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¿Qué es el juego libre y para qué sirve?

Por: Silvia Martínez

 Cuando el niño juega libremente sin unas normas o pautas es cuando podemos hablar de juego libre en casa, en el colegio u otro lugar. En este tipo de actividad el niño es quién decide qué, cómo y cuándo utilizar un determinado elemento, obteniendo una experiencia más enriquecedora.

El juego libre y espontáneo deben practicarlo los niños/as para beneficios en su propio desarrollo. A través del juego son capaces de expresar sus propios sentimientos. A través de esta actividad experimentan, crean o incluso imitan el compartamiento de los adultos más cercanos.

El juego es una potente herramienta para que los niños entiendan el mundo que les rodea. De este modo el juego libre se convierte en la base del desarrollo en todos los sentidos del menor. Este tipo de juego se puede hacer tanto en casa como en el colegio o otro entorno seguro. Pero si quieres practicarlo en casa puede que te plantees el ¿cómo crear un entorno para fomentar el juego libre en casa?

¿Cómo desarrollar el juego libre en casa?

juego libre en casa
Fuente: farmamir

Al igual que aprender a dibujar de forma educativalos adultos hemos de mantenernos en un segundo plano de tal manera que no dirijamos la actividad en sí misma. El adulto está para hacer que las condiciones del entorno sean las mejores, para procurar los elementos necesarios para el juego y materiales propios de la actividad.

No temas si tu casa es pequeña pues aún así es posible crear muchas zonas, acorde a la edad del menor, en las que el pequeño puede desarrollar todo su potencial y jugar libremente.

¿Cuáles son las mejores zonas para jugar en casa?

juego libre en casa
Fuente: o-krohe

Evidentemente en casa habrá algunas habitaciones más seguras que otras, de todas manera podemos acondicionarlas para los juegos. Pero realmente se puede jugar en todas aquellas en las que no corran ningún peligro; evitando dejar al alcance cosas que puedan cortar o herir de algún modo.

Podemos establecer una o varias zonas de juego quefavorecen la comprensión e integración propia del niño consigo mismo y con su entorno. Si utilizas esta técnica comprobarás que el niño que juega libremente, a medida que cece, van utilizando diferentes recursos y aplicando otras maneras, descubriendo.

La bibliote-casa

juego libre en casa
Fuente: polskieradio

Leer es divertido y es importante introducir al niño/a en el fabuloso mundo de la lectura. Recuerda que apartir de los 5 años de edad podemos decorar una zona con algunos cojines cómodos, una alfombra y estupendos cuentos o buena literatura infantil para que disfrueen aún más de la lectura.

Las zonas para los niños de menos de 5 años puede ser en nuestro regazo o bien entre cojines, busca una zona segura. Los niños menores de esta edad suelen coger los cuentos y libros infantiles como juguetes. No saben leer pero puedes dejarlos disfrutar solos descubriendo los dibujos, las páginas o las letras que en un futuro podrá leer. También puede ser una buena idea leerlos tu misma/o hasta que sepan leer.

Juego libre en casa: ¡construcciones!

juego libre en casa
Fuente: pyatochkin

No podían faltar los juegos de construcciones en este artículo, pues éstas se aprenden de manera innata en el ser humano. Casi todos los niños han jugado a esto alguna vez creando grandes edificios y edificaciones, de acuerdo a su edad. Deja que tus hijos a limenten su creatividad y fantasía.

Esta actividad entretiene mucho a los niños así que basta con proporcionarles todo lo que ellos necesitan. También es una gran idea darles materiales como hojas, ramas, piedras y diferentes texturas para ver qué tipo de edificación pueden hacer.

Jugar a las casitas ¡todo un clásico!

juego libre en casa
Fuente: youtube

¿Quién no ha jugado a las casitas alguna vez? Este clásico juego ayuda al niño a combinar la vida de fantasía y ficticia, con la real. De esta manera pueden proyectar sus vivencias reales, pues la imitan con gran facilidad. A través de este juego pueden crear una estructura interior que dará poco a poco sentido a sus vivencas; así pueden comprender el mejor el mundo que les rodea y su entorno.

Evidentemente para jugar a las casitas puede que necesiten muñecos, vestidos, pequeños muebles, utensilios de cocina, herramientas de juguete, cestas, una tabla de planchar, un teléfono de juguete, cunas, etc,.

Jugar a las tiendas… en casa

juego libre en casa
Fuente: youtube

El juego libre en casa es una estupenda actividad que puede comenzar en cualquier momento. A medida que el niño crece van aumentando las formas de utilizar los materiales y éstos van incrementando en número y diversidad.

El juego de las tiendas en casa con un pequeño mostrador, la caja registradora, productos alimenticios de juguete, cestas, monedas falsas y todo lo que comprende a este juego, será maravilloso. Los niños recrearán lo que ven en su entorno añadiendo mucha imaginación.

Juego libre en casa: los disfraces

juego libre en casa
Fuente: miloserdie

A través del teatro y los disfraces pueden aflorar el interior más abstracto del niño/a. La dramatización, las sensaciones, imaginación, fantasía, libertad creativa y magia ayudarán mucho a la autoestima del menor y se lo pasará en grande.

El adulto intentará que no le falte de nada es decir telas y objetos para disfrazarse. También puedes poner dos sábanas haciendo de telón y una tarima. La idea no es quedarse mirando al niño todo el rato, sino que esté de fondo jugando libremente; con un ojo siempre encima.

Los teatrillos también son muy divertidos incluso puedes dejarles materiales para que ellos hagan sus propios muñecos con sus diferentes personalidades y que luego jueguen con ellos.

Un karaoke en casa

juego libre en casa
Fuente: cleartrip

El karaoke gusta a grandes y a apequeños, por lo que es una actividad perfecta para hacerla en familia. Es un entretenimiento para todo el mundo que ayuda muchísimo a ampliar el vocabulario del menos y también a mejorar la ortografía (siempre que el texto esté bien escrito).

Los niós estarán alegres con un micrófono en la mano y escuchando su propia voz, deja que prueben. Con el karaokelos niños aprenden a desarrollar la imaginación, la creatividad, a leer mejor, a mejorar su concentración y estimular su memoria; además de mejorar sus habilidades musicales.

¿Qué te parece este artículo sobre el juego libre en casa?¿Dejas a tus hijos jugar de esta manera o siempre le impones normas y estás encima de ellos?

Fuente: https://educacion2.com/juego-libre-en-casa/
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Dos extremos en modelos educativos

Por: Fander Falconí

Detroit, Michigan, Estados Unidos, era una vez una ciudad próspera, sede de la que fuera la industria automotriz más grande del mundo. Hoy, en esta urbe en decadencia, si usted visita el colegio secundario fiscal Central High School, quedará impresionado, al ver ventanas rotas y paredes despintadas. El 74% de estudiantes vive bajo el nivel de pobreza y sus calificaciones están entre las peores de Estados Unidos (informa Global Citizen). Claro que quienes tienen bastante dinero pueden enviar a su hijo al Salisbury School en Connecticut, por $ 49.000 al año (según Business Insider). Mientras casi ningún egresado del plantel de Detroit continuará su educación superior, la mayoría de bachilleres de Salisbury irán a Harvard o a una de las 10 universidades de élite de Estados Unidos, es decir, de Ivy League. Si no quiere gastar tanto y de paso desea mandar al hijo a Europa, tiene una nueva opción. En Londres acaban de abrir un colegio para ricos y es mixto. Eaton Square apenas cobra el equivalente de $ 29.000 y las paredes de sus aulas están recubiertas de seda, en vez del ordinario papel tapiz. Su hijo será compañero de los hijos de los banqueros, muchos de los cuales habitan el exclusivo barrio de Chelsea, sede del homónimo equipo de fútbol (dice un artículo de The Guardian). Las dos universidades más antiguas de Inglaterra (Cambridge y Oxford) abrirán las puertas a estos afortunados chicos. Frente a este tipo de formación que fomenta y perpetúa la desigualdad, aparece el modelo finlandés de educación. En Finlandia es ilegal cobrar pensiones. Además de ser gratuita, la educación básica incluye atención médica, almuerzo, libros, materiales, excursiones, y salidas recreativas y educativas. Si es necesario, se cubre también alojamiento para quienes viven en lugares alejados.   Como los ricos en Finlandia saben que sus hijos irán a un colegio fiscal, porque no hay otros, se aseguran de que la educación pública sea de calidad. Las clases son pequeñas (máximo de 20 estudiantes). Es obligatorio estudiar dos idiomas extranjeros, ciencia, arte, música, cocina y manualidades. Los edificios son tan limpios que los estudiantes dejan sus zapatos afuera. Cada estudiante puede tomar actividades extracurriculares fuera de la escuela, en centros subsidiados por el Estado (música, ballet, artes plásticas, etc.). Se estimula la lectura por placer y Finlandia es el país que más libros infantiles publica en el mundo. La televisión transmite programas extranjeros solo con subtítulos. Al prohibir el doblaje, los niños se ven obligados a leer en finlandés hasta cuando ven televisión. La victoria de Trump en Estados Unidos y la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, a más de de los factores económicos y sociales, fueron motivadas por el odio a los extranjeros. En los dos países angloparlantes, los trabajadores han visto el empeoramiento de los servicios públicos, incluida la educación. En Finlandia se vive casi una utopía; por si acaso, resucitó la marca Nokia. ¿Cuál modelo educativo quisiera usted para su país? (O)

Fuente noticia: http://www.eltelegrafo.com.ec/noticias/columnistas/1/dos-extremos-en-modelos-educativos

Fuente imagen: http://www.elcorreo.com/noticias/201505/03/media/cortadas/aula-finlandia–575×323.JP

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¿Tareas en verano? Sí. No. Depende

Por: Mariano Fernández Enguita 

Ya no habrá verano en el que no salte el debate sobre las tareas escolares en vacaciones, una vez que lo ha hecho para los deberes en general. ¿Debe haberlos? Tengo tres respuestas.

Sí. Sabemos con certidumbre, hace decenios, que el desfase entre alumnos de distinto logro se amplía en verano, en detrimento de los de origen social más humilde. Si la escuela propicia alguna igualación, el verano deshace lo conseguido. No hay secreto: la riqueza y el nivel culturales, directa o indirectamente académicos, de la vida cotidiana y las vacaciones varían según entre familias. No es igual un verano en Torrevieja que en Viena, viendo Tele5 que leyendo…

No obstante, en un mundo ideal los docentes, especialistas en aprendizaje y educación, deberían tener mucho que decir sobre cómo orientar las actividades de verano, y los padres harían bien en escucharles.

Niños y adolescentes pasan ya demasiados días y años en la escuela No. Llega con que la escuela ocupe todo el curso a los alumnos. Los metemos en las aulas diez años por obligación, la práctica totalidad al menos quince y una amplia mayoría más. Parafraseando a Mae West sobre el matrimonio, la escuela es una institución estupenda… si te gusta estar institucionalizado, o sea, internado. Niños y adolescentes pasan ya demasiados días y años en la escuela para que esta colonice además su tiempo libre y el de sus familias.

Por lo demás, choca que el profesorado, después de tanto empeño en pasar de la jornada partida a la intensiva y reducir el calendario escolar (cuarenta días en la democracia) y entre batallas sobre terminar o empezar el curso un día antes o después, justifique los deberes veraniegos. Si los alumnos necesitan más tiempo… ¿por qué no en la escuela? .

Depende. ¿De qué? Del proyecto educativo que tenga el centro y la atención personalizada que precise el alumno y el centro sepa darle. No es lo mismo recomendar unas lecturas literarias, una actividad deportiva o un curso de idiomas que complementan o consolidan lo realizado y pueden ser vividas por el alumno como un reto creativo, que endosar tareas repetitivas que debieron ser suficientes (y quizá no fueran las adecuadas) en el curso. Y depende, guste o no, de lo ya por cada alumno, que puede requerir a algunos lo que no a otros; pero, para que esto resulte verosímil y útil, hará falta una capacidad de personalizar la educación y la orientación que no es la habitual.

He de terminar diciendo que, la mayoría de las veces, los deberes veraniegos son el resultado de dos supuestos nada inamovibles: que todos deben alcanzar los mismos objetivos en el mismo año y que, quien no lo haga, deberá repetir curso. La mayor parte de lo que se impone como tareas estivales debería ser mera diversificación a lo largo del curso ordinario.

Fuente noticia: http://www.20minutos.es/opiniones/mariano-fernandez-enguita-tareas-verano-si-no-depende-3099369/

Fuente imagen: http://cdn.20m.es/img2/recortes/2017/01/24/410680-620-282.jpg?v=20170124165202

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La reforma a las Normales: el circo educativo

26 de julio de 2017 / Fuente: http://www.educacionfutura.org

Por: Abelardo Carro Nava

Nuevamente en días pasados, fuimos testigos del show mediático que el Secretario de Educación, Aurelio Nuño, construyó para llamar los reflectores de propios y extraños. Es obvio, la nominación rumbo al 2018, cual entrega de los “Óscares” se aproxima, y el “presidente” habrá de ungir a su candidato y, como parece obvio, a su sustituto. En fin, como decía, la parafernalia se construyó y en esta ocasión habló del mejoramiento y fortalecimiento de las escuelas normales del país, como si el título de un supuesto programa y los reflectores de las cámaras, fueran suficientes para atender a las instituciones que por más de 60 años – más no 30 como afirmó el Subsecretario de Educación Superior – estuvieron en el olvido.

Muy a su estilo, tan flamante paladín de la educación en mi México querido, acompañado de su fiel escudero, Díaz de la Torre, dio a conocer la estrategia que habrá de posicionar a la normales, en el lugar que siempre debieron haber ocupado: piedra angular del Sistema Educativo Mexicano (SEM). El Reglamento de Ingreso, Promoción y Permanencia (RIPPA); la transformación pedagógica en línea con el “nuevo” modelo educativo; la educación Indígena e Intercultural; el aprendizaje del Inglés; el fomento a la Investigación Aplicada y Prácticas Pedagógicas Innovadoras; los intercambios Académicos en México y en el extranjero; y los apoyos a la excelencia académica; fueron los puntos a través de los cuales, según Nuño, se “mejorarían” las condiciones de vida de las normales y, por supuesto, la enseñanza y el aprendizaje en estos centros escolares.

Estos planteamientos, como decía, fueron expuestos, sólo que en medio de todo este asunto, algo se le olvidó mencionar a quien despacha con soberbia desde la Calle de República de Argentina en la Ciudad de México: su estrategia no es estrategia y, mucho menos, es innovadora. Me explico.

Si usted revisa o solicita a las instancias de transparencia y acceso a la información pública, algunos de los acuerdos que emanaron de las reuniones del Consejo Nacional de Autoridades Educativas (CONAEDU), específicamente, los que se derivaron de la 5ª reunión celebrada en 2009; podrá observar que en ese entonces, las autoridades presentes, acordaron trabajar el famoso “RIPPA” para mejorar los procesos de ingreso, promoción y permanencia en las normales. A la Mtra. Marcela Santillán, ex directora de la Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación (DGESPE), le correspondió coordinar esa ardua tarea; sin embargo, y como es de suponerse, la líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), y sus respectivos Secretarios Generales en cada una de las entidades, se opusieron rotundamente a tal propuesta. ¿Qué cree usted que pasó? Sí, adivinó, nada pasó y la revisión al reglamento se vino abajo y, con seguridad, así seguirá. ¿Por qué afirmo esto? Porque éste ha sido uno de los puntos  más sensibles y delicados que puede abordarse en el medio normalista, dados los intereses y los conflictos que se desprenderían por la injerencia de varios “actores educativos” en el medio pero, además, porque en vísperas de la carrera presidencial hacia el 2018, dudo mucho que se haga llegar esa propuesta ante las instancias correspondientes para su aprobación. Ante tal situación, ¿quién en su sano juicio político querría entrarle al toro por los cuernos? Así de simple, así de complejo.

Por lo que concierne a algunos de los otros rubros que fueron mencionados, tengo mis serias dudas al respecto. Por ejemplo, se habló de alinear el trabajo que realizan las normales con lo que acontece en la educación básica pero, a fuerza de ser sincero, tal actividad, la realizan las escuelas normales, sus profesores y alumnos desde hace mucho tiempo. ¿Acaso nadie le dijo a tan flamante Secretario que los estudiantes normalistas realizan sus jornadas de observación y práctica docente en los preescolares, primarias y secundarias que son parte de esa educación básica que refiero? Caramba, hace falta que alguien le asesore y le asesore bien, porque independientemente de la curricula – bastante desfasada – plasmada en el Plan de Estudios para la educación normal que se ofrece en México, los normalistas, realizan esa vinculación para favorecer el proceso de enseñanza y de aprendizaje.

Por lo que se refiere al idioma inglés y la movilidad académica – tanto a nivel nacional y en el extranjero – que se propone, habría revisar cómo es que los estudiantes han realizado estancias en otras escuelas normales del país o bien, cómo es que han salido a otros países con el propósito de analizar la práctica docente en otros contextos. En este sentido es menester decir, que muchos de estos jóvenes, sobre todo los que han visitado Estados Unidos o Francia, han logrado certificarse en el idioma (la certificación es un requisito indispensable que debe cubrir el alumno normalista) para que puedan acceder a esa beca de movilidad que ofrece la Coordinación Nacional de Becas. ¿Quién eroga el recurso para esa certificación? Habría que preguntarle, a muchos padres de familia sobre ello. Ciertamente dicha coordinación ofrece un recurso para que los estudiantes solventen sus gastos en el extranjero, pero en las normales, aún se adolece de un efectivo programa de “certificación” para el logro de tal propósito.

En cuanto a los apoyos a la excelencia académica y los programas de investigación que se propusieron, podría decir mucho; sin embargo, me limitaré en esta ocasión – más por falta de espacio que de ganas –, que actualmente existe un programa denominado Estímulo al Desempeño Docente, pero que en los hechos, no estimula lo que debería estimular, y si beneficia a quien no debería beneficiar, y de eso saben muchos de los allegados al SNTE. Por lo que se refiere a la investigación, ésta comienza a tener forma y fondo, derivado del trabajo que ha impulsado el Mtro. Abraham Sánchez Contreras (de la DGESPE), no obstante que desde hace varios años se venía trabajando este rubro en las escuelas normales.

Sí, no me equivoco en afirmar que en días pasados presenciamos un circo educativo, donde el principal protagonista, cual maestro de ceremonias con sorbete, látigo y levita, presentó lo que desde su perspectiva, podría mejorar la educación normal en mi México querido. Cosa más lamentable fue ésta, porque si en verdad se pretende mejorar la educación que se brinda en esos centros escolares, lo primero que debió haber hecho, es sacar de en medio al SNTE y la corrupción que éste representa.

De lo demás, si no me equivoco, se trata de impulsar cada una de las acciones – y otras que requieren su atención –, a través de inyectarle mayores recursos económicos, una efectiva profesionalización del magisterio normalista pero, sobre todo, de revalorar la función sustantiva que éstas realizan.

Fuente artículo: http://www.educacionfutura.org/la-reforma-a-las-normales-el-circo-educativo/

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Un cambio de Chip para el concepto de evaluación

26 de julio de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Iliana Carriazo Julio

Es necesario analizar el propósito de la evaluación para poder replantearla de una forma constructiva, que vaya más allá de lo cuantitativo

En pleno Siglo XXI existe una gran confusión como es el caso del concepto de la evaluación, que vale la pena traer a colación debido a que repercute en la transformación que queremos en la educación. Cuando pensamos en evaluación, inmediatamente surge la parte cuantitativa, llega a la mente calificación y de hecho este aspecto si está relacionado, pero, es trascendental que se tenga una claridad como docentes de qué y para qué evaluamos a nuestros alumnos.

Según (Morales, P), “este tipo de confusión (evaluar=calificar, aprobado=objetivos conseguidos) puede llevar a conclusiones equivocadas, a las que se puede llegar de manera casi inconsciente, e impedir, dificultar o rescatar eficacia a la reflexión crítica sobre todo el proceso; y con más razón si consideramos que esta reflexión (evaluación) debe ser el punto de partida para la toma de decisiones, cambios, etc.”.

Una vez planteado esta errónea identificación entre lo que es evaluar y calificar, surge una gran expectativa: “todo aquel que ejerza la práctica docente debe tener un cambio de chip con lo que se refiere al concepto de evaluación y sus implicaciones, si quiere detectar dificultades y establecer mecanismos de mejora que ayuden al proceso de calidad asociado a excelentes resultados”.

Se debe acabar la obsesión por la calificación, lo que implica esto, la nota, una medición,  y la práctica pedagógica debe estar proyectada a realizar evaluación con un fin específico, el aprendizaje. Hay un gran reto, y es el de  romper el paradigma de las prácticas evaluativas. El concepto de evaluación no debería estar asociado a control, selección o exclusión (evaluación del aprendizaje), ahora debemos enfocarnos en algo más profundo: evaluamos para el aprendizaje. De acuerdo a (Lopez, V), evaluar para  el aprendizaje, implica que se dé la Evaluación Formativa, que busca:

  1. Evaluar para que el alumno mejore y aprenda más
  2. Que el docente aprenda y mejore en el proceso formativo
  3. Mejorar y orientar los procesos de aprendizaje 

(Tapias, J), lo resume de una forma muy concreta “si queremos mejorar la forma en la que evaluamos lo que nuestros alumnos saben y no saben en un momento dado, es necesario revisar que es lo que supone todo el proceso de evaluación, esto es, qué decisiones implica, qué factores afectan a esas decisiones y que efectos e implicaciones tiene evaluar de un modo u otro”.

El concepto de evaluación no debería estar asociado a control, selección o exclusión (evaluación del aprendizaje), ahora debemos enfocarnos en algo más profundo: evaluamos para el aprendizaje.

Ese cambio de chip que se requiere, debe conseguir que en la planeación del proceso pedagógico, el alumno se involucre de una forma democrática donde exista un intercambio de información, participación, diálogo y respeto.  Cuando el estudiante se implica en el proceso de evaluación, se desarrolla el aprendizaje de una forma crítica, se hace un proceso transversal al incluir en el proceso formativo los valores de responsabilidad y una educación democrática y se da una coherencia muy necesaria hoy en día, entre las convicciones educativas y los proyectos curriculares.

De todo este planteamiento, surge entonces una pregunta ¿Qué hay que hacer para lograrlo?  Una propuesta que me parece interesante y a mi juicio no está desenfocada con la innovación en la evaluación, la propone (Touron, J), esta consiste en:

  1. Redefinir el aprendizaje: lo importante no es saber las cosas, sino saber gestionar la información que hoy en día se tiene y que está a la mano de todo el mundo. A partir de aprender a seleccionar la información que realmente es importante, es que se deben plantear situaciones, problemas y nuevos modelos que permitan ser resueltos con la ayuda de la información que se tiene. Si se plantea de esta forma se puede decir que esto es una forma de evaluar.
  2. Redefinir la enseñanza: se replantea el hecho de que lo significativo no es lo que se enseña, sino como lo enseña. El docente ya no es el protagonista del proceso de la enseñanza, ese protagonismo debe transferirse al estudiante, quien debe hacer que la información fluya y luego la transforme en conocimiento. Lo verdaderamente sustancial es fomentar hábitos intelectuales.
  3. Redefinir roles: es necesario que el docente cambie su rol de expositor y pase a ser un orientador y/o asesor.  El estudiante pase a ser de espectador a protagonista del proceso.

Se puede concluir que la innovación en la evaluación es una consecuencia del planteamiento que se le dé al proceso formativo, que debe buscar el desarrollo de competencias, las cuales están asociadas a lo que se quiere hoy, la calidad educativa. La evaluación en el Siglo XXI, se puede resumir en una frase bien significativa:

 “Dime cómo evaluar y te diré como aprenden tus alumnos”

C. Monereo.

Bibliografía

  • Morales, P. La evaluación académica: conceptos y planteamientos básicos. Serie didáctica N°2, Bilbao, Universidad de Desto, 1995.
  • Tapias, J. Evaluación del conocimiento y su adquisición. Volumen II, Universidad Autónoma de Madrid, 1997.
  • Webinar #6: Personalización del aprendizaje, por Javier Tourón. Disponible en: www.youtube.com
  • Webinar #7: Nuevos modelos de evaluación, por Víctor M. López Pastor. Disponible en: www.youtube.com/

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/un-cambio-de-chip-para-el-concepto-de-evaluacion

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El contexto: un principio infaltable en la planeación curricular

26 de julio de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Julián de Zubiría

Como proceso social y cultural que es, la educación tiene que adecuarse al medio y a la cultura, y por ello se diferencia según contextos, épocas y culturas.

Fragmento tomado de: Cómo diseñar un currículo por competencias. Julián de Zubría. Editorial Magisterio – Biblioteca de la Rectoría, 2016: http://www.magisterio.com.co/libro/como-disenar-un-curriculo-por-competencias

Una inteligencia incapaz de encarar el contexto y el complejo global se vuelve ciega, inconsciente e irresponsable. E. Morin

La pregunta “¿A quién enseñamos?” tiene que ver con la caracterización del contexto sociocultural en el que se desenvuelve la sociedad en un momento histórico y un espacio determinado. Y de allí que, cuando se quiere delimitar el diseño curricular, es necesario caracterizar el contexto histórico, cultural, social, institucional y personal de cada uno de los estudiantes bajo nuestra responsabilidad.

Este principio se sustenta en otro más general derivado de los enfoques socio-culturales, y el cual fue formulado con profundidad por Vigostky, Wallon y Merani: somos seres histórica y culturalmente determinados. De allí que cuando delimitemos el currículo se hace necesario precisar en qué contexto lo haremos. Somos seres sociales, históricos y culturales, y por eso necesitamos enraizarnos en el tiempo, el espacio y la cultura.

El contexto es así, la caracterización de las condiciones, las costumbres, los valores y las ideas de una cultura en una época y en un espacio determinado. Tiempo, cultura y espacio se entrecruzan para darle una caracterización determinada a las maneras de pensar, sentir y actuar de un grupo humano y un individuo en particular.

El papel procultural, contracultural e intercultural del currículo

Como proceso social y cultural que es, la educación tiene que adecuarse al medio y a la cultura. Y por ello se diferencia según contextos, épocas y culturas. Así, los propósitos tienen que tener en cuenta las características individuales y sociales de los niños en formación, para que les sean útiles a ellos y a las sociedades en las que están siendo formados, y según las condiciones y necesidades de los tiempos y las culturas en que se desenvuelven. Los contenidos tienen que consultar la época, el espacio y la cultura, para que sean pertinentes individual, social e históricamente. Tienen que aportarle a su desarrollo y a su consolidación. Y por ello, el currículo tiene que tener un papel procultural, contracultural e intercultural. En sus términos (Andrade, 2010: 4):

La educación y la escuela constituyen una posibilidad de realizar una reforma del pensamiento y de la cultura, lo que les confiere un carácter contracultural, en el sentido de que es en este campo donde se cobra conciencia de las carencias, falencias e inconsecuencias de la sociedad y la cultura y se intenta superarlas. Así, cuando la cultura parece privilegiar las exclusiones, aparecerá la escuela para contrarrestar esa tendencia y promover la inclusión; cuando la cultura parece privilegiar una sola dimensión del ser humano, aparecerá la escuela para recuperar las dimensiones excluidas o atrofiadas y establecer el equilibrio entre ellas (…)

No obstante, la educación y la escuela también han de reconocer la riqueza de la cultura, los factores que en ella se cultivan para la supervivencia y trascendencia de la especie, los conocimientos, actitudes y prácticas, que hacen de ella el capital humano fundamental. Frente a nuestro patrimonio cultural común y planetario, la educación necesariamente tiene que cumplir un papel procultural e intercultural. De esta manera, su carácter ha de ser, a la vez, reformador, revolucionario, y conservador.

Según este principio, todas las áreas al seleccionar los propósitos y contenidos deben tener en cuenta las condiciones del contexto sociocultural, histórico, ambiental, institucional y personal.

Para tener en cuenta el contexto sociocultural hay que dialogar con la cultura, con sus mitos, sus ritos, sus interpretaciones, sus fantasías, sus representaciones, sus expresiones, sus valores y sus ideologías. Hay que conocerla, interpretarla, cuestionarla, relativizarla y proyectarla. De allí que no siempre el papel de la escuela sea procultural, pero siempre debe ser cultural.

Hay que saber dialogar

Lo contrario sería hablar desde otra cultura sin conocer o sin comprender la naturaleza de las ideas y los valores de la cultura en la que está inmersa la escuela. Es lo que sucede cuando nos sentimos poseedores de una única verdad. Es lo que sucede cuando desconocemos maneras, formas, valores y religiones diversas a las nuestras. Es lo que le sucedió a España cuando casi desaparece las diversas culturas milenarias que habían desarrollado las, religiones, mitos y ciencias diferentes a las desarrolladas en Europa para el siglo XV. Es lo que les sucede a los que creen que hay una sola dirección y un solo sentido en la historia y que por ello se sienten con derecho a pisotear las culturas que se distancien de ese horizonte.

Por ello, Hitler se sintió con el derecho de eliminar una raza diferente a la suya. Por eso, hoy en Francia se prohíbe el uso de la burka en las calles a las mujeres árabes, para enseñarles a los musulmanes que sólo serán recibidas en las calles de París quienes piensen y valoren como lo hacen los católicos y occidentales. Es la lógica del pensamiento único y hegemónico. Es la lógica de la ausencia de libertad y del irrespeto a la diferencia. Por ello es impactante lo poco que conocemos en Occidente de las culturas orientales y lo muy poco que ha sido enseñado de ellas. Sirva de ejemplo cómo alguna de las construcciones más importantes y cómo los rasgos y características esenciales de las culturas que las llevaron a cabo, son totalmente desconocidas para nosotros en occidente. Angkor Wat, por ejemplo, está considerada como la mayor estructura religiosa jamás construida y uno de los tesoros arqueológicos más importantes del mundo. Abarca una extensión de 200 km² y llegó a ser la ciudad más poblada del mundo en la época del Renacimiento. A pesar de ello, en Occidente desconocemos por completo la cultura Jemer y la naturaleza y la simbología que utilizaron para representar el cielo en la Tierra.

Dar cabida a todos

Desde una postura claramente contraria, han aparecido aun en las huestes del cristianismo, éticas cuyo principio esencial ha sido el del respeto a la tolerancia y la diferencia. Es así como el teórico inglés Engelhardt (1995) se ha propuesto construir una ética secular para una sociedad postmoderna y politeísta.

Para Engelhardt (1995), las sociedades actuales son politeístas. Ha muerto Dios, ya que no todos lo aceptan y quienes lo hacen, no lo aceptan de la misma manera. Es por ello que coexisten comunidades que expresan y mantienen diferentes creencias, ideologías y sentimientos. En este contexto, no son viables las ciudades organizadas  a la manera de la polis en Grecia, o como lo fueron las culturas occidentales bajo el predominio que alcanzó el cristianismo durante siglos. Tampoco ahora es viable una moralidad basada en la razón. La modernidad que lo intentó, fracasó. En las sociedades actuales coexisten diversas comunidades, cada una con una determinada visión del bien y del mal.

Éste es el contexto que ha permitido que surjan sociedades pluralistas seculares. Sociedades que no tienen una misma visión del bien ni del mal. Son sociedades politeístas y plurales moral y éticamente. Descartada la razón y aceptado el politeísmo, la ética secular sin contenidos debe permitir la convivencia pacífica entre extraños morales. Pero esta no es una ética cognitivista, ya que la verdad es relativa y por tanto ésta no sería aceptada por todos los individuos de una misma comunidad. Dado que lo bueno es subjetivo a los individuos y los grupos humanos, los criterios morales necesariamente están enmarcados en contextos sociales e históricos. La nueva fuente de autoridad moral es la sociedad.

Contexto y aprendizaje

De diversas maneras, Ausubel reivindica el papel del contexto. De un lado le da una original aplicación didáctica cuando concluye que hay que reiterar las ideas, pero cambiando los contextos. Y de otro, cuando retoma las investigaciones que evidencian el papel activo de la contextualización en el aprendizaje. En una de ellas muestra cómo según Boon y Davies en 1993 encontraron que ofrecer al estudiante información contextual adicional, como, por ejemplo, los datos biográficos de los personajes implicados, ayuda a fortalecer el recuerdo del aprendizaje adquirido. En otra, destaca que Hull en 1920 concluyó que el abordar un mismo concepto en múltiples contextos y con diversas representaciones gráficas era más eficaz para la generalización que un trabajo con una experiencia intensiva y con unas pocas formas de representación utilizadas (Ausubel, 2002: 192 y 272). En sus propios términos (Ausubel, 2002: 21):

La repetición de una idea en múltiples contextos la consolida más en la memoria que múltiples repeticiones de la misma en el mismo contexto.

La necesidad de vincular todo contenido al contexto es captada de manera brillante y creativa por los teóricos de la autopoiesis. Varela (2002: 224) afirma al respecto:

Siempre operamos en la inmediatez de una situación dada. Nuestro mundo vivido está tan a la mano que no tenemos un control deliberado acerca de lo que es y de cómo lo habitamos. Cuando nos sentamos a la mesa a comer con un amigo o un pariente, el complejo know-how que implica el manejo de los utensilios, las posturas corporales y las pausas en la conversación están todas presentes sin que  exista deliberación (…) Terminamos de almorzar, regresamos a la oficina y habitamos una nueva disposición con un modo diferente de hablar, un tono postural diferente y diferentes evaluaciones. Tenemos una disposición a la acción propia de cada situación específica que vivimos.

Implicaciones

Tener en cuenta el contexto a nivel institucional implica que al pensar y caracterizar los propósitos y los contenidos se tengan en cuenta los fines señalados en el PEI de cada una de las instituciones. Implica pensar el currículo desde el contexto de la institucionalidad de la escuela. Implica que no es lo mismo caracterizar un currículo para una institución de una naturaleza, una propuesta pedagógica y un PEI, que la caracterización curricular que pueda hacer otra institución con otra naturaleza jurídica, otra propuesta pedagógica y otro PEI. Implica reconocer la incidencia del PEI en el diseño curricular.

A nivel personal, deberá tenerse en cuenta el nivel de desarrollo actualmente alcanzado a nivel cognitivo, valorativo y comunicativo por los estudiantes de cada uno de los grupos. De allí que toda área deba realizar diagnósticos que les permitan comprender el nivel alcanzado por cada curso en cada una de las dimensiones señaladas (aspecto que relaciona el currículo con la evaluación y particularmente con la evaluación realizada con fines diagnósticos). Enseñar sin tener en cuenta el contexto implicaría desconocer las necesidades de los niños, los medios y los contextos en los que se desarrolla el proceso educativo. Implicaría negar el carácter histórico, cultural y social de la educación. Enseñar lo mismo exactamente a individuos diferentes implicaría desconocer dichas diferencias y la individualidad de cada uno.

Así mismo, enseñar lo mismo en épocas diversas es desconocer las diferencias históricas; y enseñar lo mismo en contextos diversos implica desconocer las diferencias contextuales. Y todo ello en su conjunto implica desconocer nuestra naturaleza cultural, social y contextual, como seres humanos que somos.

Dado lo anterior, sería equivocado que en el trabajo educativo a realizar en una zona geográfca determinada no se incluyeran las características, las necesidades, las identidades, las tensiones, las expectativas y los intereses de los estudiantes de la zona, de su cultura y de sus contextos sociales.

En consecuencia, es necesario caracterizar el desarrollo, las necesidades, los problemas y los intereses de los estudiantes, las instituciones, sus familias y los barrios y las ciudades en los que se desenvuelve su desarrollo. Y todo ello, enmarcado en una época y una cultura determinada. En consecuencia, los docentes de universidades y colegios deben realizar diagnósticos que les permitan comprender el nivel alcanzado por cada curso y cada estudiante en cada una de las dimensiones señaladas (aspecto que relaciona el currículo con la evaluación y particularmente con la evaluación diagnóstica). Sólo teniendo en cuenta estos diagnósticos, podemos decir que incorporamos el contexto personal. En este sentido, tiene toda la razón el enfoque de enseñanza para la comprensión cuando formula una evaluación diagnóstica continua asociada a la retroalimentación constante y a ofrecer a los estudiantes criterios y oportunidades para reflexionar a lo largo de la secuencia de la enseñanza (Blythe et al, 1999: 48).

Referencias

ANDRADE, G. (2010). “Los roles culturales de la escuela”. Ponencia presentada en el Festival Vivamérica, celebrado en Barranquilla en octubre de 2010.

AUSUBEL, D. (2002). Adquisición y retención del conocimiento. Una perspectiva cognitiva. Buenos Aires: Editorial Paidós.

ENGELHARDT, H. T. (1995). Los fundamentos de la ética.  Madrid: Paidós.

VARELA, F. (2002). El fenómeno de la vida. Santiago de Chile: Océano.Varios. El concepto de competencia. Una mirada interdisciplinar. Dos tomos. Bogotá: Ediciones Alejandría.

Fragemento tomado de: Cómo diseñar un currículo por competencias. Julián de Zubría. Editorial Magisterio – Biblioteca de la Rectoría, 2016: http://www.magisterio.com.co/libro/como-disenar-un-curriculo-por-competencias

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/alianza-editorial-magisterio-fundacion-compartir-columnas/el-contexto-un-principio-infaltable-en-la

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Antídotos para el pesimismo

26 de julio de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Martha Lucía de la Cruz

El gran sueño es tan sencillo como complejo: despertar el amor por el campo recuperando sus tradiciones, la cultura y los saberes

En reciente entrevista, el Ministro de Hacienda decía que “el pesimismo es la criptonita de la economía, porque la debilita”. Difícil no estarlo cuando todos los días la mayoría de las noticias son sobre corrupción, violencia, politiquería… males que nos aquejan desde hace décadas y que no se resuelven.

Este sentimiento podría matizarse, sin ingenuidad por supuesto, si los medios registraran otras noticias. Por ejemplo las iniciativas de comunidades que, en contextos complejos y adversos,   están haciendo transformaciones positivas y generando bienestar en lugares recónditos de nuestra geografía colombiana. Ahí está la energía para insistir y ser perseverante y la motivación para seguir hacia delante.

Un grupo de organizaciones tuvimos la fortuna de hacer una visita al corregimiento de Lomitas, en el municipio de la Cumbre, en el Valle del Cauca, donde la comunidad educativa del colegio María Auxiliadora y su rector, Rubén Darío Cárdenas, vienen liderando el proyecto “La Educación como proceso de transformación cultural”[1].

Lo primero que valoramos fue que rector, directivos, docentes y alumnos, hicieron caso omiso del paro, recientemente levantado. El domingo en la noche nos dieron la más cálida de las bienvenidas y compartieron con nosotros hasta bien entrada la noche. Y en los dos días siguientes, nos esperaron en cada una de las sedes para contarnos sus historias, las  dificultades que cotidianamente tienen que enfrentar y también sus sueños.

Es imposible transmitir en este escrito la visión y proyección que tiene esta comunidad sobre el territorio y como la están haciendo realidad desde la educación. Un modelo que se sustenta en 5 apuestas institucionales: familia y comunidad; aguas y bosques; plantas y animales; deporte y recreación y transformación y comercialización.

A partir de éstas, se aprende haciendo, se investiga, se reflexiona, se experimenta, se coopera y se trabaja en equipo. Aquí todos aprendemos, los niños tienen muchos conocimientos, al igual que los padres de familia, comenta uno de los docentes.

Tenemos que saber de donde somos, conocer y valorar lo nuestro y también, proyectarnos al mundo. Queremos recuperar lo autóctono, la tierra, soñar con la posibilidad de ser campesinos y quedarnos aquí, pero con ciencia, con tecnología con innovación.

Pudimos conocer cómo lo hacen a partir del trabajo en las huertas escolares donde aprenden matemáticas, ciencias naturales, español, sociales, biología y experimentan con nutrientes y abonos; la panadería donde procesan harinas especiales y se inventan  panes exquisitos de café, de piña con sábila y  muffins de zapallo; los aceites esenciales de limoncillo, eucalipto o caléndula que hacen en el laboratorio y donde se reinventan los alambiques para ser más eficientes.

Manifiestan, eso si, la preocupación por un Estado ausente y políticas desconectadas de sus necesidades, sin pertinencia y soluciones que no llegan oportunamente. “Se contratan programas de capacitación que no necesitamos y para ejecutar a la carrera, finalizando el año cuando el tiempo hay que dedicarlo a otras actividades”.

Por esto han desarrollado una gran capacidad de gestión e innovación. Esto es diciendo y haciendo, dice el Rector. No podemos sentarnos a esperar que nos lleguen las soluciones. Los reconocimientos y premios que les han dado y los resultados de las pruebas SABER e ISCE son la evidencia de que lo están logrando.

El gran sueño es tan sencillo como complejo: despertar el amor por el campo recuperando sus tradiciones, la cultura y los saberes, pero pensando los desafíos que deben enfrentar en el siglo  XXI, en una ruralidad anclada en el siglo XX.

Así como nosotros fuimos a conocerlos y escucharlos, con oídos grandes, hacemos la invitación a otros. Las comunidades conocen sus territorios y sus desafíos. Ellos han encontrado los cómos, a punta de ensayo y error. Hablan de Incentivar el turismo cultural, la gastronomía,  crear una universidad del campo, ideas concretas y realizables.

Nuestro rol, es ser acompañantes respetuosos y contribuir a fortalecer sus recursos, potenciar sus capacidades y generar las condiciones para que puedan materializar sus sueños y seguir liderando sus procesos de transformación.

[1] Rubén Darío Cárdenas Gran  Rector Premio Compartir 2016

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/antidotos-para-el-pesimismo

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