Page 2517 of 2703
1 2.515 2.516 2.517 2.518 2.519 2.703

Papel de la educación para desterrar el extremismo.

Por Azhar Saeed

Asia/Pakistan/Fuente:http://tribune.com.pk/

La violencia sectaria y el extremismo religioso están aumentando en Pakistán. La noticia está llena de tragedia, como resultado del aumento del extremismo. La educación es el único medio que tiene un impacto positivo directo en la vida. Por eso, nuestro departamento de educación debe tomar medidas razonables para erradicar el extremismo.

Es esencial entender que la violencia y el extremismo no se limitan a ninguna región, ni de ninguna religión. En noticias recientes, EE.UU. candidato a las elecciones presidenciales de Donald Trump quiere prohibir los musulmanes y los mexicanos entren en los EE.UU.. grupos extremistas de Bangladesh han asumido la responsabilidad de matar blogueros seculares, los extranjeros y los nacionales de los homosexuales. Por otro lado, nos encontramos con muchos musulmanes, cristianos, Judios y los hindúes que son religiosamente extrema en sus acciones. militantes del Estado Islámico quieren sharia en la región y organizar matanzas en masa en la consecución de este objetivo. violaciónes de los derechos humanos son numerosos en Arabia Saudí y localmente vemos la persecución de las minorías, incluso cuando somos una República Islámica. Sin embargo, la mayor amenaza que enfrenta Pakistán es matanzas incitadas por extremistas.

Uno de los pasos de nuestro gobierno necesita tomar es para acabar con la ignorancia entre las masas y el sector de la educación debe tomar nota de lo siguiente:

Pakistán tiene más de 20.000 madrasas que ofrecen educación a 3,5 millones de niños y adultos jóvenes. La educación es puramente religiosa y desconectado de la vida práctica. Los graduados son pocas veces secular de mente. Tolerancia con puntos de vista conflictivos es difícil de encontrar en los estudiantes, manteniendo lejos a otras religiones. Los maestros no están altamente cualificados y no puede proporcionar el conocimiento del mundo. Su plan de estudios debe ser reevaluado.

Del mismo modo, las universidades de Pakistán rara vez promueven la educación secular. Una cultura de debate saludable y el cuestionamiento no está presente en las aulas. Los estudiantes se les enseña a memorizar en lugar de formar una perspectiva racional a través de la discusión. Se sabe que los autores intelectuales de la mayoría de los ataques son bien educados y con frecuencia los graduados universitarios. Osama Bin Laden era rico y un ingeniero cualificado. Su segundo, Ayman al Zawahiri fue un médico en ejercicio.

El departamento de educación tiene que trabajar en el diseño del plan de estudios que apoya el pensamiento crítico. Es deber de los maestros para que los estudiantes a entender la existencia de diferentes perspectivas y creencias. Esto a su vez ayudará a reducir el extremismo y la capacidad de respetar puntos de vista alternativos y evitar que las decisiones y sentencias impulsadas por la emoción cruda mal informados.

Fuente: http://tribune.com.pk/story/1130376/role-education-banish-extremism/

Imagen: http://i1.wp.com/otrasvoceseneducacion.org/wp-content/uploads/2016/04/attendance-thickens-teacher-also-managing-a-young-kid-who-tagged-along-an-older-sibling.jpg?resize=750%2C410

Comparte este contenido:

Los aparatos tecnológicos son una extensión de nuestro cuerpo.

Mariana Aburto Chavarría

Centro América/Nicaragua/Fuente:http://www.elnuevodiario.com.ni/

 En un mundo dominado por las nuevas tecnologías, el papel de los padres es doblemente difícil: controlar lo que consumen sus hijos y mantener la autoridad sin llegar al abuso, dice la experta.

La psicóloga clínica Mariana Aburto Chavarría analiza en esta entrevista el lado oscuro de las nuevas tecnologías: las crisis que provocan en el núcleo familiar al distanciar a padres e hijos.

La experta también advierte que la violencia intrafamiliar, la falta de aprendizaje en niños y adolescentes, así como el bullying en las escuelas forman parte de un problema de salud pública.

¿Cuál es el proyecto que actualmente está impulsando?

 Mariana Aburto: Los niños son adictos a las tecnologías. –

Es un proyecto educativo llamado “Psicología y Vida”, este es la materialización de una idea que vengo madurando desde hace un buen tiempo. Es una página web (www.marianaaburto.com) donde escribo artículos que reflejan las problemáticas que viven las familias en esta sociedad moderna. Las personas pueden entrar y preguntar, aportar e incluso dar sus testimonios.

¿Cuál es la importancia de hablar de la familia en estos tiempos?

Yo pienso que hay un gran vacío en la agenda mediática de hablar sobre este tema porque cuando es abordada sale como nota roja. Todo es drama y tragedia. Entonces siento que le estamos vendiendo a la sociedad una familia crítica, conflictiva y decadente. No puede ser que nosotros interioricemos esos problemas. Si hacemos un análisis a profundidad, nos daremos cuenta que podemos concientizarnos para así trabajar de buena forma en el seno de la familia. Eso nos crearía menos problemas a nivel social.

¿Entonces dice que se han priorizado otros temas?

Hemos priorizado temas de la convivencia externa del ser humano, pero hemos dejado un vacío en la familia. Es ahí cuando se encuentra la situación de la cantidad de menores desmotivados, agredidos y agresores de bulliyng, menores desadaptados y con problemas de aprendizaje. Aunque realmente no hay tal problema de aprendizaje, lo que hay es una desmotivación y apatía del niño a la escuela.

Situaciones como la violencia intrafamiliar, la falta de aprendizaje en niños y adolescentes, así como el bulliyng en las escuelas y colegios forman parte de una problemática de salud pública, y esto debe ser priorizado.

¿Está afectando el internet las relaciones familiares?

Yo tengo todos los días en el consultorio quejas y angustias de padres de familia con relación a la adicción a la tecnología por parte de niños, adolescentes y jóvenes. Por eso yo digo que sí está afectando, aunque no estoy hablando mal, ni satanizando las nuevas tecnologías de comunicación.

Estoy hablando de cómo nosotros debemos abrazar el desarrollo, porque es un hecho que nos trae un sinnúmero de beneficios ¿pero hasta dónde tenemos límites? ¿hasta dónde estamos sabiendo administrarlo? Por poner un ejemplo, uno le puede dar libertad a su hijo, ¿pero se le enseñó cómo administrarla? Porque la cuestión es que si hay libertad y no se sabe administrar, se convierte en libertinaje.

¿Les falta a los padres más rigor en la educación de sus hijos con respecto a las nuevas tecnologías?

Los padres  de familia, tutores y docentes que tienen que ver con ese acompañamiento deben pensar que vivimos en otra sociedad. Sí se necesita rigor, pero no al extremo. Los mayores debemos pensar que no es la sociedad en que nosotros vivimos la juventud. Hoy los hijos son otros y los padres también. Muchas veces estamos muy apegados al pasado, a lo tradicional y es un valor muy bueno. Pero eso no funciona hoy.

Estamos viviendo otra relatividad en la sociedad. Hay que irse adecuando en el seno de la familia, tenemos que adecuarnos en el rol que hoy toca vivir. Cada época tiene su particularidad. Hoy, por ejemplo, cuando se sale a comer, todo el mundo está conectado a su móvil o tablet. En cambio antes se conversaba, se socializaba, se compartía con amigos y familia. Los aparatos tecnológicos se están volviendo como una extensión más de nuestro cuerpo.

¿Los padres de familia están perdiendo autoridad?

Hay que revisar la autoridad. Porque no se trata de dejar hacer lo que los menores quieran, se trata de acompañarlos, orientarlos, apoyarlos, se trata de que se les diga: ‘Hey, un momentito, por allí no es la cosa’.

Los padres de familia no pueden perder de vista la autoridad, pero no se educa ejerciendo violencia. El padre y la madre deben darse cuenta que una agresión no se olvida nunca, incluso se olvidan más las cosas bonitas, pero no las que marcan la vida y la sellan de forma negativa causando traumas.

¿Cuál es la agresión más frecuente que se da?

¡Sos un tonto! ¡Me tenes harta! ¡Me avergüenzo de vos! Esta es la forma más frecuente que hay, la psicológica, y estos traumas quedan. Hay que reflexionar qué tipos de seres le vamos a dar a la sociedad si se sigue haciendo eso. Lo que serán esas personas son traumadas, temerosas, inseguras, sin visión. No podemos negar que vamos desarrollándonos como país, pero sin el trabajo en la familia todo lo demás no es sostenible.

¿De dónde provienen los bloqueos emocionales?

Maltrato de todo tipo, como el psicológico, el físico, verbal, maltrato o abuso sexual. Hay personas que guardan ese secreto y esto se vuelve tóxico en sus vidas, porque se vuelven inseguros, desconfiados, y uno dice: esa persona algo tiene.

¿Cuáles son los problemas más atendidos en los consultorios psicológicos?

Los más comunes son los de carácter, es decir; conductuales y de comportamientos.

También, crisis de pareja y de familia. Además trastornos escolares y en menores de edad.

Fuente: http://www.elnuevodiario.com.ni/nacionales/396320-aparatos-tecnologicos-son-extension-nuestro-cuerpo/

Imagen:

https://1.bp.blogspot.com/-Ac46SJJl68M/V264lA6egwI/AAAAAAAAAX4/dV06k4cCTeUGf5AMJS1hRXLoUI0DXM4NACLcB/s320/mooc1-730×486.jpg

Comparte este contenido:

Tiempo de dialogar.

 Manuel Gomez Granados

América del Norte/México/Fuente:http://www.cronica.com.mx/

Hace justo una semana, Nochixtlán, Oaxaca, se unió a la indigna lista de las localidades mexicanas que han sido testigos de la violencia desmedida de las autoridades. El saldo de los enfrentamientos en esa localidad todavía está en disputa pero, más allá del número de personas heridas o muertas, en Nochixtlán murieron lo poco de confianza que quedaba en el gobierno federal, así como las posibilidades reales, prácticas, de aplicar tal y como fue aprobada en el congreso la reforma educativa. Días después, por razones muy parecidas, la presidencia de la República debió anunciar el veto parcial de las leyes que teóricamente darían vida al Sistema Nacional Anticorrupción, SNA.

El común denominador que explica ambos fracasos es que aunque el Congreso de la Unión cuida algunas de las formas cuando vota y aprueba reformas, en general son procesos autoritarios en los que los acuerdos cupulares entre partidos políticos  sustituyen al trabajo político serio. Por ello,  los legisladores no deberían sorprenderse de que tanto la reforma educativa como la reforma del SNA y otras, lejos de motivar reconocimiento o admiración (como ellos quisieran) enfrenten la férrea oposición de distintos grupos. Que los empresarios, que con tanto desprecio hablan de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, se opongan al SNA y amenacen con reducir las inversiones, deja ver que a pesar de las diferencias entre maestros y empresarios, hay denominadores comunes que hablan del descontento con la democracia.

Ese malestar no tiene que ver ya con las formas. Ya no hay un gran elector al estilo de Porfirio Díaz o Carlos Salinas de Gortari que decida quienes serán diputados. Hay elecciones, sí; pero seguimos muy lejos de contar con una democracia que vaya más allá de los formalismos y sea capaz de escuchar a las personas. No es que no se cumplan requisitos formales como convocar a foros y actividades similares. Es que a veces muchos de los invitados a esos foros son personas tan cercanas a los partidos o a los legisladores que es casi imposible distinguir sus opiniones de los partidos. Muchos de los foros se convocan para legitimar decisiones tomadas de antemano. Lo mismo se puede decir de mucho del trabajo en comisiones legislativas.

Y algo muy grave que deberían considerar el gobierno federal y  los de las entidades es que ya no son sólo uno o dos movimientos aislados. Vivimos en muchos estados de la República, Chiapas y Oaxaca son los mejores ejemplos de ello, crisis sistémicas, muy profundas, que han contaminado a la reforma educativa y que, si se insiste en la lógica de la represión, corren el riesgo de extenderse a otras entidades, incluida la capital de la República. Ya hay signos de contagio en Michoacán, Guerrero, Morelos,  Tabasco y la capital del país. Otras entidades como Quintana Roo podrían contagiarse de manera muy grave por caprichos como la aprobación en el Congreso en Chetumal de un “paquete de impunidad” para proteger al gobierno saliente y algo similar podría ocurrir en Campeche donde la quiebra de Pemex ha disparado el desempleo y el descontento.

Hay que dialogar. Hay que hacerlo de buena fe, admitiendo que nada en las leyes está escrito en otra cosa que no sea papel. Qué bueno que el presidente haya admitido que hubo errores y haya usado el veto para evitarnos más conflictos. Ojalá se haga algo similar en los campos de la educación y la salud y se evite que, por ejemplo, el conflicto se extienda a las instituciones de educación de la Ciudad de México (como ya empieza a ocurrir con la UAM-Azcapotzalco).

Fuente: http://www.cronica.com.mx/notas/2016/969018.html

Imagen: http://www.expedientenoticias.com/siteimg/big/CNTE-2-31718-36488.JPG

Comparte este contenido:

La escuela donde los profesores y los alumnos se forman en emociones.

  Olga Sanmartin

Europa/España/Fuente:http://www.elmundo.es/

Hay una ley no escrita que dice que cualquier niño que se encuentre con una pompa de jabón en su camino se abalanzará hacia ella por todos los medios posibles. En el colegio público Asunción Rincón de Madrid intentan que los estudiantes hagan lo contrario. Las maestras María José y Fátima sueltan burbujas de Fairy por el patio mientras gritan a sus alumnos de cinco años: «¡Autocontrol!».Cristina, Elena y Olivia permanecen impasibles con las manos pegadas al cuerpo.Lucas no resiste y levanta un brazo. Manuel mira de reojo, con deseo impaciente, a la esfera translúcida que pasa rozándole la pierna y se estrella salpicando contra el suelo. Gana quien logre no tocar las pompas.

El juego va de controlar los propios impulsos y está inspirado en ese famoso experimento realizado en los años 60 a un grupo de preescolares a los que se les dio a escoger entre comerse una nube de caramelo en el momento o resistir la tentación para disfrutar de dos golosinas más tarde. La investigación demostró que los que fueron pacientes y esperaron tuvieron más éxito en la vida cuando se hicieron mayores.

En el Asunción Rincón llevan un año practicando ejercicios de este tipo y los resultados ya empiezan a notarse en una de las aulas de Infantil. «Los alumnos prestan más atención, se involucran más y se regulan mejor», sintetiza Fátima. «Por ejemplo, cuando están haciendo mucho ruido, ellos mismos se dan cuenta y dicen: ‘Vamos a hablar más bajo’».

Pero ha hecho falta mucho trabajo de fondo para que niños tan pequeños hayan aprendido a resistirse a algo tan atrayente como una pompa de jabón. Durante todo el año, la jefa de estudios y una decena de profesoras han participado en un curso de la Fundación Botín que les ha convertido en especialistas en inteligencia emocional y les ha dotado de herramientas para trabajar en el aula con sus estudiantes. Se trata de Educación Responsable, un programa con el que trabajan más de 7.000 profesores y 70.000 niños y en el que han participado este curso 183centros públicos, privados y concertados de siete autonomías.

Sólo hay un Gobierno regional, el de Canarias, que ha recogido la Educación Emocional dentro del currículo. En el resto de España los profesores se apañan como pueden: algunos elaboran sus propias estrategias y otros recurren a materiales que les brindan iniciativas privadas, como la de la Fundación Botín.

Neva Chico de Guzmán, la formadora, reúne a las 10 profesoras del Asunción Rincón después de la jornada escolar y les cuenta cómo trabajar mejor laautoestima, la empatía, la asertividad o el autocontrol:

– Cuando un niño llora o está preocupado, es muy frecuente que lo primero que le digamos sea «no llores» o «no te preocupes». Pero es muy difícil que aprenda a manejar las emociones si se las estamos negando. Lo que hay que preguntarle directamente es qué le pasa, explica Neva a las profesoras reconvertidas en alumnas.

– Es que eso cuesta mucho, porque hemos crecido con el «niño, no llores», apunta Fátima.

– Estamos acostumbradas a decir que no pasa nada. Pues a lo mejor sí que pasa…, reflexiona María.

Neva, en sus sesiones, intenta que las maestras se den cuenta de errores que a veces se cometen por inercia. Ellas le exponen, a cambio, los problemas que se encuentran a diario en el aula.

El programa de la Fundación Botín dura, en total, tres años. En el primero, un grupo de profesores de cada centro recibe formación, presencial y online. En el segundo y en el tercero, se constituyen más grupos de trabajo para expandir lo aprendido por todo el colegio. En otras palabras, los docentes que ya están formados se dedican a formar a sus compañeros.

«Supone un esfuerzo extra para los profesores, pero esperamos ver los frutos. No teníamos formación previa en este aspecto, pero todos los colegios con experiencia en educación emocional nos decían que no sólo veían mejor a los chicos, sino que esto revertía también en los docentes», expresa la jefa de estudios, Luz Sánchez Becerril.

La Universidad de Cantabriaha analizado los resultados y ha llegado a la conclusión de que allí donde se ha trabajado la inteligencia emocional ha mejorado la convivencia y ha disminuido la violencia, al tiempo que ha aumentado el rendimiento académico. Los niños aprenden a conocerse y a confiar más en sí mismos, a comprender mejor a los demás, a reconocer y a expresar emociones e ideas, a tomar decisiones responsables, a valorar y cuidar su salud y a mejorar sus habilidades sociales. También a desarrollar el autocontrol.

Después del juego de las pompas, Fátima y María José van preguntando a sus alumnos cómo se han sentido. Muchos responden que están más tranquilos y alegres que cuando comenzaron el día. Aunque alguno reconoce que se siente «triste»: «Me hubiera gustado explotar las pompas de jabón.

Fuente: http://www.elmundo.es/sociedad/2016/06/26/576e8aef46163fea5f8b466b.html

Imagen: 

http://e03-elmundo.uecdn.es/assets/multimedia/imagenes/2016/06/25/14668598878687.jpg

Comparte este contenido:

La revuelta femenina televisada.

Celeste Murillo .

América del Sur/Argentina/Fuente:http://www.laizquierdadiario.com/

Un documental recorre el movimiento por la liberación de las mujeres. La historia de un movimiento que cuestionó la opresión de la mitad de la población antes de que ser feminista estuviera de moda.

La generación de mujeres que llegaba a la vida adulta a comienzos de la década de 1960 sospechaba que algo no andaba bien, era común que muchas fueran obligadas a hacer tratamientos psiquiátricos, incluido el electroshock, se las trataba de locas y deprimidas por no abrazar el sueño del matrimonio y el hogar.

Lo personal y lo político:

En 1963, Betty Friedan escribe sobre el “malestar sin sombre” en su libro The Feminine Mystique (Mística de la feminidad), que se transformaría en un texto clave del estallido de la segunda ola feminista en Estados Unidos (se considera a las sufragistas de comienzos de siglo XX la primera). Para muchas, ese fue el punto de partida del movimiento.

“No era yo, no era él, era la sociedad” dice una de las fundadoras de NOW (por sus siglas en inglés, Organización Nacional de Mujeres), al recordar el momento en que se había dado cuenta de que ella no era el problema, y cuenta cómo renuncia las garantías de una vida de clase media acomodada para pelear por los derechos de las mujeres. El público que la escucha estalla en aplausos.

Para mediados de los años 1960 ya no había vuelta atrás. Las mujeres fueron por todo. Las protestas de mujeres se expandían como una epidemia. El documental hace una buena selección de las acciones del movimiento: quema de títulos universitarios, mientras una joven graduada dice a cámara “Soy historiadora y no sé nada de la historia de las mujeres”, el público aplaude. “Qué cuerpo, papito”, le grita una estudiante a un ejecutivo en pleno Wall Street, en medio de una acción directa contra el acoso en los lugares públicos, seguida con atención (y algunas miradas atónitas).

Muchas mujeres que habían participado del movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos, el movimiento antiguerra y en el movimiento estudiantil universitario salieron a la calle a reclamar para sí los derechos que sabían propios: derechos reproductivos, aborto legal, igual salario a igual trabajo y el fin de la segregación por género que regía en casi todas las actividades económicas. La mecha que se había encendido no se apagaba con nada.

El movimiento no estuvo exento de contradicciones, con su enorme repercusión empezaron las discusiones: ¿Quién decide qué tema es importante? ¿Por qué se discute tan poco lo que piensan las mujeres negras? ¿El movimiento feminista le da suficiente importancia a los problemas de las trabajadoras? ¿Qué pasa con las lesbianas, por qué no está en cuestión la heteronorma?

Nada está fuera de discusión:

El documental incluye entrevistas con activistas de la época, muchas de ellas autoras de textos clave de diferentes corrientes como Kate Millet (Sexual Politics) o Jo Freeman (The Politics of Women’s Liberation). Sus experiencias y discusiones son recorridas, a veces con la urgencia de la fascinación de poder casi “televisar” el avance de un movimiento que parecía irrefrenable. Quizás sus poco más de 90 minutos no son suficientes para brindar una imagen acabada de las múltiples facetas y corrientes políticas.

Uno de los aspectos interesantes del documental es que aborda sin pruritos la existencia de diferentes alas (si cabe una crítica es quizás la superficialidad de algunos debates clave que marcaron al feminismo como aquellos sobre género, clase y raza). Una activista afroamericana narra en primera persona las contradicciones de ser un ala de un movimiento mayoritariamente blanco. Otra señala la poca atención a los problemas de las mujeres trabajadoras y alerta sobre el problema de tener una visión exclusiva de la clase media.

La sexualidad fue uno de los temas fundantes del movimiento. Por primera vez, las mujeres discutían su sexualidad fuera del matrimonio: el sexo no reproductivo (la píldora anticonceptiva era reciente), el deseo y la homosexualidad femenina. Las lesbianas fueron unas de las primeras en hacer tambalear la principal organización y llamó a discutir la sexualidad femenina sin prejuicios ante la mirada preocupada de Friedan y otras fundadoras que creían que era “demasiado pronto”.

El documental brinda un buen panorama de las diferentes agrupaciones e iniciativas del movimiento, como Jane Collective (una red de apoyo cuya acción fue vital para que miles de mujeres trabajadoras y pobres accedan a los servicios de salud reproductiva), las editoras del mítico libro Nuestros cuerpos, nosotras mismas que fue para millones de mujeres el primer acercamiento a la educación sexual y el autoconocimiento.

Testimonios valiosos como los de las activistas negras, que hablan de las dificultades de plantear el derecho a decidir sobre el cuerpo, cuando el movimiento negro veía en la reproducción de la vida una “forma de resistencia” ante la dominación blanca. Las afroamericanas enfrentaron el desafío doble: ir contra a los prejuicios racistas dentro del movimiento de mujeres y contra los prejuicios machistas en el movimiento negro, incluso en sus alas más radicales.

Otro de los episodios narrados en She is beautiful… es un acto del movimiento antiguerra donde un grupo de mujeres de la SDS (una agrupación estudiantil de la llamada Nueva Izquierda) decide hacer su primera aparición. Ni bien la oradora comenzó a hablar, los militantes varones empezaron a abuchearla, a pedir que se vaya diciendo que era una mujer y no podía estar al frente de un acto político. Esto abrió un amplio debate sobre la participación de las mujeres en los movimientos políticos.

¿Soluciones de los años ’60 para los problemas de 2016?

Una de las reflexiones más interesantes está tanto al inicio como al final. Las primeras imágenes se ubican en una manifestación en Texas (Estados Unidos) en 2014 que exige el fin del ataque al derecho al aborto, conquistado por las mujeres en 1973 (mediante el fallo de la Corte Suprema Roe vs. Wade) luego de años de lucha. Hacia el final, una de las activistas reflexiona sobre el estado del movimiento de mujeres, los desafíos actuales: “Ninguna victoria es permanente”.

Es imposible separar el movimiento de liberación femenina de su época, que le imprimió una perspectiva de crítica social y revolucionaria, lo que no significó homogeneidad ni monolitismo. Ante la reacción social y política de los años 1980 que significó la restauración conservadora, encabezada por Margaret Thatcher en el Reino Unido y Ronald Reagan en Estados Unidos, una gran parte del movimiento feminista renunció a la transformación de la sociedad como vía para terminar con la desigualdad y se refugió en los pasillos de los parlamentos y agencias gubernamentales.

Ese abandono de las calles tuvo como consecuencia la institucionalización e integración del feminismo a las agendas oficiales. Vía esta integración, gran parte del feminismo se centró en transformar la cultura, una empresa que hoy podemos decir que el alcance de esa batalla cultural es, como mínimo, contradictorio. Es en gran parte cierto lo que dice una de las protagonistas, “Ya no se puede volver atrás, es imposible restablecer la segregación por género en el mundo laboral, que la mujer vuelva a trabajar exclusivamente en el hogar”.

El mayor desafío que enfrenta el movimiento de mujeres es la sorda convivencia de la ampliación de derechos (de alcance restringido y condicionado en la mayoría de los casos) con el crecimiento de la violencia machista y el avance reaccionario contra los derechos conquistados por la generación que protagoniza el documental. Ante este desafío urgente, las mujeres no necesitan volver al pasado, pero sí recuperar las banderas de la transformación social, para conquistar su emancipación y el fin de toda opresión. “Nadie nunca nos regaló nada”, una reflexión de los años 1960 que bien vale recordar en 2016.

Fuente: http://www.laizquierdadiario.com/La-revuelta-femenina-televisada

Imagen: http://www.laizquierdadiario.com/local/cache-vignettes/L653xH447/arton42835-29b99.jpg?1466891162

Comparte este contenido:

Luchar contra la violencia de género pasa por la educación.

     Juan Carlos Vasquez.

Europa/España/Fuente:http://letralia.com/

Irse, rehacerse con la probabilidad de un sueño, con todas las disposiciones enfrentarse al cambio que surge como una necesidad imperiosa.

Basada en hechos reales, Patricia C. Beltrán nos narra la historia de Valentina. Nos introduce en su mundo exponiendo la fragilidad, los secretos, el tránsito como desgaste a través de muchas geografías donde el agitado juego de la vida abre el problema. Una premonición, ese sueño recurrente en que la protagonista enloquecía: convertirse en Saturno, tragarse a sus hijos, le arrancaba las piernas y los brazos a mordiscos. Como en una de las pinturas negras de Goya. Un anuncio que definiría parte de su futuro.

El fiel reflejo de la nada: una novela que transgrede la ilusión, que avanza con los sutiles deseos de una joven esperanzada que descubre una cruenta realidad de la manera más violenta.

Mis lectores me trasmiten que el final del libro les causa impacto, conmoción.

Partiendo de un entorno familiar sensato, apacible y solidario, de una vida divertida. Entre amistades y relaciones prueba los deseos y llega un mensaje, un consejo, cuanto más sensible, cercano, por las características de la voz, y se abre el mundo como un abanico de posibilidades. Una idea que ejerce un poder absoluto, una entonación que desde el momento exacto dirigirá la búsqueda incansable.

Todas las distancias posibles con esas cargas añadidas de los recuerdos, de la familia. Una experimentación inevitable y laberíntica que la hace percibir sorprendiéndose “al viajar” las magnificencias de la historia que no conocía, con esa latente y visible vulnerabilidad de estar sola, desprotegida, en un tiempo diferente que concluyo y empezó con Sébastien, deteniéndose abruptamente después de un arduo recorrido.

Me la jugué en un brutal empujón y noté cómo salían sus hombros y deslizaba después el resto del cuerpo. Ya estaba aquí.

Despertar feliz, entre dos realidades totalmente opuestas, finalmente y después de tanto coger un cuchillo, defenderse. Ver más allá de la ventana y centrar una luz casi imperceptible, un flujo continuo que en su grandiosidad le muestra un nuevo mundo, el verdadero.

Me desplomé en el suelo. Algo viscoso corrió hasta mi ojo derecho y probé el dulce y caliente sabor de la sangre. Con la valentía del cobarde, remató mi cuerpo inerte con su puño letal.

Entre el racismo y la intolerancia del establismento una violencia física y psicológica que termina afincándose en la vida de Valentina, infringiéndole culpas que pertenecen a su agresor, Sébastien. Una actitud que progresa silente ante la indefensión creando un vínculo traumático del que ella lucha por desatarse una y otra vez.

Ya no siente necesidad de ver o vivir más cosas de las ya vividas. Con Sébastien nace una contradicción reflejada en su hijo. Una historia donde intervienen personajes de todo tipo. Desde la candidez más plena hasta los sucesos más perturbadores. Situaciones que la narradora describe de una manera ágil, directa, por medio de una tensión gradual y sistemática que va en aumento.

—Tu novela El fiel reflejo de la nada nos adentra en la complejidad de las uniones afectivas. ¿Cómo se inicia tu relación con Valentina?

—Mi relación con Valentina se inicia hace aproximadamente una década, cuando yo vivía en Madrid. Mi compañero de piso y yo buscábamos a alguien para que ocupase la habitación que nos quedaba libre y apareció ella. Conectamos enseguida y la relación entre nosotras se fue estrechando hasta convertirse en una buena amistad.

—¿Cuándo y por qué te decides a plasmar su historia?

—Valentina solía contarme anécdotas sobre su vida que me hacían pensar en cómo era posible que en una única persona se condensaran tantas aventuras y batallas, la mayoría con carácter surrealista. Sin embargo, en aquella época Valentina no había comenzado aún su descenso a los infiernos. Fue años después de venirme a vivir a Galicia cuando ella me fue revelando pequeños episodios de su vida, pero no fui consciente del drama que había padecido hasta que le pedí que me contase su historia.

—¿Cual parte del libro prefieres, ya sea por la conexión cíclica de la historia o por la construcción de una escena?

—Hacia la mitad, el libro sufre un giro drástico tanto en forma como en fondo; creo que a partir de ese momento el lector experimenta una necesidad de protección respecto a la protagonista, no puede separarse de ella, grita “¡NO!” sin cesar, pero Valentina hace caso omiso y se precipita hacia el vacío en caída libre. Lo que me trasmiten los lectores es que, llegados ese punto, no pueden parar de leer hasta conocer el desenlace final de la historia.

—Como escritora, ¿qué es lo que más le interesó saber de Valentina?

—Pienso que lo mismo que al resto de las personas que han leído el libro: saber el porqué. Esa es la pregunta que todos tenemos en la cabeza y a la que puso voz Leonor, un personaje de inmenso valor en la novela. A día de hoy, no tengo la respuesta.

—Todos los escritores tienen un proceso. ¿Cuál es el tuyo?

—Necesito tener muy claro qué es lo que voy a contar. Realizo esquemas sobre la trama capítulo a capítulo, hago un análisis de los personajes, sitúo los lugares de la historia y elijo el punto de vista narrativo. Tiendo a escribir de un modo muy cinematográfico; es decir: creo las escenas como si fueran a ser plasmadas en una película. Además, dedico mucho tiempo a las revisiones del texto.

—Las secuelas psicológicas y los problemas de salud mental que ocasiona la violencia de género en Valentina fueron irreparables, acepta reiteradamente volver con su agresor.

—Sí. Creo que las heridas, sobre todo psicológicas, se traducen en una inseguridad que la lleva a regresar una y otra vez al punto de partida. Pero el papel de su hijo es crucial en la decisión de Valentina: no hará nada que pueda alejarlo de él.

—¿Qué lo que más te conmovió de este caso?

—Sin duda, el instinto maternal de Valentina, el amor por su hijo. Cuando Sébastien se lleva a Diego a París sin el consentimiento de su madre, la capacidad de reacción de ella es brutal. Valentina ha sido, es y será una gran madre.

Desgraciadamente, creo que hay muchos más Sébastien en el mundo de los que a todos nos gustaría.

—Es un caso real, pero tu mirada no es periodística. ¿Dónde ubicas la principal diferencia entre el tratamiento que hace un periodista y el que puede darle un escritor?

—Supongo que la diferencia radica, principalmente, en la implicación emocional del autor. Aunque el germen de este libro se encuentra en un relato de unas diez páginas, siempre tuve claro que tarde o temprano de aquí saldría una novela; no me planteé la crónica periodística en ningún caso. Mi objetivo era emocionar con la historia de Valentina.

—Con esta temática, la novela dispara uno de los recursos más fuertes que es el interrogar al espectador, imbuirlo en una reflexión profunda.

—Así es. Mis lectores me trasmiten que el final del libro les causa impacto, conmoción. En primer lugar, el desenlace es ese y no otro porque se corresponde estrictamente con la vida de la protagonista. Otro final no hubiera sido otra cosa que maquillar la realidad que nos azota día tras día.

—A pesar de las penurias a las que Valentina se ve expuesta, hay personajes como Axel, Leonor o los chicos que la rescatan de la calle. Éstos invitan a esperanzarse a pesar de la intolerancia y violencia de Sébastien. ¿Albergas optimismo, alguna posibilidad real de cambio dentro de la sociedad?

—Desgraciadamente, creo que hay muchos más Sébastien en el mundo de los que a todos nos gustaría. Creo que la prevención a la hora de luchar contra la violencia de género pasa, en primer grado, por la educación. Por ejemplo, hay muchas chicas jóvenes que asumen el machismo como condición natural y esto es realmente dramático y triste. La problemática hay que atajarla desde abajo, desde los cimientos.

—¿Tienes algún nuevo proyecto entre manos?

—Acabo de terminar con la documentación de mi próxima novela. Se trata de una historia de amor ambientada entre Galicia y Estados Unidos.

Fuente: http://letralia.com/entrevistas/2016/06/26/patricia-c-beltran-luchar-contra-la-violencia-de-genero-pasa-por-la-educacion/

Imagen: http://letralia.com/wp-content/uploads/2016/06/reflejo.jpg

Comparte este contenido:

¿Educando?

Rafael Licéaga

Norte América/México/Fuente:http://www.frontera.info/

Siempre que se les ha preguntado a los grandes sabios y a los jefes de Estado sobresalientes qué es lo más importante de un gobierno, dicen que la educación. Y estoy de acuerdo porque con ella se educa en justicia, en valores, en trabajo, en integridad, etcétera.

Un sistema educativo que se precie de ser relevante debe de contar con varios saberes, mismos que primero deben de tener los gobiernos, los maestros y padres de familia, para luego poder enseñarlos bien a los alumnos.

La primera lucha que hay que tener es contra los egos de quienes creen saberlo todo, principalmente funcionarios públicos que dictan normas y maestros que creen que sus conocimientos son más que suficientes. No es cierto. El conocimiento humano está expuesto a errores de percepción y de juicio. El primer objetivo de la nueva estrategia de educación debería de ser detectar errores en la educación y cómo resolverlos.

En nuestra última reforma educativa, hecha sin consultar a nadie, hubo errores, y entre los errores de lo escrito y los errores de quienes lo interpretan, el atole ya se hizo engrudo. Al parecer, en México, alguien está interesado en que muy pocos puedan salir de su grado de ignorancia. Por lo tanto, se debe garantizar el conocimiento adecuado.

Algo que más o menos arreglaría las cosas es saber quiénes somos y en dónde estamos parados. Conocernos como seres humanos, como lo que somos realmente como mexicanos. Situarnos en el mundo amplio. Todo desarrollo humano significa comprender al hombre y a la humanidad. La cultura en general existe a través de las civilizaciones. La educación debería mostrar el destino individual, social, global de todos los mexicanos. ¿Usted cree que lo logremos con maestros disidentes y verdaderos barbajanes que les infiltran en sus organizaciones? ¿Cree que lo lograremos con las autoridades educativas que tenemos y sus estrategias?

La historia humana comenzó con una diáspora de todos los humanos hacia regiones que permanecieron durante milenios aisladas, produciendo las diferentes lenguas, religiones y culturas. En los tiempos modernos se ha producido lo contrario, la revolución tecnológica que permite volver a relacionar estas culturas, y a volver a unir lo disperso. Hay que adecuarnos en ello.

La educación debe de abarcar la comprensión. Enseñar la comprensión significa enseñar a no reducir al ser humano a una o varias de sus cualidades que son múltiples y complejas. Por ejemplo, es nuestra costumbre, etiquetar a la gente como nos los quieren mostrar. Por eso en ciertos movimientos sociales, aparecen los perversos que nos muestran, quién sabe con cuánta verdad o cuánta mentira, a determinado tipo de personas como buenos o malos. Hay que mejorar la apertura empática hacia los demás, tolerar ideas y formas diferentes, mientras no atenten a la dignidad humana. La verdadera comprensión exige establecer sociedades democráticas y educadas, fuera de las cuales no cabe ni tolerancia ni libertad.

Eduquémonos pues, bien, para luego poder educar bien. A trancazos, de una y otra parte, no se llega a nada.

Fuente: http://www.frontera.info/Columnas/DetalleColumnas/941749-Aguilas-y-serpientes-Rafael-Liceaga.html

Imagen: http://www.americaeconomia.com/sites/default/files/imagecache/foto_nota/educacion_ninos.jpeg

Comparte este contenido:
Page 2517 of 2703
1 2.515 2.516 2.517 2.518 2.519 2.703