pretender meter un montón de información en las cabezas de niños y niñas cuando es incluso más conveniente dar ciertas herramientas para que busquen y contrasten información; eso es lo fundamental. Como todo evoluciona, se debe también pensar hacia dónde va la educación y qué herramientas son necesarias en el día a día”. Para que el currículo cambie es necesario “preguntar a los principales implicados: niñas, niños, adolescentes, familias y docentes”, destacó.

Por otra parte, comentó que las administraciones de los sistemas educativos pueden trabajar en varios aspectos. Por un lado, en “sacar a la luz las buenas experiencias que ya están haciendo docentes que siguen siendo anónimos”. En esa línea, también dijo que sería tarea de las autoridades tender puentes y crear redes para que los docentes que estén llevando a cabo estas buenas prácticas puedan conectarse para que conozcan, se interesen, compartan y aprendan de otras experiencias.

Según Bona, otro punto que sería interesante debatir con las autoridades es la repetición. “Dos materias hacen que un joven se quede un año en la misma aula mientras todos sus compañeros pasan a la siguiente. Habría que replantearse muy seriamente si esa es la mejor solución, teniendo en cuenta que somos seres sociales y la relación con los demás es muy importante. A su vez, si el niño repite, nosotros como maestros no hagamos lo mismo que hicimos el año anterior. Si un niño repite significa que nosotros como docentes debemos hacer las cosas distintas”, consideró. De todas formas, aclaró que este tema no debería ser el centro de la preocupación de las autoridades: “La repetición, la escuela de tiempo completo, los deberes, son todos debates que tienen los adultos entre sí, cuando el tema principal deberían ser las relaciones humanas y cómo podemos estimularlas”.

Otra educación

Parte de su trayectoria como docente consistió en pasar por escuelas rurales de España. En sus charlas repite que hay varias características de esos centros educativos que deberían replicarse en todas las instituciones. Por ejemplo, marcó que en las escuelas rurales se le presta mucha atención al contexto en el que viven los alumnos y se le saca mucho provecho al multigrado: “En esos momentos se nota lo buena que es la flexibilidad para que niños mayores puedan estar con niños pequeños; eso se hace en algunos centros y sería interesante que se extendiera”, puntualizó.

La flexibilidad es también un tema recurrente en sus charlas, sobre todo en las relacionadas a la idea de inclusividad. Bona es un militante de la educación para todos y apuesta a la integración de los niños en el aula: “El primer paso para entender la sociedad es comprender la diversidad desde que somos niños. Las adaptaciones son un paso, pero no se trata ya de cambiar estructuras, sino también de cambiar cómo se miran los niños entre ellos”.

Otro de los temas que motivan a Bona es la ecología. A su entender, todas las escuelas deberían trabajar con insistencia el tema de la sostenibilidad y el cuidado con el medioambiente; sin embargo, no cree que debería ser algo transversal a todos los contenidos, sino que alienta a trabajarlo como un tema en sí mismo: “Es que cuando decimos que es transversal damos por hecho que está. Creo que debería ser algo fundamental entender que cada acción que llevamos a cabo repercute en algo”.

Los incomprendidos

César Bona dedicó su último libro, La emoción de aprender, a los incomprendidos, en referencia a aquellos que tienen muchas ganas, ilusión y pasión por lo que hacen, a pesar de las circunstancias, pero necesitan “un empujoncito” para animarse. También está dedicado a aquellos que superaron prejuicios de los demás y a quienes lograron superar los propios. Para Bona, hay que animarse a superar “la matriz tradicional” en la educación: “Queremos educar como nosotros fuimos educados, ahí está el problema”, señala.
Fuente de la entrevista: https://educacion.ladiaria.com.uy/articulo/2019/1/cesar-bona-todos-los-caminos-para-cambiar-la-educacion-pasan-por-escuchar-a-los-ninos-y-jovenes/
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Paraguay: Política y corrupción son culpables de la pésima educación, afirma ministro

Paraguay / 3 de febrero de 2019 / Autor: Redacción / Fuente: ABC

La corrupción es uno de los principales culpables de que Paraguay tenga los peores niveles de educación, afirmó el ministro Eduardo Petta, quien aseguró además que la política es otro factor que influyó bastante.

“Si hoy hablamos de educación en el nivel que estamos, que nos pone en los últimos lugares en matemática, ciencias y lectura, obedece a muchos factores. Sin embargo, uno de los culpables más importantes que tiene hoy la educación es la corrupción”, señaló el ministro de Educación y Ciencias, Eduardo Petta.

Añadió que corromperse en el área educativa es muy fácil. “El docente que tiene que estar 4 horas como mínimo en clase sin embargo está dos horas y media o tres, el MEC que le deja a los alumnos sin docentes, hay alumnos que nos reclamaban que querían docentes y hace cuatro años no tienen matemáticas, y uno se pregunta ¿dónde está el profesor de matemática? y resulta que algún político logró asignarle su rubro a otra persona y llevó de ese colegio a otro lugar. Esos son actos de corrupción”, dijo.

Agregó que actos de corrupción es cuando se invierten los recursos del Fonacide y se están recuperando gastos de campaña detrás de una construcción, o es el almuerzo escolar que hoy se está tirando en un alto porcentaje en algunos colegios, hasta el 60% y se da de comer a los animales cuando en las zonas vulnerables hay escuelas en donde falta el almuerzo.

“Corrupción es estar pidiendo dinero que no corresponde, extorsionando y exigiendo plata a muchos padres para inscribir a sus hijos cuando la educación paraguaya es gratuita”, acotó.

“Acto de corrupción es cuando los supervisores, que son mis compañeros de trabajo no cumplen con sus funciones, de estar asistiendo a las direcciones en los distintos colegios. Es cuando aquella directora departamental que viendo las irregularidades consiente, porque también son conductas omisivas el que yo no intervenga y allí también ya soy cómplice de un acto de corrupción”, resaltó.

Corrupción es cuando una alta autoridad del ministerio dice irse al interior del país a cumplir una función, cobrar viáticos y no viaja. Es también el político que tiene rubro de docente y no está cumpliendo sus funciones en aula y han surgido varios sumarios en el MEC y está incomodando profundamente.

El ministro instó a los alumnos de todas las instituciones educativas del país a denunciar los hechos irregulares. “Sepan que desde el MEC le vamos a acompañar, no se va a tolerar actos de corrupción”, concluyó.

Fuente de la Noticia:

http://www.abc.com.py/edicion-impresa/locales/politica-y-corrupcion-son-culpables-de-la-pesima-educacion-afirma-ministro-1781554.html

ove/mahv

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