Page 27 of 940
1 25 26 27 28 29 940

España – OCDE: eliminar a los pobres, no la pobreza

OCDE: eliminar a los pobres, no la pobreza

Eduardo Luque

La falta de empatía y coherencia son algunas de las constantes en multitud de figuras públicas. En una sociedad donde el espectáculo como diría Guy Debord lo es todo, el político neoliberal o el populista de turno muestra, en época electoral. un rostro bondadoso besando niños y haciendo como que escucha las demandas de sus posibles votantes. Una vez conseguido el objetivo se transmuta y como en la novela de Stevenson, deja de ser el doctor Jekyll y asume el papel del señor Hyde. Es, en ese momento post-electoral, cuando conocemos realmente a esas figuras públicas.  Dan Patrick (72 años) es uno de estos personajes. El vice-Gobernador del Estado de Texas declaró que: “los abuelos deberían sacrificarse para salvar la economía y no paralizar al país norteamericano. Deben morir”. Anteriormente, Christine Lagarde (66 años) presidenta del Banco Central Europeo y ex gobernadora del Fondo Monetario Internacional (FMI) suscribía un documento donde se podía leer: “los ancianos viven demasiado y eso es un riesgo para la economía global”. El señor Taro Aso, (81 años), ex Ministro de Finanzas japonés afirmaba: “Pido a los ancianos que se den prisa en morir para que el Estado no tenga que pagar su atención”. Las expresiones hacia este nuevo fascismo gerontológico se multiplican, si otro día comentábamos la modificación de las leyes canadienses que permitían la eugenesia a los pobres, ahora es la todopoderosa Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) la que en su último informe parece desear el exterminio de las personas de edad.

Para este organismo internacional el reto futuro es el envejecimiento de la población. La causa de los grandes males de la humanidad, no son las guerras, que propicia el capitalismo neoliberal, no son las enfermedades perfectamente curables que matan a millones, ni la crisis financieras que extienden un manto de pobreza sobre las poblaciones. No es la especulación sobre los alimentos que se hace en las bolsas de Amberes o Chicago. Para la OCDE la causa son los ancianos que viven demasiado.

El sistema capitalista acuciado por sus crisis recurrentes pretende aplicar teorías eugenésicas que pensábamos superadas. El gran teórico de la eugenesia fue, como todos sabemos, Thomas Robert Malthus (1766-1834). Aunque fue un hombre muy longevo para su tiempo (vivió 80 años) jamás pensó en aplicar sus tesis sobre el exceso de población a él o los suyos. Sus pronósticos sobre la imposibilidad de alimentar a una población que crecía de forma geométrica, mientras los recursos lo hacían de forma aritmética, estaban basados en cálculos matemáticos supuestamente irrefutables. Para controlar la población propuso varias vías. Proponía el retraso del matrimonio, el celibato y la continencia conyugal. las llamadas Prudential restraints (restricciones con prudencia); evidentemente estas propuestas iban dirigidas sobre todo a las clases pudientes: para los pobres proponía la supresión de las ayudas sociales como La Ley sobre la Pobreza (Poor Law) y la eliminación física por hambre de los hijos de los sectores más pobres de la sociedad. Esta ideas fundidas con el Darwinismo social han sustentado la consideración de “parásitos sociales” a los débiles o menos productivos.

Estas tesis ahora encuentran un buen momento para salir de nuevo a la luz. En este caso no se trata de un problema demográfico como sostenía Paul Ejrlich en ”La bomba de la población” (1968) o como el estudio clásico de Dennis L. Meadows y su libro “Los límites del crecimiento” (1970). No se trata de reducir la población porque haya un exceso, se busca la expropiación y posterior concentración de la riqueza social en manos privadas por el método maltusiano de reducir la población “pasiva”. Detrás de las propuestas de la OCDE oímos los ecos ahora disfrazados con guarismos matemáticos de las tesis de Maltus y su Prudential restraints[1] . El dia 30 de agosto este organismo hizo público su último informe sobre pensiones: “Funding The Future: The Impact of Population Ageing on revenues across levels of government” e insiste en el camino iniciado por el Banco Mundial en 1994. Esa institución proponía la privatización de las pensiones, la educación y la sanidad. Fue la base para impulsar la ola de privatización que nos asola en este momento. Ahora, cuando Europa sufre las consecuencias de la guerra en Ucrania, y está en una situación que será aún más angustiosa, la OCDE pretende aprovechar el miedo y el marasmo económico y dar una vuelta de tuerca.

El informe parte de una premisa falaz: las jubilaciones son un gasto y por tanto se han de recortar al mismo tiempo que aumentamos los años de cotización y reducimos, encareciéndolas, las prestaciones en sanidad. El objetivo subyacente promueve de hecho una reducción intensa de la población jubilada. El razonamiento es tan falso como perverso. La premisa es que las personas mayores son las que más se van a beneficiar del estado del bienestar e incrementan por tanto el gasto público. “El grupo que soporta la carga fiscal más alta, los trabajadores, es diferente del grupo que más se beneficia del estado de bienestar, los pensionistas”; en consecuencia se recomienda incentivar “una mayor dependencia de los impuestos sobre el capital, los ingresos de la propiedad y de las pensiones”. Para equilibrar la balanza, la OCDE promueve que los jubilados paguen más por los servicios que reciben. Evidentemente este Think Thank del pensamiento neoliberal olvida que los ingresos de los pensionistas son en general muy inferiores a la media y que las tasas de reposición, precisamente por las recomendaciones de la OCDE, van a la baja. Se sugiere también como vía de estabilizar el supuesto “déficit”, que las pensiones han de ser gravadas con nuevos impuestos o reducidas sus cuantías; en definitiva, que los mayores tarden más en acogerse a la jubilación y que paguen más por la sanidad: “El cuidado de la salud se ve particularmente afectado por el envejecimiento de la población, ya que los adultos mayores tienden a consumir más servicios de salud que la población activa”. En la misma línea propone la subida del IVA, uno de los impuestos indirectos  que más afectan a las clases humildes, eliminando los tipos reducidos y superreducidos. Por otra parte se propone un incremento en el IRPFM; en general se pretende que: “Todos los tipos de impuestos pueden volverse más eficientes ampliando su base imponible y reduciendo excepciones”

Es una propuesta sencillamente criminal que pretende endurecer los impuestos al consumo. Se quiere teóricamente compensar la caída de ingresos por impuestos producidos por la jubilación. La OCDE sabe que el IVA es uno de los impuestos que influyen sobre la presión demográfica. En nuestro país los grandes grupos de presión a través de las escuelas de negocio pretendían incrementar el IVA farmacéutico al 23%. Fue el gobierno Rajoy quien subió este impuesto del 10 al 21%, los centenares de defunciones evitables a causa del alto costo de los medicamentos contra la hepatitis C en 2015 fue una de las consecuencias más evidentes.

La lección extraída es clara; al incrementar los impuestos indirectos que tienen un fuerte impacto en la población de edad avanzada se promueve la reducción de la esperanza de vida y el incremento de la mortandad.

La OCDE establece una justificación que carece de base analítica: supone que “en países donde el consumo aún no está sujeto a impuestos elevados, las tasas podrían incrementarse para impulsar la resiliencia al envejecimiento”. Nadie se explica cómo los mayores impuestos sobre productos básicos puedan disuadir de acogerse a la jubilación, a no ser evidentemente que hayamos bajado tanto las pensiones que obliguemos a la gente a trabajar hasta edades avanzadas para poder sobrevivir. Norteamérica es el ejemplo a seguir. La esperanza de vida en EEUU sigue descendiendo año tras año, en estos momentos China con 1.400 millones de habitantes tiene casi la misma esperanza (77,1 años) de vida que los norteamericanos, (77,28 años) mientras que países como el nuestro los supera por  cinco años  de promedio.

El aumento de la esperanza de vida es una de las obsesiones de los técnicos de la OCDE. Periódicamente se hacen predicciones catastrofistas que irremediablemente se demuestran falsas.  Para justificar su objetivo (reducir las pensiones y reducir los pensionistas) no dudan en utilizar una única variable como eje de estudio: la esperanza de vida. Se olvidan interesadamente de la actividad económica generada a partir de la jubilación, se olvidan de las aportaciones hechas por parte de los jubilados al erario público y de cómo los superávits en las cotizaciones sociales han alimentado los presupuestos generales, los miles de puestos de trabajo que se precisan y como ese factor es un activo económicamente clave en nuestro país, por ejemplo.

El informe es de una calidad técnica tan discutible que pretende convencernos de obviedades que no requieren de analistas. Que los ingresos de las naciones avancen a diferentes velocidades teniendo en cuenta los cambios demográficos en cada país es una afirmación que cualquiera, sin conocimientos económicos, puede entender; que el efecto demográfico está relacionado con los salarios o el cambio en los patrones de consumo es una verdad de Perogrullo que se pretende presentar como una suerte de descubrimiento de la piedra filosofal.

El Neoliberalismo intentará exportar su crisis nuevamente a las clases populares. Invocarán una vez más la imposibilidad de cambiar las cosas y se ampararán en un montón de guarismos que como hemos visto una y otra vez son falsos. No se trata ya de una ley mejor o peor, el capitalismo Neoliberal pretende ampliar sus ganancias a costa de la vida de los jubilados. En esta tesitura de nuevo las palabras de Eduardo Galeano retumban cuando habla de los Nadie: ”que valen menos que la bala que los mata”.

Nota
[1] hrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://www.mundosigloxxi.ipn.mx/pdf/v05/20/04.pdf

Fuente de la Información: https://www.elviejotopo.com/topoexpress/ocde-eliminar-a-los-pobres-no-la-pobreza/

Comparte este contenido:

El proyecto de ley de universidades sigue en pie: el Congreso tumba las tres enmiendas a la totalidad en España

PP, Vox y Junts no han logrado el respaldo del resto de la Cámara. Subirats se compromete a negociar en una comisión la polémica financiación de los campus

El Congreso de los Diputados ha tumbado este jueves las tres enmiendas a la totalidad al proyecto de la Ley Orgánica de Universidades (LOSU) que presentaron el Partido Popular, Vox y Junts. De modo que el proyecto, que sufrió muchos bandazos en sus inicios con el ministro Manuel Castells, prosigue su tramitación en manos de Joan Subirats, más hábil que el primero para negociar la ley, quizás por su experiencia política previa. Las enmiendas se han rechazado con 193 votos en contra, 148 votos a favor y una abstención.

En la teoría, el Gobierno cuenta con los votos suficientes para sacar adelante la norma en una votación a finales de 2022. Castells se jactó de ello en este periódico hace diez meses: “Podríamos aprobar la ley del Sistema Universitario mañana, pero quiero que sea consensuada”. Días antes, los rectores se habían negado a emitir un informe preceptivo para aprobar la ley ―consideraron que no era la versión definitiva― y colectivos de estudiantes convocaron una huelga sin ningún eco. La norma vigente ―la Ley Orgánica de Universidades (LOU)― ya ha cumplido 20 años y España ha cambiado mucho desde entonces. Cuenta con 30 universidades más, todas ellas privadas, hasta llegar a las 90 actuales.

La financiación de la ley es probablemente el mayor escollo de la negociación con las autonomías, que tendrán que sufragar los gastos extra. La intención es que en 10 años las universidades reciban un 1% del PIB para su financiación (ahora es el 0,7%). A las críticas se sumó hace tres semanas el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page ―”No vamos a tolerar que cargue de deudas a las comunidades autónomas”, dijo―, que se declaró dispuesto a acudir al Tribunal Constitucional. Subirats, en el pleno de este jueves, se ha comprometido a negociar un plan en una comisión de expertos, “en el marco de la Conferencia General de Política Universitaria” en la que se sienta el ministro y los consejeros del ramo.

El PP arrancó su enmienda rechazada asegurando que la ley no cambia nada, porque “se limita a repetir epígrafes, materias ya conocidas o lugares comunes para generalizar en unos casos y detallar en otros los aspectos que figuran en la norma vigente”. Pero, seguidamente, afirma que la norma “deconstruye” el sistema, al otorgar más autonomía a los campus, lo que va a llevar a una atomización tal que dificultará la movilidad de estudiantes e investigadores.

Considera asimismo el PP que el texto no está conectado a la recientemente aprobada Ley de Ciencia. Se muestran también en contra de la contratación masiva de profesores asociados (doctores y con relación larga con el centro) pues, a su juicio, esta regularización del colectivo en situación precaria. “incrementa la conflictividad laboral, potencia la endogamia y va en detrimento de la excelencia”. “Esta ley abre una nueva era de precariedad. No resuelve los problemas que requieren instrumentos legales y crea otros nuevos”, ha asegurado María Jesús Moro, su portavoz.

Este miércoles, el consejero andaluz Gómez-Villamandos que dejó la presidencia de la conferencia de rectores en abril, defendió punto por punto la enmienda del PP en la Comisión de Ciencia, a la que acudió como experto invitado por su partido, pero dijo hablar no como político, sino como académico. Por eso, decidió emplear en cada frase el “nosotros”para sorpresa de muchos parlamentarios. Su tono como presidente de la CRUE durante tres años fue mucho más templado.

Vox ha encabezado una enmienda a la totalidad porque considera que con esta ley se quiere “convertir en política de Estado un programa ideológico” que hace seguidismo de las “agendas globales [Agenda 2030], el fanatismo climático, el feminismo radical, el desprecio al esfuerzo”. El diputado defensor del texto, Joaquín Robles, ha llegado a acusar al Gobierno de “justificar los escraches” sin citar a su excompañera Macarena Olona, víctima de uno, muy distanciada del partido.

La enmienda de Junts, como suele ocurrir con los nacionalistas, iniste en que el Gobierno no responde a las “peticiones y reclamaciones de Cataluña en materia universitaria, a pesar de ser un ámbito transferido”. El Ejecutivo no tiene que dar por perdido el voto de Junts, pues su diputada Mariana Illamola ha reconocido que presentaron la enmienda para presionar ―”Es una herramienta útil para la negociación”― y que observan “mejoras” en el proyecto de Subirats respecto a los anteriores. La CUP coincide en que la ley se entromete en las competencias autonómicas pero, como Coalición Canaria, quieren seguir negociando.

Marta Rosique, diputada de Esquerra Republicana ―cuyos votos son fundamentales―, ha mostrado su buena predisposición a votar a favor porque han detectado “cambios relevantes” que les agradan en un texto que da más independencia a los campus para autogestionarse. “Queremos que las universidades decidan cómo es su modelo, no desde Madrid”, ha insistido Rosique.

El PNV, que ha votado en contra de las enmiendas, echa de menos que de la nueva versión haya desaparecido la formación dual, como ocurre en FP con las empresas. Tampoco ha respaldado las enmiendas Ciudadanos, que se felicita de la “buena actitud” de Subirats, que trata de convencerles de las bondades de la ley, pero el partido cree que la norma “no es como se nos dijo”, en palabras de su diputado Juan Ignacio López-Bas. Además, coinciden en el diagnóstico de los problemas de la universidad con el PP.

Fuente: https://elpais.com/educacion/universidad/2022-09-22/el-proyecto-de-ley-de-universidades-sigue-en-pie-el-congreso-tumba-las-tres-enmiendas-a-la-totalidad.html

Comparte este contenido:

España: La educación asturiana, con menos repetidores, pero más abandono

Europa/España/23-09-2022/Autora: OLGA ESTEBAN/Fuente: www.elcomercio.es

El Principado es la región con mejor ratio de alumnos por profesor, pero ha perdido escolares durante los últimos diez años.

Más de 140.000 estudiantes han vuelto a las aulas en Asturias esta semana. 102.000 lo han hecho en Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato. Unos 20.000 en la Universidad y unos 19.000 en Formación Profesional. Y si la primera semana suele ser especial para todos, en mayor o menor medida, lo cierto es que este curso llega plagado de novedades en todos los niveles. En los no universitarios porque arrancan con LOMLOE. En FP porque es el curso de transición para la aplicación, también, de nueva ley. Y en la Universidad, donde podrían haber disfrutado de un arranque más tranquilo, ha coincidido con el anuncio del Principado de la puesta en marcha del nuevo campus de El Cristo, lo que ha removido, y mucho, los ambientes universitarios.

La cuestión es que los niveles no universitarios de enseñanzas generales estrenan ley. Lo hace todo Infantil y los cursos impares del resto. Un estreno que ha complicado mucho el arranque para los equipos directivos y los docentes, porque los currículos han llegado con el tiempo justo, no hay apenas libros de texto, hay centros menos acostumbrados al trabajo por proyectos, la formación a los docentes llegará con el curso ya empezado y en Secundaria la organización de horarios y nuevas optativas ha sido complicada. Qué decir de los 23 institutos públicos que, además, han puesto en marcha el Bachillerato General. 173 pioneros y pioneras en toda la región han estrenado la modalidad, que ha supuesto para los centros un auténtico encaje de bolillos porque, como dice uno de los directores afectados, «para que sea efectivo tiene que ser muy a la carta».

Plan bilingüe y acoso escolar

El que ha arrancado será también el curso del proceso de estabilización de interinos, de oposiciones de Secundaria (tras los muchos problemas registrados en las de Primaria de este verano) y del inicio de las conversaciones con la escuela concertada para renovar los acuerdos. Una negociación que se prevé complicada porque todo hace indicar que habrá recortes. Será el curso de la revisión del plan bilingüe, muy cuestionado en algunos ámbitos; de una mayor vigilancia en el siempre preocupante acoso escolar; de la vuelta a la total normalidad después de tres años en los que la covid se colara como protagonista absoluto en las aulas…

Son algunos de los principales objetivos para un sistema que no logra evitar la continua sangría de alumnos. La preocupante bajada de la natalidad de Asturias lo anticipaba hace tiempo. Primero fue Infantil y ahora ya también es Primaria. Cada vez más pupitres quedan vacíos.

Los 102.666 estudiantes de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato suponen un 1% menos que hace un año. Y podría ser mayor, pero Secundaria y Bachillerato aún compensan la notable pérdida de Infantil y Primaria: 1.813 matrículas menos. La suma de 784 en las etapas superiores hace que saldo definitivo sea menor. Pero ese 3% de pérdida entre los 3 y los 12 años irá llegando, de forma paulatina, a todos los niveles. También a la Universidad.

De hecho, según las últimas cifras del Ministerio de Educación, en su publicación ‘Datos y cifras. Curso escolar 2022-2023’, y que se basa en las estadísticas del curso pasado, Asturias ya fue entonces una de las cinco comunidades que había perdido alumnado respecto a hace diez años, el curso 2011-2012. En este periodo, la evolución de alumnado en España ha sido dispar. Mientras Navarra ha ganado un 13,3% de estudiantes, Castilla y León ha perdido un 6%. Como queda dicho, Asturias está en las de color ‘rojo’, con un descenso, aunque mínimo, del 0,1%. Castilla La Mancha, Canarias y Extremadura son las otras comunidades que han visto vaciarse sus clases.

Sin duda, el descenso de alumnado, mientras las plantillas de profesorado se mantienen o crecen (sin olvidar las advertencias de los sindicatos del «abuso» de la contratación a media jornada») ayudan a que Asturias sea la segunda comunidad con una mejor ratio de profesor por alumno, un dato del que presumen en numerosas ocasiones el propio presidente, Adrián Barbón, y la consejera de Educación, Lydia Espina. Según los datos del ministerio, Asturias tiene una media de 9,5 alumnos por profesor, solo superada por el 9,2 de Extremadura. Hay que tener en cuenta que se trata de una media, calculada en equivalente a tiempo completo de alumnado y profesorado. Es decir: hay muchas aulas en Asturias con 25 alumnos e incluso más en las etapas superiores. Una cosa no está reñida con la otra.

Porque, además, la región mantiene sus cifras de matriculación en zona rural, donde los grupos son mucho más pequeños (hay unidades con cuatro alumnos y alguna de tres de forma excepcional). En concreto, 2.602 alumnos acuden a los colegios rurales agrupados, CRA, y los centros públicos de educación básica, CPEB.

Por lo demás, Asturias sigue siendo una comunidad fiel a la red pública, con un 71,9% de sus estudiantes matriculados en sus colegios e institutos. Un 22,6% lo hace en la concertada y un 5,5%, en la privada.

4,8% de alumnos extranjeros

En cuanto al alumnado, Asturias tiene un 4,8% de estudiantes extranjeros. Es la cuarta comunidad con menor porcentaje, mientras que la media del país está por encima del 10%. El 81% de los estudiantes llegados de fuera acuden a centros públicos (un 16% a los concertados y el resto a la privada). Al acabar el curso pasado, 286 niños y jóvenes ucranianos se habían matriculado en los centros educativos asturianos, unos 130 de ellos en Primaria.

Uno de los objetivos de la nueva ley educativa es mejorar las cifras de repetición y abandono escolar temprano. De hecho, y tras demostrar los estudios que repetir curso no mejora, en la mayoría de los casos, los resultados posteriores, la LOMLOE limita la repetición a los cursos pares, ya que se entiende que hay que dar la oportunidad al alumno de completar cada ciclo para comprobar si, efectivamente, ha alcanzado los objetivos.

En este sentido, Asturias ha ido mejorando a lo largo de los años sus estadísticas. La publicación ‘Datos y cifras’ recoge las tasas de idoneidad, que es la relación porcentual entre el alumnado de la edad considerada que realiza el curso que teóricamente corresponde a esa edad o superior y el total de alumnado de dicha edad. A los 12 años, el 89,6% de los niños asturianos están en el curso que les corresponde. Esa tasa habitualmente desciende luego. Y así, a los 15 años, es del 78,6%. Es decir, cuando llegan a los 15 años, un 21% de los estudiantes asturianos ya ha repetido algún curso. Hace solo unos años (en el curso 2017-2018) esa tasa era del 72%, por lo que la situación ha mejorado de forma evidente y es una de las mejores de España, junto con Cataluña (la que registra la mejor situación), País Vasco y Cantabria.

Un 12% sin formación

Otra de las cuestiones que la LOMLOE quiere mejorar y que es objetivo de todas las administraciones educativas desde hace tiempo es el abandono escolar temprano. Se refiere al porcentaje de población de 18 a 24 años que no ha completado la Secundaria y no sigue ningún tipo de educación o formación. Pues bien, la última cifra de Asturias es de 11,8%. Es decir, casi el 12% de los jóvenes asturianos de 18 a 24 años no finalizó Bachillerato o FP Básica o de Grado Medio y no sigue ninguna formación. Pese a que la región está mejor que la media del país, la cuestión es que la tasa asturiana empeoró durante la pandemia. Solo Asturias y Madrid aumentaron las cifras de abandono entre 2020 y 2021, si bien el incremento asturiano, con casi tres puntos, fue mucho mayor que en Madrid. Es más elevada entre los hombres que en las mujeres

La Unión Europea ha dado varios ‘tirones de orejas’ a España por esta cuestión en los últimos años.

Esta es la radiografía general del sistema educativo asturiano, que Lydia Espina dirigirá por segundo curso al frente de la consejería.

Fuente e Imagen: https://www.elcomercio.es/asturias/lomloe-arranca-bajada-alumnos-repetidores-abandono-escolar-20220918214109-nt.html

Comparte este contenido:

Las conmociones cerebrales en adolescentes pueden afectar al rendimiento académico

Los síntomas más comunes son la pérdida de conciencia, los mareos, la mirada vidriosa, el dolor de cabeza, la amnesia, los vómitos, los problemas de memoria y la pérdida de concentración.

Los adolescentes que han sufrido una conmoción cerebral en los últimos 12 meses podrían tener un 25% más de probabilidades de tener una mala situación académica que aquellos que no la han padecido, sugiere un estudio publicado en línea en la revista ‘Injury Prevention’ al que ha tenido acceso Ep.

Una conmoción cerebral es una lesión temporal causada por un golpe, un impacto o una sacudida en la cabeza o por un golpe en el cuerpo que hace que el cerebro se mueva rápidamente de un lado a otro. Los signos más comunes son la pérdida de conciencia, los mareos, la mirada vidriosa, el dolor de cabeza, la amnesia, los vómitos, los problemas de memoria y la pérdida de concentración.

Para ello, analizaron los datos de 10.756 adolescentes de la Encuesta de Comportamiento de Riesgo Juvenil de 2019, una encuesta semestral que monitoriza los riesgos de salud entre los estudiantes de todo Estados Unidos. De los más de 10.000 estudiantes de secundaria analizados, el 14,9% informó que había tenido al menos una conmoción cerebral relacionada con deportes y actividades en los últimos 12 meses.

La mayoría de los adolescentes que declararon no haber sufrido conmociones cerebrales eran mujeres (50,9%), mientras que la mayoría de los que declararon haber sufrido una o más de dos conmociones cerebrales eran hombres (53,1% y 63,5% respectivamente).

Los estudiantes que se autoidentificaban como negros o afroamericanos representaban una mayor proporción de estudiantes con dos o más conmociones cerebrales (15,6%) en comparación con los estudiantes con cero o una conmoción cerebral (10,6% y 9,4% respectivamente). En general, una gran mayoría de los adolescentes (78,8%) declaró tener un buen nivel académico.

Los investigadores calcularon que tener al menos una conmoción cerebral en los últimos 12 meses se asociaba con un riesgo un 25% mayor de tener una mala posición académica y esta asociación era más fuerte con un historial de conmociones cerebrales repetidas.

La asociación variaba según la raza/etnia, pero los autores señalan que se necesitaban estudios futuros para examinar la interacción de la raza/etnia en la asociación.

Los autores reconocen que su estudio tenía algunas limitaciones, ya que no les permitió evaluar el cambio en la situación académica antes y después de las conmociones cerebrales notificadas, no se comprobó la verificación de los informes de los estudiantes sobre su conmoción cerebral y el resultado, y el estudio no incorporó variables socioeconómicas como los ingresos familiares y el lugar de residencia.

No obstante, concluyen que «el historial de conmociones cerebrales se asoció significativamente con una mala posición académica y el hecho de sufrir múltiples conmociones cerebrales podría ser especialmente perjudicial para los resultados de los estudiantes«.

«Los esfuerzos de prevención de lesiones basados en la escuela, incluyendo la promoción del uso del casco, la detección de conmociones cerebrales en la escuela y el cumplimiento de las directrices de retorno al juego y al aprendizaje, para reducir las conmociones cerebrales múltiples en los deportes, en particular para los grupos raciales y étnicos más afectados, pueden resultar beneficiosos para los estudiantes con conmoción cerebral», subrayan.

Fuente de la información e imagen: https://www.abc.es

Comparte este contenido:

España: Por qué la izquierda debe manifestarse por una escuela de todos

Por qué la izquierda debe manifestarse por una escuela de todos

Guillermo del Valle y Antonio Francisco Ordóñez

Guillermo del Valle y Antonio Francisco Ordóñez

Cuarenta años de franquismo, expresión totalitaria del nacionalismo español, dejaron un poso de mala conciencia en muchas personas de lengua materna castellana en Cataluña.  Esa mala conciencia condujo a la permisividad para que, una vez establecida a partir de la Constitución española vigente, la cooficialidad en Cataluña, se produjesen durante los más de cuarenta años de pujolismo (del cual el actual gobierno catalán es fiel heredero) evidentes abusos: inmersión obligatoria en catalán en la escuela, multas por rotular solo en castellano, señales de tráfico exclusivamente en catalán, denominaciones oficiales solo en catalán, consignas de uso solo del idioma catalán en las administraciones públicas so pena de ostracismo, medios de comunicación públicos no solo exclusivamente en catalán sino beligerantes contra el castellano, etc. Es decir, la exclusión de facto de cientos de miles de conciudadanos de la vida pública.

Como quiera que los sucesivos gobiernos de España, la denominada alternancia de los partidos sistémicos PP y PSOE, han necesitado a menudo para conformarse del apoyo nacionalista (tanto catalán como vasco), aquellos siempre se han puesto de perfil en relación a esta cuestión, oficiando como cooperadores necesarios de las políticas de segregación identitaria contra los derechos de todos. Esto ha supuesto que se trasladase a la sociedad civil la carga injusta de defender los derechos de los ciudadanos españoles que pretenden lo obvio: poder expresarse en la lengua oficial que, en el ejercicio legítimo de su derecho a la libertad de expresión, la Constitución les reconoce en todo el territorio nacional. Lo anterior tiene su extensión natural en la escuela, donde hasta el día de hoy sólo el catalán es lengua vehicular. Y lo es pese a una constante jurisprudencia de los tribunales de justicia y del Tribunal Constitucional (TC) que exigen lo contrario. Ante el decaimiento de las leyes y las instituciones en Cataluña, habiéndose producido una explícita privatización nacionalista de las mismas, los derechos de ciudadanía quedan en manos de una serie de ciudadanos a los que se obliga a un ejercicio cívico anómalo y casi heroico. La subversión de las leyes y resoluciones judiciales y su sustitución por el gobierno de la arbitrariedad implica no solo una anomalía democrática, sino, en términos materiales, una política genuinamente antirrepublicana: conviene recordarlo en estos tiempos amnésicos en los que se ha vaciado al significante de significado y las palabras han sido emponzoñadas de forma impúdica. Provoca pudor y asquea observar cómo populistas de medio pelo y homólogos patrios de la Liga Norte se presentan a sí mismos como guardianes de las esencias progresistas cuando su proyecto no es otro que aquel que conjuga insolidaridad fiscal y supremacismo indisimulado.

El último episodio que muestra tal estado de cosas ha venido dado por el intento de ejecución de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que exigía a la Generalidad que todos los alumnos recibiesen de manera efectiva e inmediata la enseñanza mediante la utilización vehicular normal de las dos lenguas oficiales en los porcentajes que se determinen, que no podrán ser inferiores al 25% en uno y otro caso. Como respuesta a lo anterior y con la connivencia del Gobierno de España, el Govern de la Generalidad de Cataluña dictó el Decreto Ley 6/2022, y los partidos nacionalistas y el PSC (catalanista, esa lacra estructural de identitarismo presuntamente light) aprobaron en el Parlamento autonómico la Ley 8/2022, con “la voluntad –citamos textualmente al TSJC– (…) inequívoca en cuanto a que la finalidad de ambas normas es bloquear la aplicación de la sentencia dictada en estas actuaciones y, con ella, la garantía de uso docente del castellano en términos constitucionalmente aceptables”. Como consecuencia de lo anterior el TSJC resolvió plantear ante el TC cuestión de inconstitucionalidad de ambas normas.

En el fondo, lo que está en juego no es una cuestión numérica o porcentual. Ni siquiera se trata simplemente de los derechos lingüísticos. Lo que está en tela de juicio es la posibilidad de garantizar o no una comunidad política donde las leyes recuperen su sentido esencial de garantía de igualdad entre todos los ciudadanos, como resultado de su deliberación y participación colectivas, y, especialmente, de voz de los sin voz, esto es, de dique de contención a cualquier tentación arbitraria o despótica de las élites u oligarquías que pretenden un Estado sometido y convertido en su cortijo privado. Lo que está en juego no es preservar ninguna esencia nacional o derecho impostado de una cultura o lengua a perdurar, toda vez que ni las lenguas, ni las culturas, ni las metafísicas nacionales tienen – repitámoslo una vez más – derecho alguno. Lo que está en juego es desmontar el proyecto de segregación identitaria de un nacionalismo etnicista y reaccionario que considera que la lengua es la expresión del espíritu del pueblo (el volk) y que la misma confiere una visión del mundo que nos hace especiales, diferentes. Ya saben: se apela a un carácter especial para significar eufemísticamente el racismo de siempre. De la consideración ficcional sobre una lengua que nos confiere una identidad uniforme, eterna y esencial se lleva a cabo un salto mortal y profundamente antidemocrático: como tenemos una lengua (propia, frente a la impropia, frente a la extranjera), como tenemos una identidad diferenciada, podemos “vivir aparte”. La identidad etnolingüística es el fundamento de la secesión. Del pretendido, inexistente y tenebroso derecho a levantar una frontera entre conciudadanos, a elegir arbitrariamente a nuestros vecinos, patrimonializando de paso la escuela, el mercado de trabajo y el territorio común. Esa decisión está invalidada desde el inicio: en el mismo momento en que se excluye del demos a millones de personas por no participar de la identidad nacionalista.

Si desde dos organizaciones hermanas de la izquierda antinacionalista – si es que pudiera existir otra, como expresó con irónica precisión el añorado Paco Frutos – animamos a participar en la convocatoria de Escuela de Todos es, fundamentalmente, porque nuestro compromiso con lo público no es de conveniencia ni guadiánico. No aparece o desaparece según quien rubrique su amenaza: sea neoliberal o nacionalista quien pretenda agredir nuestros derechos como ciudadanos. Porque nos jugamos mucho: la integridad de nuestra ciudadanía, condición de posibilidad de cualquier transformación social, política o económica. Porque nos jugamos la unidad de clase trabajadora, frente al proyecto reaccionario de extranjerizar a millones de trabajadores y mutilar irreversiblemente sus maltrechos derechos. Por eso estaremos presentes, desde la izquierda consecuente, el 18 de septiembre en el Arco de Triunfo de Barcelona, a las 12.30 h.

Fuente de la Información: https://www.elviejotopo.com/topoexpress/por-que-la-izquierda-debe-manifestarse-por-una-escuela-de-todos/

Comparte este contenido:

España: el acoso escolar repunta con el insulto, los motes y las burlas como principales armas

Por: Ana I. Martínez

El «ciberbullying» desciende tras la vuelta a las aulas, según un estudio de Fundación Mutua Madrileña y Fundación ANAR elaborado durante el pasado curso
«La mayoría de los estudiantes condenan el acoso, pero en grupo alimentan comportamientos de intimidación»

«¡Gordo!», «¡Cállate, loca!», «¡Eres una foca!», «¡Enano!», «¡Vales una mierda!», son algunas de las lindezas que gritan los acosadores a las víctimas del acoso escolar, que vuelve a coger fuerza tras el parón presencial en las aulas obligado por la pandemia. Según el IV Informe de Prevención del Acoso Escolar en Centros Educativos, elaborado por la Fundación Mutua Madrileña y Fundación ANAR durante el curso 2021-2022, 1 de cada 4 alumnos (24,4%) percibe que existe un caso de «bullying» en su clase, situándose por encima del 15,2% del curso anterior pero por debajo del 34,1% del curso 2019-2020.

«Es una cifra, en parte, esperanzadora. No sabemos hacia donde irán los datos en años venideros pero, de momento, parece que hay cierta esperanza. Estamos muy lejos de ese 50% sobre el que se situaba la percepción del alumnado sobre la incidencia del acoso escolar en 2016», afirma a ABC Benjamín Ballesteros, director de Programas de la Fundación ANAR.

La investigación, que recoge la opinión de estudiantes y docentes con una muestra de 5.123 alumnos y 229 profesores de 301 centros escolares, desvela también que el acoso afecta fundamentalmente a una sola persona (51,3%), principalmente chicos (55,2%); que la víctima sufre durante meses (42,9%) y que los responsables actúan grupo (72,6%).

Un problema real y de todos

«El acoso escolar existe. Representa el robo de la infancia y no hay derecho a que nadie le robe a un niño esta etapa vital de la vida en la que hay que ser feliz», reflexiona a este diario Lorenzo Cooklin, director general de la Fundación Mutua Madrileña. «Por ello, nosotros y Fundación ANAR llevamos muchos años trabajando en este sentido. Es un tema muy preocupante, del que antes no había conciencia, pero afecta a los niños, un colectivo muy vulnerable. No se debe normalizar y todo el mundo debe estar muy atento para detectarlo y atajarlo. Por suerte, la mayoría de los colegios ya no miran para otro lado, sino que tratan de solucionarlo».

«El acoso escolar existe. Representa el robo de la infancia y no hay derecho a que nadie le robe a un niño esta etapa vital de la vida en la que hay que ser feliz. Todo el mundo debe estar muy atento para detectarlo y atajarlo»
Lorenzo Cooklin/ Director general de la Fundación Mutua Madrileña

Según los profesores, la superioridad y la falta de habilidades sociales (empatía o sensibilidad, intolerancia, etc.) son las características que definen a los agresores. «Suelen tener problemas de carácter psicológico, poca tolerancia a la frustración y una tendencia a la superioridad. Se trata de un liderazgo negativo», explica Ballesteros, que «hay que tratar con atención». Según el experto, que también es psicólogo, «hay que estudiar y ver qué le pasa a ese niño que acosa, sin criminalizarlo, para poder actuar con eficacia. En muchas ocasiones, los agresores suelen tener problemas psicológicos por vivir situaciones de acoso, de abuso, de violencia de género… En otras ocasiones, hay detrás otras causas, como la hiperactividad. No hay que olvidar que ellos también son menores de edad».

Otro de los datos destacados del análisis tiene que ver con el «ciberbullying», cuya incidencia baja de manera notable: el 8,2% del alumnado piensa que alguien en su clase es víctima del acoso por internet, 16 puntos porcentuales menos que en 2020-2021. WhatsApp (66,9%), Instagram (53,1%) y Tiktok (48,6%) son los principales canales por los que actúan los acosadores.

Falta de comunicación

Todos estos datos ponen en evidencia la gravedad del acoso escolar y la urgencia de poner en marcha medidas efectivas que reduzcan estas cifras para no volver a los elevados índices pasados. Sin embargo, el 61,7% de los jóvenes indica que su centro escolar no hace nada y el 93% de los docentes asegura que el caso se solucionó. «Aquí hay algo que no termina de funcionar», señala Ballesteros. «Hay una falta de comunicación entre los profesores, los alumnos y el acosado. Los propios estudiantes tienen constancia sobre casos que no trasladan y las familias, en ocasiones, tampoco son conscientes».

«Los acosadores suelen tener problemas de carácter psicológico, poca tolerancia a la frustración y una tendencia a la superioridad. Hay que estudiar y ver qué le pasa a ese niño que acosa, sin criminalizarlo, para poder actuar con eficacia»
Benjamín Ballesteros/Director de programas de la Fundación ANAR

Para el responsable de Fundación Mutua Madrileña, esta percepción del alumnado tiene que ver con que «somos herederos de una historia». «Tradicionalmente -continúa-, los centros escolares miraban hacia otro lado y ese cambio de actitud tiene que materializarse. También tiene que ver los protocolos y procedimientos que se llevan a cabo y que deberían acelerarse».

La misma inacción, creen el 45,4% los alumnos, tienen los profesores, quienes aseguran que estos no intervienen ante una situación de «bullying» a pesar de que casi la mitad del profesorado (45,9%) reconoce haber tenido conocimiento de algún caso de acoso escolar y principalmente por terceras personas (46,7%). Además, más de la mitad del profesorado (56,1%) opina que la intervención de los centros escolares es adecuada sólo en algunas ocasiones.

Los alumnos, a su vez, parece que tampoco terminan de concienciarse, ya que 1 de cada 4 reconoce haber acosado a algún compañero sin darse cuenta y el 46,8% reconoce que no hace nada para apoyar a las víctimas. Ante estas cifras, el director de Fundación ANAR, recuerda, «el poder de los testigos». Y es que los alumnos han de aprender que el acoso escolar es «un problema de todos y aquel que lo detecte tiene que saber que ha de contárselo a un adulto para ayudar y poder tomar medidas, sin miedo a convertirse en un chivato sino todo lo contrario: se convierte en un héroe que se posiciona a favor de la víctima».

Formación y prevención

Según los expertos, la lucha contra el acoso escolar pasa, principalmente, por la prevención. Y en el caso de que exista un claro caso de acoso, atajarlo cuanto antes. Para los alumnos, solucionar el acoso escolar pasa por comunicárselo a un tercero/a (43,8%), ayudando, defendiendo, uniéndose a la víctima (29,2%) y dialogando con el agresor/a (13,7%).

«La sensibilización como forma de prevención es fundamental porque es lo que permite que los colegios, profesores, alumnos o familias no normalicen el problema», reseña Cooklin, quien recuerda que el acoso escolar «acompaña durante toda la vida» al acosado y que urge «reducirlo al máximo».

Para la mayoría de los profesores, según el estudio, favorecer la escucha, el diálogo y la comunicación en la resolución de conflictos (94,8%), trabajar el respecto a las diferencias (92,1%) y observar las relaciones que se establecen en el aula entre los alumnos (90,4%), son las principales acciones para prevenir el acoso escolar. A su vez, consideran que las nuevas tecnologías y las redes sociales (95,2%), la presión del grupo de amigos/as (94,3%) y la falta de respeto a las diferencias (93%) son aspectos bastante o muy decisivos para que se produzca el acoso escolar.

Al mismo tiempo, los docentes consideran que las familias han de prestar más atención a sus hijos (88,5%), hacer buen uso de las nuevas tecnologías/redes sociales (88,1%) y educar en valores (86,7%). Pero también los centros escolares aún tienen mucho que hacer: la falta de recursos y la dificultad para diferenciar el acoso escolar de otros problemas de convivencia son las principales barreras que, según los docentes, encuentran para poder afrontar el problema.

Para Ballesteros, todas estas cifras demuestran que las acciones de educación, prevención y formación en torno al acoso escolar funcionan. «Hace unos años ni siquiera existían y hoy hay un amplio conocimiento al respecto, aunque aún queda mucho por hacer porque ese 24,4% debería desaparecer».

Comparte este contenido:

Entrevista a Jorge Alemán: «La presencia del odio es constitutiva del neoliberalismo»

Por: Oscar Ranzani

El psicoanalista advierte que el neoliberalismo «ya no busca legitimidad en las organizaciones institucionales»

Un panorama agudo tanto del discurso capitalista que abordó Jacques Lacan como de los discursos de odio en este presente argentino.

El prestigioso psicoanalista y escritor argentino Jorge Alemán se exilió en España en 1976, en plena dictadura argentina, y cuando el país ibérico hacía poco que iniciaba una transición a la democracia, después de casi cuarenta años del régimen dictatorial de Francisco Franco, quien falleció el 20 de noviembre de 1975. Alemán tenía 25 años. Desde entonces, vive en Madrid. Autor de numerosos libros que dan cuenta de un pensamiento que une psicoanálisis, filosofía y política, así como de libros de poesía, durante la segunda mitad de los ‘70 formó parte de la avanzada del psicoanálisis lacaniano en España y es unos de los intelectuales más consultados. Pero nunca se olvidó de su tierra. Por eso, cuando se le consulta en qué medida su teoría puede explicar lo que está viviendo la sociedad argentina, Alemán es capaz de trazar un agudo y lúcido panorama tanto del discurso capitalista que abordó Jacques Lacan, como de los discursos del odio en este presente argentino.

–¿En qué aspectos se cumplen las características del discurso capitalista del que hablaba Lacan en estos tiempos?

–En todos los aspectos. Es mi tesis. Hay una homología estructural entre el discurso capitalista y el neoliberalismo. El neoliberalismo es el triunfo, en términos heideggerianos, de la técnica. Es la idea de entrenar al cerebro a través de las estructuras cognitivas, las nanotecnologías, las redes informáticas. Es gestionar el cerebro como si fuera una empresa. A la vez, a toda la violencia del sistema, el neoliberalismo la intenta hacer pasar por la culpa del sujeto; es decir, el propio sujeto es culpable de todas las circunstancias adversas que le tocan vivir en este mundo. La idea es que cada sujeto considere su libertad en los términos de costo-beneficio. Todo eso ya estuvo previamente enunciado por Lacan cuando escribió el discurso capitalista. Habló del rechazo del amor; es decir, esta especie de management del alma que hay ahora con los términos empatía, autoestima, resiliencia que, en realidad, son términos que tratan de entrenar a los sujetos para que soporten cualquier cosa o para que la única realidad de esos sujetos sea su narcisismo. Lacan también en ese discurso anunció el plus de gozar, un término muy problemático. No está solamente en la clase dominante, sino que también juega su papel en los sectores explotados y en los sectores oprimidos. Basta ver cuando se dice que hay muchísimos sectores de la población en distintas partes del mundo que votan contra sus propios intereses. Si se leyera la estructura del discurso capitalista como corresponde se vería que no están votando contra sus propios intereses. Pero los intereses de los sujetos no son sus intereses vitales, no son los intereses del principio del placer, no son los intereses homeostáticos. Están en un más allá. Son intereses vinculados al goce. Y cuando se pone a los interese vinculados al goce todo se vuelve mucho más problemático. Uno entiende por qué en una villa miseria o en una favela hay intercambios de armas, marcas de todo tipo. Finalmente, hay un mercado. Las exigencias y los imperativos de rendimiento siguen funcionando en el corazón mismo de la pobreza.

–«Hay mucho miedo de que se ponga todo mucho peor de cómo está», le dijo usted a este cronista en 2017 cuando Mauricio Macri ya era presidente. Viendo los hechos sucedidos en los últimos tiempos, su análisis tenía un innegable carácter anticipatorio.

–Sí, se puso mucho peor. El mundo está mucho peor. Es decir, ha surgido a raíz de los efectos de destrucción en el discurso capitalista de los puntos de anclaje un tipo de subjetividad que no tiene dónde amarrarse, que flota, como diría Lacan; que no tiene un horizonte político en donde incluirse. Y el receptáculo de todo eso ha sido la ultraderecha. No hay que confundirla con las ultraderechas históricas. La ultraderecha es una agenda, no un partido político. Y es este híbrido de neoliberalismo y una estructura que está dispuesta a llevar adelante la destrucción de todos los lazos sociales, del sujeto, y transformar todo en una especie de performance y entrenamiento para los que pueda entrar al mercado o los que queden afuera.

–¿Y cómo analiza desde la teoría psicoanalítica los discursos de odio y por qué prenden en algunos sujetos de semejante manera?

–Si uno no tiene ningún legado simbólico, si a uno le han destruido el horizonte histórico en el que se podía reconocer, las pulsiones de muerte y las pulsiones de destrucción están en todos los sujetos. Y si al sujeto se lo captura de tal manera que deja de tener historia y lo único que escucha es lo que en el presente absoluto se mueve y eso que se mueve está todo el tiempo llamando a la destrucción y al odio de todo aquel que quiera volver a introducir el campo transformador de lo popular, bueno, hace tiempo que el neoliberalismo ha entendido que no se va a legitimar a través de las instituciones, que se tiene que legitimar a través del odio Si usted ve cómo va funcionando el neoliberalismo desde Estados Unidos a Europa observará que ya no buscan legitimidad en las organizaciones institucionales sino que es constitutivo del neoliberalismo la presencia del odio.

–¿Y el tipo de rechazo que se produjo con el kirchnerismo es muy parecido a una rechazo que se expande por el mundo? La pregunta es porque en la Argentina se suele hablar de una similitud entre 1955 y la actualidad en cuanto a ese tipo de discursos.

–Evidentemente, Argentina tiene sus peculiaridades. Primero, está el odio clásico al peronismo. Segundo, está el odio a lo femenino, encarnado en la figura de Cristina, cuando lo femenino asume una vocación política de transformación y de llevar al campo de lo popular al poder. Esto se les vuelve insoportable a muchísimos sujetos, como el sujeto que buscó su «minuto de gloria». Este sujeto que el otro día buscó su «minuto de gloria» es el resultado de su odio y de la intersección de ese odio con todos los aparatos mediáticos que están promoviendo, que no tienen otra consistencia que el odio que promueven.

–Se llegó al límite de que muchos sujetos rechazan a la vicepresidenta hasta por su voz. ¿Cómo se configuran los discursos de odio a nivel individual?

–Así. El odio termina siendo no algo que se dirija a una forma de pensar solamente. El odio se dirige al ser. Esa es la potencia que, a veces, tiene el odio con respecto al amor: el odio se dirige a la propia existencia. Entonces, la voz, los gestos, el cuerpo, la manera de moverse, todo eso nutre al odio.

–¿Y de qué modo cree que se puede analizar la ideología en la formación psíquica? ¿O acaso lo psíquico es formador de ideología?

–El gran aporte de la izquierda lacaniana –y eso lo he trabajado en mi último libro Ideología— es la relación muy problemática, pero relación al fin, entre la ideología y el fantasma. La ideología tiene que ver con la reproducción de las relaciones sociales de producción; es decir, con la explotación y la opresión, pero el fantasma le presta a la ideología una superficie de inscripción. Por ejemplo, lo que estuvimos viendo en este sujeto el otro día. Este sujeto, por lo que sea, se realiza a través de un acto violento que en él pretende alcanzar su “minuto de gloria”. Eso no es algo meramente ideológico, es de orden fantasmático también. El gran mérito de Althusser es que cuando leyó a Lacan y escribió sobre los aparatos ideológicos del Estado inscribió el problema del estadio del espejo; es decir, el de las identificaciones dentro de la ideología. Por lo tanto, si usted ve a un inmigrante en Europa que vota a la ultraderecha, uno dice: “Pero, ¿cómo puede ir en contra de sus intereses?”. Vuelvo a insistir en este punto: depende de qué identificaciones tenga, porque cuando la historia desaparece, las identificaciones se vuelven muy fuertes.

–Freud decía que una mente sana es aquella que no niega la realidad pero se esfuerza en transformarla. Si se lo aplica a lo colectivo, ¿en qué aspectos es esta una sociedad enferma y cómo se puede lograr modificarlo?

–Los acontecimientos hablarán porque realmente la sociedad está muy enferma. Hay muchísimos lugares del mundo, por ejemplo, aquí en España, la coalición que forman el PSOE, Izquierda Unida y Podemos hizo las cosas con bastante sentido común, teniendo en cuenta la pandemia, la guerra y el tiempo que le tocó. Y es probable que pierda las elecciones. ¿Por qué? Del otro lado tiene esta derecha desinhibida que propone que no va a pagar la luz, que ya puso en su tiempo que la cuarentena era una imposición. Hay que tener en cuenta que nosotros hemos quedado del lado de los argumentos, del lado de las restricciones, del lado de «hay que renunciar para el bien común», y la derecha está en un proceso de desinhibición para que luego se distribuya por todas partes. Mientras que, a la vez, la fractura de lo social se va pronunciando cada vez más y la desigualdad aumenta. En el goce que propone la ultraderecha está el aumento de la desigualdad.

Fuente de la información e imagen: https://www.pagina12.com.ar

Comparte este contenido:
Page 27 of 940
1 25 26 27 28 29 940